Download Adoracion Eucarística con niños

Catequesis sobre la Adoración Eucarística y Exposición del
Santísimo.
Es la devoción que tiene por objeto la adoración de Cristo Eucaristía.
Se fundamenta en la fe de la Presencia Real de Cristo en la Eucaristía.
La Eucaristía se expone en una custodia (ostensorio) para adoración.
¿Qué es adorar a Dios? Es reconocerlo como nuestro Creador y
nuestro Dueño. Yo le pertenezco. Es tomar conciencia de nuestra
dependencia de Él y como consecuencia, entregarnos a Él y a su
voluntad.
La adoración es lo que nos hace estar en la verdad. ¿Y cuál es nuestra
verdad? Que somos directamente dependientes de Dios. Al descubrir a
Dios como Creador descubrimos que todo lo recibimos de Él.
El Espíritu Santo nos enseña a orar. Pero el Espíritu Santo no puede
enseñarnos si no oramos, si no adoramos.
La oración de adoración nos hace dóciles a las inspiraciones del
Espíritu Santo. Pero para eso necesitamos del silencio.
En el silencio recibimos las inspiraciones del Espíritu Santo.
Vamos a gustar de un momento de adoración ante Jesús Eucaristía, en
silencio, realizando una oración profunda, aprovechando su presencia
para agradecerle y pedirle aquello que sólo nosotros conocemos.
Ofrecemos esta hora Santa por nuestro Papa Benedicto XVI, por sus
60 años de sacerdocio.
Hora Santa con Niños
Nos ponemos de rodillas para adorar a Jesús Eucaristía en esta
hermosa visita que nos regala. (Todos nos arrodillamos mientras se
expone el Santísimo)
“Alabado sea el Santísimo Sacramento del Altar,
Sea por siempre bendito y alabado Jesús Sacramentado”.
(Silencio)
Cantamos Tantum ergo
Tantum ergo sacraméntum
Venerémus cérnui.
Et antíquum documéntun
Novo cedat rituí
Praestet fides suppleméntum
Sénsuum defectuí.
Genitóri genitóque
Laus et jubilátio
Salus, honor, virtus quoque
Sit et benedíctio
Procedénti ab utróque
Compar sit laudátio.
Amén.
(Silencio)
(Repetimos las siguientes invocaciones o jaculatorias)
Bendito sea Dios
Bendito sea su Santo Nombre
Bendito sea Jesucristo verdadero Dios y verdadero Hombre.
Bendito sea el Nombre de Jesús.
Bendito sea el Sacratísimo Corazón.
Bendita sea su Preciosísima Sangre.
Bendito sea Jesús en el Santísimo Sacramento del Altar.
Bendito sea el Espíritu Santo Paráclito.
Bendita sea María Santísima la excelsa Madre de Dios.
Bendita sea su Santa e Inmaculada Concepción.
Bendita sea su Gloriosa Asunción.
Bendita sea María Santísima Madre de la Iglesia.
Bendito sea su castísimo esposo San José.
Bendito sea Dios en sus Ángeles y en sus Santos.
Amén
(Silencio)
Acto de Fe
Ponemos nuestra mirada, nuestro corazón y nuestra mente en
Jesús. Él está aquí, en la custodia en el Santísimo Sacramento. Yo
lo miro y El me mira. Hagamos un acto de fe, como los niños de
Fátima y decimos:
“Dios mío, yo creo, te adoro, espero y te amo. Y te pido perdón
por los que no creen, no adoran, no esperan y no te aman”.
Escuchamos música: canción “Jesús Amigo” o “Dios está aquí”
Pidamos ayuda a María, ella está siempre aquí adorando a su Hijo
con nosotros. Démosle gracias por el regalo de su Hijo.
Empecemos una oración en silencio…en secreto, desde el corazón
para agradecer a María por su ayuda.
(Silencio)
(Se puede rezar un misterio del Rosario)
(Jaculatoria)
“Todo a Jesús, por María…Todo a María para Jesús”
Jesús está REALMENTE PRESENTE en la Sagrada Hostia. Él nos
ama y quiere que nosotros lo amemos a Él. Él nos espera noche y
día en la pequeña Hostia. Él desea oírnos…nosotros lo adoramos
porque Él es Dios.
Alternar el silencio con pequeñas frases de amor a Jesús en el
Santísimo Sacramento.
“Te amo Dios mío”.
“Para Dios toda la Gloria”.
“Aquí me tienes porque me has llamado”.
“Creo Señor, aumenta mi fe”.
“Dios mío, te amo…pero ¡enséñame a amar!”
“Jesús, manso y humilde de corazón, haz mi corazón semejante al
tuyo”.
“Sea por siempre alabado y adorado el Santísimo Sacramento”.
Lectura Breve
“Tú estás en medio de nosotros, Señor, tu nombre ha sido invocado
sobre nosotros: no nos abandones, Señor, Dios nuestro.” (Jr. 14,9)
Silencio y continuar con agradecimiento.
Gracias Jesús por todas las bendiciones que hemos recibido.
Gracias por mi familia, mis amigos, mi salud.
Gracias por nuestro Papa Benedicto
sacerdocio.
Gracias Jesús por este Gran Regalo.
y por sus 60 años de
Te pedimos Jesús, amar mucho a nuestro Papa, y también te
pedimos por todos los sacerdotes, por las vocaciones y por nuestras
familias.
(Silencio)
Es tiempo para decir adiós y darle gracias a Jesús por su bendición
en el día de hoy. Ahora nos arrodillamos ante Jesús Eucaristía
hasta el momento en que es puesto en el Sagrario.
(silencio)
De pie, nos despedimos cantando.
Alabado sea el Santísimo.
Alabado sea el Santísimo
Sacramento del altar,
Y la Virgen concebida
Sin pecado original.
El manjar más regalado
De este suelo terrenal,
Es Jesús Sacramentado
Dios eterno e inmortal.
Celebremos con fe viva
Este pan angelical
Y la Virgen concebida
Sin pecado original.
Es el Dios que da la vida
Y nació en un portal
De la Virgen concebida
Sin pecado original.