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Crecimiento económico cubano.
La necesidad de incluir en su análisis el Marco Regulatorio.
El presente trabajo analiza, desde un enfoque de oferta, los principales
determinantes y restricciones del PIB cubano para el periodo 1986-2009, con el
objetivo ultimo de contrastar la relevancia que el marco regulatorio ha tenido en
el crecimiento económico del país. Para ello, se analizan los principales
cambios regulatorios del periodo, su potencial efecto en el producto y el
margen existente para su desarrollo futuro. Entre las principales aportaciones
del trabajo se encuentra la estimación de las elasticidades de los factores para
un periodo que no incluye los años más favorables de cooperación con la
URSS, lo que ha permitido estimar por vez primera, el efecto negativo que el
aumento de la población activa tuvo en la evolución del PIB del periodo. El
actual proceso de actualización del modelo concede un mayor interés al
análisis de la posible correlación entre descentralización y crecimiento
económico para el caso cubano.
Juan Carlos Palacios Cívico
Investigador Universidad de Barcelona
Gran Vía de les Corts Catalanes 660 1 2, Barcelona, 08010.
652898866
[email protected]
JEL Classification Codes: P24,O43,O54
1. Introducción
La construcción del socialismo sigue siendo hoy en día, casi un siglo
después del triunfo de la revolución bolchevique, un proceso cambiante e
inconcluso, resultado de la dialéctica permanente entre los principios de la
teoría socialista y los límites del modelo económico vigentes en cada momento.
En el caso cubano, la crisis derivada de la desaparición del bloque socialista,
urgió a una revisión del modelo de dirección de la economía. El país necesitaba
reinsertarse internacionalmente y asegurar el funcionamiento autónomo de sus
mecanismos económicos. La escasez de recursos derivada de la crisis exigió
un mejor aprovechamiento de estos, incrementar los niveles de eficiencia y la
búsqueda de alternativas que satisficieran las necesidades materiales y
financieras de la isla, algo que pasaba inevitablemente por la revisión y
actualización del marco regulatorio a las nuevas circunstancias.
La hipótesis que se pretende contrastar es la relevancia que el marco
regulatorio ha tenido en el crecimiento económico del país durante el periodo
de estudio. Para ello se analiza en primer lugar, la sensibilidad del producto y la
eficiencia a los principales cambios regulatorios aplicados en los últimos 25
años y el margen existente para seguir desarrollando, cuantitativa y
cualitativamente, las áreas que mostraran en el pasado una correlación positiva
con el crecimiento económico. En la segunda parte del artículo, se propone la
contrastación
empírica
de
dicha
hipótesis.
Con
ese
fin,
se
estima
econométricamente y mediante la técnica de Datos Panel, una función de
producción ampliada, en la que se añaden como variables explicativas, proxys
de los principales cambios regulatorios aplicados entre 1986 y 2009.
El análisis econométrico se desarrolla a nivel sectorial y se centra en la
esfera productiva de la economía. La limitación estadística que supone tener
que trabajar con este nivel de desagregación, se justifica por la escasa
integralidad de los cambios aplicados. La elección de la esfera productiva se
justifica principalmente por razones metodológicas. Más allá de la discusión
recogida en la literatura sobre la medición del producto en los sectores de
servicios sociales y personales (para un análisis más profundo ver Cuadrado y
Maroto, 2006), el caso cubano presenta como problema añadido, el cambio de
metodología en el cálculo del PIB a partir del 2004. Los servicios sociales y
personales, que hasta ese momento habían sido valorados en base a sus
costes, pasaron a calcularse a precios estimados de mercado. Como resultado,
el PIB de este sector creció en 2004 en más de un 84% (pasando de
representar el 11,6% del PIB en 2003 a un 31,3% del PIB en 2004) e infló
desde entonces las tasas de crecimiento a nivel agregado1.
