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XIV International Economic History Congress Helsinki, Finland, 21 to 25 August 2006 Session 124: Debates and Controversies in History of Economic Thought. LA REFORMA MONETARIA DE 1905 Y SU IMPACTO EN LA ECONOMÍA MEXICANA. UN ANALISIS DE CORTO PLAZO.* Ma. Eugenia Romero Sotelo.** En 1905, el gobierno mexicano realizó el cambio del sistema monetario bimetalista al patrón cambio oro. Dicha reforma tuvo como finalidad proveer de estabilidad al tipo de cambio y a las cuentas externas de la nación. Con ello se buscó conseguir el equilibrio de las finanzas públicas y sostener un flujo creciente de inversión extranjera a la economía mexicana. Esta ponencia estudia el impacto de dicha reforma desde su aplicación hasta el inicio de la revolución mexicana e indaga si sus propósitos se cumplieron en el corto plazo. INTRODUCCIÓN El periodo del funcionamiento del patrón cambio oro en México fue muy corto, abarca desde la fecha de su aprobación en 1905 hasta 1913. Año en que la regla monetaria del patrón cambio oro es abandonada. Las razones se atribuyen a varios factores. Varios estudiosos coinciden en que los trastornos monetarios y bancarios se presentan en el país ya adentrada la Revolución Mexicana, en 1913, cuando el General Victoriano Huerta sustrajo recursos de las distintas instituciones gubernamentales; dispuso de 30 millones de pesos del Fondo Regulador de la Circulación Monetaria y de 12 millones de las Reservas del Tesoro.1 Esta medida se enlazó con que la aplicación de la regla monetaria del patrón oro tuvo como obstáculo la crisis financiera internacional, que en * Este trabajo es parte de una investigación mucho más amplia, que se realiza con el apoyo de la Dirección General de Asuntos del Personal Académico, UNAM. Agradezco a Ma. Ángeles Cortés Basurto el apoyo que me presta para la realización de esta investigación. Asimismo, agradezco a Juan Pablo Arroyo por los comentarios a las primeras versiones de este trabajo. ** Profesora de tiempo completo de la Facultad de Economía de la UNAM. 1 Kemmerer, (1953), p. 173; Cárdenas y Manns, en Cárdenas Enrique, (1992), p. 250; Cárdenas Enrique (2003), p. 261; Torres Gaytán, Ricardo, (1980), p. 117; Edwing Kemmerer, (1953), p. 177. 1 Estados Unidos se manifestó particularmente grave con el pánico financiero en la bolsa de Nueva York en 1907. Este breve periodo de funcionamiento del patrón oro en México hace muy difícil realizar un balance de su acontecer. Sólo un periodo largo de aplicación nos podría ayudar a entender plenamente las bondades y perversiones de este nuevo régimen monetario. No obstante, vale la pena hacer una reflexión sobre el tema. Con el cambio del sistema monetario, José Yves Limantour persiguió como objetivo fundamental resolver los desequilibrios del sector externo (los desfavorables términos de intercambio), de la deuda pública y de los flujos de capital externo. Recordemos que este modelo tiene como característica el crecimiento del comercio exterior, cuyo soporte fue la modernización parcial del sector agrícola y minero, la construcción y expansión ferrocarrilera; innovaciones realizadas con inversión extranjera. La pregunta que surge inmediatamente es si la Reforma resolvió los desequilibrios externos de dicho modelo económico. Para reflexionar alrededor de esta preocupación recurriremos al balance que algunos estudiosos de la época hicieron sobre esta reforma, así como al de algunos académicos contemporáneos. La primera parte de este trabajo explica la situación de la economía mexicana antes de la reforma, con el fin de comprender en que condiciones se encontraba la inserción de la economía mexicana al mercado mundial. Posteriormente, se abordan brevemente las características de la reforma y finalmente se hace un breve recuento de los efectos de su aplicación. A. LA ECONOMÍA MEXICANA EN LA ANTESALA DE LA REFORMA El sistema monetario de México estaba basado en la ley del 27 de noviembre de 1867, la cual introdujo el sistema monetario decimal. Legalmente, México tuvo por más de dos siglos un sistema bimetálico, que se sustentaba en una ilimitada y libre acuñación de monedas de oro y plata con una relación legal de 1 a 16½. Esta proporción se sostuvo hasta la reforma monetaria. Sin embargo, el país era un gran productor de metal argentífero y su circulación monetaria estaba compuesta fundamentalmente de ese metal, además, la moneda de plata era su principal producto de exportación. Por lo 2 tanto, aunque legalmente el sistema monetario era bimetálico, de facto existía un patrón plata.2 El peso mexicano fue la moneda de plata más conocida en los Estados Unidos durante la primera mitad del siglo diecinueve, de hecho fue la moneda de curso legal en ese país hasta 1857. Durante la segunda mitad de este mismo siglo, el peso mexicano fue la moneda de comercio por excelencia en Oriente y en las Indias Occidentales. De 1903 a 1908, México fue el segundo productor de metal argentífero, después de Estados Unidos. La mayor parte de la producción nacional era enviada al mercado mundial en forma de moneda, sólo una pequeña porción se retenía en el país. La plata representaba dos quintas partes de las exportaciones nacionales y el principal medio de pago de los artículos que se compraban en el exterior. De 1873 a 1902 hubo continuos periodos de depreciación de la plata en el mercado internacional. La depreciación afectó a la economía mexicana porque los pesos plata eran la base de la circulación monetaria del país y el tipo de cambio del peso plata con la moneda de los países que estaban en el patrón oro, se determinaba de acuerdo con el precio del metal argentífero en los mercados internacionales, es decir, la plata servía al mismo tiempo como patrón monetario nacional y como medida de otros valores. En un primer momento, la devaluación fue un mecanismo de protección para la economía nacional, lo que operó a manera de estímulo para el desarrollo del mercado interno y de las exportaciones. Pero en un segundo momento, las pronunciadas fluctuaciones del precio del metal argentífero crearon inestabilidad e incertidumbre en las relaciones económicas externas, con su consecuente transmisión al mercado interno. Durante el porfiriato, la economía mexicana tuvo dos grandes fuentes de ingreso para su expansión económica: las exportaciones y la inversión extranjera. Estos dos elementos, que constituyeron los factores centrales en los cuales se apoyó el régimen para impulsar el crecimiento de la economía, fueron vulnerados por el fenómeno monetario. Así, el gobierno y los hombres de negocios buscaron un cambio en el sistema monetario porque la devaluación y la fluctuación del precio de la plata crearon serios problemas al funcionamiento del modelo económico agrominero exportador. 2 Un “censo monetario” realizado oficialmente en 1903, en números redondos aporta los siguientes datos: P 483,000 eran oro, P 58, 145,000 eran pesos plata, P 2, 972,000 eran monedas fraccionarias de plata, y P 62,000 eran de cobre. La conclusión final fue que había entre P 100, 000,000 y P 120, 000,000. Sin embargo, este estimado cubría solamente el dinero metálico y no incluía los billetes de banco. A finales de diciembre de 1902, la circulación de billetes de banco en números redondos era de 86 millones de pesos. Así que un estimado de la circulación en México en 1903 era de entre P 196, 000,000 y P 200, 000,000. Kemmerer, 1916, p. 473. 3 A.1 Inversión extranjera directa e indirecta Como ya lo hemos mencionado, el gobierno de Porfirio Díaz impulsó una política económica sustentada en la inversión extranjera directa e indirecta. De 1894 a 1903 las inversiones extranjeras en México crecieron rápidamente, particularmente las provenientes de Inglaterra, Estados Unidos, Francia y Alemania. De tal forma que para 1902, la inversión directa e indirecta en México era de 1, 352, 664,848.14 pesos (Véase cuadro 1). Cuadro 1. Inversión extranjera invertida en el país en 1902. Inversión directa e indirecta. En empresas agrícolas, mineras e industriales, Bancos y demás Instituciones de Crédito.............................................. $ En Compañías de Seguros que tienen Agencias en la República............................................................................... En Ferrocarriles..................................................................... En Deuda pública.................................................................. TOTAL.................... 