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¿Cómo podré pagarte Señor todo el bien que me has hecho? ¿Cómo podré expresarte mi agradecimiento por cuanto haces en mí? Señor quiero decirte “GRACIAS” por haberme llamado, por haberme elegido. Gracias porque hoy 17 de Abril de 2016 me has hecho una sencilla hermana FMMDP, y esto es para mí maravilloso y único, gracias porque me has concedido los deseos de mi corazón y no me has negado lo que te pedían mis labios. Definitivamente has bendecido mi vida, me has colmado de gozo en tu presencia haciéndome comprender que no hay cosa más grande que hacer la voluntad del PADRE. Señor, gracias por la vida, gracias por la historia que has ido escribiendo en mí, gracias por cada momento en el que tú has sido el autor y junto a mí el protagonista, verdaderamente has hecho arder mi corazón. Y me siento feliz de que las cosas hayan sido así, ¡Qué grande eres conmigo Señor! Gracias por hacer de mi vocación una experiencia de tu eterna misericordia. Gracias Señor por tu Madre la Virgen María, mi Madre, Pastora y amiga. Junto a ella, porque mi alegría es grande, quiero entonar el Magníficat, proclamando las grandezas de tus obras en mi pequeña vida. Gracias también te doy por la vida de dos seres maravillosos, en quienes has ido tejiendo mi existencia, ellos me han entregado lo mejor de cada uno, ellos son gracia en mi seguimiento, primavera de mi vocación, mi vida es fruto de su amor y esfuerzo, dos seres a quienes orgullosamente llamo mis Padres. Gracias Señor por la vida de mi Congregación, por María Ana y Francisco de Asís; sus vidas entregadas estimulan mi caminar. Gracias por cada una de las hermanas de la Provincia y del Instituto, quienes con su testimonio de vida y vocación me han enseñado la belleza de la Vida Consagrada, gracias porque junto a ellas he sentido que hay felicidad en servirte y en amarnos mutuamente como hermanas. Gracias por todos mis familiares, amigos y compañeros quienes a lo largo de mi vida me han llevado hasta ti, en ellos descubro que en mi camino siempre hubo una mano generosa. Gracias Señor por la Vida, verdaderamente me ha dado tanto y yo me siento Contenta Señor, Contenta, por todo el bien que me has hecho, porque Tú eres mi Pastor y yo me siento sostenida por ti, por tu amor y tu bondad, porque me siento segura en tus manos, segura que me amas y me conoces, porque sé que contigo a mi derecha no vacilaré jamás. Por eso quiero decirte Señor: Esto es lo que yo quiero, que esto es lo que busco, que esto es lo que yo deseo con todo mi corazón, porque Tú eres el único Bien de mi vida y todas mis fuentes están en ti. Gracias Señor. L. Geraldine Enríquez Torres