El periodo de estudio en el que se enmarca el análisis propuesto es el
comprendido entre 1986 y 2009. Su elección se justifica porque hasta 1985, las
relaciones comerciales y financieras entre Cuba y los países del CAME eran
tan ventajosas para el país caribeño, que en la práctica suponían un
aislamiento de las fluctuaciones de la economía internacional y unos niveles de
riqueza superiores al potencial propio del país. Sin embargo, ese escenario
tuvo un punto de inflexión en 1986. “Los resultados de la coordinación de
planes entre 1986 y 1990 mostraban una tendencia al estancamiento de los
volúmenes de recursos y de las condiciones del intercambio” (Álvarez, 1995),
que acabaría concretándose en una contracción de más del 50% de las
1
Para los años 2004, 2005, 2007 y 2008, las tasas de crecimiento de la economía eran más
del doble que las observadas en la esfera productiva.
exportaciones de petróleo y del 27% de las exportaciones en divisas (ONE,
varios años). Como consecuencia en 1986 Cuba anunció la moratoria en el
pago de sus obligaciones en moneda convertible. La falta de acuerdo con los
acreedores extranjeros supuso la expulsión de facto del país caribeño de los
circuitos internacionales de crédito, complicando aún más las posibilidades de
financiar el crecimiento de su economía2.
El artículo se estructura de la siguiente forma: en el punto dos se hace
un breve recorrido por la principal literatura de crecimiento económico y los
principales estudios del caso cubano. En el punto tres se desarrolla el análisis
econométrico con el que se pretende contrastar empíricamente la hipótesis
planteada.
2. Marco teórico
La identificación de los determinantes del crecimiento económico y de
las diferencias de renta entre países, ha sido uno de los temas más recurrentes
en la literatura económica desde los orígenes de la economía como ciencia. A
partir de los resultados sobre el equilibrio estático de John Maynard Keynes, los
economistas Roy Harrod y D.Domar extendieron al largo plazo el análisis sobre
la
inestabilidad
del
capitalismo.
A
diferencia
de
los
economistas
postkeynesianos, los modelos neoclásicos centraron su explicación del
crecimiento en factores de oferta, como el progreso técnico y la disponibilidad
de factores de producción.
La necesidad de recuperar el contexto histórico y cultural de los países
fue en los setenta una de las reivindicaciones principales de la Nueva
2
El crecimiento promedio entre 1985 y 1989 fue del 0,5%.
Economía Institucional. Con un análisis más interdisciplinario y menos basado
en modelos matemáticos, autores como Ronald Coase, Douglass North u
Oliver Williamson otorgaban a las instituciones un papel central en la
explicación del comportamiento económico.
A mediados de la siguiente década, comenzaron a aparecer trabajos que
retomaron los modelos neoclásicos y reformularon algunos de sus supuestos
básicos, como la exogeneidad de los factores de producción y del progreso
técnico o los rendimientos constantes a escala de la función de producción.
Con ello, se iniciaba un nuevo enfoque sobre la cuestión, representado por los
modelos de crecimiento endógeno. Algunos economistas fueron más lejos en
su crítica a los modelos neoclásicos al no cuestionar únicamente el supuesto
de rendimientos decrecientes de los factores de producción, sino el propio
carácter exógeno de los mismos.
Durante décadas el crecimiento económico no ha sido tratado por la
literatura económica cubana como un tema prioritario. En su lugar, la
preocupación por el desarrollo económico y social ha ocupado un espacio
central en la agenda política y académica. Durante la década de los 80
comienza a apreciarse sin embargo una mayor preocupación por los temas
relacionados con la eficiencia y el crecimiento, tal y como recogen trabajos
como Castañeda (1982) y Figueroa et al (1983). El primer análisis basado en
funciones de producción Cobb-Douglas puede encontrarse en González,
Martínez et al (1989). Madrid-Aris (1998) y Mendoza-Álvarez (2002) calcularían
más tarde, mediante un ejercicio de contabilidad de crecimiento, las
contribuciones de los factores productivos. Ambos señalan a la Productividad
Total de los Factores (PTF) como el factor determinante de la recuperación de
los 90. En su análisis Mendoza (2003) añade el capital humano como factor
explicativo del crecimiento económico. En él detecta una relación negativa
entre este y la productividad global de la economía. El cambio estructural y su
relevancia en el crecimiento económico cubano es analizado en estudios como
Rodríguez G. (1985), Rodríguez J. L. (1990), Figueras (1999) y Torres (2007).
Doimeadios (2007) supone el primer intento de identificar las causas que
motivaron el repunte de la eficiencia en el que se sustentó la recuperación
económica de los 90. En su trabajo, contrasta por vez primera el efecto positivo
de un grupo de variables (proxys de cambio estructural, apertura externa y
marco regulatorio) en el crecimiento de la PTF cubana. Dicho trabajo constituye
el referente más directo de la actual investigación, al ser la primera y única vez
que se ha incluido el marco regulatorio en la explicación del crecimiento
económico cubano3. El presente estudio continúa dicha línea de investigación y
se propone contribuir al debate sobre el efecto del marco regulatorio en el
crecimiento económico de Cuba, entre sus principales aportaciones se
encuentran:
1) Corrección de la serie del PIB.
