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APLICACIONES MEDICAS
EMERGENTES DEL CANNABIS
Y DE LOS CANNABINOIDES
1
INTRODUCCION
A pesar de la constante existencia de debate político acerca de la legalidad de la
marihuana medicinal, el número de investigaciones clínicas acerca de su uso terapéutico
es mucho más abundante ahora que en cualquier momento de la historia. Una
investigación desarrollada en el servicio web de la Biblioteca Nacional de Medicina
cuantifica este hecho. En 1996, (año en el que el estado de California fue el primero de
los 13 estados que han permitido, mediante ley estatal, el uso medicinal del cannabis)
una búsqueda en dicha web con la palabra clave cannabis revelaba únicamente la
existencia de 258 artículos científicos publicados en medios relacionados. Realizando la
misma búsqueda en el 2008, número de estudios científicos publicados era de 2100.
A la vez que es cierto, que este nuevo interés que se ha suscitado alrededor del cannabis
terapéutico viene en gran medida por las nuevas regulaciones que vienen adaptándose
en su entorno, lo cierto es que el mayor número testimonios de pacientes medicinales y
de sus terapeutas también están impulsando este interés. Sin embargo, y a pesar del
creciente número de testimonios acerca del uso terapéutico del cannabis, la mayor parte
de la investigación desarrollada con cannabis medicinal está limitada a estudios
preclínicos (con animales) de cannabinoides indibiduales (THC o cannabidiol) y/o
cannabinoides sintéticos (dronabinol o WIN 55,212-2) cuando deberían desarrollarse
estudios medico-clínicos de las propiedades de todo el material producido por la planta.
Además se puede suponer que como consecuencia de la fuerte política estatal en contra
de cualquier uso del cannabis, la mayor parte de esta nueva investigación en torno a los
canabinoides se está desarrollando fuera de los Estados Unidos.
A medida que ha ido proliferando la investigación clínica acerca del cannabis medicinal
–existen hoy en día más de 17,000 artículos publicados medios escritos científicos
sobre la marihuana y sus componentes- también ha ido aumentando el conocimiento
científico acerca del cannabis y de la asombrosa capacidad terapéutica de dicha
sustancia. Mientras que durante la década de los 70, 80 y 90 las principales líneas de
investigación se centraban en el uso del cannabis para temporalmente aliviar los
síntomas de algunas enfermedades –tales como las nauseas asociadas a la
2
quimioterapia- las líneas de investigación se centran ahora en búsqueda de la capacidad
de los canabinoides de modificar las enfermedades.
Los científicos están investigando la capacidad de los cannabinoides de moderar
enfermedades autoinmunes como la esclerosis múltiple, artritis reumatoide, e
inflamatoria, enfermedad intestinal, así como su papel en el tratamiento de trastornos
neurológicos como la enfermedad de Alzheimer y la esclerosis lateral amiotrófica
(también conocida como enfermedad de Lou Gehrig).
Los investigadores también están estudiando los beneficios que puede aportar el
cannabis contra el cáncer, ya que un creciente número de datos preclínicos y clínicos
concluyen que los cannabinoides pueden reducir la propagación de determinadas células
cancerosas a través de la apoptosis (muerte celular programada) y por la inhibición de la
angiogénesis (formación de nuevos vasos sanguíneos). Podría decirse que estos últimos
representan las tendencias más amplias y las aplicaciones más importantes para la
terapia mediante cannabinoides; aplicaciones que los investigadores jamás podrían
haber imaginado unos treinta o veinte años atrás.
3
PERFIL DE SEGURIDAD DE CANNABIS MEDICINAL
Los cannabinoides tienen un historial de seguridad notable, especialmente en
comparación con otras sustancias terapéuticamente activas. Lo más significativo es, que
el consumo de marihuana -independientemente de la cantidad o potencia- no puede
inducir a una sobredosis fatal. De acuerdo con un examen fechado en 1995, preparado
por la Organización Mundial de la Salud, se detalla que; "No hay casos registrados de
muertes por sobredosis atribuidas al cannabis, y la dosis estimada letal para los seres
humanos extrapolada de estudios en animales es tan alta que no se puede lograr ...por
los usuarios ".
En 2008, investigadores de la McGill University Health Centre y la Universidad McGill
en Montreal y la Universidad de British Columbia en Vancouver revisaron 23
investigaciones clínicas de fármacos medicinales cannabinoides (por lo general
adoptados por vía oral de extractos de cannabis THC o líquido). Los investigadores no
encontraron una tasa de incidencia más alta de efectos adversos graves asociados con el
uso de cannabinoides.
Sin embargo, el cannabis no necesariamente debe ser visto como una sustancia
"inofensiva". Sus componentes activos pueden producir una variedad de efectos
fisiológicos y eufóricos. Como resultado, puede haber algunas poblaciones que sean
susceptibles a un mayor riesgo por el uso de cannabis, como los adolescentes, mujeres
embarazadas o lactantes, y los pacientes que tienen antecedentes familiares de
enfermedad mental. Entre los pacientes con hepatitis C, la disminución de la función
pulmonar (como enfermedad pulmonar obstructiva crónica), o aquellos que tienen
antecedentes de enfermedad cardiaca o un derrame cerebral también puede estar en un
riesgo mayor de sufrir efectos secundarios adversos de la marihuana. Al igual que con
cualquier medicamento, los pacientes deben consultar a fondo con su médico antes de
decidir si el uso medicinal de la marihuana es segura y apropiada.
4
CÓMO UTILIZAR ESTE INFORME
A medida que los diferentes estados tienden a aprobar nuevas legislaciones que
permitan el uso médico bajo supervisión, de la marihuana medicinal, cada vez más
pacientes con diferentes tipos de enfermedades están explorando el uso del cannabis
terapéutico. Muchos de estos pacientes y sus médicos están discutiendo este tema por
primera vez, y que buscan orientación acerca de si el uso terapéutico del cannabis puede
o no ser aconsejable. Este informe pretende ofrecer esta guía con un resumen de la
mayoría de las investigaciones científicas publicadas recientemente (2000-2009) sobre
el uso terapéutico de cannabis y los cannabinoides para las siguientes 19 indicaciones
clínicas:
* Enfermedad de Alzheimer
* La esclerosis lateral amiotrófica
* Dolor Crónico
* Diabetes mellitas
* Distonía
* Fibromialgia
* Trastornos gastrointestinales
* Los gliomas
* Hepatitis C
* Virus de Inmunodeficiencia Humana
* Hipertensión
* Incontinencia
* Staphylococcus aureus resistente a meticilina (MRSA)
* La esclerosis múltiple
* Osteoporosis
* Prurito
* La artritis reumatoide
* La apnea del sueño
* Síndrome de Tourette
En algunos de estos casos, la ciencia moderna está afirmando lo que desde hace mucho
tiempo venían haciendo los informes anecdóticos de los usuarios de cannabis medicinal
5
(por ejemplo, el uso del cannabis para aliviar los trastornos GI). En otros casos, esta
investigación pone de relieve nuevos servicios clínicos potencial de los cannabinoides
(por ejemplo, el uso de los cannabinoides para modificar la progresión de la diabetes.)
Las condiciones presentadas en este informe fueron elegidas porque los pacientes suelen
preguntar acerca de el uso terapéutico del cannabis para el tratamiento de estos
trastornos. Además, muchas de las indicaciones incluidas en este informe pueden ser
moderadas por la terapia de cannabis. En varios casos, datos clínicos y preclínicos
indican que los cannabinoides pueden detener la progresión de estas enfermedades de
una manera más eficaz que los productos farmacéuticos disponibles. En casi todos los
casos, este informe es la revisión más completa y exhaustiva de la literatura científica
más reciente sobre el uso terapéutico del cannabis y los cannabinoides
Que este informe sirva como un manual para aquellos pacientes y médicos que están
considerando el uso o la recomendación de cannabis medicinal. Para otros, que este
informe sirva como una introducción a la amplia gama de nuevas aplicaciones clínicas
para el cannabis y sus diversos compuestos.
Paul Armentano
Subdirector NORML
Fundación NORML Washington, DC
15 de enero 2009
* El autor desea agradecer a Dale Gieringer, Gregory Carter, Steven Karch, y Mitch
Earleywine, así como Ellis Bernard, MPH, NORML pasantes John Lucy, Christopher
Rasmussen, y Bowles Rita, para proporcionar asistencia en la investigación para este
informe. La Fundación NORML también desea agradecer Dale Gieringer, Paul Kuhn, y
Richard Wolfe por sus contribuciones financieras a la publicación de este informe.
** Importantes publicaciones de este tipo sólo son posibles cuando los ciudadanos se
involucran con la NORML. Para más información sobre la inscripción a NORML, o
para hacer una donación, por favor visite: http://www.norml.org/join. Donaciones
deducibles de impuestos al apoyar las campañas de educación pública
6
7
PREAMBULO
Gregory T. Carter, MD
Departamento de medcina de rehabilitación
Universidad de la Washington School Medicine.
Marihuana, es la forma común que se utiliza para hablar de las flores secas de las
plantas hembra de las Cannabis Sativa y Cannabis Indica. La marihuana, o como
deberíamos referirnos el cannabis, ha sido desde que se registra la historia, parte del
baúl medicinal de la humanidad.
Todas la plantas de cannabis son plantas muy complejas, que cuentan con más de 400
elementos químicos. Aproximadamente el 60% de estos elementos son considerados
canabinoides. Entre los canabinoides, destacaríamos, el tetra-9-hydrocannabinol (THC),
el principio activo de los medicamentos de prescripción Dronabinol (Marinol) y
Naboline (Cesamet) como los más psicoactivos de ellos. Otros cannabinoides que se
incluyen son el Cannabidiol (CBD) o el cannabinol (CBN), que no cuentan con efectos
psicoactivos pero que si tienen otros efectos farmacológicos.
El Cannabis se introdujo formalmente en la Pharmacopedia de los Estado Unidos (USPUnited Staes Pharmacopoeia) en el año 1854, a pesar de que existen referencia escritas
que constatan el uso terapéutico de la planta años y años atrás, hasta el 2.800AC. Para el
año 1900, el cannabis era tras los opiáceos y el alcohol el ingrediente activo más
popular y común en todos los medicinas patentadas en venta. Sin embargo, como
consecuencia de la Revolución en México en el año 1910 millares de mexicanos
inundaron los Estados Unidos, trayéndose consigo un uso más recreativo o lúdico del
cannabis. Los movimientos y activistas contra la droga, se alarmaron por lo que ellos
denominaron como la “Marijuana Menace” o “La Amenaza de la Marihuana”, alegando
que el uso de la droga era responsable de una oleada de actividad criminal que iba
creciendo. En 1937, después de testimonio de Harry Anslinger-un fuerte oponente de la
marihuana y jefe de la Oficina Federal de Narcóticos en la década de los 30- y en contra
de la recomendaciones de la Asociación de Marihuana Médica, la conocida como
8
“Marihuana Tax Act” fue aprobada a través del Congreso, criminalizando y
deslegalizando todo tipo de posesión y uso de la sustancia.