136.107,924 31 16.888,480 00 767.151,849 00 432.516,594 83 1,352.664,848 14 Fuente: Secretaría de Hacienda y Crédito Público, Memoria de Hacienda y Crédito Público correspondiente al año económico: 1º de julio de 1903 a 30 de junio de 1904, Comisión monetaria. Actas de las Juntas Generales y Documentos a ellas anexos. Documento número 159, México, Tipografía de la Oficina, Impreso de Estampillas, Palacio Nacional, 1909, p. 718. El impacto de la devaluación de la plata en la inversión extranjera se dejo sentir: en las finanzas del gobierno, en las utilidades y ganancias de las empresas y en el desempeño del sector externo. A.1.1 Las finanzas del gobierno La devaluación de la plata impuso al gobierno mexicano una carga financiera muy fuerte. El principal componente de esta carga lo representaba el pago de los intereses en oro de la deuda externa. La deuda pública total de México al 30 de junio de 1902 era de 432, 516,595 pesos, de esta suma 238, 960,000 pesos representaban la deuda externa pagable en oro.3 Véase cuadro 2 del anexo. 3 Op. cit. p. 474. En dólares americanos la deuda era de aproximadamente 109, 000,000 y el cargo anual por intereses era de 5, 450,000 dólares. 4 México tropezaba con dificultades cada vez mayores para pagar sus obligaciones externas. El servicio anual de las deudas pública y ferrocarrilera que el gobierno tenía que pagar para 1902 era de 49, 188, 196.24 (Véase cuadro 3). Cuadro 3. Intereses y rentas generados anualmente Por capital industrial, minero y bancario al 8%................................................ $ 10.888,633 92 Por capital de Compañías de Seguros al 5%..................................................... 844,424 Por capital de Ferrocarriles, sus ganancias líquidas (30% de sus entradas brutas)............................................................................................................... 13.809,261 00 Por capital de la Deuda pública federal, incluyendo los intereses de las demás deudas del Municipio de México, del Saneamiento de Veracruz y Tampico y del Fondo Piadoso de California, según el Presupuesto de 1903904..................................................................................................................... 23.150,943 99 Por capital de la deuda del Estado de Jalisco.................................................... 320,000 00 Por capital de la deuda del estado de San Luis Potosí...................................... 174,933 33 ANUALIDAD TOTAL........... $ 49.188,196 24 Fuente: Secretaría de Hacienda y Crédito Público, Memoria de Hacienda y Crédito Público correspondiente al año económico: 1º de julio de 1903 a 30 de junio de 1904, Comisión monetaria. Actas de las Juntas Generales y Documentos a ellas anexos. Documento número 159, México, Tipografía de la Oficina, Impreso de Estampillas, Palacio Nacional, 1909, p. 718. La preocupación del gobierno por el rendimiento del sector externo se encontraba vinculada con el problema de la deuda externa debido a que el buen desempeño del sector exportador e importador garantizaba a los acreedores extranjeros el pago del servicio de la deuda externa. Por ejemplo, en 1893 se contrató un empréstito por tres millones de libras (15 millones de pesos) aportando 44.57% la casa S. Bleichroeder y 55.43% el Banco Nacional de México, y se ofrecieron en calidad de garantía futuras recaudaciones en concepto de impuestos sobre las importaciones y exportaciones. También, la deuda consolidada exterior mexicana del 5% de 1899 tuvo como garantía el 62% de los impuestos sobre las exportaciones e importaciones. 4 A.1.2 Inversión directa de capital extranjero Los inversionistas recibían sus ganancias en plata y al repatriarlas y realizar el cambio de plata a oro disminuían. Tal situación hizo más difícil persuadir a los capitalistas 4 Una parte del préstamo de 1893 (3 632 500 pesos) se asignó para abonar al Banco Nacional de México los anticipos que había otorgado al gobierno en 1892 y 1893. En 1899 se realizó la consolidación de la deuda externa, con lo que se obtuvo un crédito por 22 700 000 libras esterlinas a un interés del 5%, cuyo plazo de amortización se extendería hasta 1945. Este crédito abarcaba las deudas de 1888, 1890 y 1893 y el empréstito de 1869 para el ferrocarril de Tehuantepec. Con esta conversión se pensaba atenuar el peso de servicio de la deuda. Véase Beato Guillermo, 2004, p. 127. 5 extranjeros de invertir en México, y como sabemos, el país dependía en gran medida de este capital para desarrollar sus recursos. La repatriación de las ganancias causo problemas serios al saldo de la balanza de pagos del país. Para el año fiscal de 1902-03, existe un déficit en la balanza de pagos de casi cincuenta millones de pesos, que corresponde a las obligaciones de pago de intereses y rentas del capital extranjero invertido en empresas y valores nacionales (Véase cuadro 4). Cuadro 4. Saldo de la balanza de pagos para el año fiscal de 1902-03. AÑO FISCAL DE 1902-903 Valor total de las importaciones (precio de costo hasta los puertos y fronteras)...................................................$ Intereses, rentas o provechos del capital extranjero invertido en la República.................................................. Valor de la exportación total............................................ Saldo en contra del país.................................................... IGUAL......................$ Débito o egreso 220.010,811 00 49.188,196 ..................... .................... 269.199,007 24 .... .... 24 Crédito o afluencia 219.402,096 49.796,938 269.199,007 Fuente: Secretaría de Hacienda y Crédito Público, Memoria de Hacienda y Crédito Público correspondiente al año económico: 1º de julio de 1903 a 30 de junio de 1904, Comisión monetaria. Actas de las Juntas Generales y Documentos a ellas anexos. Documento número 159, México, Tipografía de la Oficina, Impreso de Estampillas, Palacio Nacional, 1909, p. 719. A.1.3 Comercio exterior Las oscilaciones en el precio de la plata causaban verdaderos disturbios en el comercio exterior de México. Gran parte de su comercio lo efectuaba con países que tenían patrón oro, y las altas y bajas en el precio de la plata eran factores que determinaban las ganancias. El comercio exterior del país seguía muy de cerca las fluctuaciones en el precio de la plata, por ejemplo, la inestabilidad se muestra clara de 1893 a 1902, sobre todo en junio de 1893 (21.3%), en septiembre de 1897 (12.8%), y en febrero de 1894 (10.4%). 6 00 24 24 Gráfica 1. Precio medio de la plata 70 60 Precio 50 40 30 20 10 1902 1900 1898 1896 1894 1892 1890 1888 1886 1884 1882 1880 1878 1876 1874 1872 1870 1868 1866 1864 0 Años Fuente: Elaboración propia con base en: Secretaría de Hacienda y Crédito Público. Memoria de Hacienda y Crédito Público correspondiente al año económico: 1º de julio de 1903 a 30 de junio de 1904, Comisión monetaria. Actas de las Juntas Generales y Documentos a ellas anexos. Documento número 159, México, Tipografía de la Oficina, Impreso de Estampillas, Palacio Nacional, 1909, p. 576. El comportamiento del comercio exterior del país fue uno de los factores que llevó a los hombres de negocios a considerar la necesidad de realizar la reforma. La declinación en el valor oro del peso, expresado en el incremento del tipo de cambio, llevó a que los términos de intercambio fueran desfavorables a México. El hecho de que los precios en oro de las mercancías que exportaba México en general, hayan seguido una tendencia ascendente, mientras la plata y la generalidad de los productos primarios sufrían una baja, constituye una de las peculiaridades de la economía porfiriana.5 Cuadro 5. Modificaciones porcentuales de los precios en oro y plata de las exportaciones mexicanas, 1877-1911. Etapa 1877-78 a 1890-91 1890-91 a 1898-99 1898-99 a 1906-07 1906-07 a 1910-11 En oro % -1.7 -31.3 18.3 -14.5 Precios En plata % 7.1 26.3 9.6 -13.2 Fuente: Rosenzweig, Fernando, El comercio exterior, en Cosío Villegas, Daniel, Historia moderna de México, 2a. ed., 8 v., t. II, México, Editorial Hermes, 1965, p. 653. 5 Rosenzwaig, 1965, p. 650. 