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Enfermedades de Crucíferas y otras Brassicales
Miércoles 01 de Diciembre de 2010 00:00
Continuamos la nota iniciada en nuestra edición anterior, cuyos autores son Rolf Delhey y Mirta
Kiehr de la Cátedra de Fitopatología de Agronomía de la Universidad Nacional del Sur.
El mildiu afecta a muchas especies de la familia Brassicaceace, entre las cultivadas en
Argentina a coliflor, repollo, brócoli, rabanito nabo, rúcula y otras. En zonas de clima fresco y
húmedo puede ocasionar daños importantes, en especial en los almácigos pero también puede
ser problemático en estadios fenológicos más avanzados afectando el valor comercial. En la
Argentina, no hay mucha información aunque las pérdidas en almácigo, especialmente en
invierno primavera pueden ser considerables. En Mendoza, en 1985 se ha registrado una
epidemia importante afectando a hojas e inflorescencias de coliflor, repollo y brócoli.
Recientemente se han registrado daños por mildiu en rúcula, en la zona del Litoral.
Todos los estadios de crecimiento de la planta son susceptibles a la infección, pero el más
vulnerable es el de plántula. Durante el crecimiento vegetativo la planta sufre menos el ataque
pero, a la madurez, cuando el tiempo es húmedo y fresco, se reanudan las infecciones. Los
síntomas consisten en manchas foliares angulares, amarillentas a pardas, que pueden cubrir
gran parte de la lámina, tanto de las hojas expandidas como de las que forman la cabeza de
los repollos. En el envés de dichas manchas se encuentra un vello blanquecino constituido por
la esporulación asexual del hongo. Las manchas luego necrosan las hojas pueden secarse por
completo. A veces se forman numerosas manchitas negras en las hojas afectadas. También se
observan infecciones sistémicas de las cabezas que terminan con una podredumbre seca en
postcosecha. Bacterias pueden invadir las lesiones provocadas pr el hongo y causar una
podredumbre acuosa. En coliflor aparecen pequeñas estrías de color castaño a negro, en el
sistema vascular de las ramificaciones de las inflorescencias.
El control del mildiu es de especial importancia en los almácigos que deben ubicarse en lotes
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nuevos, o en lotes que durante varios años no han tenido cultivos de Crucíferas; también
deben eliminarse plantas guachas y restos. Debe evitarse una densidad exagerada de plantas
para permitir una buena ventilación del almácigo. Asimismo, debe evitarse el riego por
aspersión. En condiciones proclives a infecciones se puede recurrir a periódicas aplicaciones
de funguicidas, preventivos y/o curativos. El control químico también es indicado cuando se
presentan infecciones en las etapas posteriores de desarrollo. Se conoce resistencia en
algunos materiales de brócoli, pero no en repollo y coliflor.
Roya blanca
Esta característica enfermedad, causada por distintas razas, más o menos especializadas, del
oomiceto Albugo candida, infecta a muchas crucíferas, entras las cultivadas a rabanito, nabos
y coles sin ocasionar daños graves, salvo ocasionalmente en la producción de semilla dado
que provoca severas deformaciones de las inflorescencias. Una excepción es la rúcula donde
la roya blanca parecer ser la enfermedad más importante atacando cultivos comerciales al aire
libre en invernaderos.
En el Litoral, cultivos enteros tuvieron que enterrarse por una infección generalizada;
infecciones económicamente relevantes también se han observado en el Cinturón Hortícola de
Bahía Blanca. Produce ampollas cloróticas en las hojas en cuyo envés aparecen soros
blancos que contienen los zoosporangios. Estos se diseminan por el aire y, en condiciones de
alta humedad, dan lugar a zoosporas móviles que infectan.
Actualmente no se sabe si la raza que ataca a rúcula es específica de esta especie o si el
inóculo puede provenir también de otras Crucíferas, cultivadas o malezas. Tampoco se sabe si
en las plantas infectadas de rúcula se forman oosporas y en caso afirmativo, si éstas
constituyen una fuente importante de inóculo primario.
Oidio
El oídio (Erysiphe cruciferarum) es una enfermedad menor en las crucíferas cultivadas. Las
colonias blancas constituidas por el micelio y la esporulación asexual se encuentran a veces
sobre las hojas de coles, nabo, rúcula y mostaza, pero no ocasionan perjuicios, salvo en
cultivos para semilla, particularmente en coliflor. No se justifican medidas de control para esta
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enfermedad.
Continuará: Bacteriosis
Este trabajo se halla contenido en la Carpeta de Trabajos presentados en el Proyecto Integrado
del INTA PNHFA Horticultura coordinado por las Ing., Agrs. Mariel Mitidieri y Graciela Corbino
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