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II Trimestre de 2013
“Buscad a Jehová, y vivid”
Lección 6
(4 al 11 de Mayo de 2013)
Ansioso por perdonar
(Jonás)
Pr. Santos Corrales
Versículo de memoria: “Mas yo, con voz de alabanza te ofreceré sacrificios; pagaré lo
que prometí. La salvación es de Jehová" (Jonás 2:9).
Pregunta de confraternización: Perdonar, ¿es fácil o difícil? ¿Por qué?
Idea Central: La salvación alcanza a todos los que se arrepienten.
A. MOTIVA – INTRODUCCION
¿Has huido alguna vez? ¿Por qué lo hiciste? ¿Por qué huyó Jonás? ¿Estamos huyendo de Dios? Por otra parte, ¿es posible huir de Él?
B. EXPLORA
I.
LLAMADOS A PROCLAMAR
1. Llamado a Jonás. En 2 Reyes 14:25, se nos dice que vivía en la parte norte
de Israel;
• Ministró durante el siglo VIII a. C.
• El mismo texto revela que Jonás predijo una expansión territorial del
reino de Israel.
2. Un lugar determinado para predicar. Nínive era una de las tres grandes
ciudades de Asiria, un país importante situado junto al río Tigris.
• Dios envió a su siervo Jonás para advertir a los ninivitas de la destrucción
inminente.
• El mandato de Dios registrado en Jonás 1:2 es “pregona contra ella”,
que también puede ser traducido como “predícale a ella”.
• La crueldad de los asirios era notoria. Como un siglo después, el profeta
Nahúm llamó a Nínive “ciudad sanguinaria, toda llena de mentira y de rapiña” (Nahúm 3:1).
• Jonás fue enviado a entregarle un mensaje de Dios. Nínive, parte del Imperio Asirio, era una ciudad muy guerrera y una parte importante del Estado asirio, que tenía el mayor ejército permanente que alguna vez hubo
visto el Cercano Oriente o la región del Mediterráneo
3. Una actitud desobediente al llamado. Tal vez el temor a los odiados asirios fue lo que motivó la actitud de Jonás.
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Huir. Cuando Dios le dijo que viajara hacia el este, a Nínive, el profeta
rehusó y trató de huir al oeste por barco, a Tarsis.
Tormenta. Al principio, todo pareció ir bien para Jonás, pero entonces
Dios envió una gran tormenta contra el barco, para enseñar a su siervo la
lección de que nadie puede esconderse de Dios.
Voluntad de Dios. Jonás escapó de Dios porque no quería hacer la voluntad del Señor.
Huir. Todavía hoy la gente tiene muchas razones para escapar de Dios.
Todas ellas solo son escusas.
¿estás escapando de Dios? que excusas pones ¿tiempo? ¿temor?
¿falta de preparación? ¿venganza? No esperes todavía una tragedia.
II. LLAMADOS A PERDONAR
1. Dios es un Dios paciente, misericordioso. Perdonador.
• Dios deseaba perdonar a los Ninivitas. Somos mensajeros de reconciliación. Debemos eliminar todo rencor, odio, que nos ciega ver la gracia
de Dios. Por eso envió a Jonás.
2. La gracia y el perdón se ve en los marineros que intentan salvar a Jonás
antes de arrojarlo al mar.
• Dios necesita de sus hijos para ser mensajeros de esperanza y perdón.
Somos llamados a perdonar.
3. Actitud de los marineros.
• Buscaron ayuda. Los marineros invocaron a sus dioses pidiendo ayuda.
A causa de la severidad de la tormenta, sintieron que alguien debió haber
provocado la ira de los dioses.
• Echaron suertes. Para decidir quién sería el primero en ofrecer información acerca de sí mismo que expusiera tal ofensa. Para echar suertes,
cada persona llevaba una piedra o un marcador de madera identificable.
Estos objetos eran puestos en un recipiente, al que sacudían hasta que
uno de los elementos salía.
• Jonás culpable. La suerte cayó sobre Jonás, que confesó su pecado y
pidió a los marineros que lo arrojaran al mar.
• Marineros temieron a Jehová. Los marineros no hebreos actúan en
forma positiva, mientras que Jonás aparece bajo una luz negativa. Aunque los marineros adoraban a muchos dioses, ellos mostraron gran respeto por el Señor a quien oraron.
• Mostraron bondad. También mostraron bondad de corazón hacia el
siervo de Dios, Jonás, y se esforzaron por acercarse a tierra.