7 A.1.3.1 Los términos de intercambio El modelo económico agroexportador impulsado por el gobierno de Porfirio Díaz sufrió un fuerte revés con la devaluación de la plata. La relación real de intercambio, es decir, el poder adquisitivo de las exportaciones en función de las importaciones, fue negativa para México. La devaluación de la plata encareció las importaciones y abarató las exportaciones.6 Los precios de las exportaciones mexicanas aumentaron a lo largo del Porfiriato en un 28.7%, y los de las importaciones en 51%. El mayor aumento anual de los precios de las exportaciones, el de 1902-03, fue de 7.6%; la baja más pronunciada, ocurrida en 190809 fue del orden del 7.8%. En las importaciones, el aumento de precios más pronunciado sobrevino en 1902 y fue de 18.8%, y la mayor baja, de 10.5%, en 190304.7 La relación de precios de intercambio se mantuvo entre 1880 y 1889 casi estable, en torno a 100; en lo primeros años del decenio siguiente sufrió una caída de la que pronto se recuperó (de 105 en 1891, bajó a 86 en 1894 y subió luego a 100 en 1896); pero en los años iniciales del nuevo siglo bajó de nuevo: de 105 en 1899, cayó a sólo 85 en 1911. La capacidad de compra de las exportaciones mexicanas, según las mercancías por las que podían cambiarse, fue más elevada en las dos primeras décadas del Porfiriato que en la última.8 En conclusión, los efectos nocivos de la devaluación de la plata sobre la economía mexicana fueron en tres sentidos: (1) efectos perniciosos sobre las finanzas del gobierno; (2) un deterioro de los términos de intercambio; y (3) una disminución de las ganancias del capital extranjero. Todos estos problemas fueron ampliamente tratados por la Comisión Monetaria nombrada por el Secretario de Hacienda, José Y. Limantour, en 1903. 6 Relación de intercambio son las medidas del poder adquisitivo de las exportaciones en función de las importaciones. Cuando los precios de las importaciones suben relativamente respecto a las exportaciones, la relación de intercambio empeora; cuando los precios de las exportaciones suben relativamente respecto a los de las importaciones, la relación real de intercambio mejora. La medida usual de la relación de intercambio de las mercancías es un índice que se calcula al dividir un índice de precios de las exportaciones entre un índice de precios de las importaciones. En Ramírez Solano, 2001, p. 444. 7 Rosenzwaig, 1965, p. 638. 8 Rosenzwaig, 1965, p. 640. 8 B. LAS CARACTERISTICAS DE LA REFORMA La gradual caída del precio en oro de la plata, acentuada en 1902, convenció a Limantour de que México debía seguir a otras naciones avanzadas en la adopción del patrón oro. Las finanzas públicas estaban arruinadas por la baja de la plata, debido a que gran parte de la deuda externa del país había sido contraída en oro, y el comercio de importación se redujo porque el intercambio con países con patrón oro estuvo sujeto a grandes oscilaciones. Limantour instituyó una Comisión Monetaria para estudiar y dar respuesta al problema de la devaluación de la plata y su impacto en la economía mexicana. Después de dos años de estudio, deliberaciones y búsquedas de consensos, por parte de la Comisión Monetaria, el 25 de marzo de 1905, se decretó una ley que determinó la adopción del patrón cambio oro en lugar del bimetalismo, permitiendo una relación de 1 a 32. Entre las medidas que se adoptaron destacan las siguientes: A) Se creó una unidad de valor para toda la economía, que tenía un peso de 75 centígramos de oro que equivalía a 49.85 centavos de dólar. B) Estas monedas debían estar en circulación, pero separadas del valor que tenían como mercancía. C) Además, se prohibió la libre acuñación de oro y plata. D) La casa de moneda de México quedo bajo el control absoluto del Ejecutivo. E) La moneda extranjera dejaba de tener curso legal en todo el territorio mexicano y quedó prohibido totalmente el uso de fichas, de tlacos y emisiones particulares como moneda de uso legal. En el capítulo IV de la ley, se estipuló la creación de un Fondo Regulador de la circulación monetaria, destinado a facilitar la adaptación de la cantidad de moneda en circulación a las exigencias de la estabilización del tipo de cambio exterior. 9 Este instrumento monetario estaba compuesto por los recursos siguientes: 10 a) Diez millones de pesos que, a título de dotación inicial, se tomarían de las reservas del Tesoro y que la Secretaría de Hacienda podía aumentar hasta quince millones, cuando lo juzgara necesario; b) Las sumas destinadas por los presupuestos de egresos para cubrir los desgastes sufridos por la moneda circulante; 9 Martínez Sobral, 1910, p. 175. Op. cit. p. 175-176. 10 9 c) Las utilidades que procedieran de la diferencia entre el costo de adquisición de metales y el valor de acuñación de las monedas; d) La utilidad procedente de la conversión de especies fuertes en especies divisionarias; e) Las utilidades que se realizarán mediante el juego del fondo regulador, en operaciones de cambio con el extranjero; f) El producto de las acuñaciones de pesos destinados a la exportación. El Fondo Regulador de la circulación monetaria sería administrado por la Comisión de Cambios y Moneda, creada por decreto el 3 de abril de 1905. Además del manejo del fondo regulador de la circulación monetaria, la Comisión tenía por objeto principal resolver todo lo relativo a la acuñación de monedas, y disponer del mismo fondo para todas las operaciones bancarias y de cambio de monedas que tuvieran por objeto la estabilización del tipo de cambio. Además, era la encargada de la reacuñación de las piezas fraccionarias de plata que por un error en la ley tenían el mismo contenido metálico proporcional que la unidad de cuenta; así como de la reacuñación de las piezas deterioradas por el propio uso; la desmonetización del antiguo centavo de cobre y su sustitución por monedas de bronce, y el retiro de las monedas de oro del cuño antiguo y su canje por las de nueva acuñación o por pesos plata.11 Dicha Comisión sería presidida por el Secretario de Hacienda y estaría compuesta de nueve vocales: el Tesorero General de la Federación; el Director de la Casa de Moneda; un representante del Banco Nacional de México; dos representantes de dos de los bancos principales de la República; y finalmente, cuatro vocales designados por la Secretaría de Hacienda. Para formar parte de la Comisión no se necesitaba ser mexicano.12 Martínez Sobral comenta que con la inclusión de estos dos instrumentos –el fondo regulador y la Comisión de Cambios y Moneda-, las autoridades del país dejaban de considerar los fenómenos monetarios como el resultado de las fuerzas libres del mercado tal como lo establecían los fundamentos del patrón oro. También señala que, a tono a los nuevos tiempos, había llegado el momento en que el Estado interviniera en el mercado de cambios para gobernarlo. Dice, 11 Torres Gaytan, 1980, p. 88. Véase Ley Monetaria que establece el régimen monetario en los Estados Unidos Mexicanos. 25 de marzo de 1905. Documento número 85. En Memoria de Hacienda y Crédito Público correspondiente al año económico: 1º de julio de 1904 al 30 de junio de 1905. México, Tipografía de la oficina, Impreso de Estampillas, Palacio Nacional, 1909. 12 10 (...) que el Gobierno mexicano quiso asumir la función, al menos durante el período transitorio de la reforma, de intervenir en el mercado de los cambios como un verdadero banquero, para procurar gobernarlo; para dirigir su evolución; para pesar con todo el peso de su influencia en el sentido de la producción de fenómenos determinados. (...) Dotar al Gobierno de esa arma fue el objeto fundamental del fondo regulador. Por medio de él se provee al Ejecutivo de elementos para pesar enérgicamente en el mercado de los cambios.13 C. LA REFORMA. UN BALANCE DE CORTO PLAZO El principal objetivo de la reforma monetaria fue lograr la estabilización de la economía mexicana a través de una política monetaria que permitiera el buen funcionamiento del sector externo con un alto grado de certidumbre. A fin de conseguir un flujo constante y creciente de inversión extranjera, que al mismo tiempo corrigiera los desequilibrios presupuestarios que ocasionaba el pago del servicio de la deuda externa en oro.14 Aunque parcialmente, la estabilidad cambiaria pudo sostenerse por varias razones: 1) por la creciente entrada de inversión extranjera después de la reforma; 2) por la contracción monetaria prevista en la nueva ley monetaria; 3) por dos acontecimientos no previstos: el alza del precio de la plata y la contratación de empréstitos exteriores; 4) por la regulación económica por parte del estado elemento previsto en la legislación monetaria. C.1 Estabilización del tipo de cambio Diversos autores de la época como Carlos Díaz Dufoo y Martínez Sobral, así como algunos periódicos relevantes, entre ellos, El Economista Mexicano, consideran que el efecto más inmediato, tangible y positivo de la reforma fue la estabilización del tipo de cambio. Coinciden en que un elemento que permitió dicha estabilización sin duda alguna, fue que el precio de la plata se elevó gradualmente después de haber tenido su 13 14 Martínez Sobral, 1910, p. 175. Véase Ley Monetaria que