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CATOLICISMO
(Cristiano y romano).
La palabra católico viene del griego y significa “abajo-todos” o “todos en la tierra”. El
Cristianismo se difundió por el mundo conocido antes que interviniera Roma. Esto se conoce
como Catolicismo Cristiano ó Cristianismo Primitivo. El Catolicismo Cristiano (la difusión del
Cristianismo en todo el mundo conocido en los primeros trescientos años) fue anterior al
Catolicismo Romano que algunos ubican como iniciándose formalmente en el año 800 con la
coronación del Emperador Carlomagno por el Papa de Roma.
AÑO 321: El emperador Constantino abandona el culto al sol y se convierte al Cristianismo. Por
321 años el Catolicismo Cristiano había sido ilegal. Constantino lo legaliza y pronto se vuelve
dominante en todo el mundo conocido. Existían cinco jefes ó patriarcas en el mundo Cristiano:
Jerusalén, Alejandría, Antioquía, Roma y Constantinopla. La iglesia apostólica pasó a ser la
iglesia comunitaria. En el año 321 comienza la iglesia imperial.
AÑOS 380
A 450: El Segundo Concilio Ecuménico de Constantinopla (381) establece la primacía de Roma
para dirigir las instituciones cristianas en todo el mundo y esto se ratifica en el Cuarto Concilio
Ecuménico de Calcedonia (451). El Papa romano dirigía así a los otros cuatro patriarcas.
AÑOS 600
A 800: Muere Mahoma en el año 632. Comienza la Guerra Santa del Islam que captura tres de los
cinco patriarcas Cristianos: Jerusalén, Alejandría y Antioquía. Quedan sólo Roma y
Constantinopla al frente de todo el mundo Cristiano (Catolicismo Cristiano) de aquel entonces.
No había todavía Catolicismo romano.
NAVIDAD DEL AÑO 800
El Papa de Roma corona a Carlomagno emperador. Esta sumisión al imperialismo crea un
profundo disgusto en el patriarca de Constantinopla. Esta es la semilla del cisma (separación)
entre Roma y Constantinopla. Ambos patriarcas toman desde aquí dos caminos diferentes: El
Papa de Roma se puso prácticamente bajo la “protección” del gran Carlomagno. El Papa es el
Papa imperialista. Como consecuencia, la nobleza europea feudal dominó a los obispados locales
en todo Europa. Los obispos se enriquecían con propiedades, dinero y hacienda y así pasaban a
ser siervos privilegiados de los señores feudales.
AÑO 962: Basado en el antecedente del Emperador Carlomagno, Otto I el Grande también logró
que el Papa de su época lo coronara y su familia reinó sobre Europa hasta Otto III. La dinastía de
los emperadores Otto nombró y retiró Papas en el Vaticano a su gusto y paladar. El Papa era
considerado propiedad de los Otto y los obispos seguían siendo los siervos de los señores de la
nobleza europea. Los patriarcas de Constantinopla siguieron mostrando y declarando su repulsión
por estas prácticas de la jerarquía romana. En este período nace la idea de la capilla ó iglesia
privada que los nobles tenían en los jardines de sus lujosos palacios.
AÑO 1046: Todo esto fue el prólogo histórico para que Enrique III depusiera a tres Papas y luego
nombrara a su propio candidato (Papa Clemente II) y varios de sus sucesores en el Vaticano. Por
estos 300 años los Papas fueron la propiedad privada de los Reyes y los Emperadores europeos.
El Clero bajo el dominio feudal (años 800 a 1100) podría haber usado la confesión auricular en
beneficio de los Señores (nobles y reyes) así como se vendían plegarias de intercesión para
aquellos que no se consideraban dignos de rezarle a Dios directamente. Más tarde, cuando los
Papas pasan dificultades económicas vendían “indulgencias” ó perdón por los pecados, perdón
que sólo los nobles adinerados podían comprar. Esta forma de simonía fue una de las piedras del
escándalo europeo que iniciaron el Protestantismo.
EL PAPA ACTUAL
Algunos analistas de la Sociología de la Historia comparan aquella situación con la del Papa Juan
Pablo II, quien estaría hoy al servicio del Imperio AngloAmericano de fines del siglo XX. Coloquialmente se le llegó a llamar en Latinoamérica “el Papa
Polaco de Reagan y Bush”, aludiendo a los presidentes Reagan y Bush de Estados Unidos.