• Inevitable. Finalmente, aceptaron la sugerencia de Jonás de que lo tiraran por la borda.
• Adoración. Cuando la tormenta se serenó, los marineros hicieron un sacrificio a Dios y lo alabaron.
4. Dios es manifestado como el único Dios, poderoso, Creador. Pero con deseos de perdonar.
• La confesión de fe en Dios como Creador del mar y la tierra subraya la
inutilidad de sus intentos de escapar de la presencia del Señor.
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La inmediata terminación de la tormenta después de que los hombres
arrojaron a Jonás al mar les mostró que Dios, como Creador, controlaba
el mar.
Lección. Por esto, los marineros adoraron a Dios tanto más. Sin embargo, no hay duda de que aprendieron de esta experiencia algo acerca de
él.
5. Jonás encontró a Dios después de pasar un momento muy crítico.
• El descendió a Jope, luego la barco, al fondo del barco, al mar, dentro
de un pez.
• Jonás se arrepintió dentro del gran pez. No existe lugar donde Dios no
puede encontrarte. No puedes escapar de Dios.
• Después de esta experiencia estaba listo para ser un predicador. ¿necesitas algo similar?
III. LA SALVACION ES PARA TODOS.
1. Dios desea dar vida, no la muerte de los seres humanos.
• Muerte y gracia. Jonás 4 revela algunas cosas asombrosas acerca del
profeta. Parece preferir la muerte antes que presenciar la gracia y el perdón de Dios. Aunque antes Jonás se había alegrado en su liberación de
la muerte (Jon. 2:7-9), ahora que Nínive vive él prefiere morir (Jonás 4:2,
3).
• Dios desea salvar. En contraste con Jonás, se presenta a Dios, en la
Biblia, como alguien que dice: “no quiero la muerte del impío” (Ezequiel
33:11).
• Reprensión del libro. Jonás y muchos de sus compatriotas se alegraron
por las misericordias especiales a Israel, pero deseaban solo la ira sobre
sus enemigos. Tal dureza de corazón es reprendida severamente por el
mensaje del libro.
2. Una manifestación de la ternura divina por el pecador.
• Marineros versus Jonás. Vemos mucho más ternura de corazón y respeto a Dios en las acciones de los marineros paganos que en Jonás.
También vemos sinceridad y arrepentimiento en los corazones de la gente de Nínive.
• Dios y Jonás. Vemos preocupación en la voz de Dios. Pero ¿y Jonás?
Jonás lucha con el enojo. Está molesto porque el pueblo de Nínive se
arrepintió y Dios le extendió su misericordia, como él sabía que iba a suceder, porque "sabía que tú eres Dios clemente y piadoso, tardo en enojarte, y de grande misericordia, y que te arrepientes del mal" (Jon. 4:2).
Jonás estaba equivocado teológicamente.
• Caminos de Dios. La historia de Jonás habla de los milagrosos caminos
de Dios y de su capacidad de emplear métodos sobrenaturales.
• Abiertos a las acciones de Dios. Como tal, nos enseña, a jóvenes y a
mayores por igual, a estar abiertos a las maravillas, a esperar más de lo
que nuestros ojos humanos y las leyes de la ciencia nos dicen que es
posible.
• Todos son alcanzables. En niveles más complejos, nos revela una de
las lecciones espirituales más profundas que debemos aprender: que no
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hay persona que esté más allá de la misericordia sanadora de la gracia
de Dios.
La Gracia es para todos. Pero Jonás, un pecador salvado por la gracia
divina, está muy descontento de que el pueblo de Nínive también reciba
de esa gracia. Esta historia muestra la enseñanza revolucionaria de que
la gracia de Dios es para todos, y desafía las ideas y las actitudes intolerantes que los "creyentes", a menudo, sostienen hacia los "no creyentes".
3. Lección central del libro de Jonás. De aquellas verdades del mensaje del
evangelio de Dios que son centrales y, a la vez, difíciles de aceptar, la historia de Jonás destaca una: el perdón y la redención son para todos los
que tengan un corazón abierto hacia Dios.
• Amor y gracia universales. La raza, el credo y la nacionalidad nunca
son factores en la ecuación divina; el amor de Dios y la pertenencia a su
familia son universales.
• Mensaje de Esperanza. Las acciones pasadas (no importa cuán horribles, injustas o miserables hayan sido) nunca son insuperables para el
corazón arrepentido. No hay obstáculo que un corazón lleno de arrepentimiento no pueda cruzar. No hay pasado que Dios no pueda perdonar.