2) Inclusión de variables del marco regulatorio directamente en la función
de producción y no como explicativas de la PTF.
3) Selección de un periodo con características más homogéneas.
4) Corrección del capital por el grado de utilización (aproximado por el
consumo energético de cada uno de los sectores).
5) Elección de la esfera productiva como objeto de estudio.
3
En su trabajo, la profesora de la Universidad de la Habana encuentra la existencia de
correlación positiva entre descentralización económica y el crecimiento de la productividad
global.
6) Utilización de la técnica de datos de panel en el contraste de la
hipótesis.
7) Análisis individualizado de los principales cambios regulatorios.
3.
Análisis Empírico
5.1.
El modelo
El análisis planteado se propone identificar, desde un enfoque de oferta,
los determinantes del crecimiento económico cubano para el periodo 19862009. El modelo en el que se basa parte de una función de producción
neoclásica de tipo Cobb-Douglas, en la que se añaden a los factores
tradicionales (capital y trabajo) un conjunto de variables que aproximan los
principales cambios regulatorios de la economía cubana durante el periodo de
estudio. Los fundamentos teóricos deben situarse por tanto, no sólo en el
pensamiento neoclásico (de quien se asume la misma forma funcional y el
supuesto de ausencia de ineficiencia técnica) sino también en la escuela de
crecimiento endógeno (al incluir en la función de producción nuevas variables
explicativas que justifican la existencia de rendimientos crecientes a escala) y
en el neoinstitucionalismo (por la importancia que se otorga al marco temporal
e histórico del país en la explicación de su crecimiento económico). De esa
forma, el crecimiento del PIB cubano se modelizaría a partir de la siguiente
función en logaritmos.
ln Yit = α i + β1ln K it + β 2ln Lit + β j ln CRitj
(1)
donde el subíndice i representa los sectores de la esfera productiva4, t
representa el tiempo, αi representa los posibles efectos sectoriales, Y es el PIB
real, K el capital físico corregido por su uso, L el factor trabajo corregido por su
calidad y CRj cada uno de los cambios regulatorios introducidos en el modelo.
5.2.
Los datos
Los datos utilizados en la estimación son series anuales a nivel sectorial
para el periodo 1986-2009. La variable dependiente se corresponde con la
serie del Producto Interior Bruto a precios constantes con base 1997 (ONE,
varios años). El cambio metodológico introducido en la medición del PIB ha
precisado corregir la serie original para el periodo 2007-2009, con el objetivo de
excluir outliers de la muestra5. Entre 2004 y 2006 el cambio metodológico sólo
afectó a la valoración del sector de servicios comunales, sociales y personales,
si bien a partir del 2007 la metodología utilizada afectó también a la medición
de otros sectores de la esfera productiva.
Las variables independientes incluidas en el modelo se explican a
continuación:
Stock de Capital (Kit)
La serie de stock de capital ha sido calculada a partir del método de
inventarios permanentes, utilizando la metodología propuesta en Olivera y
García (2004).
4
Partiendo de la desagregación sectorial realizada por la ONE, el presente estudio divide la
esfera productiva en seis sectores: agropecuario, industria básica (incluye el sector minero y el
sector energético), industria manufacturera, construcción, comunicación y transporte y turismo
y comercio.
5
A partir de 2007 el producto de los diferentes sectores es recalculado aplicando la tasa de
crecimiento del sector publicada por la ONE, al dato del año anterior.
K it+1 = Kit (1-λi) + Iit
(2)
Donde λi es la tasa de depreciación lineal del sector i 6, Iit representa la
Formación Bruta de Capital Fijo (ONE, varios años) del sector i en el año t y Kit
es el stock de capital del sector i en el año t. El dato inicial del stock de capital
se toma del AEC de 1986, calculado a partir del censo general de activos fijos
realizado por la Junta Central de Planificación en 1975. Dada la importante
subutilización del capital durante la crisis, (resultado de la falta de insumos
productivos y combustible, en su mayoría importados) se procede a corregir
este por su uso (consumo eléctrico sectorial7).
