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Turismo en Marruecos:
retos y oportunidades
Enrique Verdeguer
Con incrementos de dos dígitos en llegadas de turistas e ingresos, el turismo es un sector clave
para la economía marroquí. El gobierno tiene en marcha diversos planes de modernización de la
oferta hotelera y de las infraestructuras que ofrecen oportunidades para las empresas españolas.
na de las características de las denominadas economías en desarrollo es la insuficiencia de ahorro interno para financiar todas las necesidades de inversión a las que debe hacer frente.
Esta escasez de ahorro conlleva la necesidad de apelar a la financiación exterior, ya sea mediante la inversión directa, el endeudamiento o las donaciones. En un contexto como el actual, la capacidad
de crecimiento de cualquiera de estas tres fuentes es relativamente limitada, por lo que se hace necesario recurrir a actividades que permitan la
generación de divisas con las que financiar las inversiones.
Por ello, no es extraño que en la estrategia de desarrollo marroquí, la
actividad turística desempeñe un papel clave para la mejora de los indicadores sociales del país.
Del mismo modo que sucedía en el modelo de crecimiento español
de los años sesenta, la economía marroquí compensa el saldo negativo
de su balanza comercial y las carencias de competitividad de muchos de
sus sectores productivos, mediante el recurso a las transferencias privadas corrientes, en concreto las remesas de los emigrantes, y a los ingresos por turismo. No en vano, juntos representan más del 15% del PIB
marroquí.
Sin embargo, la importancia del sector turístico marroquí no se limita a su papel como financiador del crecimiento económico, sino que
además se trata de uno de los principales sectores, o para ser más estrictos, actividades, en términos de contribución al PIB y al empleo. Así, y
U
Enrique Verdeguer es consejero Económico y Comercial de la Embajada de España en Rabat.
ECONOMÍA EXTERIOR. Núm. 33. Verano 2005
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ECONOMÍA EXTERIOR
teniendo en cuenta que este tipo de cifras hay que tomarlas con cautela,
el sector turístico marroquí representa en torno al 10% del PIB, dando
empleo a cerca de 700.000 personas.
A esta importancia cuantitativa, hay que añadir su fuerte dinamismo
en los dos último años. En este sentido, en 2004, el número de turistas
que viajó a Marruecos
MARRUECOS: TURISTAS Y PERNOCTACIONES
ascendió a 5.516.478,
(en miles)
lo que supone un creOctubre 2003 Octubre 2004 Variación (%)
cimiento del 15,9% resTuristas extranjeros
4 030
4 710
14
pecto al año anterior.
Pernoctaciones
11 399,4
11 418,8
18
Ingresos por viajes
28 180,3
31 164,5
30,6
Este incremento del
1 En miles de dirhams. Datos para el periodo enero-noviembre.
Fuente: Turismo, Artesanía y Economía Social. L’Economiste.
número de turistas se
vio acompañado por
un aumento de los ingresos por turismo que, en 2004, representaron
34.600 millones de dirhams (unos 3.150 millones de euros), lo que supuso
un incremento del 12% respecto a 2003. En el crecimiento del número de
turistas destaca el experimentado por los españoles, 333.028 en 2004, con
un aumento del 44,1% respecto al año anterior. Sin embargo, existe todavía una clara preponderancia, en primer lugar, de los marroquíes residentes en el extranjero (2,8 millones en 2004, es decir, más de la mitad de los
turistas registrados) y, en segundo lugar, de los franceses (1,16 millones
en 2004, lo que significa más del 20% de los turistas).
El dinamismo del mercado marroquí como destino del turismo internacional se está manteniendo en los primeros meses de 2005, con tasas
de crecimiento por encima del 10%, especialmente, en destinos como
Marraquech, que se está viendo beneficiado de la paulatina liberalización del transporte aéreo .
