Download Agenda Técnica Agrícola - Baja California

Document related concepts
no text concepts found
Transcript
AGENDA TÉCNICA AGRÍCOLA
BAJA CALIFORNIA
Directorio
LIC. JOSÉ EDUARDO C ALZADA ROVIROSA
Secretario de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural,
Pesca y Alimentación, SAGARPA
M TRO. JORGE A RMANDO NARVÁEZ NARVÁEZ
Subsecretario de Agricultura, SAGARPA
LIC. RICARDO A GUILAR C ASTILLO
Subsecretario de Alimentación y Competitividad, SAGARPA
M TRO. H ÉCTOR EDUARDO V ELASCO M ONROY
Subsecretario de Desarrollo Rural, SAGARPA
M TRO. M ARCELO LÓPEZ SÁNCHEZ
Oficial Mayor de la SAGARPA
D R. LUIS FERNANDO FLORES LUI
Director General del Instituto Nacional de Investigaciones
Forestales, Agrícolas y Pecuarias, INIFAP
LIC. PATRICIA ORNELAS RUIZ
Directora en Jefe del Servicio de Información
Agroalimentaria y Pesquera, SIAP
MVZ ENRIQUE SÁNCHEZ C RUZ
Director en Jefe del Servicio Nacional de Sanidad,
Inocuidad y Calidad Agroalimentaria, SENASICA
D R. JORGE G ALO M EDINA TORRES
Director General de Desarrollo de Capacidades
y Extensionismo, SAGARPA
Agradecimientos
La SAGARPA extiende un reconocimiento especial a quienes con su visión, conocimiento,
experiencia y trabajo hicieron posible la tarea de generar una Agenda Técnica para cada
entidad federativa de México:
C OORDINACIÓN G ENERAL DE LA OBRA
Ing. Óscar Pimentel Alvarado
Ing. Salvador Delgadillo Aldrete
PRODUCCIÓN EJECUTIVA
MVZ Enrique Sánchez Cruz
Dr. Luis Fernando Flores Lui
C OLABORADORES
Dr. Pedro Brajcich Gallegos
Dr. Eladio Heriberto Cornejo Oviedo
Dr. Bram Govaerts
Dr. Jesús Moncada de la Fuente
Dr. Sergio Barrales Domínguez
Lic. Patricia Ornelas Ruiz
Dr. Raúl Obando Rodríguez
Dr. Jorge Galo Medina
Map. Roxana Aguirre Elizondo
Dr. Luis Reyes Muro
Ing. Ceferino Ortiz Trejo
Ing. Saúl Vargas Mir
Montserrat González Salamanca
Maribel Morales Villafuerte
Lic. Víctor Hugo Rodríguez Díaz
César Abel Mendoza Ruíz
Blanca Estela Sánchez Galván
Soc. Pedro Díaz de la Vega García
Lic. Francisco Guillermo Medina Montaño
Agenda Técnica Agrícola de Baja California
Segunda edición, 2015.
©Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación
Av. Municipio Libre 377. Col. Santa Cruz Atoyac,
Del. Benito Juárez, C.P. 03310, México, D.F.
ISBN volumen: 978-607-7668-47-3
ISBN obra completa: 978-607-7668-44-2
Impreso en México
Fotografías: SAGARPA, INIFAP, CIMMYT y UACH.
Cartografía: INEGI, SIAP.
Presentación
Agendas Técnicas Agrícolas:
conocimiento para mover a México
El extensionismo es uno de los pilares del campo justo, productivo y sustentable que día a
día nos esforzamos en construir desde el Gobierno de la República con la fuerza de
millones de productores que tienen la noble tarea de producir los alimentos que
consumen sus compatriotas.
Como lo instruye el Presidente de la República, Lic. Enrique Peña Nieto, no se trata de
administrar sino de transformar. El conocimiento y las mejores prácticas deben estar al
alcance de todos los productores, atendiendo el contexto en que cada uno vive, las
circunstancias a las cuales hace frente para obtener frutos de su labor y para mejorar su
calidad de vida.
Durante generaciones enteras, nuestros hombres y mujeres del campo han resistido el
clima, han mirado el cielo en espera de la líquida respuesta a sus plegarias, han explorado
desafiantes caminos para hacer de su modo de vida un mejor modo de vivir. Todo ese
conocimiento está hoy al alcance de la mano en esta Agenda Técnica Agrícola.
Al conocimiento empírico acumulado se suma la investigación, la metodología y la
tecnología que la SAGARPA ha promovido por medio de instituciones como el INIFAP, la
Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro, la Universidad Autónoma de Chapingo,
el Centro Internacional de Mejoramiento del Maíz y Trigo (CIMMYT) y el Colegio de
Posgraduados. Esto es a lo que llamamos Sinergia para la transformación del campo.
Nuestro campo también se nutre del conocimiento colectivo. Se nutre de la importancia
de conocer el significado del viento y el olor de la tierra; de la importancia de conocer
más para mejorar las prácticas y hacer rendir el trabajo, de la importancia de
comprender, compartir y transformar…
El conocimiento sólo es útil si se usa en las tareas cotidianas. Esta Agenda Técnica Agrícola
busca primordialmente ser útil para los héroes anónimos cuya responsabilidad toma
dimensión tras un largo camino recorrido, cuando cada persona transforma su esfuerzo
en el alimento y este en la energía con que México se mueve…
…estamos aquí para Mover a México.
LIC. JOSÉ EDUARDO C ALZADA ROVIROSA
Secretario de Agricultura, Ganadería,
Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación
Generalidades de Baja California
Ubicación geográfica
Situado en el extremo noroeste del país entre los meridianos 112º43’13” y 117º07’22”
de longitud oeste y los paralelos 28º00’00” y 32º43’14” de latitud norte.
Superficie
70,113 kilómetros cuadrados (3.56% del total nacional).
Límites
Limita al sur con Baja California Sur, al norte con Estados Unidos de América, al noreste
con Sonora, al este con el Mar de Cortés y al oeste con el océano Pacífico.
Orografía
Las sierras de Juárez, San Pedro Mártir, Calamajué, San Borja y Calmalli dividen
conforman tres grandes regiones: la occidental, desértica, con lluvias escasas y
abundantes nieblas, de clima mediterráneo y poblada por una vegetación de matorral; la
centro norte, formada por valles, suelos negros y bosques aislados de pinos y árboles con
hojas; y la oriental, estrecha y árida, salvo en el valle de Mexicali, drenado por el Río
Colorado. En esta zona se concentra la actividad agrícola, y en la porción septentrional
de las dos primeras regiones han prosperado el comercio y el turismo.
Hidrografía
Tiene una longitud de litoral en el océano Pacífico de 880 y 675 kilómetros en la costa
del Golfo de California (Mar de Cortés). La única corriente de importancia es el río
Colorado, que aporta (conforme al Tratado Internacional de Límites y Aguas) 1,850
millones de metros cúbicos anuales, que ayudan a garantizar el riego en el Valle de
Mexicali. En el norte de la entidad se localiza la Laguna Salada, la principal y una de las
pocas del estado. El resto de los recursos superficiales son arroyos torrenciales de cauce
corto y abrupto. Los acuíferos subterráneos (Mexicali, El Maneadero y San Quintín)
están sobreexplotados y presentan mezcla con aguas salinas.
Clima y temperatura
Se pueden observar tres zonas térmicas: en la parte oeste, suroeste y sur existe un clima
semicálido seco, con temperatura media anual de 18º a 22 ºC; mientras que en la parte
de la costa del Golfo de California es cálido y seco, con temperatura media anual mayor
a 22 ºC; en el noreste encontramos un clima templado semiseco, con una temperatura
media anual de 12º a 18 ºC. En la zona montañosa alta se encuentra un clima templado
subhúmedo, con temperatura media anual de 8º a 12 ºC. El comportamiento de la lluvia
normal anual varía de 41 milímetros en la estación “Bataques”, en la zona de Mexicali, a
397 milímetros en la estación “Los Compadres”, situada en las partes altas del Valle de la
Trinidad, a un costado de la sierra San Pedro Mártir, con una precipitación normal anual
promedio de 158 milímetros. En general, las lluvias son exiguas e irregulares y se
presentan en verano, salvo en la región del Valle de Mexicali, donde ocurren en invierno.
Indicadores socioeconómicos
Población: 3,155,070 habitantes, 2.8% del total del país.
Distribución de población: 92% urbana y 8% rural; a nivel nacional el dato es de 78 y 22%,
respectivamente.
Escolaridad: 9.2 (tercero de secundaria); 8.6 el promedio nacional.
Hablantes de lengua indígena de 5 años y más: Una de cada cien personas. A nivel nacional
seis de cada cien personas hablan lengua indígena.
Sector de actividad que más aporta al PIB estatal: Industrias manufactureras. Destaca la
producción de maquinaria y equipo.
Aportación al PIB Nacional: 2.8%.
División política
La entidad está formada por 5 municipios, de los cuales dos tienen de 50,000 a 100,000
habitantes, otros dos más de 500,000 habitantes y uno de más de 1,500,000 habitantes
(Tijuana).
Las vías de comunicación terrestre en esta orografía son relativamente difíciles por la
costa del Golfo de California y se han desarrollado fácilmente por la del Pacífico, en
donde están los centros de población y de actividad económica.
Centros de población más importantes
Mexicali (la capital del estado), Tijuana (uno de los principales centros turísticos del país
ya que el número de cruces de la línea fronteriza sobrepasa los 30 millones de personas al
año), Ensenada y Tecate.
Datos históricos
Al consumarse la Independencia, ambas Californias, la Alta y la Baja quedaron
incorporadas a la República en calidad de territorio, hasta 1848 en que en virtud del
Tratado de Guadalupe Hidalgo, se perdió Alta California. En 1888 se crearon los
Territorios Norte y Sur de la Baja California, y desde el 21 de noviembre de 1952 se
constituyó como Estado Libre y Soberano.
Escudo del estado
El escudo representa el pasado, el presente y el porvenir de la entidad. Con la leyenda:
“Trabajo y justicia social”, se expresa uno de los propósitos estatales.
Arriba aparece el sol que representa la luz, elemento principal que pone en nuestras
manos la naturaleza y fuente inagotable de energía, calor y vida. A los lados, dos figuras
humanas, unidas por las manos en el centro proyectan rayos de luz, símbolo de energía.
El libro que sostiene en la mano el hombre, simboliza la cultura. La mujer sostiene una
probeta que significa la química, una escuadra que representa la ingeniería y una alegoría
de la medicina. En su conjunto significan la unión del trabajo intelectual y la ciencia.
La silueta central es de un misionero, de los primeros que llegaron a la región durante la
Conquista y evangelizaron a los nativos. Sus brazos abiertos son el pasado y el amor a la
patria y a la humanidad. En la parte superior izquierda, un campo de siembra indica la
agricultura y el presente. En el horizonte, una serranía sugiere las posibilidades mineras.
La silueta de una fábrica y el engrane representan la industria y el porvenir. En la parte
media se encuentra el desierto y en la inferior el río Colorado, que desemboca en el mar.
Dos olas a los lados simbolizan los litorales oriental y occidental.
Personajes ilustres
Estéban Cantú Jiménez (1881-1966): Militar. Gobernador del Distrito Norte de Baja
California de 1915 a 1920.
Rodolfo Sánchez Taboada (1885-1955): General de División. Gobernador del territorio de
Baja California Norte de 1937 a 1944.
Maximiliano Beristein: Encargado de comprar a Don Pedro Gastelúm sus tierras, para
realizar la venta de solares y poblar la Ensenada. La compra de 3,511 hectáreas se
efectuó el 4 de mayo de 1886, por la cantidad de $8,676 pesos del cuño mexicano. El
17 de marzo de 1887, Beristein traspasó los terrenos de la Ensenada por la cantidad de
diez mil pesos a una compañía americana respetándose las propiedades que desde
hacía algunos años Don Pedro había estado vendiendo.
Fuente: INEGI, SIAP.
PAQUETES TECNOLÓGICOS
Alfalfa
Introducción
La alfalfa es el cultivo forrajero de mayor importancia en el Distrito de Riego 014 Río
Colorado, ya que actualmente ocupa una superficie de alrededor de 30,000 hectáreas. Su
rendimiento promedio es de 15.77 toneladas por hectárea de forraje henificado, sin
embargo, existe un potencial superior a 25 toneladas por hectárea. Este diferencial en la
producción se debe en parte a factores agronómicos tales como la incorrecta preparación
del suelo, alta infestación de maleza, presencia de plagas y mala fertilización entre otros.
Con el incremento en las actividades pecuarias en la región, la demanda de forraje con
calidad ha aumentado en forma considerable.
De la producción del heno de alfalfa, 75% está destinado a la alimentación del ganado
lechero, 15% para bovinos productores de carne y 10% para la elaboración de alimentos
concentrados.
Preparación del terreno
Se aconseja barbechar a una profundidad mínima de 30 centímetros; realizar más de un
paso de rastra para asegurarse que queden bien mullidos los terrones; efectuar una buena
nivelación con land plane o láser para asegurar una uniforme distribución de la semilla y
del agua de riego, si el terreno está ligeramente desnivelado se deberá realizar una
rectificación; por último se ejecuta el bordeo trazando melgas de 12 a 16 metros de
ancho por 250 a 300 metros de largo para suelos medios, para suelos pesados con mal
drenaje se recomienda llevar a cabo un subsoleo hasta la profundidad de 50 a 60
centímetros cada tres o cuatro años.
Variedades
Las variedades sugeridas son CUF-101, P-5888, P-5939, Sundor, NK-819, Pierce,
Cóndor y UC Cibola.
Época de siembra
La fecha óptima de siembra comprende del 15 de octubre al 30 de noviembre, periodo en
el cual se logra un buen establecimiento del cultivo, además se evita la competencia con
maleza y se consigue un buen desarrollo radicular y coronas antes de iniciar los cortes.
Densidad y método de siembra
Es conveniente utilizar semilla certificada por algún órgano oficial o particular que
garantice su sanidad; se recomienda usar 40 kilogramos de semilla por hectárea, con 85 a
90% de germinación para asegurar una buena población de plantas. En cuanto a los
métodos de siembra, se pueden emplear los siguientes:
Drilla: La semilla se deposita a una profundidad de 1.5 a 2.0 centímetros.
Voleadora tipo “cyclone”: Se tapa con un paso del “cultipacker”.
Inoculación
Es recomendable inocular la semilla con bacterias del género rhizobium específicas para
alfalfa las cuales están en el mercado bajo los nombres de pagador, nitragin y nitrobacter,
entre otros. Inocular sólo la semilla que se utilizará en el día; evitar la exposición
directamente al sol, altas temperaturas y viento. Revisar que el producto no esté caduco y
seguir las instrucciones de la etiqueta al pie de la letra.
Riego
Después del riego de germinación es necesario aplicar dos o tres riegos de auxilio;
posteriormente, suministrar de uno a dos riegos entre cortes según las condiciones
climatológicas y la textura del suelo. En el verano es común que la alfalfa se “queme” al
regar con temperaturas mayores a 40 ºC, para evitarlo se deben aplicar riegos muy ligeros
y no dejar que el espejo de agua permanezca más de 24 horas sobre el terreno; con
temperaturas altas no regar inmediatamente después del corte, sino dejar que transcurra
un periodo mínimo de 5 a 8 días.
Fertilización
Se recomienda adicionar 40 kilogramos por hectárea de Nitrógeno en presiembra para
alfalfares nuevos (octubre) y en febrero para alfalfas establecidas. En presiembra, se debe
incorporar al suelo, con rastra, cuando la fuente es sólida (urea y nitrato de amonio), o
bien en el agua de germinación cuando sea líquida (uan-32) o gas (NH 3). Posteriormente
se requiere aplicar 100 kilogramos por hectárea de Fósforo al año, dividido en dos partes
iguales, una en primavera y otra en otoño. Para lo anterior se pueden utilizar fuentes
líquidas o sólidas dependiendo la época tales como: fosfato monoamónico, fosfato
diamónico o bien ácido fosfórico y polifosfatos de amonio en el agua de riego. También
es recomendable la incorporación de estiércol al suelo en presiembra, el cual mejora su
estructura y aumenta el contenido de materia orgánica, y con ello se eleva el
rendimiento.
Maleza
Las especies de hoja angosta más importantes son: zacate de agua, pinto, grama, Johnson
y coquillo, que se presentan en primavera y verano; además de avena y alpiste, a finales
del otoño. Las de hoja ancha son: cuscuta, gloria de la mañana, mostacilla, alfombrilla,
chamizo, quelite o bledo y chuales cenizo y apestoso.
Para el control de la maleza, se sugiere utilizar semilla certificada, siembra a tierra
venida, eliminar maleza en canales y regaderas, limpieza de la maquinaria después del
corte y limpias manuales. En cuanto al control químico, a continuación se presentan los
herbicidas, dosis, y época de aplicación de las malezas aquí mencionadas.
Herbicidas recomendados para el control de maleza en alfalfa
Tipo de
maleza
Ingrediente
activo
Mostacilla. Malva, oreja de ratón 2,4 DB
Nombre
comercial
Butyrac 200
Imazethapyr Pivot
Dosis
kg o l/ha
2–3l
Época de
aplicación
Postemergente a cultivo y maleza, altura de 15 cm.
1 -1.5 l Postemergentea plántula.
Zacates
Coquillo
Setoxidim
Poast
Clethodim
Selec
Quizalofop
Assure
Fluazifop
Fusilade
EPTC
Eptam 840-E
2.5
Archer 10G
22 kg
Archer 480
2l
Postemergente
Trifluralina 480
2l
Postemergente
Tetrox 480
2l
Preemergente
Treflan CE
2
Postemergente
4–6l
Postemergente
Zacates en germinación. Cuscuta Trifluralina
Pendimetalina Prowll
2–4l
Postemergente a cultivo y maleza. 20 días antes de corte
Preemergente a la maleza
Recomendaciones para el control de cúscuta en alfalfa. Valle de Mexicali, B.C. y San Luis Río Colorado, Son.
Ingrediente
activo
Marca
comercial
Estado del
cultivo
Estado de la
maleza
Otras indica-ciones
Producto Dosis Producto Dosis
DCPA
10 kg Dacthal
13.3 Altura de 20 a Largo de
Aplicación total al follaje antes de un riego
kg 30 cm
zarcillos entre
30 y 60 cm
Glifosato
75 - Faena
150 g fuerte
0.138 Altura de 20 a Largo de
La alfalfa recién establecida lo tolera desde 8 hojas trifoliadas
a 30 cm
zarcillos entre (17 cm de altura) hasta la etapa de pre-yemas florales (34 cm
0.277
30 y 60 cm
de altura).
l
Secamax
0.173
a
0.347
l
Fiero
0.214
a
0.429
l
Velfosato 0.208
a
0.416
l
Durango
0.138
a
0.276
l
Jornal
0.208
a
0.416
l
Herbipolglifosato
0.208
a
0.416
l
Rudo 43% 0.152
a
0.304
l
Paraquat
Gramoxone
Diquat
Herbipolparaquat
0.5 % Inmediav/v tamente
después del
corte
Inmediatamente
después del
corte
Antes del riego
Lucaquat
Derquat
Secaquat
PendimeTalina
1,600 Prowl 400
a
2,400 Patrol
g.
4.0 a Inmedia6.0 l tamente
4.9 a después del
7.3 l corte
Inmediatamente
después del
corte
Antes del riego
Triflura
lina
2,000 Archer
g
20 kg Inmediatamente
después del
corte
Inmediatamente
después del
corte
Antes del riego
Plagas
Las principales plagas que atacan el cultivo son el pulgón verde, picudo egipcio, gusano
verde, soldado, chinche lygus, chicharritas de varias especies, trips, periquito tricornudo,
pulgón manchado y pulgón azul.
Control de plagas que atacan al cultivo de la alfalfa en el valle de Mexicali
Plaga
Insecticida
Pulgón
Carbofurán
verde y azul
Pulgón
Metasystox LM 50
manchado Malatión CE 84
Carbofuran 3% GR
Picudo
egipcio
Metamidofos LM 50
Malatión CE 84
Metidatión CE 40
Dosis
(l/ha)
Época de aplicación
2.0
Cuando se encuentren más de 10 pulgones por tallo, 28 días antes del corte (DAC)
0.4 21 días antes del corte Sin límite de días 28 días antes del corte
1.0
40-50 kg
0.5
Al registrar cinco o más larvas por redada, 10 DAC. Malation, sin límite de días
Gusano
verde
Endosulfán CE 35
Malatión CE 84
Chinche
lygus
Metidation CE 40
Chicharritas Endosulfán CE 35
Carbofurán
1.5
1.0
Al registrar de 30 75
larvas en 100 redadas, 21 DAC
0.5-0.75 Aplicar en plantas pequeñas e infestaciones muy altas
1.5
1.5
500 adultos por 100
redadas, 21 y 28 DAC
respectivamente
Thrips
Carbicrón 100
Diazinon 25%. CE
Gusano
soldado
Metomilo PS 90
0.4 kg Al encontrar de 20 25
Clorpirifos etil 44.44%. CE 0.75-1.0 larvas por 100 redadas, 7 DAC. Clorpirifos 21 DAC
Periquito Malatión 1000 E
tricornudo
0.4 Aplicar sólo con infestaciones altas 7 días antes del corte.
1.0-1.5
1.0
Al encontrar 60 adultos en 100 redadas, sin límite de días
Nemátodos
La alfalfa puede ser atacada por nemátodos de la raíz y del tallo, ocasionando
deformaciones en la corona y raíz que evitan el desarrollo de nuevos brotes; el follaje de
las plantas atacadas se torna amarillento y las plantas parecen aletargarse. La infestación
con estos organismos es más común en suelos arenosos; las principales especies que
causan daño a la alfalfa son los de la raíz y el del tallo. Para el control de nematodos se
sugiere rotar el suelo con cultivos como sorgo, trigo y cebada, o utilizar variedades
resistentes.
Enfermedades
Las enfermedades en coronas, tallos y raíces provocan una fuerte reducción en la
densidad de plantas, lo cual favorece la aparición de maleza y el decremento en la
producción y calidad del forraje.
Las principales enfermedades son: La pudrición texana, cenicilla vellosa, chahuixtle y
pudrición de la corona. La descripción de estas enfermedades se presenta al final de esta
Agenda.
Cosecha
La producción de un alfalfar dura de 3 a 5 años; realizándose de 8 a 9 cortes al año. Es de
suma importancia hacer los cortes en el momento oportuno para mantener una buena
población de plantas y evitar la proliferación de maleza. La mejor época es con 10% de
floración, debido a que la planta posee un mayor número de hojas que son reservorio de
altos contenidos de proteína cruda, y al mismo tiempo la corona y raíz tienen suficientes
reservas para mantenerse durante el periodo de desarrollo de nuevos órganos vegetativos.
En invierno, cuando la alfalfa no florece, el criterio para efectuar el corte se basa en la
altura mínima de 35 centímetros y la presencia de rebrotes de 3 a 5 centímetros de
longitud. En los meses de julio y agosto, los cortes se deben efectuar ente 20 y 30% de
floración y una altura de planta de 40 a 50 centímetros.
Cuidados en el empaque
De preferencia, el empacado debe ser por la mañana y procurar que el forraje presente
20% de humedad, ya que con valores superiores se corre el riesgo de calentamiento y
pudrición del heno. Una forma práctica para determinar el momento de empacado
consiste en raspar un tallo con la uña del pulgar, si la cutícula no se desprende quiere
decir que el contenido de humedad es adecuado para el empaque.
Eduardo Loza Venegas
Algodonero
Introducción
En los recientes ciclos agrícolas la productividad del algodonero ha sido afectada por los
altos costos de producción del cultivo, problemas de plagas y micronaire alto que afecta
la calidad de fibra, lo que propicia castigos excesivos al precio; así como, aborto de los
órganos fructíferos del último tercio de la planta por efecto de altas temperaturas (45
oC) y alta humedad relativa, que regularmente se presenta a mediados de julio y coincide
con la floración del tercio final de la planta.
Preparación del terreno
Propiciar un medio óptimo para la germinación de la semilla y el desarrollo radicular de
la planta se logra mediante rastreo, subsuelo, barbecho, rastreo, nivelación, surcado a 92
centímetros o un metro de separación. En el caso de Bordeo para facilitar el manejo del
agua de riego; se recomienda hacer melgas, con un trazo de los bordos a cada 20 ó 24
surcos; esta labor puede omitirse si se tiene una buena nivelación.
Variedades
A partir del ciclo primavera verano 2010 las variedades convencionales y variedades
transgénicas de una primera generación, Bollgard solución Faena (BG/RR), fueron
retiradas del mercado nacional para dar cabida a una nueva generación de variedades
transgénicas en las que se encuentra incorporada la tecnología Bollgard II Solución Faena
Flex (B2RF). Esta tecnología proporciona a las plantas de algodón resistencia al ataque de
lepidópteros como gusano bellotero, gusano rosado, gusano soldado, gusano cogollero y
perforador de la hoja; además, son resistentes al herbicida glifosato.
Características agronómicas de las principales variedades
de algodón en el Distrito de Riego
Variedades
Altura Número de ramas fructíferas 95% producción No. de ramas Tipo de hoja
Ciclo
(cm)
fructíferas
vegetativo
95%
producción
Deltapine 0912 B2RF 110-120
19
14-15
semi-vellosa
precoz
FiberMax 1740 B2RF 110-115
18
12-13
lisa
precoz
Stoneville 4554 B2RF 110-115
18-19
14-15
vellosa
precoz
Deltapine 1044 B2RF 115 - 120
18 - 19
13 - 14
Stoneville 5458 B2RF 112-118
18-19
13-14
vellosa
intermedia
Stoneville 4498 B2RF 110-115
17-18
12-13
vellosa
intermedia
Deltapine 1032 B2RF 115 - 120
20
14 - 15
vellosa
intermedia
precoz
Deltapine 167 RF
115 - 120
20
14
lisa
intermedia
tardía
Deltapine 0935 B2RF 115-120
20
14-15
lisa
intermedia
tardía
Para escapar del ataque de plagas de final de ciclo, así como a las altas temperaturas, se
sugiere utilizar variedades de ciclo precoz e intermedio.
Si los productores se interesan en producir algodón de ciclo largo; es decir, aprovechar
el segundo ciclo de floración o “copete”, el cultivo podría requerir uno o dos riegos de
auxilio adicionales e igual número de aplicaciones de insecticidas para insectos
chupadores.
Cantidad de semilla para la siembra
Para una población de 120,000 plantas por hectárea en surcos a un metro de separación
sembrados a una hilera, que equivaldría a 12 plantas por metro lineal; y el porcentaje de
germinación de la semilla es de 80%, la cantidad de semilla por hectárea sería
120,000/0.80=150,000 semillas, que a su vez representan 15 semillas por metro lineal.
Forma de sembrar
Sembrar en húmedo, depositar la semilla a una profundidad de 5 a 6 centímetros. Se
recomienda un paso de rastra de picos o cultivadora Lillingston, previo a la siembra, para
romper la costra formada por el riego de presiembra.
Densidad de plantas
En surcos separados a un metro se estima que 10 a 12 plantas por metro lineal (100,000
a 120,000 plantas por hectárea) es la población ideal para obtener altos rendimientos,
buena calidad de fibra y uniformizar el resto de las prácticas culturales (control de
plagas, fertilización, riegos, aplicación de reguladores de crecimiento y defoliación). Para
el método de siembra en surcos angostos, los mejores resultados se obtienen con 115,000
a 120,000 plantas por hectárea, lo que se logra con 8 a 9 plantas por metro lineal. Una
ventaja adicional de estas densidades de población es que se evita el aclareo de plantas.
Fertilización
Los nutrientes que requieren ser adicionados son regularmente Nitrógeno, Fósforo y
ocasionalmente Potasio, azufre; y elementos como el fierro, magnesio y zinc. La dosis
recomendada de Nitrógeno está en función del rendimiento esperado, de la eficiencia del
producto y forma de aplicación. Se requiere de 22 a 29 kilogramos de nitrógeno para
producir una paca de fibra de 227 kilogramos. Se recomienda fraccionar la aplicación del
Nitrógeno en tres partes iguales; al inicio de formación de cuadros, etapa máxima de
cuadreo y floración, las cuales coinciden con el primero, segundo y tercer riego de
auxilio.
En aquellos casos en que la siembra de este cultivo la preceda un cultivo esquilmante
como sorgo o sudan forrajero, es conveniente realizar una aplicación de 50 a 60
kilogramos de Nitrógeno por hectárea en presiembra.
Se ha observado poca respuesta del algodonero al Fósforo; para mayor seguridad es
conveniente realizar un análisis de suelo a dos profundidades: 0-30 y 30-60 centímetros,
si hay menos de 21 kilogramos por hectárea de Fósforo asimilable, por el método de
Olsen, se deberán aplicar 9 kilogramos de Fósforo por cada kilogramo abajo del punto de
referencia, ya que el cultivo de algodonero requiere 10 kilogramos de Fósforo por paca
cosechada.
La aplicación del Fósforo granulado se realiza en presiembra para que pueda ser
asimilado. La otra alternativa es suministrar Fósforo líquido fraccionado en el agua de
riego, inyectado a la siembra y primer riego de auxilio.
Uso de reguladores de crecimiento
Mantiene balance en el desarrollo fructífero y vegetativo de la planta, lo que aunado a un
manejo agronómico apropiado permite que las variedades expresen al máximo su
rendimiento y calidad de fibra. El regulador de crecimiento más comúnmente usado es el
cloruro de mepiquat. Se recomienda emplearlo con base en el vigor de la planta, el cual
se determina por medio de su altura dividida entre el número de nudos, la relación
obtenida se ubica en una gráfica de desarrollo vegetativo y edad de la misma, con ello se
determina con claridad si el valor obtenido corresponde a un crecimiento normal o bien,
si en su caso procede la aplicación del producto, por tener un crecimiento exuberante.
Otro criterio para el uso del producto es cuando el entrenudo situado entre el cuarto y
quinto nudo a partir de la yema terminal es igual o superior a cinco centrímetros; este
valor, así como la dosis por utilizar se relacionan con la edad de la planta; por ser un
producto de empleo delicado, se sugiere la asesoría técnica de un especialista.
Riegos
Para obtener rendimiento y calidad de fibra de las variedades es importante tener en
cuenta las siguientes recomendaciones:
Primer riego: Su aplicación marca el inicio de los riegos que aseguran que el cultivo
alcance el rendimiento de fibra esperado. Debe aplicarse entre el inicio de cuadreo y
antes de la aparición de las primeras flores, lo que coincide con la acumulación, desde
la siembra, de 700 a 1,100 unidades de calor umbrales de 86 y 55 °F.
Riegos subsecuentes: Las evidencias experimentales indican que en ningún caso la
humedad en el suelo estará por debajo de 50% y en forma ideal se debe de dejar que se
abata sólo 35%. Si se carece de un monitoreo de humedad del suelo, ésta se puede
asegurar en forma indirecta, mediante la programación de los riegos a intervalos de 15
a 20 días. En los suelos medios donde se siembra la mayor superficie de algodonero,
con estos riegos también se cubren las etapas fenológicas de formación de cuadros,
floración, formación de bellotas y madurez de las mismas (hasta apertura de bellotas,
primeros capullos).
Último riego: En función del interés por explotar sólo la primera, o las subsecuentes
curvas de producción del cultivo, el último riego podrá aplicarse en diferentes épocas.