Trabajo (Lit)
En el presente estudio se utiliza como variable del factor trabajo el
promedio de trabajadores por sectores, en detrimento del número de ocupados
de la economía por estar incluyendo esta última a todos los trabajadores
inscritos en la actividad aunque se encuentren temporalmente alejados de la
misma. En su construcción se utilizan datos facilitados por la Oficina Nacional
de Estadística y de CEPAL (2000). Con el fin de que la variable incluya
también aspectos cualitativos de la fuerza laboral, se corrige por el nivel
educativo de la población activa. A tal efecto se multiplica el promedio de
trabajadores por los años de escolaridad promedio de cada año. Esta última se
reconstruye a partir de Mendoza (2003) y las tasas de crecimiento implícitas en
los cálculos de Barro y Lee (2010).
6
Se toman las tasas de depreciación sectorial del ONE 1988, por ser este el último dato
disponible.
7
ONE (varios años)
Cambios Regulatorio (CRitj)
La selección de las proxys de los cambios regulatorios es de suma
importancia, por el efecto que tendría incluir en el modelo variables no
relevantes o medidas con error. Su elección se ha basado principalmente en la
relevancia de estas en el crecimiento económico de los diferentes sectores
(analizada en el punto cuatro) y en la disponibilidad de los datos estadísticos
para la construcción de las series. A partir de esos criterios se han incluido las
siguientes proxys:
-
Apertura a la Inversión Extranjera Directa (IEDit): La desintegración del
bloque socialista contrajo considerablemente la capacidad de financiación en
divisas de la economía cubana, obligando a flexibilizar su política de inversión
extranjera y a buscar en el capital foráneo la forma de paliar el proceso de
descapitalización al que se enfrentaba la economía desde el inicio de la crisis
en 1990. La ley nº77 sobre Inversión Extranjera de 1995 abría la puerta a la
participación de inversores foráneos en todas las actividades de la economía
con excepción de la educación, la salud y la defensa. Después de 15 años
desde la aprobación de la ley nº 77 se han cumplido los tres objetivos
prioritarios sobre los que fue diseñada: la entrada de capitales frescos, la
transferencia de tecnología y el acceso a nuevos mercados. Dado que no se
dispone del volumen de inversión extranjera por sectores se utiliza el número
de Asociaciones Económicas Internacionales como proxy del grado de apertura
a la IED de cada uno de los sectores. La construcción de esta serie se ha
realizado a partir de CEPAL (2000), las revistas Cuba: inversiones y negocios
(varios números) y Foreign trade (varios números) y Pérez (2006, 2008 y
2010).
-
Grado de implantación del Perfeccionamiento Empresarial (PERit): con el
objetivo de incrementar la eficiencia de los recursos disponibles, se pusieron en
marcha a principios de los noventa, un conjunto de medidas que perseguían
una mayor vinculación entre los necesarios equilibrios macroeconómicos y el
comportamiento de los agentes a nivel microeconómico. Los dos cambios más
relevantes en este sentido fueron la redefinición del sistema de planificación y
la descentralización de funciones a nivel empresarial. Dentro de éstas, destacó
por su importancia el programa de perfeccionamiento empresarial. En esencia,
el nuevo programa supuso una gestión más descentralizada y flexible en
cuanto a la organización del trabajo, de la producción, del sistema salarial y de
incentivos y de la política financiera y de inversión de la empresa, con el
objetivo de incrementar su eficiencia y garantizar su autonomía financiera. Esta
variable es aproximada a partir del número de empresas adheridas al programa
en cada sector. La construcción de esta serie se ha realizado a partir de
Marquetti (2006) y la revista Caminos (2010).
-
Articulación con los sectores generadores de divisas (DIVit): los primeros
esquemas de autofinanciamiento empresarial en divisas datan de finales de
1991, con la creación de FINATUR, una casa financiera dependiente del
Ministerio de Turismo y cuya misión principal era financiar en condiciones
favorables aquellas producciones cuyo destino final era el sector turístico. La
reactivación de la industria nacional y el incremento de su participación en las
compras del sector turístico y las Tiendas de Recuperación de Divisas (TRD),
evidenciaron la importancia que los esquemas de autofinanciamiento tuvieron
en la vinculación entre el sector industrial y los sectores generadores de
moneda convertible como el turismo o las TRD. Gracias a dicho mecanismo fue
posible incrementar la participación nacional en el abastecimiento de bienes y
servicios al sector turístico, del 12% de mediados de los 90 al 67% en 2005
(Pérez Villanueva, 2006). Las empresas estatales que vendían al turismo y a
las TRD obtenían financiación en moneda convertible que les permitía cerrar de
forma autónoma su ciclo productivo. Ello les confería en la práctica una mayor
flexibilidad y autonomía operativa que las empresas del sector tradicional, cuya
disponibilidad de divisas dependía de la asignación del presupuesto estatal.