En aquella época existían, nada menos que 28 medicamentos patentados que contenían
cannabis, podian adquirirse en las farmacias de los Estados Unidos. Este tipo de
medicamento basado en el cannabis eran producidas por compañías framaceutaicas de
gran prestigio como Squibb, Merck o Eli Lily, y se utilizaban de una manera segura por
decenas de miles de pacientes. Como consecuencia de la aprobación de la “Marihuana
Tax Act”, la producción y uso del cannabis medicinal se acabó drásticamente, y por el
año 1942 el cannabis fue oficialmente removido de la “Physicians Desk Reference”, lo
que vendría a ser la guía de elementos médicos utilizables por los médicos y
farmacéuticos.
Afortunadamente, durante las últimas década ha habido un renacimiento significante en
el interés de un uso viable del cannabis en la medicina. Mucho de este interés en el
cannabis como medicina viene no sólo por la efectividad de la sustancia, pero sobre
todo por su baja toxicidad. No se han descrito dosis letales de cannabis en ningún ser
humano. Este grado de seguridad es poco común entre las medicinas modernas, y como
consecuencia el Instituto Nacional de Salud (National Institute for Health), la Academia
Nacional de Ciencias Instituto de Medicina (National Academy os Sciences Institute of
Medicine), e incluso la Administración Nacional de Alimentos y Medicinas (US Food
and drug Administration) han realizado llamamientos para que se desarrolla una
investigación más profunda acerca del uso medicinal del cannabis y de los
canabinoides.
El descubrimiento de un sistema endógeno de cannabinoides, con receptores
específicos, ha progresado nuestro conocimiento acerca de los beneficios terapéuticos
del cannabis desde el folklore o cultura hasta hechos científicos validos y demostrables.
Por lo que se va descubriendo parece que los cannabinoides evolucionaron con nuestra
especie y están intrínsecamente relacionados en la fisiología normal humanaespecialmente en el control del movimiento, el dolor, la reproducción la memoria , y el
apetito entre otras funciones biológicas. Además el que prevalezcan receptores de
9
cannabinoles en el cerebro y sus tejidos periféricos sugiere que el sistema de
cannabinoides representa la ubicación de una red nerviosa no reconocida.
Se sabe que existen receptores de cannabinoides en todos los sistemas nerviosos de los
animales. Esto se debe a una evolución de más de 500 millones de años. El sistema
neurológico, circulatorio, endocrino, digestivo, y musculoesqueletal del cuerpo humano
han demostrado tener receptores de cannabinoides. Incluso el tejido de los cartílagos
cuenta con este tipo de receptores, lo que hace del cannabis un agente terapéutico
primario para tratar osteoartritis. Los cannabinoides han demostrado tener facultades
antiinflamatorias.
Actualmente se sugiere, que esta amplia red de receptores de cannabinoides son el
mecanismo mediante el cual el cuerpo humano mantiene la homeostasis (la regulación
del funcionamiento celular), permitiendo que los tejidos se comuniquen en este baile
celular que denominamos “vida”. Con este conocimiento del amplio efecto de los
cannabinoides entre estos sistemas, se hace mucho más sencillo conceptualizar cómo las
diferentes formas de cannabinoides pueden potencialmente tener un efecto terapéutico
en enfermedades que van desde la ostoastritis hasta la esclerosis amyotropica lateral.
Otro de los emocionantes campos donde el cannabis puede ofrecer grandes beneficios es
el dolor crónico. Los cannabinoides producen analgesia mediante la modulación de la
actividad neuronal de la medula ventromedial rostral, de una manera similar, pero
farmacologicamente diferente de la morfina. Este efecto analgésico también puede
lograrse mediante cannabinoides endógenos (anandamide) y cannabinoides sintéticos
(methanandamide) idealmente los cannabinoides podrían utilizarse conjuntamente con
los opiáceos para tratar a enfermos de dolor crónico, y así mejorar su calidad de vida y
permitirles que vuelvan a ser personas independientes y productivas.
Cuando se debate acerca del uso terapeútico del cannabis y de los cannabinoides , los
oponentes rapìdamente alegan que los pacientes no deberían fumar la medicina. Hoy en
día los pacientes ya no tienen por que hacer esto. Para quellos pacientes que busquen el
efecto rápido relacionado a la inhalación, pero que son conscientes de los riesgos que
conlleva la inhalación de humo tóxico, pueden consumirla mediante la vaporización. La
vaporización del cannabis limita las toxina respiratorias mediante el calentamiento de la
10
sustancia hasta la temperatura en la cual se forman los vapores cannabinoides
(normalmente entre 180 y 190 grados centígrados), pero por debajo del punto de
combustión en el que se emanan humo nocivo y toxinas asociadas que se producen
cerca de los 230 grados centigrados. Así se elimina el daños que puede producir el
fumar. En ensayos clínicos, la vaporización ha sido demostrada como una forma segura
y efectiva de farmacologicamente suministrar canabinoides aerosolizados a los
pulmones donde la rica cama vascular se encargará de rapidamente enviarla al resto de
los tejidos del cuerpo.
El siguiente documento resume los articulos de investigación más recientes y relevantes
acerca del uso terapeutico del cannabis y de los cannabinoides para más de una docena
de enfermedades que incluyen alzheimer, esclerósis lateral amitrofica, diabetes,
hepatitis C, sclerosis múltiple artritis reumática, y el indrome de Tourette. Mi deseo es,
que los lectores de este estudio tengan una visión justa y equilibrada acerca del
cannabis-una visión que está corroborada por estudios científicos, y no de simple
opinion o paranoia. El Cannabis no es un milagro, ni tampoco la solución a los males de
todos los enfermos. Sin embargo, si que es cierto que posee grandes efectos terapeuticos
que han de estudiarse más prfundamente siempre y cuando las leyes gubernamebntales
que actuan como barreras para ellos sean removidas.
La planta del cannabis no justifica la tremenda preocupación y persecucion juridicolegal y social a la que se ha visto enfrentada. Durante los últimos 30 años los estados
unidos han gastado billones de dolares en un esfuerzo por acabar con el uso de las
drogas ilegales, especialmente la marijuana, con ningún tipo de éxito. Mucha gente
enferma ha tenido que defenderse en largas batallas judiciales por haber utilizad una
sustancia que les ha ayuda a mejorar su calidad de vida. Necesitamos mentes racionales
que gestionen las diferentes políticas antidroga, separando mitos de hechos, lo correcto
de lo incorrecto, y se ha de abordar el hecho de la marihuana medicinal con una atitud
menos distante.
El usuario de marihuana medicinal no debería ser considerado un criminal en ningún
estado.La mayoría de los principales grupos médicos, entre ellos el Instituto de
Medicina, están de acuerdo en el hecho de que el cannabis es un compuesto con
11
un gran potencial terapéutico, “cuyos efectos negativos ... están dentro del rango de los
efectos tolerados en otros medicamentos”. Hace ya más de una década, la Drug
Enforcement Administration (DEA) estudió las propiedades medicinales del cannabis.
Después de numerosos estudios, el Juez de Derecho Administrativo Francisco L. Young
de la DEA llegó a la siguiente conclusión: “La evidencia muestra claramente que la
marihuana es capaz de aliviar la angustia de un gran número de personas muy enfermas,
y haciendolo con seguridad bajo supervisión médica. ... sería irrazonable, arbitrario y
caprichoso por parte de la DEA el continuar entre los enfermos y los beneficios de esta
sustancia”.
A pesar de esta conclusión, más de una década después, la DEA y el resto del Gobierno
Federal persisten en su política de prohibición total. Sin embargo, el proceso científico
continúa evaluando los efectos terapéuticos del cannabis a través de la investigación en
curso y la evaluación de los datos disponibles. En lo que respecta al uso medicinal del
cannabis, nuestro sistema jurídico debería adoptar un enfoque similar, usando la ciencia
y la lógica como la base de la formulación de políticas en lugar de depender de la
retórica política y las percepciones falsas sobre los supuestos efectos nocivos de
consumo lúdico de marihuana.
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ENFERMEDAD DE ALZHEIMER (EA)
La enfermedad de Alzheimer (EA) es un trastorno neurológico de origen desconocido
que se caracteriza por una pérdida progresiva de la memoria y el comportamiento
aprendido. Los pacientes con enfermedad de Alzheimer suelen experimentar depresión,
agitación y pérdida de apetito, entre otros síntomas. Se estima que más de 4.5 millones
de estadounidenses sufren esta enfermedad. No existen tratamientos probados o
medicamentos disponibles para detener la progresión de la EA, y pocos productos
farmacéuticos han sido aprobados por la FDA para tratar los síntomas de la enfermedad.
Una revisión de la literatura científica reciente indica que la terapia con cannabinoides
pueden proporcionar alivio sintomático de los pacientes afectados con Alzheimer,
mientras que también moderar la progresión de la la enfermedad.
En Febrero de 2005 de la revista Journal of Neuroscience, unos investigadores de
Madrid de la Universidad Complutense y el Instituto Cajal en España informaron de que
la administración intracerebroventricular del cannabinoide sintético WIN 55,212-2
prevenia el deterioro cognitivo y la disminución de neurotoxicidad en ratas inyectadas
con amyloidbeta péptido (una proteína que se cree es la causante de la enfermedad de
Alzheimer). Cannabinoides adicionales fueron también encontrados para reducir la
inflamación asociada con la enfermedad de Alzheimer en el tejido del cerebro humano.
“Nuestros resultados indican que los cannabinoides ... tienen éxito en la prevención del
proceso neurodegenerativo que ocurre en la enfermedad”, concluyeron los
investigadores. [1]
En 2006 investigadores del Instituto de Investigación Scripps en California informaron
que el THC inhibe la enzima responsable de la acumulación de placa amiloide - las
primarias marcador para la enfermedad de Alzheimer - de una manera
considerablemente superior a la aprobada con los medicamentos contra la enfermedad
como el donepezil y la tacrina. “Nuestros resultados proporcionan un mecanismo por el
que la molécula de THC puede impactar directamente la patología de Alzheimer la
enfermedad, los investigadores concluyó. THC y sus análogos pueden proporcionar una
13
mejora terapéutica [opción] para Enfermedad de Alzheimer [por] ... al mismo tiempo el
tratamiento de los síntomas y la progresión de la de [la] enfermedad [2].