Si la decisión es algodonero de ciclo corto (primer ciclo de floración), el momento más
adecuado para aplicarlo es entre los 10 y 12 días posteriores a la etapa de rendimiento
fisiológico o cut out, la cual se presenta al existir de cuatro a cinco nudos sobre la última
flor blanca en primera posición. Para el caso de productores interesados en producir
algodón de ciclo largo; es decir, aprovechar el segundo ciclo de floración o “copete”, el
cultivo puede requerir de uno o dos riegos de auxilio adicionales.
Combate de malas hierbas
En el Valle de Mexicali se han identificado 27 especies de malas hierbas con mayor o
menor grado de infestación en los campos algodoneros. Las de mayor frecuencia son el
zacate salado, zacate de agua o pinto, enredadera o trompillo, zacate grama, quelite o
bledo, coquillo, tomatillo, correhuela y zacate Johnson; éstos compiten con el cultivo
durante todo el ciclo por agua, luz, nutrientes y espacio, y si no se controlan pueden
reducir la producción de algodón en hueso hasta 50%, además de dificultar la pizca. Para
evitar estas pérdidas es conveniente utilizar en forma combinada los métodos de
prevención, control mecánico, manual y químico.
Prevención: La prevención tiene como objeto evitar la introducción y establecimiento de
especies nocivas al terreno y se basa principalmente en medidas como la limpia e
inspección de equipo agrícola antes de moverlo de un área infestada a una limpia. Es
recomendable utilizar semilla certificada, usar trampas de malas hierbas en los canales
de acceso del agua de riego.
Control mecánico: En terrenos con antecedentes de infestación se sugiere sembrar a “tierra
venida”, si el suelo lo permite, después de la emergencia de las mismas pasar una
rastra o “gallinitas” para eliminar las primeras generaciones; las posteriores se
controlan mediante los métodos manual, mecánico o químico.
Control manual: La limpia manual se facilita en las siembras en surco, en camas o bordos;
se sugiere realizarla para eliminar aquellas malas hierbas que permanecen después del
cultivo mecánico y levante de surco, sobre todo cuando son muy nocivas como el
zacate Johnson, zacate choniano y el correhuela, o bien si la población de malas
hierbas es baja y no se justifica la aplicación de herbicidas.
Control químico: Para predios sembrados con variedades convencionales existen en el
mercado herbicidas específicos para maleza de hoja ancha y hoja angosta, los cuales
presentan selectividad al cultivo de algodonero. Sin embargo, deben utilizarse con
precaución ya que la selectividad no es absoluta y está en función de la dosis y la etapa
fonológica del cultivo al momento de la aplicación, las características del suelo y el
clima.
Complejo de maleza de hoja ancha y angosta: La trifluralina se aplica en presiembra e
incorpora inmediatamente con rastra, para evitar su descomposición por los rayos
ultra violeta del sol, el resto puede suministrarse en preemergencia o postemergencia
temprana dirigidas a la maleza, sin tocar el cultivo.
Maleza de hoja angosta: Las principales son los zacates de agua, salado, pinto, grama y
Johnson entre otros. Generalmente, estas malas hierbas se establecen al principio del
ciclo junto con el cultivo.
Manejo de maleza con variedades transgénicas: Las variedades transgénicas de algodonero
Roundup Flex (RF)son resistentes al herbicida glifosato. El espectro de aplicación es a
partir de las hojas cotiledonaleshasta 60 días antes de realizar la cosecha. Las dosis por
hectárea de glifosato que han mostr ado buen control de maleza fluctúan entre 1,080 y
1,800 gramos de ingrediente activo; la dosis baja corresponde a maleza anual y el alta
para perennes como correhuela. Para mayor seguridad se recomienda consultar al
técnico asesor.
Herbicidas recomendados para el control de maleza en algodonero
en el DDR 014, Río Colorado
Tipo de
maleza
Ingrediente
activo
Dosis/ha
G.I.A.
Epoca de
aplicación
34-42
Postemergencia selectiva aplicado en
banda de 40 a 50 cm, respectivamente
Hoja ancha*
Pirithiobac**
Hoja
angosta
Quizalofop-etíl
Anuales y
perennes
Pendimetalin Clethodim 1368-1584 Preemergencia
Sethoxidim
60
Postemergencia dirigida
276-552 Postemergencia selectiva
Postemergencia selectiva
Complejo de
Trifluralina
hoja ancha y angosta Fluometurón
Diurón
Oxadiazón
Acetoclor
41.2-72.1 Postemergencia temprana
960
1600
1600
500-625
480
Presiembra, incorporado con rastra
Preemergencia
y postemergencia dirigida
Preemergencia
y postemergencia dirigida
Preemergencia
y postemergencia dirigida
Preemergencia
y postemergencia dirigida
*Quelite o bledo, tomatillo, lengua de vaca, cañagria, gloria de mañana, mostaza, mostacilla.
**Presenta excelente control sobre gloria de la mañana y trompillo.
Control de plagas
Las plagas insectiles y ácaros del algodonero, cuando no se controlan, merman la
producción de algodón en hueso hasta 50%, además de afectar la calidad de la fibra y la
semilla. Las plagas del algodonero que con frecuencia requieren el uso de insecticidas y
acaricidas en el Valle de Mexicali, B.C., y la región agrícola de San Luis Río Colorado,
Sonora.
Principales plagas que atacan al algodonero
Plaga
Mosquita
blanca
Producto
Ingrediente
nombre común
activo
Endosufan
Fenpropatrin
Acefate
Cyflutrin +
Metamidofos
Bifentrina*
Acefate
Bifentrina*
Endosulfan
1050
188
525
38+900
35+525
35+525
188+525
120
Época de aplicación
El umbral de acción para iniciar las aplicaciones de insecticidas es de 10 adultos por hoja,
localizada en el quinto nudo del tallo principal de la planta, contando de la yema terminal
hacia abajo. Revisar por lo menos 30 plantas por parcela comercial
Fenpropatrin*
Endosulfan
Spiromesifen
Insectos Metamidofos
chupadores Endosulfan
Metidation
600
Chinche lygus: el umbral de acción es de 15 chinches en 100 redadas y que un tercio
1050
correspondan a ninfas en un periodo crítico que se inicia con la aparición de los primeros
300 ó 400 cuadros hasta las tres primeras semanas de producción de bellotas
Gusano
rosado
Azinfos metílico
700 a 800 Cuando el muestreo indique presencia de huevecillo blanco o una infestación de cuatro
Carbarilo
2100
larvas pequeñas en 100 bellotas
Metidation +
600+720
Parathion metílico
Gusano
bellotero
Permetrina
Cipermetrina
Fenvalerato
Deltametrina
Gusano
Aldicarb
perforador (preventivo antes
de la hoja del cierre del
cultivo;
Cipermetrina
Permetrina
Fenvalerato
Araña roja Dicofol
Propargite
Propargite +
Monocrotofo
170
100
120
13
El umbral económico de gusano bellotero es de 5 larvas pequeñas ó 15 huevecillos cafés
en 100 terminales
1,050
100
136
105
Las aspersiones de insecticidas deben realizarse cuando se capturen 40 gusanos en 100
redadas
833
Las aplicaciones de acaricidas deben efectuarse cuando existan 15 o 20 ácaros por hoja
1440 a 1800 del tercio inferior de la planta, particularmente de las cercanas al tallo principal
720+900
Gusano
peludo
Clorpirifos etil
480
En la fructificación cuando haya 15 larvas en 100 redadas y 15% del follaje dañado
Gusano
soldado
Clorpirifos
480
Durante la fructificación: cuando haya 20 o 25 larvas en 100 redadas y 15% defollaje
dañado
Gusanos Clorpirifos
trozadores
480
En focos de infestación, cuando al escarbar junto a plantitas trozadas los gusanos se
localicen fácilmente. La aplicación debe hacerse por la noche en forma terrestre
Gusano
falso
medidor
Ciperrnetrina
Metamldofos
100
600
Cuando haya de 15 a 20 larvas en 100 redadas, y 15% del follaje dañado
Trips del
cogollo
Metidation
300
Durante la postemergencia
cuando se encuentren 5 o más trips por hoja, en un periodo de más de 10 hojas
Grillos
Clorpirifos
Carbarilo
Cebos
envenenado
480
Durante la postemergencia, cuando se observen grillos y plantas dañadas
1,200 a
1,600
15 a 20 kg
Enfermedades
Las condiciones climáticas que imperan en el Valle de Mexicali favorecen el desarrollo de
hongos y bacterias causantes de las enfermedades del algodonero conocidas como
secadera, pudrición texana y pudrición de la bellota; también hay ataque de nemátodos.
Nemátodos
Los nemátodos se presentan en suelos arenosos y atacan la raíz de la planta y pueden
causar grandes pérdidas en la producción del algodonero. El método más eficaz es la
rotación de cultivos, principalmente, con sorgo para grano y especies de grano pequeños.
Defoliación
Se recomienda defoliar la planta cuando tenga entre 4 y 5 ramas fructíferas efectivas o
con carga sobre la última bellota abierta en primera posición, conocida como crackedboll,
lo cual coincidirá con un 60 a 70% de bellotas abiertas; esto se observa a los 20 días
después de la aplicación del último riego de auxilio. Los productos y dosis por hectárea
son 1,080 a 1,440 gramos de butifos ó 100 a 200 gramos de thidiazurón o bien utilizar la
mezcla de ambos productos en la dosis más baja sobre todo en algodones muy vigorosos.
Pizca
La cosecha debe realizarse de forma mecánica, cuando el cultivo este completamente en
capullo, ya que si se introduce antes la máquina pizcadora, el porcentaje de fibra se
reduce, y además habrá mayor manchado y entrelazado de la fibra, lo que demerita su
calidad.
Desvare y barbecho
Se sugiere desvarar inmediatamente después de levantar el total de la cosecha, para
posteriormente barbechar. Con esas labores se reducen en gran parte las poblaciones de
plagas que utilizan la planta y el suelo como hospederas; por ejemplo, el gusano rosado y
la mosca blanca.
José Luis Herrera Andrade
Cártamo
Introducción
El cultivo de cártamo inició en el Valle de Mexicali en el ciclo
otoño-invierno 1959-1960. Durante el invierno, esta oleaginosa es una opción debido a
su buena adaptación a las condiciones climatológicas. Actualmente se cuenta con una
creciente demanda de aceites en nuestro país; por eso el cártamo es una oleaginosa que
ofrece la oportunidad de diversificar el patrón de cultivos, ya que tiene rendimientos de
grano e índices de calidad muy aceptables para la producción de aceites.
Preparación del terreno
Una buena preparación del terreno favorece la emergencia y el desarrollo de la planta,
por lo que se sugieren las prácticas agrícolas de subsoleo, barbecho, rastreo, nivelación,
surcado y bordeo. La nivelación es de vital importancia.
Época de siembra
El periodo de siembra del cártamo es del 15 de noviembre al 31 de diciembre.
Las variedades sugeridas por INIFAP-CEMEXI, así como sus características y su contenido de
aceite y ácidos grasos se presentan a continuación:
Variedades sugeridas por inifap-cemexi
Variedad Aceite% Linoléico (%) Oléico(%)
Oléico
CIANO-OL
37.23
13.5
76.9
S-518
40
13
78.8
S-334
38.0
76.5
Linoléico
GILA
45.5
68.5
-
CIANO-LIN
41.5
79.6
11.5
Método de siembra
Suelos medios y ligeros: en estos tipos de suelo se sugiere trazar surcos de 75 a 100
centímetros de ancho. En el primer caso, sembrar a una hilera y en el segundo a dos
hileras con una separación entre 25 y 30 centímetros.
Suelos pesados: trazar camas entre 1 y 1.5 metros de ancho y sembrar a doble hilera en
seco, depositando la semilla a 2 ó 3 centímetros de profundidad. En camas con
separación de 1.5 metros, la distancia entre hileras puede ser de 60 centímetros y se
utilizará en suelos con problema de sales y fuerte agrietamiento.
Densidad de siembra
Se recomienda utilizar entre 12 y 15 kilogramos por hectárea de semilla certificada con
80% de germinación.
Riego
Los calendarios de riego por tipo de suelo pueden utilizarse de guía para decidir el
momento del riego (cuándo regar). Están sujetos a cambio en función de la fecha de
siembra, contenido de salinidad del suelo y condiciones climatológicas que prevalezcan
durante el desarrollo fenológico del cultivo. Los intervalos están dados para una fecha de
siembra de la primera quincena de diciembre. Evitar los encharcamientos ya que éstos
originan pudrición en las raíces del cártamo, particularmente en suelos pesados.
Calendario de riegos para siembra de cártamo
Número
de riego
Días a partir de la siembra
Días después del riego de germinación
Suelos medios
(tierra venida)
Suelos ligeros
(tierra venida)
Suelos pesados
(siembra en seco)
1°
65
50
55
2°
35
25
35
3°
30
20
25
4°
-
15
20
5°
-
15
-
Los valores del cuadro anterior están dados para una fecha de siembra de la primera quincena de diciembre. Evitar los encharcamientos, ya que originan pudrición en las raíces del cártamo,
particularmente, en suelos pesados.
Fertilización
Se sugiere utilizar entre 120 y 140 kilogramos de Nitrógeno por hectárea,
preferentemente la dosis mayor para los suelos pesados. Aplicar la mitad del Nitrógeno
en presiembra y el resto en el primer riego de auxilio.
Combate de maleza
Entre las malas hierbas que se presentan en el cultivo de cártamo, las más importantes
son avena silvestre, alpiste silvestre, mostacilla, alambrillo y trébol.
Al inicio del ciclo, el crecimiento del cártamo es lento y los efectos por competencia
con maleza pueden resultar severos, por lo que se sugiere mantener libre de maleza el
cultivo durante los primeros días de nacido.
Control mecánico: Se recomienda dar dos cultivos mecánicos, el primero entre los 20 ó 25
días de emergida la planta, y el segundo después del primer riego de auxilio, durante el
suelo de “punto”. La maleza que permanezca por arriba de los surcos, posterior al
cultivo, puede eliminarse manualmente.
Control químico:
Preemergencia: En campos con antecedentes de altas infestaciones de maleza en
las primeras etapas de desarrollo del cultivo, se sugiere la aplicación de
herbicidas en preemergencia. Para el control de chual, quelite, avena, alpiste
silvestre y cola de zorra se sugiere usar entre 960 y 1,440 gramos de ingrediente
activo de trifluralina, o bien, 5,040 a 6,720 gramos de ingrediente activo (g.i.a.)
de eptc por hectárea. Estos productos deben ser incorporados mecánicamente ya
que tienen alta volatilidad, en particular el eptc.
Postemergencia: Para el control específico de gramíneas como avena y alpiste
silvestre, cola de zorra y otros, se recomienda la aplicación de los herbicidas
sethoxydim en dosis de 276 g.i.a. por hectárea o fluazifop en dosis de 187.5 g.i.a.
por hectárea. Dichos productos son selectivos para cártamo. Se asperjan sobre el
follaje en postemergencia cuando los zacates están en el inicio de
amacollamiento.
Control de plagas
Pulgon myzus: Se presenta desde los primeros meses del año hasta la primavera, época en
la que el cártamo está en crecimiento. Este insecto causa amarillamiento y
arrugamiento de las hojas, así como disminución en el desarrollo de la planta; pues se
alimenta succionando la savia de las partes tiernas, como las yemas de crecimiento.
Entre los productos y dosis por hectárea que experimentalmente han resultado eficaces
para su control, se puede mencionar el metamidofos en dosis de 600 g.i.a. por
hectárea.
Chinche lygus: Es una plaga de poca importancia en el cultivo del cártamo. Se ha
observado que infestaciones de 30 chinches (incluyendo ninfas) por redada, no
afectan los rendimientos.
Enfermedades
Chahuixtle o roya: Puede presentarse tanto en plantas jóvenes como adultas. En esta
región sólo se ha detectado en la etapa adulta. El síntoma más común, es la presencia
de pústulas color café en las hojas. Los daños que causa esta enfermedad no son de
importancia económica. Considerando que esta enfermedad no reduce los
rendimientos, se recomienda no utilizar productos químicos.
Pudrición de raíz: Esta enfermedad se presenta cuando se producen encharcamientos en el
terreno, ocasionados por una nivelación incorrecta de éste o cuando no se drena
oportunamente el agua de riego; esta situación es más frecuente en suelos pesados. La
enfermedad puede presentarse en cualquier etapa de desarrollo del cultivo,
particularmente en la de fructificación.
Cosecha
La trilla debe realizarse cuando la apariencia de la planta es completamente seca y la
semilla se desprende fácilmente del capítulo, pues su contenido de humedad es alrededor
del 68%.
La máquina trilladora deberá realizar la cosecha a una velocidad de cilindro de 700 a
915 revoluciones por minuto, reduciéndola cuando el grano este mas seco.
Para mayor información sobre el manejo de herbicidas y combate de maleza consulte a
su técnico o visite el Campo Experimental Valle de Mexicali, B.C.
Eva Ávila Casillas
Cítricos
Introducción
Los cítricos, en el Valle de Mexicali, cubren una superficie de alrededor de 400 hectáreas:
53% naranja, 25% limón amarillo y la mandarina junto con la toronja suman 22%. La
fruta se vende, principalmente, a nivel local, aunque en ocasiones se exporta hacia
Estados Unidos, sobre todo el limón. Estas especies contribuyen a la diversificación de los
cultivos establecidos y generan empleo y divisas para la gente del campo. A pesar de
requerir más agua que los cultivos de trigo y algodón, tienen mayor retribución
económica por metro cúbico de agua utilizada y es factible la instalación de sistemas de
riego presurizado.
La escasa información a nivel local sobre el manejo agronómico adecuado para estos
cultivos, limita su productividad y reduce la longevidad o vida útil de las huertas; y los
problemas detectados afectan de forma considerable la calidad y la producción.
Entre éstos se incluyen: las huertas cerradas (con escasa producción y localizadas en la
porción superior del árbol, lo que encarece la cosecha); deficiencias nutrimentales de
Nitrógeno y micro-elementos como Manganeso, Hierro, Zinc y Cobre; muerte y secadera
de plantas (sobre todo en manchones dentro de la huerta); crecimiento y desarrollo débil
de los árboles, por estar en suelos inapropiados (salinidad o drenaje deficiente); así como,
fruta de baja calidad por ataque de plagas y enfermedades.
Selección del terreno
Suelos de texturas franco arenosa, o franco arcillosa, con buen drenaje y aireación. Los
suelos de textura pesada o arcillosa que tienen limitaciones de drenaje, no son aptos para
los cítricos, ya que están asociados con salinidad, sodicidad, compactación, problemas de
crecimiento y proliferación de enfermedades radicales. Contenidos de salinidad
superiores a los 3.2 mmhos/cm2 pueden reducir el rendimiento en 25%. El pH más
apropiado para el desarrollo de los cítricos está entre 5.5 y 6.5.
Preparación del terreno
Las prácticas culturales deben incluir: un paso de subsuelo profundo, un barbecho a
mínimo 25 centímetros de profundidad y los pasos de rastra suficientes para dejar bien
mullido el terreno. La nivelación con equipos especializados es indispensable por el alto
costo de las inversiones. Si se pretende adicionar materia orgánica en forma de estiércol
de bovino, gallinaza o composta, ésta deberá ser previamente sometida a un tratamiento
de solarización (cubrimiento con plástico negro), con la intención de eliminar semillas
de maleza y organismos dañinos (hongos y plagas). Posteriormente se incorpora al suelo
durante el otoño, previo al establecimiento de la huerta. Las cantidades por aplicar no
podrán ser inferiores a 5.0 toneladas por hectárea para lograr una buena respuesta.
Marco de plantación y distancia entre árboles
Los marcos de plantación sugeridos para el establecimiento de árboles de cítricos son el
rectangular y el cuadrado; ya que permiten el laboreo de la huerta en ambos sentidos.
Bajo similares condiciones, los árboles de limones y toronjas crecen más grandes que los
naranjos, los cuales, a su vez, superan el porte de las mandarinas.
Distancias de plantación sugeridas para cítricos
Especie Distancia (m) Número de árboles por hectárea
cítrica Máxima Mínima
Máxima
Mínima
Naranja
8x6
8x4
312
208
Limón
8x8
7x5
286
156
Mandarina
8x6
7x5
286
208
Toronja
9x8
8x6
208
139
Variedades
La elección de la variedad del cítrico representa una de las decisiones más importantes,
de mayor incertidumbre y responsabilidad.
Variedades de naranja: Se recomiendan, preferentemente, los tipos Valencia (Olinda,
Midnihgt, y Cutter) y los Navel (Washington Navel y Dream Navel). Las naranjas tipo
valencia son preferidas para extracción de jugo, y las Navel para consumo en fresco.
Variedades de limón: Se recomiendan limones tipo americano o tipo italiano como Eureka
y Lisboa, que se pueden cortar tanto en estado verde como maduro (amarillo).
Variedades de toronja: Toronja Marsh es una variedad de pulpa blanca; toronja río red, de
pulpa roja.
Variedades e híbridos de mandarina: Entre de las variedades de mandarina se recomiendan
Clementina, Dancy, Fina Sodea y Oroval, mientras que de los híbridos de mandarina
se recomiendan los Tangelos Minneola y Orlando.
Plantación y primeros cuidados
Los primeros tres años deben dedicarse a desarrollar un árbol vigoroso, con ramas fuertes.
Algunos frutos pueden desarrollarse durante la segunda y tercera estación de
crecimiento, pero la calidad no es buena aún. Los árboles empiezan a producir
rendimientos significativos y con calidad a partir de la cuarta estación de crecimiento.
Época de plantación
Plantar de mediados de septiembre a fines de noviembre, previo a la presencia de
temperaturas bajas. Las plantaciones durante el otoño permiten que el árbol se establezca
bien antes de la presencia de temperaturas muy cálidas. La plantación al inicio de la
primavera, sólo es sugerida de febrero a marzo. Plantaciones mas allá de ésta fecha,
exponen a los arbolitos a las altas temperaturas del verano, lo que limita su crecimiento.
Selección de material
Se recomienda privilegiar los arbolitos certificados, libres de plagas y enfermedades, e
injertados sobre porta-injertos tolerantes a enfermedades. Deben ser de mínimo un metro
de altura y un grosor de tallo no menor de 1.5 centímetros de diámetro, con ramitas bien
formadas y distribuidas adecuadamente alrededor del tallos.
Apertura de cepas
Las cepas (hoyos) se realizan a 50 centímetros de profundidad y entre 30 y 40
centímetros de ancho. La tierra de arriba debe ponerse en el fondo del hoyo al momento
de plantar el arbolito, pues ésta tiene un mejor nivel nutrimental, y se favorece el arraigo
del arbolito. Al colocar el individuo en la cepa, la unión del injerto debe quedar por
arriba del nivel del suelo (de 10 a 20 centímetros), para no perder las características
sobresalientes de los porta-injertos utilizados.
Riegos y fertilización
Son preferibles riegos frecuentes y con láminas pequeñas. Regar cada 10 ó 15 días
permitirá tener arbolitos vigorosos. No se recomienda fertilizar al plantar. Esta práctica se
sugiere iniciarla hasta que el arbolito muestra indicios de haber prendido e inicie la
emisión de follaje nuevo.
Las aplicaciones de fertilizante en huertas en formación (árboles jóvenes) pueden
concluir en el mes de octubre.
Combate de maleza
Cuando los arbolitos son pequeños son muy sensibles a sufrir la competencia con maleza,
especialmente la de tipo perenne como: coquillo, grama y zacate Johnson; mantener
limpia la huerta mientras los arbolitos son pequeños, redundara en árboles vigorosos,
aptos para competir con la maleza. Deshierbes tanto manuales como mecánicos, así
como la aplicación de herbicidas deben ser labores cotidianas cuando los arbolitos son
pequeños.
Dosis de fertilizante Triple 17
Años desde
la plantación
Número de
aplicaciones por año
g/árbol/aplicación
Primero
5 - 6 (2)
150 - 300
Segundo
4-5
300 - 600
Tercero
4-5
400 - 700
Cuarto
3-4
1,000 - 1,200
Quinto
3-4
1,200 - 1,500
Los valores más pequeños refieren la primera aplicación del año, incrementando gradualmente la dosis hasta alcanzar el valor mayor.
Poda de los árboles de cítricos
Al igual que en cualquier otro árbol frutal, en cítricos la acción de podar se destina a
eliminar ramas completas y despuntar las ramas que se dejan, con el fin de incidir en su
forma, desarrollo y producción.
Los principales objetivos son: producir árboles vigorosos, bien formados y sanos;
obtener una distribución equilibrada de fruta de buena calidad en todo el árbol; facilitar
los trabajos en el árbol (aspersiones, cosecha) y en el suelo (aplicación de fertilizantes,
combate de maleza, pasos de maquinaria, etcétera); y conseguir que la producción sea
precoz y uniforme todos los años. No se debe menospreciar el hecho de que al remover
parte del follaje de un árbol, se reduce paralelamente su habilidad para producir fruta.
Por lo que siempre, deberán preferirse las podas ligeras a las severas.
Época de poda
La mejor época de poda es al inicio de la primavera (febrero a marzo) cuando han pasado
los peligros de helada y antes de que el árbol inicie un nuevo ciclo de crecimiento. La
presencia de fruta madura en los árboles restringe el tiempo en que éstos pueden ser
podados. Cuando esto acontece, la poda se retrasa hasta que se haya recolectado la mayor
cantidad de fruta, lo cual puede coincidir con el inicio del verano.
Tipos de podas
Poda de formación: Empieza con el trasplante del árbol a su sitio definitivo. Esta poda
tiene por objeto ayudar a la planta a formar una estructura básica de las primeras
ramas, de manera que se constituya una copa equilibrada y repartida.
Generalmente, se inicia con la eliminación del brote terminal de la planta, hecho que
trae como consecuencia inmediata la detención temporal del desarrollo vertical y la
aparición y desarrollo de ramas laterales.
Poda de producción: Se realiza con el propósito de equilibrar el desarrollo vegetativo y la
producción. Siempre deberá contarse con un número adecuado de hojas por cada
fruto. En árboles jóvenes, la poda durante los primeros seis años se limitará a remover,
ocasionalmente, ramas indeseables, que pueden interferir con el desarrollo de una
fuerte estructura de ramas principales. Ramas bien espaciadas se deben dejar crecer
siguiendo su propio patrón de crecimiento. Brotes laterales que presenten tendencia a
dirigirse hacia el centro del árbol deben eliminarse junto con aquellas ramas con
ángulos débiles, las que son sujetas a quebrarse. Si se practica una poda regular o
revisiones cada seis meses, será más fácil quitar las ramas cuando aún son pequeñas y
fáciles de cortar.
Dado a que los árboles de limón son más abiertos e irregulares en sus hábitos de
crecimiento, requieren más poda que otros cítricos. El limón tiende a producir brotes
con muchas espinas, que son mecánicamente débiles y fáciles de quebrar. Estos brotes
deben despuntarse hasta el sitio donde nazca una rama lateral. De igual manera,
tiende a producir desde el centro ramas fuertes con crecimientos horizontales y en
todas direcciones. Sin poda, esas ramas pronto cubren el interior del árbol con ramas entrecruzadas.
Los árboles de limón requieren un cuidado y una frecuente atención al desarrollo de
una estructura fuerte.
Para todos los casos, deberán preferirse las podas ligeras a las severas. En individuos
adultos, los árboles productivos de naranja o toronja, generalmente, necesitan poca
poda, ya que una poda severa reduce la producción. Para huertas productivas, la labor
de poda va encaminada a mejorar las operaciones del huerto, como son la aplicación
de agroquímicos, movimiento de tractores y equipo para la recolección. El decapitado
de la parte superior de los árboles favorece la penetración de luz y origina brotes con
mejor capacidad para fructificar.
De igual manera, contar con árboles más bajos ayuda en el control de plagas y
enfermedades y facilita la cosecha.
Poda de rejuvenecimiento: A medida que los árboles de cítricos se hacen viejos, el vigor y el
rendimiento caen a un punto en el que la producción no es económica.
Ocasionalmente, la poda se realiza para forzar al árbol a producir madera nueva y
productiva.
La poda de rejuvenecimiento varía desde un moderado aclareo de la copa del árbol,
hasta un completo rebaje del mismo. La práctica de rebaje implica la eliminación de
todo el follaje y madera que tenga un grosor menor a 2.5 centímetros, dejando sólo las
ramas principales y las adyacentes.
La remoción parcial de madera productiva puede llevarse a cabo también con la
remoción de ramas de madera vieja y débil, que contribuyen muy poco en la
fabricación de fotosíntatos o en la producción de fruta.
La eliminación de este tipo de ramas favorece la penetración de luz dentro del árbol,
promueve la brotación de yemas y favorece la producción de nuevos crecimientos.
Manejo del agua de riego en cítricos
El agua es fundamental para los árboles de cítricos, así como es para cualquier planta,
porque es una parte integral de las reacciones bioquímicas que ocurren en su interior. El
agua es importante porque mueve los nutrimentos y otras sustancias a través del árbol.
También ayuda a mantener la temperatura de la planta, a través de la transpiración.
Finalmente, el agua contribuye a mantener la hoja y los frutos turgentes. El primer signo
notable de estrés por falta de agua es que las hojas se tornan de un verde oscuro y
empiezan enrollarse de las puntas hacia arriba. Responder a la pregunta de cuánta agua
usa un árbol de cítricos es un poco complicado, ya que la respuesta depende de la edad,
tamaño, especie de cítrico en cuestión, el clima y el tipo de suelo.
Un árbol de cítricos maduro usa alrededor de 1.53 metros de lámina de agua por año.
En función del tamaño del árbol, éstos pueden corresponder más o menos a 64 litros de
agua por día en el invierno y a 513 litros de agua por día en el verano.
Las toronjas o limones utilizan 20% más agua que la naranja, mientras que las
mandarinas, utilizan alrededor de 10% menos. Las huertas plantadas con pastos
(cubiertas vegetales) o con problemas de presencia de maleza perenne (coquillo, grama)
deben recibir alrededor de 20% más de agua.
Los intervalos de riego sugeridos son:
De diciembre a febrero: 21 a 30 días.
De marzo a abril: de 14 a 21 días.
De mayo a junio: 14 días.
De julio a septiembre: de 10 a 14 días.
De octubre a noviembre: de 14 a 21 días.
Estos intervalos son sólo una guía y deben ser modificados en función del tipo de suelo,
salinidad, clima o método de riego empleado.
Fertilización
Los suelos del Valle de Mexicali, caracterizados por sus bajos contenidos de materia
orgánica, necesitan grandes aportaciones de fertilizantes, especialmente de Nitrógeno.
Incluso, la fertilización puede variar en función de la manera de regar.
Cuando se riegue por inundación (melgas), la adición de fertilizantes se hace tres o
cuatro veces, mientras que en riego localizado (goteo, micro-aspersión), es conveniente
repartir las unidades de fertilizante a lo largo del año y en todos los riegos, especialmente
durante las épocas de mayor demanda.
Otro de los factores que determinan las cantidades de fertilizantes por aplicar es el
marco de plantación de la huerta: a mayor número de árboles establecidos por hectárea el
consumo de fertilizantes aumenta. Los elementos minerales fundamentales en la
nutrición de los cítricos son Nitrógeno, Potasio, Fósforo, Calcio y Magnesio; aunque en
algunas variedades se notan con facilidad las deficiencias de micro elementos como Zinc,
Manganeso, Cobre y Hierro.
