Download Credo Presentación
Document related concepts
Transcript
Credo. Esmé Thompson Fco. Javier Cremades Fernández El Credo “Los contenidos esenciales que desde siglos constituyen el patrimonio de todos los creyentes tienen necesidad de ser confirmados, comprendidos y profundizados de manera siempre nueva, con el fin de dar un testimonio coherente en condiciones históricas distintas a las del pasado […]. El conocimiento de los contenidos de la fe es esencial para dar el propio asentimiento, es decir, para adherirse plenamente con la inteligencia y la voluntad a lo que propone la Iglesia. El conocimiento de la fe introduce en la totalidad del misterio salvífico revelado por Dios.” (Carta Apostólica en forma de “Motu proprio”, Porta Fidei, Benedicto XVI) El Credo. 2 Puerta. Benjamín Lamcombe 0. EXHORTACIÓN “Creer significa aceptar y reconocer como verdadero y como real el contenido de lo que se me dice, de las palabras de otra u otras personas, en virtud de su credibilidad y de su autoridad en a expresar la verdad.” (Juan Pablo II, audiencia general del 13 de marzo de 1985) El Credo. Creer. 3 La Resurrección. Pericle Fazzini 1. INTRODUCCIÓN Credo: (del lat. credo, creo, primera palabra de la oración). 1. Oración en la que se contienen los principales artículos de la fe enseñada por los apóstoles. (R.A.E., 22ª edición del Diccionario de la lengua española) El Credo. Definición. 4 Salón de actos de la Real Academia Española 1. INTRODUCCIÓN Desde los tiempos apostólicos la Iglesia ha venido expresando lo fundamental de la fe en fórmulas fáciles y breves, que son los Credos, Símbolos o Profesiones de Fe. San Agustín lo explica con unas palabras de profundo significado en la entrega del Credo: «El símbolo del sacrosanto misterio que recibisteis todos a la vez y que hoy habéis recitado uno a uno, no es otra cosa que las palabras en las que se apoya sólidamente la fe de la Iglesia, nuestra madre, sobre la base inconmovible que es Cristo el Señor.» (San Agustín, sermón sobre la redditio symboli) El Credo. Definición. 5 San Agustín. Sandro Botticelli 1. INTRODUCCIÓN La procedencia de estas palabras, que encierran lo fundamental de la Fe del pueblo de Dios, nos la deja clara San Cirilo de Jerusalén cuando afirma que: «Esta síntesis de la fe no ha sido hecha según las opiniones humanas, sino que de toda la Escritura ha sido recogido lo que hay en ella de más importante, para dar en su integridad la única enseñanza de la fe. […] Este resumen de la fe encierra en pocas palabras todo el conocimiento de la verdadera piedad contenida en el Antiguo y el Nuevo Testamento.» (San Cirilo de Jerusalén, Catecheses illuminadorum, 5,12; PG 33) El Credo. Contenido. 6 Fragmento del Evangelio de Marcos (Mc. 6, 52-53). Qumrán 1. INTRODUCCIÓN La palabra griega symbolon significaba la mitad de un objeto partido (por ejemplo, un sello) que se presentaba como una señal para darse a conocer. Las partes rotas se ponían juntas para verificar la identidad del portador. El "símbolo de la fe" es, pues, un signo de identificación y de comunión entre los creyentes. Symbolon significa también recopilación, colección o sumario. (Catecismo de la Iglesia Católica, 1ª parte, sec. 2ª, 188) El Credo. Símbolo. 7 Tesoro de los atenienses (Delfos) 2. LOS SÍMBOLOS DE LA FE 2. LOS SÍMBOLOS DE LA FE A lo largo de la vida de la Iglesia se han sucedido diferentes símbolos o profesiones de fe que han dado respuesta a las necesidades de los cristianos del momento: • “Fides Damasi” (71-72). • Símbolo Quicumque, San Atanasio (75-76). • Profesión de fe de varios Concilios: Letrán IV (800-802) Lyon II (851-861) • “Credo del Pueblo de Dios”, del Papa Pablo VI (1968). (Catecismo de la Iglesia Católica, 1ª parte, sec. 2ª, 192) El Credo. Los símbolos. 8 Reedición del “Credo del Pueblo de Dios” Toledo XI (525-541) 2. LOS SÍMBOLOS DE LA FE Aunque ninguna de ellas puede darse por superada, hay dos símbolos que destacan por encima de los demás y son el “Símbolo Apostólico” (antiguo símbolo Bautismal de la Iglesia de Roma, recogido en el Concilio de Nicea en el año 325) . El Credo. Símbolo de los Apóstoles. 