Las empresas con presupuesto en moneda convertible disponían además de
un mayor margen para la estimulación de sus trabajadores, lo que sin duda
afectaba también de forma positiva a los niveles de motivación y productividad
laboral de estas empresas. La financiación condicionada a las ventas en
divisas suponía un avance en otro aspecto de vital importancia como la
disciplina financiera, al vincular los créditos a la rentabilidad del proyecto y a las
posibilidades de ser devueltos, un criterio ausente en las asignaciones
presupuestarias del plan. Esta se aproxima a partir de las ventas nacionales al
sector turístico y a las TRD. Los datos que han permitido construir la serie han
sido facilitados por el Departamento de Turismo del Instituto Nacional de
Investigaciones Económicas.
-
Extensión de formas de propiedad no estatales (PROit): la gravedad de
la crisis de los noventa hizo necesario introducir modificaciones en el régimen
de propiedad con el doble objetivo de incrementar la producción agropecuaria y
aligerar un sector estatal, incapaz en las nuevas condiciones de dar trabajo al
conjunto de la población activa. En 1993 se creaban mediante el Decreto Ley
142 las Unidades Básicas de Producción Cooperativa (UBPC). Las nuevas
formas de propiedad promovían una mayor vinculación del campesino con la
tierra y la generación de nuevos incentivos, como vender el excedente
productivo en el mercado agropecuario o participar en los beneficios de las
cooperativas. Con el Decreto-Ley 141/93 se reguló el trabajo por cuenta propia.
Con su autorización se contribuyó a la mejora de la productividad de la
economía cubana por una doble vía: por un lado, mejoró la eficiencia asignativa
al permitir que miles de trabajadores subempleados en el sector estatal y con
escasa respuesta productiva pasaran al sector privado a ofertar una serie de
servicios, que el Estado no era capaz de proveer ni en la cantidad ni con la
calidad requeridas. Esta variable se aproxima a partir del número de
trabajadores ocupados en el sector no estatal. Estos incluyen los agricultores
privados y cooperativistas para el sector agropecuario y los trabajadores por
cuenta propia para los sectores de transportes y comunicaciones y comercio y
turismo. Las series se construyen a partir de ONE (varios años) e información
facilitada por el Centro de Estudios de la Economía Cubana.
-
Peso de los mercados liberados (MERit): el 20 de septiembre de 1994,
mediante la resolución conjunta del Ministerio de Agricultura (MINAG) y el
Ministerio de Comercio Interior (MINCIN) se autorizó la reapertura de los
Mercados Agropecuarios (MA). Los nuevos mercados nacieron con el doble
propósito de incrementar la producción y redirigir la actividad del mercado
negro hacia la economía formal. La incorporación de mecanismos de mercado
debía provocar dos importantes externalidades positivas. Por un lado debía
representar un estímulo a la producción al poder realizar esta a precios
superiores a los fijados centralizadamente. Por otro, el tránsito de métodos
administrativos de fijación de precios a métodos basados en la oferta y la
demanda debía contribuir favorablemente a la medición de variables claves
para el buen funcionamiento económico y la correcta asignación de recursos.
Esta serie se aproxima a partir del peso del consumo en los mercados
liberados respecto del consumo final de las familias. Se incluye el peso del
mercado agropecuario para el sector agropecuario y el peso del mercado por
cuenta propia para los sectores de transportes y comunicaciones y comercio y
turismo. La fuente estadística utilizada ha sido ONE (varios años).
-
Ambiente Microeconómico (AMIt): el ambiente microeconómico se
aproxima en el presente trabajo mediante el volumen de subsidios
presupuestarios por pérdidas empresariales y diferenciales de precios
disponibles en ONE (varios años). A pesar de sólo disponer
de datos
agregados se considera importante incluir esta proxy por el impacto negativo
que pudo tener en el crecimiento de los diferentes sectores.
Dado el alto grado de complementariedad que presentan dos de las
medidas aplicadas (la inversión extranjera y el grado de articulación con la
divisa), se incluye adicionalmente el producto cruzado de ambas variables, ante
la posibilidad de que su impacto en el PIB pudiese verse potenciado con su
aplicación conjunta.
5.3.
Metodología y resultados de la estimación.