Épocas de aplicación
Los nutrimentos requeridos por los árboles de cítricos deben ser suministrados en las
etapas de mayor demanda, así como de mejor respuesta. El Nitrógeno se aplica,
preferentemente, cuatro veces al año; así como en las etapas de formación de
inflorescencias, floración y desarrollo del fruto, que acontece en febrero, marzo y junio.
Otra pequeña aportación de Nitrógeno puede hacerse al inicio de la maduración, en
septiembre y octubre.
De los requerimientos totales, 70% se aplicará de febrero a junio, y se reserva 30% para
fines del verano y principios del otoño. Aunque las deficiencias de Fósforo no son
comunes en el Valle de Mexicali, si existe necesidad de suministrarlo, se sugiere que sea
al inicio del ciclo (marzo). Para suelos arenosos con alta velocidad de infiltración, la dosis
total del Fósforo puede fraccionarse en dos partes: 50% al inicio del ciclo (marzo) y el
otro 50% durante la mitad del desarrollo de los frutos (mayo-junio).
Para huertas que requieran fertilizarse con Potasio, se llevan a cabo dos aplicaciones de
50% cada una: al inicio del desarrollo del fruto (mayo) y la otra al comenzar el proceso
de maduración (septiembre-octubre).
Las aplicaciones para corregir deficiencias de micro-elementos coinciden con los tres
periodos de brotación de los cítricos: febrero, junio y septiembre. Las dosis corresponden
con las propuestas en las etiquetas de los fabricantes.
Dosis
Dosis de N-P-K sugeridas para huertas de naranja
Edad de la plantación (años)
Nitrógeno
Fósforo
Potasio
g/árbol
kg/ha
g/árbol
kg/ha
g/árbol
kg/ha
5-6
240-320
96-128
50-60
20-24
100-120
40-48
7-8
410-500
164-200
80-100
32-40
160-200
64-80
9-10
550-600
220-240
120-150
48-60
250-300
100-120
> 10
600-800
240-320
150-200
60-80
300-400
120-160
Las dosis deberán ajustarse en función de los análisis foliares. Asimismo, se destinarán cantidades 10% más bajas que las anotadas en el cuadro para huertas de mandarina y hasta 20% más para
huertas de toronja y limón.
Control de maleza
La presencia y el desarrollo de la maleza dentro de las huertas de cítricos ocasiona
diversos problemas: compiten por agua, luz y nutrientes, principalmente con árboles
jóvenes; al cubrir las plantas pueden interferir en el combate de plagas y enfermedades, y
pueden también hospedar a insectos que afectan a los cítricos. Una forma eficiente de
hacer un buen programa de control de hierbas, es detectar la fuente de infestación de
maleza y destruirla antes de que se diseminen las semillas. El combate de la maleza
puede llevarse a cabo de diversas formas: control manual, mecánico y químico o la
combinación juiciosa de ellos. El control manual mayormente se realiza en huertas
pequeñas; en huertas grandes generalmente es complemento a un programa de control
mecánico y químico. La época más importante para el control de la maleza debe abarcar
desde marzo a octubre, ya que en este tiempo es cuando ocasionan los mayores daños.
Plagas de los cítricos
Las condiciones cálidas y secas del Valle de Mexicali no permiten la presencia y el
desarrollo de una gran cantidad de insectos plaga. A continuación se hace una breve
descripción de aquellas que son más importantes.
Trips: Los trips representan la principal plaga de cítricos en el Valle de Mexicali,
especialmente en el limón. Dañan a las frutas cítricas por medio del ataque a las
yemas, a brotes nuevos y a frutos pequeños en desarrollo. Cuando atacan los brotes
tiernos, el crecimiento de los árboles jóvenes resulta retardado; y el follaje nuevo,
retorcido. Cuando la fruta es atacada, su piel presenta cicatrices con un anillo definido
alrededor del extremo del tallo, en donde los trips se alimentan debajo de los sépalos,
mientras la fruta está pequeña. Se sugiere tomar una muestra de 20 frutos en el huerto.
La cantidad de frutos tomados debe ajustarse acorde al tamaño del huerto y la
experiencia del personal que realiza la labor. Los tratamientos se inician cuando en la
raspadura de dos a cuatro frutos de la muestra, los trips son evidentes. Un fruto es
contabilizado como infestado si tiene uno o mas trips presentes.
Escama roja de California: Infesta todas las partes del árbol: hojas, frutos y ramitas. El daño
es resultado de la alimentación del insecto; el cual, a la vez que succiona la sabia de la
planta, inyecta sustancias tóxicas por medio de sus partes bucales. Los árboles
infestados tienen las hojas amarillas o manchas de este color; en la fruta aparecen
manchas amarillas. La corteza entera de las ramitas, así como los frutos, pueden estar
cubiertos por escamas redondas o casi redondas, notoriamente rojizas. La presencia de
10 escamas por fruta en 10% de las muestreadas, es el umbral para la aplicación de
insecticida. Se sugieren de dos a tres aplicaciones al año: la primera durante abril, la
segunda en julio y una tercera, de ser necesaria, en el mes de septiembre.
Esta plaga está siendo controlada biológicamente en otras zonas productoras de
México con una avispita parasitoide, por lo cual se recomienda no perder de vista esta
posibilidad para las huertas del Valle de Mexicali.
Minador de la cáscara de los cítricos: Frecuentemente se le considera una plaga secundaria
de los cítricos; sin embargo, sus daños llegan a ser de importancia. Este insecto parece
tener una extensa lista de hospederas, y en adición a los cítricos, se ha observado
infestando plantas de berenjena, sauce, vid y algodón. La larva sale del huevo (puesto
sobre los frutos susceptibles) e inmediatamente taladra a través de la epidermis de la
cáscara. Por lo que nunca está expuesta. Mina extensamente la cáscara de la fruta
mientras ésta se desarrolla. En la maduración, rompe la mina y baja a lo largo del
tronco; llega a afectar las ramas principales de algunas variedades.
De la pupa emerge el adulto el cual es una palomilla de tamaño semejante a un
mosquito. El adulto descansará en la sombra durante el día y empezará su dispersión
durante la oscuridad. Este insecto parece preferir los frutos grandes para realizar la
postura de los huevos, por lo que la toronja es preferida a la naranja Navel y éstas a su
vez son preferidas a los limones. La observación de 25 frutos por árbol y 10 árboles por
lote en la parte baja de la copa del árbol, provee la mejor técnica para determinar los
niveles de infestación del minador de la cáscara de los cítricos. Para su combate se
sugieren insecticidas con acción sobre palomillas.
Combate de enfermedades
Los cítricos son atacados por microorganismos entre los que se incluyen bacterias,
hongos, virus, nemátodos y micoplasmas, que ocasionan enfermedades infecciosas.
Afortunadamente las condiciones secas y las temperaturas extremas que se presentan en
el Valle de Mexicali restringen el desarrollo de muchos patógenos.
Sugerencias para el combate de plagas
Plaga
Trips
Escama roja
de California
Insecticida, depredador o
parasitoide sugeridos
Dosis/ha
Observaciones
Ácaro depredador o chinche
pirata
Ácaro: 2,000 a
Realice las aplicaciones al inicio de la temporada y durante el
20,000/ha
otoño
Chinche: 2,000 a
8,000/ha.
Dimetoato
1 a 1.25 l/
1,000 litros de
agua
Metil oxidemeton
1 a 1.25 l/
1,000 litros de
agua
Avispita parasitoide
5,000 a 100,000 Fraccionadas de tres a cuatro aplicaciones al año, iniciando en
individuos/ha
laprimavera y continuando en el otoño
Clorpirifos
0.25 a 0.375/
Verificar número de díasentre, última aplicación y cosecha
400 litros de agua
Carbaril
0.5 a 0.6 kg/400 No aplicar en floración, puede causar raleo de flores. Se usa en
litros de agua
todas las variedades
Metidation
0.5 kg/
No aplicar durante floración. Se usa en todas las variedades. Es
100 litros de agua muy
Seguir recomendaciones del fabricante del producto y verificar
número de días entre última aplicación y cosecha
persistente
Azinfos metil
2.0 a 2.5 l/1,000 Aplique soluciones al 20%.
litros de agua
Piryproxifen
0.5 a 1.0 l/1,000 Aplicar en altas poblaciones y una sola vez al año
litros de agua
Nota: para todas las plagas evite usar un mismo insecticida, ya que se incrementan las posibilidades de adquirir resistencia por los insectos.
Gomosis: Ésta es la principal enfermedad de los cítricos en el Valle de Mexicali, debido a
que algunas de las primeras plantaciones se hicieron sobre suelos arcillosos y mal
drenados, así como por el hecho de haber usado porta-injertos no tolerantes al alto
humedecimiento. La enfermedad que es causada por hongos del suelo y en casos muy
avanzados de la enfermedad, los árboles se pueden colapsar después de un riego y
sobre todo si las condiciones climáticas son altas en temperatura y humedad relativa
(temperaturas superiores a los 36 grados y humedades relativas superiores al 60%). La
gomosis puede aparecer en la base del tronco, cerca de la zona de unión del injerto o
bien a lo largo del tronco, llegando a afectar a las ramas principales de algunas
variedades. El método de lucha más eficaz es una buena combinación de medidas
preventivas junto al control químico. Las medidas preventivas para huertas que fueron
establecidas sobre suelos de tipo pesado o arcilloso, las recomendaciones preventivas
siguientes deberán ser consideradas aun sin presencia de la enfermedad. Se debe evitar
encharcamientos de agua mediante un buen drenaje y nivelación. Si el riego es por
inundación rodear los troncos con tierra, para que el tronco no tenga contacto directo
con el agua. Ahora que si el riego es por goteo, hay que separar los goteros del tronco
para evitar una excesiva humedad sobre el mismo. Evitar producir lesiones en el tronco
con el uso de maquinaria y aperos manuales (azadones, palas). También debe de
evitarse la compactación del terreno, pues dificulta el crecimiento de las raíces. No
aportar materia orgánica en descomposición junto a la base del tronco, de igual
manera evitar acumular ramas, troncos y hojas. Evitar periodos de sequía seguidos de
riegos abundantes. Moderar la fertilización nitrogenada.
Control químico. Los fungicidas contra gomosis son productos cuya acción es
exoterápica; si el producto se pone en su contacto, actúan exteriormente
impidiendo la germinación de los órganos de reproducción del hongo. Por eso,
hay que aplicar el fungicida en toda la zona afectada; donde no llegue el
producto, el hongo sigue atacando.
Procedimiento a seguir en el control de Gomosis
Primer tratamiento: Se realizará después de la primera brotación de
primavera, a los 10-20 días de su inicio (acontece durante la primera
quincena de marzo); realizando un tratamiento foliar con fosetil-al 35% +
mancozeb 35%, presentado como polvo humedecible, a una dosis de 0.300.50% o fosetil-al 80%, granulado dispersable en agua a una dosis de 0.250.30%. Si el producto utilizado es metalaxil 25% como polvo humedecible,
se aplicará a una dosis de 0.08 a 0.12% repartida por la zona de goteo de
los árboles afectados en la misma época.
Segundo tratamiento: Mismos productos y dosis durante la brotación de
verano.
Tercer tratamiento: Se lleva a cabo con los mismo productos y dosis a los
dos o tres meses del tratamiento anterior (septiembre-octubre), en fase
avanzada de la enfermedad, cuando las áreas necróticas están bien
desarrolladas. Además, se debe actuar sobre los chancros de las siguientes
formas: pulverizar las áreas dañadas con una suspensión concentrada que
contenga alguno de los productos citados como de acción externa; limpiar
y raspar la zona de exudación gomosa afectada por el hongo y a
continuación pulverizar; con un objeto afilado se eliminarán los tejidos
afectados de la corteza sin dañar la madera, hasta que se llegue a ver una
línea verde de corteza, señal de que hemos llegado a la zona sana y
enseguida, se llevará a cabo la pulverización.
Cosecha
Los cítricos deben cosecharse con mucho cuidado, para evitar golpes, heridas y otros
daños que afecten la calidad y conservación. No es recomendable trepar a los árboles, ni
coger las frutas con ganchos; para ello hay que disponer de una escalera (de preferencia
de aluminio, por su poco peso). Es preferible cortar la fruta a mano, cuando está seca del
rocío o del agua de lluvia.
Limón: La cosecha tiene lugar cuando el contenido mínimo de jugo por volumen es de
28 a 30%. Los limones cosechados en estado verde oscuro tienen la mayor vida de
post-cosecha, mientras que los cosechados completamente amarillos deben ser
comercializados más rápido. Para la determinación del contenido de jugo se aplica el
siguiente procedimiento: tomar de 10 a 20 limones, pesarlos enteros, luego exprimirlos
y volver a pesar. Estos valores se usan en la siguiente relación: al valor de limones
enteros restar el peso de los limones exprimidos, divida entre el peso de los limones
enteros y multiplicar por 100. El valor obtenido representará el contenido de jugo. La
recolección es manual y debe efectuarse con bolsa especial de recolección, evitando el
tirón y cortando con tijera. Se lleva a cabo en ausencia de rocío o niebla. Los envases
empleados son cajas de plástico con capacidad de 18 a 20 kilogramos, es deseable
utilizar protecciones de goma espuma y volcado cuidadoso. Pueden usarse también
cajas grandes de plástico (bin’s) con capacidad de aproximadamente 400 kilogramos.
Los envases definitivos se cargan en camiones ventilados y se trasladan al almacén,
procurando evitar daños mecánicos durante el transporte.
Híbridos de mandarina: La cosecha se realiza cuando el color amarillo, anaranjado o rojo
cubre 75% de la superficie de la fruta. El mandarino presenta una caída precosecha
bastante acentuada, por lo que no se puede mantener mucho tiempo la fruta en el
árbol. Se suelen presentar problemas de agrietamiento del fruto debido a las lluvias;
éste es otro factor que limita el periodo de recolección.
Naranja: La cosecha tiene lugar cuando el color amarillo-naranja está en al menos 25%
de la superficie del fruto. La recolección es manual y debe realizarse con bolsas
especiales para cosecha, evitando el tirón.
César Valenzuela Solano
Hortalizas
Introducción
En el Valle de Mexicali, las hortalizas representan una importante fuente de divisas y
empleos para agricultores, jornaleros, maquiladores y comercializadores. Entre los más
importantes tipos de hortaliza se encuentran: cebollín, espárrago, rábano, lechuga, ajo,
cebolla bola, melón, apio, sandía, zanahoria, cilantro, calabacita, col, tomatillo, rapini,
espinaca, betabel, leek, entre otras. Las recomendaciones para el apartado de las
hortalizas se hacen en forma general; sin embargo, hay particularidades en el manejo
agronómico de cada cultivo que se deben consultar con su técnico agrícola.
En el municipio de San Luis Río Colorado, Sonora, las hortalizas también representan
importantes fuentes de divisas y empleo. Se reportaron como cultivos cíclicos y perennes
del ciclo agrícola 2008-2009 un total de 19 tipos de hortalizas sobre una superficie
sembrada de 3,100 hectáreas, distribuyéndose 14 tipos en el ciclo otoño invierno. Para el
ciclo primavera verano, fueron 5 tipos de hortalizas; por último, en cultivos perennes
solamente se reporta al espárrago. En general, en orden de importancia por mayor
superficie en hortalizas es el cebollín, precedida por espárrago, según datos de la sagarpa
(2010).
Preparación del terreno
La mayoría de las hortalizas tienen semillas muy pequeñas, por lo tanto requieren
condiciones de temperatura, humedad y suelo muy específicas para obtener germinación
superior a 90%. En siembra directa deberá realizarse subsuelo para aquellos suelos muy
compactados; o barbechar con uno o dos pasos de rastra a una profundidad entre 30 y 40
centímetros, hasta desmoronar todo el suelo superficial dependiendo de las
características físicas del suelo. Es recomendable realizar el barbecho inmediatamente
después de la cosecha anterior, para aprovechar la poca humedad y lograr mejor
preparación del terreno. Posteriormente, es conveniente nivelar el terreno para facilitar
las prácticas culturales de manejo agronómico, riego y cosecha. Por último, antes de
iniciar la siembra o trasplante, se deben hacer surcos o camas de acuerdo a las distancias
por hortaliza.
Variedades
Las variedades en hortalizas, a diferencia de los cultivos básicos, frutales, flores y especies
tienen un gran margen de variaciones en la disponibilidad y presentación de nuevos
materiales comerciales; de tal manera que, para la elección del material adecuado de la
especie a sembrar, se recomienda acudir a un técnico o al campo experimental. En la
época de siembra, se recomienda distanciamiento entre plantas y cantidad de semilla por
hectárea para cada cultivo.
Método y densidad de siembra
La mayoría de las hortalizas se caracterizan por tener semilla pequeña, por lo tanto, es
necesario brindar las condiciones más favorables, tanto en el semillero, como en la
siembra directa en campo; debiendo tener mucho cuidado al depositar la semilla a la
profundidad y precisión correcta. Para lograr el mayor éxito en la germinación, es
necesario tomar en cuenta que la semilla sea de la variedad adecuada, y que esté libre de
impurezas, plagas, enfermedades o daños físicos; debe ser de cosecha reciente, no mayor
a tres años.
Semillero
El semillero o almacigo se define como el área de terreno preparado o espacio protegido
de las condiciones agroclimáticas adversas para el crecimiento y desarrollo de las
plántulas; son consideradas áreas acondicionadas especialmente para colocar las semillas
con la finalidad de promover su germinación hasta que las plántulas estén listas para el
trasplante. El semillero es el lugar adecuado donde la semilla iniciará su primera fase de
desarrollo, posteriormente la planta crecerá y será trasplantada al terreno o área de
producción. Para el semillero en ambiente protegido es recomendable utilizar charolas de
acuerdo con las necesidades de crecimiento y desarrollo radical y aéreo de cada cultivo.
El sustrato deberá ser inerte, o esterilizado si fuera orgánico, para evitar problemas
fitopatológicos en los primeros estadios de desarrollo de las plántulas.
Trasplante
Es el conjunto de procesos por el cual las plántulas son extraídas del semillero y llevadas
al área de producción, donde se colocarán en forma definitiva. Una de las funciones es
obtener cosechas más tempranas y vender a precios más competitivos en el mercado.
Las plántulas están listas para el trasplante según cada especie; como indicadores
generales, las plántulas deben ser vigorosas, entre 10 y 15 centímetros de altura, color
verde intenso, tallos gruesos y buen desarrollo de raíces que permita extraerlas con el
cepellón completo. El día anterior del trasplante, las plántulas deberán hidratarse; para
que cuando sean extraídas del semillero y llevadas al área de producción presenten
menos estrés o marchitamiento pos-trasplante, ocasionado por el cambio en condiciones
ambientales.
Aclareo
El aclareo es una práctica que consiste en eliminar plantas para mantener la densidad
establecida, especialmente en siembras directas, porque algunas veces las hortalizas son
sembradas a “chorrillo”; entonces, después de la emergencia, deben realizarse aclareos
para dejar la población óptima a las distancias específicas de cada cultivo. El aclareo se
realiza con la segunda o tercer hoja verdadera en la mayoría de las hortalizas que son
sembradas en este sistema.
Riego
El método de riego es muy variable en relación con las necesidades y el nivel de inversión
del área de producción. Para la siembra en seco, el primer riego deberá ser por
“trasporo”; es decir, se humedece la parte más baja del surco y por capilaridad la
humedad inferior asciende hasta lo más alto del surco; procurando que sólo la humedad
llegue al área donde está la semilla para evitar que se forme el endurecimiento de la capa
de suelo superficial y dificulte posteriormente la germinación. Los riegos subsecuentes
deberán aplicarse oportunamente para evitar castigar las plantas en las primeras etapas
de desarrollo por falta o exceso de humedad, que afectaran el rendimiento del cultivo.
Para las hortalizas, se recomiendan los riegos localizados (goteo y aspersión); además, es
primordial llevar a cabo un continuo monitoreo de la humedad del suelo.
Fertilización
Las hortalizas requieren fertilización constante, pero no en exceso para así obtener el
mayor potencial de rendimiento. Entre los elementos de mayor necesidad en relación con
cantidad están Nitrógeno, Fósforo y Potasio. Sin embargo, toda fertilización deberá estar
recomendada en relación con un análisis de suelo y agua; en etapas posteriores, se
considera el estado fenológico del cultivo. Las fertilizaciones equilibradas y de acuerdo a
las necesidades del cultivo por etapa fenológica, permitirán mejor desarrollo de las raíces,
tallos, hojas, flores y frutos; que, en consecuencia, favorecen a mayor rendimiento. La
recomendación general para cultivo a campo abierto es realizar la fertilización de fondo,
y posteriormente, aplicaciones equilibradas de nutrimentos en forma solida o por
fertirriego. La forma de aplicación recomendada para siembras directas es en banda a
ambos lados del surco, cubriéndolo totalmente para evitar pérdidas por volatilización o
lixiviación. El fertilizante no debe quedar en contacto con la semilla o la base de las
plantas porque puede provocar daños irreversibles en el cultivo.
Labores de cultivo
En la mayoría de los cultivos, así como en las hortalizas, es muy importante evitar la
competencia por luz, nutrientes y espacio; por lo que deberá realizarse frecuentemente
control de maleza o arvenses. Los métodos de control son muy diversos, dependiendo de
las necesidades, costos y prácticas de manejo de cada cultivo; es común encontrar
combinaciones entre el control mecánico, manual y químico. Se recomienda utilizar
acolchados, porque no solamente disminuyen la maleza, sino que además evitan la
pérdida de humedad del suelo.
Plagas y enfermedades
La presencia de plagas y enfermedades es muy frecuente en hortalizas cultivadas a
campo abierto o sistema protegido de producción (invernadero o mallas de cultivo); sin
embargo, en estos sistemas de producción deberá hacerse supervisión constante de la
densidad poblacional, distribución y daños de los patógenos para programar aplicaciones
preventivas. Los métodos de control favorecen mayor calidad y rendimiento. Para mayor
información sobre el manejo y métodos de control consulte al especialista técnico de la
región o acuda al Campo Experimental del Valle de Mexicali.
Cosecha
La cosecha para cada cultivo depende de los parámetros particulares establecidos por el
comprador y organismos nacionales e internaciones donde serán comercializados los
productos. Sin embargo, todos los productos posteriores a la cosecha deberán mantenerse
en un área sombreada o refrigerada para conservar su calidad.
Cosecha de hortalizas en el Valle de Mexicali
Cultivo
Características generales para cosecha
Cebolla
para
bulbo
El punto de cosecha es cuando del 30% al 40% de follaje esté seco y doblado. Al sacar las plantas del suelo, permitir que se
sequen al sol de 5 a 6 días. Se debe evitar que los bulbos queden expuestos directamente a la radiación solar. Al empacar,
remueva las hojas, raíces y brácteas externas.
Cebollín
La cosecha se realiza cuando las hojas tienen una altura de 40 a 45 cm. Las plantas son seleccionadas y amarradas en majos
de acuerdo a las necesidades del mercado.
Col o
repollo
Cortar las cabezas cuando al tocarlas estén firmes, compactas y bien formadas con 2 ó 3 hojas externas adheridas a ellas,
para protegerlas de daños durante el transporte y manejo poscosecha.
Chile
Los frutos inmaduros son cosechados cuando alcanzan el tamaño de la variedad, con tonalidad verde brillante. Para cosechar
frutos maduros, deben estar firmes, amarillo, rojo o naranja brillante. Se recomienda hacer cortes frecuentes para favorecer
el crecimiento y desarrollo de nuevos frutos.
Espinaca Las plantas se pueden cosechar cuando tienen 5 ó 6 hojas y hasta antes de que emitan el tallo floral. Esto se realiza cortando
las plantas con parte de la raíz para evitar que las hojas se separen.
Frijol
ejotero
Las vainas son cosechadas tiernas y sin que las semillas de las vainas terminen de crecer. Se realiza constantemente para
promover mayor rendimiento.
Jitomate La recolección de los frutos es cuando el área apical cambia de verde claro a rojo. Si se transportara a largas distancias, se
cosechan cuando tienen el tamaño y la forma recomendada de la variedad; presentando color verde claro y brillante, o en su
caso, cuando el fruto manifieste una coloración rosada en el extremo apical.
Lechuga Las lechugas de bola son cosechadas cuando las cabezas estén firmes, compactas y bien formadas. Se recomienda dejar de 2
a 3 hojas exteriores que protegerán del manejo y transporte.
Melón
El corte es iniciado cuando los frutos tienen una tonalidad anaranjada, con una red bien formada y se desprenden fácilmente
de la planta. Cuando se van a transportar a mayores distancias los frutos serán cosechados antes de que sean de color
anaranjado. Cuando la red esté bien formada y al cortarlos puede quedar una pequeña cicatriz en la zona de unión con la
planta.
Pepino
Los frutos cosechados deberán ser firmes, verde intenso y las espinas superficiales serán fácilmente eliminadas, con longitud
de 15 a 20 cm. Se debe evitar que los frutos se tornen amarillentos en la planta, pues promueve aborto en frutos superiores.
Rábano
Se realiza cuando las raíces alcanzan un diámetro de 2 a 2.5 cm antes de que pierdan calidad interna.
Sandía
La cosecha se realiza cuando los frutos cambian de color verde claro a verde oscuro y ha perdido el aspecto ceroso y brillante.
Se debe usar navaja para cosechar para evitar dañar la planta al momento de la cosecha.
Zanahoria Se realiza cuando las raíces tienen de 2 a 2.5 cm de diámetro en su parte superior. Se remueve el suelo y recolectan las
plantas, para posteriormente llevarlas al lavado y empaque.
Antonio Morales Maza
Maíz
Introducción
Hay evidencia que establece que los bajos rendimientos y la mala calidad sanitaria del
grano en el Valle de Mexicali y San Luis Río Colorado han sido consecuencia de un
manejo agronómico ineficiente (fecha de siembra, selección de variedades, población,
plagas, enfermedades, manejo de poscosecha y contaminación por aflatoxinas en
mazorcas). Si se aplica el nivel tecnológico actual, el cultivo tiene un potencial superior a
las ocho toneladas por hectárea con buena sanidad.
Preparación del terreno
Los objetivos fundamentales de esta práctica son formar la cama de siembra que permita
una mejor distribución de semilla, la emergencia uniforme de plántulas, favorecer el
crecimiento de las raíces y anclaje de la planta, y permitir un manejo más eficiente del
agua y fertilizantes. Las principales labores de preparación del terreno son: subsoleo,
barbecho, rastreo, nivelación, surcado y bordeo.
Variedades
En la selección de variedades para grano, deberán considerarse aquellas que hayan
demostrado un alto potencial de rendimiento, y que además manifiesten características
deseables para enfrentar las condiciones ambientales y bióticas de la región como las
plantas de porte bajo y la resistencia al acame, a altas temperaturas, y a enfermedades,
como pudrición basal del tallo, huitlacoche y micoplasmosis.
Las variedades más promisorias bajo las condiciones ambientales de la región son:
Garañón, P3254W, P3258W, DK2038, P2837, NB10, NB12yH-431.
Época de siembra
Para siembras de primavera, el periodo óptimo es durante el mes de febrero; para
siembras de verano, todo el mes de julio.
Método de siembra
Suelos medios y ligeros: En este tipo de suelos conviene surcar a 76 centímetros. La siembra
se realiza en húmedo sobre el lomo del surco, la semilla se debe depositar a una
profundidad de 5 a 6 centímetros
Suelos pesados: Es conveniente hacer bordos de 1.5 metros de ancho para realizar la
siembra en seco a doble hilera, separando éstas a 76 centímetros y depositando la
semilla a una profundidad de 3 a 4 centímetros.
Densidad de siembra
La cantidad de semilla para la siembra dependerá de la forma y tamaño de la misma, así
como del porcentaje de germinación y la población de plantas deseadas. Para alcanzar el
potencial de rendimiento de las variedades recomendadas, es necesario contar con una
población que fluctúe entre 75,000 y 100,000 plantas por hectárea. Lo anterior se puede
lograr dejando un promedio de 6 a 8 plantas por metro lineal en surcos de 80 centímetros
de separación entre sí.
En la siembra, de ser posible utilizar sembradora de precisión, para lograr que los
orificios del disco sembrador sean los apropiados al tamaño de la semilla que se
sembrará.
Riegos
El riego aplicado al maíz sirve para dotar de agua a la zona de las raíces y así evitar que el
cultivo esté sujeto a deficiencias de humedad que puedan causar pérdidas de
rendimiento, ya sea por número o peso del grano, o ambos. El maíz debe regarse cuando
en el suelo exista el 60% de humedad aprovechable, este porcentaje de humedad del
suelo puede estimarse de una manera práctica basándose en el tacto, tomando una
porción de tierra y apretándola con la mano formándose una pelotita.
Periodicidad de los riegos de auxilio en siembras de febrero con un suelo medio
Días después de la siembra
Etapas del cultivo
45
Desarrollo vegetativo (7 hojas)
65
Desarrollo vegetativo
80
Desarrollo vegetativo
95
Inicio floración masculina
105
Plena floración
115
Formación de grano
125
Grano lechoso
Periodicidad de los riegos de auxilio en siembras de julio con un suelo medio
Días después de la siembra
Etapas del cultivo
35
Desarrollo vegetativo
50
Desarrollo vegetativo
60
5-10 días antes del espigamiento
70
Inicio de espigamiento
80
Inicio de llenado de grano
90
Grano lechoso
Fertilización
El fertilizante es un insumo indispensable para obtener alto rendimiento en esta región,
una adecuada fertilización implica aportar nutrimentos al cultivo en cantidad, calidad y
oportunidad, para cubrir las necesidades de éste. El maíz requiere regularmente de
Nitrógeno y Fósforo, ocasionalmente Potasio, Azufre, Fierro, Manganeso y Zinc.
Nitrógeno (N): Considerando las fuentes más usuales (urea y amoniaco), se requieren
alrededor de 40 kilogramos para producir una tonelada de grano; por lo tanto, si se
planea producir 6 toneladas de grano por hectárea se requieren 240 kilogramos por
hectárea de N. Si el potencial del predio es diferente, se requiere hacer los ajustes
sumando o restando 40 kilogramos de N por cada tonelada de diferencia a favor o en
contra. El total de la dosis debe distribuirse de la siguiente manera: 70 kilogramos por
hectárea en la siembra o presiembra, 60 kilogramos por hectárea en el primero y
segundo riego de auxilio y 50 kilogramos por hectárea en el tercer riego de auxilio.
Fósforo (P): Se recomienda aplicar Fósforo en función del rendimiento esperado,
utilizando 11 kilogramos por tonelada de grano esperada, de tal manera que si se
esperan 6 toneladas por hectárea de grano, deben aplicarse 66 kilogramos por hectárea
de P, si el rendimiento esperado es diferente, deberá realizar los ajustes
correspondientes sumando o restando 11 kilogramos por tonelada de diferencia.
Potasio (K): Las fuentes de Potasio recomendadas son sulfato de Potasio granulado (50%
de K 2O), nitrato de Potasio granulado o líquido (13.5-00-46) y tiosulfato de Potasio
(00-00-17-25s). Las aplicaciones de granulados se recomienda realizarlas en la
presiembra y los líquidos en el segundo y tercer riego de auxilio en caso de requerirse.