Estos analistas ven dos misiones fundamentales de Juan Pablo II que están siendo cumplidas con
gran metodología y eficacia.
Una función “externa” que es la solidaridad entre el Vaticano y el Imperio Anglo-Americano
para destruir el Socialismo Post-Soviético, esto se ha visto ya en
Polonia, Yugoslavia, Checoeslovaquia, Nicaragua, Granada y Haití (hasta Julio de 1997) y se
asoma en Cuba, Irak, Somalía Cambodia y Nor-Corea.
Además hay una función “interna” que es destruir la Teología de Liberación dentro de la Iglesia.
(Veremos luego qué es esto).
AÑO 1054 : (Cisma de Oriente)
El Papa León IX, cansado en la Monarquía del Vaticano, de escuchar críticas a su función de Rey
desde Constantinopla, envía contra este
patriarcado al feroz Humberto. Esto se conoce como la Cruzada contra Constantinopla. Algunos
ven aquí el comienzo del terrorismo religioso
del Papa de Roma que luego continúa con la Santa Inquisición.
a la violencia militar del Papa monarquista de Roma. Se consuma así algo que comenzó en el año
800: La Iglesia
Católica Romana.
NI EL PRIMERO NI EL ULTIMO CISMA
En general creemos que hubo sólo dos grandes cismas de la Iglesia Católica Cristiana:
Año 1054: el cisma oriental que origina las iglesias Católica Romana y Ortodoxa Oriental .
Año 1415: el cisma de la Reforma Protestante que comienza con la quema (holocausto) de Jan
Hus -Rector de la Universidad de Praga- en el Concilio Ecuménico de Constanza y se consuma
con Lutero, Calvino y los Anabaptistas un siglo después. Ambos cismas fueron el resultado de la
violencia de la jerarquía papal romana.
Pero un análisis de los cismas nos muestra lo siguiente:
I. Cisma Judío (0)
II. Cisma Islámico (632) ó Patriarcal
III. Cisma Oriental (1054) (800?)
IV. Cisma Papal (1409)
V. Cisma de la Reforma Protestante (desde 1415)(1521)
VI. Cisma Conciliar (1445)
VII. Cisma Nacionalista (1490 y 1682)
VIII. Cisma Científico intelectual (1616-1633)
IX. Cisma Revolucionario (1789)
X. Cisma Secreto (Siglo 19)
XI. Cisma Anticipado (desde 1864 en adelante)
XII. Cisma Católico (1870)
XIII. Cisma Teológico (Desde 1973 al siglo 21)
XIV. Cisma Posible (Americanismo y Feminismo - Siglo 21)
I ) CISMA JUDÍO
Cuando los apóstoles de Jesucristo, quienes eran todos de la religión judía aceptan a Jesús como
el Mesías esperado por los judíos, se separa la iglesia judía en:
Judíos Nazarenos (los que veían a Jesús como Mesías Divino) Judíos Ebionitas (Jesús Mesías,
pero NO DIVINO) y Judíos Ortodoxos (los judíos que siguen esperando al mesías -hasta hoy-):
Fariseos, Esenios,Zelotas, Saduceos, Sefardíes, Ashkenazi, Haskalas, etc. La palabra
“Cristianismo” no se usa hasta después del año 100. Los primeros Cristianos fueron los judíos
nazarenos (los doce apóstoles). Por eso algunos clasifican a las iglesias cristianas en:
A) Apostólica : (Nazarenos)
B) Comunitaria: Las primeras comunidades Cristianas de Efeso Sardis, Esmirna, Tiatira,
Pérgamo, Filadelfia y Laodicea. Algunos confunden la pureza
Cristiana de estas siete iglesias comunitarias del primer siglo con los cinco patriarcados que
surgen después de la oficialización del Cristianismo por
Constantino en el siglo cuarto.
C) Imperial: La iglesia Cristiana imperial es la que estuvo sujeta a Constantino, Carlomagno y los
Otto. Luego sigue al Imperialismo Europeo con su conquista y colonización del mundo (siglos 15
al 19) y actualmente al Imperialismo Anglo-Americano del siglo 20.