La ecuación 1 se estima a partir la técnica de datos de panel8. El panel
considerado es un panel balanceado compuesto por 6 sectores observados
durante 24 años, lo que supone trabajar con una muestra de 144
observaciones. Con el objetivo de contrastar la hipótesis según la cual el marco
8
La estimación del panel se realiza con el programa estadístico Stata 11.
regulatorio ha sido una variable relevante en el crecimiento económico cubano
durante el periodo de estudio, el panel se regresa en primer lugar sin incluir las
proxys de los cambios regulatorios (ecuación 3), para incluir en una segunda
especificación dichas variables (ecuación 4). Se opta por especificar los
modelos en primeras diferencias con el fin de evitar la identificación de
relaciones espurias propias de las variables macroeconómicas, generalmente
con una tendencia creciente compartida en el largo plazo. Se incluye una
variable dummy (URSS)9 con la que se intenta captar el posible cambio
estructural que la caída de la Unión Sovietica pudo suponer en el PIB cubano.
(3)
∆ ln Yit = α i + β1∆ ln K it + β 2 ∆ ln Lit + URSS it + ε it
∆lnYit = α i + β1∆lnK it + β 2 ∆lnLit + β 3 ∆lnIEDit + β 4 ∆lnPERit + β 5 ∆lnDIVit +
+ β 6 ∆lnPROit + β 7 ∆ lnMERit + β8 ∆ lnAMI it + β 9 ∆ lnPROit * MERit +
( 4)
β10 ∆ ln( IEDit * DIVit ) + URSSit + ε it
Ambos modelos son estimados alternativamente incluyendo efectos fijos
y aleatorios. Los resultados de ambas estimaciones se muestran en el cuadro 1
Cuadro 1
Resultados de la estimación de las ecuaciones 3 y 4.
EF
9
Ecuación 4
Ecuación 3
Variable
EA
Errores
EF
EA
Toma valor cero para el periodo 1986-1989 y valor 1 para el periodo 1990-2009.
Errores
Depend.
Robustos
∆ly
Robustos
N = 132
∆ lnK
0,391*
0,382*
0,382*
0,347*
0,343*
0,343*
∆ lnL
-0,090
-0,116
-0,116**
-0,151
-0,176***
-0,176**
∆ lnIED
---
---
---
-0,008**
-0,009**
-0,009**
∆ lnPER
---
---
---
0,019
0,019
0,019
∆ lnDIV
---
---
---
0,005
0,004
0,005
∆ lnPRO
---
---
---
-0,110***
-0,110*
∆ lnMER
---
---
---
0,017
0,015
0,015
∆ lnMAM
---
---
---
-0,126**
-0,129**
-0,128*
∆ lnIED*DIV
---
---
---
0,063**
0,064**
0,064**
URSS
-0,007
-0,009
0,005
-0,043
-0,044
-0,044**
R2
0,297
0,297
0,297
0,399
0,399
0,399
F, Chi2
18,18
53,68
18,14
7,70
79,38
---
-0.104***
Fuente: elaboración propia
Nota: * significativa al 1%, ** significativa al 5%, *** significativa al 10%.
Los estadísticos de prueba F y Xi-cuadrado muestran la preferencia de
los modelos con efectos sobre el modelo agrupado. La ausencia de
autocorrelación entre el término de error individual y los regresores sugerida
por los resultados del test de Hausman (ver anexo 1), recomendaría la elección
del modelo de efectos aleatorios sobre el de efectos fijos. Por su parte, la
aplicación del test de Wooldridge confirma la existencia de autocorrelación en
el modelo (ver cuadro 1 anexo). Por ese motivo y ante la posibilidad de que el
panel presente heterocedasticidad en los errores, se procede a estimar este
con errores robustos. Con la aplicación de este método las estimaciones pasan
a ser robustas para cualquier tipo de correlación entre las observaciones y
corrigen cualquier tipo de heterocedasticidad (sin tener que especificar la forma
funcional) a partir de la técnica Huber-White o sandwich. Los resultados
incluidos en el cuadro 1, muestran que la estimación con errores robustos
mejora la significatividad individual de los parámetros, lo que podría ser un
indicio de la presencia de heterocedasticidad y refuerza en cualquier caso, la
conveniencia de corregir los errores standard. El aumento de la capacidad
explicativa del modelo con la inclusión de proxys de cambios regulatorios
apoyaría la hipótesis defendida en el presente estudio. La mayor consistencia
estadística de la estimación con errores corregidos y la dificultad de contrastar
los efectos fijos a lo largo del tiempo, hacen que finalmente se opte por la
estimación de la ecuación 4 con errores robustos. El análisis de sus resultados
arroja conclusiones interesantes. Una de las más relevantes es sin duda la
elasticidad negativa del factor trabajo10. A pesar de lo contraintuitivo que pueda
parecer este resultado, su interpretación adquiere un mayor significado cuando
se enmarca en el contexto cubano del periodo de estudio. La caída de la