9 Frontal de Altar de los Apóstoles (Seo d’Urgell) Creo en Dios, Padre Todopoderoso, creador del cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María Virgen; padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a los vivos y a los muertos. Creo en el Espíritu Santo, la santa Iglesia católica, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna. Amén. 2. LOS SÍMBOLOS DE LA FE Creo en un solo Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible. Creo en un solo Señor, Jesucristo, Hijo único de Dios, nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros, los hombres, y por nuestra salvación bajó del cielo, y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a, vivos y muertos, y su reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo en la Iglesia, que es una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un solo Bautismo para el perdón de los pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro. Amén. El Credo. Símbolo niceo-constantinopolitano. 10 Icono de l Credo de Nicea-Constantinopla El “Símbolo de Nicea-Constantinopla” (fruto de los dos primeros Concilios ecuménicos Nicea, año 325, y Constantinopla, año 381). 2. LOS SÍMBOLOS DE LA FE Mosaico del Mausoleo de Gala Placidia Símbolo de los APÓSTOLES Símbolo de NICEA-CONSTANTINOPLA Creo en Dios, Padre Todopoderoso, creador del cielo y de la Creo en un solo Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y tierra. de la tierra, de todo lo visible y lo invisible. Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor, Creo en un solo Señor, Jesucristo, Hijo único de Dios, nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros, los hombres, y por nuestra salvación bajó del cielo, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María Virgen; padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a los vivos y a los muertos. Creo en el Espíritu Santo, la santa Iglesia católica, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna. El Credo. y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a, vivos y muertos, y su reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo en la Iglesia, que es una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un solo Bautismo para el perdón de los pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro. 11 Pilar de la Catedral de Palma de Mallorca «El Señor les mandó ir a cada una de las naciones para predicar la palabra de Dios. Antes de partir y separarse establecieron una norma común de su predicación para que no sucediera que, al alejarse uno de otro, expusieran algo diverso a los que invitaban a abrazar la fe de Cristo. Congregados, pues, todos ellos y llenos del Espíritu Santo, poniendo en común lo que cada uno sentía, compusieron este breve compendio de su futura predicación, prescribiendo dar esta regla a los creyentes. […] muchos de los judíos fingían ser apóstoles de Cristo, y se dedicaban a predicar nombrando ciertamente a Cristo, pero sin anunciarle conforme a las líneas de la tradición. De ahí que establecieran este signo por el que se conociese quién predicaba a Cristo verdaderamente.» (Rufino de Aquileya) El Credo de los apóstoles. ¿Por qué un símbolo? 12 Basílica patriarcal de Aquilea 3. EL SÍMBOLOS DE LOS APÓSTOLES 3. EL SÍMBOLOS DE LOS APÓSTOLES El Credo de los apóstoles consta de doce artículos repartidos en tres partes diferenciadas: • Creo en Jesucristo su único Hijo • Creo en el Espíritu Santo El Credo de los Apóstoles. Estructura. 13 La Trinidad. Andréi Rubliov • Creo en Dios Padre 3.1. PRIMERA PARTE Creo en Dios, Padre Todopoderoso, creador del cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María Virgen; padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a los vivos y a los muertos. Creo en el Espíritu Santo, la santa Iglesia católica, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna. Amén. El Credo de los Apóstoles. Dios Padre. 