establece el régimen monetario en los Estados Unidos Mexicanos... Op. cit. 11 máxima caída en 1902. Este incremento duro cerca de dos años, de 1905 hasta mediados de 1907.15 Este suceso lo explican de la siguiente manera: la Ley Monetaria fijó el valor del peso en 75 centigramos de oro puro. Sin embargo, con la reevaluación de la plata en el mercado internacional, en 1906, un peso de plata valía más de 75 centigramos de oro puro. Esta diferencia ocasionó que la moneda de plata saliera del país, y fuera sustituida por moneda de oro. A este fenómeno se le conoce como la Ley Gresham, según la cual la moneda buena emigra, en este caso la plata, y comienza a ser sustituida por moneda mala, la de oro. La Comisión de Cambios y Moneda previó que no existiera un desequilibrio en el mercado monetario, cuidando que la moneda de plata no se exportase sino a cambio de moneda de oro y que el oro que llegara al país no volviera a ser sustituido por plata, una vez que el incremento de la plata dejara de ocurrir. Intervino en el mercado aprovechando la coyuntura para enriquecer el stock monetario con piezas de oro en sustitución de la plata circulante. Para ello, empleó los recursos del fondo regulador en la adquisición de barras de oro y más tarde dio mayores proporciones a la operación, al ponerse de acuerdo con los bancos para tomar bajo su manejo sus saldos en pesos y venderlos en Londres sin ninguna pérdida. El resultado fue que en un breve plazo el país dispuso de una fuerte cantidad de monedas de oro obtenidas a cambio de plata. De esta manera se aseguró el establecimiento y mantenimiento de la circulación monetaria bajo bases establecidas por el patrón cambio oro.16 En opinión de Díaz Dufoo, el funcionamiento de la Ley de Gresham proporcionó a la economía oro a cambio de pesos plata, y debido a la clausura de las casas de moneda se impidió que el oro saliera del país cuando la plata volvió a bajar de precio.17 En realidad, lo que ocurrió fue que la coyuntura favorable a la plata en el mercado internacional -el temporal pero importante incremento de la plata de 1905-06 que llevó a México “rápida e inesperadamente al patrón oro”-,18 fue inteligentemente aprovechada por la Comisión de Cambios y Moneda, que dirigió el movimiento exportador de plata poniendo en practica sus atribuciones. Esta conducta fue apoyada por el Congreso al 15 En opinión de El Economista Mexicano, esta tendencia del precio del metal blanco se debía al aumento de la producción de oro, por un lado, y a las medidas restrictivas de la propia ley monetaria de no permitir un aumento en la producción de metal blanco, por el otro. Además, otro factor que permitió esta tendencia fue el aumento de las compras de plata por parte de la India Inglesa. Véase, El Año de 1906, en El Economista Mexicano, 5 de enero de 1907. 16 Kemmerer, 1916, p. 542. 17 Diaz Dufoo, p. 190-200. 12 decretar, el 19 de noviembre de 1906, un impuesto de 10% sobre el valor de los pesos de plata exportados, a todos aquellos individuos que exportaran pesos de plata y no reimportaran moneda áurea. Es decir, la propia ley monetaria estableció mecanismos reguladores del proceso monetario y no dejo el precio de la moneda a los vaivenes de la oferta y la demanda. Al respecto, dice Torres Gaytan: Gracias a este organismo pudo aprovecharse el alza de la plata obteniendo utilidades, cambiando el circulante de plata a oro sin provocar trastornos importantes. Cerca de 90 millones de pesos oro fueron los que se importaron y acuñaron.19 La actividad principal de la Comisión fue sostener el tipo de cambio, y la acción más significativa consistió en haber hecho el cambio de la moneda de plata por la de oro. Cuidando dos aspectos: que la moneda de plata se exportase a cambio de oro, al mismo tiempo que este oro no se exportara, evitando así la deflación.20 La estabilización del tipo de cambio se consiguió con el oro adquirido a cambio de los pesos plata, contratando empréstitos exteriores o con la llegada de capital extranjero. Y no solamente con la contracción monetaria como lo establecía la reforma.21 Esta coyuntura favorable terminó cuando se inició la crisis mundial de 1907. En enero de este año, la crisis estalló en los Estados Unidos. En un primer momento, la manifestación de la crisis se expresó en la reducción del crédito y en el incremento de la tasa de interés. En un segundo momento, los problemas financieros afectaron el aparato industrial del país vecino. 22 Al inicio del siglo XX, México y los Estados Unidos estaban económicamente integrados de tal manera, que la crisis afectó rápidamente la situación económica de nuestro país, ya que provocó la contracción de la demanda de diversos productos de la economía mexicana, especialmente de la minería. Iniciado el año de 1907, el precio de la plata bajó de 32 3/8 peniques a 31 7/8. Una de las causas de esa reducción fue la contracción de las compras de plata por parte de la India.23 Dado el sistema monetario del país- formalmente patrón oro pero de facto bimetálico-, la reducción internacional del precio de la plata significó a su vez la depreciación del tipo de cambio. 18 Kemmerer, 1916, p. 547. De no haber intervenido la Comisión en el mercado, el metal blanco se habría exportado de todos modos en forma anárquica, que probablemente hubiera provocado una deflación que hubiera lesionado en mucho la actividad económica. 20 Torres Gaytan, 1980, p. 91-92. 21 Torres Gaytan, 1980, p. 92. 22 Enrique Cárdenas, 2003, p. 240. 19 13 Siguiendo la conducta de las instituciones de crédito extranjeras, los bancos en México disminuyeron el crédito y elevaron la tasa de interés, marcando en los hechos un periodo de restricción financiera. 24 La escasez monetaria fue la expresión de la restricción financiera en la vida cotidiana. Algunas de las causas que en ese momento fueron aludidas para explicar la escasez de numerario en la economía durante 1907 son: a) la baja en las exportaciones y el incremento en las importaciones, lo cual aumentó los compromisos con el exterior (en 1906-1907, el valor de las exportaciones fue de $185,453,232.23 pesos mientras las importaciones llegaron a $202,885,932.53). b) Al problema de la balanza comercial se sumaron problemas en la balanza de capital por la salida de capital bajo la forma de pagos de intereses y dividendos.25 c) Posiblemente, la escasez monetaria se agudizó por la gran exportación de pesos plata que se había realizado en los años 1905-06 propiciada por el incremento del precio del metal blanco en el mercado internacional. En realidad, la contracción monetaria en la economía la impuso la propia reforma monetaria, que partía de la escasez monetaria como principio fundamental que sostenía la estabilidad del tipo de cambio. 26 En teoría, los niveles de circulación pudieron haberse mantenido incrementando la emisión de billetes de banco, sin embargo, ello no ocurrió. Los billetes emitidos en el año de 1907 muestran una tendencia decreciente; la cantidad de billetes emitidos en marzo de ese año fue de $100, 964,740.00; en septiembre de $95,673,890.00; y para diciembre de $91,475,982.0027 (Véase cuadro 6 y 6-A del anexo). La ley permitió a los bancos circular billetes bancarios por el triple de su capital. Los banqueros mexicanos incrementaron la emisión de billetes, pero nunca se aproximaron a los límites legalmente permitidos. En lugar de esto, continuaron manteniendo sus emisiones cercanas a sus existencias en especie.28 23 Véase, “Se avecina una crisis económica”, en El Economista Mexicano, 16 de febrero de 1907. Véase, “La escasez de numerario y los bancos” en El Economista Mexicano, n. 16, ciudad de México, julio de 1907. 25 Ibid. 26 William Schell sostiene que esta contracción de la circulación paralizó al emergente mercado de consumo que formaba las bases del exitoso proceso sustitutivo de importaciones para las nuevas industrias. Schell, William, 1996, p.82. 27 Connat, p. 59. 