Combate de maleza
La maleza es uno de los principales problemas para el maíz. La infestación alta de maleza
como zacate y hoja ancha pueden reducir el rendimiento hasta en 2 toneladas por
hectárea, por ello debe mantenerse el cultivo libre de malas hierbas los primeros 50 días
después de la emergencia. Las principales especies que causan daño al cultivo son:
Maleza de hoja ancha: Para el control de quelites, chual blanco, chual apestoso, chamizo,
mostaza silvestre, mostacilla, lechuguilla, correhuela o gloria de la mañana y otras
especies de hoja ancha.
Maleza de hoja angosta: Zacate de agua, zacate pinto, grama, zacate Johnson y coquillo
amarillo y morado, las cuales se presentan durante primavera y verano. La avena
silvestre y el alpiste silvestre se presentan al final del otoño.
Métodos de control
Control mecánico: En terrenos con antecedentes de infestación de maleza se sugiere
sembrar a “tierra venida”, si el suelo lo permite; después de la emergencia, pasar un
paso de rastra o “gallinitas” para eliminar las primeras generaciones. Emergencias
posteriores pueden controlarse mediante los métodos manual, mecánico o químico.
Control manual: La limpia manual se facilita en las siembras en surco, en camas o bordos.
Ésta se debe realizar para eliminar la maleza que permanece después del cultivo
mecánico y levante de surco, sobre todo cuando la maleza es muy nociva, como zacate
Johnson y correhuela; o si la población es baja y no se justifica la aplicación de
herbicidas.
Control químico: Existen herbicidas específicos para control de maleza de hoja ancha y
hoja angosta, los cuales presentan selectividad al cultivo de maíz; sin embargo, deben
utilizarse con precaución ya que la selectividad no es absoluta, está en función de la
dosis.
Herbicidas recomendados para el control de maleza en maíz
DDR 014 Río Colorado
Tipo de maleza
Hoja ancha
Producto
Ingrediente
nombre común activo (g/ha)
Época de
aplicación
Ácido 2,4-D amina
480-720
Postemergencia
Dicamba
120-150
Postemergencia
Bromoxinil
492-656
Postemergencia
Diurón
800-1,600
Preemergencia
Atrazina-metolaclor 1,440-1,500
Complejo de hoja ancha y angosta Atrazina
940-1,175
Preemergencia
Postemergencia
Plagas
Aunque los insectos no son responsables directos para que el maíz resulte contaminado
con aflatoxinas, éstos incrementan considerablemente el problema al actuar como
vectores de hongos.
Gusano saltarín y trozadores: Tanto gusano saltarín como trozadores son plagas comunes
en la región, el daño lo causan las larvas que viven bajo tierra y en la base de los tallos,
los cuales perforan hacia arriba a la altura del nudo de la raíz provocando marchites,
amacollamiento, achaparramiento y muerte de plántulas.
Gusano cogollero: Este insecto está considerado como una de las plagas más importantes
que ataca al maíz, causando daños desde la etapa de plántula hasta la premadurez.
Control químico preventivo de gusano saltarín mediante tratamiento a la semilla
Insecticidas
Dosis de semilla
Adherente
Thiodicarb 350 sa
2.5 l
Usar resistol 850 y deja secar al menos media hora antes de sembrar
Acefate 80 ps
1.5 kg
sa= solución acuosa, ps= polvo soluble.
Chicharritas: Existen varias especies que se alimentan de la planta de maíz en desarrollo;
perforan y succionan la savia. Aunque los daños económicos son mínimos, la
importancia de la chicharrita estriba en el daño indirecto que provocan como vectores
de la enfermedad conocida como achaparramiento o micoplasmosis.
Pulga negra: En plántulas recién emergidas, la pulga negra raspa la nervadura foliar y
produce lesiones de color blanco, delgadas y alargadas en la superior de la hoja. Este
daño puede continuar mientras la planta en desarrollo tenga tejido verde, en ocasiones
también perfora las hojas.
Gusano elotero: Las larvas de gusano elotero se alimentan del cogollo, espigas tiernas, y
suelen restringirse especialmente a la mazorca; comienzan a alimentarse poco después
de su emergencia y se concentran en los canales de los estigmas. Además, provocan
daños directos a los granos y las larvas dan entrada a patógenos que pudren la
mazorca.
Control químico de las plagas de maíz
Plagas
Gusano
cogollero y elotero
Chicharrita
Pulga negra
Gusano trozador
Insecticidas
Dosis
Carbaryl 80 ph
Clorpirifos 480 E
Cypermetrina 200 CE
1-1.5 kg/ha
1 l/ha
0.25 l/ha
Clorpirifos 480 E
Carbaryl 80 PH
Malathión 1000 E
1 l/ha
1.5 I/ha
1-1.5 I/ha
Carbofuran 875
2.5 l/ha
Tomado de las guías de asistencia técnica agrícola de los valles del Yaqui, Mayo y Mexicali.
PH = polvo humectable, E = emulsión, CE = concentrado emulsionable.
Enfermedades
Aflatoxinas: Las aflatoxinas son micotoxinas producidas por hongos.La estrategia de
manejo del maíz para minimizar riesgos de contaminación por aflatoxinas se basa en
evitar al máximo el estrés de la planta; particularmente, durante el periodo de
floración y llenado de grano.
Pudrición del tallo: Esta enfermedad puede ser causada por especies de los géneros
Phytium, Diplodia, Macrophomina y Fusarium. Las pérdidas en rendimiento por esta
enfermedad se reflejan
en un incompleto desarrollo de la mazorca. Se ve favorecida por el uso de una alta
densidad de plantas y por Nitrógeno en exceso.
Micoplasmosis: En su sintomatología, las plantas muestran bandas anchas amarillas en la
base de las hojas más jóvenes, mostrando después una coloración púrpura–rojiza hacia
la punta. En casos severos no producen mazorcas o producen muy poca semilla y
mueren prematuramente.
Huitlacoche: Esta enfermedad conocida también como carbón común (Ustilagomaydis)
ataca los tallos, hojas, mazorca y espiga; ésta se presenta en la planta en forma de
agallas blancas y reemplazan a los granos. El control es mediante el uso de variedades
resistentes.
Cosecha
La cosecha del maíz puede realizarse cuando el grano alcance la madurez fisiológica
(máximo peso seco), ésta puede determinarse en campo al romper una mazorca por la
mitad y comprobar que en la base del grano (ápice), se forma una línea oscura
denominada capa negra. En siembras de primavera la cosecha ocurre en meses calurosos
como julio y agosto; en siembras de verano la planta llega a madurez a fines de
noviembre y principios de diciembre. La humedad de grano requerida para su cosecha es
de 12 a 14%.
Eva Ávila Casillas
Maíz de riego para forraje
Introducción
La ganadería extensiva que se practica en la costa de Ensenada depende de forrajes
cultivados de zonas de riego y temporal, debido a que se presentan frecuentes sequías y la
producción de forraje en el agostadero es altamente estacional. En la región, se siembran
aproximadamente 4,000 hectáreas de forrajes de riego, siendo la alfalfa el cultivo más
importante. Sin embargo, una de sus desventajas es la baja eficiencia en el uso del agua,
ya que requiere de 1,000 litros de agua para producir solamente un kilogramo de forraje
seco.
Los forrajes de producción en verano, como el sorgo y el maíz, son una buena
alternativa para producir forraje bajo riego, ya que tienen una mayor eficiencia en el uso
del agua que la alfalfa, son de rápido crecimiento, y tienen una buena respuesta a los
fertilizantes.
Estos forrajes pueden utilizarse en programas de alimentación de ganado de leche y
carne, ya que su forraje puede utilizarse directamente como verdeo, pastoreo, o siendo
preservado en forma de heno o ensilado. Puede mantenerse en reserva para resolver el
problema de alimentación del ganado durante los periodos de baja disponibilidad de
alimento en el agostadero. Por su rápido crecimiento, también se utilizan como forraje de
emergencia.
Las ventajas: Más nutrientes son conservados por hectárea debido, principalmente a
menores perdidas en campo, menos oportunidad de daños por el clima, la reducción
de horas entre el tiempo de cortado y cosecha, mayor mecanización durante la
cosecha, almacenamiento y alimentación y a una mayor variedad de cultivos
cosechados. El ensilaje es un alimento adecuado como ingrediente en raciones
totalmente mezcladas.
Las desventajas: En condiciones de mal manejo, las pérdidas durante el almacenamiento
pueden ser muy altas, si la tasa de utilización es muy lenta. Las alternativas de
utilización del equipo y las construcciones para el ensilado son muy pocas y se
necesita una inversión inicial muy alta para el equipo y construcciones. El mercado
para venta de silo es muy limitado, debido a los altos costos de transportación y
susceptibilidad a la pudrición.
Preparación del terreno
Para asegurar una mejor distribución de la semilla, una nacencia más uniforme y un
mejor aprovechamiento del agua de riego, es necesario realizar las siguientes prácticas
culturales:
Barbecho: El objetivo de esta labor es romper y voltear la capa arable del suelo, facilitar la
penetración del aire, agua, raíces, y eliminar algunas plagas y enfermedades. Un
barbecho entre 25
y 30 centímetros de profundidad es suficiente para que la raíz se desarrolle
normalmente.
Rastreo: Con esta práctica se deja al suelo mullido y desmenuzado, lo que permite una
buena germinación de la semilla. Normalmente, dos pasos de rastra cruzados son
suficientes para obtener una buena cama de siembra.
Floteo: Mediante esta labor se empareja la superficie del suelo para facilitar el riego y
distribución del agua. Permite una siembra uniforme en cuanto a densidad y
profundidad.
Surcado: El maíz se puede sembrar en hileras o en surcos. La separación entre hileras o
surcos puede ser entre 70 y 100 centímetros.
Híbridos y variedades
El maíz forrajero es un cultivo de alto rendimiento y contenido importante de nutrientes
y energía, además de alta gustocidad, por lo que se le conoce como la reina del silo. Se
utiliza principalmente para ensilarse. No se han realizado evaluaciones en la zona; sin
embargo, con base en la experiencia de productores y en la evaluación en zonas similares,
se recomienda la utilización de híbridos, como el 9617, ST-7624, H-431, 33V15,
P1625HR, 33F85, 32D78, 31G65, 31G71, y Pioneer 3292.
Época de siembra
Debe realizarse cuando no hay peligro de heladas; en valles altos se recomienda del 15 de
mayo al 15 de junio; en zonas costeras del 15 de marzo al 15 de mayo. Si las siembras son
tardías, la producción de forraje tiende a disminuir.
Cantidad de semilla
En este cultivo es recomendable utilizar más que una cantidad de semilla por hectárea,
un número de plantas por hectárea. Se recomienda una población de 70,000 a 80,000
plantas por hectárea, que se obtienen con 25 a 35 kilogramos de semilla de maíz. Estas
cantidades están basadas en semilla de tamaño medio. Algunas variedades tienen un
tamaño más grande, por lo que pueden ser necesarias mayores cantidades de semillas
para asegurar una buena población.
Algunas semillas o plántulas se pierden por falta de germinación, falta de vigor, falta de
contacto con el suelo, preparación deficiente de la cama de siembra, piedras y
encostramiento, plagas y enfermedades, fallas de la sembradora, falta de cuidado del
sembrador, entre otros. El porcentaje de pérdida es muy variable, la experiencia sugiere
que es prudente calcular por lo menos un 20%, por lo que se tiene que aumentar la
cantidad de semilla en la misma proporción en la que esperamos tener pérdidas de
semilla o plántulas. Es decir,
si queremos 80 mil plantas, tenemos que sembrar 100 mil semillas. En condiciones de
emergencia difíciles, como en pata de trigo o cebada, o en terrenos muy arcillosos,
tenemos que aumentar la densidad aun más.
Método de siembra
Se sugiere sembrar en surcos de 76 a 90 centímetros de separación. La distancia entre
plantas debe de ser de 16 centímetros (6 plantas por metro lineal) para la menor
distancia de surco, y de 14 centímetros (7 plantas por metro lineal) para la distancia
mayor. Es deseable utilizar sembradoras de precisión para asegurar una distribución
homogénea de la semilla. De preferencia sembrar en húmedo, depositando la semilla a
una profundidad entre 5 y 10 centímetros, procurando que no quede en contacto con el
fertilizante.
Fertilización
Los suelos de los valles agrícolas de la región generalmente son deficientes en Nitrógeno y
Fósforo, aunque las necesidades pueden variar entre campos de la misma área. Es
recomendable realizar análisis de suelo para determinar las deficiencias de nutrientes en
suelo y con base en éste, efectuar un programa de fertilización.
Se recomiendan dosis de fertilización entre 80 y 140 kilogramos por hectárea de
Nitrógeno, dependiendo de la cantidad disponible en el suelo. Es recomendable aplicar la
mitad de la dosis durante la siembra y el resto entre los 30 y 40 días después de la
siembra.
Cuando se encuentren deficiencias de Fósforo, se recomienda entre 40 y 80 kilogramos
P2O5 por hectárea, aplicados antes o durante la siembra. Los requerimientos de Fósforo se
pueden determinar por análisis de suelo.
En suelos de la costa de Ensenada, generalmente no se han encontrado deficiencias en
Potasio, pero en caso de encontrarlas, se recomiendan dosis de entre 40 y 80 kilogramos
de K 2O por hectárea, aplicados antes o durante la siembra.
En siembras en hilera o en surcos, el fertilizante se puede aplicar abajo y a un lado de la
semilla de siembra.
Control de malezas
Las malezas pueden disminuir la producción, por lo que es necesario su control,
principalmente durante los primeros 40 días después de la emergencia del cultivo. El
control es a través de métodos mecánicos o químicos o una combinación de ambos.
Mécánico: Éste se puede realizar en siembras en surco mediante cultivos. Se sugiere
realizar el primer cultivo de los 12 a los 15 días después de la emergencia del maíz, ya
que en esta etapa la maleza es pequeña y se deshidrata fácil con el sol. El segundo
cultivo o escarda, se realiza entre los 30 y 40 días después de la emergencia del maíz,
procurando que la barra portaherramientas no dañe las plantas.
Químico: En terrenos muy infestados de malezas puede ser necesario aplicar herbicidas
específicos para su control. Para malezas de hoja ancha como el quelite y la verdolaga,
se puede utilizar el herbicida 2,4-D amina. Éste se puede aplicar en una banda de 25
centímetros sobre el hilo de siembra, cuando las hierbas tengan
de 5 centímetros a 10 centímetros de altura, en dosis de 1.5 litros por 200 litros de
agua. Los vapores de este producto pueden causar algunos daños en plantas
susceptibles vecinas; por lo que no se debe de aplicar por avión cuando se encuentren
cultivos susceptibles a menos de 1,000 metros, o a menos de 100 metros si se aplica en
forma terrestre o con vientos.
Para aplicaciones de pre-emergencia se sugiere atrazina, que controla hierbas de hoja
ancha y algunos zacates. La dosis es de 600 gramos de material comercial por 200 litros
de agua por hectárea.
Plagas
El gusano cogollero es la plaga más dañina del maíz. Es necesario identificar las etapas
susceptibles del cultivo en las cuales puede ser afectado por el gusano cogollero; así como
la etapa más crítica (desde la emergencia y hasta los 50 días).
Herbicidas
Herbicida
Dosis l/ha Estado del maíz
Ácido 2,4 D-amina
1-2
10 a 15 cm altura
Banvel 480 (dicamba)
0.5
5 a 10 cm altura
Brominal (bromoxinil)
1.5 - 2
2 a 3 hojas
Cirrus (dicamba + acido 2 4d) 1 – 1.25
4 a 5 hojas
La aplicación de estos productos requiere asistencia técnica especializada.
Después de la emergencia del maíz, se recomienda realizar muestreos semanales para
detectar oportunamente los primeros brotes de la plaga y así disminuir los daños
ocasionados por la misma. El muestreo se debe realizar en 5 de oros revisando 20 plantas
por sitio de muestreo. De esta manera, es posible detectar a la plaga en sus primeras
etapas (a forma de huevecillos y larvas pequeñas), cuando su control es más efectivo. Si
al revisar 100 plantas durante el muestreo semanal detectas más de 20 plantas con
presencia y daño del gusano cogollero es importante que implementes una medida de
control.
Algunos productos y dosis por hectárea que pueden utilizarse para el control de esta
plaga son: de 330 gramos de ingrediente activo (g.i.a) de Clorpirifos; 1,200 g.i.a de
Carbaril; 170 g.i.a de Permetrina; 20 g.i.a de Betapermetrina, entre otros.
También se puede aplicar sevín 5 granulado o Dipterex 4 polvo en dosis de 10 y 12
kilogramos por hectárea, respectivamente. Lo anterior se deben de aplicar en forma
manual, con botes perforados, cuando las plantas tengan más de 20 centímetros de altura
a fin de que penetren en el cogollo.
Ensilado
El objetivo del ensilado es preservar el cultivo cosechado por fermentación anaeróbica. El
proceso consiste en la conversión de carbohidratos solubles a ácido láctico, el cual baja el
pH a un nivel suficiente para inhibir la actividad biológica en la masa de forraje ensilada.
Cosecha
El maíz o el sorgo deben ser cosechados en el estado de madurez apropiado para obtener
la máxima producción de nutrientes digestibles por hectárea, reducir las pérdidas
mínimas en el campo y almacenamiento, tener el máximo consumo de materia seca por
el ganado y tener la mayor cantidad de materia seca ensilada por hectárea.
El maíz debe ser cosechado cuando tenga un contenido de humedad entre 65 y 70%.
Esto se logra cuando la línea de leche está aproximadamente a la mitad del grano. Si se
ensila con demasiada humedad, pueden fermentar pobremente y haber pérdidas por
arrastre. Si se fermenta demasiado seco, es probable que bolsas de aire no permitan una
fermentación anaerobia y por lo tanto que desarrollen hongos indeseables.
Para un ensilado eficiente, se debe de cortar y transportar lo más rápido posible al silo.
Esta operación se debe de hacer diario, ya que un retraso de tan sólo un fin de semana
significa grandes pérdidas de forraje durante el ensilado y una mala calidad de producto.
Una vez que el forraje esté en el silo, debe ser “empacado” rápidamente, para excluir el
oxígeno y promover el inicio de la fermentación. Finalmente, debe de ser perfectamente
sellado con plástico de 4 milímetros, colocando de 15 a 20 llantas por cada 10 metros
cuadrados para asegurar el plástico.
Para su utilización eficiente, el ensilado se debe de remover a una tasa entre 10 y 15
centímetros diarios. Tasas menores de remoción provocan pérdidas, debido al
crecimiento de hongos y bacterias
aeróbicas que provocan baja calidad y palatabilidad.
Sistema de riego por goteo
El riego por goteo es la aplicación lenta y frecuente de agua al suelo mediante emisores o
goteros localizados en puntos específicos.
Ventajas
Alta eficiencia en el uso del agua.
Reduce las pérdidas directas por evaporación.
Elimina el escurrimiento superficial.
Permite aplicar el riego a una profundidad exacta.
Aumenta el rendimiento por unidad de agua aplicada.
Mejora la calidad de la cosecha.
Permite obtener un rendimiento más uniforme.
Se puede usar en terrenos accidentados.
Requiere menos fuerza propulsora.
Desventajas
Los roedores o insectos pueden dañar algunos componentes del sistema.
Se requiere un manejo más cuidadoso que en otros sistemas de riego.
La inversión inicial y los costos anuales pueden ser mayores en comparación con
otros métodos.
La selección y diseño de un sistema de riego por goteo puede ser una tarea complicada.
Se deben de tomar en cuenta aspectos de diseño (incluyendo la relación
agua/suelo/planta, tratamiento de agua, teoría hidráulica y bombas), así como
información referente a la instalación, operación y mantenimiento. Se recomienda
corroborar estos aspectos con un ingeniero de diseño de sistemas de riego, antes y
después de diseñar, instalar y comprar el sistema, para garantizar que opere
correctamente.
Bomba: Debe tener la capacidad necesaria y operar de manera eficiente conforme a las
necesidades de presión y flujo del sistema. Por lo general, en los pozos se utilizan
bombas verticales operadas por turbinas; y para el suministro de agua superficial, se
utilizan bombas centrífugas.
Sistema de filtración: Un buen filtrado es esencial para asegurar la operación correcta del
sistema y el buen funcionamiento a largo plazo. Los filtros se utilizan para eliminar
arena, limo, minerales precipitados y materia orgánica del agua de riego, con el
propósito de evitar el taponamiento de los emisores.
Sistema de quimigación: Consiste en el equipo para la inyección de químicos (como
fertilizantes, plaguicidas y productos químicos para el mantenimiento del sistema de
riego) en el sistema de riego. Algunos sistemas utilizan una bomba independiente,
mientras que otros utilizan un dispositivo tipo venturi, que usa la presión diferencial en
el circuito para crear succión, al estar conectado a los tanques de substancias químicas.
Flujómetros y manómetros: Son dispositivos de monitoreo para la operación correcta del
sistema. Conocer la presión de operación del sistema ayuda a detectar las fugas y los
problemas de taponamiento y es un dato esencial para el control de los filtros, los
inyectores de productos químicos y el rango de operación del sistema.
Válvulas de control: Regulan la circulación (paso) de líquidos mediante una pieza movible
que abre o cierra en forma parcial en uno o más conductos. Las válvulas de control
deben ser “ajustadas” correctamente para asegurarse de que el flujo y la presión del
sistema sean los adecuados. Algunas veces se utilizan válvulas de mariposa o de bola
sencillas, aun cuando es más frecuente el uso de válvulas sofisticadas para regular el
flujo y la presión. Las válvulas más grandes controlan el flujo de la bomba hacia los
filtros y de ahí al campo de cultivo, por lo que algunas veces reducen el flujo destinado
al campo para mejorar el retrolavado de los filtros. Las válvulas de zonas controlan el
suministro de agua por bloques, y las de lavado al final de todas las tuberías del sistema
permiten que el sistema quede limpio de impurezas.
Tuberías y conectores: Las tuberías transportan agua de la bomba a los filtros, a las válvulas
y a los emisores. Se puede utilizar tubería de PVC en todo el sistema, o se puede
combinarla con tubería de acero en la estación de bombeo, con PVC flexible; con
polietileno (pe) layflat para las líneas secundarias y con cinta con goteros para las
líneas laterales. Debe considerar la expansión y la contracción del material que
ocurren bajo condiciones normales de operación en exteriores, y asegurarse de que las
tuberías estén instaladas correctamente, bien ensambladas y conectadas con soldadura,
pegamento o por medio de conectores de fricción.
Es importante limpiar los conectores y la tubería de PVC antes de aplicar el
pegamento. Debido a que gran parte de la tubería está enterrada y es difícil de accesar
y reparar, en especial después de que crece el cultivo. Los conectores deben quedar
bien instalados para evitar fugas. Es importante asegurarse de que las tuberías y los
conectores tengan el tamaño adecuado para soportar las presiones operativas máximas
y que conduzcan el agua sin elevar o reducir excesivamente la presión.
Mangueras y cintas de riego: El componente clave de un sistema de riego por goteo es el
lateral o cinta de riego que es colocado en la zona del cultivo y entrega el agua por
medio de emisores o goteros. El diámetro de la cinta desempeña un papel importante,
en el cual, la distancia los lateral puede enviar eficazmente el agua. Las tasas de flujo
del emisor son comúnmente especificados en el gasto de agua por longitud de lateral
(por ejemplo, gpm [galones por minuto] por 100 pies de cinta/tubo), o gasto de agua
por emisor (galones por hora por emisor). Entre otros factores, el flujo de emisor
debería ser seleccionado basado en características de suelo, disponibilidad de agua y
calidad, y necesidades de la planta.
En el caso del maíz se recomienda utilizar cinta de 4 a 8 milésimas de espesor, de
flujo medio para suelos medios y de flujo alto para suelos arenosos con emisores de
salida a 20 centímetros. Colocar los emisores hacia arriba.
Fertirrigación
El sistema de riego por goteo tiene muchas ventajas; una de ellas es regar y fertilizar al
mismo tiempo, lo que se le llama fertirrigación. Es factible aplicar otros productos
químicos a través del sistema de riego, como herbicidas, plaguicidas y mejoradores de
suelo. Cuando se cuenta con un sistema de riego por goteo, es indispensable el uso
constante de ácido sulfúrico (H 2SO4) para mantenimiento de los goteros en dosis de 2.0
litros por hectárea en cada riego. Para realizar una adecuada fertilización mediante el
sistema de riego se recomienda:
Nitrógeno: Debido a su gran movilidad en el suelo, se recomienda dosificar las unidades
totales entre los riegos que se van a efectuar, para asegurar que la planta aproveche
más los nutrimentos. La fuente más recomendada es uan 32%, ya que viene de manera
líquida. La urea puede disolverse y aplicarse, sin embargo, contiene muchas impurezas
y podría provocar taponamientos en la cinta de riego; en caso de utilizarse, realizar
lavado de las cintas después de cada fertilización.
Fósforo: Se puede aplicar granulado al momento de la siembra. En aplicaciones
posteriores, utilizar ácido fosfórico (H 3PO4) que, aparte de nutrir a la planta, sirve para
dar mantenimiento de limpieza a los emisores (goteros) y su forma de presentación es
líquida.
Potasio: En caso de requerirse este elemento, buscar siempre fuentes líquidas o que sean
altamente solubles.
Riegos
La cantidad de agua de riego aplicada al cultivo depende de la fecha de siembra, del
clima y el tipo de suelo, así como de la eficiencia de aplicación del agua. En términos
generales, se aplican de 60 a 100 centímetros de lámina de agua durante el desarrollo del
cultivo. Para el periodo de establecimiento se recomienda aplicar un riego de siembra y
de 3 a 5 de auxilio. La frecuencia de estos últimos dependerá de las características del
suelo y condiciones climáticas que se presenten. Después del primer corte, es necesario
aplicar otros dos o tres riegos de recuperación.
Fase
Emergencia
Periodo vegetativo (días)
15
Volumen
Volumen Tiempo de riego
(m³/ha/fase) (m³/ha/día) (en minutos)
390
26
47
Crecimiento
40
1,225
31
56
Floración
65
3,965
61
110
Llenado de grano
15
690
46
83
135
6,270
Total
Sinonimias de insecticidas para el control de gusano cogollero
Ingrediente activo del insecticida
Nombre comercial
Betacipermetrina
Banshee, akito CE
Carbarilo
Sevimol 300 SA, sevín 80% PH, sevín 5 G
Cyflutrin
Baytroid 050 CE
Cipermetrina
Cimetrin 200 CE, polytrín 200 CE, nurelle 200 CE
Clorpirifos etil
Lorsban 480 EM, pyrimex 48 CE, magnum XL-500 PH
Deltametrina
Decis 2.5 CE, K-obiol 2.5 CE, bitam 50 SA
Gamma cyhalotrina
Vantex 60 CE, proaxis 15 CS
Lambda cyalotrina
Karate zeón 5 SC
Malation
Agromat 100 CE, malathion 1000 CE, malathion 50 CE, maratón 520 CE
Methoxyfenozide
Intrepid OS
Paration metílico
Agrotion PM 500 CE, cuprometil 500, foley 48% CE
Permetrina
Ambush 34 CE, corsair 340 CE fipol 340 CE, mausser 50 CE
Zetacipermetrina
Furia 100 WE, mustang max CE
Sinonimias de herbicidas
Ingrediente activo del herbicida
Nombre comercial
2,4-D amina
2,4-D amina 480 SA, 2,4-D ester 400 CE, cuproamina CE, drago ester 47 CE ,herbidex SA, yerbisol
Acetoclor
Anaclor 880 CE, harness CE, proboc 880 CE
Atrazina
Agrox 50 SV, flotrazine 500 SC, gesarprim 50 PH, maizatrin FW
Glifosato
Assadon cacique 480 CS, faena SA, secafin SA
Glufosinato de amonio
Sinale SL 14
Nicosulfuron
Cimarrón 75 GDA, sansón 4 SC
Paraquat
Diquat gowan paraquat 200 SA, transquat SA
Pendimetalina
Prowl 330 CE
Rimsulfuron
Titus GS
Juan Antonio Chávez Durón
Remolacha
Introducción
El cultivo de la remolacha forrajera es relativamente nuevo en el Valle de Mexicali; sin
embargo, los antecedentes que se tienen en el Valle Imperial de California permiten la introducción de este cultivo en forma amplia y
ventajosa, dada las condiciones ecológicas para su implantación. La diferencia que
presenta la remolacha forrajera de la azucarera es el tamaño y la producción de azúcares.
La remolacha puede ser utilizada en raciones para ganado, mezclándola con forrajes
secos, y así evitar diarreas en los animales. Con 70% de humedad puede ser ensilada
usando tanto raíz como follaje. Se considera un cultivo tolerante a la salinidad y prospera
en terrenos relativamente pobres, además de que proporciona un forraje de buena
calidad.
Preparación del terreno
Para lograr una buena preparación del suelo se sugiere realizar un barbecho a 30
centímetros de profundidad, seguido por dos pasos de rastra y nivelación del terreno.
Variedades
En el mercado, constantemente se presentan una gran gama de nuevas variedades, por lo
que se recomienda para sembrar Coronado large y Phoenix medium. De igual manera, se
recomienda acudir a su técnico o al campo experimental más cercano, a fin de obtener
información actualizada.
Época de siembra
La época de siembra adecuada para este cultivo, es durante los meses de septiembre y
octubre. En siembras efectuadas en la primera quincena de octubre se han obtenido los
más altos rendimientos experimentales.
Método y densidad de siembra
Se recomienda sembrar en surcos a doble hilera con una separación entre surco de un
metro y 30 centímetros entre hilera. Se sugiere una densidad poblacional de 100 mil a
120 mil plantas por hectárea.
Riego
Se requieren de 5 a 6 riegos para que el cultivo alcance su desarrollo completo. Los riegos
debe ser ligeros, con intervalos de 25 a 30 días entre cada riego.
Fertilización
Se recomienda fertilizar con 100 kilogramos por hectárea de Nitrógeno y 70 kilogramos
por hectárea de Fósforo. Al momento de la siembra, se sugiere aplicar el 60% del
Nitrógeno y todo el Fósforo; en el primer riego de auxilio se sugiere aplicar el 20% del
Nitrógeno y en el segundo riego de auxilio el resto del Nitrógeno.
Labores de cultivo
En las primeras etapas de desarrollo se pueden realizar labores de cultivo, con el fin de
eliminar las malezas y evitar el agrietamiento del terreno. Los pasos de cultivadora se
deben realizar de los 7 a 10 días después de la aplicación de los riegos, dependiendo de
las condiciones de suelo y clima que se tengan.
Plagas
Las principales plagas que se presentan en este cultivo son chicharritas y pulgones; para
combatirlas se puede usar dimetoato a razón de un litro por hectárea. Otras plagas que se
presentan en el cultivo son: gusano soldado, trips negro y mosca blanca.
Cosecha
De este cultivo se utiliza la raíz y follaje; el momento de cosecha nos lo indica el color de
la hoja, cuando ésta se torna color amarillento o cuando la raíz empieza a quedar al
descubierto. Para cosechar esta planta se recomienda dar un paso con cinceles o subsoleo
y proceder a cosecharla de forma mecánica.