14 La creación de Adán. Miguel Ángel Buonarroti descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, 3.1. PRIMERA PARTE Artículo 1: “Creo en Dios Padre todopoderoso, creador del cielo y de la tierra.” • Creo en Dios: Me fio de Él y acepto todo lo que me propone. • Creo en un solo Dios: “Shemá Yisrael: Adonai eloeinú, Adonai ejad.” El misterio de la Trinidad. • Padre: “Abba”, mensaje central del Nuevo Testamento, Dios es un padre lleno de misericordia, que perdona siempre, y que quiere hacernos felices con su eterna felicidad. • Todopoderoso: “Pantocrátor”, que lo llena todo, que lo invade todo, que está presente en toda la creación como obra de sus manos, pero que no se confunde con lo creado, sino que está más allá, porque lo trasciende todo. El Credo de los Apóstoles. Creo en Dios Padre. 15 Dios creador. Jan Brueghel • Creador: La voluntad creadora de Dios. Con la creación Dios “da y regala”, con la creación del hombre “Dios se nos da”. 3.2. SEGUNDA PARTE Creo en Dios, Padre Todopoderoso, creador del cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María Virgen; padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, Desde allí ha de venir a juzgar a los vivos y a los muertos. Creo en el Espíritu Santo, la santa Iglesia católica, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna. Amén. El Credo de los Apóstoles. Creo en Jesucristo. 16 Pantocrátor. Iglesia de Moraves de Ojeda subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre todopoderoso. 3.2. SEGUNDA PARTE Artículo 2: “Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor…” • “Jesucristo” centro del cristianismo. • Hijo único de Dios: profesión de fe en su Divinidad y por tanto en la Trinidad. Es hijo por su naturaleza divina. Nosotros somos hijos de Dios por gracia, en la participación de la humanidad de Cristo. El Credo de los Apóstoles. Creo en Jesucristo. 17 La Trinidad. Doménico Theotocópulos (El Greco) • Nuestro Señor: Tanto en la Sagrada Escritura, como en el Credo Dios es el protagonista, no el hombre. 3.2. SEGUNDA PARTE Artículo 3: “…que fue concebido por obra y gracia del Espíritu santo, nació de Santa María Virgen…” • Se dice que “fue concebido” y que “nació”, los verbos que describen al hombre. Es decir se encarnó, vino al mundo como venimos los hombres (hasta en eso se hizo igual a nosotros). • Jesucristo es hombre porque ha sido enviado, lo ha elegido, nosotros no. • La común-unión entre dos seres no es posible si no son de la misma naturaleza. • Jesús es el hombre en plenitud porque es Dios. Cuanto más de Dios seamos mejores hombres seremos. El Credo de los Apóstoles. Creo en Jesucristo. 18 El nacimiento de Jeús. Giotto • La humanidad de Cristo, muestra de la dignidad de la condición y singularidad humanas. Por ello esta naturaleza ha de considerarse sagrada e inviolable. 3.2. SEGUNDA PARTE Artículo 3: “…que fue concebido por obra y gracia del Espíritu santo, nació de Santa María Virgen…” • Santa María “Virgen”: Jesucristo ya tiene Padre, con el que se comunica y al que obedece tanto en su humanidad como en su Divinidad. • “María” es ejemplo de la gracia de Dios que nos llama a la Santidad. El Credo de los Apóstoles. Santa María. 19 La Inmaculada Concepción. Bartolomé Esteban Murillo • Madre: que atestigua la veracidad de la condición humana de Jesús, es carne de su carne. 3.2. SEGUNDA PARTE Artículo 4: “…padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado…” • Se cumple la escritura: el Mesías ha de padecer. • Poncio Pilato: testigo de la historia. La Pasión tiene lugar en un momento concreto de la historia: Tiberio es emperador de Roma, Pilato procurador de Judea y Herodes tetrarca de Galilea. • La muerte: finalidad redentora en Cristo. El Credo de los Apóstoles. Creo en Jesucristo. 20 La Crucifixión. Diego de Velázquez • “Fue sepultado”, conoció la realidad de separación entre alma y cuerpo. 3.2. SEGUNDA PARTE Artículo 5: “…descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos…” • El infierno o sheol de la escritura: la privación de la visión de Dios. • Jesús no libera a los condenados, sino a los justos que lo precedieron. El Credo de los Apóstoles. Creo en Jesucristo. 21 Descenso a los Infiernos. Andrea di Bounatuti • Universalidad de la obra redentora de Jesucristo: llega a los hombres de todos los lugares y de todos lo tiempos. 