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Javier Campo (Aecoc): "Todas las empresas
deben adaptarse a las nuevas tecnologías"
Javier Campo, presidente de Aecoc, señala la mejora de la
competitividad como la principal necesidad de la economía
española, a partir de la innovación tecnológica.
CRISTÓBAL ÁLAMO 26/10/2016
Sector Gran
Consumo
Francisco Javier Campo, en su intervención de apertura del Congreso Aecoc que se celebra en
Sevilla, ha querido llamar la atención sobre la necesidad de incrementar la productividad de la
economía española y, en particular, de los sectores de la industria y la distribución de gran
consumo, como única salida posible para los retos y desafíos a los que se enfrentan. “Nuestro
bienestar futuro va a depender de nuestra competitividad”, ha señalado el presidente de Aecoc,
“una vez que ya está hecho el esfuerzo de ajuste de los salarios”. El paro, la deuda externa y la
envejecimiento de la población son los tres principales problemas que identifica Campo y, como
medios para promover una mayor productividad, también propone tres soluciones: reducir los
costes de residencia; mejorar la formación y potenciar la innovación.
Innovación disruptiva
En especial, Campo ha puesto en su intervención el acento en una innovación disruptiva basada
en las nuevas tecnologías. “Todas las empresas deberían estudiar cómo adaptarse a las nuevas
tecnologías, que representan la tercera ola en la innovación”, ha recalcado Campo, “las que lo
hagan serán las más competitivas”. En este sentido, Aecoc quiere colaborar con sus 27.000
empresas asociadas, desarrollando programas de generación de ideas, para posteriormente
divulgar este conocimiento e implantar los proyectos entre las compañías. Las tecnologías 3D, la
robótica, el Big Data, el internet de las cosas y la inteligencia artificial, son los elementos a
introducir en el futuro de las empresas españolas de gran consumo, a la vez que se adaptan a la
primera y la segunda olas: la llegada del e-commerce y su ampliación hacia la multicanalidad.
Con el e-commerce aparecieron los pure players, que han aportado a la competitividad
empresarial su extrema calidad en el uso de los datos y en la información para la venta.
“Comprenden mejor al consumidor, gracias a la medición de datos, y extraen conclusiones a
partir de los análisis de clicks”, menciona Campo. La omnicanalidad, por su parte, ha situado al
consumidor en el centro, con su capacidad de compra desde cualquier soporte, medio y
momento, al que hay que anticiparse para llegar a él.
La formación es otro de los vértices del trabajo de Aecoc, según su presidente. La asociación
quiere ayudar a impulsar la Formación Profesional dual, en la que la educación sea compartida
entre la Administración pública y el mundo empresarial, “haciéndola también rentable”. Según
Campo, coincide que los países más competitivos son los que más apuestan por la formación
dual: “Alemania tiene un 80% de Formación Profesional dual, frente al 3% de España”.
Campo ha hecho también referencia a la necesidad de reducir el llamado coste de residencia
para mejorar la competitividad. Aspectos como el alto coste energético (la energía es un 10% más
cara que la media de la Unión Económica y Monetaria), la posible intención de incrementar la
presión fiscal, la modificación del marco laboral alcanzado tras la reforma, la seguridad jurídica y
las modificaciones de la unidad de mercado interior, preocupan al empresariado en el sector de
gran consumo.
Javier Campo ha reclamado para atender estos desafíos la rápida formación de “un gobierno que
aborde los problemas reales” y, los relacionados con la competividad española, “lo son”. “Hemos
perdido un año en este sentido”, señalaba el presidente de Aecoc, que ha pedido diálogo y
consenso entre los partidos políticos, para anticiparse en la puesta en marcha de soluciones para
mejorar nuestro crecimiento potencial.
Buen comportamiento del consumo
Por último, Javier Campo ha mostrado satisfacción por el comportamiento del consumo este año,
gracias a los impactos positivos en la renta disponible, ejercidos por elementos como unos tipos
de interés e inflación bajos, menores impuestos, y el descenso del paro, a los que ahora se
podría unir un incremento del índice de confianza con la estabilización que pueda traer la
constitución del nuevo gobierno. Espera así que la próxima campaña navideña tenga resultados
positivos.