1
Política turística de Marruecos
Conscientes de la relevancia del sector turístico como eje prioritario
del desarrollo económico marroquí, las autoridades están llevando a cabo diversas actuaciones. En este sentido, cabe destacar el programa conocido como Visión 2010, que se lanzó en 2001, y cuyo principal objetivo
es la captación de 10 millones de turistas para 2010, lo que supondría
prácticamente duplicar el número de turistas que actualmente recibe
Marruecos.
Dentro de dicha Visión 2010 se encuentra el denominado Plan Azur,
que plantea, a través de ayudas del Fondo Hassan II para el Desarrollo
Económico y Social, la construcción de seis grandes centros turísticos
en distintos puntos de la costa marroquí, en concreto, uno en el Mediterráneo, que es el de Saïdia y cinco en el Atlántico: el de Khémis Sahel, en
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Larache; el de El Haozia, en El Jadida; el de Mogador, en Essaouira; el
de Taghazout, en Agadir; y el de la Playa Blanca, cerca de Guelmim. Dichos centros turísticos serán acondicionados por promotores privados,
a los que las autoridades facilitarán las infraestructuras que permitan
unos entornos adecuados para la captación de turistas. En estos momentos, quedan por adjudicar dos de los seis proyectos planificados, el
Taghazout y el de la Playa Blanca, si bien para el de Taghazout acaba de
lanzarse una petición de empresas interesadas. El proyecto de Saïdia,
que lleva a cabo la empresa española Fadesa, es el más avanzado.
El objetivo fundamental del Plan Azur es incrementar la oferta hotelera y de ocio marroquí, aprovechando sus recursos naturales y de costa. Sin embargo, y
Las deficiencias en
pese a constituir el eje de la política turística
comunicaciones
de Marruecos, no es ni puede ser el único tipo
y transportes han
de actuación. En este sentido, si el Plan Azur
frenado hasta ahora
pretende básicamente un aumento de la oferta
la llegada masiva
disponible, el Plan Renovotel trata de mejorar
de turistas
y modernizar la oferta existente, dado que una
de las principales dificultades del sector es la
falta de mantenimiento de las instalaciones, que lleva a unos niveles de
deterioro crecientes a hoteles que en su momento tenían una calidad
aceptable. Sin dicha calidad, será imposible aumentar la tasa de retorno;
es decir, el porcentaje de turistas que vuelve o manifiesta querer volver a
un destino turístico, que en estos momentos se sitúa en Marruecos en niveles muy bajos, inferiores al 10%.
Si es necesario aumentar y modernizar la oferta hotelera, no lo es
menos el diversificar la oferta de ocio y ampliar el modelo de sol y playa, actualmente dominante, sobre todo en un país con los atractivos paisajísticos e históricos de Marruecos. De esta forma, se empiezan a desarrollar actividades como el turismo rural, en sus diversas modalidades,
así como el turismo de negocio, actualmente muy poco desarrollado, al
representar menos del 10% del total, y finalmente el turismo dirigido al
segmento de la población con mayor capacidad adquisitiva (golf, actividades deportivas en el mar, etcétera).
A estas medidas, hay que añadir los crecientes esfuerzos por abaratar y mejorar las comunicaciones, sobre todo las aéreas que hasta el momento han desincentivado la entrada masiva de turistas, al ser comparativamente muy caras.
Obviamente, el gran problema de la mayoría de estas medidas es la
escasez de recursos disponibles en un país donde el gasto público total
apenas representa 12.000 millones de euros, lo que supone alrededor del
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ECONOMÍA EXTERIOR
ENTRADAS DE TURISTAS POR REGIONES
Europa
Unión Europea
Otros europeos
Países árabes
Magreb
Oriente Medio
Varios
Total turistas extranjeros
Marroquíes residentes
en el extranjero
2003
1.880.472
1.777.290
103.182
142.292
73.225
69.067
334.506
2.223.875
2004
2.349.556
2.236.992
112.564
156.842
81.969
74.873
387.907
2.747.347
Variación (%)
24,9
25,9
9,1
10,2
11,9
8,4
16,0
23,5
2.537.396
2.769.132
9,1
Fuente: ministerio de Turismo, Artesanía y Economía Social de Marruecos.