3.2. SEGUNDA PARTE Artículo 5: “…descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos…” • La resurrección centro de la fe cristiana: “Si no resucitó Cristo, vacía es nuestra predicación, vacía también nuestra fe.” (1 Cor. 15,14) • La resurrección no es la vivificación de un cadáver, que es volver a la vida anterior, que acaba con la muerte. Cristo Resucita y ya no vuelve a morir. • La resurrección de Cristo: primicia de nuestra propia resurrección. El Credo de los Apóstoles. Creo en Jesucristo. 22 La Resurrección. Peter Paulus Rubens • Cristo es el hombre celestial: la resurrección supone la introducción de la humanidad de Cristo (su cuerpo) en la Trinidad. 3.2. SEGUNDA PARTE Artículo 6: “…subió a los cielos, y está sentado a la derecha de Dios Padre todopoderoso.” • La Ascensión: entrada en una dimensión nueva, en el mundo de Dios. Nos abre las puertas de la “casa del Padre”. • Un cuerpo glorificado: con nuevas capacidades, más allá de tiempo y del espacio. • La Ascensión no supone un abandono, sino una presencia continua, en el interior del hombre, y en el mundo (a través de la Iglesia). El Credo de los Apóstoles. Creo en Jesucristo. 23 La Ascensión. Antonio Lanchares • La Ascensión: comienza el tiempo de la Iglesia, que ha de durar hasta la segunda venida en el final de los tiempos. 3.2. SEGUNDA PARTE Artículo 6: “…subió a los cielos, y está sentado a la derecha de Dios Padre todopoderoso.” • Sentarse a la derecha: compartir honor, dignidad y poder de la persona junto a la que se está. Cristo ha sido glorificado y nombrado Señor. • En el mismo nivel que el Padre: con su mismo poder y dignidad, pero siendo diferente a Él. El Credo de los Apóstoles. Creo en Jesucristo. 24 La Gloria. Tiziano • Mensaje de esperanza: nuestro mediador, intercesor y protector con el mismo poder que el Padre. 3.2. SEGUNDA PARTE Artículo 7: “Desde allí ha de venir a juzgar a los vivos y a los muertos.” • Ahora es el tiempo de la misericordia, después será el tiempo de la justicia. • La universalidad del juicio final. • Juicio particular ante Jesucristo y ante nuestra vida. • El destino del alma: cielo o infierno. Retribución inmediata como consecuencia de nuestras obras y de nuestra fe. El Credo de los Apóstoles. Creo en Jesucristo. 25 El Juicio Final. Miguel Ángel Buonarroti • Juicio de amor: “Al final de la vida seremos examinados en el amor.” (San Juan de la Cruz) 3.3. TERCERA PARTE Creo en Dios, Padre Todopoderoso, creador del cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María Virgen; padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a los vivos y a los muertos. la santa Iglesia católica, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna. Amén. El Credo de los Apóstoles. Creo en el Espíritu Santo. 26 La Anunciación. Fra Angelico Creo en el Espíritu Santo, 3.3. TERCERA PARTE Artículo 8: “Creo en el Espíritu Santo,...” • Babel vs Pentecostés: La incapacidad para comunicarse con el otro fruto del pecado, frente al entendimiento común que nace del Amor. El Credo de los Apóstoles. Creo en el Espíritu Santo. 27 Cátedra de San Pedro. Gian Lorenzo Bernini • El Espíritu Santo potencia y diviniza la naturaleza humana, porque prolonga en ella lo que sucede eternamente en el Seno de la Santísima Trinidad. 3.3. TERCERA PARTE Artículo 9: “...la Santa Iglesia católica, la comunión de los Santos,…” • Cristo esta objetivamente presente en su Iglesia por el poder del Espíritu Santo. En la Eucaristía y el resto de sacramentos, en su Palabra leída en comunidad… • La Iglesia es Santa en sí misma: no se le pueden imputar nuestros pecados personales. • La Iglesia depositaria de la tradición. El Credo de los Apóstoles. Creo en el Espíritu Santo. 28 Plaza de San Pedro. Gian Lorenzo Bernini • Católica: del griego katà olón (según la totalidad). En doble sentido: porque posee la plenitud de los medios de Salvación por la presencia plena de Cristo; y porque ha sido enviada a todos los hombres. 