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UNIVERSIDAD VERACRUZANA
FACULTAD DE ODONTOLOGIA
CAMPUS MINATITLAN
“RIESGO DE INFECCIÓN CRUZADA POR PERFORACIÓN
DE GUANTES”
PRESENTA:
VIRGINIA ODETTE PINEDA PAMUCÉ.
ASESOR:
DR. LUIS RENAN RODRÍGUEZ PÉREZ.
MINATITLAN VER. JUNIO DE 2011.
1
INDICE
Introducción
Capítulo I………………...………………...………………………………………………5
Descripción de problema…………………………………………………………………5
Planteamiento del problema……………………………………………………………..6
Justificación…………………………………………………….………………………….7
Objetivos generales……………………………………………….………………………8
Objetivos particulares……………………………………………………………………..8
Capítulo II……………………………...……..……………………………………….…..9
Antecedentes………………………………...……………………………….……………9
Capítulo III………….………………………….…………………………………………12
Hipótesis y variables…………………………………………………………………….12
Capítulo IV……………………………………………………………………………… 13
Diseño metodológico…………………………………………………………………….13
Capítulo V………………………………………………………………………………..14
Marco teórico……………………………………………………………………………..14
1. Trasmisión cruzada de infecciones………………………….…………………14
2. Fundamentos del control de infecciones………………………………….…..14
3. Prácticas
de
control
de
infecciones
recomendadas
para
odontología…………………………………………………………..………......15
4. Cuidado de las manos………………………………………………………......16
5. Barreras de protección………………………………………………..…….......17
6. Guantes…………………………………………………………………….……..18
7. Condiciones de uso………………………………..……………….……………20
8. Tipos de guantes…………………………………………………..…….………21
9. Guantes de látex……………………………………………..……..……………22
10. Perforación de guantes……………………………….…..………...…………..23
11. Uso de doble guante……………………………………………………….……24
2
Capítulo VI…………………...……….……………………………….…………………25
Análisis e interpretación de resultados………………………………………………..25
Capítulo VII…………...………………………………………………………………….36
Conclusiones…….……………………………………………………………………….36
Propuestas………………………………………………………………………………..37
Capítulo VIII…………….………………………………………………………………..38
Referencias bibliográficas………………………………………………………………38
Capítulo IX……………………………………………………………………………….40
Anexos…………………………………………………………………………………….40
3
INTRODUCCIÓN
La infección cruzada es la trasmisión de agentes infecciosos o fluidos como la
sangre, saliva entre otros. Esta se puede presentar a diferente niveles ya sea de
paciente al odontólogo, o del odontólogo al paciente. Para evitar esto existen
barreras de protección tales como: el uso de guantes, bata, lentes de protección,
cubrebocas, y gorro, pero cuando una de estas barreras falla tanto el odontólogo
como el paciente quedan expuestos a una posible infección cruzada.
En el consultorio durante la práctica odontológica el dentista se encuentra en un
riesgo constante ya que es muy frecuente la perforación de los guantes durante el
ejercicio de la odontología por lo que es importante el análisis del grado de
protección que estos nos brindan.
El objetivo de esta investigación es conocer la frecuencia con la que se presenta el
riesgo de infección cruzada a causa de la perforación de los guantes durante la
práctica odontológica.
Este trabajo está dirigido a todos los estudiantes de la universidad veracruzana así
como también a los docentes de la misma y a todos los miembros de la
comunidad odontológica interesados en este tema e información contenidos en
esta investigación, beneficiando también de manera colateral al paciente.
4
CAPITULO I
DESCRIPCIÓN DEL PROBLEMA.
Durante la practica odontológica el dentista se encuentra en constante contacto
con la mucosa del paciente y su saliva entre otros fluidos, por lo cual es necesario
el uso de guantes para que de esta manera poder protegerse de algún tipo de
infección, pero en ocasiones los guantes se rompen, perforan, desgarrar o tienen
filtraciones que no son percibidas por el odontólogo dejando tanto al paciente
como al profesional expuestos a una infección cruzada.
En el ejercicio de la odontología dentro del consultorio el uso de guantes es
necesario para crear una barrera entre el paciente y el dentista, pero estos son
muy delicados y con facilidad se perforan, en ocasiones un simple pinchazo ya
sea con aguja o explorador logran perforarlos dejando en peligro la salud del
odontólogo o del mismo paciente.
5
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
¿Cuál es la incidencia de riesgo de infección cruzada por la perforación de
guantes durante la práctica odontológica en los estudiantes de la Experiencia
Educativa Clínica estomatológica Integral en la Clínica 5 de la Universidad
Veracruzana campus Minatitlán, en el periodo Febrero-Mayo de 2011?
6
JUSTIFICACIÓN
La trasmisión cruzada de infecciones es un riesgo constante dentro de la práctica
odontológica, ya sea de paciente al profesional o de manera viceversa es por eso
que es importante que el odontólogo tome las medidas necesarias para su
protección.
El objetivo de esta investigación es conocer la frecuencia con la que se presenta el
riesgo de infección cruzada por la perforación de los guantes durante la práctica
odontológica.
Este trabajo sirve para determinar la incidencia con la que los guantes dejan de
cumplir su función la cual es proteger a los profesionales de la odontología de
algún tipo de infección así como también al paciente.
Esta investigación pretende beneficiar a todas aquellos miembros pertenecientes
a la comunidad odontológica, los alumnos de la Universidad Veracruzana, así
como los docentes de la misma interesados en la información que contiene la
siguiente investigación y por lo tanto de manera colateral el paciente.
También es para que los estudiantes de la Universidad Veracruzana desde sus
inicios conozcan la importancia de utilizar de manera adecuada las barreras de
protección como lo son los guantes, que sepan que estos pueden fallar y se
pueden encontrar expuestos a diferentes virus y enfermedades.
Se pretende concientizar a la comunidad odontológica de los riesgos a los que
pueden estar expuestos en el caso de perforación de los guantes que utilicen
durante la práctica odontológica.
7
OBJETIVO GENERAL
Determinar el riesgo de infecciones cruzadas debido a la perforación de guantes.
OBJETIVOS PARTICULARES.
Cuantificar la frecuencia de perforación de guantes durante la práctica
odontológica.
Determinar la zona del guante que sufre mayor incidencia de perforación.
8
CAPITULO II
ANTECEDENTES.
Doble guante para reducir la infección cruzada quirúrgica.Por: Tanner J, Parkinson H.
Oxford / 2005.
La naturaleza invasiva de la cirugía, con su mayor exposición a la sangre, implica
que durante la cirugía existe un alto riesgo de transmisión de agentes patógenos.
Los agentes patógenos pueden transmitirse a través del contacto entre pacientes
quirúrgicos y el equipo quirúrgico, lo que resulta en infecciones de transmisión
hemática o postoperatorias en los pacientes o infecciones de transmisión hemática
en el equipo quirúrgico. Tanto los pacientes como el equipo quirúrgico deben estar
protegidos de este riesgo. Este riesgo puede reducirse mediante la
implementación de barreras protectoras como el uso de guantes quirúrgicos. Se
considera que el uso de dos pares de guantes quirúrgicos, en lugar de uno,
proporciona una barrera adicional y reduce aún más el riesgo de contaminación.
Objetivo: El objetivo primario de esta revisión fue determinar si el doble guante
(uso de dos pares de guantes), en lugar de un solo par, reduce el número de
infecciones de transmisión hemática o postoperatorias en pacientes quirúrgicos o
de infecciones de transmisión hemática en el equipo quirúrgico. El objetivo
secundario de esta revisión fue determinar si el doble guante, en lugar del guante
simple, reduce el número de perforaciones en el par interior de guantes