II) CISMA ISLÁMICO O PATRIARCAL (632)
A la muerte de Mahoma en 632 sigue la toma de Jerusalén, Alejandría (hoy Egipto) y Antioquía
(hoy Turquía) con sus tres patriarcas Cristianos (ahora bajo el Islam).
Queda sólo Roma y Constantinopla que protagonizarán el cisma Cristiano siguiente.
La donación de Constantino.
En el segundo siglo de nuestra era cayó el Imperio Romano. ¿Qué podía reemplazarlo? La iglesia
__ Roma surgió como un candidato natural a continuar con la supremacía del Imperio Romano,
aunque fuera de una manera menor o menos directa.
Las Actas de Constantino del siglo 4 habían declarado que Bizancio (Constantinopla) era el
centro del imperio. Para que la Iglesia Romana, también llamada “Cristiana” continuara con
algunos atributos del Imperio Romano tenía que crear un puente histórico entre las Actas de
Constantino y la toma del poder por la Iglesia Romana. Ese puente no existía.
La Curia Romana, quizá, después del año 900 de nuestra era, falsificó un documento que llegó a
llamarse “La Donación (regalo) de Constantino”. En este falso documento, Constantino el
Grande le había otorgado al Papa Silvestre I (314-335 A.D.) y a sus sucesores, la supremacía
espiritual y el dominio temporal de la Iglesia de Roma sobre todos los Cristianos del Imperio
Occidental. Hoy se acepta universalmente que nunca hubo tal regalo del emperador Constantino
al Papa de Roma.
La “Donación de Constantino” se “hizo necesaria” dentro de la Iglesia después que León III
coronara a Carlomagno como continuador del Imperio Romano.
En poco tiempo, el poder de emperador y nobleza (con sus ejércitos numerosos) se hizo sentir
más que el alegado poder de “El Papa” de turno. El invento de la Donación de Constantino fue el
fallido intento de sobreponer el poder de los Papas Romanos al poder de los nobles feudales
europeos.
III) CISMA ORIENTAL (1054)
Aquí está la semilla de todos los cismas ulteriores entre dirigentes y jerarquías Cristianos.
En 1099 el Papa Urbano II convoca la primera cruzada buscando realzar su pálido prestigio,
alejar a aquella parte de la nobleza europea enemiga del papado
convocándola a retomar Jerusalén, pero con el deseo más realista y concreto de reunir la Iglesia
de Roma y la de Constantinopla, siquiera por la fuerza. Todo esto
fracasó:
1) El Papa no rescató su prestigio.
2) No se rescató completamente a Jerusalén del Islam.
3) No se rescató (para Roma) a la Iglesia Ortodoxa Oriental con sede en Constantinopla.
Actualmente en la Iglesia Ortodoxa, la primera de Constantinopla, es sólo honoraria. Existen
quince iglesias ortodoxas autónomas ó autocéfalas, la que más creció
en número de fieles fue la Rusa, bajo la Unión Soviética (Patriarca Alexis), pero también están la
de Alejandría, Antioquía-Damasco, Jerusalén, Georgia, Serbia,
Rumania, Bulgaria, Chipre, Grecia, Albania, Polonia, Checoslovaquia y Estados Unidos.
AÑOS 1100
A 1400: La Iglesia Católica Romana continúa acumulando poder y riquezas. Se enfatiza su
jerarquía y esta jerarquía favorece más su mundanalidad que su vida espiritual. Aparecen cuatro
libros de “Sentencias” del Obispo Pedro Lombard. Surge una clase de monjes intelectuales y
literarios, rechazando la mundanalidad de la jerarquía en el Vaticano y de allí surgen las
Academias Universitarias impersonales donde se enfatizan la pobreza y el anonimato. Surgen los
primeros movimientos de disidencia monacal. Aquí hay otra semilla para el quinto gran cisma, el
cisma de la Reforma Protestante. Los Cátaros, los Albigenses, los Valdenses y los Humiliati,
hacen un frente común con los Franciscanos Espiritualistas que se separan de los
Franciscanos Conventuales o Papales. Estos son los precursores intelectuales de William of
Ockham (franciscano que acusa al Papa Juan XXII de herejía), de John Wycliffe en Inglaterra y
de Maister Eckhart en Alemania (todos del siglo 14).