28 Los bancos podían emitir hasta el triple del capital pagado, legalmente sus emisiones podían llegar hasta 328.8 millones, o sea algo más del 200% de los billetes y depósitos a la vista, o bien, podían emitir billetes hasta el doble de sus existencias metálicas en relación con los billetes en circulación más los depósitos a la vista; es decir, un excedente potencial por este concepto de 66 millones, que representaba un poco más del 50% del circulante en metálico. Esto sin tomar en cuenta que el Banco Nacional de México, el más poderoso del país, y el de Nuevo León, podían emitir hasta el triple de sus existencias 24 14 Cuadro 6. Incremento de los billetes de circulación y las reservas metálicas Diciembre 31 1898 1900 1903 1905 1906 1907 1908 1909 (junio 30) Circulación $54,375,767 64,012,464 84,202,709 94,141,407 97,787,878 91,475,982 87,504,630 92,221,477 Reserva metálica $39,197,024 49,394,761 61,564,982 68,312,005 64,909,345 69,818,349 77,753,503 84,352,541 Fuente: Conant, Charles A. The banking system of Mexico, Washington, Government Printing Office, 1910, p. 56. En 1906, las reservas de los bancos se convirtieron de plata a oro rápidamente. Con la depresión de 1908 se redujo la proporción de oro en la reserva e incrementó la proporción de plata. Entre diciembre de 1907 y febrero de 1908, las posesiones de oro de los bancos cayeron de $53,854,896 a $48,974,648, mientras que las posesiones de plata se incrementaron en el mismo periodo de $15,963,452 a $16,156,988 y al 30 de junio de 1908 a $23,908,748. ¿Este proceso fue un regreso al bimetalismo? La contracción monetaria tuvo varios efectos negativos, uno de ellos, fue la tendencia a la falsificación o acuñación clandestina que en un reporte oficial de la Comisión de Cambios y Moneda fue calculado en 8.1 millones de pesos. Otro fueron las presiones inflacionarias sobre la economía. 29 En opinión de Torres Gaytan, los efectos de la contracción monetaria fueron casi nulos. En primer lugar, porque a los bancos aún les quedaba un margen muy amplio para la emisión. En segundo lugar, porque la amonedación se incrementó un año antes de la derogación de la libre acuñación, “y no se exportaron casi los cuños en espera de tiempos mejores”. 30 La reforma fijó el precio del peso en 49 centavos de dólar, pero con la crisis este precio se incrementó a 66. Con la recuperación de la economía mexicana, que inicia a mediados de 1909, el valor del peso se estableció en 44 centavos por dólar. metálicas. Torres Gaytan, 1980, p. 113. 29 Schell Jr. William, 1996, p. 84. 30 Torres Gaytan, 1980, p. 89. 15 C.2 Capital extranjero Una vez que la nación ingresó a las reglas del juego vigentes en la economía internacional, al adoptar el patrón oro, se crearon nuevas expectativas para el capital extranjero en el país. Al respecto, Carlos Díaz Dufoo y Martínez Sobral, en sus respectivas obras, consideran que los efectos positivos de la reforma monetaria se sintieron inmediatamente; señalan que el más notable de todos los éxitos fue la gran afluencia de capital extranjero al país. 31 Limantour estimó las inversiones de capital, procedentes de Europa y Estados Unidos con destino a diversas industrias, en más de ochenta y seis millones de pesos en el periodo comprendido entre junio de 1905 y diciembre de 1906 (Véase cuadro 7). Esta cantidad representa sólo una parte de las inversiones de capital hechas en el país durante el periodo.32 Cuadro 7. Inversión extranjera Valores bancarios Bonos hipotecarios Negocios industriales Negocios mineros Negocios de terrenos Ferrocarriles $ 57,600,000 2,000,000 9,900,000 7,500,000 3,500,000 6,000,000 $ 86,500,000 Martínez Sobral, Enrique, La reforma monetaria, México, Tipografía de la Oficina impresora de Estampillas, Palacio Nacional, 1910, p. 202. Como se ve observa en el cuadro anterior, las inversiones estuvieron dirigidas fundamentalmente a incrementar el capital bancario en $57, 600, 000; los banqueros fueron los principales beneficiarios de la Reforma Monetaria. Los activos bancarios crecieron de una manera extraordinaria como lo muestra el cuadro siguiente: Cuadro 8. Crecimiento en los activos bancarios Dic. 31, 1898 Dic. 31, 1903 Dic. 31, 1908 31 32 $170,650,776 360,144,145 704,522,244 Díaz Dufoo, p. 200. Op. cit. p. 202. 16 Fuente: Conant, Charles A. The banking system of Mexico, Washington, Government Printing Office, 1910, p. 56. Los negocios industriales son la segunda actividad más importante a la que se dirigió la inversión extranjera con una suma de $9,900,000; en empresas mineras la inversión fue del orden de $7,500,000; la venta del Ferrocarril Hidalgo por $6,000,000; la venta de tierras por $3,500,000; y la venta de bonos hipotecarios por $2,000,000. Con la adopción de la reforma monetaria el capital extranjero llegó a México en una magnitud nunca antes vista. Al respecto, Limantour declaró Esta entrada de dinero, no ha ocasionado sorpresa a los autores del nuevo régimen monetario, la entrada de capital extranjero fue precisamente uno de los objetivos por los cuales se aplicó la reforma.33 La reforma creó un ambiente de certidumbre a la inversión extranjera en el país para los años venideros, a pesar de la crisis de 1907. Si bien, la crisis de Wall Street provocó una reducción en la inversión de origen estadounidense, conforme la economía norteamericana inició su recuperación a fines de 1908, la inversión también se recuperó en México.34 De tal forma que, para 1911, las inversiones norteamericanas tenían un valor de 1,044.6 millones de pesos (Véase cuadro 9). Cuadro 9. Inversiones norteamericanas en México, 1911 (Millones) Bonos del Gobierno Ferrocarriles Minería y Fundición Bienes raíces Ganadería Manufacturas Bancos Tiendas Petróleo Industria del Caucho Utilidades públicas Teatros y Hoteles Total $52.0 644.3 249.5 12.2 9.0 11.4 30.6 4.5 15.0 15.0 0.8 0.3 $1,044.6 33 Connant, p. 87. Cárdenas Sánchez, Enrique, Cuando se originó el atraso económico de México. La economía mexicana en el largo siglo XIX, 1780-1920, Madrid, España, Editorial Biblioteca Nueva, Fundación José Ortega y Gasset, 2003. 34 17 Fuente: Pletcher, David M., The fall of silver in Mexico, 1870-1910, and its effect on American Investments, en The Journal of Economic History, v. 8, n.1, March 1958, 33-55, p. 47. Una manera de analizar la dinámica de la inversión extranjera es a través de las ganancias y el reparto de utilidades de las compañías extranjeras. Por ejemplo, Edward L. Doheny, fue un promotor petrolero; en 1900, después de hacer una fortuna en el sur de California, Doheny, junto con su socio C. A. Canfield, invirtieron en México. De 1907 a 1910 su compañía petrolera pagó dividendos de un 27% sobre un capital por arriba de 30 millones de dólares. La gran cadena de minas y fundidoras controladas por la familia de Meyer Guggenheim, formadas alrededor de 1890 y organizadas como la “American Smelting and Refining Company” (ASARCO), reportó en 1914 que, desde 1900, había pagado dividendos por $104, 322,169.67 dólares. Algunas otras compañías mineras norteamericanas con un menor capital también pagaron substanciales dividendos: las utilidades distribuidas de las minas, fundidoras y ferrocarriles pequeños de R. S. Towne sumaban en 1916 casi 2.5 millones de dólares. En Sonora, la Moctezuma Copper Company, subsidiaria de Phelps, Dodge and Company, distribuyó dividendos por un total de 153% de un capital de 2.6 millones de dólares entre 1902 y 1906. Entre 1903 y 1910 la Mines Company of America, emitió dividendos por 3.5 millones de dólares sobre un capital de 2 millones. De 1906 a 1910 la Guanajuato Development Company pagó 30% en dividendos.35 Ante el incremento del capital extranjero, la pregunta que surge es si esta apertura promovió una mayor apropiación del sector exportador mexicano por parte del capital extranjero, fundamentalmente, del nuevo ramo industrial petrolero. El flujo de capital hacia el mercado interno, como expresión de la certidumbre que la reforma dio a los inversionistas, también puede palparse a través de la cotización de los valores industriales en la Bolsa de valores. La Semana Mercantil era una publicación que difundía la opinión de los empresarios sobre los problemas de la economía. El sector empresarial participó en el proceso de reforma activamente y se preocupó por publicar los indicadores que mostraban la confianza y certidumbre de los empresarios, nacionales y extranjeros, en el cambio de sistema monetario.36 Por ejemplo, un indicador al que recurrieron frecuentemente para mostrar el éxito de la reforma fue el ascenso del valor de los bonos públicos y de las acciones en las cotizaciones de la Bolsa 35 36 Op. cit. p. 47-49 La Semana Mercantil, 28 de noviembre de 1904, p. 1200. 