Download Probióticos en Pediatría

Document related concepts

Lactobacillus acidophilus wikipedia , lookup

Lactobacillus rhamnosus wikipedia , lookup

Microbiota normal wikipedia , lookup

Lactobacillus casei wikipedia , lookup

Alimento probiótico wikipedia , lookup

Transcript
Probióticos en Pediatría
Probiotics in Pediatrics
Drs.: Alfredo Mendoza Amatller*, Kurt Paulsen Sandi**, Samara Gorena
Antezana***
* Pediatra Alergólogo. Jefe de Emergencias del Hospital del Niño "Dr. Ovidio Aliaga Uria¨. La Paz Bolivia.
** Médico Pediatra. Hospital Nuestra Señora de La Paz.
*** Médico Pediatra. La Paz - Bolivia.
Introducción
La importancia de la microflora intestinal ha sido tomada en cuenta en los últimos años,
particularmente con respecto a las vías en las cuales el microambiente puede ser
manipulado para mejorar la salud, esto ha sido facilitado por el desarrollo de métodos
moleculares de análisis complejos de las comunidades bacterianas.
El uso de microorganismos vivos en productos fermentados no es una práctica moderna, la
historia de los probióticos se remonta hace mas de 2000 años con el consumo de leches
fermentadas y en el año 1907, Metchnikoff inició los primeros estudios científicos acerca del
uso de probióticos.
Los probióticos son ingredientes alimentarios, generalmente oligosacáridos, que escapan a
la digestión en el tracto gastrointestinal alto, y selectivamente estimulan el crecimiento de
bifidobacterias y lactobacilos en el colon, que cambian la composición y activan el
metabolismo del microhábitat intestinal, además de modular la reactividad del sistema
inmune; actúan en contra de microorganismos patógenos protegiendo al huésped de
desarrollar infecciones, diarrea asociada a antibióticos, síndrome de intestino irritable,
alergia intestinal, diarrea por rotavirus, intolerancia a la lactosa, vaginitis, infecciones
por Helicobacter pylori, enfermedad de Crohn y colitis ulcerativa.
Desarrollo de la flora intestinal
La colonización microbiana se inicia inmediatamente después del nacimiento, a partir de la
flora intestinal materna y microorganismos del medio ambiente. Los recién nacidos
presentan una secuencia de colonización, siendo la primera fuente de microorganismos la
flora materna vaginal y fecal que generalmente es ingerida en el nacimiento; primero se
colonizan con enterobacterias y cocos gram positivos, las bacterias anaerobias llegan al
segundo día de vida; posteriormente las bifidobacterias comienzan a predominar cuando los
niños son alimentados con leche materna o leches artificiales. El establecimiento
de Bacteroides sp ocurre durante la primera semana de vida a diferencia de los lactobacilos
que aparecen un poco mas tarde; luego se establece un equilibrio en el microhábitat
intestinal entre los diferentes microorganismos presentes. Después de la ablactación la
composición de la flora intestinal se hace más compleja y se va pareciendo a la del adulto.
La flora intestinal previene y limita el crecimiento excesivo de la flora de patógenos
intestinales y por otro lado la presencia de antígenos de la flora intestinal normal estimula
una respuesta inmune local y sistémica la cual incluye diferentes inmunoglobulinas A.
Las bifidobacterias son los microorganismos predominantes en las evacuaciones de los
lactantes alimentados con leche materna; son microorganismos anaerobios que fermentan
glucosa, galactosa, fructuosa, esta fermentación genera acidez intestinal que inhibe el
desarrollo de bacterias patógenas.
El patrón adulto de la flora intestinal es muy complejo y consta con mas de 400 especies
bacterianas. Los lactobacilos constituyen parte de la flora intestinal normal de los humanos.
Probióticos
Los microorganismos que son probióticos en humanos incluyen levaduras,
bacilos, Escherichia coli, enterococos y los más comúnmente usados bifidobacterias y
