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María Bayo reúne en su concierto a cerca de 700 personas en el monasterio de Fitero
- La soprano, acompañada a la guitarra por Pablo Sáinz Villegas, actúo en su villa natal
por tercer año consecutivo
Cerca de 700 personas asistieron ayer al concierto que la soprano María Bayo ofreció en
el monasterio cisterciense de Fitero, su villa natal. Éste ha sido el tercer año consecutivo
en el que la soprano ha actuado en la localidad.
María Bayo saluda al público junto al guitarrista Pablo Sáinz Villegas antes de
comenzar su recital. CARASUSÁN
Pese a que los anteriores conciertos se realizaron con motivo de la clausura de los
cursos universitarios de verano, este año -no se han celebrado estos cursos- el
Ayuntamiento de Fitero ha querido que su vecina más ilustre vuelva a deleitar a vecinos
y foráneos con su voz. En el concierto de anoche, la soprano estuvo acompañada a la
guitarra por Pablo Sáinz Villegas.
El recital fue organizado por el consistorio fiterano, y ha contado con el patrocinio,
entre otros, de Diario de Navarra.
El programa que interpretó estuvo compuesto por dos partes. En la primera se oyeron
La Mercede y La Volubile, de Vicente Martín y Soler; De amor en las prisiones,
Acuérdate, bien mío y El que quisiera amando, de Fernando Sor; Recuerdos de la
Alhambra, de Francisco Tárrega; y Tra la la y punteado, Amor y odio, El majo discreto
y Callejeo, de Enrique Granados.
Además, Bayo interpretó Madrigal y Cinco Canciones Sefardíes, de Lorenzo Palomo y
de estreno en España. Éste último tema se componía de las piezas: Madrigal, Linda de
mi corazón, Nani, Pequeña serenata, Romance y Nana Sefardí.
Tras el descanso, la soprano volvió a hacer aparición en el escenario ubicado junto al
altar del templo para interpretar la segunda parte del concierto. El programa incluyó el
estreno de Mi jardín solitario, de Lorenzo Palomo, compuesto por La Encarnilla,
¡Soledad!, La rueda verde, La alondra y el ruiseñor, Canción burlesca, El corazón se me
parte, Estrella de la mañana, La tarde, Susurros, Callen los pinos y Canción del bambú.
Además, interpretó Choro nº 1 y Bachianas brasileiras nº 5 (Aria-Cantilena y DançaMartelo), de Heitor Villalobos.
Tras el concierto, el presidente del Gobierno de Navarra, Miguel Sanz Sesma; y el
alcalde de Fitero, Pachi Yanguas Fernández, obsequiaron a la soprano con sendos ramos
de flores, entre la ovación de los presentes.