Todos ellos quieren retornar a leer las escrituras en griego ( que fueron las únicas conocidas
durante los 600 primeros años del Cristianismo), quieren el rescate de la simplicidad y la pobreza
y quieren más énfasis en la ayuda mutua entre los hijos de Dios, así como menos énfasis en la
jerarquía y el poder eclesiásticos. Poco llegan las verdaderas enseñanzas de Cristo a los pueblos
llamados “cristianos”. No existe todavía la imprenta, la única Biblia conocida era la Vulgata en
Latín, no traducida aún y se había olvidado la enseñanza Cristiana original escrita en griego. En
1290 se expulsan a los judíos de Inglaterra. En 1306 se expulsan a los judíos de Francia.
Aparecen en este período cuerpos de judíos flotando en el río Rhin (las masacres intermitentes del
Rhin). Estos eran aquellos judíos de
Inglaterra y Francia que no conocían el idioma alemán. Los reyes católicos expulsan a los judíos
de España en 1490, bajo el Papa español Alejandro VI (también llamado “Papa Borgia” ó “El
Papa más corrupto de la historia” por el fraile Savoranola).
LAS HEREJÍAS
Siglo 3: Mani el Apóstol de la Luz.
Decir que Mani nació en Babilonia no lo hace muy respetable a los oídos judíos y cristianos.
Nació en lo que entonces era Irán (hoy Iraq) el 14 de Abril del año 216 y fue crucificado por los
sacerdotes de Zoroastro cuando contaba 68 años de edad.
Pertenecía a la familia de un rey que fue derrocado en el año 224. Hablaba arameo, igual que
Jesucristo. Cuando era niño fue conmovido por la visión de un
ángel. Ya adulto volvió a ver a ese ángel, que le pidió que predicara una nueva doctrina.
Predicó en India y Persia. Decía que él era uno más en una “línea” de iluminados que comenzaba
con Adán, y que era precedido por Zoroastro, Buda y Jesucristo.
Mani afirmaba que Dios había hablado a todos los hombres a través de estos iluminados, pero que
“todo lo que Dios nos dice” no se puede entender escuchando
sólo a uno de los iluminados ó profetas de Dios.
Afirmaba que los escritos de Buda, Jesús y Zoroastro habían sido quemados por los primeros
sacerdotes de las religiones fundadas en sus nombres. Por eso
escribió con cuidado las bases de su doctrina, pero sus escritos fueron destruídos en Persia
después de su crucifixión y luego corrieron el mismo destino en Europa
Occidental y África del Norte debido a sucesivos edictos de Papas Católicos que lo consideraban
un hereje cristiano.
Previendo todo esto Mani aconsejaba el trabajo misionero de sus seguidores y la traducción de su
obra a todos lo idiomas. Lo que se conoce de él, típicamente, se
debe a escritos suyos en idioma Copto que fueron hallados en China, Egipto y Uzbekistán (antes
Samartanda) recientemente.
Aquel católico conocido como San Agustín fue Maniqueo (seguidor de Mani) en su primera
juventud en el Norte de África.
La invasión de los Mongoles en el siglo 13 terminó de destruir lo que quedaba de la Iglesia
Maniquea.
Los Papas destruyeron a los Bogomilistas de Bulgaria en el año 980 y a los Cátaros y los
Albigenses en el Sur de Francia en el siglo 12.
Mani afirmaba que la Resurrección (ó la libertad de las reencarnaciones en la materia) se lograba
con una conducta santificada, con la fe y con la gracia de Dios,
pero no sin poseer un conocimiento espiritual específico llamado Gnosis. Este conocimiento se
basaba en entender que la materia estaba gobernada por Satanás y
que el cuerpo se salvaba de reencarnar una y otra vez en la materia si se adhería sin reservas,
completamente a la inteligencia (Nous).
Mani decía que en el tiempo se suceden tres períodos divinos: uno en el que la obscuridad, la
materia y lo diabólico está separada de la Luz, el Espíritu y lo Divino.
Luego obscuridad y Luz se mezclan y luego vuelven a separarse . Es sólo en ese período
intermedio de mezcla entre la Luz y la obscuridad espiritual que el alma
puede salvarse de reencarnar (con la Resurrección).
