Download Escollos de la Escritura

Escollos de la Escritura
Error No. 1 Estructuración de párrafos
Definición: Un párrafo es la unión de dos o más oraciones que apoyan
una idea central.
• De acuerdo con la definición, un párrafo no puede construirse
con una sola oración, aunque ésta sea muy larga.
• Tampoco debe formarse con dos oraciones muy pequeñas,
porque los párrafos se construyen con ideas o pensamientos
completos que no es posible expresar en una sola línea.
• Razonablemente, un párrafo debe estar formado cuando menos
por dos oraciones de tamaño mediano, y éstas deberán ir
separadas por un punto y seguido.
• Para que un fragmento de un texto sea considerado como
párrafo, éste se debe iniciar con letra mayúscula y debe contener
como mínimo, un punto y seguido que separe las dos oraciones
que lo conforman, si es que está formado sólo por dos oraciones.
• Un párrafo puede tener más de dos oraciones y cada una de ellas
debe ir separada de la anterior con un punto y seguido hasta que
finalice el fragmento, donde debe colocarse un punto y aparte.
Error No. 2 Mal Uso del punto y coma
Este signo de puntuación debe utilizarse cuando exista cualquiera
de las siguientes tres situaciones:
a) Cuando haya dos oraciones contiguas complementarias con
sujetos diferentes. Ejemplo: Los pescadores salen temprano a
su labor diaria; el sol, en cambio, se levanta más tarde.
b) Cuando aparezcan dos oraciones contiguas complementarias
con el mismo sujeto, pero diferente predicado.
Ejemplo: Ulises es el personaje principal de La Odisea; éste
también aparece en La Ilíada.
c) Cuando exista la necesidad de enumerar oraciones completas.
Ejemplo: No debe criticarse que a los José los llamemos Pepe;
a los Antonio, Toño; a los Jesús, Chuy; a las Dolores, Lola y a
las Graciela, Chela.
Si el caso en el que se desee emplear punto y coma no es ninguno
de los anteriores, lo mejor será usar el punto y seguido, ya que la
diferencia entre estos dos signos de puntuación es muy sutil.
Error No. 3 Mal Uso del Gerundio
El gerundio es un verbo no personal, ni conjugable. Siempre
tiene la misma terminación: -ando para verbos terminados es –ar
como amar, y –iendo para verbos terminados en -er y en –ir
como comer y vivir. Por lo tanto, los gerundios simples de amar,
comer y vivir son: amando, comiendo y viviendo. Los gerundios
compuestos de estos verbos son: habiendo amado, habiendo
comido y habiendo vivido.
El gerundio será incorrecto cuando éste tenga una función de
adjetivo. Es decir, cuando el gerundio pretenda modificar a un
sustantivo.
Ejemplo de uso incorrecto del gerundio: El Congreso aprobó una
ley prohibiendo el comercio ambulante.
El error consiste en que el gerundio “prohibiendo” quiere
modificar al sustantivo “ley”. Por tanto, para corregir el error se
debe cambiar a: El Congreso aprobó una ley que prohíbe el
comercio ambulante.
Existen dos excepciones a la regla anterior de no usar el gerundio
como adjetivo: ardiendo e hirviendo. De modo que puede decirse
correctamente:
Ella se aferró a él como a un clavo ardiendo y Las verduras se
ponen a cocer en agua hirviendo.
En ambos casos el gerundio actúa como adjetivo, porque en el
primer ejemplo “ardiendo” modifica a “clavo” y en el segundo,
“hirviendo” modifica a “agua” que son sustantivos. Fuera de
estos dos verbos de excepción, no encontraremos otros que
puedan actuar como si fueran adjetivos.
Pueden usarse también gerundios enseguida de sustantivos
cuando aparece una leyenda debajo de una foto, un grabado o un
dibujo.
Ejemplos (debajo de fotografías): El alpinista llegando a la
cumbre; La patinadora ejecutando un doble salto mortal.
En estos ejemplos es correcto el uso del gerundio porque entre el
sustantivo y el gerundio hay un verbo implícito o sobrentendido.
Por tanto, el gerundio realmente modifica a otro verbo y cumple
con su función adverbial, porque nos dice cómo se lleva a cabo la
acción, aunque el otro verbo no esté escrito, sino implícito.
Ejemplos: El alpinista “está” llegando a la cumbre; La patinadora
“se encuentra” ejecutando un doble salto mortal.
Otros ejemplos de gerundios bien empleados:
Los gatos se fueron corriendo
Ellos llegaron silbando a clase
Ella salió llorando de su casa
En estos tres ejemplos se ve claramente que el gerundio cumple
su función adverbial porque nos dice cómo se fueron los gatos:
corriendo; cómo llegaron ellos a clase: silbando y cómo salió ella
de su casa: llorando.
Se debe tomar en cuenta que el gerundio va acompañado de otro
verbo conjugado en la misma oración. Si la acción del gerundio
(siempre en progreso) se lleva a cabo ya sea inmediatamente
antes, simultáneamente o inmediatamente después al tiempo del
otro verbo, el gerundio, por lo general, será correcto.
Sin embargo, si la acción del gerundio sucede mucho antes a la
del otro verbo, o mucho después, el uso del gerundio será
incorrecto.
Ejemplo de uso incorrecto: Se estrelló el avión, siendo encontrado
tres días después.
Evidentemente, el tiempo del gerundio (siendo encontrado)
sucede mucho tiempo después que la acción del otro verbo: (se
estrelló), por tanto, es incorrecto el uso del gerundio. Esto se
corrige así:
Se estrelló el avión y fue encontrado tres días después
Si el gerundio nos dice cómo se llevó a cabo una acción, es muy
probable que su uso sea correcto, siempre que se cuiden los
tiempos en que ocurre la acción del gerundio.