Más recientemente, investigadores de la Ohio State University, Departamento de
sicología y Neurociencia, informó de que las ratas viejas administrado dosis diarias de
WIN 55,212-2 para un período de tres semanas un desempeño significativamente mejor
que los controles no tratados en una watermaze prueba de memoria. Escribiendo en la
revista Neuroscience en 2007, los investigadores informaron que las ratas tratados con
el compuesto experimentado una mejora del 50 por ciento en la memoria y un 40 a 50
por ciento de reducción en la inflamación en comparación con los controles [3].
Estudios preclínicos anteriores han demostrado que los cannabinoides pueden prevenir
la muerte celular por anti-oxidación. [4] Algunos expertos creen que las propiedades de
los cannabinoides "neuroprotector podría también desempeñan un papel en la
moderación de AD. [5] publicado en septiembre de 2007 en el British Diario de
Farmacología, los investigadores en el Trinity College de Irlanda del Instituto de
Neurociencias llegó a la conclusión, [C] annabinoids ofrecer un enfoque multifacético
para el tratamiento de la enfermedad de Alzheimer la enfermedad, proporcionando la
neuroprotección y la reducción de la neuroinflamación, mientras que al mismo tiempo
el apoyo a los cerebros de los mecanismos intrínsecos de reparación mediante el
aumento de neurotrofina expresión y la mejora de la neurogénesis. ... La manipulación
de los cannabinoides ofrece una vía de abordaje farmacológico para el tratamiento de la
EA que pueden ser eficaces que los regímenes actuales de tratamiento. [6]
Además de potencialmente modificar la progresión de la EA, los ensayos clínicos
también indican que la terapia llevada a cabo con cannabinoides pueden reducir la
agitación y estimular el aumento de peso en pacientes que sufren de dicha enfremedad.
Más recientemente, investigadores del Departamento de Psiquiatría y Psicoterapia de la
Charité de Berlín de Alemania Universitatmedizin, informaron que la administración
diaria de 2,5mg de THC sintético en un periodo de dos semanas reduce la actividad
motora nocturna y la agitación en pacientes con EA en un estudio piloto abierto [7]. Los
datos clínicos presentados en la reunión anual de 2003 d la Internacional de
Psicogeriatría Asociación se informó anteriormente que la administración oral de hasta
10 mg de fibras sintéticas
14
El THC reduce la agitación y estimula la ganancia de peso en la última fase los
pacientes de Alzheimer. [8] El aumento de peso mejora y se aprecia una disminución de
sentimientos negativos entre los pacientes con EA a los que se les trató
administrandoles cannabinoides, previamente notificados por los investigadores en el
International Journal of Geriatric Psychiatry en 1997 [9]. Un estudio adicional más
profundo de la utilización de cannabinoides para tratar la enfermedad de Alzheimer
parece estar justificada.
REFERENCES
[1] Ramirez et al. 2005. Prevention of Alzheimer’s Disease pathology by cannabinoids. The Journal of Neuroscience
25: 1904-1913.
[2] Eubanks et al. 2006. A molecular link between the active component of marijuana and Alzheimer ʹs disease
pathology. Molecular Pharmaceutics (E-pub ahead of print).
[3] Marchalant et al. 2007. Anti-inflammatory property of the cannabinoid agonist WIN-55212-2 in a rodent model of
chronic brain inflammation. Neuroscience 144: 1516-1522.
[4] Hampson et al. 1998. Cannabidiol and delta-9-tetrahydrocannabinol are neuroprotective antioxidants. Proceedings
of the National Academy of Sciences 95: 8268-8273.
REFERENCIAS
[1] Ramírez et al. 2005. Prevención de la patología de la enfermedad de Alzheimer por los cannabinoides. El Diario
de Neurociencia 25: 1904-1913.
[2] Eubanks et al. 2006. Un vínculo molecular entre el componente activo de la marihuana y la enfermedad de
Alzheimer y su patología. Molecular Farmacia
[3] Marchalant et al. 2007. Propiedad antiinflamatoria del agonista cannabinoide WIN-55.212-2 en un roedor modelo
de inflamación crónica del cerebro. Neurociencia 144: 1516-1522.
[4] Hampson et al. 1998. El cannabidiol y el delta-9 tetrahidrocannabinol-son antioxidantes neuroprotectores. Actas
de la Academia Nacional de Ciencias 95: 8268-8273.
15
ESCLEROSIS LATERAL AMIOTRÓFICA (ELA)
La esclerosis lateral amiotrófica (ELA), también conocida como enfermedad de Lou
Gehrig, es un grave trastorno neurodegenerativo que se caracteriza por la pérdida
selectiva de neuronas motoras en la médula espinal, tronco encefálico y corteza motora.
Se estima que 30.000 estadounidenses padecen de ELA, que a menudo surge de manera
espontánea y afecta a adultos sanos. Más de la mitad de los pacientes con ELA mueren
en un marco de unos 2.5 tras la aparición de los primeros síntomas.
Una revisión de la literatura científica pone de manifiesto la ausencia de ensayos
clínicos que investigan el uso de los cannabinoides para tratar la ELA. Sin embargo, los
recientes hallazgos preclínicos indican que los cannabinoides puede retrasar la
progresión de la ELA, lo que apoyaría los informes anecdóticos realizados por pacientes
en los que se relata que los cannabinoides pueden ser eficaces para moderar el
desarrollo de la enfermedad y en aliviar ciertos síntomas relacionados con la ALS-, tales
como dolor, pérdida de apetito, depresión y babeo.[1]
En un artículo publicado en marzo de 2004 en la revista Amyotrohpic Lateral Sclerosis
and other Motor Neuron Disorders-, los investigadores del California Pacific Medical
Center en San Francisco informaron que la administración de THC, tanto antes como
después de la aparición de los síntomas de la ELA, evitó la progresión de la enfermedad
y prolongó la supervivencia en los animales tratados en comparación con los animales
no tratados.[2]
Los ensayos adicionales en animales padecientes de ELA han mostrado que la
administración de cannabinoides sintéticos y/o naturales también pueden moderar la
progresión de la ELA, pero no necesariamente la supervivencia de impacto. [3-4] Un
estudio reciente demostró que el bloqueo del receptor de cannabinoides CB1 alargó la
vida de un ratón con ELA, lo que sugiere que la medición de si los efectos de los
cannabinoides son “beneficiosos” sobre la ELA pueden ser mediadas por los
mecanismos con antireceptores CB1. [5]
16
Los datos preclínicos también han demostrado que los cannabinoides son
neuroprotectores contra los daños que produce la oxidación, tanto in vitro [6] como en
los animales. [7] Los cannabinoides "puede desempeñar un papel moderador en la ELA,
que se caracteriza por el exceso de actividad del glutamato en la médula espinal. [8] Por
lo menos un cannabinoide, el delta-9-THC, ha demostrado proteger a las neuronas
espinales cultivadas de un ratón contra la excitotoxicidad. [9]
Como resultado, algunos expertos ahora recomiendan que "la marihuana ... debería ser
considerada en el manejo farmacológico de la esclerosis lateral amiotrófica"[10] y creen
que "una mayor investigación acerca de la utilidad de la marihuana ...
y de los
receptores de cannabinoides está justificada. "[11]
REFERENCES
[1] Amtmann et al. 2004. Survey of cannabis use in patients with amyotrophic lateral sclerosis. The American Journal
of Hospice and Palliative Care 21: 95-104.
[2] Raman et al. 2004. Amyotrophic lateral sclerosis: delayed disease progression in mice by treatment with a
cannabinoid. Amyotrophic Lateral Sclerosis & Other Motor Neuron Disorders 5: 33-39.
[3] Weydt et al. 2005. Cannabinol delays symptom onset in SOD1 transgenic mice without affecting survival.
Amyotrophic Lateral Sclerosis & Other Motor Neuron Disorders 6: 182-184.
[4] Bilsland et al. 2006. Increasing cannabinoid levels by pharmacological and genetic manipulation delay
disease progression in SOD1 mice. The FASEB Journal 20: 1003-1005.
[5] Ibid.
[6] Raman et al. 2004. op.cit.
[7] Hampson et al. 1998. Cannabidiol and delta-9-tetrahydrocannabinol are neuroprotective antioxidants. Proceedings
of the National Academy of Sciences 95: 8268-8273.
[8] Carter and Weydt. 2002. Cannabis: Old medicine with new promise for neurological disorders. Current Opinion
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[9] Abood et al. 2001. Activation of the CB1 cannabinoid receptor protects cultured mouse spinal neurons against
excitotoxicity. Neuroscience Letters 309: 197-201.
[10] Carter and Rosen. 2001. Marijuana in the management of amyotrophic lateral sclerosis. The American Journal of
Hospice and Palliative Care 18: 264-70.
[11] Carter et al. 2003. Drug therapy for amyotrophic lateral sclerosis: Where are we now? The Investigational Drugs
Journal 6: 147-153.
REFERENCIAS
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American Diario de Hospicio y Cuidados Paliativos 21: 95-104.
[2] Raman et al. 2004. Esclerosis lateral amiotrófica: progresión de la enfermedad tardía en ratones mediante el
tratamiento con un cannabinoides. Esclerosis lateral amiotrófica y Otros Trastornos Neurona Motor 5: 33-39.
17
[3] Weydt et al. 2005. retrasos cannabinol aparición de síntomas en ratones transgénicos SOD1 sin afectar a la
supervivencia. Esclerosis lateral amiotrófica y Otros Trastornos neurona del motor 6: 182-184.
[4] Bilsland et al. 2006. El aumento de los niveles de cannabinoides por el retraso manipulación farmacológica y
genética progresión de la enfermedad en ratones SOD1. The FASEB Journal 20: 1003-1005.
[5]Ibid.
[6] Raman et al. 2004. op.cit.
[7] Hampson et al. 1998. El cannabidiol y el delta-9 tetrahidrocannabinol-son antioxidantes neuroprotectores. Actas
de la Academia Nacional de Ciencias 95: 8268-8273.
[8] Carter y Weydt. 2002. Cannabis: Antigua medicina con nuevas promesas para los trastornos neurológicos. Actual
Dictamen de Drogas en Investigación 3: 437-440.
[9] Abood et al. 2001. La activación del receptor cannabinoide CB1 protege a las neuronas de ratón en cultivo espinal
contra la excitotoxicidad. Neuroscience Letters 309: 197-201.
[10] Carter y Rosen. 2001. La marihuana en el manejo de la esclerosis lateral amiotrófica. La American Diario de
Hospicio y Cuidados Paliativos 18: 264-70.
[11] Carter et al. 2003. Tratamiento farmacológico para la esclerosis lateral amiotrófica: ¿Dónde estamos ahora? La
Investigación Medicamentos Diario 6: 147-153.