Jorge Iván Alvarado Padilla
Ryegrass
Introducción
El zacate ballico anual, mejor conocido regionalmente como ryegrass, es un forraje que se
adapta a regiones templadas y subtropicales, así como a climas áridos bajo condiciones de
riego. Es un zacate anual que puede desarrollar hasta un metro de altura; su crecimiento
es “amacollado” y en algunos casos da la impresión de ser una planta perene, ya que se
desarrolla con gran facilidad. Se ha encontrado que el zacate ryegrass prospera
perfectamente en suelos pesados de textura arcillosa y con problemas de drenaje y
salinidad; además, es resistente al “pisoteo” y tiene buen poder de recuperación. Este
cultivo es una gramínea valiosa, ya que puede ser utilizada como pasto y heno; en
praderas a corto plazo puede mezclarse con algunas leguminosas como trébol y alfalfa.
En el Valle de Mexicali, este cultivo ocupa anualmente unas 4,561 hectáreas, que
constituyen las praderas utilizadas principalmente en el programa de engordas de ganado
bovino para carne.
Preparación del terreno
Es importante preparar una buena “cama de siembra” y realizar una adecuada nivelación
del terreno con el objetivo de lograr una óptima distribución de la semilla y del agua de
riego. En muchos casos es posible sustituir al barbecho por un doble paso de rastra de
disco, enseguida se efectúa la nivelación del terreno. Posteriormente, se deben trazar
melgas de 15 metros de ancho por 250 metros de largo.
Variedades
Oregón común, Tetraploide y Passerel. Para mayor información, acudir a su técnico de
confianza o al campo experimental más cercano.
Época de siembra
La época propicia es durante los meses de octubre y noviembre; las siembras tempranas,
si se hacen en la segunda quincena de septiembre, tienen bastante éxito, siempre y
cuando el clima sea fresco.
Método y densidad de siembra
La siembra se puede realizar en plano y para ello se utiliza una sembradora tipo
“cyclone”; después, se pasa una rastra ligera de ramas para cubrir la semilla. También
puede utilizarse una “drilla” o sembradora de trigo. La cantidad de semilla que se
requiere por hectárea es de 40 kilogramos por hectárea.
Riegos
Para realizar el primer pastoreo se requieren cuatro riegos, incluyendo el riego de
germinación, con intervalos de 25 a 30 días entre los mismos. Posteriormente, se requiere
aplicar uno o dos riegos entre cada pastoreo, dependiendo de la condiciones del clima y
suelo. Se recomienda aplicar riegos ligeros no más de 10 centímetros de lámina.
Fertilización
Se sugiere aplicar 100 kilogramos por hectárea de Nitrógeno al momento de la siembra.
Posteriormente, se deben aplicar 50 kilogramos por hectárea después de cada pastoreo,
excepto el último. Esto significa que el cultivo durante su ciclo requiere de 250
kilogramos por hectárea de Nitrógeno. Con un manejo adecuado de la pradera es posible
logar hasta cuatro pastoreos.
Control de maleza
Normalmente, las malezas no representan un problema de importancia en el cultivo del
ryegrass, considerando que éste es pastoreado. Sin embargo, si se tuviera un problema
grave de infestación de malezas se deberá consultar con su técnico o en el campo
experimental.
Plagas
El problema de plagas no es de importancia económica en la región. Los insectos que
comúnmente se pueden encontrar en el cultivo son los áfidos o pulgones, los cuales se
presentan durante los primeros meses del año; sin embargo, generalmente el daño que
causan en el zacate ryegrass es poco y no se requiere de aplicación de insecticidas para su
control.
Pastoreo
Los cortes o pastoreo de ryegrass deben realizarse cuando el cultivo alcance 30 a 35
centímetros de altura. El primer corte ocurre a los 70-80 días después de la siembra, y la
recuperación para los siguientes cortes tarde de 25 a 30 días después del pastoreo. El
número de pastoreos depende de la fecha de siembra y el manejo del agua y fertilizante
algunos productores logran de 4 a 5 cortes durante la temporada. El final del cultivo
ocurre cuando la temperatura empieza a subir a más de los 35 ºC al iniciar el verano,
durante fines de mayo o principios de junio.
Sistema de explotación
Para el sistema rotacional es conveniente dividir la pradera en 5 potreros. El ganado debe
permanecer durante 7 días en cada uno, y pasar al siguiente, de tal manera que a los 28
días este el ganado nuevamente pastando en el potrero inicial.
Carga animal
Es necesario definir la carga animal óptima con base en la cantidad de forraje disponible.
Para evitar un sobrepastoreo o retrasos en la rotación del ganado en los potreros, es
importante que el corte de pasto no sea inferior a los 5 centímetros de altura, ya que esto
puede retardar el crecimiento.
Se sugiere que la carga animal sea de 8 a 12 cabezas de ganado bovino, con un peso
inicial de 200 kilogramos, para obtener un promedio de ganancia diaria en peso de 750
gramos en promedio. Con ello se podrá obtener un promedio de 1,000 a 1,100
kilogramos de carne por hectárea.
Juan Antonio Chávez Durón
Sorgo forrajero
Introducción
El sorgo forrajero es resistente a la sequía y responde bien al riego, permite obtener
abundantes cosechas, con más de 50% de nutrientes digeribles totales, con un promedio
de 10% de proteína, 2.5% de grasas y 45% de hidratos de carbono. Este forraje es
apetecible para el ganado de carne y leche, tanto en verde como en ensilaje. Los sorgos
para ensilaje se caracterizan por ser de hoja ancha, tallo grueso, jugoso y con alturas
aproximadas de tres metros. A diferencia de sorgo verde (para pastoreo) que se
caracteriza por ser de hoja angosta, tallo delgado y de rápido crecimiento. Este tipo de
sorgo se puede consumir picado, empacado o en pastoreo directo. En el Valle de Mexicali
los sorgos forrajeros tienen importancia como cultivo de primavera-verano.
Preparación del terreno
Se debe barbechar a una profundidad de 30 centímetros, pasar la rastra las veces que sea
necesario hasta dejar bien mullido el terreno y proceder a nivelar para lograr un fácil
manejo del agua de riego.
Variedades
Existen variedades e híbridos de sorgo forrajero con características propias para ensilaje,
así como otras para empaque o pastoreo.
Principales híbridos de sorgo forrajero
Tipo de sorgo
Sorgo para ensilaje
Híbridos
NK-367 y FS-25
Sorgo para pastoreos directo o empaque Sudán trudan 8 y sudán piper
Sorgo para empaque y picado verde
Silo miel y silo milo
Época de siembra
En sorgos para ensilaje se recomienda sembrar en dos fechas (primavera y verano), la
siembra de primavera se sugiere realizar en el mes de marzo. En el ciclo de verano se
aconseja sembrar del 15 de junio al 15 de julio, con lo cual se obtendrá sólo un corte. Los
sorgos de pastoreo o empaque, se recomienda sembrarlos del 1 de marzo al 30 de junio,
tomando en cuenta que entre más temprano se siembre, se obtendrá un mayor número de
pastoreos. En siembras de marzo, se logran obtener hasta cuatro pastoreos, mientras que
en siembra de junio se podrá realizar máximo dos pastoreos.
Forma de sembrar
La siembra de esta gramínea se realiza en plano mediante el uso de una sembradora de
granos pequeños (drilla), procurando que la semilla quede a una profundidad de dos
centímetros.
Cantidad de semilla para la siembra: Cuando es sorgo para ensilaje se deben usar 20
kilogramos de semilla por hectárea, esto permitirá producir tallos más gruesos y
vigorosos.
Riegos
En sorgos para ensilaje establecidos en siembra de primavera es necesario proporcionar
cuatro riegos de auxilio para lograr el primer corte y tres más para obtener el segundo
corte; en siembras de verano se requieren de cuatro riegos para su cosecha. Los sorgos
para pastoreo o empaque requieren tres riegos para obtener el primer corte y dos riegos
para el siguiente. Aplicar una lámina de riego máxima de 10 centímetros,
aproximadamente.
Fertilización
Los sorgos para ensilaje sembrados en suelos ligeros requieren de 120 kilogramos por
hectárea de Nitrógeno y 46 kilogramos por hectárea de Fósforo, antes de la siembra y 50
kilogramos por hectárea de Nitrógeno para obtener el segundo corte. En suelo pesados se
aconseja aplicar 140 kilogramos por hectárea de Nitrógeno y 46 kilogramos por hectárea
de Fósforo antes de la siembra y 50 kilogramos por hectárea de Nitrógeno para lograr el
segundo corte. Cuando es para pastoreo o empaque, en suelos ligeros se puede aplicar
100 kilogramos por hectárea de Nitrógeno y 46 kilogramos por hectárea de Fósforo antes
de la siembra y 50 kilogramos por hectárea de Nitrógeno después de cada corte. En suelo
pesados se sugiere aplicar 120 kilogramos por hectárea de Nitrógeno y 46 kilogramos por
hectárea de Fósforo antes de la siembra y 50 kilogramos por hectárea después de cada
corte. La fuente de Nitrógeno que se recomienda usar es urea y para Fósforo es 11-52-00.
Control de malas hierbas
Se recomienda darle un paso de cultivadora antes del primer riego y otro más antes del
segundo riego, si en este último lo permite. Con estas cultivadas se eliminan las malezas y
se rompe la capilaridad del suelo, conservando por mayor tiempo la humedad. Estas
labores de cultivo sólo se realizan para los sorgos de ensilaje.
Plagas
Las principales plagas que atacan al sorgo forrajero son pulga negra y gusano cogollero.
Principales plagas que atacan al sorgo y su método de control en el Valle de Mexicali
Plaga
Pulga negra (chaetocnemasp)
Gusano cogollero
(Spodoptera frugiperda
Producto Dosis por
comercial hectárea
Sevín 80
Época de aplicación
1.5 kg/ha Durante el primer mes de desarrollo de la planta
Sevín 5g.
10 kg/ha En verano, sobre todo después de cultivar algodón
Lorsban 480 E 1 – 1.5 l/ha
Cosecha
En el caso de que el sorgo sea utilizado para ensilaje, el momento más apropiado para
llevarla a cabo es cuando se encuentra lechoso-masoso. Para pastoreo, éste debe
efectuarse cuando las plantas alcancen alrededor de 1.0 metros de altura; siempre y
cuando los sorgos no estén en proceso de espigado, ya que el ganado aprovecha mejor el
forraje en estado tierno. La altura mínima para pastoreo debe ser de 60 centímetros, ya
que se puede presentar un alto grado de intoxicación en los animales.
Por otra parte, si los sorgos llegasen a sufrir los efectos de una fuerte helada o una
sequía muy prolongada, es mejor dar el pastoreo hasta que la planta se recupere. Se
sugiere pastorear en forma rotacional al igual que el zacate ryegrass. Si el sorgo no se
destinara para ensilaje, se procede a cortar para elaboración de heno cortándolo en etapa
de floración. Para el corte puede utilizarse el mismo equipo que se usa para la alfalfa.
Eduardo Loza Venegas
Sorgo grano
Introducción
El sorgo grano se emplea en la elaboración de alimento balanceado para aves y ganado;
los tallos y las hojas se aprovechan como forraje después de cosechar las panojas. El valor
nutritivo producido por los nuevos híbridos es casi igual al del maíz blanco y cuesta
aproximadamente 60% menos. El sorgo puede formar parte una rotación adecuada de
cultivos en el Distrito de Riego 014, Río Colorado, ya que se adapta bien a las
condiciones de esta región o bien puede constituir un segundo cultivo después del trigo,
la cebada o el cártamo.
El volumen de producción se estima en 36,000 toneladas anuales destinadas al
consumo local para la elaboración de raciones balanceadas de ganado bovino, porcino y
sector avícola. El rendimiento comercial es de 4.5 toneladas por hectárea, pero existe
información experimental que indica que el cultivo tiene potencial superior a 6.0
toneladas por hectárea, mayor que otras regiones, si comparamos con Tamaulipas donde
se registra un rendimiento promedio de 3.0 toneladas por hectárea en temporal y 5.0
toneladas por hectárea en riego.
Preparación del terreno
Se debe barbechar a 30 centímetros de profundidad y pasar la rastra hasta dejar bien
mullido el terreno, posteriormente nivelar para lograr un fácil manejo del agua de riego.
En suelos medios y ligeros sin problemas de sales, la distancia entre surcos debe ser de 70
a 75 centímetros, con una hilera de siembra.
En suelos salinos o de textura “pesada” utilice camas o bordos altos entre 100 y 150
centímetros de ancho, para sembrar a
doble hilera, con una separación entre 25 y 30 centímetros.
Variedades
Aptas para la región: Rodeo.
Época de siembra
Existen dos periodos de siembra: en primavera, del 15 de febrero al 31 de marzo y en
verano, del 1 al 31 de julio.
Método de siembra
Suelos medios y ligeros: Es conveniente sembrar en húmedo, sobre todo si se tienen
infestaciones de maleza, para eliminar la primera generación de malas hierbas.
Suelos pesados: La siembra puede realizarse en seco o a tierra venida pesada; se debe la
semilla en camas a un metro de ancho, a doble hilera y a una profundidad entre 2 y 3
centímetros.
Densidad de siembra: Se recomienda utilizar de 8 a 12 kilogramos de semilla por hectárea.
Riego
En siembras de primavera, el sorgo puede requerir de 5 a 6 riegos
de auxilio después del riego de presiembra, en suelos medios y ligeros; en siembras de
verano, las variedades o híbridos de sorgo para grano tienden a ser ligeramente más
precoces, de 10 a 15 días respecto al ciclo de primavera, con ello se reduce también un
riego de auxilio.
Fertilización
Nitrógeno (N): El cultivo requiere alrededor de 40 kilogramos de Nitrógeno para
producir una tonelada de grano, por lo tanto si se planea producir 6 toneladas por
hectárea, se requieren 240 kilogramos por hectárea de N.
Fósforo (P): Utilizar 12 kilogramos por tonelada de grano esperada, de tal manera que
para producir 6 toneladas, deben aplicarse 72 kilogramos por hectárea de Fósforo.
Control de malas hierbas
Las malas hierbas pueden ser controladas con cultivos o usando herbicidas específicos
para sorgo. Las especies más importantes se agrupan en maleza de hoja angosta como
zacate de agua, zacate pinto, zacate grama, zacate Johnson y coquillo, las cuales se
presentan durante primavera y verano. A finales de otoño, la avena silvestre y el alpiste
silvestre, también cobran importancia. Las principales malas hierbas de hoja ancha son:
quelite o bledo, chual cenizo, chual apestoso
y chamizo.
Prevención: Se recomienda utilizar semilla certificada, maquinaria limpia, eliminar
maleza en canales y regaderas. En siembras tempranas, se debe mantener el cultivo
libre de maleza los primeros 60 días; en siembras tardías, durante los 40 días iniciales.
Control mecánico: En terrenos donde la maleza ha sido un problema, se sugiere sembrar a
“tierra venida” si el suelo lo permite; después de la emergencia de las mismas, realizar
un paso de rastra o gallinitas para eliminar las primeras generaciones. La presencia de
maleza después de la siembra puede controlarse mediante los métodos manual,
mecánico o químico.
Control químico: Existen en el mercado herbicidas específicos para control de maleza de
hoja ancha y hoja angosta, los cuales presentan selectividad al cultivo de sorgo; sin
embargo, éstos deben utilizarse con precaución, ya que la selectividad no es absoluta y
está en función de la dosis y la etapa fenológica del cultivo al momento de la
aplicación, las características del suelo, del clima y el tipo de variedad de sorgo.
Maleza de hoja ancha: Para el control de quelites, cuales, chamizo, mostacilla, lechuguilla,
correhuela y otras especies de hoja ancha, los herbicidas utilizados a base de ácido 2,4D amina 4
y Dicamba son específicos; sin embargo, son productos de empleo muy delicado, ya
que generan vapores que pueden ser arrastrados por el viento y dañar cultivos
susceptibles, como algodonero, alfalfa, hortalizas, vid y cártamo. Se recomienda aplicar
estos productos en forma terrestre, sin vientos y seguir cuidadosamente las
indicaciones de la etiqueta del producto. El mejor control se obtiene cuando se realiza
la aplicación en suelo húmedo, con maleza pequeña, con cuatro hojas y de cinco a
ocho centímetros de altura.
Maleza de hoja angosta: Las principales especies son los zacates de agua, salado, pinto,
coquillo, grama y Johnson, entre otros. Estas malas hierbas se establecen al principio del
ciclo junto con el cultivo y en poblaciones tan altas, que dañan seriamente al cultivo,
pues compiten con él por agua, nutrientes y luz, limitando su crecimiento y desarrollo
posterior. Es importante controlar estas malezas oportunamente utilizando herbicidas.
Herbicidas recomendados
Tipo de
maleza
Producto
Ingrediente
nombre común activo (gia/ha)
Hoja ancha*
Complejo de hoja ancha y angosta*
Época de
aplicación
2,4 D-amina
Dimetilamina
Dicamba
479 – 719
720 – 960
144 - 192
Postemergencia
Postemergencia
Postemergencia
Diuron
Atrazina
800 – 1600
900-1800
Preemergencia
Postemergencia
*Quelite o bledo, tomatillo, lengua de vaca, mostaza, mostacilla, chual, malva, verdolaga y gloria de la mañana.
Control de plagas
Las principales plagas que atacan al sorgo son el gusano cogollero, la pulguita negra, los
pulgones y los pájaros. Otras plagas de menor importancia son los insectos chupadores,
ácaros y nemátodos, los cuales únicamente en casos excepcionales requieren de
aplicación para su control.
Principales plagas y sugerencias de control
Plaga
Pulga negra
Insecticida Dosis por hectárea (gia)
Época de aplicación
Clorpirifos
480
Durante el primer mes de desarrollo de la planta
Gusano cogollero Clorpirifos
480
En verano, sobre todo después de cultivar algodón
Enfermedades
Aunque no se han detectado enfermedades de importancia económica durante el desarrollo del cultivo, ocasionalmente pueden
presentarse algunas, como la pudrición basal del tallo causada por hongos del suelo, o la
presencia de roya en las hojas. Es importante la selección de variedades que presenten
tolerancia a este tipo de
enfermedades.
Cosecha
La cosecha de sorgo debe realizarse al muestrear el grano de la panoja, cuando éste
truene al quebrarse. Esta característica es un indicador de que el grano está en un punto
muy cercano o menor a 15% de humedad, el cual es el ideal para cosechar con una
“combinada”.
Eduardo Loza Venegas
Trigo
Introducción
El trigo está sometido a un esquema de precios condicionados por las fluctuaciones del
mercado global y por el aumento de materias primas como la semilla, fertilizantes,
combustibles, plaguicidas, etcétera. El productor enfrenta el reto de lograr una cosecha
rentable. Esto implica optimizar el uso de estos insumos, disminuyendo, por ejemplo, la
intensidad de labranza, aplicando oportunamente las cantidades necesarias de
fertilizantes o semilla, con el correcto manejo del agua de riego y controlando de manera
oportuna las plagas, enfermedades y maleza. Todas estas actividades enfocadas en
maximizar el rendimiento y calidad del producto, que es un factor importante para una
segura y aceptable comercialización.
Preparación del terreno
Una buena preparación del terreno ayuda a prevenir la compactación del mismo, facilita
la penetración del agua, promueve la aeración y el desarrollo de la raíz y reduce los costos
de producción. Las labores que se pueden requerir para lograr una buena cama de
siembra involucran subsoleo, barbecho, rastreo y nivelación.
Época de siembra
Experimentos realizados por el cemexi indican que el mejor periodo de siembra del trigo
es del 15 de noviembre al 31 de diciembre y del 15 de noviembre al 20 de diciembre para
siembras en surcos.
Semilla
El uso de semilla de calidad es una de las decisiones más importantes para el éxito de una
producción.
Pureza varietal: Semilla libre de mezclas de otras variedades de trigo y de otros cultivos.
Pureza fisiológica: Semilla con alto vigor para una emergencia rápida y uniforme del
cultivo (bajo índice de panza blanca).
Pureza física: Semilla libre de hierbas nocivas, como avena silvestre, lengua de vaca,
correhuela, zacate Johnson, etcétera. Son difíciles de erradicar en el predio.
Pureza sanitaria: Semilla libre de enfermedades, como el carbón parcial, el carbón
volador, etc.
Método de siembra
El trigo se puede sembrar en plano o en surco y, dependiendo de la textura del suelo, en
húmedo (tierra venida), o en seco.
Siembra en plano: La semilla se distribuye en todo el terreno, utilizando una sembradora
de granos pequeños (drilla), o una “voladora”, que distribuye la semilla y el
fertilizante. Las melgas van de 12 metros hasta 20 metros de ancho, dependiendo de la
textura del suelo (suelo medio, ligero o pesado), la longitud y el grado de nivelación
del terreno.
Siembra en surco: Después de la preparación del terreno, se hace el surcado de entre 80 y
100 centímetros con el fin de sembrar dos hileras sobre el lomo del surco, quedando
separadas de 25 a 40 centímetros una de otra.
Densidad de siembra
Siembra en plano: Utilizar entre 100 kilogramos por hectárea y 120 kilogramos por
hectárea. El uso excesivo de semilla expone al cultivo al acame, dificultando la cosecha
y reduciendo rendimiento y calidad de grano.
Siembra en surco: Utilizar entre 60 kilogramos por hectárea y 80 kilogramos por hectárea
de semilla para obtener una población de 40 a 64 plantas por metro lineal en cada
hilera.
Variedades
Las variedades de trigo que se sugiere para siembras en el Valle de Mexicali están entre
los grupos que se comercializan en México.
Las variedades se encuentran ordenadas en grupos generales de calidad, que indican su
uso potencial en la producción de pan, galletas, repostería y pastas alimenticias. Es
importante señalar que la calidad intrínseca de cada variedad sólo se expresará si se logra
un mínimo de proteína en el grano de alrededor de 10% en trigos galleteros y de 12.5%
en trigos panificables y para pastas.
Riego
Para determinar el momento de regar, es necesario tomar en cuenta el estado de
desarrollo de la planta, la textura y nivel de salinidad del terreno, las condiciones del
clima y algunas prácticas agronómicas como la fertilización y el control de maleza.
Calendario de riegos
Las etapas de mayor demanda de agua son las de encañe, espigamiento y llenado de
grano. Un déficit de humedad puede reducir el rendimiento en hasta 800 kilogramos por
hectárea. Por otra parte, un exceso de riego en estas etapas puede reducir el contenido de
proteína en el grano al “lavar” el Nitrógeno fuera de la zona radicular en suelos medios y
ligeros, o dificultar su asimilación por falta de Oxígeno en suelos pesados. Riegos tardíos,
después del estado lechoso-masoso del grano, contribuyen al acame y desgrane del
cultivo.
Suelos medios: Aplicar un riego de presiembra o de germinación y cuatro de auxilio. El
primero de auxilio se aplica en amacollamiento (45-55 días después de la siembra), el
segundo en pleno encañe (2-3 nudos o 30 días después del primero), el tercero en el
espigamiento (25 días después del segundo riego de auxilio) y el cuarto cuando el
grano se encuentre en estado lechoso-masoso (15-20 días después del tercer riego de
auxilio).
Suelos ligeros: Regar a intervalos cortos con menor lámina de riego y aplicar un riego más
que en suelos medios: (presiembra, amacollamiento, encañe, embuche, llenado de
grano y grano lechoso-masoso).
Suelos pesados: Se sugiere un riego de germinación y cinco riegos de auxilio:
amacollamiento, encañe, embuche, espigamiento y lechoso-masoso.
Características agronómicas y uso industrial de las variedades de trigo
Variedad
Días a
Madurez Altura de Color de
espigamiento fisiológica plantas (cm) grano
Grupo I
Roelfs F2007
96-109
127-146
95-110
Blanco
Palmerín F2004
102-114
136-153
85-100*
Blanco
Kronstad F2004
95-104
128-147
90-105
Rojo
Cachanilla F2000
94-105
129-146
85-100
Blanco
Yécora F70
92-103
125-141
60-80
Blanco
Rayón F89
97-108
129-146
90-105*
Rojo
Oasis F86
95-105
130-145
65-85
Blanco
93-109
130-146
95-115*
Rojo
91-102
125-140
80-95
Ámbar
CEMEXI C2008
96-112
132-146
90-105*
Ámbar
Batáquez C2004
96-110
131-144
90-105*
Ámbar
Rio Colorado C2000
99-115
132-145
90-105*
Ámbar
Átil C2000
98-109
133-147
85-105*
Ámbar
Rafi C97
98-109
133-148
85-100*
Ámbar
Nácori C97
98-110
134-149
85-105
Ámbar
Aconchi C89
95-106
132-145
80-100*
Ámbar
Altar C84
94-105
128-143
85-100*
Ámbar
Grupo II
Baviácora M92
Grupo III
Cucurpe S86
Grupo V
La letra después del nombre de la variedad indica su uso industrial potencial.
* Variedades vigorosas con alto potencial de amacollamiento.
Ancho y largo de melgas por tipo de suelo
Suelo Melga (metros)
Ancho Largo
Ligero 12 a 16 100 a 200
Medio 12 a 16 150 a 300
Pesado 12 a 20 150 a 400
Descripción de los grupos del trigo
Grupo I: Gluten fuerte/extensible (F). Industria mecanizada de panificación y como
mejorador de trigos de menor fuerza.
Grupo II: Gluten medio fuerte/extensible (M). Industria semi-mecanizada y manual de
pan a partir de masas fermentadas.
Group III: Gluten suave (S). Destinado a la industria galletera y repostería.
Grupo V: Gluten fuerte/tenaz, cristalino (C). Industria de elaboración de pastas
alimenticias.
Riego en melgas
Melgas muy anchas y demasiado largas propician una baja eficiencia de riego y pérdidas
de agua por escurrimiento superficial fuera del predio o por percolación profunda. El
tamaño de melga se hace de acuerdo al tipo de suelo y a su grado de nivelación.
Riego en surco
La siembra en surco hace entre 10 y 15% más eficiente la conducción del agua y reduce
el tiempo de riego con respecto al riego por melgas. Se controla mejor la cantidad de agua
que entra al surco (uso de sifones o tubos de 0.5 a 1.0 pulgadas).
Fertilización
Nitrógeno: Se requieren en promedio 35 kilogramos por hectárea de Nitrógeno para
producir una tonelada de trigo. Investigaciones realizadas en los últimos 15 años por el
inifap y otras instituciones, indican que es factible incrementar el contenido de
proteína del grano de trigo de uno a tres puntos porcentuales, si se aplica una fracción
del Nitrógeno en la floración ó al inicio de llenado de grano. Las fuentes de Nitrógeno
de alta concentración como el amoniaco y la urea son deseables de aplicar con el
propósito de abaratar costos.
Fósforo: Se recomienda aplicar todo el Fósforo antes de la siembra utilizando 10
kilogramos por hectárea por tonelada de rendimiento esperado. Fuentes más
recomendables de Fósforo: fosfato monoamónico (11-52-00-2), fosfato diamónico
(18-46-00), ácido fosfórico (00-52-00) y ácido súperfosfórico (00-60-00).
Cantidad de Nitrógeno y Fósforo para trigo
Producción
Siembra
Amacollo Encañe- Floración
estimada kg/ha de Fósforo Nitrógeno 2 embuche Nitrógeno
Ton/ha
y Nitrógeno 1
Nitrógeno
5
50
45
55
55
30
6
60
55
65
65
35
7
70
60
75
75
40
8
80
65
85
85
45
9
90
70
95
95
50
¹ Si aplica amoníaco anhidro en esta etapa conviene inyectarlo para mejorar eficiencia.
² Si utiliza Urea u otro fertilizante granulado, incorpórelos inmediatamente
Combate de maleza
La maleza es uno de los principales factores que reducen el rendimiento y la calidad del
grano en trigo. Las especies más importantes de maleza se agrupan en maleza de hoja
angosta y de hoja ancha. Para su control existen diferentes estrategias que utilizadas en
forma integral pueden reducir las infestaciones a niveles que no causen pérdidas
económicas al cultivo.
Prevención: Uso de semilla certificada, limpiar la maquinaria y equipos, evitar el pastoreo
de ganado sobre las socas de los cultivos y eliminar maleza en canales principales,
canales secundarios y regaderas.
Control mecánico: La siembra a tierra venida es la única alternativa de control mecánico
de maleza en trigo sembrado en plano y está limitada al tipo de suelo. Para las
siembras de trigo en surco a doble hilera ya establecida, realizar dos escardas
mecánicas; la primera a los 20-25 días después de la emergencia y la segunda una vez
que el terreno lo permita, después del primer riego de auxilio.
Control químico: Existen herbicidas específicos para los diferentes tipos de maleza, los
cuales generalmente presentan buena selectividad al trigo; sin embargo, deben
utilizarse con precaución, siempre con la supervisión continua de personal técnico
especializado, ya que su selectividad no es absoluta y puede ser modificada por la
variedad, condiciones de clima, diferencias en textura y humedad del suelo, salinidad,
contenido de materia orgánica y profundidad del manto freático.
Maleza de hoja angosta
Avena silvestre: Los herbicidas recomendados para combatir esta maleza actúan en forma
lenta, inhibiendo el crecimiento. Los herbicidas recomendados son Clodinafop
propargyl, Diclofop metil, Fenoxaprop etil, Tralkoxidim. Deberán aplicarse cuando la
avena presente de dos a cuatro hojas y el trigo se encuentre en la etapa de inicio de
amacollamiento. El Diclofop-metil se debe aplicar en avenas de no más de tres hojas,
mientras que el Clodinafop propargyl puede controlar aún avenas grandes, siempre y
cuando se trate de avenas pubescentes, la avena sin pubescencia no la controla.
Alpiste silvestre: Los herbicidas recomendados para controlar alpiste se absorben
preferentemente a través de las raíces, por lo que es indispensable que exista suficiente
humedad en el suelo para que actúen adecuadamente. Los herbicidas Tralkoxidim,
Clodinafop propargyl, Diclofop metil, Fenoxaprop metil y Metribuzin controlan a esta
maleza.
Zacates Johnson, salado, de agua, pinto, y grama: Estas especies de maleza suelen ocurrir en
manchones que crecen lentamente al inicio del cultivo, pero que pueden incrementar
sus poblaciones conforme avanza el ciclo si no se controlan adecuadamente. En
terrenos infestados se deben combatir antes de sembrar. Se pueden utilizar productos
específicos contra hoja angosta como Sethoxidim al 1.25% o productos no selectivos
como Glifosato y Paracuat en dosis de 2% a 3% de ingrediente activo por cada 100
litros de agua. Es importante que el suelo tenga suficiente humedad para que el
producto actúe mejor.
Maleza de hoja ancha
Las especies de mayor importancia son los chuales, alambrillo,
mostacilla, mostazas, lechuguilla, lengua de vaca, gloria de la mañana, verdolaga y últimamente girasol silvestre. Los herbicidas
2,4-D amina, Dicamba, Bromoxinil, Fluoroxipir y Triasulfuron son específicos para el
control de maleza de hoja ancha. Estos productos deben ser aplicados en la etapa de
amacollamiento del cultivo, en maleza pequeña, no mayor de cuatro hojas o de seis
centímetros
de altura.
Complejo de maleza
Es común encontrar más de una especie de maleza en el cultivo. Se pueden presentar
complejos de avena más alpiste, avena más hoja ancha, alpiste más hoja ancha o avena
más alpiste más hoja ancha.
Principales herbicidas recomendados para el control de maleza en trigo
Especies de maleza
Avena y
alpiste
Producto
Brominal 240 CE
Amber 75 WG
Full-mina
1.5 – 2.0 l
Starane 2M
1.0 l
Banvel 1224
1.0 l
Situi XL
30 g
Grasp 25 EC
En maleza menor a 5 cm.
