Download Abro los ojos. ¿Dónde estoy..? No veo nada, los vuelvo a cerrar

Document related concepts
no text concepts found
Transcript
Abnegación
Escrito por Damián
Miércoles 22 de Julio de 2009 21:59 -
Abro los ojos. ¿Dónde estoy..? No veo nada, los vuelvo a cerrar. Hace frío, ¿y mi ropa? Me la
quitaron. ¿Dónde estoy? Lo sé, en la completa oscuridad; ¿Pero.. por qué? ¿Por qué me falta
el aire, por qué nadie me acompaña? Ahora desearía estar en ese teatrillo de mala muerte
interpretando otra pieza de segunda con mi máscara de porcelana. También me la quitaron.
Debo permanecer aquí. Quiero salir. Quiero volver a mi lugar, no correspondo aquí. No soy una
sombra esta vez... da igual, el público de hoy no ha acudido. Echo en falta sus risas. ¿Qué he
hecho? Me odio por ello.
El chasquido del metal me saca de mis pensamientos. Vuelvo a abrir los ojos y trato de
enfocar. Dos largas piernas esperan ante mí. ¿Eres tú mi salvador? ¿Ha acabado todo ya?
Preguntas que no me atrevo a hacer, temiendo cada vez más que ese incómodo silencio al que
me había acostumbrado presagiara tormenta. Y así era. Tengo problemas. Dos ojos violáceos
brillando en lo alto que no mostraban compasión, un par de brazos cruzados que no me iban a
arropar. ¿Qué es eso? Un cuchillo... pero no he hecho nada. Algo en mi interior me dice que de
nada servía negarlo. Sigo teniendo problemas. No lo hagas, ¿me escuchará? Alzo el rostro,
necesito mirarla. Necesito ver en cuánto habían cambiado las tornas. Hoy las sombras me iban
a tragar.
Una mano alcanza mi brazo. ¡No he hecho nada! Quiero gritar. Los segundos se me hacen
eternos, ¿por qué yo? Estoy harto, ¡basta! Aprieto los dientes, de nada sirve implorar. No sé
qué he hecho, no sé por qué lo he hecho. Un destello me hace volver a mirar, ¡por favor! Pero
ninguna súplica podía parar ya el acero.
Dolor. Grito. Quiero salir, ¡quiero volver a casa, a mi casa! Los huesos de mi mano se cierran
en un último esfuerzo antes de sonar la sentencia. Por un instante contengo el aliento, no
quiero mirar. Algo gotea... es.. mi sangre. Yo no sangro, no puedo sangrar. Ya no quiero
participar en este estúpido juego... abro la boca para protestar, pero un aullido desgarrador es
lo único que consigo enhebrar. Duele... mi corazón se desboca, ¿me lo están intentando
quitar? ¿Ésto nunca acabará? Algo chasquea. Vuelvo a gritar.
Abro los ojos, observando aquellos dos puntos borrosos mirándome. Grito, grito, ¡grito! Esa
sonrisa torcida me lo confirma: ya está. Bajo la vista, ¿qué está sujetando? Es mi mano... o un
delirio con pretensiones de hacerme enloquecer. La sombra sale de la habitación, ¿qué me
habeis hecho? Me dejo caer, duele. Mi corazón sangra por dentro, el brazo me arde en un
gemido de auxilio por recuperar la parte que le acababan de robar. Las lágrimas no me dejan
ver dónde ha ido. No lo necesito, no me puedo mover. El dolor es insoportable, ¡sacadme de
aquí!... golpeo mi cabeza, quiero morir. La vuelvo a golpear, ¡despierta! Todo ésto ha de ser
una pesadilla, despierta. Despierta... ojalá fuese tan fácil como el despertar.
1/1