18
DOLOR CRÓNICO
Uno de cada cinco estadounidenses vive con dolor crónico.[1] Muchas de estas personas
sufren del dolor neuropático (dolor del nervio-relacionado)-una condición que se asocia
con numerosas enfermedades, como diabetes, cáncer, esclerosis múltiple y el VIH o
SIDA. En la mayoría de los casos, el uso de medicamentos analgésicos estándares como
los opiáceos y los AINE (antiinflamatorios no esteroides) no es efectiva para aliviar el
dolor neuropático.
Según los datos de una encuesta realizada, el consumo de cannabis es común entre las
personas con dolor crónico [2], y varios ensayos clínicos recientes indican que la
marihuana inhalada puede aliviar significativamente el dolor neuropático. Un par de
ensayos clínicos han demostrado recientemente que fumar cannabis reduce el dolor
neuropático en pacientes con VIH en más del 30 por ciento en comparación con el
placebo. [3-4] (Detalles adicionales sobre estos estudios aparecen en la sección de VIH
de este documento.)
En 2008 investigadores de la Universidad de California en Davis evaluaron el efecto
positivo de la inhalación de cannabis enguanto a la intensidad del dolor entre los 38
pacientes con dolor neuropático central o periférico en un estudio aleatorio, controlado
con placebo. Se informó: "el
Cannabis redujo el dolor tanto en intensidad y en
desagrado por igual. Por lo tanto, al igual que con los opiáceos, el cannabis no se basa
en una relajante o tranquilizante, sino que reduce tanto el componente central de la
nocicepción (Dolor en los nervios) y el aspecto emocional de la experiencia del dolor en
el mismo grado. [5]
Los datos preclínicos indican que los cannabinoides, cuando son administrados
conjuntamente con otra, son más eficaces para aminorar el dolor neuropático que el uso
de un solo agente. Los investigadores de la Universidad de Milán, informaron en 2008
que la administración de un solo cannabinoides como el THC o CBD producía un alivio
limitado en comparación al producido con la administración de extractos de plantas que
contenían múltiples cannabinoides, terpenos (aceites), y flavonoides (pigmentos).
19
Los investigadores concluyeron: “el uso de un extracto estandarizado de cannabis sativa
... provocó una exención total de la hiperalgesia térmica, en un modelo experimental de
dolor neuropático, ... el efecto aminorativo de los cannabinoides es único”, los
investigadores concluyeron. ... “en conjunto, estos resultados apoyan fuertemente la
idea de que la combinación de los cannabinoides y compuestos noncannabinoides,
presentes en los extractos [derivados de las plantas], proporcionan importantes ventajas
en el alivio del dolor neuropático en comparación con los cannabinoides puros. ... Otros
estudios de los medicamentos a base de cannabis en el dolor neuropático son necesarios
para demostrar una mejoría clínicamente relevante en el tratamiento de esta enfermedad.
[6]
REFERENCES
[1]New York Times. October 21, 1994. “Study says 1 in 5 Americans suffers from chronic pain.”
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neuropático. Fitoterapia Investigación 22: 1017-1024
20
DIABETES MELLITUS (DB)
La diabetes mellitus es un grupo de enfermedades autoinmune que se caracteriza por
defectos en la secreción de insulina, lo que da como resultado la híper glucemia (una
concentración anormalmente elevada de glucosa en la sangre). Hay dos tipos principales
de diabetes. Las personas diagnosticadas con diabetes tipo 1 (También conocida como
diabetes juvenil) son incapaces de producir la insulina del páncreas y dependen de la
insulina para sobrevivir. Las personas diagnosticadas con diabetes tipo 2 (también
conocida como diabetes del adulto) producen cantidades insuficientes de insulina. La
diabetes tipo 2 es menos grave, ya que normalmente suele ser controlada por la dieta.
Con el tiempo, la diabetes puede conducir a ceguera, insuficiencia renal, daño nervioso,
endurecimiento de las arterias, y la muerte. La enfermedad es la tercera causa de muerte
en los Estados Unidos después de las enfermedades cardíacas y el cáncer.
Una búsqueda en la literatura científica revela que no hay investigaciones clínicas del
cannabis como tratamiento para la diabetes, pero si que se identifican un pequeño
número de estudios preclínicos que indican que los cannabinoides pueden modificar la
progresión de la enfermedad y proporcionar alivio sintomático a los que sufren de ella.
[1-2] Recientemente, un estudio publicado en la revista Autoimmunity-Autoinmunidad
informó que un tratamiento con inyecciones de 5 mg por día de CDB (cannabinoide no
psicoactivo) redujo significativamente la incidencia de la diabetes en ratones. Los
investigadores informaron que el 86% de los ratones no tratados en el estudio
desarrollaron diabetes. Por el contrario, sólo el 30% de los que sí fueron tratados con
CBD desarrollaron la enfermedad. [3] En un experimento separado, los investigadores
informaron que todos los ratones de control desarrollaron diabetes a una media de 17
semanas (rango 15-20 semanas), mientras que una mayoría (60 por ciento) de los
ratones tratados con CBD seguían sin diabetes a las 26 semanas [4].
Los investigadores también encontraron que el CDB redujo significativamente los
niveles plasmáticos de las citoquinas proinflamatorias (proteínas) INF-gamma y TNFalfa y reduce significativamente la severidad de la insulitis (una infiltración de células
blancas de la sangre que sucede como consecuencia de la inflamación) en comparación
a los controles no tratados. "Nuestros resultados indican que el CDB puede inhibir y
21
retrasar la aparición de una insulinitas destructiva y la producción de citoquinas
inflamatorias ... lo que produjo en los ratones una disminución de la incidencia de la
diabetes ", concluyeron los autores.
Otros estudios preclínicos han demostrado que los cannabinoides poseen beneficios
añadidos en modelos animales con diabetes. Publicado en marzo de 2006 la revista
American Journal of Pathology-American Journal de Patología, investigadores de la
Facultad de Medicina de Virginia informaron que las ratas tratadas con CDB por
períodos de uno a cuatro semanas experimentaron una protección significativa de la
retinopatía diabética. [5] Esta condición, que se caracteriza por la privación de oxígeno
y una ruptura de la barrera hemato-retiniana, es la principal causa de ceguera en adultos
activos (que forman parte de la población activa, es decir, que están en edad de
trabajar).
También se ha demostrado que los cannabinoides sirven para aliviar el dolor
neuropático asociado a la enfermedad. Un par de estudios publicados en la revista
Neuroscience Letters-Neuroscience Letters en 2004 informaron de que ratones a los que
les administró un agonista de los receptores de cannabis experimentaron una reducción
con la alodinia al tacto relacionada con la diabetes (dolor causado por estímulos no
perjudicial para la piel) en comparación con no tratados controles. [6-7] Los resultados
sugieren que los cannabinoides tienen potencialmente un gran efecto beneficioso efecto
del dolor neuropático diabético. " Por último, un ensayo de 2001 demostró que el delta9-THC podría moderar un modelo animal de la enfermedad mediante la reducción de
los niveles de glucosa artificialmente elevadas y la insulitis en los ratones en
comparación con aquellos no tratados. [8] Con la incidencia de la diabetes cada vez
mayor, tanto en el adulto como en la población de menores, parece más que justificada
la investigación con cannabinoides para lograr un mejor tratamiento para esta
enfermedad.
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por la diabetes autoinmune. Internacional Inmunofarmacología (Italia) 4: 699-712.
23
DISTONÍA
La distonía es un trastorno neurológico del movimiento caracterizado por la tensión
muscular anormal y las contracciones involuntarias musculares, que a su vez, son
dolorosas. Es el tercer trastorno más común trastorno después de la enfermedad de
Parkinson y el temblor, que afecta a más de 300.000 personas en los Estados Unidos.
En la literatura científica reciente se hace referencia a un pequeño número de casos
clínicos y estudios preclínicos que han investigado el uso de cannabis y cannabinoides
para los síntomas de la distonía. En 2002 el estudio de caso publicado en la edición de
julio del Journal of Pain and Sympton Managemnet-Journal de Gestión de Medicina
Clínica Management, registró la mejoría de los síntomas de la distonía después de fumar
cannabis en una paciente de 42 años con dolor crónico. Los investigadores informaron
que la puntuación subjetiva del sujeto acerca de si el dolor se redujo de 9 a cero (en una
escala analógica visual del cero a diez) por inhalación de cannabis, y que el paciente no
necesitó ningún medicamento analgésico adicional durante las próximas 48 horas. “No
ha sido descrita la actuación o intervención de otro tratamiento hasta la fecha que haya
dado lugar a una mejora general tan dramática en la condición de los pacientes”,
concluyeron los investigadores. [1]
Un segundo caso de estudio trata de una serie de informes en los que relata "una mejoría
clínica significativa" a raíz de la inhalación de cannabis en un solo paciente de 25 años
de edad con distonía generalizada debido a la enfermedad de Wilson, dicho estudio fue
documentado por un equipo de investigadores argentinos de la revista Trastornos del
Movimiento en el mes de agosto de 2004. [2]
También en 2004, un equipo de investigación alemán de la Escuela de Medicina de
Hannover informó del éxito de un tratamiento contra la distonía del músico en un
pianista profesional de 38 años de edad, después de administrar al paciente con 5mg de
THC en un estudio de dosis única y controlado con placebo [3]. Los investigadores
informaron acerca de la "clara mejora del control motor" en la mano afectada del sujeto,
y señalaron, "Dos horas después de la ingesta de THC, el paciente fue capaz de tocar
piezas complejas de música, cosa que no había sido posible antes del tratamiento,
24
aspecto que lo había apartado de actuar en público. "Antes del tratamiento con
cannabinoides, el paciente no respondía a los medicamentos estándares y ya no
realizaba actuaciones públicas”.. “Los resultados demuestran que el consumo de THC ...
... mejora significativamente los síntomas de distonía focal ... ", concluyeron los
investigadores.
Por el contrario, en 2002 un estudio aleatorio, controlado con placebo, que investigaba
el uso un cannabinoides sintéticos orales (Cessamet) en 15 pacientes afectados por una
distonía generalizadada o una distonía primaria segmentaria no mostraron una reducción
significativa en los síntomas distónicos. [4] Los investigadores especulan que este
resultado pudo haber sido relacionado a la dosis, y que la administración de una dosis
más alta pudo haber dado un resultado diferente.
Al menos un ensayo preclínico reciente indica que los dos cannabinoides sintéticos,
podría moderar el progresión de la enfermedad de la distonía en animales [5]. Existem
escasas referencias sobre el uso de cannabinoides para la distonía en los seres humanos
[6] y los animales [7] en los años 1980 y 1990 también aparecen en la literatura
científica. Al parecer, ensayos clínicos adicionales han de realizarse para investigar la
utilización del cannabis y los cannabinoides en esta indicación.