El alma que reencarna es lo que se ata a la materia con propiedades, exceso de trabajo,
procreación de hijos y beber alcohol -incluyendo el vino- Sólo aquellos que
podían vivir sin estas ataduras eran los elegidos de Dios (Hijos de Dios). Todos los demás eran
sólo hombres y mujeres condenados a regresar a la obscuridad de
la materia.
El ayuno estricto era muy enfatizado por Mani para aumentar la sensibilidad espiritual.
Universitarias impersonales donde se enfatizan la pobreza y el anonimato. Surgen los primeros
movimientos de disidencia monacal. Aquí hay otra semilla para el quinto gran cisma, el cisma de
la Reforma Protestante. Los
Cátaros, los Albigenses, los Valdenses y los Humiliati, hacen un frente común con los
Franciscanos Espiritualistas que se separan de los
Franciscanos Conventuales o Papales. Estos son los precursores intelectuales de William of
Ockham (franciscano que acusa al Papa Juan XXII
de herejía), de John Wycliffe en Inglaterra y de Maister Eckhart en Alemania (todos del siglo 14).
Todos ellos quieren retornar a leer las escrituras en griego ( que fueron las únicas conocidas
durante los 600 primeros años del Cristianismo),
quieren el rescate de la simplicidad y la pobreza y quieren más énfasis en la ayuda mutua entre
los hijos de Dios, así como menos énfasis en la
jerarquía y el poder eclesiásticos. Poco llegan las verdaderas enseñanzas de Cristo a los pueblos
llamados “cristianos”. No existe
todavía la imprenta, la única Biblia conocida era la Vulgata en Latín, no traducida aún y se había
olvidado la enseñanza Cristiana original
escrita en griego. En 1290 se expulsan a los judíos de Inglaterra. En 1306 se expulsan a los judíos
de Francia.
Aparecen en este período cuerpos de judíos flotando en el río Rhin (las masacres intermitentes del
Rhin). Estos eran aquellos judíos de
Inglaterra y Francia que no conocían el idioma alemán. Los reyes católicos expulsan a los judíos
de España en
1490, bajo el Papa español Alejandro VI (también llamado “Papa Borgia” ó “El Papa más
corrupto de la historia” por el fraile Savoranola).
LAS HEREJÍAS
Siglo 3: Mani el Apóstol de la Luz.
Decir que Mani nació en Babilonia no lo hace muy respetable a los oídos judíos y cristianos.
Nació en lo que entonces era Irán (hoy Iraq) el 14 de Abril del año 216 y fue crucificado por los
sacerdotes de Zoroastro cuando contaba 68 años de edad.
Pertenecía a la familia de un rey que fue derrocado en el año 224. Hablaba arameo, igual que
Jesucristo. Cuando era niño fue conmovido por la visión de un
ángel. Ya adulto volvió a ver a ese ángel, que le pidió que predicara una nueva doctrina.
Predicó en India y Persia. Decía que él era uno más en una “línea” de iluminados que comenzaba
con Adán, y que era precedido por Zoroastro, Buda y Jesucristo.
Mani afirmaba que Dios había hablado a todos los hombres a través de estos iluminados, pero que
“todo lo que Dios nos dice” no se puede entender escuchando
sólo a uno de los iluminados ó profetas de Dios.
Afirmaba que los escritos de Buda, Jesús y Zoroastro habían sido quemados por los primeros
sacerdotes de las religiones fundadas en sus nombres. Por eso
escribió con cuidado las bases de su doctrina, pero sus escritos fueron destruídos en Persia
después de su crucifixión y luego corrieron el mismo destino en Europa
Occidental y África del Norte debido a sucesivos edictos de Papas Católicos que lo consideraban
un hereje cristiano.
Previendo todo esto Mani aconsejaba el trabajo misionero de sus seguidores y la traducción de su
obra a todos lo idiomas. Lo que se conoce de él, típicamente, se
debe a escritos suyos en idioma Copto que fueron hallados en China, Egipto y Uzbekistán (antes
Samartanda) recientemente.
Aquel católico conocido como San Agustín fue Maniqueo (seguidor de Mani) en su primera
juventud en el Norte de África.
