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La Universidad de Granada, a través del Servicio de Prevención de Riesgos Laborales, oferta a su personal la posibilidad de vacunarse gratuitamente contra la gripe. Se adjunta esta información para aclarar las posibles dudas que puedan surgir en relación a la enfermedad y a la vacuna que se utilizará para la campaña 2010/2011. ¿Que es la Gripe? La gripe es una enfermedad infecciosa aguda de las vías respiratorias causada por un virus. Entre sus características más importantes está su elevada capacidad de transmisión de una persona a otra. Se presenta generalmente en invierno y de una forma epidémica, es decir, que cada año nos enfrentamos a una temporada en la que puede producirse una gran actividad y circulación del virus de la gripe (predominantemente en los meses de noviembre a marzo). La gripe es un importante problema de salud, tanto por la mortalidad que puede provocar directa o indirectamente, como por las complicaciones que puede ocasionar y los costes económicos y sociales que origina. La proporción de población afectada durante las epidemias anuales oscila entre el 5 y 15% en poblaciones grandes, y es superior al 50% en grupos de población cerrados como internados escolares o asilos. El virus causante de la gripe tiene una elevada capacidad de sufrir variaciones en sus antígenos de superficie (proteínas que tienen especial relevancia en la capacidad de infección del virus y frente a las que los seres humanos producimos anticuerpos que nos protegen). Estas variaciones implican la aparición de nuevos virus gripales, frente a los que el ser humano no tiene protección. Actualmente existen vacunas antigripales con una alta efectividad y seguridad para controlar la gripe, pero debido a esta alta capacidad de los virus gripales de variar año tras año la vacuna debe actualizarse cada nueva temporada y administrarse anualmente. Cómo se transmite la Gripe La fuente de la infección está constituida por las personas enfermas. La transmisión se produce fundamentalmente por vía aérea mediante gotitas que son originadas al hablar, toser o estornudar por la persona enferma y que alcanzan a una persona sin gripe pero capaz de padecerla. El virus entra en la nariz, garganta o pulmones de una persona y comienza a multiplicarse causando los síntomas de la gripe. También puede transmitirse, con mucha menos frecuencia, por contacto directo, por ejemplo cuando una persona toca una superficie que contiene virus de la gripe -por ejemplo la mano de un enfermo- y posteriormente se toca su nariz ó su boca. Las personas enfermas son capaces de transmitir la enfermedad desde un día antes del comienzo de los síntomas hasta unos 3 a 7 días después del comienzo de la enfermedad. Los niños pueden transmitir la gripe incluso durante más de 7 días tras el comienzo de los síntomas. Los síntomas de la enfermedad comienzan de 1 a 4 días después de que el virus entra en el organismo. Algunas personas son infectadas por el virus de la gripe pero no desarrollan síntomas de la enfermedad, sin embargo estas personas sí que pueden transmitir la enfermedad a otros. La fuente de la gripe en las infecciones humanas es fundamentalmente el hombre; sin embargo los virus gripales infectan frecuentemente a animales como aves, caballos o cerdos que pueden ser fuente de nuevos subtipos para el hombre. Esta capacidad demostrada de los virus gripales de los animales de saltar la barrera interespecie y afectar a los seres humanos hace que la gripe no pueda ser considerada como una enfermedad erradicable. 1 Prevención de la Gripe. Vacunación antigripal La vacunación antigripal es el método más eficaz para prevenir la enfermedad. ¿Quién DEBE ser vacunado contra la gripe? La vacunación se recomienda fundamentalmente para las personas con alto riesgo de sufrir complicaciones en caso de padecer la gripe y para las personas en contacto con estos grupos de alto riesgo ya que pueden transmitírsela. Así, los grupos de población en los que se recomienda la vacunación antigripal, según el protocolo para la vigilancia de la gripe aprobado por el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, son los siguientes: 1. Grupos con alto riesgo de padecer complicaciones gripales: Personas de 65 o más años de edad Ingresados en residencias de ancianos o en otros centros que prestan asistencia a enfermos crónicos de cualquier edad. Niños/as y adultos con enfermedades crónicas cardiovasculares o pulmonares, incluyendo niños con asma. Niños/as y adultos que hayan precisado seguimiento médico periódico u hospitalización en el año precedente, por enfermedades metabólicas crónicas (incluyendo diabetes mellitus), insuficiencia renal, hemoglobinopatías o inmunosupresión (incluyendo la originada por fármacos). 2. Grupos que pueden transmitir la gripe a personas con alto riesgo de complicaciones gripales: Médicos/as, enfermeros/as y otro personal intra y extrahospitalario, que atiendan a personas de alto riesgo (ancianos, trasplantados, personas con sida,...). Personal empleado en asilos o en centros de cuidados de crónicos que tienen contacto directo con los residentes. Personas que proporcionen cuidados domiciliarios a pacientes de alto riesgo. 