18 de valores. Particularmente, encuentran que en 1904 subieron de valor los bonos de la deuda pública, en especial la ferrocarrilera. En cinco días ganaron varios puntos los bonos públicos del 5% y del 3% plata que se cotizaban en Europa.37 El Ferrocarril Central Mexicano subió, en sus acciones ordinarias, en las mismas fechas, de 20% a 23%, y en sus bonos del 4% de 74 a 79. El ferrocarril Mexicano, en sus acciones preferentes de 41 a 45.75 y sus ordinarias de 22 a 25.50. Las acciones del Banco Nacional, subieron en París a fs. 850; las del Buen Tono y Cía. Industrial de Orizaba, de 349 a 385 y de 461 a 500, respectivamente.38 La inversión extranjera ha sido estimada para 1911, en 3,500 millones de pesos. Estados Unidos era el más grande inversionista, con 1,292.4 millones (38%), seguido de Gran Bretaña, con 989.5 millones (29.1%), Francia con 908.7 millones (26%). Alemania y otros países sumaban el resto.39 Es indudable, que la inversión extranjera en México creció después de ser adoptada la reforma monetaria. Dicha reforma otorgó un grado de certidumbre a la inversión ya que, los inversionistas extranjeros no corrieron más riesgos al convertir sus ganancias en plata a oro, al transferirlas a su país de origen. Gran parte de este capital provino de Estados Unidos que, entre 1897 y 1914 tuvo un proceso continuo y ascendente de exportación de capital. 40 Las inversiones norteamericanas realizadas de 1905 a 1908 sumaban 100 millones de dólares y las realizadas de 1909 a 1911 tenían un valor de 200 millones. 41 La pregunta que surge es ¿cuánto de esta entrada de capital se debió a la reforma y cuánto se debió a la exportación continua de capital en la economía norteamericana? El incremento significativo de la inversión extranjera probablemente contribuyó al descontento social que se manifestó más tarde con la Revolución Mexicana. C.3 La deuda externa Como ya lo mencionamos, las finanzas públicas estaban en dificultades con la caída del precio de la plata porque una gran parte de la deuda externa había sido contratada en 37 Ibid. Ibid. 39 Beato, Guillermo, 2004, p. 138. 40 Friedman, 1963, p. 143-148. 41 William Schell, 1996, p. 88. 38 19 oro. Al igual que ocurrió con la inversión extranjera directa, el país mejoró su capacidad crediticia con la banca extranjera. A principios de 1904, la Comisión Monetaria entregó al Secretario de Hacienda el proyecto de reforma monetaria con la recomendación de que el país ingresara al patrón cambio oro. Al parecer, esta sola recomendación fue percibida positivamente por la comunidad financiera internacional. Para el mes de octubre de 1904, los periódicos informaron al público los detalles de una nueva operación financiera que realizó el Gobierno. Se trataba de un nuevo empréstito por la suma de cuarenta millones de pesos oro.42 Se ha contratado con la casa Speyer y Cía. de Nueva York, la suma de cuarenta millones de pesos, valor nominal, al 4% de interés, sin otra garantía para los tomadores del empréstito que la palabra y el crédito de la Nación.43 El producto de este empréstito se distribuiría de la manera siguiente: a) dieciocho millones se aplicarían a la amortización de los bonos del Tesoro de 4% a corto plazo. b) Quince millones de pesos plata se emplearían en convertir los antiguos bonos de 6% por subvenciones a los ferrocarriles mexicano, del Sur, Veracruz y Pacífico. Cuya amortización era urgente en vista de que eran los únicos valores del Gobierno que aún pagaban un interés de 6%; interés que por cierto era muy alto. c) Seis millones plata, aproximadamente, serían devueltos a las reservas del Tesoro para reemplazar la cantidad tomada de allí para el Ferrocarril de Tehuantepec. d) El resto se dedicaría principalmente a las obras del puerto de Coatzacoalcos, Salina Cruz y Manzanillo.44 La Semana Mercantil consideró este préstamo como un elemento muy positivo en la relación del régimen porfirista con la banca internacional. Dice: El empréstito es una nueva prueba del valor del crédito mexicano: la nación obtiene ya fondos cuando quiere, sin garantías y en una forma que la nivela con los países de primer orden en cuanto a finanzas. Llama también la atención que sea esta la primera vez que un empréstito se adquiera por banqueros americanos, siendo así que por muchas circunstancias ellos, mejor que los europeos, —que 42 La Semana Mercantil, 24 de Octubre de 1904, p. 1139. Emisión de bonos que tenía la autorización del Congreso desde 1902. 43 Ibid. 44 Ibid. 20 han contratado todos los empréstitos anteriores, —están en más favorables condiciones para realizar negocios semejantes. 45 Otra circunstancia de la operación —y el capital— es que no representa un gravamen nuevo para el país; una cantidad del empréstito se destina para la amortización de las sumas que sirvieron al Gobierno para dominar en las líneas ferrocarrileras que forman el sistema Nacional de México, es decir, que esa proporción del empréstito, solo cambia de forma, y sobre todo, ha puesto en manos de la Administración la defensa eficaz contra toda tentativa antieconómica en materia de tarifas ferrocarrileras. 46 Díaz Dufoo, considera que las condiciones en que fue otorgado este préstamo se debían en gran parte al éxito de la reforma monetaria, comenta Esta es la primera vez que el Gobierno mexicano ha podido contratar un empréstito a largo plazo, sin dar en garantía del cumplimiento de las obligaciones contraídas, el producto de determinados impuestos o rentas; y el hecho es tanto más digno de llamar la atención cuanto que hasta hoy había sido regla invariable de las casas banqueras de primer orden de Europa y los Estados Unidos exigir la constitución de garantías especiales, que les dieran una absoluta y completa seguridad de que los intereses de la deuda contraída habrían de ser religiosa y puntualmente pagados. En esta ocasión, y merced a la política honrada que el Gobierno ha seguido y que sirve de base a su crédito interior y exterior, ha podido ser considerado al igual de los viejos países europeos, que no ofrecen más garantía que su propia solvencia, ni dan más seguridades que las del invariable cumplimiento de todos sus compromisos y de todas sus obligaciones.47 Resultan curiosos los términos en que este préstamo se contrató, surge la pregunta ¿Por qué la banca no solicitó a México garantía alguna como requisito para otorgar dicho préstamo? ¿La garantía para la banca fue el ingreso de México al patrón cambio oro? El préstamo quedó concertado de la manera siguiente: el gobierno emitió 4.5 por ciento de las notas de tesoro a la cantidad de $18, 500,000 oro de Estados Unidos; certificaciones especiales a la cantidad de 6,000,000 pesos; y 6% de los bonos por la cantidad de 15,122,000 pesos.48 45 Op. cit. p. 1139 y 1140. Op. cit. p. 1140. 47 Díaz Dufóo, 1922, 197. 48 Turligton, 1930, p. 234. 46 21 Al caer Porfirio Díaz, México tenía una deuda externa de 441 millones de pesos, de los cuales 138 millones correspondían a obligaciones ferrocarrileras que el gobierno había garantizado, 183 millones a bonos al 4% y 119 millones a bonos al 5%, ambos de largo plazo.49 Para 1911, la deuda pública, directa e indirecta, sumaban alrededor de 578,179,094 pesos.50 Aunque con términos de crédito más favorables, y con tasas de interés sobre los nuevos préstamos de 4%, la deuda externa siguió creciendo. El endeudamiento externo fue otro de los instrumentos para sostener la estabilidad cambiaria. En los momentos difíciles de escasez monetaria, la Comisión de Cambios y Moneda contrató empréstitos exteriores con el fin de no agotar la reserva de oro que se había adquirido durante los años de 1905-07. Es decir, bajo este procedimiento se afianzó el nuevo sistema monetario en 1908, 1911 y 1913. Sin embargo, en cuanto brotó la lucha armada se cortó esta fuente de financiamiento a la cual se estaba recurriendo para sostener la estabilidad monetaria. 51 C.4 Términos de intercambio Comparto con Fernando Rosenzweig la hipótesis que el nuevo sistema monetario abrió el mercado mexicano al exterior, cosa que, no está por demás decirlo, era un objetivo que persiguió la Comisión Monetaria. Este autor sostiene que, a partir de 1905, los precios en moneda nacional que pagaba el país por sus importaciones, y los que recibían a cambio de sus exportaciones, siguieron la misma suerte que los precios del mercado mundial. En otras palabras, el comercio exterior mexicano quedó vinculado a las mismas tendencias de largo plazo y a los mismos sobresaltos cíclicos de la economía internacional. Misma que tuvo como constante dos elementos: por un lado, el desplazamiento de la relación de precios de intercambio hacia un nivel favorable a los países manufactureros en detrimento de los exportadores de productos primarios, y por otro lado, las crisis cíclicas por la contracción de la demanda de los países industriales. 49 Beato Guillermo, 2004, p. 128. Turligton, 1930, p. 246. 