Ejemplo: Se alejó cantando.
La excepción a esta regla se da cuando la acción del gerundio y la
acción del otro verbo, no son compatibles.
Ejemplos Incorrectos:
Entró en la casa planchando
Llegó sentándose
El cura vino tarde, parándose en el púlpito inmediatamente
En estos ejemplos los verbos son incompatibles, ya que no es
posible llegar planchando, ni se puede llegar a ninguna parte
sentándose. Tampoco el cura puede llegar parándose en el
púlpito, a menos que lo usara de patineta o que el púlpito tuviera
ruedas.
Para que sea más sencillo detectar si los verbos son compatibles,
es bueno juntarlos. Ejemplos: Entró planchando; Llegó
sentándose; Vino parándose. Así es más fácil ver si las acciones
de los verbos pueden darse simultáneamente.
Existen otros casos de gerundios mal empleados. Sin embargo,
no se trata de cansar a la audiencia con reglas que seguramente
no recordará a la hora de escribir. No obstante, en caso de duda,
es mejor no usarlo a emplearlo mal.
Error No 4
Emplear la Primera Persona del Singular en Escritos
Académicos
Es frecuente encontrar en textos formales expresiones como:
“Yo creo”, “Yo investigué”, “Yo analicé” o “Desde mi punto de
vista. . .”
Estas
expresiones
suenan
excesivamente
egocéntricas
o
petulantes, por lo que es mejor evitarlas.
En todo caso, si hay que personalizar se deberá utilizar la
primera persona del plural: Nosotros, que suena mucho mejor.
No obstante, la mejor manera de expresión en un escrito
académico es la forma impersonal. Ejemplos: Se cree, Se
investigó, Se analizó o Desde un punto de vista general. . .
Error No 5
Mal Empleo de “Mismo”
Uno de los errores más comunes hoy día es el empleo de “mismo”
como si éste fuera un pronombre y no un adjetivo.
Ejemplos incorrectos:
Compró un sofá y se durmió en el mismo
Le escribió a su novia, misma que no le ha contestado
Correcciones:
Compró un sofá y se durmió en él
Le escribió a su novia, quien no le ha contestado
El uso de “mismo” será correcto si éste asume su papel de
adjetivo. Es decir, cuando “mismo” modifique a un sustantivo.
Ejemplos:
Ella trae el mismo vestido de ayer
El niño sacó los mismos ojos de su madre
El uso de “mismo” será incorrecto cuando éste pretenda
desempeñar un papel de pronombre. Es decir, cuando se emplee
para no repetir la palabra a la que se está haciendo referencia
Ejemplos incorrectos:
Tomó una taza y se sirvió café en la misma
Ella tiene muchas deudas, mismas que no reconoce
Correcciones:
Tomó una taza y se sirvió café
Ella tiene muchas deudas que no reconoce
Error No. 6
Adjetivos Demostrativos Vs. Pronombres
Existen palabras idénticas en español que juegan papeles
diferentes en una oración. Para distinguirlas, es necesario
acentuar ortográficamente a algunas de ellas.
Los adjetivos demostrativos:
este, ese, aquel,
esta, esa, aquella,
estos, esos, aquellos y
estas, esas, aquellas
DEBEN
IR
SIEMPRE
ACOMPAÑADOS
DE
UN
SUSTANTIVO, Y NUNCA DEBEN LLEVAR ACENTO.
Ejemplo:
Este niño; Ese cuadro; Aquel elefante
Esta muñeca; Esa mesa; Aquella torre
Estos vestidos; Esos zapatos; Aquellos libros
Estas ventanas; Esas sillas; Aquellas muchachas
Los pronombres son iguales, pero NO VAN SEGUIDOS DE
SUSTANTIVOS COMO LOS ADJETIVOS Y LLEVAN
ACENTO ESCRITO. ESTOS PRONOMBRES SE REFIEREN
A ALGO QUE YA SE MENCIONÓ ANTES.
Ejemplo: ¿Cuál niño? ÉSTE; ¿Cuál cuadro? ÉSE; ¿Cuál
elefante? AQUÉL; ¿Cuál muñeca? ÉSTA; ¿Cuáles vestidos?
ÉSTOS;
¿Cuáles
sillas?
ÉSAS;
¿Cuáles
muchachas?
AQUÉLLAS.
NOTA: SI LLEVA ACENTO ES PRONOMBRE Y NO TIENE
UN SUSTANTIVO ENSEGUIDA
Error No. 7
Uso y Abuso del Etcétera
Siempre que se enumere algo, pero que la lista de elementos no
es completa, se escribe etcétera o etc. No obstante, esta palabra o
esta abreviatura NO DEBE UTILIZARSE SI NO SE HAN
MENCIONADO POR LO MENOS TRES ELEMENTOS.
Ejemplo:
Quiero comprarme: zapatos, vestidos, maquillaje, etc.
Ejemplo incorrecto:
Quiero comprarme: zapatos, vestidos, etc.
Para no abusar del término “etcétera”, sobre todo si ya se
empleó antes en el escrito, se pueden utilizar otras expresiones
que significan lo mismo.
Ejemplo:
México tiene muchos problemas: la pobreza, la inseguridad y la
delincuencia, entre otros.
Esta expresión “entre otros” sustituye a “etcétera” y hace más
elegante nuestro escrito. Significa que mencionamos sólo algunos
de los problemas, pero que hay otros, que no mencionamos.
SI SEGUIMOS ESTAS INDICACIONES, MEJORAREMOS
SUSTANCIALMENTE NUESTROS TRABAJOS ESCRITOS