3. Otros grupos en los que se recomienda la vacunación: Trabajadores que prestan servicios comunitarios esenciales (policías, bomberos,...). Personal docente Personal que trabaja con grandes colectividades 2 ¿Quien NO debe ser vacunado? Las personas con alergia al huevo, con hipersensibilidad a las proteínas de huevo o que hayan tenido una reacción alérgica severa a una vacunación anterior con vacuna de la gripe. Si se tiene una enfermedad aguda con fiebre alta debe esperarse hasta que esta situación remita. Tampoco se recomienda la vacunación en el primer trimestre de embarazo. Personas alérgicas a neomicina y gentamicina. ¿Por qué hay que vacunarse cada año? Los anticuerpos producidos en respuesta a la vacunación antigripal van disminuyendo con el tiempo y pueden no ser suficientes para garantizar la adecuada protección al año siguiente de la vacunación. Además, el proceso evolutivo normal del virus de la gripe incluye una serie de variaciones antigénicas menores que suponen una diferencia en un pequeño número de aminoácidos en las proteínas hemaglutinina (H) y neuraminidasa (N). La consecuencia de estas pequeñas variaciones es que la vacuna antigripal debe ser modificada anualmente adaptándola a las cepas que se cree circularán en cada temporada. En este punto juega un papel fundamental la vigilancia nacional e internacional de la gripe, que tiene como objetivo fundamental caracterizar adecuadamente los virus circulantes y su difusión entre la población. ¿Cuándo se debe vacunar de la gripe? La fecha de comienzo de la campaña vacunal viene determinada por la época en que habitualmente comienza a circular el virus, es decir en los meses de octubre-noviembre en el hemisferio norte y en el hemisferio sur en marzo-abril. Por ello, en España, en todas las Comunidades Autónomas las campañas de vacunación se inician entre el final de septiembre y el principio de octubre. El efecto protector de la vacuna se obtiene aproximadamente a las dos semanas de su aplicación, por lo que conviene no demorarse en la vacunación, y hacerlo entre octubre y noviembre, si bien la vacunación puede seguir siendo de alguna utilidad administrada más tardíamente. ¿Cuántas dosis de vacuna es necesario administrar? La vacuna antigripal debe ser administrada en una única dosis ¿Cómo debe administrarse y conservarse la vacuna antigripal? Las vacunas inactivadas se administran a los adultos por vía intramuscular ó subcutánea profunda en el músculo deltoides (parte superior del brazo) Las vacunas antigripales deben conservarse siempre en nevera (+2 a +8º C) hasta el momento de la administración. 3 ¿De qué está compuesta la vacuna de la gripe? La vacuna de la gripe contiene tres cepas (dos tipo A y una tipo B) que representan los virus que más probablemente circulen en el invierno siguiente. La vacuna se fabrica a partir de virus cultivados en huevos embrionados de gallina que posteriormente son inactivados. En base a los datos obtenidos de la vigilancia del virus de la gripe, la Organización Mundial de la Salud publica anualmente las recomendaciones sobre el contenido de la vacuna. Así, siguiendo sus recomendaciones, para esta temporada 2010/2011 en el hemisferio norte se va a utilizar una vacuna que incluye las siguientes cepas: A/Califórnia /7/2009 (H1N1) (gripe pandémica) A/Perth /16/2009 (H3N2) B/Brisbane /60/2008 El tipo de vacuna que administraremos en la Universidad de Granada durante la campaña 2010/2011, suministrada por los laboratorios Esteve (Novartis), es de antígenos de superficie inactivados; provoca una buena respuesta vacunal y escasos efectos secundarios. Esta temporada contiene entre sus componentes el de la gripe A pandémica 2009. ¿Es efectiva la vacuna de la gripe? La mayor parte de los adultos desarrollan altos títulos de anticuerpos tras una dosis de vacuna. Estos anticuerpos únicamente son protectores frente a los virus de la gripe similares a los incluidos en la vacuna. La capacidad protectora de la vacuna depende fundamentalmente de dos factores: la edad y del estado de salud de la persona vacunada. la similitud de los virus circulantes y los contenidos en la vacuna. Cuando la coincidencia entre los virus circulantes y los vacunales es alta, la vacuna previene entre el 70 y el 90 % de las gripes en sujetos sanos menores de 65 años. En personas mayores de 65 años y personas con enfermedades crónicas es efectiva en la prevención de complicaciones derivadas de la gripe. Se pueden evitar un 50 a 60% de hospitalizaciones y el 80% de fallecimientos derivados de estas complicaciones. En estos grupos, la eficacia para prevenir la enfermedad es de un 30 a 40%, pero es importante tener en cuenta que, aunque se pueda adquirir la infección, la enfermedad será con mucha probabilidad menos grave si ha habido una vacunación anterior. ¿Puedo contraer la gripe al recibir la vacuna? La vacuna de la gripe no puede provocar la enfermedad al contener virus muertos no contagiosos. Si una persona sufre en los días posteriores a la vacunación un cuadro de vías respiratorias altas en ningún caso puede estar relacionado con la administración de la vacuna antigripal. 4 ¿Cuáles son los riesgos al recibir una vacuna de gripe? El riesgo de que la vacuna antigripal cause un daño grave es extremadamente pequeño, sin embargo, como con cualquier medicamento puede dar lugar a reacciones alérgicas. Los efectos adversos más frecuentes, que suelen desaparecer sin tratamiento son: enrojecimiento, inflamación, induración y dolor en la zona de la inyección. Estas reacciones locales suelen durar menos de 48 horas y rara vez interfieren con la vida normal de los vacunados. Las reacciones tales como fiebre, malestar ó dolores musculares pueden aparecer tras la vacunación. Estas reacciones se inician en las primeras 6-12 horas y suelen persistir 1-2 días. ¿QUIEN NO DEBE SER VACUNADO DE LA GRIPE? Las personas con alergia al huevo, con hipersensibilidad a las proteínas de huevo o que hayan tenido una reacción alérgica severa a una vacunación anterior con vacuna de la gripe. Si se tiene una enfermedad aguda con fiebre debe esperarse hasta que esta situación remita. No se recomienda la vacunación en el primer trimestre de embarazo. Personas alérgicas a la neomicina, gentamicina y kanamicina. Alergia a formaldehído, polisorbato y bromuro de cetiltrimetilamonio. Indicar al personal sanitario responsable de la administración de la vacuna si está en tratamiento con anticoagulantes (acenocumarol = sintrom, warfarina = aldocumar.....). 5