La invasión de los Mongoles en el siglo 13 terminó de destruir lo que quedaba de la Iglesia
Maniquea.
Los Papas destruyeron a los Bogomilistas de Bulgaria en el año 980 y a los Cátaros y los
Albigenses en el Sur de Francia en el siglo 12.
Mani afirmaba que la Resurrección (ó la libertad de las reencarnaciones en la materia) se lograba
con una conducta santificada, con la fe y con la gracia de Dios,
pero no sin poseer un conocimiento espiritual específico llamado Gnosis. Este conocimiento se
basaba en entender que la materia estaba gobernada por Satanás y
que el cuerpo se salvaba de reencarnar una y otra vez en la materia si se adhería sin reservas,
completamente a la inteligencia (Nous).
Mani decía que en el tiempo se suceden tres períodos divinos: uno en el que la obscuridad, la
materia y lo diabólico está separada de la Luz, el Espíritu y lo Divino.
Luego obscuridad y Luz se mezclan y luego vuelven a separarse . Es sólo en ese período
intermedio de mezcla entre la Luz y la obscuridad espiritual que el alma
puede salvarse de reencarnar (con la Resurrección).
El alma que reencarna es lo que se ata a la materia con propiedades, exceso de trabajo,
procreación de hijos y beber alcohol -incluyendo el vino- Sólo aquellos que
podían vivir sin estas ataduras eran los elegidos de Dios (Hijos de Dios). Todos los demás eran
sólo hombres y mujeres condenados a regresar a la obscuridad de
la materia.
El ayuno estricto era muy enfatizado por Mani para aumentar la sensibilidad espiritual.
Docetismo: (Primer siglo) . Jesucristo no tenía cuerpo físico y era sólo un fantasma que parecía
tener un cuerpo natural ó físico. Dokein en griego es
“parecer”. Jesucristo no podía tener cuerpo material porque “la materia es impura”. La
crucifixión fue, entonces, sólo una apariencia. La Resurrección es, entonces, innecesaria para
Jesucristo y es sólo necesaria para los seres
humanos. El Docetismo, como aspecto del Gnosticismo, continúa, por supuesto hasta hoy. (Ver
Monofisitismo).
Gnosticismo: (Segundo siglo) . Gnosis es “conocimiento secreto de orden espiritual” en idioma
griego. Se aplicaba a cualquier
movimiento espiritual de esa época y el Cristianismo naciente de los judíos nazarenos, que se
separaron de los judíos ortodoxos adoptó mucho
de la Gnosis para desarrollar el dogma canónico y el credo (y quizá también la organización
mitraica jerárquica).
El Gnosticismo es un mosaico teológico y ritual que enfatizaba la redención con el aprendizaje, el
silencio meditativo ó contemplativo y la
revelación divina. Pero doctrinalmente el Gnosticismo fue sincrético y ecléctico. Libros del
segundo siglo como el “Apocryphon de Juan” o
“Pistis Sofía” formulan esbozos gnósticos doctrinales. La iluminación y la revelación siguen
siendo, de una manera deliberadamente vaga, los
significados fundamentales de la Gnosis. El Dios innombrable del Pleroma es accesible sólo en el
silencio absoluto
de la mente. Todo el Universo material emerge de Yahve, el demiurgo ya que el Dios
innombrable está alejado del mal y no pudo crear este
Universo “diabólico”. Hubo y hay grupos gnósticos que difieren diametralmente en sus prácticas
y doctrinas,
desde los que enfatizan la plegaria hasta los que intentan vivir en absoluto silencio, esperando la
Revelación final.
Montanismo: (Segundo a primer siglo). Montanus de Frigia -hoy Turquía Central- tuvo un
éxtasis espiritual en el año 172. Dejó el culto a Cybeles y se
convirtió al Cristianismo de su época que enfatizaba el silencio contemplativo y ascético más que
las plegarias y los rituales . Pero después de
siete siglos degeneró en ritos en los que se sobrevaloraban los gritos convulsivos y el hablar “en
lenguas”, algo que continúa hasta hoy en
algunas iglesias protestantes. Cuanto menos se entendía el lenguaje de los predicadores y profetas
espontáneos “en trance” más se veía como
influencia del Espíritu Santo. Esa prédica espontánea invalidaba a los sacerdotes y obispos
nombrados por el Papa (ó por los nobles carolingios
de Europa Central más tarde). Los libros Montanistas fueron quemados por los despreciados
emperadores, sacerdotes y obispos.
