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CORDILLERA DE LA COSTA La cordillera de la Costa es, junto a la cordillera de los Andes, el valle longitudinal y las planicies litorales una de las cuatro macroformas mas importantes del relieve chileno. Está presente en nuestro país, bordeando la costa del pacífico y se exGende desde el cerro Camaraca, ubicado 20 kilómetros al sur de Arica, hasta la península de Taitao, en la región de Aysén, donde esta cordillera se interna en el océano, con algunas interrupciones. Si bien no se puede comparar en altura con la cordillera de los Andes, Gene un origen geológico mucho más anGguo. Este cordón montañoso está cortado por numerosos ríos que nacen de la cordillera de los Andes y el punto más cercano entre ambas cordilleras es la angostura de Paine, que separa la Región Metropolitana de SanGago de la Región del Libertador General Bernardo O’higgins. Sus partes más altas forman un biombo climáGco y una zona de protección natural para la vegetación y fauna naGvas. Sus suelos se erosionan con facilidad y son muy pobres para la acGvidad agrícola. La razones son básicamente la anGgüedad del suelo y la constante irrupción de los vientos alisios dada su proximidad a la costa. Las alturas máximas de esta cordillera se encuentran en la sierra Vicuña Mackenna, al sur de Antofagasta con 3.000 msnm, en la Zona Central con los altos de CanGllana 2.318 msnm, cerro El Roble en Caleu con 2.222 msnm, cerro Vizcachas 2.108 msnm y cerro La Campana 1.910 msnm. En el norte grande, desde el cerro Camaraca hasta el valle de Copiapó, la cordillera es alta y conGnua con un ancho promedio de 50 kilómetros. Es un gran farallón que cae abruptamente al océano desde unos 900 m de alGtud, con un angosto borde costero de terrazas marinas, interrumpidas por quebradas. Cuando los vientos alisios provenientes del mar cargados de humedad chocan con esta gran muralla, ascienden violentamente, la humedad en ellos se condensa y se genera una densa neblina llamada camanchaca. Frente a Iquique supera los 1.700 metros sobre el nivel del mar y llega a los 3.000 metros en la Sierra Vicuña Mackenna. Su desgastada superficie está ocupada por depresiones sin desagüe, llamadas las “pampitas” y cuencas salinas, que forman los salares costeros, entre los cuales sobresale, por su gran tamaño, el Salar Grande. Hacia el este en el borde de contacto entre la cordillera de la costa y la Depresión Intermedia, se encuentran los principales yacimientos salitreros; también hay yacimientos de cobre y algunas reservas de hierro. En el norte chico, al sur de Chañaral la cordillera aparece fraccionada y disconGnua por efecto de la erosión y la acción del mar. Estas porciones aisladas de la cordillera, cortadas por los valles de los ríos entran en contacto con los cordones transversales que avanzan hacia el oeste desde los Andes, formando un paisaje confuso, donde no es posible diferenciar las franjas longitudinales del relieve. Esta zona es conocida como la de los valles transversales, entre los que destacan los valles del río Copiapó, del Huasco, del Elqui, del Limarí, del Choapa, de Petorca, la Ligua y del Aconcagua. Esta zona, es rica en recursos mineros, principalmente hierro y cobre. Aquí se ubican la mayor parte de los yacimientos de hierro en explotación. En el sector central, frente a Valparaíso y SanGago, la Cordillera vuelve a erguirse alta y maciza, dividiéndose en dos cadenas principales: la oriental más elevada y la occidental de menores alturas. La cadena oriental posee algunas cumbres que sobrepasan los 2.000 m como los cerros de Altos de CanGllana, el Roble, Vizcachas y la Campana. Entre los cordones de los cerros formados por la cordillera de la Costa hay valles de excelentes cualidades agrícolas y que fueron ocupados muy tempranamente como los de Quillota, Villa Alemana y Quilpué. Al sur del río Rapel, vuelve a deprimirse, apareciendo como un relieve erosionado. Pasado el río Maule, toma altura nuevamente y se divide en cordones paralelos que dejan entre ellos cuencas, de gran importancia para la agricultura. Al sur del río Itata, la cordillera se transforma en una meseta erosionada de una altura no superior a los quinientos metros. Los cerros más importantes son el Cayumanque y el Quilme. Al sur del Bíobío la cordillera se eleva a una altura de 1.400 m en la llamada Cordillera de Nahuelbuta, que se levanta como una cadena alta y conGnua, hasta las cercanías del río Imperial. La altura y conGnuidad hacen que esta actúe como un biombo climáGco que dificulta el paso de precipitaciones de gran envergadura hacia el interior. Más al sur, el nombre del macizo costero cambia a Cordillera de Mahuidanchi y desciende bruscamente su altura, llegando sólo a los 400 metros sobre el nivel del mar con suelos muy erosionados. Al sur del río Valdivia la cordillera cambia nuevamente su nombre al de cordillera Pelada y más al sur es llamada cordillera del Sarao, la que termina antes del canal de Chacao y vuelve a reaparecer en la isla de Chiloé con los nombres de cordillera del Piuché en el norte de la isla y del Pirulil en el sur. Producto del hundimiento del terreno y de la acción de los glaciares, al sur de la isla de Chiloé solo aparecen las cumbres de la cordillera las que forman las islas del archipiélago de los Chonos, y de las Guaitecas, resurgiendo nuevamente como cordillera en la península de Taitao y desapareciendo definiGvamente en el océano Pacífico. La cordillera de la costa es importante porque aminora la influencia de los vientos húmedos provenientes del Océano Pacífico y colabora en la presencia de climas locales, permiGendo el desarrollo de acGvidades agrícolas y silvícola. Además conGene grandes reservas de minerales, como el cobre, el hierro y el salitre.