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Trabajo Práctico N°6 Los pueblos de la Antigüedad En nuestro anterior trabajo práctico hemos visto surgir las primeras civilizaciones caracterizadas por la vida en ciudades y el uso de la escritura, entre muchos otros adelantos. Algunas, no todas, siguen evolucionando hasta convertirse en importantes pueblos de la antigüedad; cuentan con jefes políticos firmes y fuertes y con dominios que abarcan muchos kilómetros cuadrados; algunos no conformes con este poder, se dedican a la conquista y la ampliación de sus territorios; otros en cambio, aspiran a transformar sus estados en ricos y poderosos, sin importarles extenderse por otros lugares. Estamos hablando de pueblos que se destacan durante los primeros tiempos de la Edad Antigua. De todos los existentes hemos seleccionado cinco, para tratarlos de modo particular. Pasa que cada uno de ellos, nos han dejado elementos que hasta el día de hoy están presentes en nuestra propia civilización; por eso los hemos rescatado. Estos pueblos conviven al mismo tiempo y se conocen entre sí; a veces chocan y se enfrentan; a veces están en paz, se relacionan y comercian. Todos se encuentran más o menos cerca de los otros y cada uno presenta originalidades. Hablamos de los egipcios, mesopotámicos, fenicios, hebreos y persas. Dediquemos un momento a cada uno. Los egipcios: Son un pueblo ubicado en el noreste de África. Su territorio presenta la característica de estar rodeado de desiertos pero el paso del río Nilo, hace fértiles los lugares cercanos a él; éste termina desembocando en el Mar Mediterráneo en forma de delta. Los primeros habitantes de Egipto, integran comunidades neolíticas con poca relación entre sí. En el 3100 a.C., un personaje llamado Menes, las unifica bajo su autoridad y se transforma en el primer rey o faraón. Si Egipto se organiza bajo la autoridad de un rey, significa que su forma de gobierno es una monarquía. En la monarquía egipcia, el faraón tiene poder absoluto, teocrático y hereditario. Los sucesores, extienden el reino por el sur y por el este. La población, paga impuestos o tributos en granos o ganado; también trabajan para el faraón unas horas gratis por día; de este modo, contribuyen a mantener el estado. Son excelentes agricultores del trigo, aprovechando la fertilidad del río Nilo; manejan muy bien los conocimientos hidráulicos para llevar agua a zonas desérticas. En materia religiosa creen en muchos dioses, es decir, son politeístas, aunque el principal es Ra, al que identifican con el sol. Creen en la inmortalidad del alma, siempre y cuando se conserve los cuerpos; por esta razón, los más ricos, embalsaman y momifican a sus muertos. Consideran que el alma una vez desprendida del cuerpo, inicia un viaje hasta donde están los dioses; ellos juzgan cómo se ha comportado en vida la persona; si ha obrado bien, se gana la vida eterna pero si no lo ha hecho, se condena definitivamente. Son animales sagrados al buey, el gato y el cocodrilo. Los egipcios sobresalen por sus grandes construcciones funerarias de piedra conocidas como pirámides; en ellas sólo se depositan los cuerpos de la gente importante; se destacan las de Keops de más de 160 metros, Kefrén y Micerinos; también hacen templos o esculturas monumentales como la esfinge de Gizeh. Utilizan la escritura jeroglífica en la que las ideas se representan con figuras o símbolos; esta escritura no es utilizada por todo el pueblo; muy por el contrario, sólo la conocen sacerdotes especialistas llamados “escribas”, generalmente al servicio del faraón de turno. Cuentan con un calendario solar. Los egipcios son uno de los pueblos más poderosos de la época. La muerte del faraón Ramsés III en 1116 a.C. inicia la decadencia del reino. Hemos heredado de ellos sus grandes conocimientos hidráulicos (en el manejo del agua) y sus excelentes conocimientos en arquitectura. Los mesopotámicos: a lo largo de la historia, varios pueblos se asientan en la región conocida como “Mesopotamia asiática”, llamada así por estar ubicada entre los ríos Tigris y Éufrates; el motivo es la impresionante fertilidad de sus tierras. Se trata de la zona ubicada al sudoeste de Asia, perteneciente al Cercano Oriente. Entre los pueblos que la habitan sucesivamente mencionamos a los sumerios y acadios, entre el 3500 y 3000 a.C., instalados muy cerca del golfo Pérsico en ciudades estados; los babilonios, llamados así, porque establecen la capital de su imperio en la ciudad de Babilonia (la de los jardines colgantes) y con uno de los emperadores más destacados, Hammurabí. Posteriormente, se instalan los asirios que dominan el imperio babilónico y crean un imperio militar de enorme extensión, con capital en Nínive. Serán posteriormente derrotados por los caldeos; y