Sólo quedaron algunas inscripciones en edificios ó monumentos de piedra en Turquía. Había
temor en la iglesia de que nuevos profetas
trajeran nuevas verdades ó nuevos cismas. Entre los seguidores había poca afición a la pobreza
voluntaria, los ayunos de cuarenta días antes de el domingo de Pascua (Cuaresma) y el celibato
para todos sin distinción. Para el año 1000 de
nuestra era ya sólo quedaban las profecías y prédicas estentóreas e ininteligibles que continúan en
algunos círculos, cerca del año 2000, sin
mención del profeta Montanus.
Monofisitismo: (Quinto siglo) . Esta es la versión opuesta del Arianismo.
Cristo es sólo divino y no humano. Esto se oponía a las declaraciones del Concilio de Calcedonia
(451) que afirmaban que Cristo era tanto
humano como divino. (Ver Nestorianismo y Docetismo).
Nestorianismo: (Quinto siglo) . El Tercer Concilio Ecuménico de Efeso
(431) se convocó para organizar la lucha contra esta influyente herejía que requirió otro Concilio
en el año 451, el de Calcedonia.
Néstor era Presbítero de Antioquía y de sus ideas se fundaron iglesias que persisten hasta hoy en
Iraq, Iran y Siria. “María no es Teotokus”
decía. Teotokus significa en griego “La que trajo a Dios”. Condenado por el Concilio de Efeso,
Néstor escribió su libro
“Tragedia” que fue quemado por los obispos. Entonces escribió (sin firmar) “El libro de
Heráclides de Damasco”, que por no tener autor
conocido y haberse escrito en idioma Sirio, en su exilio en el desierto africano, fue encontrado en
1895. En realidad, Néstor había dicho que
Jesús era la manifestación humana del Cristo divino (unión del Prosopon).
Pelagianismo: (Cuarto siglo). Pelagius afirmaba que el ser humano tiene el libre albedrío para
elegir el bien sobre el mal, es decir el ascetismo sobre la
autoindulgencia. La teología de Agustín afirmaba que sin la gracia de Dios no se puede ser bueno.
Esto lo repitió Lutero. Pelagius en esencia
criticaba a la Curia y el Papado licencioso. Por eso el nombre de Pelagius resurge periódicamente
en la historia de la Iglesia hasta el siglo 17. En el siglo XII
Inocencio III lanzó la Cruzada contra los Albigenses, que fueron exterminados en masa en el
“campo de los quemados” cerca del castillo de Montsegur, en el Sur
de Francia. Estos eran monjes itinerantes que predicaban la pobreza voluntaria y también
criticaban los excesos de los obispos. A veces mencionaban a Pelagius.
Luego Inocencio III envió a Francesco de Assissi a fundar la orden franciscana que se caracterizó
por ser la orden de monjes itinerantes que predicaban la pobreza
voluntaria. Esta “herejía” resurge con la reforma de Lutero y Calvino 1200 años después sin
mención de su autor.
Marcionismo: (Segundo siglo). Marcion fue un pensador Gnóstico que fue expulsado de la
Iglesia Católica Romana en el año 144 por “hereje diteísta”.
Afirmaba que había dos Dioses (Diteísmo) un Dios bueno y otro malo (el demiurgo), también
llamado “Dios creador del Universo”.
Jesucristo murió, decía Marcion, para romper la relación con el Dios creador (demiurgo) y así
permitir que los seres humanos retornaran a Zoé,
la vida eterna y verdadera con el Dios extrauniversal bueno, inefable y no creador de la materia
diabólica. Marcion utilizaba toda clase de
escritos de su época, sobre todo el Evangelio de Lucas corregido por Marcion. Esto empujó a la
iglesia a reunir organizadamente estos
escritos en lo que conocemos hoy como el Nuevo Testamento Canónico
LA INQUISICIÓN CATÓLICA
A fines del siglo 20 creemos que la Inquisición Católica fue “un mal momento de la Iglesia
Católica Romana”. Gran error.