1.0 – 1.5 l
40 g
Topikgold
Época de aplicación
15.0 g
Peak 57WG
Peak 57WG + Amber 75 WG
Avena y alpistillo
Dosis por
hectárea)
En amacollamiento del trigo.
30 +10 g
0.75 l
1.0 – 1.6 l
Entre los 20 y 30 días de emergido el
trigo
Hoja ancha
Trifularina 480
480
2.0 - 3.0 l
Avena, alpistillo y hoja ancha
Sigma – S
0.5 l
Entre los 20 a 30 días de emergido el
trigo.
Zacate Johnson
Puma súper
1.0 l
En etapas avanzadas del trigo.
Avena silvestre
Assert
Complejo de gramíneas y hoja ancha Topik Gold + Starane 2M + 2,4-D
anual
Amina
Topik Gold + Banvel 1224
Topik Gold + Situi XL
Sigma – S
Topik Gold + Peak + Amber 75 WH
2.5 – 3.0 l
Entre los 25 y 35 días de emergido el
trigo.
0.75 +0.5 + 0.5 l
Entre los 20 y 30 días de emergido el
trigo.
0.75 +1.0 l
0.75 l + 30 g
0.5 l
0.75 l + 30 + 10 g
Grasp 25 SC + Banvel 1224
1.4 + 1.0 l
Grasp 25 SC + Situi XL
1.4 l + 30 g
Correhuela perenne
Faena
1.0 – 1.5 l
Full-mina
1.0 l
Starane 2M
1.0 l
Banvel 1224
30g
Situi XL
Durante el amacollamiento del trigo.
30 + 10 g
Peak 57WG + Amber 75 WG
Para mantener un buen control de la maleza y cuidado de los herbicidas, es muy
importante que se realice una rotación anual de herbicidas graminícolas de diferente
modo de acción, aplicando sólo las dosis recomendadas (sin sub o sobre dosificar). No es
recomendable aplicar el mismo producto un tercer año consecutivo. Si cambia de cultivo
y requiere utilizar herbicida procure usar un producto con diferente modo de acción al
último que uso en el trigo.
Plagas
Pulgón del follaje: Se considera la plaga más importante del trigo, ataca el cultivo desde la
primera fase de su desarrollo, aunque en siembras tardías el daño es mayor. Para su
control, se sugiere hacer aplicaciones de insecticidas: Paratión metílico 720 gramos de
ingrediente activo (g.i.a.); Ometoato (300 g i.a.);
Dimetoato (400 g i.a.), o Malatión (1000 g i.a.).
Pulgón del tallo: Se le encuentra generalmente en los tallos. Se
ha observado buen control con 720 g.i.a. de Paratión metílico, 300 g.i.a. de Ometoato,
400 g.i.a. de Dimetoato, o bien 1000 g.i.a. de Malatión por hectárea.
Principales insecticidas recomendados para el control de plagas en trigo
Insecto plaga
Complejo de pulgones
Nombre comercial Dosis de producto comercial por hectárea
Dimetoato
1.0 l
Muralla Max
0.15 a 0.25 l
Engeo 247 SC
0.100 l
Cosecha
La época de cosecha comprende los meses de mayo y junio. Es conveniente cosechar
cuando el grano tenga entre 8 y 13% de humedad; porcentajes menores tienden a
aumentar pérdidas por desgrane y quebrado de grano; se debe tener especial cuidado en
trilla de los trigos duros o cristalinos para evitar daños mecánicos.
Jorge Iván Alvarado Padilla
Vid
Introducción
El cultivo de la vid en el Valle de Mexicali cubre una superficie de 210 hectáreas; de
éstas, 130 son para producir uva pasa, el resto es para uvas de mesa. La superficie de vid
ha mostrado una disminución continua por problemas en la comercialización, bajos
precios y por la falta de calidad requerida por el mercado (las pasas que se producían
eran vanas, de tamaño irregular y podridas). Las condiciones han cambiado a tal grado
que se tiene una alta demanda y un buen precio. El problema de calidad se superó, al
aplicar un paquete tecnológico, que permite producir uva pasa de calidad y que se
describe en forma resumida en esta guía.
Cultivares
Thompson seedless, Fiesta, Flame seedless, Perlette y Superior o cualquier variedad que
no tenga semilla.
Poda de las plantas
Tener plantas equilibradas en vigor y fertilidad de yemas permite lograr rendimientos
adecuados año tras año; el número de cañas a dejar debe estar definido en función del
vigor que presenten las plantas. Se sugieren entre 70 y 100 yemas por planta, que
equivale a dejar entre 6 y 8 cañas con 12 a 15 yemas. Prefiera la condición de dejar “caña
sobre caña”, ya que estas cañas estuvieron más expuestas al sol, por lo que producen más
racimos.
Sistema de conducción de doble cruceta
Debe instalarse una cruceta de 1.7 metros de longitud sobre la cruceta de un metro que
tienen la mayoría de los viñedos, ubicándola entre 30
y 35 centímetros por encima. Esta cruceta sostendrá adicionalmente dos alambres, sobre
los cuales se dirigirá el desarrollo de los nuevos brotes. La cruceta adicional se coloca
sobre un tutor de 2.4 metros que se ubica a un intervalo de 4 a 5 plantas (equivalente a 8
metros de distancia).
Riego
Dar el primer riego, en la etapa de yemas hinchadas o inicio de brotación; después, regar
cada 15 a 20 días después del primer riego, hasta llegar a la etapa de envero (cambio de
color de la uva) y una vez que se alcancen los 16 a 18 grados Bríx, dar el último riego
para cosechar. Después de regar una o dos veces; no riegue después del
25 de septiembre, ya que ocurre mucho rebrote del follaje.
Fertilización
Las dosis sugeridas por hectárea y las fechas de aplicación de los tres principales
nutrimentos que las plantas necesitan son:
Nitrógeno (N): Usar entre 80 kilogramos y 100 kilogramos aplicando 30% del total en
postbrotación, después del primer riego y antes de dar el segundo; 50% desde el inicio
del crecimiento del grano hasta el inicio de la maduración y 20% restante después de
la cosecha.
Fósforo (P): Use entre 40 y 50 kilogramos. Aplicar el total en etapa de prebrotación.
Potasio (K): Use entre 80 y 100 kilogramos; 50% del total al inicio del crecimiento del
fruto y el otro 50% al inicio del envero (cambio de color verde a amarillo).
Enfermedades
Para el combate de la cenicilla polvorienta, se sugiere establecer un programa preventivo
a base de azufre, ya sea en polvo o humectable, a intervalos de 8 a 12 días y en dosis entre
10 kilogramos por hectárea y 12 kilogramos por hectárea, si se utiliza azufre al 93%
(polvo); y entre 2 y 3 kilogramos y/o litros, si se utiliza azufre humectable. Con la
enfermedad en el fruto, aplicar fungicidas curativos (Miclobutanyl, Trifloxystrobin,
Tebuconazole, etcétera).
Plagas
La chicharrita de la vid causa su daño al chupar y raspar las hojas de las plantas, aunque
también afecta la calidad de las bayas al secretar sus excrementos sobre ellas. Se combate
durante todo el ciclo de crecimiento y desarrollo de la vid, sin descuidar la etapa de postcosecha. El insecticida Imidacloprid (en dosis de entre 30 gramos por hectárea y 40
gramos por hectárea), se ha utilizado con éxito para el combate de esta plaga, debido a
que posee un amplio poder residual.
Maleza
El viñedo debe estar libre de maleza (principalmente zacate “huachapore”) durante todo
el ciclo, especialmente en julio y agosto, meses en que se cosecha la uva. Use tanto el
control manual como mecánico, dirigido a manchones dentro del viñedo. Químicamente
se puede usar Paraquat en dosis de 2%.
Uso del ácido giberélico para incrementar la calidad de la pasa
Para aumentar el rendimiento, calidad y uniformizar el tamaño de la pasa producida con
el cultivar Thompson seedless; es necesario hacer una aplicación de ácido giberélico en la
etapa de brotación, cuando los racimos tengan entre 10 y 20 centímetros de longitud, en
dosis de 16 a 20 partes por millón (ppm). Se debe hacer una más con la misma dosis (16
a 20 ppm), en la etapa de raleo de flores, con 80% de los racimos floreando; y otra
aplicación en la etapa de inicio de crecimiento de la uva, cuando el tamaño de las bayas
oscile entre
4 milímetros y 6 milímetros de diámetro, utilizando una dosis de
40 ppm a 60 partes por millón.
El ácido giberélico, tiene un efecto de contacto, por lo cual, el producto se deberá
aplicar en suficiente cantidad de agua, asegurando
el buen mojado de los racimos de la planta. Se recomienda usar al menos 600 litros de
agua por hectárea.
Muestreo del contenido de azúcar de la uva
Tome 150 uvas de la parte media del racimo y exprima en un recipiente limpio; del jugo
que resulta se mide el contenido de azúcar. Entre más dulce sea la uva, menos kilogramos
de uva fresca se ocuparán para producir un kilogramo de pasa y mayor será la calidad. El
corte de la uva debe ser con más de 20 grados Bríx.
Selección de racimos
Evite cortar racimos verdes o dañados por cenicilla polvorienta y pudriciones; ya que
ocasionan daños a la pasa encostalada o estibada.
Tendido de racimos en el papel
No poner más de 12 kilogramos de uva fresca por cada papel; procurar que los papeles
queden lo más juntos que se pueda para evitar pérdida de pasa al momento del volteado.
Formas para reducir el tiempo de secado de la pasa
La mezcla de metil oleate (2%) y carbonato de Potasio (2%) puede acelerar el proceso de
secado en las pasas, con reducciones en el tiempo, el cual oscila entre 4 y 7 días. Así, se
llega a evitar en ocasiones el volteado de la pasa. La aplicación se hace después de tender
la uva, para lograr un mejor efecto. Puede realizarse con mochila o con aspersora de
tractor, procurando tener un buen cubrimiento de la uva para lograr un secado uniforme.
Volteado de la pasa
Para deshidratar por completo los racimos, éstos tienen que voltearse para exponerlos al
sol. Este volteo, se realiza entre 6 y 8 días después del tendido. Los racimos están listos
para volteo cuando las pasas adquieran un tono café y están arrugadas en la parte
expuesta al sol.
Momento para el levante de la pasa
Para saber si la pasa está lista para el levante, se toma un puño de pasas con la mano, se
cierra la mano y se oprime el contenido; después, se abre la mano y si la pasa cae con
facilidad, está lista. Otra forma es tomar una pasa entre las yemas de los dedos,
presionarla y si no se revienta o escurre una especie de mielecilla, entonces está lista para
su levante. Al tocar con los dedos las pasas, éstas deben tener mucha flexibilidad. El
muestreo para decidir el momento del levante, se hace por la mañana, entre 8:00 y 9:00
a.m.; o en la tarde, poco antes de la caída del sol. Entre 4 y 8 días serán necesarios
después del volteado, para un secado completo de la pasa. Para uniformizar la humedad
de las pasas, los papeles se enrollan simulando un “cigarro”, y se dejan en el viñedo por
un plazo no mayor a 5 días.
Recolección de la pasa
La pasa ya lista se recolecta en costales limpios de tela o ixtle. La cantidad de adecuada
para estos sacos es de 45 kilogramos para su fácil manejo. Se sugiere encostalar la pasa
entre las 10:00 a.m. y 11:00 a.m., ya que después de esta hora, el producto empieza a
“sudar” una especie de mielecilla que ocasiona que las pasas se aglomeren unas con
otras.
Envío a las plantas beneficiadoras
Una vez que la pasa ha sido encostalada, se envía a las plantas beneficiadoras para su
limpieza, lavado, clasificación, empaque y su posterior envío al consumidor.
César Valenzuela Solano
Preparación del terreno
Preparación del terreno
La preparación del terreno es una práctica que integra una serie de labores que van
destinadas a dar condiciones ideales de mullidez, temperatura, humedad y aireación del
suelo; de tal manera que se den condiciones favorables para la mejor germinación de las
semillas, la emergencia de plántulas, la penetración de raíces y el desarrollo de los
cultivos. Mediante la preparación del terreno se destruyen las malas hierbas, las cuales
compiten con los cultivos por nutrientes, agua y luz. Lo anterior, también ayuda a la
conservación y mejoramiento de la estructura del suelo, lo que propicia la formación de
gránulos que favorecen la aireación del suelo y el drenaje vertical. Esta condición es
importante donde se presentan problemas por la acumulación de sales. De manera
general, considerar el criterio del técnico de cada zona constituye la base fundamental
para orientar al agricultor sobre la preparación del terreno.
Desvare
Consiste en desmenuzar por corte los restos de plantas que se encuentran sobre el
terreno. Se hace con el fin de incorporar materia orgánica al suelo y facilitar el paso de
implementos: también sirve para evitar la proliferación de plagas en el suelo. Esta labor
se ejecuta con una maquina desvaradora. En la fase final del cultivo del algodonero, se
recomienda desvarar una vez que se haya efectuado la ultima pizca.
Subsuelo
Mediante esta labor se rompe el piso de arado formado por el uso continuo de
maquinaria. Esta labor se sugiere en suelos pesados con mal drenaje, cuando menos cada
2 ó 3 años.
Barbecho
Esta práctica tiene como objetivo mejorar las condiciones físicas y biológicas del terreno,
además de incorporar los residuos del cultivo anterior y las malas hierbas para
incrementar su descomposición y favorecer la fertilidad y el contenido de materia
orgánica del suelo.
Con ello se atenúan las condiciones adversas de los suelos arcillosos “pesados” y de los
suelos arenosos “ligeros”; ya que se mejora su estructura y se aumenta su capacidad de
retención de humedad. Además, al invertir de posición la capa superficial del suelo, se
exponen huevos, larvas y pupas de plagas, que pueden destruirse en la superficie por
diferentes agentes bióticos y climáticos, con los que se ejerce un control adicional de
plagas y enfermedades.
Al mismo tiempo, se expulsan semillas de maleza en diferentes estadios de
germinación, lo cual contribuye a disminuir su infestación. Para el Valle de Mexicali se
aconseja efectuar esta labor con 30
a 40 centímetros de profundidad, dependiendo de las características del suelo y del
cultivo que se vaya a sembrar.
Rastreo
Mediante esta labor, los terrones grandes que quedan después del barbecho se
desmenuzan y facilitan la nivelación del suelo para lograr una buena cama de siembra;
además, ayuda a sellar el suelo y eliminar malas hierbas.
Nivelación
Se empareja la superficie del suelo para evitar la existencia de bajas o altas en el terreno,
que originan encharcamientos o falta de humedad. Se realiza inmediatamente después
del rastreo, utilizando una niveladora, un cuadro de madera, un madero pesado o un
pedazo de riel. A esta práctica también se le llama floteo.
Trazo de riego
El objetivo de esta práctica es el buen manejo del agua de riego dentro del terreno de
siembra, para lo cual se toma en cuenta la topografía, velocidad de infiltración, tipo de
suelo y dimensiones del terreno.
Entre otros aspectos, implica el trazo de canales, surcos, melgas y curvas de nivel, según
sea el caso.
Indicaciones para la siembra
Variedades: Las variedades de plantas que se citan en esta agenda son las de más alta
producción en las regiones respectivas, y han sido seleccionadas con base en pruebas
experimentales.
Densidad de siembra: La densidad de siembra equivale a la cantidad de semilla que se
utiliza por hectárea. Debe entenderse que se trata siempre de semilla limpia y
certificada y con un poder mínimo de germinación de 80% o más.
Labores de cultivo: Cultivo o escarda, consiste en eliminar las malas hierbas; se remueve la
capa superficial del suelo y se arrima tierra a las plantas. Con ello, se ayuda a la
aireación del suelo y se conserva mejor la humedad. Esta práctica se realiza con
cultivadora o azadón rotatorio (gallinitas). El tipo de implemento a utilizar esta
determinado por el grado de desarrollo de la planta.
Aporque: El aporque consiste en arrimar tierra a la planta para aumentar la base de
sustentación. Con esta labor se puede ejecutar con diferentes aperos de labranza, tales
como azadón, cultivadora o arado. También es posible destruir la maleza que se haya
desarrollado entre plantas. Al igual que la escarda, el aporque ayuda a conservar la
humedad en el terreno y a mejorar las condiciones de aireación de las raíces.
Deshierbe: La práctica de deshierbe tiene como finalidad limpiar de malas hierbas al
cultivo, ya que éstas compiten por agua, luz, nutrientes y espacio. Se puede realizar en
forma manual, mediante el uso de azadón o con maquinaria como cultivadora o
arados.
Herbicidas:​ Son productos químicos que pueden matar, detener o suprimir el
crecimiento de ciertas plantas. El uso de herbicidas es eficaz para controlar las malas
hierbas, siempre y cuando se usen los productos indicados en las dosis y épocas
adecuadas. Su aplicación puede ser preemergente o postemergente, de acuerdo con el
tipo de mala hierba y el herbicida a utilizar.
Fertilización
Los tratamientos de fertilizantes se expresan generalmente con tres cifras separadas por
guiones. Cada una de ellas expresa la cantidad de material técnico que se debe aplicar
por hectárea para cubrir los requerimientos nutricionales del cultivo. La primera cifra se
refiere al Nitrógeno, la segunda al Fósforo y la tercera al Potasio, ejemplo: el tratamiento
120-40-00 indica la aplicación de 120 kilogramos de Nitrógeno, 40 kilogramos de
Fósforo y 0 kilogramos de Potasio por hectárea.
Las fuentes de fertilizantes que existen en el mercado, se expenden con diferentes
concentraciones, por lo cual la cantidad que se aplique de cada uno depende de su
concentración. De esta manera, para el tratamiento citado (120-40-00), se requieren
261 kilogramos de urea (46% de concentración), 146 kilogramos de amoniaco anhidro,
360 kilogramos de nitrato de amonio o 585 kilogramos de sulfato de amonio para
completar los 120 kilogramos de Nitrógeno. Los 40 kilogramos de Fósforo se aplican con
205 kilogramos
de súperfosfato simple (19.5% de concentración) u 87 kilogramos de súperfosfato triple.
Formas de aplicación de los fertilizantes
La forma de aplicación de un fertilizante implica su adecuada colocación, de tal manera
que el cultivo lo pueda absorber eficientemente y se evite el daño por “efecto salino” a
las semilla o a la plántula. Existen tres formas básicas para aplicar fertilizantes:
directamente al suelo, en el agua de riego y en aspersiones sobre el follaje.
Aplicación de fertilizante: Presenta un gran número de variantes, dependiendo del cultivo
por fertilizar, de las condiciones locales de suelo y clima, del fertilizante en sí y de los
recursos físicos o materiales que se dispongan para efectuar la aplicación.
Fertilización en banda sencilla: Consiste en depositar el fertilizante en una banda continua
o a “chorrillo”. Se usa para fertilizantes iniciales con Nitrógeno, Fósforo y/o Potasio,
en los cultivos sembrados en hilera como maíz, sorgo, ajonjolí, cártamo, etc.,
colocándolo abajo y hacia un lado de la hilera de siembra.
Fertilización en doble banda: Bajo este sistema, el fertilizante se deposita en bandas
continua a ambos lados y abajo del nivel de la hilera de siembra. Se requieren aperos
adecuados y se usa para los cultivos sembrados en hileras.
Fertilización en banda múltiple: Se refiere a las inyecciones en presiembra de Amoniaco
Anhidro y agua amoniacal, tal como se utiliza principalmente para los cultivos de
sorgo, cártamo y trigo. Los fertilizantes líquidos 8-24-0 y 10-34-0 se aplican
utilizando esta modalidad.
Fertilización al voleo: Consiste en distribuir el fertilizante uniformemente sobre la
superficie del suelo. Se usa para cultivos densos como el trigo, pastos, alfalfa, etcétera.
En fertilizaciones iniciales en presiembra, el fertilizante puede incorporarse al suelo
con el barbecho o el rastreo. En fertilizantes complementarias, sobre cultivos
establecidos, el agua de riego debe aplicarse inmediatamente después de fertilizar.
Fertilizante en “mateado”: Se usa en áreas temporaleras y generalmente en maíz; consiste
en depositar un puñado de fertilizante alrededor de cada mata.
Aplicación de fertilizantes en el agua de riego: Se utiliza para fertilizaciones iniciales o
complementarias, en cultivos densos y en hileras, aplicando el fertilizante en solución
en el agua de regadera principal.
Aplicación foliar de fertilizantes: Es casi específica para la aspersión aérea de
microelementos como Hierro, Zinc, Cobre, Manganeso y Boro, con el fin de corregir
deficiencias o desbalances nutricionales. También se pueden aplicar dosis bajas de
elementos con este sistema.
Porcentaje de elementos mayores y secundarios en fertilizantes
Fertilizante
N P2O2 K2O S Ca
Nitrogenados
Amoníaco anhidro
82
0
0
0 0
Sulfato de amonio
20.5
0
0
0 0
Nitrosul
20
0
0
20 0
Triple 17
17
17
17
0 0
UAN-32
32
0
0
0 0
Urea
46
0
0
0 0
Nitrato de amonio
33
0
0
0 0
Nitrato de calcio
15.5
0
0
0 26
Sulfato de amonio
21
0
0
24 0
Fosfato monoamónico 11
52
0
0 0
Fosfato diamónico
18
46
0
0 0
Fosfonitrato
31
4
0
0 0
Polifosfato de amonio 10
34
0
0 0
Polifosfato de Potasio
0
20
20
0 0
Ácido fosfórico
0
52
0
0 0
Cloruro de Potasio
0
0
61
0 0
Sulfato de Potasio
0
0
50 17 0
Nitrato de Potasio
14
0
42.5 1.5 0
Tiosulfato de Potasio
0
0
25 17 0
Tiosulfato de amonio
0
0
22 13 0
Fosfatados
Potásicos
Uso de sustancias químico-agrícolas
Los tratamientos de pesticidas que se dan en esta agenda están expresados en kilogramos
o litros por hectárea de material comercial. Para el uso de estos productos es necesario
cuidar que las aplicaciones no sean defectuosas o incompletas; los tratamientos deben ser
adecuados y los productos por utilizar de reciente elaboración. Para mezclar fungicidas o
fertilizantes con algunos insecticidas, al momento de aplicarlos, es conveniente consultar
a los especialistas debido a que puede modificarse la acción esperada o causar toxicidad a
la planta, si no se tiene en cuenta la compatibilidad de los productos.
Las inspecciones frecuentes al cultivo permiten estimar si el daño o la presencia de la
plaga o enfermedad indican la necesidad de aplicar productos químicos. Si las
aplicaciones se hacen con base en el número de metros lineales de surcos, número de
plantas enfermas, golpes de red, etc., los conteos deben efectuarse en cuatro o cinco
puntos distribuidos en el área de cultivo.
Al combate efectivo de las plagas, enfermedades o maleza en los cultivos, concurren
diversos factores, entre los cuales destacan por su importancia los siguientes:
Identificación del problema. El problema debe estar debidamente identificado y definido,
pues si no se conoce bien a la plaga, enfermedad o mala hierba, se puede fracasar en su
combate al confundirla con otras parecidas, considerar equivocadamente su
susceptibilidad a las sustancias.
Selección de agroquímicos: Una vez definido el problema a atacar, se podrá escoger el
insecticida, fungicida o herbicida más conveniente por su toxicidad para las plagas, por
su poder residual, por su baja toxicidad para animales de sangre caliente, plantas y
animales que se deseen preservar, costo, etc.
Dosificación y formulación: Es necesario determinar la cantidad de agroquímicos que se van
a usar por hectárea, así como la forma en que se va a aplicar, ya sean polvos o líquidos.
En el caso de aspersiones debe determinarse la cantidad de agua a utilizar por
hectárea, de acuerdo con el desarrollo del cultivo al momento de la aplicación y con el
equipo disponible.
Compatibilidad de los agroquímicos: Si se aplican dos o más productos, debe tenerse en
cuenta que sean afines o compatibles, o sea cada uno de los productos usados debe
conservar su toxicidad y buenas propiedades al mezclarse con los otros.
Las tablas de compatibilidad indican en forma general los parasiticidas y fertilizantes
que pueden mezclarse sin peligro no sean defectuosas o incompletas; los tratamientos
deben ser adecuados y los productos por utilizar de reciente elaboración. Para mezclar
fungicidas o fertilizantes con algunos insecticidas, al momento de aplicarlos, es
conveniente consultar a los especialistas debido a que puede modificarse la acción
esperada o causar toxicidad a la planta, si no se tiene en cuenta la compatibilidad de
los productos. Las inspecciones frecuentes al cultivo permiten estimar si el daño o la
presencia de la plaga o enfermedad indican la necesidad de aplicar productos
químicos. Si las aplicaciones se hacen con base en el número de metros lineales de
surcos, número de plantas enfermas, golpes de red, etc., los conteos deben efectuarse
en cuatro o cinco puntos distribuidos en el área de cultivo.
Al combate efectivo de las plagas, enfermedades o maleza en los cultivos, concurren
diversos factores, entre los cuales destacan por su importancia los siguientes:
Identificación del problema: El problema debe estar debidamente identificado y definido,
pues si no se conoce bien a la plaga, enfermedad o mala hierba, se puede fracasar en su
combate al confundirla con otras parecidas, considerar equivocadamente su
susceptibilidad a las sustancias.
Selección de agroquímicos: Una vez definido el problema que se va a atacar, se podrá
escoger el insecticida, fungicida o herbicida más conveniente por su toxicidad para las
plagas, por su poder residual, por su baja toxicidad para animales de sangre caliente,
plantas y animales que se deseen preservar, costo, etcétera.
Dosificación y formulación: Es necesario determinar la cantidad de agroquímicos que se van
a usar por hectárea, así como la forma en que se va a aplicar, ya sean polvos o líquidos.
En el caso de aspersiones debe determinarse la cantidad de agua a utilizar por
hectárea, de acuerdo con el desarrollo del cultivo al momento de la aplicación y con el
equipo disponible.
Compatibilidad de los agroquímicos: Si se aplican dos o más productos, debe tenerse en
cuenta que sean afines o compatibles, o sea cada uno de los productos usados debe
conservar su toxicidad y buenas propiedades al mezclarse con los otros. Las tablas de
compatibilidad indican en forma general los parasiticidas y fertilizantes que pueden
mezclarse sin peligro de disminuir sus propiedades, causar daño a la planta o producir
efectos distintos a los deseados.
Oportunidad de la aplicación: El agroquímico debe aplicarse con toda oportunidad, pues las
plantas o animales parásitos se controlan más fácilmente en determinada fase de su
desarrollo.
Cobertura: El agroquímico tiene que cubrir o llegar precisamente a las superficies o sitios
en donde hace falta y en la cantidad necesaria. Si esto no sucede, entonces habrá
fallado la aplicación.
Las fallas o combate defectuosos por medio de agroquímicos se atribuye con cierta
frecuencia a que no se usa el producto o la dosis adecuada, a la mala calidad del
producto, o a que se aplica fuera de tiempo; sin embargo, en muchas ocasiones no se
considera el factor aplicación o “fumigación”, a pesar de que el combate o control
defectuoso puede deberse precisamente a una mala cobertura.
Causas de la falta de éxito en el control de plagas, maleza o enfermedades, a pesar del uso
de sustancias químicas específicas:
Aplicaciones realizadas cuando las condiciones climáticas son desfavorables, o
sea cuando hay lluvias, vientos fuertes, etcétera.
Dosis inadecuadas de los agroquímicos.
Identificación incorrecta del problema, y consecuentemente utilización de
productos inadecuados para su solución.
Aplicaciones inoportunas debido al desconocimiento del estado biológico en que
el insecto, maleza o patógeno es más susceptible a los productos químicos para su
combate.
Otras medidas de control que contribuyen a reducir las infestaciones de insectos
dañinos, maleza y enfermedades.
Las siembras deben efectuarse dentro de las fechas indicadas por los trabajos de
investigación agrícola regional.
La plantación debe mantenerse lo más uniforme posible.
Destrucción inmediata de residuos después de la cosecha.
Proteger, hasta donde sea posible, los insectos benéficos (parásitos y
depredadores).
Métodos de aplicación
Aplicaciones manuales: Este tipo de aplicación debe hacerse cuando se trata de parcelas
chicas o de pequeñas áreas infestadas. Ciertos productos son muy peligrosos para
quien los aplica, por lo que se debe usar mascarilla, no fumar y cambiarse de ropa
inmediatamente después de la aplicación.
Aplicación terrestre: Regular la velocidad del tractor con la descarga del producto, de
modo que la distribución sea uniforme. Las boquillas deben mantenerse a una altura y
posición conveniente para cada cultivo. Revise que las boquillas estén en buen estado
para hacer la aplicación. Las aplicaciones de polvo conviene hacerlas cuando no sople
el viento, preferencia en la mañana o por la tarde.
Aplicaciones aéreas: Se debe diluir la dosis de acuerdo con el tamaño de la planta y el
grado de infestación. La faja tratada no debe ser más ancha que la longitud de las alas
del avión. Es indispensable que un banderero bien protegido guíe al piloto y que las
franjas tratadas se sobrepongan un poco para que no queden áreas sin tratar. No es
conveniente hacer este tipo de aplicaciones en días muy calurosos o secos, en las horas
calientes del día, o cuando sopla el viento. Debe procurarse que el avión vuele a una
altura entre 1.5 y 3 metros sobre el follaje y a una velocidad de 72 a 96 kilómetros por
hora.
La eficiencia de la cobertura o cubrimiento que un avión “fumigador” hace sobre las
plantas, depende principalmente de los siguientes factores:
Número y tamaño de las gotas asperjadas.
Altura y velocidad de vuelo del avión.
Condiciones del tiempo.
Formulación del pesticida
Distribución y colocación del equipo de descarga.
Todos los factores, excepto el referente a las condiciones del tiempo, pueden ser
controlados para obtener una cobertura uniforme y conveniente; se pueden lograr
mejores coberturas cuando se aplican mayores cantidades de líquido por unidad de área
tratada.
Precauciones generales para la aplicación de agroquímicos
La aplicación de productos químicos en la agricultura es uno de los métodos más
prácticos; sin embargo, el mal uso de los agroquímicos puede acarrear trastornos en la
salud del hombre y de los animales domésticos, la fauna insectil benéfica, al propio
cultivo que se trata de proteger, al medio ambiente, y finalmente, al productor.
Todos insecticidas, fungicidas, herbicidas y algunos fertilizantes son venenosos para el
hombre y para los animales. Se deben seguir las instrucciones y adoptar todas las
precauciones que aparecen en las etiquetas de fábrica de los recipientes. Dichos
productos se deben conservar en recipientes cerrados, en lugares secos y en donde no
contaminen alimentos o forrajes.
Evítese el contacto repetido o prolongado con la piel y las inhalaciones de los polvos,
vapores o neblinas de insecticidas o fungicidas. Si ha estado haciendo aplicaciones o
manipulando estos productos, se debe cambiar de ropa por otra limpia y seca, lavarse las
manos y la cara antes de comer.
El piloto, los operarios que preparan las mezclas, los bandereros y todos los que
intervienen de algún modo en las aplicaciones y en la calificación posterior de sus
efectividades, deben tomar las mayores precauciones posibles para evitar riesgos mayores
de intoxicación.
Se recomienda tener a la mano agua limpia, jabón, toalla, ropa para limpieza de los ojos
y antídotos adecuados. En caso de intoxicación se requiere atención médica inmediata.