quirúrgicos. Se considera que los guantes interiores (próximos a piel) comparados
con los guantes exteriores son la última barrera entre el paciente y el equipo
quirúrgico.
Se encontraron dos ensayos que abordaron el resultado primario. Se identificaron
e incluyeron en la revisión 18 ensayos controlados aleatorios que midieron las
perforaciones de guantes. DOBLE GUANTE (uso de dos pares de guantes de
látex). Nueve ensayos compararon los guantes de látex simples versus los
guantes de látex dobles. Estos ensayos no encontraron diferencias en el número
de perforaciones entre los guantes de látex simples y el par exterior de guantes de
látex dobles, aunque el número de perforaciones en el guante interior de látex
doble se redujo significativamente con el uso de dos pares de guantes de látex.
GUANTES ORTOPÉDICOS (más gruesos que los guantes de látex estándar). Un
ensayo comparó guantes ortopédicos de látex simples con guantes de látex
dobles. Este demostró que no hubo diferencias en el número de perforaciones en
los guantes interiores cuando se utilizaron guantes de látex dobles comparados
con un solo par de guantes ortopédicos de látex. GUANTES INDICADORES
9
(guantes de látex coloreados utilizados debajo de los guantes de látex). Tres
ensayos compararon guantes de látex dobles versus guantes indicadores de látex
dobles. Estos ensayos presentaron números similares de perforaciones tanto en
los guantes interiores como exteriores de ambos grupos de guantes. Las
perforaciones en los guantes exteriores se detectaron más fácilmente cuando se
utilizaban guantes indicadores de látex dobles. El uso de guantes indicadores de
látex dobles no aumentó la detección de perforaciones en los guantes interiores.
REVESTIMIENTOS DE GUANTES (un accesorio utilizado entre dos pares de
guantes de látex). Dos ensayos compararon guantes de látex dobles versus
guantes de látex dobles con revestimientos. Estos ensayos demostraron una
reducción significativa del número de perforaciones en el guante interior cuando se
utilizaba un revestimiento de guante entre dos pares de guantes de látex.
GUANTES DE TELA (guantes de tela utilizados encima de guantes de látex). Dos
ensayos compararon guantes de látex dobles versus guantes interiores de látex
con guantes exteriores de tela. Estos ensayos demostraron que el uso de un
guante exterior de tela redujo significativamente el número de perforaciones en el
guante interior de látex. GUANTES DE MALLA DE ACERO (guantes de malla de
acero utilizados encima de guantes de látex). Un ensayo comparó guantes de
látex dobles versus guantes interiores de látex con guantes exteriores de malla de
acero. Este ensayo demostró que no se redujo el número de perforaciones del
guante interior cuando se utilizaba un guante exterior de malla de acero.
Conclusión: Como conclusión el uso de dos pares de guantes de látex reduce
significativamente el número de perforaciones en el guante interior. Estas pruebas
proceden de ensayos realizados en especialidades quirúrgicas de "bajo riesgo", es
decir, especialidades que no incluían cirugía ortopédica de articulaciones. El uso
de dos pares de guantes de látex no hace que se produzca un mayor número de
perforaciones en el guante exterior. El uso de guantes indicadores de látex dobles
le permite a la persona que los utiliza detectar más fácilmente las perforaciones en
el guante exterior que cuando utiliza guantes de látex dobles. Sin embargo, el uso
de un sistema indicador de látex doble no facilita la detección de perforaciones en
el guante interior, ni reduce el número de perforaciones en el guante exterior o
interior. El uso de un revestimiento de guante entre dos pares de guantes de látex
para practicar una cirugía de reemplazo de articulación reduce significativamente
el número de perforaciones en el guante interior comparado con sólo los guantes
de látex dobles. El uso de guantes exteriores de tela para practicar una cirugía de
reemplazo de articulación reduce significativamente el número de perforaciones en
el guante interior en comparación con el uso de guantes de látex dobles. El uso de
guantes exteriores de malla de acero para practicar una cirugía de reemplazo de
articulación no reduce el número de perforaciones en los guantes interiores en
comparación con los guantes de látex dobles.
10
Incidencia de la perforación de los guantes en cirugía y efecto protector del
doble guante.María Elisa de Castro Peraza, Encarnación Garzón Rodríguez, Vicente Rodríguez
Pérez, Ignacio Sosa Álvarez, J. Gutiérrez Hernández, C. Asiain Ugarte.
Hospital Universitario de Canarias / 2008.
Objetivo: El objetivo es estudiar la incidencia de perforaciones en los guantes en
cirugía programada comparando la proporción de punciones entre el guante
simple y el doble guante. Evaluar la proporción de estas punciones que
permanecen inadvertidas.
Metodología: Método Ensayo clínico, aleatorizado y controlado de un año de
duración realizado en 2008 durante las cirugías programadas en los quirófanos del
Hospital Universitario de Canarias. Se estudiaron los guantes simples y dobles
(interno y externo), llevados por cirujanos, ayudantes y enfermeras
instrumentistas. Los guantes se midieron durante 3min con el método
estandarizado de «Fuga de Agua» (EN455-1) al finalizar la cirugía para detectar
fugas.
Resultados En 113 cirugías se evaluaron 1.537 guantes, ocurriendo 7
perforaciones advertidas y 104 inadvertidas, la mayor parte en cirugías mayores.
De las punciones inadvertidas, 43 (41,3%) ocurrieron en guantes simples, 51
(49%) en guantes exteriores del doble enguantado y 10 (9,6%) en los guantes
internos. La proporción de perforación de los guantes en los cirujanos 9,85%,
resultó ligeramente mayor que en las enfermeras 6,91%, pero significativamente
mayor que en los ayudantes 4,04% (p<0,001).
Conclusión: Se concluye que el doble guante es efectivo en cirugía pues la
barrera protectora es mantenida por el guante interno en cuatro de cada cinco
casos en que el guante externo es perforado inadvertidamente. A pesar de la
posible incomodidad y reducción de sensibilidad, debe tenerse en cuenta la
efectividad del enguantado doble como barrera protectora.
11
CAPITULO III
HIPÓTESIS Y VARIABLES
Durante la práctica odontológica en la experiencia educativa Clínica de
Estomatología Integral, existe un alto riesgo de infecciones cruzadas debidas a la
perforación de guantes por parte del estudiante.
V. I.: Perforación de guantes.
V.D.: riesgo de infección cruzada en la práctica odontológica.
Utilizando doble guantes durante la práctica odontológica se reduce
considerablemente el riesgo de infección cruzada por perforación de guantes por
parte del estudiante.
V.I.: Doble guante.
V.D.: reducción de riesgo de infección cruzada en la práctica odontológica.
Variable
Independiente.
Perforación
de
guantes
Dependiente.
Riesgo
de
infecciones
cruzadas
Independiente.
Doble guante
Dependiente.
Reducción
riesgo
infecciones
cruzadas
de
de
Definición operacional de las variables
Concepto
Dimensión
Agujeros
Daño ocasionado
producidos
que
afecte
su
durante
los capacidad
de
procedimientos de barrera.
atención
a
pacientes
Trasmisión
de Presencia
de
diversos agentes microorganismos.
infecciosos
a
distintos niveles
Uso de dos pares Daño ocasionado
de guantes
que
afecte
la
capacidad
de
barrera del guante
interno.
Disminución de la Presencia
de
trasmisión
de microorganismos.
diversos agentes
infecciosos
Indicador
Pruebas
físicas.
Observación.
Contaminación por
perforación
de
guantes
Pruebas
físicas.
Observación.
Contaminación por
perforación
de
guantes
12
CAPITULO IV
DISEÑO METODOLÓGICO.
Tipo de estudio:



Estudio descriptivo: esta investigación se trata de un estudio descriptivo ya
que analizaremos la frecuencia con que se presenta la perforación de
guantes.
Estudio prospectivo: se realizara un estudio prospectivo puesto que se
registrara la frecuencia con que ocurren las perforaciones en tiempo actual.
Estudio transversal: es un estudio transversal ya que el tiempo no influye en
el resultado de esta investigación.
Universo de trabajo: los estudiantes que estén cursando la Experiencia Educativa
Clínica de Estomatología Integral en la Clínica 5.
Tamaño de la muestra: 100 pares de guantes de los cuales 50 pares son de un
solo guante y 50 que se utilizaron dobles; 25 pares internos y 25 pares externos.
Muestreo: por conveniencia.
Criterios de inclusión. Todos los estudiantes de la Clínica 5 que realicen algún tipo
de prótesis.
Criterios de exclusión: los estudiantes que no realicen prótesis dentales en la
Clínica 5.
Material: Bolsas Ziploc, agua y guantes Ambiderm de látex.
Método: Recolectar los pares de guantes de cada uno de los estudiantes de la
clínica 5 que hayan realizado tratamientos protésicos. Aislar cada par de guantes
en bolsas para evitar su contaminación con más agentes. En cada guante se
colocará agua y se observará por un periodo de 2 minutos si existe goteo, de esta
manera se comprobará si hay filtración por perforación; se cuantificarán las
perforaciones en cada guante y la zona donde se produce esta. En el caso de
doble guante se analizarán las perforaciones en los guantes internos y externos
bajo criterios semejantes.
13
CAPITULO V
MARCO TEÓRICO.
1. Trasmisión cruzada de infecciones.
La infección cruzada es considerada como la transmisión de diversos agentes
infecciosos a distintos niveles: paciente-paciente, paciente-profesional sanitario, o
profesional sanitario-paciente. Las vías de contagio pueden ser por contacto
directo con sangre, fluidos orales u otras secreciones, por contacto indirecto con
superficies u objetos contaminados, o por inhalación de aerosoles que contengan
partículas infecciosas.
Así pues, es fundamental seguir un protocolo de control de la infección cruzada
durante la práctica odontológica, y aplicarlo a todos los pacientes por igual,
considerándolos como potencialmente infecciosos.
La probabilidad de trasmisión es mayor de un paciente infectado a un profesional
sano.
El riesgo laboral viene determinado en especial por la prevalencia de exposición,
el volumen y virulencia del material infeccioso inoculado y la susceptibilidad de ser
trasmitidos en las consultas dentales, merecen especial atención los virus de la
hepatitis B (VHB) y C (VHC), y el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), que
se trasmiten fundamentalmente por contacto directo con la sangre y causan
enfermedades graves en muchos casos, la tuberculosis y otras enfermedades
como las infecciones por el virus de Epstein-Bar, el citomegalovirus el virus de la
rubeola-herpes zóster, el virus del herpes simple y otros virus que causan
enfermedades respiratorias que se trasmiten, en su mayoría, por vía área, y por
ultimo las enfermedades por priones, que en los últimos años han desencadenado
cierta alarma social a raíz de la epizootia de encefalopatía espongiforme bovina o
enfermedad de las vacas locas y su posterior transmisión a humanos.
2. Fundamentos del control de infecciones.
El propósito básico es evitar la transmisión de enfermedades infecciosas del
paciente al odontólogo, del odontólogo al paciente y de un paciente a otro. El uso
de las guías recomendadas reduce en gran medida la transmisión de
enfermedades infecciosas.
14
Antes de que el profesional dental practique el control de infecciones para evitar la
transmisión de enfermedades, se requiere que comprenda los mecanismos de la
transmisión de enfermedades en el ambiente del consultorio dental, lo que
involucra a los patógenos. Los profesionales de la odontología y sus pacientes
están expuestos a varios patógenos presentes en las secreciones bucales y
respiratorias; estos incluyen:






Virus y bacterias de resfriado e influenza
Citomegalovirus (CMV)
Virus de la hepatitis B (VHB)
Virus de la hepatitis C (VHC)
Virus del herpes simple (VHS-1, VHS-2)
Virus de inmunodeficiencia humana (VIH)
En el ambiente del consultorio dental, las rutas generales de transmisión de
enfermedades se describen como sigue:



Contacto directo con patógenos presentes en saliva, secreciones
respiratorias o lesiones.
Contacto indirecto con objetos e instrumentos contaminados.
Contacto directo con contaminantes en el aire presentes en salpicaduras o
aerosoles de líquidos bucales y mucosa respiratoria.
Para que haya infección por una de estas rutas de transmisión, son necesarias
tres condiciones:



Un huésped susceptible.
Un patógeno infeccioso en número suficiente para causar infección.
Un portal a través del cual el patógeno entre al huésped.
3. Prácticas de control de infecciones recomendadas para
odontología.
Las prácticas de control de infecciones recomendadas para odontología por los
Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (Centers for Disease
Control and Prevention) son:


Vacunación de los profesionales dentales.
Utilizar vestimenta de protección y técnicas de barrera.
15











Lavado y cuidado de las manos.
Uso adecuado y cuidadoso de instrumentos punzocortantes y agujas.
Esterilización y desinfección de instrumentos.
Limpieza y desinfección de la unidad dental y las superficies del entorno.
Desinfección del laboratorio dental.
Uso y cuidado de dispositivos manuales, válvulas de antirretracción y otros
aditamentos intrabucales que se conectan en las líneas de aire y agua de la
unidad dental.
Usar una sola vez los instrumentos desechables.
Manejo adecuado de muestras para biopsia.
Manejo adecuado de dientes extraídos en las instalaciones de escuelas
odontológicas.
Desecho adecuado de materiales desechables.
Seguir las recomendaciones.
Las practicas eficientes de control de infecciones pretenden modificar una de
estas tres condiciones y con ello evitar la transmisión de enfermedades.
Las prácticas recomendadas de control de sinfecciones se aplican en todos los
consultorios en los cuales se proporciona cuidado dental. Estas recomendaciones
se aplican en conjunción con las prácticas y procedimientos para la protección de
trabajadores requeridas por la Occupational Safty and Health Administration
(OSHA) y dispuestas en la publicación Exposición Ocupacional a Patógenos
Sanguíneos.
4. Cuidado de las manos.
El llevar guantes no elimina la necesidad de lavarse las manos antes de ponerlos
e inmediatamente después quitarlos.
Como preparación para el tratamiento de cada paciente, hay que lavarse las
manos antes de ponerse los guantes; después del tratamiento de cada paciente o
de salir del área de tratamiento, se quitan los guantes, se desechan y de inmediato
se lavan las manos. Entre la consulta con cada paciente el profesional debe
lavarse siempre las manos y ponerse guantes nuevos.
Todos los profesionales de la odontología deben tomarse precauciones para no
lesionarse las manos durante los procedimientos; una persona con lesiones
exudativas o supurativas en las manos no debe hacer contacto directo con el
paciente ni manejar el equipo de cuidado hasta que su trastorno se resuelva.
16
La mayoría de las lociones están basadas en derivados del petróleo, lo cual da
lugar a un debilitamiento de los guantes de látex y un aumento de su
permeabilidad. Por esta razón las lociones que contengan derivados del petróleo u
otros emolientes oleosos deben usarse al final de la jornada laboral.
Existen estudios que demuestran que la piel situada debajo de los anillos esta mas
colonizada por microorganismos que la situada en los dedos sin anillos; sin
embargo, no se ha podido demostrar que el llevar anillos suponga un mayor riesgo
de trasmisión de patógenos. De todas formas, hay que tener en cuenta que llevar
joyas en las manos puede dar lugar a una mayor dificultas para ponerse los
guantes o a que se rompan con más facilidad, por lo que se recomienda quitarse
las joyas para trabajar.
Para los procedimientos dentales de rutina es adecuado el lavado de manos con
jabón ordinario; para los quirúrgicos, es necesario utilizar una preparación
antimicrobiana para la limpieza de manos.
Las uñas deben limpiarse con un palillo de puntas redondeadas. El cepillado para
lavarse las manos debe durar siete minutos y, al igual que el enjuagado, debe
empezar por los dedos y descender hasta los antebrazos. Durante el lavado y el
enjuague, es indispensable colocar los dedos en posición más elevada que los
codos y cuidar que el agua escurra hacia estos últimos y nunca hacia los dedos.
En este caso, el secado se realiza con toalla estéril. Así mismo antes de tocar al
paciente debe evitarse tocar objetos o superficies contaminados.
5. Barreras de protección.
Se entiende por Barreras, los procedimientos tendientes a evitar la contaminación
bacteriana de los diferentes elementos presentes en el consultorio como son los
pisos, las superficies de los muebles, interruptores de equipos, focos de luz,
teléfonos, jeringas de agua, micromotores y demás superficies, a través del
contacto de las manos de los operadores y personal asistente y de los aerosoles
originados con sangre y saliva.
Las técnicas de barreras de protección son elementos y procedimientos utilizados
para evitar la exposición del individuo a microorganismos patógenos, se refieren al
uso de guantes, batas o uniformes, gorras, máscaras, pantallas de acrílico,
cubrebocas y lentes, dique de hule y todas las cubiertas de superficies que
protegen del ambiente.
Según diversos estudios, el paciente percibe estas barreras de modo satisfactorio,
es decir, se siente más cómodo y seguro ante la amenaza de cualquier tipo de
17
contagio. De hecho, si un odontólogo no usa estas protecciones puede ser
interpretado como un signo de falta de profesionalidad por subestimar la
importancia del control de las infecciones. Así mismo, es aconsejable que todo el
personal que pueda tener contacto directo o indirecto con sangre o saliva este
vacunado contra el virus de la hepatitis B y se revacune cada 5 años
aproximadamente. Otro tipo de vacunas recomendables son la del tétanos, que
requiere dosis de recuerdo cada 10 años, y la de la gripe de forma anual.
El control de la Infección no radica sólo en usar las barreras universales (guantes,
barbijo y protectores oculares) y tener contratada una empresa para que retire los
residuos biopatogénicos; esto es algo más integral que tiene que ver no sólo con
la salud del personal involucrado, sino con la de toda la sociedad y la del medio
ambiente. Por eso en cada atención odontológica debemos tener en cuenta:






Desinfectar las superficies de contacto como aéreas y protegerlas con
cubiertas de un solo uso.
Tocar con los guantes sólo lo necesario pues todo lo que se toca se contamina
y es factible de producir infección cruzada.
Inactivar la carga microbiana del instrumental por métodos físicos o químicos
para poder manipularlo con menor riesgo.
Esterilizar siempre el instrumental para utilizarlo.
Mantener la cadena de esterilidad y de asepsia.
Eliminar correctamente los residuos biopatogénicos.
6. Guantes.
Los guantes sanitarios son productos sanitarios de un solo uso utilizados como
barrera bidireccional entre el personal sanitario y el entorno con el que éste toma
contacto a través de sus manos.
Los guantes de protección deben garantizar un nivel de eficacia protectora ante el
riesgo que motiva su uso, y además no deberán ocasionar, por sí mismos, riesgos
adicionales ni generar molestias que se opongan a su propia eficacia o utilidad
protectora.
Los guantes son necesarios para prevenir la contaminación de las manos y
reducen la probabilidad de que los microorganismos presentes en las manos del
personal sanitario sean trasmitidos al paciente durante los tratamientos dentales.
En la década de los 80, para actos de exploración era posible reutilizar los guantes
entre pacientes, siempre y cuando estuvieran intactos y fueran desinfectados.
Actualmente, está demostrado que constituyen elemento de barrera de protección
mas importante, a pesar de que no evitan accidentes con objetos punzantes o
18
afilados. De hecho, reducen al menos en un 50% la carga de sangre transmitida
tras un pinchazo o corte accidental; esto se debe tener en cuenta, ya que la
probabilidad de adquirir una enfermedad infecciosa transmitida por vía sanguínea
depende en gran medida de la cantidad de microorganismos inoculada.
Todos los profesionales dentales deben utilizar guantes médicos de látex o vinilo
para evitar el contacto de la piel con sangre, saliva o mucosa; deben usar guantes
nuevos para cada paciente, o después de tocar objetos o superficies
contaminados. Se recomiendan guantes no esterilizados para exámenes y
procedimientos no quirúrgicos, y esterilizados para todos los procedimientos de
cirugía.
Durante el tratamiento es necesario quitarse y cambiarse los guantes siempre que
se desgarren, corten o perforen; nunca debe lavarlos antes de utilizarlos ni
desinfectarlos para utilizarlos, esto ocasiona defectos y disminuye la barrera de
protección que proporciona.
Durante el lavado de material e instrumental es indispensable utilizar guantes
gruesos de látex o caucho no desechables.
El guante debe estar adaptado tanto a la naturaleza del trabajo como a la mano
del trabajador. Se ha de elegir la talla y el material adecuados, teniendo en cuenta
la fisiología individual y los antecedentes alérgicos del profesional y el paciente.
Indicaciones
La utilización de guantes está recomendada en las siguientes circunstancias:



Exposición directa: Contacto con sangre, fluidos corporales, secreciones y
tejidos, con piel no intacta o mucosas de un paciente. En situaciones de
emergencia, epidemia.
Exposición indirecta: Al manipular objetos, materiales o superficies
contaminados con sangre o con otros fluidos (vaciado de cuñas,
manipulación de deshechos y fluidos corporales, limpieza de instrumental y
equipo)
Cuando se realicen prácticas invasivas que implican la penetración
quirúrgica a tejidos, cavidades u órganos (inserción y retirada de catéteres
intravenosos, aspiración de secreciones, exámenes pélvicos y vaginales,
extracción de sangre). o durante la reparación de heridas por trauma.
Los guantes deben cambiarse:


Cuando se cambie de paciente.
Cuando se cambie de actividad en un mismo paciente.
19



Después de entrar en contacto con agentes químicos cuyo efecto sobre el
material de guante sea desconocido.
En caso de contacto con cremas de base hidrocarbonada u oleica
(incompatibles con los guantes de látex).
Cuando haya contacto con material contaminado porque ocurra una
salpicadura, rotura o perforación.
El uso prolongado hace que el efecto barrera del guante sea menor. La
hiperhidratación producida combinada con la grasa del cuerpo provoca desgaste
del guante. Así, dependiendo del tipo de guante se recomiendan los siguientes
cambios:




Guantes de examen de látex cada 15 a 30 minutos.
Guantes de examen de vinilo cada 15 minutos.
Guantes de cirugía de látex y neopreno cada 1 a 3 horas.
Guantes de nitrilo cada 15 a 30 minutos.
Las características que buscaremos al elegir los guantes son: que queden
ajustados para evitar la fatiga manual, de superficie no deslizante, que no
dificulten la sensibilidad al tacto, y que no tengan ni olor ni sabor desagradable
para el paciente. Así mismo, es preferible que sean hipoalergenicos, es decir, que
contengan una baja cantidad de aceleradores residuales como en proteínas del
látex, estas últimas suelen ser las causantes de reacciones alérgicas (como por
ejemplo edemas, urticaria o picazón); y los aceleradores residuales y el polvo que
llevan en el interior pueden provocar dermatitis de contacto.
7. Condiciones de uso.
Los guantes de protección deben garantizar un nivel de eficacia protectora ante el
riesgo que motiva su uso, y además no deberán ocasionar, por sí mismos, riesgos
adicionales ni generar molestias que se opongan a su propia eficacia o utilidad
protectora.
En cuanto al uso debemos tener presente:




Los guantes se deben cambiar entre acciones y procedimientos distintos en
el mismo paciente; tras entrar en contacto con material contaminado y cada
vez que se comience a atender a un nuevo paciente.
El error de NO quitarse los guantes entre contactos con pacientes supone
un grave riesgo de infección nosocomial.
Los guantes se deben quitar rápidamente tras su empleo, antes de tocar
artículos no contaminados y superficies ambientales.
Los guantes no son transeúntes. no pueden viajar por todo el hospital
puestos en unas manos.
20




El guante debe estar adaptado tanto a la naturaleza del trabajo como a la
mano del trabajador. Se ha de elegir la talla y el material adecuados,
teniendo en cuenta la fisiología individual y los antecedentes alérgicos del
profesional y el paciente.
En caso de perforación o desgarro se deberá proceder a quitarse el guante,
lavarse las manos y ponerse un par nuevo.
Los guantes NO proporcionan protección completa contra contaminación de
las manos.
Dos capas de guantes quirúrgicos pueden reducir el número de roturas del
guante interior, las cuales podrían permitir la infección cruzada entre el
equipo quirúrgico y el paciente. Los guantes triples, los guantes tejidos
externos y los revestimientos del guante también reducen significativamente
las perforaciones en el guante más interno.
8. Tipos de guantes.
Por su composición:
Materiales poliméricos (goma y plástico) de tipo:



Natural (Látex de caucho natural). Son los de primera elección por sus
propiedades garantizan efectividad, confort, sensibilidad al tacto, buen
ajuste y coste adecuado.
Sintético (PVC, nitrilo, vinilo, neopreno, elastireno, tactilón, poliisopropen).
Como alternativa en alergia al látex, y cuando se requiere una mayor
resistencia y protección frente a microorganismos y a agentes químicos.
Guantes tricapa: Formados por una capa externa de látex, una capa
intermedia constituida por una mezcla de látex y material sintético (nitrilo) y
una capa interna de material sintético (nitrilo) que está en contacto con la
mano.
Empolvado:


Con polvo (de almidón de maíz): Tiene como ventaja el efecto lubricante
que hace que el guante sea más fácil de poner. Los inconvenientes son
que es irritante por tanto promueve las alergias, es proinflamatorio pudiendo
dar lugar a complicaciones postoperatorias. También actúa como
transportador para sustancias químicas y microorganismos. Por ello en el
manejo de citostático se utilizan de látex o sintéticos sin polvo, ya que así
se evita que las partículas de citostáticos se adhieran al polvo y
permanezcan en el ambiente.
Sin polvo. Se someten a un proceso de cloración o lavado intensivo que
hace que además tengan niveles de proteínas 4 a 20 veces menores que
los con polvo. Los guantes de látex sin polvo de la última generación
reciben un revestimiento sintético (hidrogel, silicona u otro polímero) que
21
confiere las mismas cualidades que las de los guantes con polvo
(estiramiento, facilidad para llevarlos, flexibilidad).
Según su esterilidad:


Guantes de cirugía (estériles).
Guantes de examen (estériles y no estériles).
Según su indicación:



Guantes quirúrgicos: Estériles permiten mantener la asepsia cuando se
rompen las barreras naturales de la piel o mucosas. Indicados en
intervenciones quirúrgicas y cateterizaciones. La calidad de un guante
quirúrgico no se mide sólo por las características físicas del producto, la
sensibilidad, la elasticidad o la resistencia del material. Un factor muy
importante a tener en cuenta es el potencial alergénico del guante.
Guantes de examen o exploración: Estériles y no estériles.
Guantes de protección específicos frente a agentes químicos y
citotóxicos: Proporcionan protección e impermeabilidad (nitrilo y neopreno
entre otros).
Según su forma:


Guantes anatómicos: Se adaptan perfectamente a la anatomía de cada
mano (derecha e izquierda).
Guantes ambidiestros: Un mismo guante se utiliza para ambas manos.
Los no estériles de látex, vinilo o nitrilo se utilizan para evitar el contacto
físico con secreciones, piel o mucosas, así como con materiales sucios o
contaminados en procedimientos de riesgo. Se utilizan en maniobras que
no requieren una gran destreza o adaptabilidad.
Guantes de látex.
El empleo de guantes de examen de látex, ya sea para realizar una revisión
médica o para auxiliar a algún accidentado siempre fue un requisito ya que los
médicos, enfermeros y rescatistas son conscientes del contagio de enfermedades
al que se pueden enfrentar. En el pasado, muchas veces las personas solían
prestar ayuda sin protegerse ellos mismos exponiéndose al contagio de cualquier
enfermedad de la víctima.
En la mayoría de los cursos de primeros auxilios y socorrismo que suelen tomar
las personas que se dedican al rescatismo en alta montaña o en bosques muy
profundos donde la gente suele perderse, enseñan las técnicas para ponerse y
sacarse rápidamente los guantes de látex, y además se dictan cursos sobre las
22
enfermedades que pueden ser contagiosas estando en contacto con la sangre o
cualquier fluido de otras personas. Ponerse los guantes de látex, resulta algo muy
fácil ya que se deslizan fácilmente.
Pero al momento de quitarse los guantes de examen, siempre se enseña que es
primordial que la sangre sobre el guante, no entre en contacto ni con la piel ni con
la ropa del socorrista. Por otra parte, es usual que los guantes de examen de látex
se rompan, por lo que se recomienda usar más de un par de guantes ya que de
esta manera se reduce el riesgo de nuestra piel quede al descubierto.
Es importante que en muchas ocasiones cuando la piel es muy sensible, se
recomienda elegir guantes de examen de otro tipo de material ya que el látex
puede causar reacciones alérgicas al contacto con pieles muy sensibles.
Perforación de guantes.
Los guantes quirúrgicos que desarrollan agujeros o escapes durante un
procedimiento parecen aumentar el riesgo de infección en la localización de la
cirugía entre los pacientes a los que no se han administrado antibióticos con
antelación, es más; según apuntan los autores, los patógenos pueden seguir
transmitiéndose a través del contacto con la piel o la sangre a pesar de los
esfuerzos para mantener las condiciones de esterilidad durante la cirugía.
Los guantes médicos crean una barrera de protección entre los pacientes y los
profesionales a cargo del cuidado de la salud. Su mal estado o ruptura abre una
peligrosa puerta a la transmisión de infecciones nosocomiales. Se enumeran las
medidas preventivas para el uso satisfactorio de los guantes.
Los agujeros y las perforaciones producidas en los guantes durante los
procedimientos de atención a pacientes y las cirugías incrementan el riesgo de
transmisión de infecciones entre pacientes y personal médico.
Distintos estudios reconocen el hecho de que a pesar del estricto seguimiento de
medidas sanitarias tendientes a cumplir con condiciones de esterilidad y
protección, tanto de pacientes como de los profesionales de la salud, existe
siempre la posibilidad de algún tipo de contaminación por contacto con piel,
sangre, fluidos corporales o sustancias químicas, debido al estado defectuoso o
daños producidos en los equipamientos para protección.
Los guantes, uno de los suministros más comunes usados para este fin, registran
una tasa alta de perforación o ruptura durante tratamientos médicos. Ellos actúan
como una barrera de protección entre los pacientes y el personal de salud, y una
vez esa barrera se rompe, el paso de agentes patógenos en ambos sentidos
23
queda abierto. Esto significa que tanto los pacientes como el personal de salud
quedan expuestos al contagio de enfermedades.
Heidi Misteli y otros investigadores, del Hospital Universitario Basel, en Suiza,
identificaron que el 4,5% de los procedimientos se asocian con infecciones
producidas en ambientes quirúrgicos (SSI, por sus siglas en inglés).
Por otra parte, Soldá y colaboradores, en Brasil, en una investigación realizada
para averiguar la incidencia de la perforación de guantes en el Servicio de
Emergencias del Departamento de Cirugía de la Escuela de Ciencias Médicas de
Santa Casa de Sao Paulo, encontraron perforaciones en 16,3% de los guantes
utilizados en procedimientos médicos, de las cuales un 33% ocurrieron durante
intervenciones quirúrgicas de emergencia.
Para prevenir los patógenos que se originan en la piel, el personal quirúrgico usa
guantes estériles como barrera de protección. Cuando los guantes se perforan por
el pinchazo de una aguja, fragmentos de astillas óseas, superficies afiladas de los
instrumentos quirúrgicos u otras causas, la barrera se rompe y se pueden
transferir bacterias. La frecuencia de perforación de los guantes aumenta en los
procedimientos que superan las dos horas de duración y varían de un 8% a un
50%.
En caso de perforación o desgarro se deberá proceder a quitarse el guante,
lavarse las manos y ponerse un par nuevo.
Se promueve el uso de dos pares de guantes al mismo tiempo y también se
recomienda cambiar de guantes después de un lapso de tiempo determinado
durante procedimientos médicos prolongados.
Uso de doble guante.
Se considera que el uso de dos pares de guantes quirúrgicos, en lugar de uno,
proporciona una barrera adicional y reduce aún más el riesgo de contaminación.
Para el manejo de pacientes con riesgo alto se recomienda colocarse
simultáneamente dos pares de guantes estériles y en caso de que se rompan, hay
que lavarse las manos y sustituir los guantes por otros dos pares.
El doble guante es efectivo en cirugía pues la barrera protectora es mantenida por
el guante interno en cuatro de cada cinco casos en que el guante externo es
perforado inadvertidamente. A pesar de la posible incomodidad y reducción de
sensibilidad, debe tenerse en cuenta la efectividad del enguantado doble como
barrera protectora.
24
CAPITULO VI
ANÁLISIS E INTERPRETACIÓN DE RESULTADOS
Perforación de guantes
60%
50%
40%
30%
20%
10%
0%
PERFORDOS
NO PERFORADOS
De los 100 guantes analizados en esta investigación 43 presentaron
perforaciones, por lo que de los cincuenta odontólogos que utilizaron guantes el
43% estuvo en riesgo de contaminación.
En un estudio similar realizado en el Hospital Universitario de Canarias en 2008
por María Elisa de Castro Pereza, Encarnación Garzón Rodríguez y col.
Encontraron que en guantes simples se presenta una frecuencia de perforaciones
del 41.3% confirmando que más del 40% de los odontólogos se encuentran en
riesgo de sufrir una infección cruzada a causa de la perforación de guantes.
25
Numero de perforaciones por cada guante
80.00%
70.00%
60.00%
50.00%
40.00%
30.00%
20.00%
10.00%
0.00%
UNA PERFORACION
DOS
PERFORACIONES
TRES
PERFORACIONES
De los 43 guantes perforados el 74% tuvo una sola perforación, el 23.25% tuvo
dos perforaciones, el 2.32% tuvo 3 perforaciones. Lo que nos indica que los
odontólogos que aun teniendo el conocimiento para evitar las infecciones
cruzadas no tienen el debido cuidado de cambiarse los guantes cada 30 min.
En la publicación referente a “Guantes médicos” realizada por María Victoria
Porstals en Compostela, España, se hace referencia a los tiempos en los que se
deben cambiar los guantes ya que el uso prolongado de estos hace que el efecto
de protección sea menor puesto que la hiperhidratación producida combinada con
la grasa del cuerpo provoca desgaste del guante. Obteniendo así que los guantes
de látex deben cambiarse cada 15 a 30 minutos.
26
Zona de la perforación
40.00%
35.00%
30.00%
25.00%
20.00%
15.00%
10.00%
5.00%
0.00%
De las 55 perforaciones encontradas el dedo pulgar obtuvo el 40% y el índice el
25.45% mientras que el dedo medio tuvo el 16.36% de las perforaciones, el dedo
anular solo tuvo un 1.81% de perforaciones y el meñique conto con el 9.09% en
tanto que la palma y la muñeca tuvieron 3.63% cada uno. Esto nos indica que el
área de los dedos pulgar e índice sufren mayor número de perforaciones.
27
Región de falanges más lesionadas.
60.00%
50.00%
40.00%
30.00%
20.00%
10.00%
0.00%
FALANGETA 1
FALANGETA 2
FALANGETA 3
De las 51 perforaciones encontradas en el área de los dedos el 58.82% tuvo
perforaciones en la falangeta 3, el 17.64% en la falangeta 2 y el 23.52% en el área
de la falangeta 1. Esto nos indica que el área que sufre de mayores perforaciones
es el área de la falangeta 3.
28
Perforación en guante interno en uso de doble guante.
100%
90%
80%
70%
60%
50%
40%
30%
20%
10%
0%
PERFORADOS
NO PERFORADOS
En la prueba del uso de doble guante; el guante interno solo sufrió un 8% de
