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UN POCO DE LUZ EN LA SISTEMÁTICA DEL REINO
PLANTAS
Carlos J. Martín Blanco
INTRODUCCIÓN
La aparición de la Biología Molecular y la Genética en el primer plano de las Ciencias
Biológicas durante el siglo XX ha desplazado a la penumbra las ciencias “clásicas”
como la Sistemática. Sin embargo la Sistemática es una ciencia en continua revisión que
ha sabido incorporar las nuevas técnicas moleculares al estudio de las clasificaciones y
relaciones evolutivas entre los seres vivos. Esta constante revisión ha provocado la
profusa aparición de términos que dejan de tener categoría taxonómica pero que, sin
embargo, son muy útiles en el ámbito de la Sistemática. Consecuencia de todos estos
cambios es la confusión y oscuridad que reina en algunos conceptos y, sobre todo, el
desconocimiento generalizado de muchos grupos de plantas incluso a niveles tan altos
de la Taxonomía como la categoría de Clase.
UN POCO DE HISTORIA
El primer intento de clasificación de las plantas se lo debemos al griego Teofrasto (371
a.C– 287 a.C.), discípulo primero de Platón y posteriormente de Aristóteles. Sus ideas
quedaron recogidas en diversas obras: Sistema Naturae, De causis plantarum y De
historia plantarum. Suya fue la primera clasificación sistemática de las plantas y tuvo
un gran interés por desarrollar terminología científica (GONZÁLEZ BUENO, 1998:15).
Dos de los términos que acuñó son gimnosperma y angiosperma. Estos vocablos
permiten distinguir las plantas cuyas semillas están desnudas (gimnospermas, sin
verdaderos frutos) de las que están cubiertas por las paredes transformadas del ovario
(angiospermas, con verdaderos frutos).
Los oscuros siglos de la Edad Media se reflejan
también en la Botánica, que no sufre avances
significativos hasta el británico John Ray (16271705) que estableció la diferencia entre
monocotiledóneas y dicotiledóneas en su obra de
1682 Methodus Plantarum. Las monocotiledóneas
presentan una hoja embrionaria en sus semillas
mientras que las dicotiledóneas presentan dos.
Figura 1. Teofrasto de Ereso, escultura del Orto
Botánico di Palermo. (Fuente:
https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Teofrasto_O
rto_botanico_detail.jpg. Licencia Creative Commons)
Posteriormente irrumpe la gran
figura de C. Linneo (1707 – 1778)
cuyo sistema de taxonómico tuvo
tan gran acogida que forma el
esqueleto de las clasificaciones
animales y vegetales actuales. Pese a
que buena parte de los grupos
definidos por Linneo han sido
reinterpretados
posteriormente,
algunos de ellos forman parte del
vocabulario botánico actual. La
división de las plantas en
criptógamas y fanerógamas se lo
debemos a él (LINNEO, 1758). Las
criptógamas son las plantas que no
tienen flores como órganos de
reproducción
sexual.
Por
el
contrario, las fanerógamas sí
presentan flores.
Figura 2: Carolus Linnaeus (Real Academia Sueca de Ciencias).
Licencia de Dominio Público.
En el siglo XIX se completan las
líneas maestras de la clasificación
de
las
plantas
con
las
aportaciones de S. L. Endlicher
(1804-1849) y F. J. Cohn (19281998). El primero empleó la
palabra cormófito para aludir a
las plantas que tienen tejidos
conductores (plantas vasculares).
El segundo utilizó el término
pteridofito para referirse a las
criptógamas vasculares.
Figura 3: A la izquierda S. L. Endlicher (litografía de Josef
Kriehuber, 1898). A la derecha el botánico y microbiólogo F. J.
Cohn. Licencia de Dominio Público.
PANORÁMICA ACTUAL
En la figura 4 mostramos una tabla sinóptica con la sistemática actual para el reino
Plantas. Hemos seguido la utilizada por IZCO (2004) por ser una obra suficientemente
moderna que puede servir de referencia. Hemos solapado con el esquema taxonómico
las equivalencias de los diferentes términos que hemos aludido en el texto anterior. Para
simplificar el esquema sólo hemos profundizado al nivel de subclase dentro de las
angiospermas. Hemos omitido los taxones fósiles y algunos no muy representados en la
actualidad.
GLOSARIO
Como colofón, incluimos las definiciones de los términos sistemáticos que hemos
recopilado en este artículo.
Angiosperma: planta con flores (fanerógama) con verdaderos frutos (semillas
protegidas por las paredes del óvulo transformadas).
Briófito: planta criptógama (sin flores) que carece de tejidos vasculares.
Conífera: gimnosperma con pseudofrutos más o menos leñosos (piñas).
Cormófito: planta con tejidos especializados en el transporte de líquidos (xilema y
floema). También llamadas plantas vasculares.
Criptógama: vegetal de los reinos protistas, hongos o plantas que se reproduce por
medio de esporangios en lugar de flores. Los principales grupos naturales de
criptógamas son las algas, los hongos, los briófitos (musgos y hepáticas) y los
pteridófitos (helechos y plantas afines).
Figura 4: Tabla sinóptica que relaciona la taxonomía del reino Plantas con los términos de uso común que carecen
de categoría taxonómica.
Figura 5: Las plantas vasculares (cormófitos) se incluyen en dos divisiones: Pteridophyta y Spermatophyta. En la
primera división se incluyen los helechos y plantas afines (fotografía superior izquierda). En la segunda se
incluyen las gimnospermas (fotografía inferior izquierda, género Cycas) y las angiospermas
monocotiledóneas (fotografía derecha, género Strelitzia) y dicotiledóneas (fotografía central izquierda, género
Passiflora). Fotografías propias.
Dicotiledónea: planta angiosperma (con fruto) cuyas semillas presentan dos hojas
embrionarias.
Espermatofito: planta que tiene semillas (es equivalente, por tanto, a fanerógama).
Fanerógama: planta con flor.
Helecho: principal y más conocido grupo de pteridófitos.
Hepática: grupo de briófitos menos conocido. Pueden ser de aspecto taloso (parecido al
de las algas, sin filidios bien formados) o folioso (con filidios bien formados).
Gimnosperma: planta con flor (fanerógama) cuyas semillas no quedan protegidas por
los tejidos del ovario y, por tanto, no tienen verdaderos frutos. Las semillas
pueden estar protegidas por escamas modificadas que forman estructuras similares
a frutos (estróbilos, conos, arcéstidas, gálbulos) conocidas genéricamente como
pseudofrutos.
Monocotiledónea: planta angiosperma (con fruto) cuyas semillas presentan dos hojas
embrionarias.
Musgo: grupo de briófitos foliosos más conocido.
Pteridófito: plantas criptógamas (sin flores) cormofíticas (que tienen haces vasculares).
Incluye los helechos y otros grupos afines como equisetos (colas de caballo),
licopodios y psilofitos.
BIBLIOGRAFÍA
GONZÁLEZ BUENO, A. (1998) Historia de la Ciencia y la Técnica, 26. Los sistemas
de clasificación de los seres vivos. Ediciones Akal. Madrid.
IZCO, J. (2004) Botánica. 2ª ed. Mc Graw Hill – Interamericana. Madrid.
LINNEO, C. (1735) Systema naturæ, sive regna tria naturæ systematice proposita per
classes, ordines, genera, & species. Theodorum Haak. Leiden.