Sinonimias
El nombre de los herbicidas y plaguicidas que aparecen en esta agenda corresponden a los
que se han usado experimentalmente en la región. A continuación, se mencionan otros
nombres con los que pueden encontrarse estos mismos productos en el mercado nacional
e internacional.
Sinonimias de insecticidas y herbicidas según sus nombres común y comercial
Nombre común
Nombre comercial
Acefate
Orthene 75
Aldicarb
Temik 15 G
Azinfos metílico
Gusatión M 200, azinfos M 20, biochem 20
Bifentrina
Talstar 100
Carbarilo
Sevimol 300 SA, sevín 80% PH, sevín 5 G
Carbofuran
Furadan 350
Cipermetrina
Polytrín 200 CE, cymbush 20, arrivo 200
Clorpirifos
Lorsban 480, pirimex 48
Cyflutrin
Baytroid 050
Deltamefrina
Decis 2.5, K-obiol 2.5
Diazinon
Diazinon 25% CE
Dicofol
Acarín 200, kelthane
Dimetoato
Rogor, affix, dimetax, dimetox, metopol, nasatoato, dimetoato, perfektion, plaguidín, rotor, roxion,
tridente
Endosulfan
Thiodán 35 CE, agrofán 35 CE, thisulfán 35-E
Fenpropatrin
Herald 375
Fenvalerato
Belmark 300, fenval 300
Malatión
Cereation, cethion, cuidador, fifanon, lucathion, maijero, malatox, mataton, polathion
Metamidofos
Tamarón 600, agresor 600 ó prospecto 600
Metidation
Supracid 40, metatión 40, suprathión 40
Metomilo
Matador, methomyl 90 P
Monocrotofos
Azodrin-5, lucadrín 60, monocrotofos 600
Ometoato
Folimat
Oxidemeton metil
Metasystox R25
Paratión metílico
Agrotion, alquimet, fitockloa, fash, foley, folidol, folinasas, folvel, panepol, paramet, pennecap,
taxation, toxition
Permetrina
Ambush 34, _Corsair 340, fipol 340
Propargite
Comité CE
Spiromesifen
Oberon 23.1%
Thiodicarb
Larvin 375 SA
2, 4-D Amina
Cuproamina, cuproester, drago, estamine, ester, esteron, fito amina, full amina, herbipol,
hierbamina, herberster
Acetoclor
Harness, harness plus
Bromoxinil
Brominal 240 CE
Clethodim
Select
Clodinafop propargyl
Topik gold
Dicamba
Banvel, banvel 12-24
Diclofop metil
Iloxan
Diuron
Karmex, diurex, centión, cañex
Fenoxaprop-p etil
Puma súper
Fluazifop-p-butil
Fusilade
Flucarbazone sodio
Everest, vulcano
Flucarbazone sodio
+Clodinafop propargil
Everest ultra, vigía
Fluormeturon
Cotoran
Fluoroxipir
Estarane
Glifosato
Faena, round-up
Imazamethabenz
Assert
Metribuzin
Sencor, lexone
Mesosulfuron metil + Iodosulfuron Sigma S
metil
Oxadiazon
Ronstar
Paracuat
Gramoxone
Pendimetalin
Prowl
Pinoxaden
Axial
Pirithiobac
Staple
Quizalofop-etil
Assure II
Sethoxidim
Poast
Tralkoxidim
Grasp súper
Triasulfuron
Amber
Trifluralina 480
Tretox, treflan, otilan, archer 480, trifluralina 480, triflurex, trisan 480
Trifluralina 600
Premerlin 600
Trifluralina 10G
Archer 10% G, trifluralina granulada 10%
Thifensulfuron metil
Harmony
Metsulfuron metil
Ally
Metsulfuron metil +
Thifensulfuron metil***
Situi
Reguladores de crecimiento
Nombre común Nombre comercial
Cloruro de metiquat Pix, regulex
Defoliantes
Nombre común Nombre comercial
Butifos
Def
Thidiazuron
Dropp
Mario Camarillo Pulido
Plagas
Principales plagas de cultivos en el Valle de Mexicali
Araña roja: Esta plaga ataca entre otros cultivos al algodón y al maíz; se les puede
encontrar en cualquier etapa del desarrollo de la planta. Estos ácaros son muy
pequeños y difíciles de ver a simple vista; según la especie, su color varía de rojo a
verdoso, y se les encuentra en el envés de las hojas sostenido por una malla de seda. La
araña roja, al picar y chupar la savia de la planta, ocasiona decoloración, deformación
y caída prematura de las hojas. Las altas temperaturas y condiciones de baja humedad
en el cultivo favorecen el incremento de la plaga.
Chicharrita: Estas especies atacan a cultivos como el algodón, alfalfa, frijol, maíz, soya,
entre otros cultivos. Las chicharritas son insectos pequeños, de coloración verde
pálido, café o gris. Tanto los adultos, como las ninfas pican los tejidos de las hojas y
chupando los jugos para alimentarse. Al mismo tiempo, existe la posibilidad de que
estén transmitiendo enfermedades virosas. El daño directo causado por chicharritas se
manifiesta por el amacollamiento de las hojas y algunas veces por el achaparramiento
de la planta.
Chinche apestosa: Estas especies son plagas secundarias del algodón en el Valle de
Mexicali. Los adultos de las diversas especies miden hasta unos 18 milímetros de largo,
son algo aplanados y tienen forma de escudo. Sus huevecillos los depositan en masas;
son de un color plomizo o gris y tienen forma de barril. Al eclosionar los huevecillos,
las ninfas permanecen por un tiempo en la planta donde nacieron y después emigran.
Chinche lygus: Este insecto es una plaga importante del algodonero y la alfalfa, pudiendo
encontrarse en otros cultivos, como el cártamo. Mide aproximadamente 6 milímetros
de longitud y su color es verde o café rojizo. El insecto deposita sus huevecillos
insertándolos en los tallos y en las terminales de las plantas. De ellos emergen las
ninfas de un color verde pálido.
La chinche lygus causa daños de consideración al cultivo de algodonero si se presenta
en poblaciones altas. Tanto los adultos como las ninfas se alimentan chupando la savia
de las yemas terminales, los cuadros y las bellotas; el piquete de los cuadros es difícil
de identificar observando el exterior, pero al abrirlo se nota que algunos estambres
presentan coloraciones cafés o negras en la zona del piquete; los cuadros pequeños
caen, y los más grandes se deforman y producen flores a su vez deformes, que pueden
desarrollar una bellota chica o defectuosa. El daño a las bellotas se caracteriza por
puntos negros con el centro brillante, que se observan sobre la cáscara; las bellotas muy
tiernas pueden caerse o crecer anormales; en este último caso, ocasiona un manchado
de la fibra. Por lo general, los piquetes a bellotas ya grandes y maduras no llegan a
pasar la corteza, por lo cual no ocasionan daño de importancia económica.
Chinche manchadora: Varias especies de esta chinche se pueden encontrar en el
algodonero, cártamo y otros cultivos. Por sí solas no causan daños de importancia,
debido a sus bajas poblaciones. Esta chinche mide entre 1.5 y 2 centímetros de
longitud; son alargadas, oblongas y de colores atractivos predominado los tonos en
rojo. Las infestaciones fuertes de chinche manchadora pueden deberse a inmigraciones
provenientes de campos colindantes con vegetación silvestre y profunda.
Chinche rápida: Este insecto normalmente se encuentra en los cultivos de algodonero,
soya y ajonjolí, alimentándose de las fructificaciones. Los adultos son mucho más
alargados y un poco menos angostos que la chinche lygus, son de coloración amarilloverdoso con las patas y antenas rojizas.
Falsa chinche bug: Este insecto se presenta ocasionalmente en el algodonero, y más
frecuentemente en otros cultivos o plantas silvestres como quelite y verdolaga. Los
adultos miden unos 3 milímetros de longitud, son alargados, de color pardo plateados
y las ninfas son muy parecidas a los adultos, pero con las alas menos desarrolladas. Las
plantas infestadas con esta plaga presentan una coloración café, como si estuvieran
quemadas; ésto se debe al daño ocasionado por los adultos al chupar la savia de las
partes tiernas de la planta.
Grillo de campo: Esta plaga comúnmente se encuentra en parcelas de algodonero con
suelos de textura pesada. Se presenta actuando como trozador. Los adultos miden unos
3.5 centímetros de longitud y son de color café oscuro. Las hembras depositan sus
huevecillos en las grietas del suelo. El insecto permanece durante el día en esas grietas
y por la noche entra en actividad causando los principales daños a las plantas.
Gusano bellotero: Este insecto ataca al algodonero, maíz, sorgo, sandía, melón, pepino,
berenjena, cártamo, soya, garbanzo y otros cultivos. Los adultos miden
aproximadamente 2.5 centímetros de largo y son de color amarillo ocre, con una
manchita negra en el centro de las alas anteriores. Los huevecillos son de color
amarillo pálido, de forma esférica y poseen estrías longitudinales; son ovipositados en
las terminales del algodonero, cabello del elote, hojas de la planta y otras partes de la
misma.
Las larvas se desarrollan rápidamente alcanzando aproximadamente 4 centímetros
de longitud, pasan por seis instares larvarios; su color varía del verde pálido al café
oscuro con franjas longitudinales de dos a tres colores. Este insecto daña
principalmente los frutos de los cultivos.
Gusano bellotero: Este insecto ataca al algodonero, sandía, melón, pepino, berenjena,
cártamo, soya, garbanzo y otros cultivos. Los adultos miden aproximadamente 2
centímetros de largo y son de color amarillo verdoso, con tres bandas oblicuas en las
alas anteriores. Los huevecillos son de color amarillo pálido, de forma esférica y
poseen estrías longitudinales; son ovipositados en las terminales del algodonero,
cabello del elote, hojas de la planta y otras partes de la misma. Las larvas se desarrollan
muy rápidamente alcanzando aproximadamente 4 centímetros de longitud; pasan por
seis instares larvarios; su color varía del verde pálido al café oscuro con franjas
longitudinales de dos a tres colores. Este insecto daña principalmente los frutos de los
cultivos.
Gusano cogollero: Es una plaga común que causa muchos perjuicios en los cultivos de
maíz, sorgo y también ataca a otras plantas cultivadas o silvestres. El adulto es una
palomilla de unos 3 centímetros de expansión alar; de color café-grisáceo; durante el
día se le encuentra escondida en el follaje o en las grietas del suelo; las hembras ponen
masas de 50 a 100 huevecillos generalmente en el envés de las hojas; los huevecillos
son verdosos y las masas se encuentran cubiertas por escamas de la propia palomilla.
Las larvas al nacer son amarillentas, con la cabeza y el escudo pronotal oscuro; las
larvas desarrolladas son de color café-grisáceo, con tres líneas dorsales más claras. Las
larvas se alimentan en el cogollo del maíz y sorgo destrozándolos, las hojas tiernas al
desarrollarse quedan agujeradas; el ataque a plantas muy chicas retarda su desarrollo e
inclusive puede matarla.
Gusano elotero: Este insecto es una plaga importante del maíz en las regiones tropicales y
subtropicales de México; ya que además del daño físico que ocasiona, promueve la
entrada de hongos que producen pudriciones al grano en el campo y en el almacén.
Esta plaga es más frecuente en las siembras de otoño, donde pueden registrarse
infestaciones de hasta 50% de elote; no obstante, por el alto porcentaje de infestación,
se considera que es antieconómico el uso de insecticidas para su control, sobre todo
cuando el gusano está dentro del elote. Los adultos pueden ovipositar sobre las hojas
tiernas y en las brácteas del elote. Cada hembra deposita entre 1,000 y 3,000
huevecillos de forma esférica y de color blanco.
Una gran cantidad de huevecillos son eliminados por parásitos y depredadores. Las
larvitas que logran nacer, son parasitadas, depredadas o eliminadas por canibalismo
antes de causar daños.
Gusano falso medidor: Estos insectos son plaga de cierta importancia en diversos cultivos
como: algodonero, hortalizas, alfalfa, soya y otros cultivos.
La palomilla es de color café grisáceo y mide más o menos dos centímetros de largo.
Las alas anteriores tienen una mancha plateada semejante a un “8”. Las hembras
depositan sus huevecillos uno a uno en el follaje de las plantas y éstos tienen forma
aplanada y con estrías radiales. Las larvas son de color verde amarillento con una
banda clara a cada lado del cuerpo; el extremo anterior de éste es más delgado que el
posterior; poseen tres pares de falsas patas en el 5º, 6º y 9º segmento abdominal. El
daño principal de este insecto es la defoliación de las plantas.
Gusano rosado: Este insecto está catalogado entre las 10 plagas agrícolas más importantes
en el mundo. Se encuentra en todas las regiones algodoneras del Noroeste. Las
palomillas son alargadas, de color café-grisáceo con manchas oscuras, parecidas a la
palomilla de la ropa; ovipositan durante una semana de 30 a 50 huevecillos,
depositándolos uno a uno o en pequeños grupos, principalmente en las brácteas de los
botones florales. Los huevecillos son de color blanco-verdoso, ovalados y con la
superficie finamente rugosa, siendo difícil verlos a simple vista; bajo condiciones de
verano eclosionan en unos 5 días. Las larvas recién nacidas son blancas cristalinas con
la cabeza oscura e inmediatamente minan la corteza de los botones florales o bellotas.
Posteriormente, penetran en busca de las semillas con que se alimentan. Tienen 4
intares larvarios, en el último de ellos llegan a medir hasta 12 milímetros de largo; las
larvas son robustas, de color rosado con la cabeza café.
Gusano peludo: Este insecto es considerado actualmente como una plaga secundaria del
cultivo del algodonero, ya que se presenta a fin de temporada y con bajas infestaciones.
Los machos y hembras miden entre 5 y 6 centímetros de largo de punta a punta de las
alas; en ambas palomillas, las alas anteriores son de color blanco nieve, salpicadas con
puntos negros. En el macho las alas posteriores son amarillas por arriba y por abajo, y
en las hembras son blancas. Las hembras depositan sus huevecillos en grupos hasta de
60 unidades; éstos son blancos y antes de eclosionar se tornan de color morado. Las
larvas en sus primeros instares se alimentan en el envés de la hoja en que nacieron,
después se dispersan y se alimentan separadamente. Cuando llegan a su desarrollo
máximo miden aproximadamente 5 centímetros de longitud. Predomina en su cuerpo
el color amarillo y están cubiertas de pelos de color negro.
Gusano perforador de la hoja: Esta plaga constituye uno de los problemas más serios del
cultivo del algodonero. Los adultos son palomillas blancas, alargadas, que miden unos
6 milímetros de largo, con un mechón de escamas característico en la cabeza. Los
huevecillos son de forma elíptica y de color blanquizco, se requiere normalmente de
una lente para poder distinguirlos. El insecto los deposita de uno en uno en el envés de
las hojas, la eclosión de los huevecillos ocurre aproximadamente a los tres días y la
larva emerge por la base del huevecillo; se introduce en los tejidos de la hoja formando
una mina delgada y sinuosa en la que completa los dos primeros instares; al final de la
mina la larva muda y sale para alimentarse del envés de la hoja, después de un día
entra en un periodo de reposo conocido como estado de “herradura”, encontrándose
cubierta por una telaraña de seda; al otro día, muda y se convierte en larva de cuarto
instar que se alimenta del envés de las hojas.
La larva del gusano perforador de la hoja es de color gris con manchas negras,
cuando se le disturba se deja caer colgándose en un hilo de seda. Para pupar, hila un
capullo de seda, quedando pegado a cualquier parte de la planta o en el mismo suelo.
Gusano verde de la alfalfa: Este insecto causa considerables daños al cultivo de la alfalfa
cuando las poblaciones de larvas son abundantes. Los adultos son mariposas de color
amarillo, con tonalidades bronceadas o anaranjadas, los márgenes de los extremos
salientes de las alas son de color oscuro. Las hembras depositan sus huevecillos en
forma aislada en el envés de las hojas. Los huevecillos son alargados, en forma de barril
y marcados por estrías longitudinales, las larvas completamente desarrolladas son de
color verde oscuro, de apariencia aterciopelada y con una línea blanca delgada. Para
pupar la larva se adhiere a los tallos de la alfalfa y tira un hilo de seda sobre su cuerpo,
poco más arriba de la mitad, en lo cual mantiene erguida su cabeza.
Minador: Esta plaga ataca al melón, sandía, alfalfa, frijol, jitomate, chile, etc., donde es
común que se presente con cierta frecuencia. El adulto mide aproximadamente 2.5
milímetros de longitud, es de color amarillento con el dorso negro. Las hembras, tan
pronto como emergen las plantitas, insertan sus huevecillos en los tejidos de las hojas.
Las larvas al nacer son incoloras, pero al crecer se tornan de color amarillo, más
intenso en las que han alcanzado su desarrollo completo. La amplitud de las galerías
aumenta a medida que crece la larva; cuando ésta termina su desarrollo sale y pupa.
Gusano saltarín: Puede presentarse en campos de maíz y sorgo en pequeños focos de
infestación; las larvitas viven bajo tierra en la base de los tallos, perforándolos hacia
arriba, lo cual ocasiona que las plántulas atacadas se sequen de un día para otro.
Gusano soldado: Es muy común durante la post-emergencia del algodonero, llegando a
encontrarse infestaciones de más de 50% de plantas dañadas. Las palomillas son de
color café grisáceo; miden 1.5 centímetros de largo; depositan sobre la planta unos
500 huevecillos en varios grupos, cubiertos por escamas de su cuerpo; las larvitas
emergen a los 3 ó 4 días y se alimentan de las hojas; en los primeros instares, se les
encuentran agrupadas y posteriormente se dispersan a la plantitas vecinas. Las larvas
chicas son de color verde-claro con la cabeza negra; las grandes, de color verde obscuro
–en diversas tonalidades– con bandas claras a lo largo del cuerpo. Alcanzan 2.5
centímetros de largo. Cuando se les disturba se enroscan y caen al suelo.
Gusano trozador: Se ha encontrado trozando plantitas de maíz y sorgo durante el periodo
de posemergencia. Las palomillas son de tamaño medio y de colores oscuros; son
atraídas fuertemente por las luces; depositan sus huevecillos cerca de las plántulas
recién emergidas. Las larvitas se alimentan de las plantitas mordiéndolas arriba de la
base del tallo, ocasionando su muerte. Un solo gusano puede destruir todas las
plántulas de varios metros de surco, aunque los gusanos no consumen más que una
pequeña parte de ellas. Las larvas pupan en el suelo; el aspecto y forma de las pupas es
similar a las del gusano cogollero y gusano elotero.
Mosquita blanca: Las mosca blanca afecta a los cultivos de algodonero, cucurbitáceas,
chile, frijol y otros cultivos. Los adultos miden aproximadamente 1.5 centímetros de
largo; el cuerpo es amarillento y las alas están cubiertas por polvillo ceroso de color
blanco. Cada hembra deposita más de 100 huevecillo de color amarillento, mismo que
se adhiere en el envés de las hojas; cuando nace la ninfa, ésta es delgada y
transparente, después, su cuerpo toma un color verde y presenta prolongaciones
radiales de cera; en ese periodo el insecto pasa por cuatro instares. Tanto a las ninfas,
como a los adultos se les localiza en el envés de las hojas succionando la savia de la
planta.
Periquito tricornudo: Este insecto es una plaga secundaria de diversos cultivos, entre los
cuales están la alfalfa y el algodonero. Los adultos miden unos 8 milímetros de largo,
saltan cuando se les disturba y vistos dorsalmente tienen una forma triangular. Son de
color verde claro, con el pronoto desarrollado y con los bordes laterales rojizos, las
ninfas se parecen a los adultos; son de color verde claro y muy espinosas. Estos insectos
se alimentan chupando la savia del follaje. Otro daño importante lo provocan al
ovipositar en la parte baja de los tallos, donde insertan varios huevecillos; ahí se
desarrollan lesiones y callosidades en forma de corona, y cuando se presentan fuertes
vientos puede ocurrir el rompimiento del tallo en esa parte.
Picudo egipcio: Es la principal plaga de la alfalfa en el Valle de Mexicali. El adulto mide
unos 6 milímetros, es de color café, variando de oscuro a claro y con una mancha
oscura en el pronoto y la base de los élitros, la cual es más acentuada en H. postica. En
el Valle de Mexicali, los adultos salen de estivación a fines de noviembre; ovipositan de
diciembre a enero, registrándose las mayores infestaciones de larvas de febrero a abril.
Los huevecillos son ovalados, de color anaranjado claro y son depositados –en grupos
de 20 a 30– en cavidades hechas en los tallos por la hembra, la cual llega a ovipositar
hasta 800 huevecillos. Las larvas miden unos 12 milímetros, son ápodas, arqueadas, de
color verde amarillento con cabeza oscura; se les encuentra de enero a marzo sobre el
follaje; en los primeros instares, se alimentan en el interior del tallo; a los pocos días
salen y se alimentan de los cogollos; en 3 a 4 semanas alcanzan su madurez y pupan en
un capullo rudimentario que fijan al suelo o a residuos vegetales.
Pulgón azul: Esta especie es una plaga de la alfalfa relativamente nueva en México; en el
Valle e Mexicali se presenta de enero a abril, conjuntamente con el “pulgón verde”,
con el cual se cofunde. El pulgón azul es de color verde-azulado con las antenas cafés;
se reconoce fácilmente por tener un anillo oscuro en la parte apical del 3º segmento
antenal. Las colonias de adultos y ninfas se detectan en los brotes de la parte superior
de la planta, en donde chupan la savia, para lo cual inyectan toxinas anticoagulantes
que causan el amarillamiento y enchinado de las hojas; las infestaciones severas causa
malformación y achaparramiento de las plantas.
Pulgón manchado: Este insecto es una plaga de la alfalfa muy importante en México, pero
en el Noroeste su incidencia es muy baja; sin embargo, se le considera una plaga
potencial forrajera. Los adultos y sus 5 instares ninfales se caracterizan por tener al
abdomen de color verde-amarillento con 6 hileras de pináculos cerdígeros de color
café-oscuro. Las alas tienen áreas espinuladas que les dan la apariencia de estar
manchadas. Los cornículos son muy cortos tanto en los adultos como en las ninfas.
Adultos y ninfas chupan la savia del follaje haciendo que las hojas se pongan
amarillentas y baja la calidad forrajera; en infestaciones severas pueden defoliar las
plantas. Además de este daño, la plaga produce abundante mielecilla, en donde se
desarrolla fumagina que mancha el forraje y afecta su calidad.
Pulgón del cogollo: Este insecto es una plaga de cebada, sorgo, maíz, trigo y otras
gramíneas. El adulto es de color verde azulado, tiene las antenas, patas y cornículos de
color negro. Se le encuentra principalmente en los cogollos de las plantas en
poblaciones altas, las plantas atacadas se pueden identificar por el enmielado y la
coloración negruzca que presentan debido a la presencia de fumagina. Esta plaga es
considerada como un importante vector de la enfermedad virosa del trigo y cebada
“enanismo amarillo”, la cual hace que el follaje de la planta adquiera coloraciones
amarillentas o rojizas y atrofie su desarrollo y fructificación. Esta especie es parasitada
por la avispita lisiflebus.
Pulgón del follaje: Esta especie de áfido es la plaga de mayor importancia en el cultivo del
trigo, pero también se le encuentra en el maíz, sorgo, cebada y otras plantas. Los
adultos son de color verde claro, con una mancha oscura a lo largo del dorso, los
cornículos son moderadamente largos y convergentes, con las puntas oscuras al igual
que las patas. Los daños son causados cuando el pulgón se alimenta succionando la
savia de las plantas, con lo cual ocasiona manchas amarillentas que posteriormente se
tornan de color café oscuro, ya que los tejidos mueren a causa de las toxinas inyectadas
al momento de alimentarse.
Pulgón del tallo: Este insecto es una plaga que ha adquirido importancia en los cultivos de
trigo y cebada en la región; a la fecha, se ha requerido de insecticidas para el control de
sus altas poblaciones. En el campo, la característica principal para identificar a esta
especie es su hábito de formar colonias en los tallos de las plantas, también lo distingue
su color y la presencia de una mancha café-rojiza que abarca los cornículos.
Pulgón de la raíz: Este insecto se presenta en el cultivo de trigo en poblaciones bajas, sin
causar problemas a nivel regional. Los adultos tienen forma redondeada, de color café
oliváceo, variando hacia café rojizo en la base de los cornículos; éstos son cortos y de
color claro. Las mayores incidencias de esta plaga se encuentran en los bordos de las
melgas, lo que indica que esta plaga es afectada por el exceso de humedad. Las
colonias de pulgones se agrupan chupando la savia alrededor de la parte del tallo que
se encuentra bajo tierra y en la raíces.
Pulga negra: Este insecto es una plaga de cierta importancia en el maíz y el sorgo,
particularmente cuando la planta se encuentra en sus primeras etapas de desarrollo.
Entre sus plantas hospederas se encuentra el trigo, la alfalfa y los pastos silvestres. Los
adultos son de color cobrizo brillante, pero a simple vista parecen negros; miden más o
menos 1.5 milímetros de longitud, las patas son claras, excepto los últimos segmentos
y los fémures posteriores. Los huevecillos son depositados en la base de los tallos y las
larvitas viven alimentándose de las raíces. Los daños son ocasionados cuando la planta
es pequeña, o sea durante el primer mes de desarrollo del cultivo; los adultos se
encuentran en el cogollo en grandes cantidades, alimentándose de las hojas en las que
ocasionan pequeños agujeros, restringiendo el desarrollo de la planta.
Pulgón verde: Comúnmente se le encuentra en la alfalfa y es de tamaño grande de
coloración verde brillante. Esta especie causa daños que se manifiestan principalmente
por la coloración verde amarillenta en el follaje.
Pulga saltona: Este insecto se presenta en el cultivo de algodonero, principalmente al
inicio del papaloteo; también es comúnmente encontrado en la alfalfa y otras plantas.
El adulto mide unos 3.5 milímetros de largo, es de color verde-amarillento, frágil y
rápido en sus movimientos; presenta manchas oscuras en las antenas y en las patas.
Tanto adultos como ninfas chupan las yemas terminales y botones florales del
algodonero; los cuadros pequeños se caen, las plantas infestadas pueden desarrollar
muchos brazos que se alargan en forma exagerada.
Pulga saltona negra y otras especies: Este insecto se presenta en el cultivo de algodonero,
principalmente al inicio del papaloteo; también es comúnmente encontrado en al
alfalfa y otras plantas. El adulto es negro brillante, muy parecido a la chinche pirata,
pero de mayor tamaño, pues mide aproximadamente 2.5 milímetros de longitud. Con
microscopio se puede identificar porque tiene los fémures posteriores muy largos y
fuertes; presenta dimorfismo sexual, consiste en que el macho tiene el segundo
segmento antenal ensanchado.
Trips: Estos insectos atacan a una gran diversidad de cultivos, entre los cuales están el
algodonero, alfalfa, frijol, hortalizas, remolacha y otros cultivos. El adulto mide
aproximadamente 1.0 milímetros de largo y es amarillo pajizo; las ninfas son
blanquizcas y cristalinas. Las hembras depositan sus huevecillos en los tejidos de las
plantas. El daño lo causan los adultos y ninfas al raspar y chupar los tejidos
epidérmicos para alimentarse. Las hojas pueden aparecer rasgadas y arrugadas con
manchas blanquizcas y plateadas en el envés. Cuando atacan a hojas y yemas de
plantas jóvenes el crecimiento se detiene.
Maleza
Maleza más común en el Valle de Mexicali
Maleza anuales de verano
Cuscuta
Chamizo
Enredadera o trompillo
Girasol
Quelite o bledo
Tomatillo
Verdolaga
Zacate de agua o pinto
Zacate huachapore
Zacate salado
Maleza anuales de invierno
Avena silvestre
Alpiste silvestre
Alambrillo
Cola de zorra
Chual
Mostacilla
Mostaza
Lechuguilla
Lengua de vaca
Trébol amarillo
Maleza perennes
Coquillo
Gloria de la mañana o corre vuela
Zacate gramma
Zacate Johnson
Enfermedades
Descripción de las principales enfermedades de cultivos en el Valle de Mexicali
Cenicilla vellosa (Peronospora trifoliorum DBy): Esta enfermedad puede presentarse en
los primeros meses del año, sobre todo si hay exceso de humedad en el ambiente. Los
síntomas se caracterizan por la aparición de manchas de color verde claro en las hojas,
especialmente en las puntas de los tallos, observándose una vellosidad color grisáceo
sobre la superficie foliar afectada. Se advierte también alargamiento de los entrenudos.
Para el control de la cenicilla se recomienda adelantar los cortes y reducir la lámina y
frecuencia de los riegos, después del corte se sugiere hacer espolvoreaciones de Azufre,
karathane o zineb.
Chahuixtle de la alfalfa (Uromyces medicaginis Pass Corda): Puede presentarse en el
cultivo durante el otoño. Como síntoma aparecen en las hojas y tallos unas pústulas
color castaño rojizas. Para su control se recomienda principalmente adelantar el corte
y después se sugiere hacer espolvoreaciones de Azufre o zineb. También pueden
hacerse aspersiones de Azufre humectable o zineb líquido.
Chahuixtle del cártamo (Puccinia carthami Hutz Corda): Se observan póstulas aisladas,
polvorientas, de color café rojizo, prominentes, alargadas. Con la epidermis de la
planta hospedera rota en torno a la pústula y al pasar los dedos sobre ella desprenden
un polvo rojizo constituido por las esporas del hongo. Con el tiempo, las pústulas
aumentan de tamaño y son más numerosas llegando a unirse unas con otras para
formar lesiones que circundan el tallo, principalmente la base. Cuando las plantas
empiezan a madurar y adquirir un color dorado, las pústulas son de color negro y no
presentan el aspecto polvoriento. Se controlo usando variedades resistentes a esta
enfermedad.
Pudrición carbonosa (Macrophomina phaseoli Maubl Asbbg): El hongo que causa esta
enfermedad ataca desde el nivel del cuello hacia arriba, observando una coloración
obscura.
Secadera, pudrición de la raíz o Damping off: Esta enfermedad es ocasionada principalmente
por hongos del suelo pertenecientes a los géneros Fusarium, Pythium y Rhizoctonia. Es
común en siembras tempranas durante periodos fríos. Al principio se observan fallas
en la población de plantas o marchitamiento rápido de las plantas recién emergidas. Al
extraer del suelo semillas germinadas o plantitas marchitas, se observa la pudrición de
la semilla, embriones y cuello de la raíz, o sea, la parte del tallo más cercana a la
superficie del suelo presenta un estrangulamiento y pudrición de los tejidos.
Se consideran dos tipos de ahogamiento: cuando la planta no llega a nacer, que
ocasiona las fallas en la siembra; y el otro tipo, que afecta las plantitas recién nacidas.
Los suelos pesados mal preparados para la siembra, con fallas en nivelación, drenaje
defectuoso y mal manejo de agua, presentan las condiciones favorables para que se
desarrolle rápidamente esta enfermedad. El control de esta enfermedad se logra
teniendo en cuenta las siguientes recomendaciones preventivas:
Evitar las siembras antes del periodo recomendado.
Emplear semilla certificada y tratada con fungicida.
Evitar excesos de humedad en el suelo.