3.3. TERCERA PARTE Artículo 9: “...la Santa Iglesia católica, la comunión de los Santos,…” • Bautizados en el “Santo de los santos”: todos los cristianos estamos llamados a la santidad. • La gracia nos trae la común-unión con Dios y con nuestros semejantes. • La familia de los creyentes. El bien común. El Credo de los Apóstoles. Creo en el Espíritu Santo. 29 Baptisterio de la catedral de Padua • “El Amor es más fuerte que la muerte”: el intercambio de bienes espirituales entre la Iglesia peregrina y la Iglesia purgante y triunfante. 3.3. TERCERA PARTE Artículo 10: “…el perdón de los pecados,…” • “Ser hombre” equivale a “no ser Dios”. Ser pecador equivale a ponerse en contra de Dios. • El pecado posee una triple dimensión: rechazo de Dios, dimensión religiosa; rechazo de los demás, dimensión social y eclesial; y rechazo de uno mismo, dimensión personal. • “No hay nadie tan perverso y tan culpable que no deba esperar con confianza su perdón siempre que su arrepentimiento sea sincero.” • La conversión: fruto del Espíritu Santo y centro del sacramento junto con el Amor de Dios. • La iniciativa es de Dios: por que Él vino a nosotros, nosotros podemos volver a Él. • El perdón de los pecados perpetuado en la Iglesia, de quién el pecado también nos aleja. El Credo de los Apóstoles. Creo en el Espíritu Santo. 30 El retorno del hijo pródigo. Rembrandt van Rij (Catecismo romano, 1, 11, 5) 3.3. TERCERA PARTE Artículo 11: “…la resurrección de la carne,…” • Las dos fases de la vida: presencia en la tierra, desde que nacemos y hasta que morimos; y posterior a la muerte, en un primer momento sobrevive nuestra alma, hasta el final de los tiempos en que resucitará nuestro cuerpo. No sobrevivimos reencarnados, sino que somos el mismo en las dos fases. • La resurrección: fruto de la pertenencia al cuerpo de Cristo. • La materia: creación de Dios, por lo tanto algo bueno y bello. La salvación no implica su abandono en busca de una esfera espiritual. El Credo de los Apóstoles. Creo en el Espíritu Santo. 31 La resurrección de los muertos. Lucca Signorelli • Carne: ser en el cuerpo, en el mundo y en relación con los demás. La plenitud de la Resurrección lo implica todo (hombres, fraternidad, universo). 3.3. TERCERA PARTE Artículo 12: “…y la vida eterna.” • Hemos sido creados para vivir eternamente con Dios y por ello, nuestro destino es el cielo. Dios no ha inventado la muerte, sino que esta es consecuencia del pecado: «Es verdad que la muerte no formaba parte de nuestra naturaleza, sino que se introdujo en ella; Dios no instituyó la muerte desde el principio, sino que nos la dio como remedio.» (San Ambrosio, De excessu Fratis sui Satyri) El Credo de los Apóstoles. Creo en el Espíritu Santo. 32 La adoración de la Tinidad. Alberto Durero • La vida es conocimiento íntimo. La Sagrada Escritura nos dice que el conocimiento es llegar a ser interiormente una sola cosa con el otro. Es decir, la vida es relación. 3.4. AMÉN Creo en Dios, Padre Todopoderoso, creador del cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María Virgen; padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a los vivos y a los muertos. la santa Iglesia católica, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna. Amén. El Credo de los Apóstoles. Así sea. 33 Sagrada Familia. Antonio Gaudí Creo en el Espíritu Santo, 4. RECURSOS • Catecismo de la Iglesia Católica. Parte primera, sección segunda. 1992. En la web: http://www.vatican.va/ • Youcat. Catecismo joven de la Iglesia Católica. Ed. Encuentro, 2011. • Carta apostólica en forma de motu proprio “Porta fidei” con la que se convoca el año de la fe. Del Santo Padre Benedicto XVI. 2011. En la web: http://www.vatican.va/ • El Credo hoy. Benedicto XVI. Ed. Sal Terrae, 2012. • La belleza de la Fe. Nuestros obispos explican el credo y los Sacramentos. Cervera Barranco, Pablo. Ed. San Pablo, 2012. • Catequesis sobre el Credo del Santo Padre y de la Archidiócesis de Madrid. En la web: http://www.misionmadrid.es/ • El Credo, la fe de la Iglesia. DVD, Goya Producciones, 2012. • Blog de nubes de palabras: http://profundizandoenelcredo.blogspot.com.es/2012/ El Credo. Materiales y publicaciones. 34