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Mucho hemos escuchado sobre la contaminación, los cambios climáticos y el
calentamiento global.
La humanidad, el desarrollo tecnológico y la gestión eficiente de recursos, no fueron en
el transcurso de la historia, necesariamente de la mano. Pero no por un capricho del
hombre, la ignorancia muchas veces de los efectos devastadores que ciertas tecnologías
tenían para con nuestro medio ambiente, han sido los responsables de este hecho.
La pregunta es donde nos situamos hoy.
Uruguay en términos generales cuenta con buena calidad de agua y no presenta graves
problemas ambientales asociados a la calidad del aire. Sus suelos presentan gran
diversidad, estimándose que un 30% de los mismos se encuentran afectadas con niveles
de erosión que van de leve a moderada. Los principales aspectos ambientales asociados
a la actividad agropecuaria los constituyen el uso de agroquímicos y el manejo de
suelos. La gestión de residuos sólidos, hospitalarios y sólidos industriales es un área
que requiere una fuerte actuación para ordenar su gestión y minimizar los impactos
ambientales y a la salud que estos generan.
Montevideo ha comenzado incipientemente a utilizar la “bolsa naranja”, lo que se
enmarca en un programa de gestión de residuos. Y debemos apostar a más, apostar a un
País que contando con buenas condiciones ambientales, como lo es el Uruguay, avance
en el diseño de políticas públicas y modelos de gestión que contribuyan al desarrollo de
un Uruguay Productivo y sustentable.
Y el Uruguay del futuro será productivo y sustentable si el Uruguay del presente sabe
hacia donde va.
Necesitamos un modelo de País direccionado a la prosperidad y el progreso.
Un Uruguay independiente energéticamente con fuentes de generación de energía
modernas que no tengan connotaciones negativas en nuestro ambiente.
Un Uruguay con inversiones que generen más trabajo a nuestra población, y un
gobierno que fomente la inversión, y una economía abierta al mundo.
El presidente de la República manifestó el pasado martes que Uruguay debe comenzar
a pensar en la implementación de la energía nuclear. Hace tiempo que creemos que ese
es el camino energético que debe tomar nuestro País, y apoyaremos todas las acciones
que se tomen en ese rumbo. Un Uruguay moderno, productivo y que respete y proteja
nuestro ambiente es posible.
En próximas ediciones iremos explicando en que línea debemos desarrollar una
política ambiental, para el Uruguay en el que queremos vivir y dejarles a nuestros hijos.
Lisette Caffaro