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hamsters distónicos. European Journal of Pharmacology 264: 371-377.
26
LA FIBROMIALGIA
La fibromialgia es un síndrome de dolor crónico de etiología desconocida. La
enfermedad se caracteriza por dolor musculoesquelético generalizado, fatiga y múltiples
puntos sensibles en el cuello, la columna vertebral, hombros y las caderas. Se estima
que entre 3 y 6 millones de estadounidenses están afectados por la fibromialgia, que a
menudo es mal controlada con medicamentos estándar para el dolor.
Los pacientes con fibromialgia con frecuencia reconocen en auto-reporte y el uso de
cannabis terapéutico para el tratamiento de los síntomas de la enfermedad, [1-2] y los
médicos - donde sea legal hacerlo - a menudo recomiendan el uso de cannabis para el
tratamiento de los trastornos musculoesqueléticos. [3-4] Hasta la fecha, sin embargo,
sólo existen pruebas clínicas disponibles en la literatura científica acerca de la
evaluación del uso de los cannabinoides para el tratamiento de la enfermedad.
En el número de julio de 2006 de la revista Current Medical Research and Opinion,
investigadores de la Universidad de Heidelberg Alemania evaluaron los efectos
analgésicos por vía oral del THC en nueve pacientes con fibromialgia durante un
período de 3 meses. A los sujetos en el ensayo se les suministraban dosis diarias de 2,5
a 15 mg de THC, pero no recibieron ningún otro medicamento para el dolor durante el
ensayo. Entre los participantes que completaron el ensayo, todos describieron una
reducción significativa del dolor diario registrado y el dolor inducido por medios
electrónicos [5].
Anteriores ensayos clínicos y preclínicos han demostrado que tantolos cannabinoides
naturales como los cannabinoides endógenos tienen cualidades analgésicas, [6-9] en
particular en el tratamiento del dolor del cáncer [10] y el dolor neuropático, [11-13] los
cuales son mal tratados con opiáceos convencionales. Como resultado de ello, algunos
expertos han sugerido que los cannabinoides serían aplicable para el tratamiento de
enfermedades con dolor crónico que no responden a los opiáceos analgésicos, como la
fibromialgia, además de la teoría de que la enfermedad puede estar asociada con una
deficiencia clínica subyacente del sistema endocannabinoide [14].
27
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[14] Ethan Russo. 2004. Deficiencia clínica endocannabinoide (CECD): ¿Puede explicar este concepto terapéutico
beneficios de la cannabis en la migraña, la fibromialgia, el síndrome del intestino irritable, y otras resistentes al
tratamiento condiciones? Neuroendocrinología Cartas 25: 31-39.
29
TRASTORNO GASTROINTESTINALES
Los trastornos gastrointestinales, incluidas las enfermedades funcionales del intestino,
tales como el síndrome del colon irritable y las enfermedades inflamatorias intestinales
como la enfermedad de Crohn y la colitis, afectan a más de uno de cada cinco
estadounidenses, especialmente a las mujeres. Mientras que algunos trastornos
gastrointestinales pueden ser controlados con dieta y medicamentos farmacéuticos, otros
están mal moderados por los tratamientos convencionales. Los síntomas de trastornos
gastrointestinales con frecuencia incluyen calambres abdominales, el dolor, la
inflamación del revestimiento del intestino grueso y/o mediano, la diarrea crónica,
sangrado rectal y la pérdida de peso.
Aunque existen en la literatura científica varios informes anecdóticos [1-2] y un puñado
de informes de casos [3-4] que apoya el uso de los cannabinoides para tratar los
síntomas de los trastornos gastrointestinales, prácticamente no hay trabajo de ensayos
clínicos que se haya realizado en esta área, a parte de un estudio clínico de 2007 en el
cual se evaluaba el impacto del THC oral sobre la motilidad del colon [5].
Sin embargo, numerosos estudios preclínicos demuestran que la activación de los
receptores CB1 y CB2 receptores cannabinoides ejercen funciones biológicas en el
tracto gastrointestinal. [6] Efectos de la su activación en los animales incluyen la
supresión de la motilidad gastrointestinal [7], la inhibición de la secreción intestinal [8],
el reflujo ácido reducido, [9] y la protección de la inflamación [10], así como el fomento
de la cicatrización de las heridas epiteliales en el tejido humano. [11] Como resultado,
muchos expertos creen que los cannabinoides y/o modulación del sistema endogeno
representan una nueva diana terapéutica para el tratamiento de numerosos trastornos
gastrointestinales-incluyendo las enfermedades inflamatorias intestinales, enfermedades
funcionales del intestino, gastroesophagael condiciones de reflujo, diarrea secretora, las
úlceras gástricas y cáncer de colon. [12-13]
30
GLIOMAS
Los gliomas (tumores en el cerebro) son formas malignas de cáncer especialmente
agresivas, que a menudo resultan en la muerte de los pacientes afectados en uno o dos
años después del diagnóstico. No existe una cura para los gliomas y los tratamientos
disponibles sólo proporcionan alivios menores de los síntomas.
Una revisión de la literatura científica moderna pone de manifiesto numerosos estudios
preclínicos y estudios clínicos que demuestran la capacidad de los cannabinoides para
actuar como agentes antineoplásicos, sobre todo en líneas celulares de glioma.
En septiembre de 1998, los investigadores de la Facultad de Biología de la Universidad
Complutense de Madrid, informaron que el cannabinoide delta-9-THC provocó la
apoptosis (muerte celular programada) en células de glioma en cultivo [1]. Los
investigadores siguieron con sus investigaciones y en el año 2000, informaron que el
THC y el cannabinoide sintético agonista WIN 55,212-2 "indujo una regresión
considerable de gliomas malignos "en los animales. [2] Los investigadores confirmaron
una vez más la capacidad de los cannabinoides para inhibir el crecimiento tumoral en
los animales en el año 2003 [3].
Ese mismo año, investigadores italianos del Departamento de Farmacología,
Toxicología y Quimioterapia de la Universidad de Milán, informaron que el
cannabinoide no psicoactivo o cannabidiol (CBD), inhibió el crecimiento de varias
líneas celulares de glioma humano en vivo e in vitro en una forma dependiente de dosis.
Y en noviembre de 2003 y en un artículo de la Revista de Farmacología y Terapía
Experimental Fast Forward, los investigadores concluyeron, "Las no psicoactivas
producen CDB ... [s] una significativa actividad anti-tumoral, tanto in vitro como in
vivo, lo que sugiere una posible aplicación de la CDB como agente antineoplásico. "[4]
En 2004, Guzmán y sus colegas informaron que los cannabinoides inhiben el
crecimiento tumoral del glioma en animales y en muestras de tumores de glioblastoma
humano multiforme (GBM) mediante la alteración morfología del buque de la sangre
(por ejemplo, vías VEGF ). Escrito en agosto de 2004 en Cancer Research-
31
Investigacion sobre cáncer, los investigadores concluyeron: "El laboratorio de la
actualidad y los hallazgos clínicos proporcionan un nuevo objetivo farmacológico para
terapias basadas en cannabinoides ". [5]
Más recientemente, los investigadores en el California Pacific Medical Center Research
Institute informaron que la administración de THC en las líneas celulares de
glioblastoma disminuía la proliferación de células malignas y la muerte celular inducida
más rápidamente que la administración de WIN 55,212-2. Los investigadores también
señalaron que el THC selectivamente tenía como objetivo a las células malignas y
descartaba las sanas de una manera más eficaz que la alternativa sintética [6].
Recientemente, Guzmán y sus colegas informaron que la administración de THC
disminuye el crecimiento multiforme recurrente glioblastoma del tumor en pacientes
con diagnóstico GBM. En la primera prueba piloto los clínicos que evalúan el uso de los
cannabinoides y GBM, los investigadores encontraron que la administración
intratumoral de THC se asoció con la reducción de la proliferación de células tumorales
en dos de los nueve pacientes. El perfil de seguridad razonable del THC, junto con su
posible acción anti-proliferativa de las células tumorales que aquí y en otros estudios se
menciona, puede sentar las bases para futuros ensayos dirigidos a evaluar el potencial
antitumoral
de
los
cannabinoides,
concluyeronlos
investigadores.[7]
Varios
investigadores han llamado a que se lleve a cabo una mayor exploración del cannabis
para desarrollar terapias para el tratamiento del glioma. [8-10]
Además de la capacidad de los cannabinoides para moderar las células del glioma,
estudios independientes demuestran que los cannabinoides y endocannabinoides
también puede inhibir la proliferación de otras líneas celulares de cáncer, incluyendo el
carcinoma de mama, [11-14] el carcinoma de próstata, [15-17] colorrectal carcinoma,
[18] adenocarcinoma gástrico [19], carcinoma de piel [20], las células de leucemia, [2122] nueroblastoma [23], carcinoma de pulmón, [24-25] carcinoma de útero, [26] tiroides
epitelioma, [27] adenocarcinoma pancreático, [28-29], carcinoma cervical [30] y el
linfoma. [31-32]
32
Los estudios también indican que la administración de cannabinoides, junto con terapias
convencionales contra el cáncer, puede aumentar la eficacia estándar para el cáncer de
dichos tratamientos [33].
En consecuencia, muchos expertos creen ahora que los cannabinoides "pueden
representar una nueva clase de medicamentos contra el cáncer que retardan el
crecimiento del cáncer, inhibidores de la angiogénesis y la metástasis y de la
propagación de las células del cáncer ", [34-35] y han recomendado al menos un
cannabinoide, cannabidiol, que ahora se utiliza en el tratamiento del cáncer [36].
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[36] Di Marzo et al. 2006. op. cit.
36
LA HEPATITIS C
La hepatitis C es una enfermedad viral del hígado que afecta a unos cuatro millones de
estadounidenses aproxidamamente. La hepatitis C crónica se asocia típicamente con
fatiga, depresión, dolor en las articulaciones y el deterioro de hígado, además de la
cirrosis y el cáncer de hígado.
Los pacientes diagnosticados con hepatitis C frecuentemente reportan el uso de
cannabis para el tratamiento de los síntomas de la enfermedad, así como las náuseas
asociadas al tratamiento con antivirales. [1-2]
Un estudio de observación llevado a cavo por los investigadores de la Universidad de
California en San Francisco (UCSF) encontró que los pacientes con hepatitis C que
consumían cannabis fueron significativamente más propensos a cumplir su régimen de
tratamiento que los pacientes que no la usaron. [3] Sin embargo, no hay ensayos clínicos
sobre el uso de cannabinoides disponibles en la literatura científica.