éstos caen ante el avance de los persas. Entre los pueblos mesopotámicos los reyes Babilonia y emperadores son jefes políticos y religiosos. El emperador Hammurabí hace un importante código (conjunto de leyes): establece severas penas según “la ley Talión” (ojo por ojo, diente por diente). En general, los habitantes de la Mesopotamia manejan muy bien la agricultura y construyen diques y canales para evitar las inundaciones y aprovechar mejor el agua. Son politeístas; adoran al sol, la luna, las estrellas. Los sacerdotes ocupan un importante espacio en la sociedad; son buenos adivinos y predicen el futuro observando los astros (astrología); anticipan eclipses y observan los astros (astronomía). Crean un calendario que mide el año con gran exactitud. Son constructores de palacios y templos y hacen muy buenas esculturas especialmente, bajorrelieves. Cuentan con una escritura llamada cuneiforme, es decir, con forma de cuña, que hacen sobre tablillas de barro. Estos pueblos nos han legado sus conocimientos en hidráulica, en astronomía y la astrología. Los Hebreos: se trata de tribus que alguna vez vivieron en la Mesopotamia y que se instalan en Palestina, al este de Asia, en el Cercano Oriente, entre 1500 y 1250 a.C. Los tribus, con el tiempo, se unifican bajo la autoridad del rey Saúl, quien es sucedido por David y Salomón. Terminan siendo conquistados por los asirios primero y luego por los caldeos en el 586 a.C. y sus tierras tomadas. Se trata de un pueblo pastor, dedicado a la cría de medianos animales como ovejas y corderos. Por un tiempo son politeístas pero luego se transforman en monoteístas. Su Dios único es Yahvé o Jehová. Escriben sus tradiciones y creencias en su libro sagrado, el Antiguo Testamento. Se destacan por sus escritos en literatura, filosofía y derecho. Nos han dejado la base de nuestra religión; Cristo es hebreo. Los fenicios: se ubican al norte de los hebreos, en el sudeste de Asia, en el Cercano Oriente. No integran un reino unificado sino que son un conjunto de ciudades independientes que comparten la misma cultura; destacamos a Biblos, Sidón y Tiro. En el siglo VIII a.C., caen en poder de los asirios. Son destacados navegantes del mar Mediterráneo de día o de noche, guiados por las estrellas. Establecen, en todos los lugares conocidos, puestos de comercio y depósitos llamados factorías; también fundan ciudades en zonas alejadas de su territorio; la más conocida, Cartago, en el norte de África. Utilizan un sistema de comercio conocido como trueque mudo; no conocen la moneda. Son politeístas y ofrecen a sus dioses diversas ofrendas, inclusive, sacrificios humanos. Entre sus inventos destacamos el vidrio y un alfabeto de 22 signos del que deriva el nuestro. Los fenicios aportan a la civilización occidental sus conocimientos en navegación, el alfabeto y el uso del vidrio para hacer recipientes. Los persas: se ubican en el actual Irán; son un pequeño pueblo hasta que el rey Ciro conquista a las naciones vecinas y crea un gran imperio en el 539 a. C.; un sucesor, Darío, continúa expandiendo el territorio. Al imperio se lo divide en provincias o satrapías a cargo de sátrapas; el emperador tiene poderes absolutos. A cada pueblo que conquistan le cobran tributos. En materia religiosa son dualistas; es decir, creen en dos dioses que están permanentemente enfrentados; el dios del bien y el dios del mal que están en constante lucha; creen que finalmente, el dios del bien triunfará y los hombres se liberarán del mal. Dado su amplísimo territorio, construyen muy buenas rutas, como la carretera real, de 2400 km., que une las capitales del Imperio: Susa, Ecbatana, Persépolis y Pasargada. Son buenos comerciantes por tierra y practican el comercio ambulante, conocido como “feria persa” Inventan la moneda. Crean un alfabeto de 39 letras y utilizan el calendario solar de los egipcios. El Imperio persa sucumbe ante los ejércitos de Alejandro Magno de Macedonia, en el 331 a.C. Nos han dejado la moneda y el modo de comercio ambulante. Lee el texto sobre los pueblos de la antigüedad y resuelve: 1) Completa el siguiente cuadro comparativo: Pueblo Ubicación Aporte a la civilización occidental Egipto Mesopotamia Fenicia Palestina Persia 2) Observa las siguientes imágenes y compara los tipos de escritura colocando de qué pueblo son en cada caso: …………… …………………………………. …………………. 3) Responde: a-Cuáles son las tres características del poder del faraón egipcio ? Explícalos. B -Qué pueblos habitan la Mesopotamia; por qué buscan este lugar; cuáles de ellos forman imperios ? c- Qué es la ley del talión y quién la establece ? d-Qué relación hay entre los hebreos y los cristianos ? e-Explica brevemente qué es el trueque mudo y aclara qué pueblo lo practica. f- A qué se llama comercio a lo “feria persa”?