perforación de los 50 guantes analizados. En este caso se muestra la gran
disminución de riesgo a las infecciones cruzadas si se utiliza doble guante en la
práctica odontológica.
En el Hospital Universitario de Canarias se encontró que en cuanto al uso de
doble guante, en los guantes internos solo el 9.6% sufría de perforaciones lo cual
nos sirve para confirmar que menos del 10% de los guantes internos se perforan
reduciendo de manera considerable el riesgo a una infección cruzada.
29
Diferencia en sensibilidad
SI
NO
De los 25 odontólogos encuestados el 84% sintió una diferencia en cuanto a
sensibilidad al utilizar doble guante durante su práctica odontológica. Lo que nos
indica que la sensibilidad se ve afectada.
El doble guante es efectivo pues la barrera protectora es mantenida por el guante
interno en cuatro de cada cinco casos en que el guante es perforado
inadvertidamente. A pesar de la posible incomodidad y reducción de sensibilidad,
debe tenerse en cuenta la efectividad del enguantado doble como barrera
protectora.
30
Diferencia de comodidad
SI
NO
Para el 60% de los encuestados no fue cómodo trabajar utilizando doble guante
en tanto que para el 40% si lo fue; por lo que entendemos que no es del todo
cómodo realizar la práctica odontológica utilizando doble guante.
Carmen Cansal Angulo en su trabajo titulado ¿usamos bien los guates? menciona
que los guantes de protección deben garantizar un nivel de eficacia protectora
ante el riesgo que motiva su uso, y además no deberán ocasionar, por sí mismos,
riesgos adicionales ni generar molestias que se opongan a su propia eficacia o
utilidad protectora.
31
Facilidad al manejar instrumentos odontológicos
SI
NO
El 68% de los dentistas que participaron en esta prueba considero que les fue fácil
manejar sus instrumentos mientras que el 32% de ellos no lo sintió así. Esto
quiere decir que al utilizar doble guante no se ve afectada en gran manera la
manipulación de los instrumentos.
Carmen Cansal Angulo en su investigación hace hincapié en que los guantes
deben estar adaptados tanto a la naturaleza del trabajo como a la mano del
trabajador.
32
Dificultad de colocación
SI
NO
En cuanto a la colocación del doble guante al 76% se le facilito mientras que el
24% de los odontólogos tuvieron dificultad al colocarlos. Esto nos indica que no
hay mayor problema al momento de colocarse el doble par de guantes.
La correcta colocación de los guantes tiene como objetivo eliminar la piel como
posible agente contaminante, creando una barrera entre las áreas sépticas y
asépticas haciendo de esto una práctica importante.
33
Importancia del uso de doble guante
SI
NO
El 64% de los 25 encuestados saben que es importante utilizar doble guante
mientras que el 36% consideran que no lo es. La mayoría de los dentistas están
conscientes de los beneficios de utilizar el doble par de guante en la práctica
odontológica.
Tanner J. Parkinson H. en su investigación concluye que el uso de dos pares de
guantes reduce significativamente el número de perforaciones en el guante interior
por lo que se considera que el uso de dos pares de guantes, en lugar de uno,
proporciona una barrera adicional y reduce aún más el riesgo de contaminación.
34
Disposición ante el uso de doble guante.
SI
NO
De las 25 personas que respondieron este cuestionario el 24% de ellos están
dispuestos a utilizar doble guante en su trabajo, pero el 76% no lo utilizaría. Lo
que quiere decir que a pesar de los beneficios del uso de doble guante los
dentistas no los usarían por la diferencia en cuanto a sensibilidad, comodidad y
costo.
En la investigación de “riesgos de infección cruzada asociada por perforación en
guantes de cirugía” realizada por Tamara Andrea Peña en 2010, se promueve el
uso de dos pares de guantes al mismo tiempo. En estudios en los cuales
encontraron perforaciones cuando el profesional de la salud llevaba puestos dos
pares de guantes, estas se detectaron en su mayoría solo en el par de guantes
externos, lo cual demuestra la eficacia de esta medida.
35
CAPITULO VII
CONCLUSION
Cuando hablamos de infección cruzada nos referimos al intercambio de agentes
infecciosos ya sean fluidos o sustancias del paciente al odontólogo o viceversa, es
en este punto donde juegan un papel fundamental las barreras de protección las
cuales sirven para evitar que la infección cruzada se lleve a cabo.
El odontólogo por su labor diaria dentro del consultorio se encuentra
constantemente expuesto al virus de herpes simple, hepatitis B , C y VIH, entre
otros, por lo que es necesaria la existencia y uso correcto de las barreras de
protección.
En esta investigación se comprobó que existe un alto riesgo de infección cruzada
en los dentistas que durante su práctica odontológica solo utilizan un par de
guates por paciente.
En cuanto al uso del doble guante se comprobó que disminuye de manera
importante el número de perforaciones en los guantes internos, reduciendo
significativamente el riesgo de infección cruzada en el odontólogo y el paciente.
36
PROPUESTA
Utilizando doble guante se proporciona una barrera de protección adicional
reduciendo en gran manera el riesgo de infecciones cruzadas por lo cual se
recomienda realizar esta práctica durante el ejercicio de la odontología.
Por tanto también se propone que en la facultad de odontología se implemente el
uso de doble guante como estrategia formal en la práctica clínica.
37
CAPITULO VIII
REFERENCIAS BIBLIOGRAFÍAS.
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(principios, métodos y aplicaciones). Editorial Masson.
3° edición,
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Editorial
Mc
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número 2, 2005. Oxford, Update Software Ltd. Disponible en:
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7. María Elisa de Castro Peraza, Encarnación Garzón Rodríguez, Vicente
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http://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=3175813&info=resumen&mo
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38
8. María Victoria Mosquera Portals. Guantes médicos. Servicio de Productos
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9. Clavero A*, Silvestre FJ**, Simón JM*. Requeni J*. Asepsia y antisepsia en
la práctica odontológica para lograr el control de la infección cruzada.
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Disponible en: http://www.esorib.com/articulos/Art_asepsia.pdf
10. Susana Piovano. Control de la infección en odontología. Revista de la
maestría en salud publica ISSN 1667-3700. Año 2 N° 4. Diciembre 2004.
Disponible en: http://msp.rec.uba.ar/revista/docs/004piovano1.pdf
11. Carmen Casal Angulo. ¿Usamos bien los guantes? recomendaciones del
grupo de trabajo en riesgo biológico del CECOVA. Grupo de trabajo en
Riesgo Biológico del Consejo de Enfermería de la Comunidad Valenciana.
Valencia.
Disponible
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pdf
12. Guía de bioseguridad para el control de infecciones en la práctica
odontológica. Facultad de odontología de Buenos Aires, Argentina / 2008.
Disponible en: http:// www.odon.uba.ar/images/guia_bioseguridad.doc
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http://www.calzadosyzapatos.com/guantes/guantes-de-examen.html
14. Francisca H. de Canales. Metodología de la investigación. Editorial limisa.
México / 2006. Págs. 131-193.
15. Sampieri Hernández, Roberto. Fernando Collado, Carlos. Metodología de la
investigación. Editorial Mc Graw-Hill, 2° edición.
39
CAPITULO IX
ANEXOS
Un solo guante
Guante
Pulgar Índice
Medio
Anular
Meñique
Palma
Muñeca
Meñique
Palma
Muñeca
Meñique
Palma
Muñeca
Falangeta 1
Falangeta 2
Falangeta 3
Doble guante
Guante interno
pulgar
Índice
Medio
Anular
Falangeta 1
Falangeta 2
Falangeta 3
Guante externo
pulgar
Índice
Medio
Anular
Falangeta 1
Falangeta 2
Falangeta 3
40
UNIVERSIDAD VERACRUZANA
FACULTAD DE ODONTOLOGÍA
CAMPUS MINATITLÁN
Riesgo de infección cruzada por perforación de guantes.
El presente cuestionario servirá para la realización de una investigación que me permitirá
obtener el grado de cirujano dentista, por lo que, mucho agradeceré se sirva contestarlo.
Gracias por su colaboración.
Instrucción: Contesta el siguiente cuestionario comparando el uso de un solo par de
guantes y el uso de doble guante:
1. ¿Sentiste diferencia en cuanto a sensibilidad?
Si
No
2. ¿Se te facilitó la toma de instrumentos?
Si
No
3. ¿Sentiste comodidad al mover tus dedos?
Si
No
4. ¿Se te dificultó la colocación de los dos pares de guantes?
Si
No
5. ¿Usarías en tu práctica diaria Doble guante?
Si
No
6. ¿Consideras que es importante el uso de doble guante?
Si
No
41
42