Pudrición texana: El hongo que causa esta enfermedad ataca más de dos mil especies de
plantas de hoja ancha, entre cultivadas y silvestres; escapan al hongo aquellas de hoja
angosta como los cereales, algunos pastos y hortalizas. Se ha observado que el
problema de pudrición texana es mayor en suelos ligeros y es más severo cuando se
cultiva el algodonero durante varios años. Los síntomas del hongo empiezan a atacar a
las plantas a mitad de la temporada y continúa hasta el final del ciclo. Al principio las
hojas se tornan de un color amarillento o bronceado, después toman un color castaño,
se secan y permanecen adheridas a la planta. La pudrición se observa en la raíz, la cual
se oscurece y presenta filamentos blanquecinos sobre su corteza. Para el control se
recomiendan las siguientes medidas de control preventivo:
Rotar cultivos incluyendo cereales, pastos y algunas hortalizas, además de
leguminosas (a excepción de alfalfa), que pueden incorporarse como abonos
verdes.
Realizar labores de labranza profunda al suelo para favorecer su aireación y evitar
el exceso de humedad.
Aplicar la dosis de Nitrógeno que se recomienda en este folleto para asegurar un
buen desarrollo del cultivo.
Pudrición de bellota: Esta enfermedad es causada por una gran variedad de hongos y
bacterias, y el ataque es más severo en campos donde la planta ha desarrollado mucho
follaje, cuando se aplican riegos pesados y se presentan infestaciones intensas de
gusano rosado. Aunque los síntomas son muy diversos se observan en ocasiones áreas
hundidas y descoloridas en la superficie de la bellota. La enfermedad causa la
destrucción de la semilla y de la fibra y cuando esta última es cosechada resulta
manchada y con baja calidad.
La disminución en el rendimiento por pudrición de bellotas puede disminuirse al
evitar la sobre fertilización y otras prácticas culturales que ocasionan el desarrollo
excesivo de follaje. Una medida muy importante para reducir las pudriciones de
bellotas es realizar un eficaz combate de gusano.
AGRICULTURA DE CONSERVACIÓN
Agricultura de conservación.
Un sistema sustentable
¿Qué es la agricultura de conservación?
La agricultura de conservación (AC) es un sistema de producción agrícola que se basa en
tres principios: a) remoción mínima del suelo (sin labranza); b) cobertura del suelo
(mantillo) con los residuos del cultivo anterior, con plantas vivas, o ambos; y c) rotación
de cultivos, para evitar plagas y enfermedades, y diseminación de malezas.
¿En qué tipo de suelo se puede practicar?
Los principios de la AC son muy adaptables. Los agricultores utilizan la AC en una amplia
gama de suelos, bajo diferentes condiciones ambientales y en distintas realidades del
agricultor (recursos económicos, tamaño de parcela, maquinaria, mano de obra,
etcétera).
El maíz sembrado sin labranza, directamente en una buena capa de residuos, es un excelente punto de partida
para la agricultura de conservación.
¿Qué cultivos se pueden sembrar?
La gran mayoría de los cultivos se produce bien con AC. A nivel mundial es utilizada en
amplias superficies con maíz, trigo, soya, algodón, girasol, arroz, tabaco y muchos otros
cultivos. Incluso en la producción de tubérculos, como la papa, aunque durante la
cosecha se remueve mucho el suelo.
¿Qué beneficios se obtienen?
Beneficios inmediatos
Aumenta la infiltración de agua debido a que la estructura del suelo queda
protegida por los residuos y al no haber labranza los poros se conservan intactos.
Además los residuos bajan la velocidad del escurrimiento, dando más tiempo al
agua para infiltrarse.
Se reduce el escurrimiento de agua y la erosión del suelo al aumentar la
infiltración de agua.
Se evapora menos humedad de la superficie del suelo al quedar protegida de los
rayos solares por los residuos.
El estrés hídrico de las plantas es menos frecuente e intenso, gracias a que, al
aumentar la infiltración de agua y disminuir la evaporación del suelo, aumenta la
humedad.
Se necesitan menos pasadas de tractor y mano de obra para preparar el terreno y,
por consiguiente, disminuyen los costos de combustible y mano de obra.
Beneficios a mediano y largo plazo
Una mayor cantidad de materia orgánica (MOS) que mejora la estructura del
suelo, aumenta la capacidad de intercambio de cationes y la disponibilidad de
nutrientes, y mejora la retención de agua.
Los rendimientos aumentan y son más estables.
Se reducen los costos de producción.
Aumenta la actividad biológica tanto en el suelo como el ambiente aéreo; esto
contribuye a mejorar la fertilidad biológica y permite establecer un mejor control
de plagas.
¿Qué tipo de problemas encontraré?
Forma de pensar
A muchos agricultores, técnicos e investigadores les resulta difícil entender que es posible
sembrar sin arar, y que es igual o más productivo que la siembra convencional. Cambiar
de forma de pensar respecto al manejo agrícola es uno de los desafíos más grandes que
hay que enfrentar. La AC no es una receta. Por eso, es necesario que quienes deseen
adoptarla averigüen, entiendan y apliquen los principios de esta tecnología en sus
condiciones particulares.
Retención de residuos
La AC no da buenos resultados sin la retención de residuos en la superficie del suelo. Sin
embargo, la mayoría de los pequeños productores manejan sistemas agropecuarios mixtos
y utilizan los residuos para alimentar a sus animales durante la temporada de sequía, para
la venta u otros usos. Para aminorar este conflicto, se puede iniciar la AC en una pequeña
parte de la parcela. Una vez que el agricultor haya adquirido experiencia con el sistema y
sus rendimientos hayan aumentado, entonces, podrá destinar parte de los residuos de la
cosecha para alimentar a sus animales, dejar suficiente para proteger la superficie del
suelo y, en el siguiente ciclo, comenzar a practicar la AC en una superficie más extensa de
la parcela.
Control de malezas
En los primeros ciclos de la AC es muy importante el control de malezas. Éste se puede
efectuar de manera eficaz aplicando herbicidas, en forma manual, sembrando cultivos de
cobertura, o combinando estos procedimientos, con lo cual se evitará que las malezas
produzcan semilla. Si se logra un buen control, las poblaciones de malezas se reducen
después de los primeros dos o tres ciclos de cultivo.
Aplicación de nitrógeno
Los residuos de la cosecha y la materia orgánica del suelo (MOS) son descompuestos por
organismos del suelo de manera que, con el tiempo, las plantas pueden aprovechar el
nitrógeno contenido en estos materiales orgánicos. Con la labranza, la descomposición es
muy rápida, tanto que los niveles de MOS bajan y el suelo se degrada. Sin labranza la
mineralización y la descomposición de la MOS se reducen y proporcionan nitrógeno y
otros nutrientes a las plantas, en forma más lenta y uniforme. Sin embargo, en suelos muy
degradados y con poca MOS la disponibilidad de nutrientes puede ser pobre para las
plantas, por lo cual es necesario aplicar más nitrógeno (estiércol, composta o fertilizante)
durante los primeros años en los que se practica la AC.
¿Qué se necesita para iniciar?
Información
Es muy importante obtener información de agricultores y técnicos con experiencia en el
sistema. Los agricultores deben iniciar la AC en una superficie pequeña
(aproximadamente 10% de la propiedad), para aprender primero cómo manejar la
técnica.
Preparación
Se dispone el terreno con anticipación: romper la compactación, nivelar la
superficie, eliminar las malezas y los problemas de acidez.
Conseguir el equipo adecuado para la siembra y el control de malezas.
Producir suficiente residuo o rastrojo.
Implementación
Es importante lograr un buen control de malezas evitando que ellas produzcan
semilla.
Comenzar con una buena rotación de cultivos para proporcionar nutrientes,
producir una mayor cantidad de residuos y controlar las malezas.
Si los suelos son muy arenosos o se han degradado, aplicar más fertilizante
nitrogenado, estiércol o composta.
1. El problema de la degradación del suelo
¿Qué es la degradación del suelo?
La erosión ocasiona una disminución de la materia orgánica y la fracción fina de
partículas en el suelo, y la pérdida de la fertilidad es el resultado de la degradación del
suelo. Un suelo degradado provoca la disminución progresiva de los rendimientos de los
cultivos, el aumento de los costos de producción, el abandono de las tierras o al
incremento de la desertificación. La labranza es la causa principal de la degradación de
las tierras de cultivo, porque ocasiona una rápida desintegración de la materia orgánica y
reduce la fertilidad del suelo.
¿Qué es un suelo fértil?
Un suelo fértil permite alcanzar un buen nivel de producción, que sólo es limitado por
las condiciones ambientales (humedad y radiación) o un manejo agronómico
inadecuado. La fertilidad es un conjunto de tres componentes: la fertilidad química, la
fertilidad física y la fertilidad biológica. Si alguno de estos componentes disminuye, esto
normalmente conduce a la reducción de los rendimientos, como resultado de la
reducción de la materia orgánica.
Degradación del suelo, después de una fuerte tormenta, causada por
un manejo agronómico inapropiado (Foto: Moriya, 2005)
¿Qué es la fertilidad química del suelo y cómo se puede conservar y mejorar?
La fertilidad química es la capacidad del suelo de proporcionar todos los nutrientes que
el cultivo necesita: si dichos nutrientes no están presentes en una forma accesible a las
plantas o se encuentran a profundidades donde las raíces no llegan, no contribuirán al
crecimiento del cultivo.
La disponibilidad de nutrientes es normalmente mayor cuando éstos se asocian con la
materia orgánica y con la aplicación de estiércol, fertilizante, composta o cal.
¿Qué es la fertilidad física del suelo y cómo se puede conservar y mejorar?
La fertilidad física es la capacidad del suelo de facilitar el flujo y almacenamiento de
agua y aire en su estructura, para que las plantas puedan crecer y se arraiguen
firmemente a éste. Para que el suelo sea físicamente fértil, debe tener espacio poroso
abundante e interconectado. Generalmente, existe ese tipo de espacio cuando se forman
agregados, que son partículas de suelo unidas por materia orgánica. La labranza deshace
los terrones, descompone la materia orgánica, pulveriza el suelo, rompe la continuidad de
los poros y forma grandes capas compactas que restringen el movimiento del agua, el aire,
y el crecimiento de las raíces. Un suelo pulverizado es más propenso a la compactación,
al encostramiento y la erosión. Para disminuir este problema, es necesario reducir la
labranza al mínimo y aumentar la cantidad de materia orgánica.
Degradación física del suelo provocada por la labranza intensiva. La superficie está comprimida y encostrada
(Foto: Govaerts, 2004).
¿Cómo se puede conservar y mejorar la fertilidad biológica del suelo?
La fertilidad biológica del suelo se refiere a la cantidad y diversidad de fauna en el suelo
(lombrices, escarabajos, termitas, hongos, bacterias, nemátodos, etcétera). La actividad
biológica consiste en romper las capas compactas, descomponer los residuos de los
cultivos (incluidas las raíces), integrarlos al suelo, convertirlos en humus, y aumentar la
cantidad y continuidad de los poros. La labranza destruye los túneles y el hábitat de estos
organismos. La mejor manera de incrementar la actividad biológica en los suelos de
cultivo es crear un sistema lo más parecido a uno natural, suprimiendo la labranza y
dejando los residuos en la superficie del suelo.
¿Cómo detectar la degradación?
Una forma sencilla de detectar la degradación física del suelo es tomar unos terrones
pequeños de aproximadamente un centímetro de diámetro de un terreno arado y otro de
una tierra virgen cercana. Observe ambas muestras de suelo. La primera diferencia se
nota en el color más oscuro del suelo sin arar, debido a su mayor contenido de materia
orgánica; la segunda, cuando al colocar los terrones en un recipiente con agua, el terrón
de suelo arado se desintegra, en tanto que el otro permanece intacto. Para hacer una
tercera prueba, se afloja la tierra de un campo que haya sido arado y de una superficie sin
arar, y luego se observa la diferencia en el número y la diversidad de especies animales.
Por lo general, se observan más organismos en el terreno que no ha sido arado.
¿Cómo se puede evitar la degradación del suelo?
Los tres factores más importantes que causan degradación de los suelos agrícolas son: a)
la labranza (eliminación de la fertilidad física); b) la remoción de residuos
(principalmente para pastoreo o quema); y c) la extracción de nutrientes (no se aplican
cantidades adecuadas de estiércol, composta o fertilizante). Por tanto, la clave para evitar
la degradación es reducir al mínimo la labranza, dejar en la superficie tantos residuos
como sea posible y reponer los nutrientes que son absorbidos por los cultivos.
En la foto superior un terreno en que se aplicó AC y se dejó parte del rastrojo del cultivo anterior; abajo, un
terreno sin rastrojo y con labranza convencional. Terrenos en Toluca, Estado de México, después de una lluvia
intensa de 30 milímetros. (Foto: Delgado, 2005).
2. Agricultura de conservación
Los agricultores mexicanos, como casi todos los agricultores en el mundo, se enfrentan
hoy día principalmente a tres retos:
Los acontecimientos recientes a nivel mundial, que han ocasionado incrementos
en los costos, sobre todo de combustible, fertilizantes y otros insumos para la
producción de cultivos agrícolas.
La rápida degradación de la estructura del suelo, que afecta desfavorablemente
su composición química, ya que produce considerables reducciones del carbono
orgánico del suelo y reduce la abundancia biológica.
La escasez de agua, para producción tanto de riego como de temporal, es un
factor limitante, ya que no permite generar ni mantener grandes volúmenes de
productos que satisfagan las demandas de alimentos para consumo de los
habitantes de numerosos países en desarrollo, entre ellos, México.
Siembra directa sin mover el suelo. Un disco cortador abre el suelo, se deposita la semilla y la llanta
compactadora cierra la abertura.
El maíz es el principal cultivo básico y estratégico para la alimentación en México; sin
embargo, en años recientes, su costo de producción se ha elevado. Esta situación ha
creado un entorno de baja competitividad para los productores de las diferentes zonas
productoras de riego o de temporal en términos de costo-beneficio y, por ende, la
rentabilidad del cultivo ha decrecido.
Ante el panorama de inseguridad, la AC constituye una solución potencial. La AC se basa
en tres principios: reducir al mínimo el movimiento del suelo; dejar el rastrojo del cultivo
en la superficie del terreno para que forme una capa protectora; practicar la siembra de
diferentes cultivos, uno después de otro, o sea, la rotación de cultivos.
Rastrojo
El rastrojo es una base importante de la AC, ya que si no hay residuos no puede existir este
sistema. Por tanto, si usted piensa eliminar o quemar todos los residuos de su cosecha, no
aplique AC, porque podría obtener resultados más negativos que si sembrara con labranza
convencional. La importancia de dejar los residuos es lograr una buena cobertura y
proteger al suelo del viento, así como retener la humedad, lo cual contribuirá a una buena
germinación. Aunque esto no significa dejar todo el rastrojo, si los residuos son
importantes para usted porque debe alimentar a sus animales, se recomienda consultar
con un técnico cuál es la cantidad adecuada para la zona.
La quema del rastrojo no es una práctica aconsejable en el uso de labranza de conservación.
El rastrojo de trigo forma una pantalla que ayuda contra las heladas.
Después o durante la cosecha, el rastrojo se distribuye de manera uniforme, para que
forme un colchón que proteja el suelo.
La AC reduce los costos de producción y la mano de obra; aumenta la competitividad de
los agricultores y los ingresos de éstos en los sistemas de producción de maíz; y representa
una excelente opción para conservar los recursos naturales, dado que:
Mejora la textura y la estructura del terreno.
Favorece la infiltración del agua y la retención de la humedad.
Retiene por más tiempo la humedad del suelo en zonas de temporal o de riego,
promueve el uso eficiente del agua y genera ahorros en su consumo durante el
riego.
Mejora las propiedades químicas y biológicas del suelo.
Aumenta el nivel de materia orgánica.
Reduce la erosión.
Disminuye la quema del rastrojo.
Al reducirse el uso de maquinaria agrícola, se ahorra combustible; hay menos
emisiones de contaminantes y menor compactación del suelo, que se asocia al
exceso de pases de maquinaria. Los beneficios finales para los agricultores serán
una agricultura sostenible y más rentable y la reducción de costos, que se
traducen en mayores ingresos.
La agricultura de conservación tiene gran potencial en México. A continuación se
ilustra la gran diferencia en el comportamiento de una variedad de maíz o de trigo, con la
misma cantidad de fertilizante y el mismo control de herbicidas, pero bajo distintos
sistemas de manejo.
3. Importancia de los residuos
Los residuos o rastrojos son las partes secas que quedan del cultivo anterior, incluidos los
cultivos de cobertura, los abonos verdes u otros materiales vegetales traídos de otros
sitios. Los rastrojos son un factor fundamental para la correcta aplicación de la
agricultura de conservación (AC). En los sistemas agrícolas convencionales, los residuos
normalmente se utilizan para alimentar a los animales, o bien se retiran del campo para
otros usos, se incorporan o se queman. En muchos lugares, existen derechos de pastoreo
comunales, situación que podría crear conflictos al querer proteger los residuos que
quedan en la superficie del suelo de los animales que andan sueltos en busca de alimento.
Sin embargo, como los agricultores que aplican la AC obtienen mayores beneficios con la
retención de residuos, algunas comunidades han encontrado formas de resolver este
problema.
¿Cuáles son los beneficios del rastrojo en la AC?
Mayor infiltración de agua.
Menor evaporación de agua.
Mayor volumen de agua disponible para los cultivos.
Menor erosión por agua y viento.
Más actividad biológica.
Mayor producción de materia orgánica y disponibilidad de nutrientes para las
plantas.
Temperaturas moderadas del suelo.
Menos malezas.
La retención de residuos, ¿cómo aumenta la infiltración de agua?
La estructura de los suelos donde se elimina el rastrojo, o que se laborean, es
generalmente débil como consecuencia de la labranza. A esto se suma la acción
destructiva de las gotas de lluvia, que hace que las partículas del suelo se dispersen, se
tapen los poros y se compacte la superficie, impidiendo la infiltración del agua. Por el
contrario, en los sistemas de AC, con nulo movimiento de suelo, los residuos permanecen
en la superficie y la protegen, con lo cual aumenta también la actividad biológica, hay
una mayor cantidad de poros y, en consecuencia, mayor infiltración de agua.
¿Cómo reducen los residuos la evaporación?
Los residuos protegen el suelo no sólo del impacto de las gotas de lluvia, sino también de
los rayos solares que evaporan el agua de la superficie del suelo y de la deshidratación a
causa del viento. Por eso, normalmente se encuentra tierra húmeda debajo de los
residuos.
¿Cómo aumentan los residuos la cantidad de agua?
Con los residuos hay menos pérdida de evaporación y aumenta la penetración del agua
de lluvia en el suelo, es decir, se incrementa la infiltración; por eso hay más agua en el
suelo para las plantas. Puede que una parte del agua adicional se pierda y no sea
aprovechada por el cultivo, pero en la mayoría de los casos, sobre todo en zonas secas o
de temporal, habrá más agua disponible para las plantas.
Los residuos, ¿cómo protegen el suelo de la erosión?
Los residuos, al aumentar la infiltración, estimulan una mayor penetración de agua en el
subsuelo. Asimismo, hacen que sea más lento el escurrimiento de agua por el terreno. La
combinación de estos dos factores reduce significativamente el efecto de la erosión
hídrica. Los residuos también protegen el suelo del viento y cuando éste deja de ser
removido por la labranza durante la aplicación de las prácticas de AC, hay una marcada
disminución de la erosión eólica.
¿Cómo aumentan los residuos la actividad biológica?
En la AC, si se dejan los residuos en la superficie del suelo se genera una fuente constante
de alimento y un hábitat para los organismos del suelo, que propicia además un aumento
en su población. Muchos de estos organismos crean poros en el suelo o destruyen plagas
que atacan los cultivos. Cuando se practica la agricultura convencional únicamente el
cultivo está presente: no hay fuentes de alimento para los organismos del suelo, ni hábitat
para los insectos benéficos.
¿Cómo afecta la retención de residuos a la materia orgánica del suelo y los nutrientes de las
plantas?
La actividad biológica fomentada por la retención de residuos y la ausencia de labranza
(prácticas de AC), permite que la materia orgánica permanezca más tiempo en el suelo en
forma de humus. Los nutrientes contenidos en el humus son más accesibles a las plantas
que las formas inorgánicas (fertilizantes). Sin embargo, también es posible que los
residuos inmovilicen el nitrógeno y, por ello, quizá sea necesario aplicar un poco más de
estiércol o fertilizante nitrogenado en los primeros años que se aplique la AC.
Los residuos, ¿tienen algún efecto sobre las malezas?
En la AC, cuando se combinan la retención de residuos y la aplicación de herbicidas,
disminuyen las poblaciones de malezas, porque los residuos funcionan como una barrera
que restringe la germinación y el crecimiento de las malezas.
Los residuos, ¿tienen algún efecto en la temperatura del suelo?
Los residuos en la superficie protegen el suelo de la radiación solar y, por tanto, éste no se
calienta mucho durante el día. En la noche, los residuos actúan como una cobija que
conserva el calor del suelo. En algunos climas fríos, el hecho de que el suelo esté helado
puede obstaculizar la germinación de la semilla, pero esto es poco probable en zonas
tropicales.
Relación entre la cubierta de residuos en la superficie y el porcentaje de agua infiltrado del total de agua de
riego aplicado. (Verhulst, 2008).
4. La importancia de la rotación de cultivos
¿Qué es la rotación de cultivos?
La rotación de cultivos es la siembra sucesiva de diferentes cultivos en un mismo campo,
siguiendo un orden definido (por ejemplo, maíz-frijol-girasol o maíz-avena).
En contraste, el monocultivo es la siembra repetida de una misma especie en el mismo
campo, año tras año.
¿Qué problemas se presentan con el monocultivo?
En los sistemas de monocultivo, al paso del tiempo se observa un incremento de plagas y
enfermedades específicas del cultivo. Asimismo, la cantidad de nutrientes disminuye,
porque las plantas ocupan siempre la misma zona de raíces y en la temporada siguiente
las raíces no se desarrollan bien.
¿Cuáles son las ventajas de la rotación de cultivos?
Se reduce la incidencia de plagas y enfermedades, al interrumpir sus ciclos de
vida.
Se puede mantener un control de malezas, mediante el uso de especies de cultivo
asfixiantes, cultivos de cobertura, que se utilizan como abono verde o cultivos de
invierno cuando las condiciones de temperatura, humedad de suelo o riego lo
permiten.
Proporciona una distribución más adecuada de nutrientes en el perfil del suelo
(los cultivos de raíces más profundas extraen nutrientes a mayor profundidad).
Ayuda a disminuir los riesgos económicos, en caso de que llegue a presentarse
alguna eventualidad que afecte alguno de los cultivos.
Permite balancear la producción de residuos: se pueden alternar cultivos que
producen escasos residuos con otros que generan gran cantidad de ellos.
Datos importantes acerca de las rotaciones de cultivos
Los efectos del monocultivo son más notorios en la agricultura de conservación
(AC) que en los sistemas convencionales. Cuando se utiliza AC, las rotaciones
suelen dar mejores resultados que el monocultivo, incluso si no incluyen
leguminosas.
Muchos de los beneficios de las rotaciones no se entienden. Por tanto, es
necesario ensayarlos y compararlos en el campo y en los terrenos del agricultor.
Las rotaciones no son suficientes para mantener la productividad, por lo cual es
necesario reponer los nutrientes extraídos con fertilizantes o abonos.
Las rotaciones más seguras combinan cultivos con diferentes modos de
crecimiento (enraizamiento profundo versus enraizamiento superficial;
acumulación de nutrientes versus extracción de nutrientes; acumulación de agua
versus consumo de agua, etcétera).
5. Control de malezas en la agricultura de conservación
Una de las razones principales por la que los agricultores laborean el suelo es porque
pueden incorporar los residuos de la cosecha anterior y eliminar las malezas.
Para el control de malezas en la agricultura de conservación (AC) deben poseerse
conocimientos especializados, a fin de resolver las dificultades relacionadas con algunas
malezas que son más persistentes que otras en los primeros ciclos después de hacer el
cambio, de agricultura convencional a la de conservación. De otra manera, esto puede ser
un motivo para que los productores rechacen la tecnología.
¿Qué opciones existen para controlar las malezas en la AC?
Cuando se realizan prácticas de labranza convencional en un ciclo normal de cultivo,
uno de sus principales objetivos es que las semillas de las malezas queden enterradas y no
puedan desarrollarse. Sin embargo, al siguiente año las mismas semillas son devueltas a la
superficie y, si el suelo sigue laboreándose continuamente, será difícil romper el ciclo
(banco de semilla). Por el contrario, en la AC se logra un buen control de malezas en unos
cuantos ciclos, evitando que vuelvan a producir semilla y reduciendo drásticamente la
población. Hay varias medidas que se pueden tomar para controlar las malezas:
a) Control manual.
b) Evitar que las malezas produzcan semilla.
c) Practicar rotaciones de cultivos que reprimen las malezas.
d) Dejar los residuos en la superficie para ayudar a eliminar las malezas.
e) Aplicar herbicidas.
Si se combinan estas estrategias de control, en tres años se reducirán de manera notable
las poblaciones de malezas.
Controlar las malezas todo el año
La mayoría de los agricultores no controlan las malezas al final del ciclo ni durante el
invierno, porque creen que no afectan los rendimientos del año. Sin embargo, pueden
producir semilla y severas infestaciones en el siguiente ciclo. Así, desyerbar a final del
ciclo de cultivo y en invierno resulta vital para lograr un eficaz control de malezas en la
AC.
¿Son los residuos útiles para controlar las malezas?
Los residuos ahogan las malezas y reducen el número y viabilidad de éstas en el campo. A
mayor cantidad de residuos, menor la cantidad de malezas que crecerán a través del
mantillo.
¿Cómo ayudan la rotación de cultivos y los abonos verdes a controlar las malezas?
Algunos cultivos tienen un crecimiento más vigoroso, y por lo tanto cubren el suelo
rápidamente y tienden a ahogar las malezas; esto reduce eficazmente las poblaciones, ya
sea que los cultivos se siembren intercalados, solos o como parte de una rotación. Algunos
cultivos que proporcionan un buen control son el frijol terciopelo (Mucuna pruriens), la
judía o frijol de Egipto (Lablab purpureus) y el cáñamo de Bengala (Crotalaria juncea). Los
dos primeros, si se intercalan, deben sembrarse de tres (cáñamo de Bengala) a seis
semanas (frijol terciopelo) después del maíz, de manera que no compitan demasiado con
éste y no reduzcan los rendimientos. Existe otro tipo de rotaciones (alfalfa, maíz, trigo,
avena, triticale, girasol) con el cual es posible controlar de manera eficaz las malezas
conforme avancen los ciclos de cultivo, hasta casi eliminarlas. La combinación con otros
métodos de control reducirá las poblaciones de malezas y su control anual será más
sencillo.
¿Cuáles son los beneficios y los problemas del control manual?
Los agricultores con pequeñas superficies pueden hacer el control manual de malezas
(cortándolas con un azadón), porque es un procedimiento de poco riesgo que suele ser
eficaz cuando las malezas son pequeñas (menos de 10 centímetros). La desventaja del
control manual es que es muy laborioso y se invierte mucho tiempo.
¿Cuáles son los beneficios y los problemas del control químico?
El control de malezas con herbicidas es un procedimiento rápido y eficaz, pero es
necesario y muy importante aplicarlo de manera correcta. La persona que aplique los
químicos debe: a) saber qué tipo de malezas controla y los cultivos a los que se puede
aplicar; b) conocer su grado de toxicidad y cómo manejarlos; c) saber las condiciones en
las que causa mejor efecto y en cuáles no; d) tener conocimiento de los métodos y las
dosis de aplicación; e) conocer los distintos tipos de equipo y cómo calibrarlos; f)
conocer los diferentes tipos de boquillas; g) saber qué tipo de ropa protectora hay que
usar y qué medidas o acciones deben tomarse después de que termine de aplicar el
producto.
Además, para emplear los herbicidas, es necesario contar con el capital requerido al
comienzo del ciclo de cultivo.
Algunos datos acerca de los herbicidas:
Los herbicidas matan las plantas, y no hay que olvidar que los cultivos también
son plantas. Por eso, es importante saber cómo controlar las malezas sin
perjudicar el cultivo, a las personas y el medio ambiente; también es necesario
utilizar herbicidas específicos y selectivos para el cultivo que quiere protegerse de
las malezas y evitar dañar las plantas.
Hay una gran variedad de herbicidas que tienen diferentes características, y por
eso, el usuario tiene que aplicar el herbicida en la dosis y el momento correctos,
siguiendo el método apropiado. Algunos herbicidas actúan en contra de todas las
plantas (herbicidas no selectivos) y, por tanto, deben aplicarse antes de la
emergencia. Otros actúan únicamente en algunas plantas (herbicidas selectivos)
y se pueden aplicar durante el desarrollo del cultivo.
Hay herbicidas que pueden usarse para controlar las malezas en un cultivo
determinado, pero no en otros, porque los matan. Por ejemplo, es posible que uno
que controla las malezas del maíz, mate la cebada.
Algunos deben aplicarse antes de que germinen las malezas. A éstos se les
denomina herbicidas preemergentes, porque inhiben el crecimiento de las
malezas cuando éstas intentan salir a la superficie del suelo; otros únicamente
controlan las malezas que ya han germinado; a éstos se les llama herbicidas
postemergentes porque actúan sobre las malezas que ya cubren la superficie del
suelo y son selectivos.
Antes de usar un herbicida, asegúrese de leer y entender todas las instrucciones que
vienen en la etiqueta.
El agricultor debe proponerse como meta, nunca permitir que las malezas produzcan
semilla en su predio.
“La semilla de un año produce siete años de malezas.”
Viejo dicho de los agricultores.
Fuente: CIMMYT.
Ubicación
1
DDR-CADER
Simbología
Distritos de Desarrollo Rural
Río Colorado
Ensenada
Centros de Apoyo para el Desarrollo Rural
Tijuana
Cerro Prieto Guadalupe Victoria
Tecate
Hachicera
Colonias Nuevas
Ensenada
Benito Juárez Valle Chico
San Quintín Delta
2
Municipios
001 Ensenada
002 Mexicali
003 Tecate
004 Tijuana
005 Playas de Rosarito
3
Población
90,668
90,669 - 100,000
100,001 - 450,000
450,001 - 930,000
930,001 - 1,559,683
4
Zonas de producción
Simbología
Presas
Cuerpos de agua
Pastizal
Agricultura de riego
Agricultura de temporal
5
Vocación agrícola
Cultivos
Alfalfa verde
Cebada forrajera en verde
Pasto
Tomate rojo (jitomate)
003 Tecate
Cebada forrajera
005 Playas de Rosarito
003 Tecate
002 Mexicali l Alfalfa verde 005 Playas de Rosarito
004 Tijuana l Pasto (tapete)
001 Ensenada l Tomate rojo
6
Vías de comunicación
Simbología
Carretera cuota
Carretera libre
Vías férreas
7
Isoyetas
Rango precipitación media anual
Menor a 50 mm
50 a 200 mm
200 a 400 mm
400 a 500 mm
8
Isotermas
Distribución de climas
Cálido
Semicálido
Templado
Semifrío
Comentarios y aportaciones del lector
Sus comentarios son valiosos para enriquecer los contenidos de esta Agenda Técnica
Agrícola que la SAGARPA ha pensado para poner en común el conocimiento relacionado con
las actividades del sector. Todas las aportaciones son recibidas en el siguiente correo
electrónico: [email protected]