10% del gasto total del Estado español (en sentido estricto, es decir, sin
tener en cuenta el gasto de organismos autónomos, Seguridad Social o,
por supuesto, Comunidades Autónomas). Al reducido nivel de gasto público hay que añadir el escaso margen de maniobra existente, ya que los
gastos de funcionamiento, así como los gastos asociados a la deuda pública representan más del 80% del gasto total, de tal forma que los porcentajes disponibles para la inversión pública no llegan ni tan siquiera al
20% del total del gasto público.
Principales retos
Las principales ventajas del sector turístico marroquí están asociadas a sus características objetivas como destino con una gran variedad
paisajística y orográfica, a la diversidad de su clima, a su atractivo en todas las épocas del año, a su gastronomía, a su atractivo cultural e histórico, a la riqueza de su artesanía y, por supuesto, a la proximidad geográfica respecto a los principales mercados emisores de turistas.
No obstante, es evidente que dicho potencial teórico no está siendo
aprovechado, como consecuencia de una serie de limitaciones que dificultan la consolidación de Marruecos como destino turístico.
Así, entre los principales retos que debe afrontar este mercado cabe
mencionar, en primer lugar, el abaratamiento de los precios. Debido a
que se trata de una economía altamente protegida e intervenida, y en
contra del estereotipo que podemos tener, Marruecos es, salvo en el caso de la mano de obra, un país relativamente caro en factores de producción tan relevantes como la energía o el transporte, cuyos precios en
términos nominales son mayores que los de España. Es cierto que en los
últimos años se está produciendo una gradual liberalización de algunos
sectores como el transporte aéreo, lo que ha permitido una considerable
reducción de las tarifas que, sin embargo, todavía continúan en niveles
superiores al de los mercados con los que Marruecos compite. Del mis-
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Entrada de turistas a Marruecos por nacionalidades, 2004
45
40
Datos en porcentaje
35
30
25
20
15
10
5
0
Franceses
Españoles
Británicos
Alemanes
Italianos
Magrebíes Estadounidenses
Fuente: ministerio de Turismo, Artesanía y Economía Social de Marruecos.
mo modo, la falta de competencia interna hace que servicios básicos para el desarrollo del mercado turístico, como son la hostelería o la restauración, se encuentren en niveles de precios poco competitivos.
A los mayores niveles de precios de los factores de producción y de
los servicios, hay que añadir las limitaciones desde el punto de vista de
las infraestructuras (carreteras, aeropuertos, puertos, etcétera), así como de la oferta de ocio disponible.
Finalmente, el salto cualitativo y cuantitativo que pretenden dar las
autoridades marroquíes para su sector turístico no será posible sin una
mejor formación de su capital humano y sin el desarrollo de ciertos intangibles que reflejan que la población local y las autoridades están plenamente mentalizadas de la relevancia del desarrollo de su sector turístico. En este sentido, uno de los principales retos que debe afrontar
Marruecos a corto plazo es el de dotar a sus principales puntos de llegada de turistas (aeropuerto de Marraquech o puerto de Tánger) de un sistema más ágil y transparente de recepción de los turistas, puesto que las
prácticas actuales no incentivan precisamente el regreso de éstos.
Presencia de la empresa española en el sector
Resulta relativamente contradictorio que, a pesar de la proximidad
geográfica, la complementariedad de los mercados y la competitividad
de nuestra empresas turísticas a nivel internacional, la presencia de éstas en el mercado marroquí sea bastante escasa. Es cierto que en los últimos tiempos se observa un renovado interés por el mercado marroquí,
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ECONOMÍA EXTERIOR
y más concretamente por su sector turístico, y una cada vez mayor presencia de las empresas españolas. No obstante, sólo si la apuesta de las
autoridades marroquíes por su sector turístico se consolida como algo
creíble, será posible dar el salto tan ambicioso que se plantean de captar
10 millones de turistas en 2010.