Los datos preclínicos indican que el sistema endocannabinoide puede moderar los
aspectos de la enfermedad del hígado [4-5] y que los cannabinoides pueden reducir la
inflamación en modelos experimentales de hepatitis. [6] Sin embargo, otros exámenes
clínicos han reportado una asociación positiva entre el consumo de cannabis a diario y
la progresión de la fibrosis hepática (acumulación excesiva de tejido) y esteatosis
(acumulación excesiva de grasa) en determinados pacientes con hepatitis C. [7-9]
Como resultado de ello, los expertos tienen opiniones divergentes sobre el uso
terapéutico de los cannabinoides para tratamiento de la hepatitis C. Escrito en octubre
de 2006 en la Revista Europea de Gastroenterología, los investigadores de Canadá y
Alemania llegaron a la conclusión de que el cannabis aportaba beneficios potenciales y
una mayor probabilidad de éxito, que parecen ser mayores que sus riesgos [10]. Por el
contrario, otros expertos desaconsejan el uso de cannabis en pacientes con hepatitis
crónica hasta que se lleven a cabo más estudios. [11-14]
37
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39
VIRUS DE LA INMUNODEFICIENCIA HUMANA (VIH)
El virus de la inmunodeficiencia humana es un retrovirus que invade las células
inmunitarias del ser humano, haciéndolo muy susceptible a las enfermedades
infecciosas. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de 500.000
estadounidenses han muerto de VIH / SIDA y más de un millón los ciudadanos viven
con la enfermedad en los EEUU.
Una encuesta indica que el cannabis es utilizado por muchos pacientes con VIH/SIDA
en EEUU (uno de cada tres) para tratar los síntomas de la enfermedad, así como los
efectos secundarios de los medicamentos antirretrovirales, [1-4] con un informe reciente
que asegura que más del 60 por ciento de los pacientes con VIH / SIDA se identifican
como usuarios de cannabis medicinal. [5] Los pacientes que viven con VIH / SIDA más
frecuentemente informan del uso de cannabis para hacer frente a los síntomas de la
ansiedad, pérdida del apetito y náuseas, y el estudio ha informado de que los pacientes
que usan cannabis terapéutico son 3,3 veces más propensos a adherirse a sus regimenes
de la terapia antirretroviral que aquellos pacientes que no [6].
Los datos clínicos indican que el consumo de cannabis no tiene efectos adversos en las
celulas CD4 y CD8 [7], y que incluso puede mejorar la función inmune. [8-9]
En 2007, investigadores de la Universidad de Columbia publicaron datos de ensayos
clínicos con la presentación de informes en los que se describía los beneficios que
produce-ia el cannabis entre los pacientes con VIH/SIDA, ..“los pacientes que inhalaron
cannabis cuatro veces al día experimentaron una importante ... aumento de la ingesta de
alimentos ... con poca evidencia de incomodidad y sin deterioro cognitivo de
rendimiento” el consumo de marihuana ... tiene un claro beneficio médico en enfermos
de VIH [10]
Ese mismo año, investigadores del Hospital General de San Francisco y del Centro de
Investigación Clínica del Dolor de la Universidad de California, reportaron en la revista
Neurology-Neurología que la inhalación de cannabis reduce significativamente la
neuropatía asociada con el VIH, en comparación con el placebo. Los investigadores
informaron que la inhalación de cannabis tres veces al día redujo el dolor de los
pacientes en un 34 por ciento. Llegaron a la conclusión, de que el cannabis fumado fue
40
bien tolerado y un consistía en un alivio eficaz contra el dolor neuropático crónico por
neuropatía asociada con el VIH de manera similar a los medicamentos para el dolor
neuropático crónico [11].
En 2008, investigadores de la Universidad de California en San Diego informaron
acerca de resultados similares. Escribiendo en la revista Neuropsychopharmacology,
llegaron a la conclusión: "El cannabis fumado ...redujo significativamente la intensidad
del dolor neuropático asociado al VIH ... polineuropatía en comparación con placebo
cuando se añadió a los analgésicos ... el estado de ánimo, la perturbación, la
discapacidad física, y la calidad de vida mejoraron significativamente durante el
tratamiento del estudio. ... nuestros hallazgos sugieren que la terapia con cannabinoides
puede ser una opción efectiva para el alivio del dolor en pacientes con dolor intratable
médicamente a causa del VIH. "[12] Como resultado, muchos expertos creen que la
marihuana representa otra opción de tratamiento en la gestión de la salud de los
pacientes con VIH / SIDA [13].
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estado de ánimo, y el sueño. Diario de Adquisición de Síndromes de Inmunodeficiencia 45: 545-554.
[11] Abrams et al. 2007 op. cit.
[12] Ellis et al. 2008. op. cit.
[13] Fogarty et al. 2007. op. cit.
42
HIPERTENSIÓN
La presión arterial alta, o hipertensión, afecta a entre 1 de cada 4 adultos
estadounidenses. Esta condición causa una sobrecarga sobre el corazón y los vasos
sanguíneos y aumenta considerablemente el riesgo de ictus y las enfermedades del
corazón.
Los nuevos estudios indican que el sistema cannabinoide endógeno juega un papel
fundamental en la regulación de la presión sanguínea, aunque su mecanismo de acción
no es bien entendido [1]. Los estudios en animales demuestran que la anandamida y
otros endocannabinoides ayudan a suprimir la contractilidad cardíaca en la hipertensión
y puede normalizar la presión arterial, [2-3] aspecto que llevó a algunos expertos a
especular que la manipulación del sistema endocannabinoide puede ofrecer nuevos
enfoques terapéuticos en esta variedad de trastornos cardiovasculares." [4]
La administración de cannabinoides naturales ha producido resultados en los efectos
cardiovasculares tanto en seres humanos como en animales de laboratorio. [5-9] La
respuesta vascular en humanos a los que se les había administrado cannabis en
condiciones experimentales se caracteriza por un leve aumento en la velocidad del
corazón y de la presión arterial. Sin embargo, la tolerancia completa a estos efectos se
desarrolla rápidamente y los riesgos potenciales para la salud parecen mínimos. [10-11]
En animales, la administración de cannabinoides se asocia típicamente con la
vasodilatación, bradicardia e hipotensión transitoria, [12], así como una inhibición de la
progresión de la aterosclerosis (endurecimiento de las arterias) [13-15] La
administración de cannabinoides sintéticos también ha demostrado disminuir la presión
arterial en los animales y no se ha asociado con cardiotoxicidad en los seres humanos
[16].
En este momento, la investigación para evaluar el uso clínico de los cannabinoides para
la hipertensión se encuentra en su infancia, aunque la investigación parece justificada
[17].
43
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[15] Steffens and Mach. 2006. Cannabinoid receptors in atherosclerosis. Current Opinion in Lipidology 17: 519- 526
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[16] Steven Karch. 2006. op. cit.
[17]Francois Mach. 2006. New anti-inflammatory agents to reduce atherosclerosis. Archives of Physiology and
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[10] Ibid.
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[12] Reese Jones. 2002. op. cit.
[13] Steffens y Mach. 2006. Hacia un uso terapéutico de los ligandos selectivos de los receptores CB2 cannabinoides
para la aterosclerosis. Futuro Cardiología 2: 49-53.
[14] Steffens et al. 2005. La terapia de dosis bajas de cannabinoides por vía oral reduce la progresión de la
aterosclerosis en ratones. Naturaleza 434: 782-786.
[15] Steffens y Mach. 2006. Los receptores cannabinoides en la aterosclerosis. Current Opinion in Lipidology 17: 519
– 526 (E-bar delante de la impresión). [16] Steven Karch. 2006. op. cit.
[17] François Mach. 2006. Nueva agentes anti-inflamatorios para reducir la aterosclerosis. Archivos de Fisiología y
Bioquímica 112: 130-137.
45
INCONTINENCIA
La incontinencia urinaria se define como una pérdida de control de la vejiga. La
incontinencia puede ser resultado de diversos factores biológicos, incluyendo la
debilidad y/o inflamación de los músculos de la vejiga, así como de daño en los nervios
asociados con enfermedades como la esclerosis múltiple (EM) y La Enfermedad de
Parkinson. Se estima que más de uno de cada diez estadounidenses mayores de 65 años
sufren de incontinencia, en particular las mujeres.
Varios ensayos clínicos recientes indican que la terapia con cannabinoides pueden
reducir los incidentes de incontinencia. En febrero de 2003 la revista Clinical
Rehabilitación, investigadores del Centro de Oxford para la habilitación de Gran
Bretaña informaron que la dosis auto-administrada de cannabinoides a través de la
planta ofrecía un mayor control de la vejiga en comparación con el placebo en pacientes
que sufren de esclerosis múltiple y lesión de la médula espinal [1].
Los investigadores del Instituto de Neurología de Londres llevaron a cavo un estudio
para el seguimiento de estas conclusiones iniciales. En dicha prueba piloto participaron
15 pacientes con incontinencia causada por esclerosis múltiple avanzada. Después de la
terapia de cannabinoides, ...“la urgencia urinaria, el número y el volumen de los
episodios de incontinencia, polaquiuria y nicturia disminuyeron de manera
significativa”... determinaron los investigadores. "Basados en el cannabis extractos
medicinales son una caja fuerte y un tratamiento eficaz para los problemas urinarios y
otros en pacientes con esclerosis múltiple ". [2]
Estos resultados fueron confirmados en 2006 en un estudio multicéntrico, mediante un
ensayo aleatorizado con 630 pacientes y controlado con placebo que recibieron dosis
orales de extractos de cannabis o THC. Los investigadores informaron que los pacientes
a los que se les administraron extractos de cannabis experimentaron un 38 por ciento de
reducción de los episodios de incontinencia desde el inicio hasta el final del tratamiento,
mientras que los pacientes a los que se administró THC experimentaron una reducción
del 33 por ciento, lo que sugiere un efecto "clínico del cannabis en los episodios de
incontinencia"[3]
46
Más recientemente, los datos preclínicos presentados en la reunión anual de 2006 de La
American Orological Association indican que los análogos de cannabis puede reducir la
inflamación de la vejiga en los animales [4]. A la luz de estos hallazgos, los expertos
han recomendado el uso de los cannabinoides como posibles agentes de "Segunda
línea" para el tratamiento de la incontinencia [5].
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avanzada la esclerosis múltiple. La esclerosis múltiple 10: 425-433.
[3] Freeman et al. 2006. El efecto del cannabis sobre la incontinencia de urgencia en pacientes con esclerosis
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derivados de la droga suprime vejiga el dolor en modelos animales. "
[5] Kalsi y Fowler. 2005. Terapia de insight: disfunción de la vejiga asociados con la esclerosis múltiple. Naturaleza
Neurología Práctica Clínica 2: 492-501.