• Jonás fue salvado milagrosamente. Reconoció que la salvación es de
Dios. (Jon 2:9) debemos tratar a los demás como Dios nos trata. Con
gracia y perdón.
4. Jonás, le profeta rebelde, la gracia y nosotros.
• Como no ser profeta. el libro de Jonás es un manual de cómo no ser un
profeta. Jonás fue un profeta de espíritu rebelde y prioridades equivocadas.
• Orgullo, deseos de venganza. No podía controlar su deseo de venganza. Tenía una mente estrecha y era de mal genio. En lugar de alegrarse
por la gracia que Dios mostraba también a los ninivitas, Jonás permitió
que su orgullo egoísta y pecaminoso lo hiciera resentido.
• Deseo de muerte. Las últimas palabras de Jonás son un deseo de muerte (Jon. 4:8, 9), mientras que las últimas palabras de Dios son una afirmación de su inmensurable gracia, una afirmación para vida.
• Un final abierto. Los últimos versículos confrontan a los lectores con una
pregunta importante, que queda sin respuesta del autor: el milagroso
cambio de corazones en Nínive ¿resultó en un cambio radical en el
corazón de Jonás?
• Como predicadores, feligreses. ¿Dios ha cambiado nuestro corazón?
¿Cómo estamos participando de la misión?
5. La predicación del Evangelio será un éxito. Debemos unirnos a esta noble
tarea divina.
• Mensaje. En su proclama, Jonás (3:1-4) usó un lenguaje que recuerda la
destrucción de Sodoma y Gomorra por parte de Dios (Génesis 19). Pero,
en el hebreo original, la palabra para “destruida” (ver Génesis 19:21, 29;
Jon. 3:4), en la proclama de Jonás, también puede significar “convertirse”
o “transformarse” (Éxodo 7:17, 20; 1 Samuel 10:6). La predicación que
realizó Jonás del mensaje divino no fue en vano.
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Logro alcanzado. El resultado fue asombroso. Humillado ante Dios, el
pueblo se vistió de saco y cilicio, puso ceniza sobre su cabeza y ayunó.
Todas estas eran señales externas de tristeza y arrepentimiento.
Rey humillado. El fuerte monarca asirio humillándose en ceniza ante
Dios era una aguda reprensión a los muchos orgullosos gobernantes de
Israel y a su pueblo, quienes rechazaron los llamados proféticos al arrepentimiento.
Interesante y actual. Por causa del énfasis del libro de Jonás sobre la
gracia y el perdón de Dios, el pueblo judío lo lee cada año en el punto
culminante del Día de la Expiación, que celebra el perdón divino de sus
pecados.
“Nuestro Dios es un Dios compasivo. Con longanimidad y tierna misericordia trata con los transgresores de su ley. Y, no obstante, en este nuestros días, cuando los hombres y las mujeres tienen tantas oportunidades
de familiarizarse con la ley divina como está revelada en la Santa Escritura, el gran Soberano del universo no puede mirar con ninguna satisfacción las malvadas ciudades, donde reina la violencia y el crimen. Si la
gente de esas ciudades se arrepintiera, como lo hicieron los habitantes
de Nínive, se darían muchos mensajes más como el de Jonás” (Elena de
White, AR&SH, 18 de octubre de 1906).
C. APLICACIÓN
1. ¿Estas huyendo de la responsabilidad que Dios ha dado a sus hijos de predicar
el evangelio?
2. ¿Hay personas que crees que ya no tienen esperanza, son muy malas y no les
llevas el evangelio?
3. ¿Hay alguien que no puedes perdonar? ¿Cómo puedes pedir, entonces, el perdón de Dios?
D. CREATIVIDAD
1. ¿Quiénes podrían ser los ninivitas actuales? Menciona como puedes llegar a
ellos. Comparte con tu grupo pequeño tus ideas.
2. En forma personal: ¿Quién es la persona que no puedes perdonar? Búscala lo
más pronto que puedas y exprésale tu perdón.
3. Con tu Grupo Pequeño busca una zona de tu ciudad, tómalo como la Nínive
moderna. Hagan un plan de evangelizarlo.
E. RESUMEN
Dios es el que salva. Dios redimió a los marineros, ninivitas y a Jonás. La gracia divina
alcanza a todos los que se arrepienten. Somos llamados a proclamar, experimentar el
perdón y perdonar.
Pr. Santos Corrales
Pastor de la Iglesia Central de Trujillo
Unión Peruana del Norte
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