URSS contrajo el producto en más de un 35% en sólo 3 años, pero a pesar de
ello se mantuvo intacta la política de pleno empleo. A finales del 2010, después
de 17 años de crecimiento económico sostenido y de haber superado
ampliamente los niveles productivos anteriores a la crisis, el gobierno cubano
anunciaba que el excedente de trabajadores en el sector estatal ascendía
todavía a un millón de trabajadores (una cuarta parte de la población activa), lo
Se procede a regresar nuevamente la ecuación 4 utilizando tres
alternativas para la medición del factor trabajo, por si un posible error de
medición hubiese introducido sesgo en la estimación del parámetro. Si bien el
parámetro pierde algo de significatividad en alguna de las regresiones, sigue
manteniendo el signo negativo (ver cuadro 2 anexo)
10
que permite hacerse una idea de los elevados niveles de subempleo con los
que ha operado la economía durante toda la etapa de recuperación. En tales
circunstancias, es muy probable que el coste de oportunidad de seguir
incrementando la población activa superase la productividad marginal de los
nuevos trabajadores, afectando negativamente al crecimiento, al incrementar el
coste salarial a cargo del presupuesto del Estado y reducir los recursos
disponibles para inversiones productivas. Este resultado adquiere mayor
relevancia, por ser la primera vez que se estiman las elasticidades de los
factores de la economía cubana para un periodo que no incluye los años más
favorables de cooperación con la URSS. La elasticidad del capital resulta por el
contrario similar a la estimada en la literatura11. Entre los cambios regulatorios
con un mayor impacto positivo en el producto cubano destaca la combinación
de Inversión Extranjera con esquemas de articulación con la divisa.
Curiosamente la aplicación de las medidas de forma aislada no provoca los
resultados esperados. La variable articulación con la divisa no resulta
significativa y la IED, aunque con un valor muy cercano a cero, presenta signo
negativo. Lo que podría estar dando una idea de la importancia que tuvo el
combinar la presencia de IED con mecanismos de financiación en la
generación de encadenamientos hacia el resto del sector12. El efecto sobre el
PIB de extender el programa de perfeccionamiento empresarial y de abrir
mercados libres también es positivo, si bien los pruebas de significación
individual en este caso no permiten ni aceptar ni rechazar con rotundidad su
11
Resulta remarcable el menor valor de la elasticidad del capital en la ecuación ampliada, lo
que estaría sugiriendo que la elasticidad de este factor se sobrevalora cuando se omiten otras
variables relevantes en la explicación del PIB cubano, como el marco regulatorio.
12
Un segundo argumento que puede justificar el signo negativo de la variable IED es la propia
calidad de la proxy utilizada. Como veíamos en el punto cuatro, el número de AEI aproxima un
retroceso de la IED que no parece haber sido tal si se analizan otras variables.
relevancia en la explicación del crecimiento cubano13. La pérdida de
significatividad puede deberse en parte a las modificaciones introducidas en
ambas medidas en los últimos años. La centralización de divisas anuló la
autonomía financiera de las empresas en perfeccionamiento y la posibilidad de
que la empresa de Acopio recomprara los excedentes para revenderlos en el
mercado desvirtuó parcialmente el potencial productivo de este mecanismo
económico. Otro resultado esperado y relevante es el impacto negativo que la
distorsión de las señales microeconómicas (aproximado con las subvenciones
a precios y a las pérdidas empresariales ha tenido en el crecimiento económico
del país. El signo negativo asociado a las nuevas formas de propiedad podría
sorprender en primera instancia, si bien resulta comprensible al observar que el
porcentaje
de
trabajadores
por
cuenta
propia
en
los
sectores
de
comunicaciones y transporte y de comercio y turismo es prácticamente
marginal y que la expansión de las formas no estatales en el sector
agropecuario ha ido acompañado de pésimos resultados productivos, por las
razones ya apuntadas en el punto anterior. La significatividad de la dummy
introducida confirma el shock negativo que la desaparición de la URSS supuso
para el crecimiento económico cubano.