51 Como lo explica Torres Gaytán, para sostener el tipo de un dólar por dos pesos mexicanos, se destinó de la Comisión de Cambios y Moneda un fondo de diez millones de pesos, que después se elevó a diez y ocho millones. Este fondo se agotó en tres ocasiones: en 1908, 1911 y 1913; en los dos primeros años se remedió la situación apelando al empréstito, que proporcionaron el Banco de París y de los Países Bajos y la Casa Speyer y Co., de Nueva York, en 1908; y el Banco Germánico, en 1911; pero en el último año no se pudo recurrir a un préstamo para resolver la situación. La escasez de circulante se resolvió contratando préstamos para no hacer uso de la reserva. Política que fue trazada por la propia reforma al plantear la estabilización a base de deflación y de recurrir a empréstitos. Esta política dio origen a serías criticas 50 22 En enero de 1907 estalló una crisis en los Estados Unidos que se manifestó en el sector financiero con la reducción del crédito y el incremento de la tasa de interés. Esta crisis contrajo la demanda de diversos productos nacionales debido al grado de integración que existía entre México y el vecino del norte al inicio del siglo XX. Se redujo el precio de productos de exportación tales como: el azúcar, el plomo y el henequén, lo cual empeoró los términos de intercambio y los ingresos de los productores nacionales. Según datos de Enrique Cárdenas, los precios de exportación cayeron 19.4% en 1908, en relación a 1907, para iniciar lentamente su recuperación hasta 1910. Los términos de intercambio cayeron 14.4% en 1907-08 y continuaron deteriorándose marginalmente durante los dos años siguientes. Sin embargo, como ya era una tendencia, el aumento del volumen exportado contrarrestó parcialmente la caída de los precios de las materias primas en el mercado internacional (Véase cuadro 10).52 Cuadro 10 Indicadores de la crisis de 1907 Cambio porcentual Precios de exportaciones Exportaciones Términos de Intercambio Crédito bancario Billetes en circulación Precios del maíz Inflación Déficit fiscal 1907/8 -19.4 -3.8 -14.4 18.7 -7.5 5.3 0.3 19442 1908/9 -1.8 3.7 -2.5 -8.6 2.9 12.1 8.5 5756 1909/10 2.5 12.8 -2.1 21.9 20.4 23 16.6 14352 Notas: El déficit fiscal está expresado en miles de pesos. Fuente: Cárdenas Sánchez, Enrique, Cuando se originó el atraso económico de México. La economía mexicana en el largo siglo XIX, 1780-1920, Madrid, España, Editorial Biblioteca Nueva, Fundación José Ortega y Gasset, 2003, p. 242. C.5 Cambio institucional. La regulación económica Durante la última etapa del régimen pofiriano se adoptaron una serie de medidas dirigidas a regular la economía. El ejemplo más importante fue la adquisición de una participación estatal mayoritaria en la red ferroviaria gracias a la formación de ferrocarriles nacionales contra el gobierno. Torres Gaytan, 1980, p. 92-93. 52 Cárdenas Enrique, 2003, p.242. 23 en 1907.53 Esta fue una política costosa, como comenta el historiador Richard Garner, porque fue necesaria la negociación de una serie de préstamos extranjeros y la emisión de bonos nacionales, de tal forma que para 1910 el estado se había convertido en el accionista mayoritario de diversos proyectos que hasta entonces habían estado en manos de empresas privadas.54 La reforma monetaria y la adopción del patrón oro que buscó la estabilización del peso, tal vez, fue la última de las medidas que se tomaron para fortalecer la intervención del estado en la economía como estrategia de desarrollo. Martínez Sobral señaló que parte del éxito de la reforma monetaria se debió a que el Gobierno a través de la Comisión de Cambios y Moneda, usando las facultades que le autorizó el Congreso, intervino en el mercado de cambios cuando fue necesario. En su opinión, La reforma nos hizo salir de un estado excepcional, en el que ya no nos acompañaba ninguno de los grandes pueblos civilizados; ella nos da un instrumento de cambios que no nos expone a repentinos empobrecimientos; ella, en fin, al otorgar estabilidad a nuestra moneda, es el coronamiento de esta labor económica meritísima, cuyos esfuerzos principales han dejado su huella en la nivelación de los presupuestos, en la resurrección del crédito público, en la creación del crédito bancario, en la abolición de viejos y absurdos sistemas tributarios; de esta labor de integración económica, sin la cual, seguramente habría tropezado con mil obstáculos la tarea de la integración nacional que empezaron nuestros padres y que está llevando a término la generación actual, desde los últimos 30 años.55 El Economista Mexicano opina que a pesar de la baja de la plata provocada por el contexto económico mundial con la crisis de 1907, (…) la eficacia de la Reforma Monetaria había mantenido una solidez del sistema evitando las fuertes fluctuaciones de años anteriores. Los efectos positivos de la Reforma se sintieron desde antes que se pusiera en vigor, consiguiendo en menor tiempo las secuelas que se pretendían alcanzar a largo plazo.56 53 Garner, Richard, 2003, p. 172-173. Op. cit., p. 173. 55 Op. cit., p. 207. 56 “El porvenir de la Reforma Monetaria”, en El Economista Mexicano, 19 octubre 1907. 54 24 La innovación fundamental de la reforma fue de tipo institucional: el establecimiento de la regulación monetaria por parte del Estado a través de la Comisión de Cambios y Moneda. Si bien el patrón oro abrió la economía nacional al mercado externo, la intervención del gobierno en coyunturas económicas difíciles mitigó los ataques especulativos dentro de la economía; este fue el caso de los años 1906 y 1907. En síntesis, la reforma monetaria, al estabilizar el tipo de cambio, vino a fortalecer una situación adversa para la economía nacional: la tendencia al desequilibrio externo, al debilitarse la capacidad para importar, a lo cual se sumo la creciente presión sobre la balanza de pagos por las remesas al exterior de intereses y dividendos de las inversiones extranjeras. 57 C.6 La crisis hizo resurgir el debate Los intereses de la actividad minera se vieron trastocados por la reforma, debido a la supresión de la libre acuñación. Sin embargo, el gobierno auxilió a los empresarios mineros, de nueva cuenta, mediante franquicias impositivas. Los mineros también fueron favorecidos por el alza del precio de la plata pocos meses después, cuando todavía no habían sentido en toda su magnitud los efectos del privilegio perdido.58 Con la caída del precio de la plata durante la crisis, las críticas a la reforma se exacerbaron: una vez más, los mineros, olvidando las prebendas que les fueron otorgadas,59 alzaron su voz para protestar por el cambio de sistema monetario. Y el debate resurgió una vez más alrededor de los intereses de los empresarios mineros. EPÍLOGO El objetivo de la reforma monetaria realizada por Limantour y los científicos, en acuerdo con el capital financiero internacional, fue lograr la estabilidad cambiaria. Dicha Reforma estableció medidas económicas destinadas a reducir el riesgo de las 57 Rosenzweig dice que en contraste con lo ocurrido hasta 1905, en que los precios en oro tanto de las exportaciones como de las importaciones tendían a descender, mientras aumentaban los precios en plata. Después de ese año ambos, articulados ya por la reforma, siguieron la misma suerte: las exportaciones al descenso, y las importaciones al aumento. El sector externo de la economía perdía así mucho de su dinamismo, que había sido uno de los factores decisivos del desarrollo alcanzado hasta entonces. Rosenzweig, Fernando, p. 884. 58 Torres Gaytan, 1980, p. 100. 59 Se redujeron los impuestos a la minería, en el momento de decretarse las leyes monetarias, lo que significó para el erario una perdida de cuatro millones de pesos. 