bacterias ácido lácticas tales como lactobacilos, lactococos y estreptococos.
Algunas características son esenciales o deseables en un probiótico:
1. Tener un efecto benéfico en el huésped.
2. No ser patógenos ni tóxicos.
3. Proteger contra microorganismos patógenos mediante un proceso de exclusión
competitiva
4. Secretar productos inhibitorios tales como ácidos o substancias similares a los
antibióticos
5. Ser capaz de sobrevivir y ser metabolizado en el intestino.
6. Adherirse a la mucosa del epitelio intestinal
7. Colonizar temporalmente sitios del tracto gastrointestinal
8. Contribuir a la nutrición del huésped mediante, por ejemplo la producción de
vitaminas.
9. Ser aislado de la misma especie que se pretende utilizar
El probiótico ideal debería también proteger contra cambios en la permeabilidad intestinal,
manifestar efectos anticancerígenos como los encontrados con el lactobacillus
salivaris y Enterococcus faecium; asi como ser capaces de estimular el sistema inmune del
huésped.
La alteración estudiada más determinante quizá sea la diarrea aguda en los niños. Por
ejemplo, se ha demostrado que Lactobacillus rhamnosus GG reduce significativamente la
intensidad y la duración de la enteritis vírica aguda.
De acuerdo a la experiencia hasta hoy obtenida con el uso de probióticos, se ha establecido
que el uso temprano de los mismos en la gastroenteritis agudas produce menor duración
del proceso, previene o acorta la hospitalización del paciente y con ello las posibles
complicaciones de esta patología.
En un estudio randomizado a doble ciego contra el uso de placebo en pacientes
hospitalizados, utilizando un suplemento alimentario a la fórmula láctea con Bifidobacterium
bifidum y Streptococcus thermophilus, utilizado por más de 17 meses demostró que la
prevalencia de rotavirus fue significativamente menor en las que no usaron el probiótico.
La inhibición de la adherencia a células y la invasión a células por bacterias patógenas
involucradas en procesos diarreicos en niños y en casos de diarrea del viajero, por acción de
lactobacilos ha sido informada con cepas delactobacillus acidophilus que inhiben la
adherencia a las células por bacterias enterotoxigénicas, enteropatógenas de Escherichia
Coli, esta inhibición competitiva también se demostró con L. Casei, rhamnosuscepa GG y L.
Casei cepa Shirota 4.
Informes recientes han documentado la producción de substancias con acción
antimicrobiana por algunas cepas de Lactobacillus de origen humano, con lo que se apoya la
actividad antibacteriana. Ciertos compuestos sintetizados por Lactobacillus se relacionan a
la familia de las bacteriocinas. Las bacteriocinas son un grupo de inhibidores peptídicos
cortos, estables al calor (pediocin), y péptidos largos no estables al calor (helveticin); estas
substancias antibacterianas son productos del extremo metabólico de fermentación ácida
láctica, ácidos lácticos y acéticos, y peroxido de hidrógeno que inhiben el crecimiento
patógeno.
En pacientes hospitalizados por cuadros de diarrea por rotavirus se demostró que el uso
de Lactobacillus cepa GG, reduce la severidad (por 1.6 deposiciones al día) y la duración
(por 0.7 días), sin embargo tales datos parecen insuficientes para aconsejar su uso
rutinario.
Finalmente una revisión sistemática de la literatura realizada por el grupo colaborativo
Cochrane ha concluido que los probióticos parecen ser útiles como terapia adjunta a la
rehidratación en el tratamiento de diarreas infecciosas agudas en adultos y niños, sin
embargo se específica que son necesarias más investigaciones para la información del uso
de regímenes particulares de probióticos en grupos de pacientes específicos.
Los mecanismos de acción mediante los cuales estas substancias podrían resultar útiles en
el tratamiento de las diarreas agudas son:





Producción de sustancias antimicrobianas, que inhiben un gran número de bacterias
patógenas, así como peróxido de hidrógeno que tiene una función bactericida.
Competencia por nutrientes, un ejemplo puede ser el consumo de monosacáridos por
los probióticos.
La resistencia a la colonización ocurre inhibiendo la adhesión bacteriana y
disminuyendo la permeabilidad intestinal.
Modificación de los receptores de toxinas, mediante de un mecanismo de inhibición
enzimática.
Mejoramiento del sistema inmune, gracias a la habilidad de unirse a células
epiteliales se puede estimular la producción de anticuerpos benéficos.
Diarrea por antibióticos
El crecimiento bacteriano patógeno es el efecto adverso más común en el uso de
antibióticos y una de las indicaciones más comunes para el uso de probióticos.
Aproximadamente el 20% de los pacientes que reciben antibióticos presentan este
problema, que esta asociado al aumento en el número de internaciones, mayor costo
médico, mayor riesgo de contraer infecciones nosocomiales. Un tercio de la incidencia de
diarrea asociada a uso de antibióticos es causada por Clostridium difficile; se piensa que los
antibióticos alteran la flora intestinal al destruir los organismos responsables de la
producción de los ácidos grasos que se absorben en el colon, de esta forma se acumulan
moléculas más grandes que no son absorbidas y producen efecto osmótico en el colon,
resultando la diarrea. Algunos probióticos (S. Boulardii, lactobacilos y Bifidobacterias) han
demostrado disminuir el número de deposiciones asociadas con el uso de antibióticos. Un
reciente meta-análisis de nueve ensayos clínicos placebo controlados sobre el uso de
probióticos en la prevención de diarrea asociada a antibióticos ha mostrado un beneficio
consistente; los principales probióticos utilizados fueron el Saccharamyces boulardi y el
género lactobacilos; los odds ratio a favor de la reducción de la diarrea fueron
significativamente mejorados a 0.34 para la levadura y 0.37 para el lactobacilo.
Función inmune y alergia intestinal
Quizás más inexplicable es el beneficio de los probióticos en el manejo de la alergia infantil;
un estudio cardinal, en el cual se han tomado en cuenta a 159 mujeres embarazadas con
una historia familiar de eczema, rinitis o asma, fueron randomizadas a recibir placebo
o lactobacillus GG diariamente por 4 semanas antes del parto; después del mismo, las
madres quienes practicaban la lactancia materna continuaban a tomar las cápsulas o las
mismas eran administradas directamente a los lactantes hasta los seis meses de vida;
posteriormente a los 2 años de vida se ha observado que la frecuencia de eczema en los
niños se había reducido prácticamente a la mitad (46% a 23%). Sin embargo el mecanismo
no pudo ser definido, pero el tiempo de la exposición a los probióticos es importante, las
primeras bacterias en colonizar un intestino previamente estéril podría inducir cambios en la
glucosilación mucosal y en la expresión génica de los enterocitos estableciendo el primer
orden de defensa contra patógenos. Otros reportes han evidenciado que la administración
de probióticos incrementa el potencial inmunoprotectivo de la leche materna
(transformando el factor de crecimiento b2) y que los lactantes quienes tendrían mayor
beneficio serían aquellos con niveles elevados a nivel de cordón umbilical de Ig E.
Otros usos
Existen numerosos estudios acerca del uso de múltiples esquemas antibióticos para el
tratamiento de la infección por H. Pylori; los efectos colaterales de estos antibióticos son
considerables en el intestino, por eso no es sorprendente que las bacterias probióticas
deberían constituir una alternativa segura; la actividad anti-Helicobacter de muchas cepas
probióticas ha sido demostrada incluyendo recientemente a B. Subtilis, conocida por la
acción antagonista contra especies de la familia de Enterobacteriaceae.
En la enfermedad inflamatoria intestinal, especialmente en la colitis ulcerativa y en las
infecciones del tracto urinario, muchas cepas de probióticos han demostrado constituir una
alternativa segura a la terapia convencional.
Referencias
1. Allen SJ, Okoko B, Martinez E, Gregorio G, Dans LF. Probiotics for treating infectious
diarrhoea (Cochrane Review). In: The Cochrane Library, Issue 2, 2004. Chichester, UK:
John Wiley & Sons, Ltd.
[ Links ]
2. Arguelles M, Borovoy J, Toussant G, García J. Uso de probióticos en niños. Bol Med Hosp
Infant Mex 2000; 57:454-61.
[ Links ]
3. D'Souza AL, Rajkumar C, Cooke J, Bulpit CJ. Probiotics in prevention of antibiotic
associated diarrhoea: meta-analysis. Br. Med J 2002; 324: 1361-4.
[ Links ]
4. Kaila M, Isolauri E, Saxelin M, Arvilomni H, Vesikari T. Viable versus inactivated
Lactobacillus strain GG in acute rotavirus diarrhoea. Arch Dis Child 1995; 72:513.
[ Links ]
5. Kalliomaki M, Salminen S, Arvilommi H. Probiotic in primary prevention of atopic disease:
a randomised placebo-controlled trial. Lancet 2001; 357: 1076-9.
[ Links ]
6. Macfarlane GT, Cummings JH. Probiotics, infection and inmunity. Curr Opin Infect Dis
2002; 15: 501-6.
[ Links ]
7. Shanahan F. Probiotics en inflammatory bowel disease. Gut 2001; 33: 7104.
[ Links ]
8. Schultz M, Sartor RB. Probiotics and inflammatory bowel diseases. Am J Gastroenterol
2000; 95:19-21.
[ Links ]
9. Szajewska H, Mrukowicz JZ. Probiotics en the treatment and prevention of acute
infectious diarrhea in infants and children: a systematic review of published randomized,
double-blind, placebo-controlled trials. J Pediatr Gastroenterol Nutr 2001; 33: S 1725.
[ Links ]