4. Conclusiones e implicaciones de política económica.
El análisis desarrollado en el presente trabajo pone de manifiesto la
importancia que el marco regulatorio ha tenido en la explicación del PIB de
Cuba durante los últimos 25 años, al detectar una relación positiva entre
aquellas medidas que liberalizaron y descentralizaron ciertos ámbitos de la
economía y la mejora de la eficiencia y la renta nacional. Este argumento se ve
13
Los parámetros resultarían significativos al 17% y al 53% respectivamente.
reforzado por la constatación de que aquellas reformas regulatorias con un
impacto nulo en el PIB, se corresponden con las medidas que en la práctica
fueron incapaces de superar las barreras derivadas de la centralización
planificada; como la autorización de nuevas formas de propiedad, incapaces en
la práctica de incrementar la producción por falta de autonomía real o la
reapertura de los mercados agropecuarios, cuyo potencial para estimular la
producción agropecuaria se vio fuertemente limitado por su dependencia del
sistema de distribución centralizada que representa la empresa estatal de
Acopio.
El análisis desarrollado avala algunos de las principales conclusiones del
VI Congreso del PCC, como la necesidad de reducir las plantillas estatales (y
con ello los costes que para el país representa mantener los actuales niveles
de subempleo), de facilitar la plena realización de formas de propiedad no
estatales (dotándolas de autonomía real, de recursos materiales y financieros y
autorizando su ejercicio en el sector industrial), de promover la separación de
funciones estatales y empresariales y la expansión de mercados libres que
incentiven la producción, de conseguir una mayor vinculación entre el trabajo y
los ingresos o de eliminar los subsidios a las empresas y endurecer con ello su
restricción financiera.
De la misma manera, permite identificar aquellos aspectos, que a juicio
del autor, han recibido un tratamiento nulo o insuficiente dentro del programa
de cambios planteados en los lineamientos y que presentan sin embargo un
notable potencial productivo. Entre estos destacan por su importancia el
limitado desarrollo del trabajo por cuenta propia, el escaso impulso a la política
de inversión extranjera (siguen quedando fuera sectores estratégicos para la
economía, se infravalora la importancia de fomentar la generación de
encadenamientos productivos entre las empresas extranjeras y las nacionales
y se mantiene una política salarial que merma notablemente la competitividad
de la Inversión Extranjera) o la escasa prioridad que recibe la mejora del
entorno microeconómico. En este sentido, cabe destacar que algunas de las
medidas dirigidas a mejorar las señales microeconómicas, han sido tratadas en
los lineamientos de forma ambigua y diferida en el tiempo. La superación de la
dualidad monetaria por ejemplo se supedita a la recuperación económica,
obviando que esta puede estar representando precisamente uno de los
principales obstáculos a la misma. Se sigue manteniendo el carácter
centralizado de algunos precios, se elude cualquier referencia al estímulo de la
competencia empresarial y se plantea cerrar aquellas empresas no rentables,
sin supeditar dicha medida a una mínima armonización del entorno
empresarial. Algo que con la actual distorsión de las señales microeconómicas
presenta un alto riesgo de liquidar capacidades productivas realmente
competitivas. Los resultados analizados reafirman la necesidad de un profundo
y rápido reordenamiento de la fuerza laboral, que permita un mejor
aprovechamiento de una de las principales ventajas competitivas del país y la
liberación de recursos que permita mejorar el poder adquisitivo de los salarios y
avanzar en la recapitalización de la economía.
ANEXO ESTADÍSTICO
Cuadro 2
Pruebas estadísticas estimación ecuación 41
Test
F, chi2
Prob
Hausman
1,17
0,9996
Wooldridge
28,29
0,0031
Fuente: Elaboración propia.
1
Estimación con errores robustos.
Cuadro 3
Estimaciones con variables alternativas
del factor trabajo
βi
P-value
Promedio trabajadores
-0,145
0,029
Promedio de trabajadores
corregido entre 2007-2009a
-0,121
0,185
Ocupados
-0,135
0,283
Ocupados corregidos por
nivel educativo
-0,179 .
0,203
a El promedio de trabajadores se construye a partir de datos de CEPAL
(2010) y datos facilitados por la ONE. La serie reconstruida presenta un
outlier para el sector de la Industria Básica para el año 2007, con el fin de
limitar su impacto negativo en los resultados se corrigen los tres últimos
años aplicando a la serie de promedio de trabajadores las tasas de
crecimiento de la serie de ocupados.
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