25 fluctuaciones económicas ocasionadas por la caída del precio de la plata. El símbolo de esa estabilidad fue el establecimiento de un patrón cambio oro con un tipo de cambio fijo. Entre los objetivos fundamentales que perseguía la reforma estaban: atraer capitales del exterior; dotar de un ambiente de certidumbre a la inversión extranjera para la repatriación de sus ganancias; dar base firme a los cálculos del comercio exterior y a las operaciones crediticias; y resolver los problemas de las finanzas públicas que permitieran dar una mayor viabilidad a la política económica del estado porfiriano frenando el incremento de la deuda del gobierno y de los ferrocarriles. La estabilización cambiaria se logró parcialmente gracias a que se conjugaron varias condiciones: 1) la contracción monetaria prevista por la propia ley; 2) la entrada de capital extranjero prevista por los reformadores; 3) el alza del precio de la plata; y 4) la contratación de empréstitos exteriores en mejores condiciones. Como hemos visto, la inversión extranjera llegó al país con mayor fuerza que nunca, no sólo por el ambiente que creó la reforma para su desarrollo sino también por el impulso de la expansión económica de los Estados Unidos. El estado mexicano tuvo un respiro debido a la disposición que mostró la banca internacional al conceder préstamos para sostener el funcionamiento de su modelo económico. La reforma monetaria se realizó para crear mejores condiciones en el país al capital extranjero, particularmente, al norteamericano y quienes recibieron los flujos de capital más importante fueron los empresarios de la banca. Los financieros nacionales fueron los beneficiados del cambio de patrón monetario. Sin embargo, esta entrada de capital no resolvió problemas estructurales de la economía mexicana, como los términos de intercambio y la capacidad importadora. Tal como lo demuestran muchos de los estudios realizados sobre la época porfiriana, hacia principios del siglo XX, el país tenía fuertes contrastes económicos. Para entonces ya estaban claramente manifiestos los límites y las bondades del modelo agrominero exportador, cimentado en la inversión extranjera, impulsado por Porfirio Díaz y el grupo de los científicos. Los problemas económicos que tenía el país, señalados y reconocidos ampliamente por la Comisión Monetaria, se expresaron a través del sistema monetario, mismo que en el sistema económico en su conjunto funge como mecanismo articulador de las distintas actividades económicas y de los grupos sociales. 26 Las desigualdades de la economía mexicana no podían resolverse mediante el simple recurso de establecer una paridad fija entre el peso mexicano y las monedas extranjeras. Es decir, la asociación del peso al patrón oro no iba a atenuar los problemas económicos y sociales del país como fueron la inequitativa distribución del ingreso y la falta de democracia. Antes bien, los problemas económicos y sociales que ya se habían manifestado antes de la reforma parece ser que se acentuaron después de que ésta se consumo. La clase trabajadora continuó en pésimas condiciones después de la estabilización de 1905. Aunque uno de los argumentos con los cuales la Comisión Monetaria propuso el ingreso de México al patrón oro fue mejorar la mala situación económica de este sector social. Sin embargo, la gran novedad de esta reforma fue de tipo institucional al darle al estado un papel relevante como regulador de la economía, y gracias al cual, los movimientos ascendentes del precio de la plata y la crisis de 1907 no causaron serios disturbios monetarios a la economía nacional. Es decir, el ingreso al patrón oro abrió la economía nacional al mercado internacional; pero dicha apertura fue regulada a través de la Comisión de Cambios y Moneda, la cual podía intervenir en el mercado en cualquier momento en que se presentaran disturbios en la economía. Este punto institucional fue uno de los elementos más controvertidos al interior de la Comisión Monetaria. REVISTAS Y DOCUMENTOS. Secretaría de Hacienda y Crédito Público, Memoria de Hacienda y Crédito Público correspondiente al año económico: 1º de julio de 1903 a 30 de junio de 1904, Comisión monetaria. Actas de las Juntas Generales y Documentos a ellas anexos. Documento número 159, México, Tipografía de la Oficina, Impreso de Estampillas, Palacio Nacional, 1909, p. 718. Semanario, La Semana Mercantil. Semanario, El Economista Mexicano. 27 BIBLIOGRAFÍA. Beato, Guillermo, De la Independencia a la Revolución, en Enrique Semo (Coord.) Historia Económica de México, México, UNAM-Oceáno, 2004. Cárdenas Sánchez, Enrique, Cuando se originó el atraso económico de México. La economía mexicana en el largo siglo XIX, 1780-1920, Madrid, España, Editorial Biblioteca Nueva, Fundación José Ortega y Gasset, 2003. Cárdenas Sánchez, Enrique y Manns, Carlos, “Inflación y estabilización monetaria en México durante la revolución” en Cárdenas, Enrique (compilador), Historia Económica de México, México, el Trimestre Económico, Fondo de Cultura Económica, Lecturas 64, 1992. Conant, Charles A., The banking system of Mexico, Washington, Government Printing Office, 1910. Díaz Duffo, Limantour, México, Imprenta Victoria, 1922. Friedman Milton y Anne Schwartz, A Monetary History of the United States 1867-1960. Princeton, Princeton University Press, 1963 Garner, Paul, Porfirio Díaz. Del Héroe al dictador. Una biografía política, México, Editorial Planeta, 2003. Kemmerer, Edwin Walter, Modern currency reforms, New York, The Macmillan Company, 1916. Limantour, J.Y Apuntes sobre mi vida publica (1892-1911), México, Editorial Porrúa, 1965. Martínez Sobral, Enrique, La reforma monetaria, México, Tipografía de la Oficina impresora de Estampillas, Palacio Nacional, 1910. Musacchio Aldo, la crisis de 1907-08 en México: descripción y consecuencias. CIDE, Septiembre 1997. Ramírez Solano, Ernesto, Moneda, banca y mercados financieros. Instituciones e instrumentos en países en desarrollo, México, Prentice Hall, 2001. Rosenzweig, Fernando, El comercio exterior, en Cosío Villegas, Daniel, Historia moderna de México, 2a. ed., 8 v., t. II, México, Hermes, 1965. Schell Jr. William, Money as commodity: Mexico s conversión to the Gold Standard. Mexian Studies/Estudios Mexicanos, v. 12, n. 1, Winter, 1996. p. 67-89. Torres Gaytan, Ricardo, Un siglo de devaluaciones del peso mexicano, México, Editorial Siglo XXI, 1980. Turligton, Edgar, Mexico and her foreign creditors, en Mexico in international finance and diplomacy, Estados Unidos, Columbia University Press y Oxford University Press, 1930. 28 ANEXO Cuadro 2. Estado de la deuda pública de la nación hasta el 30 de junio de 1902. Saldo de la Deuda interior del 3%..................................................... $ Saldo de la Deuda interior amortizable del 5%.................................. Saldo de la Deuda exterior del 5%1.................................................... Bonos del Ferrocarril Mexicano del Sur............................................ Bonos del Ferrocarril de Veracruz al Pacífico................................... Bonos del Ferrocarril de Monterrey al Golfo (saldo)......................... Agregando el importe del Fondo Piadoso de California, según el fallo del Tribunal de La Haya, los certificados de bonos de la 5ª serie interior amortizable emitidos después, y las deudas del Municipio de la Capital y de los Estados; (pero sin tomar en cuenta la emisión de “Bonos del Tesoro” por 12.500,000 dólares hecha con posterioridad al 30 de junio de 1903), el conjunto de la Deuda nacional resulta como sigue: Capital del Fondo Piadoso de California.............$ 717,516 50 Certificados de la 5ª serie del 5% interior amortizable............................................................ 13.000,000 00 Saldo de la Deuda Municipal de México, al 30 de junio de 1902 £2.011,842.10................................. 21.459,653 33 Deuda del Estado de Jalisco 5.000,000 00 Deuda del Estado de San Luís Potosí.................... 2.000,000 00 Bonos del saneamiento de Veracruz...................... 4.436,000 00 Bonos del saneamiento de Tampico...................... 1.500,000 00 Deuda pública hasta 30 de junio de 1903................................................$ 48.972,425 00 84.208,000 00 238.960,000 00 9.260,000 00 3.000,000 00 3,000 00 48.113,169 83 432.516,594 83 Fuente: De conformidad con la Cuenta de la Tesorería General de la Nación, el estado de la Deuda Pública hasta el 30 de junio de 1902. La comisión monetaria considero para su cálculo los cambios del oro a 221/2 el peso mexicano, por ser el tipo de cambio adoptado en la ley de presupuesto del año fiscal de 103-04. Véase, Secretaría de Hacienda y Crédito Público, Memoria de Hacienda y Crédito Público correspondiente al año económico: 1º de julio de 1903 a 30 de junio de 1904, Comisión monetaria. Actas de las Juntas Generales y Documentos a ellas anexos. Documento número 159, México, Tipografía de la Oficina, Impreso de Estampillas, Palacio Nacional, 1909, p. 717. Cuadro 6-A. Millones de pesos Fechas referidas al 31 de dic. 1897 1898 1899 1900 1901 1902 1903 1904 1905 Capital 39.15 44.00 47.71 62.20 65.70 74.55 88.65 92.40 113.85 Billetes 44.80 54.37 63.19 64.01 71.25 86.14 84.20 83.52 94.14 Metálico 44.27 38.65 51.35 49.39 52.02 51.40 60.05 76.79 66.68 Fondos de reserva 6.3 6.9 8.0 11.0 13.9 16.4 18.8 20.7 27.5 Depósitos a la vista Depósitos a plazo 1.70 2.04 3.7 6.8 8.3 6.02 29 1906 1907 1908 1909 1910 119.90 121.40 119.90 118.80 118.80 97.78 91.47 87.50 101.46 110.91 63.71 68.16 77.75 84.59 88.07 51.2 53.5 50.0 51.4 52.5 36.5 23.7 77.9 80.3 72.7 74.5 Fuente: Torres Gaytan, Ricardo, Un siglo de devaluaciones del peso mexicano, México, Editorial Siglo XXI, 1980, p. 112. 30