47
STAPHYLOCOCCUS AUREUS RESISTENTE A METICILINA (MRSA)
Muchas infecciones bacterianas poseen resistencia a múltiples fármacos. Posiblemente
la más importante de estas bacterias es la Staphylococcus aureus, más comúnmente
conocida como MRSA o "la superbacteria ' que es resistente a la meticilina. Esta
bacteria es resistente a los antibióticos tradicionales, como la penicilina. Según la revista
Journal of the American Medical Association, el MRSA es responsable de casi 20.000
muertes en estancia hospitalarias al año en los Estados Unidos [1].
Los datos publicados muestran que los cannabinoides poseen fuertes propiedades
antibacterianas. En 2008, investigadores de la Facultad de Farmacia de la Università del
Piemonte Italias Oriental y de la Universidad de Britains Londres, trataron de evaluar
las propiedades al combatir los gérmenes de cinco cannabinoides independientes contra
varias cepas de bacterias multirresistentes, incluyendo MRSA. Informaron que todos los
compuestos probados mostraron "una potente actividad antibacteriana", y que los
resultados de los cannabinoides fueron "excepcionales" a la hora de detener la
propagación del MRSA [2].
Un segundo estudio publicado ese mismo año, informó que los cannabinoides no
constituyentes en el planta también posee propiedades antibacterianas contra el SARM
y la malaria [3].
Los ensayos clínicos sobre el uso de los cannabinoides para el MRSA se han
recomendado, con algunos expertos diciendo: "la cannabis sativa ... representa una
interesante fuente de agentes antibacterianos para abordar el problema de la
multirresistencia en SARM y otros patógenos las bacterias. "[4]
REFERENCES
[1] Klevens et al. 2007. Invasive methicillin-resistant Staphylococcus aureus infections in the United States. Journal
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48
[3] Radwan et al. 2008. Non-cannabinoid constituents from a high potency cannabis sativa variety. Phytochemistry
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[4]Appendino et al. 2008. op. cit.
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69: 26727-2633.
[4] Appendino et al. 2008. op. cit.
49
ESCLEROSIS MÚLTIPLE (EM)
La esclerosis múltiple (EM) es una enfermedad crónica degenerativa del sistema
nervioso central que causa la inflamación y debilidad muscular y pérdida de
coordinación motora. Con el tiempo, la EM suele convertirse en una discapacidad
permanente, y en algunos casos la enfermedad puede ser fatal. De acuerdo con la
EE.UU. National Multiple Sclerosis Society, alrededor de 200 casos son diagnosticados
cada semana - a menudo- afectando sorprendente a pacientes de entre 20 y 40 años de
edad.
Los informes clínicos y anecdóticos describen la capacidad de los cannabinoides para
reducir los síntomas relacionados a la EM como el dolor, la espasticidad, la depresión,
la fatiga y la incontinencia son abundantes en la literatura científica [1-12] – además
organizaciones de pacientes, incluyendo la Sociedad de Esclerosis Múltiple de Gran
Bretaña y Canadá, han adoptado posiciones a favor de la prescripción del cannabis. [13]
Los pacientes con esclerosis múltiple suelen reconocer la participación del cannabis en
sus terapias [14], aspecto que así ratifica una encuesta que indica que casi uno de cada
dos pacientes con esclerosis múltiple usa la droga de forma terapéutica [15].
Estudios clínicos y preclínicos recientes sugieren que los cannabinoides pueden inhibir
la progresión de la EM. En el número de julio de 2003 de la revista Brain, los
investigadores del Instituto de Neurología de la University College de Londres
informaron que la administración de la WIN 55,212-2 cannabinoide sintético agonista
dotaba siempre de una neuroprotección significativa en modelos animales de esclerosis
múltiple. Los resultados de este estudio son importantes porque sugieren que, además
del manejo de los síntomas, ... el cannabis también puede retrasar los procesos
neurodegenerativos que en última instancia pueden conducir a una discapacidad crónica
como consecuencia de la esclerosis múltiple y otras enfermedades, concluyeron los
investigadores [16]
Los investigadores del Departamento de Neurología de la Vrije University Medical
Center en los Países Bajos, también informaron por primera vez en 2003 que la
50
administración de THC por vía oral puede estimular la función inmunológica en
pacientes con EM. Estos resultados sugieren que los cannabinoides pueden actuar como
modificadores pro-inflamatorios para la EM, comcluyeron [17].
Los datos clínicos reportados en 2006 acerca de un extenso estudio de etiqueta abierta
de 167 pacientes de esclerosis múltiple detallaba que el uso de cannabinoides de toda la
planta extrae/alivia los síntomas de dolor, la espasticidad, la vejiga y la incontinencia
por un período prolongado de tratamiento (la duración media de participantes en el
estudio fue de 434 días) sin necesidad de los sujetos para aumentar su dosis [18]. Los
resultados de un ensayo independiente de dos años de extensión que se inició en 2007,
también informó que la administración de extractos de cannabis se asoció con
reducciones a largo plazo en el dolor neuropático en determinados pacientes con EM.
En promedio, los pacientes en el estudio requierieron menos dosis diarias de la droga e
informaron que sentían menos dolor a medida que más tiempo seguían con el
tratamiento. [19] Estos resultados serían poco probables en pacientes que sufren de una
enfermedad progresiva como la esclerosis múltiple a menos que el tratamiento con
cannabinoides sea para detener su progresión, suguieren los investigadores.
Como resultado, el gobierno británico está patrocinando un estudio clínico de tres años
para evaluar los efectos a largo plazo de los cannabinoides en el manejo de síntomas,
tanto aquellos sintomas relacionados con le EM, así como la progresión de la
enfermedad. La asociación Health Canada también ha aprobado recientemente el uso de
la prescripción de cannabis para el tratamiento de la esclerosis múltiple asociada con el
dolor neuropático [20]. La aprobación de similares extractos de cannabis está pendiente
en Gran Bretaña y Europa.
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esclerosis múltiple: un estudio no controlado, abierto, de dos años de ensayo de extensión. Clínica Terapéutica 29:
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[20] News Wire Canadá. 20 de junio 2005. Sativex: cannabis novedoso derivado del tratamiento para el dolor de MS
ahora disponible en Canadá por la prescripción.
53
OSTEOPOROSIS
La osteoporosis es una enfermedad degenerativa del esqueleto caracterizada por un
deterioro de los tejídos de los huesos. Los pacientes con osteoporosis están en riesgo de
sufrir fracturas múltiples y otras discapacidades graves. Aproximadamente 10 millones
de estadounidenses mayores de 50 años sufren de osteoporosis, según la oficina de
Cirugía General de los EE.UU, y otros 34 millones están en riesgo de desarrollar la
enfermedad.
Las referencias iniciales en la literatura científica acerca del uso potencial de los
cannabinoides para proteger contra la aparición de la osteoporosis se encuentran a partir
de la década de 1990. [1] Hasta la fecha, sin embargo, no hay trabajo clínico en el que
haya realizado ninguna investigación del uso del cannabis para esta indicación.
Escrito en la edición de enero 2006 de las Actas de la Academia Nacional de Ciencias,
investigadores del Laboratorio de Hueso de la Universidad Hebrea de Jerusalén
informaron de que la administración del agonista cannabinoide sintético HU-308 frenó
el desarrollo de osteoporosis, estimulando la construcción de los huesos, y reduciendo la
pérdida ósea en animales [2]. Prosiguiendo con la investigación, fue publicado en los
Anales de la Academia de Ciencias de Nueva York en 2007, un informe que describía
como la activación de los receptores cannabinoides CB2 redujo experimentalmente la
pérdida de hueso y la formación de hueso estimulado. [3] Los investigadores han
demostrado previamente que los ratones deficientes en el receptor de cannabinoides
CB2 experimentan una edad ósea acelerada que recuerda a la pérdida humana
osteoporosis [4].
Aunque el papel del sistema endocannabinoide en la regulación de la masa ósea aún no
está bien determinado, [5] Los expertos tienen la esperanza de que los cannabinoides y
los receptores cannabinoides puedan ser un objetivo prometedor para el desarrollo de
fármacos anti-osteoporosis [6].
54
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[1] Vratislav Schrieber. 1995. Endocrinology 1994-1995. Casopis Lekaru Ceskych (Czech Republic) 134: 535-536.
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[6] Bab Itai. 2007. op. cit.
55
PRURITO
Picazón (prurito) es un síntoma común asociado con numerosas enfermedades de la
piel, así como un síntoma secundario de numerosas enfermedades graves, como
insuficiencia renal y hepática. EL Picazón, a diferencia de otras sensaciones en la piel,
es generalmente el resultado de las actividades del SNC, y por lo general no se trata con
terapias médicas estándar.
Una revisión de la literatura científica revela tres ensayos clínicos que investigan el uso
de los cannabinoides en el tratamiento del prurito. En agosto de 2002 la American
Diariy of Gastroentrology, informó que los investigadores del Departamento de
Medicina de la Universidad de Miami tuvieron éxito en el tratamiento del prurito con 5
mg de THC en tres pacientes con enfermedad hepática colestásica. [1] Antes de la
terapia de cannabinoides, los sujetos no habían respondido a medicamentos estándar y
había perdido su capacidad de trabajo. Tras la administración de cannabinoides, los tres
pacientes reportaron una disminución en el prurito, así como una "marcada mejora "en
el sueño, siendo finalmente capaces de volver a trabajar. La disminución de la depresión
también se observó en dos de cada tres sujetos. "el Delta-9-tetrahidrocannabinol puede
ser una alternativa eficaz en pacientes con prurito colestásico intratable " concluyeron
los investigadores.
Al año siguiente, investigadores británicos informaron en la que la administración
periférica del cannabinoide sintético agonista HU-211 redujo significativamente el
picazón inducido experimentalmente en 12 pacientes [2]. Los investigadores habían
informado anteriormente que la aplicación tópica de la HU-210 en la piel humana
producía una reducción del dolor inducido experimentalmente y una aguda sensación de
quemazón. [3]
Más recientemente, los investigadores del Departamento de Dermatología de la
Universidad de Medicina de Wroclaw, Polonia, informaron que la aplicación de una
56
crema tópica endocannabinoide basada en reducción de prurito urémico y la xerosis
(sequedad anormal de la piel) en pacientes en hemodiálisis [4]. Tras tres semanas en las
que se les aplicaba la crema dos veces al día, daba como resultado la eliminación por
completo del prurito en el 38 por ciento de los sujetos del ensayo y la "reducción
significativa" del picazón en los demás. Ochenta y uno por ciento de los pacientes
reportaron una "reducción total" en la xerosis después de la terapia de cannabinoides.