En realidad la Inquisición continúa hasta hoy, aunque con procedimientos diferentes y con otro
nombre. En 1965 el papa Pablo VI la rebautizó como “La
Congregación para la doctrina de la fe” .
La Inquisición nació en 1231 con el Papa Gregorio IX. Habían nacido algunos grupos en el Sur
de Francia, en Italia y en los Balcanes, hoy Bosnia: los Cátaros,
los Valdenses, los Bogomiles y los Albigenses. Los campesinos les llamaban “los hombres
buenos” ya que trabajaban con ellos de sol a sombra, por un plato de
comida y por el derecho de enseñar “el retorno a Zoé”. Zoé es, en lenguaje evangélico griego, la
verdadera vida Cristiana.
Todos ellos fueron eliminados en holocausto. Holocausto es una palabra griega que significa
“quemar completamente” y no tenían que quedar ni los restos de los
huesos. Así trataba la Iglesia Católica Romana a los que se apartaban de sus dogmas y de la
autoridad de sus jerarquías.
La Inquisición se fundó como institución judicial (condenatoria) papal para combatir herejías del
siglo XIII como la alquimia, la astrología, la magia, la brujería y
la hechicería.
La Inquisición no esperaba que hubiera denuncias, cualquiera era objeto de sospecha como hereje
y podía ser arrestado y llevado a juicio. Las condenas oscilaban
entre rezar algunos Padres Nuestros hasta la pérdida de todas las propiedades y aún el holocausto.
Una vez arrestado, el denominado “hereje” no era abandonado al juicio de Dios, sino al juicio de
los obispos y cardenales “inquisidores”.
El fiscal traía “evidencia” a la cual sólo tenía acceso la defensa del hereje. El jurado, en cuyas
manos estaba condenar a muerte al hereje no tenía acceso a la
llamada “evidencia” y era objeto de manipulación verbal por parte del fiscal y de la defensa.
El Papa Inocencio IV autorizó la tortura de los arrestados en 1252 para lograr confesiones y
delación de “otros herejes” por parte del acusado. Bajo tortura los
“herejes” presentaban listas interminables de “herejes” (tantos como personas conocían). La
Inquisición Española fue la más apasionada, quizá, y bajo los reyes
católicos y el dominico Tomás de Torquemada fueron quemadas unas diez mil personas, sobre
todo los llamados “alumbrados”. Sevilla, Castilla, Aragón,
Valencia y Catalunia tenían tribunales de la Inquisición que competían entre sí por el número de
arrestos y condenas a la hoguera.
Había catorce tribunales en España y varios en Latinoamérica, sobre todo en México, Perú y el
Río de la Plata. José Bonaparte suprimió la Inquisición en España
por seis años (1808-1814). En 1814 el Rey Fernando VII la restauró y continuó hasta 1834
Entre los quemados más famosos estuvieron los Cátaros, Jan Hus y Giordano Bruno. El Papa
Pablo IV (1555-59) fue uno de los más feroces en implementar la
condena de muerte y las torturas. Lo hizo en nombre de terminar con la herejía, la falsa doctrina y
el error. Estaba equivocado todo aquel que no estuviera de
acuerdo con él.
A partir de 1908 la Inquisición se llamó “Santo Oficio” antes de recibir en 1965, el nombre que
hoy tiene :“La congregación para la doctrina de la fe”.
El Cardenal aleman Joseph Ratzinger (ahora Papa Benedicto 16) fue el prefecto de esa
Congregacion. Los teologos perseguidos fueron numerosos, entre ellos
Leonardo Boff de Brasil, Hans Kung, Ernesto Cardenal y Jacques Dupuis.
AÑOS 1300
AL 1400: Cautiverio de Babilonia: En 1303 el Papa Bonifacio VIII es arrestado en su palacio
familiar de Anagni por
tropas francesas. Los Papas residen en Avignon (Francia) hasta 1379. Estos 70 años de exilio
fuera del Vaticano se conocen como el
cautiverio de Babilonia remedando los setenta años de cautiverio de los judíos en Babilonia, unos
600 años antes de Cristo.
El turco Timur separa Oriente y Occidente con una “barrera islámica”. A pesar de todo esto los
monjes franciscanos y los dominicos
comienzan una campaña misionera en todo el mundo conocido.
IV) CISMA PAPAL (1409)