A la luz de estos resultados preliminares alentadores, algunos expertos dermatólogos
creen ahora que los cannabinoides y el sistema cannabinoide pueden representar nuevas
vías para la gestión de tratar estas dolencias con más eficacia. "[5]
REFERENCES
[1] Neff et al. 2002. Preliminary observation with dronabinol in patients with intractable pruritus secondary to
cholestatic liver disease. American Journal of Gastroenterology 97: 2117-2119.
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[4] Szepietowski et al. 2005. Efficacy and tolerance of the cream containing structured physiological lipid
endocannabinoids in the treatment of uremic pruritus: a preliminary study. Acta Dermatovenerologic Croatica
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[2] Dvorak et al. 2003. Histamina inducida por las respuestas son atenuadas por un agonista de los receptores
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[3] Dvorak et al. 2003. Agonistas cannabinoides atenuar la capsaicina inducida por las respuestas en la piel humana.
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[4] Szepietowski et al. 2005. Eficacia y tolerancia de la crema que contiene lípidos fisiológicos estructurado
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Diario de Investigación clínica 116: 1174-1185.
57
LA ARTRITIS REUMATOIDE
La artritis reumatoide (AR) es una enfermedad inflamatoria de las articulaciones
caracterizada por el dolor, la rigidez e hinchazón, así como una eventual pérdida de la
función de los miembros. Se estima que la artritis reumatoide afecta a un uno por ciento
de la población, principalmente a las mujeres.
El uso del cannabis para tratar los síntomas de la AR es comúnmente reportada por los
pacientes con la enfermedad. En una encuesta anónima de 2005 pacientes de cannabis
medicinal llevada a cabo en Australia, el 25 por ciento reportaron haber usado los
cannabinoides para el tratamiento de la AR. [1] Según un estudio llevado a cabo entre
los pacientes de cannabis medicinal Británicos, se encontró que más del 20 por ciento
de los encuestados reportaron haber usado cannabis para hacer frente a los síntomas de
la artritis. [2] Sin embargo, existen pocos ensayos clínicos que investiguen el uso de
cannabis para la AR en la literatura científica.
En enero de 2006, los investigadores en el Real Hospital Nacional Británico para
Enfermedades Reumáticas el tratamiento de la artritis con cannabinoides en un ensayo
controlado por primera vez para evaluar la eficacia de los extractos de cannabis natural
en RA resultó tener unos resultados escelentes [3]. Los investigadores indicaron que la
administración de extractos de cannabis durante un período de cinco semanas, supuso
mejoras estadísticamente significativas en el dolor con el movimiento, dolor en reposo,
la calidad del sueño, la inflamación y la intensidad del dolor en comparación con el
placebo. Además, no se observaron efectos adversos graves se observaron. Resultados
similares han sido reportados en ensayos más pequeños, la Fase II que investigan el uso
de la vía oral como medio para administrar extractos de cannabis en los síntomas de la
artritis reumatoide [4].
Los datos preclínicos también indican que los cannabinoides pueden moderar la
progresión de la AR. Escrito en agosto de 2000 en la Revista de las Actas de la
Academia Nacional de Ciencias, los investigadores del Kennedy Institute de
Reumatología de Londres informaron que la administración del cannabidiol (CBD)
suprime la progresión de la artritis in vitro además de en animales. [5] La
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administración de CDB después de la aparición de los síntomas clínicos, sirve para
proteger las articulaciones contra los daños severos y “bloquea la progresión de la
artritis", cnoncluyeron los investigadores. La administración diaria del cannabinoide
sintéticos agonista HU-320 también ha sido comprobada como protector de las
articulaciones y para aliviar la artritis en los animales [6].
Resumiendo la literatura disponible en Septiembre de 2005 en la revista Journal of
Neuroinmunología, los investigadores del Instituto Nacional de Neurociencias de Tokio,
concluyeron, "La terapia de la artritis reumatoide mediante cannabinoides podría
proporcionar un alivio sintomático del dolor en las articulaciones y la inflamación así
como la supresión de la destrucción articular y la progresión de la enfermedad. "[7]
REFERENCES
[1] Swift et al. 2005. Survey of Australians using cannabis for medical purposes. Harm Reduction Journal 4: 2-18.
[2] Ware et al. 2005. The medicinal use of cannabis in the UK: results of a nationwide survey. Internationa Journal of
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[6] Sumariwalla et al. 2004. Una novela de síntesis de ácidos, nonpsychoactive cannabinoides (HU-320) con
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[7] Croxford y Yamamura. 2005. Los cannabinoides y el sistema inmunológico: El potencial para el tratamiento de
enfermedades inflamatorias. Diario de Neuroinmunología 166: 3-18.
59
APNEA DEL SUEÑO
La apnea del sueño es un desorden médico caracterizado por frecuentes interrupciones
en la respiración de hasta diez segundos o más durante el sueño. La condición está
asociada con numerosos desórdenes fisiológicos, tales como fatiga, dolores de cabeza,
presión arterial alta, latido irregular del corazón, ataque cardíaco y accidente
cerebrovascular. A pesar de que la apnea del sueño a menudo no se diagnostica, se
estima que aproximadamente el cuatro por ciento de los hombres y dos por ciento de las
mujeres de 30 a 60 años, sufren la enfermedad.
Un estudio preclínico científico investiga el papel de los cannabinoides sobre la apnea
del sueño. En Junio de 2002 la revista de la American Academy of Sleep Medicine, los
investigadores del Departamento de Medicina de la Universidad de Illinois (en Chicago)
describieron la "potente supresión" de la apnea del sueño en las ratas a las que
previamente se les administraron cannabinoides exógenos o endógenos. [1] Los
investigadores han indicado que con dosis de delta-9-THC y el endocannabinoide
oleamida cada respiración se estabilizó en el sueño y la obstrucción de la serotonina
inducida por la exacerbación de la apnea del sueño en una manera estadísticamente
significativa. No hay seguimiento de las investigaciones se han llevado a cabo para la
evaluación del uso de los cannabinoides como tratamiento. Sin embargo, varios estudios
preclínicos y clínicos recientes han informado sobre el uso de THC, extractos naturales
del cannabis, los endocannabinoides y de inducir el sueño [2,3] y/o mejorar la calidad
del sueño [4].
REFERENCES
[1] Carley et al. 2002. Functional role for cannabinoids in respiratory stability during sleep. Sleep 25: 399-400.
[2] Murillo-Rodriguez et al. 2003. Anandamide enhances extracellular levels of adenosine and induces sleep: an in
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60
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[4] Perras Christine. 2005. Sativex para el tratamiento de los síntomas de la esclerosis múltiple. Temas en los países
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61
SINDROME DE TOURETTE
El síndrome de Tourette (ST) es un trastorno neuropsiquiátrico complejo de etiología
desconocida que se caracteriza por tics vocales involuntarios. La gravedad de esta
enfermedad varía ampliamente entre los pacientes. Aunque no hay cura para el
síndrome de Tourette, el trastorno suele mejorar con la edad. Los expertos estiman que
100.000 estadounidenses viven afectados por el ST.
Una revisión de la literatura científica pone de manifiesto varios ensayos clínicos que
investigan el uso de los cannabinoides para el tratamiento de TS. Escrito en marzo de
1999 en la revista de la American Journal of Psychiatry, los investigadores del
Departamento de Psiquiatría Clínica y Psicoterapia de la Facultad de Medicina de
Hannover en Alemania, publicaron el tratamiento exitoso del sindrome de Tourette con
una sola dosis de 10 mg de delta-9-THC en un paciente varón de 25 años de edad. [1]
Los investigadores han indicado que la gravedad de los sujetos según la Total Tic
Puntuación cayó de 41 a 7 durante las dos horas posteriores al tratamiento con
cannabinoides, y que se observó una mejoría durante un total de siete horas. Los
investigadores confirmaron una vez más estos resultados preliminares de un estudio
aleatorio doble ciego controlado por placebo y mediante ensayos de dosis única de THC
en 12 pacientes adultos. Los investigadores informaron de una mejora "significativa de
tics y el comportamiento obsesivo-compulsivo (OCB), después de tratamiento con
delta-9-THC en comparación con el placebo. "[2] Los investigadores no informaron de
ningún deterioro cognitivo en los sujetos después de la administración de THC [3] y
concluyeron: "El THC es eficaz y seguro en el tratamiento de los tics y OCB en el TS.
"[4]
Los investigadores confirmaron estos resultados en un segundo estudio “doble
ciego“controlado con 24 pacientes que recibieron dosis diarias de hasta 10 mg de THC
en un período de seis semanas. Los investigadores reportaron que los sujetos
experimentaron una reducción significativa
de tics, [5] y no sufrieron efectos
perjudiciales sobre el aprendizaje, el recuerdo o la memoria verbal. [6] se aprecia
además una tendencia hacia una mejora significativa de la comunicación verbal y de la
capacidad de memoria durante y después del tratamiento. Resumiendo sus resultados en
62
octubre de 2003 en los Dictámenes Periciales del Diario en Farmacoterapia, los
investigadores concluyeron que en pacientes adultos con TS, "El tratamiento con delta9- THC debe ser estudiado más a fondo ya que los fármacos bien establecidos o bien no
logran mejorar los tics causan efectos adversos significativos. "[7]
REFERENCES
[1] Muller-Vahl et al. 1999. Treatment of Tourette’s syndrome with delta-9-tetrahydrocannabinol. American Journal
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syndrome: a 6-week randomized trial. Journal of Clinical Psychiatry 64: 459-65.
[6] Muller-Vahl et al. 2003. Treatment of Tourette syndrome with delta-9-tetrahydrocannabinol (delta 9-THC): no
influence on neuropsychological performance. Neuropsychopharmacology 28: 384-8.
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Pharmacotherapy 4: 1717-25.
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ensayo aleatorio cruzado. Pharmacopsychiatry 35: 57-61.
[3] Müller-Vahl et al. 2001. Influencia del tratamiento del síndrome de Tourette con delta9-tetrahidrocannabinol
(Delta9-THC) en el rendimiento neuropsicológico. Pharmacopsychiatry 34: 19-24.
[4] Müller-Vahl et al. 2002. op. cit.
[5] Müller-Vahl et al. 2003. Delta 9-tetrahidrocannabinol (THC) es eficaz en el tratamiento de los tics de Tourette en
síndrome: un ensayo aleatorizado de 6 semanas. Journal of Clinical Psychiatry 64: 459-65.
[6] Müller-Vahl et al. 2003. El tratamiento del síndrome de Tourette con delta-9-tetrahidrocannabinol (delta 9-THC):
no influye en el rendimiento neuropsicológico. Neuropsychopharmacology 28: 384-8.
[7] Kirsten Müller-Vahl. 2003. Los cannabinoides reducen los síntomas del síndrome de Tourette. Opiniones de
expertos en Farmacoterapia 4: 1717-1725.
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