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B.4
1- El núcleo esencial de la espiritualidad congregacional – Amor personal de
Cristo – lleva consigo el trato interpersonal con El:

Oración, trato con Jesucristo:
“El que verdaderamente a Dios ama, no puede vivir lejos de Él, sino le
acompaña, le sigue… en todas partes lo busca.
Nada más cierto ni más claro que esta condición del amor de Dios,
como de todo amor.
…De muchas maneras se manifiesta si poseemos esa condición del
verdadero amor divino; pero principalmente se da a conocer, entre otras,
por tres cualidades características del verdadero amador.
Es la primera el afecto a la oración. Orar es elevarse de la tierra al cielo; es penetrar en el palacio del Altísimo… es ponerse en contacto y en
comunicación íntima con Él.
Es pues, la oración, un medio de acercarse, y por cierto muy mucho, a
nuestro Padre Celestial, por lo cual fue siempre la oración la delicia de las
almas santas, quienes en vez de retraerse de ella, la buscaban…
…si alguna vez conversamos con Él, de corazón a corazón, salimos de
la entrevista con el alma llena…
Es la segunda cualidad del amador verdadero, nacida del deseo de
morar cerca de Cristo, sentir gusto indecible al pie del Tabernáculo…
Tercera cualidad del amor de buena ley es andar siempre en la presencia divina…” (Meditaciones, págs. 422ss)

Medio de conocimiento de Cristo:
Y ante todo importa que se predique Él mismo, revelándose a las almas, y mostrándoseles tal como es en las intimidades de la comunicación
secreta y oculta con ellas.
Jesucristo quiere hacer esto, y lo hace efectivamente, mas de ordinario
esto no acaece, sino cuando se le pide por medio de una oración fervorosa
y constante.
Si, pues, rogamos a Cristo que venga a nosotros su reino, el reino de su
Corazón, y que al efecto se dé a conocer a las almas que pueden serle fieles, lo cumplirá; y merced a nuestras plegarias habremos conseguido lo
que indicábamos; que el Corazón de Jesús se predique a sí mismo. (Pastoral, Málaga, 31-5-1895, pág. 79)

Medio de identificación con Cristo:
Transfigúrase en efecto por su medio todo el hombre.
…En una palabra, la comunicación íntima, cordial, frecuente con el
Dios de la Hostia es medio eficacísimo para hacer santos. Aquella palabra
de San Pablo: Donec formetur Christus in vobis, puede aplicarse al culto y
a los homenajes a Jesucristo, a la devoción eucarística.
El que la profesa de veras y hace esfuerzos para que no le falten ninguno de sus caracteres propios, puede estar cierto de que, si persevera,
conseguirá que Cristo se forme en él, o tomará él la forma de Cristo, en lo
que consiste la santidad. (Pastoral, Sevilla, 1896, pág. 96)
2- Dimensión contemplativa de la vida de las Esclavas. Intención explícita del
Fundador en este punto:
…A la oración debe acompañar la acción.
Teniendo yo en cuenta, y no sólo yo, sino otros también, la poca importancia que se da a la vida de contemplación cuando se está consagrado a la vida de acción, y viceversa, me propuse al formar la Congregación
equilibrar las dos vidas, unirlas de tal modo, que de las dos se formase
una sola; éste fue mi fin, para que llenas del espíritu de Dios, y abrasados
vuestros corazones de amor divino, al tratar con las niñas, al ejercer la caridad, pudiérais comunicarles esa misma caridad. (Pláticas, Tomo I, pág.
796)
DOS HORAS DE ORACIÓN1
Sobre el tiempo de oración en la Congregación, encontramos este testimonio
escrito:
[Málaga] 7 mayo 1887
Mi muy querida hija en N.S.J.C.:
Me contó don Jerónimo su conferencia con el Sr. Dávila, y opino que
debe V. hablar con este Sr. a quien creo podrá V. fácilmente persuadir.
También el P. Moga me ha hablado de la conferencia del P. Castellano con
el Provincial: este asunto no lo veo yo tan a nuestro favor como lo ve el P.
1
Tomado del comentario que H. Eloísa Planas en R.F a la carta mencionada
Moga; entiendo que va a ser preciso, si gente extraña no ha de venir a
desnaturalizar nuestra obra, que todo lo hagamos por nuestra cuenta, sin
servirnos de los demás, sino en concepto de auxiliares. Ya el P. Castellano
encontraba incompatibles con los trabajos de los talleres las dos horas de
oración, y en general todo el plan de la mañana; lo cual no me hizo chispa
de gracia, porque si en otras cosas estoy dispuesto a transigir, en lo que
concierne a la vida espiritual de mis Esclavas, no.
Es la primera vez que, con motivo de un intenso trabajo, se pretende
reducir el tiempo de oración de las Esclavas, y no será la única. Aquí, don Marcelo se muestra enérgico como en pocas ocasiones: "no está dispuesto a transigir, en lo que concierne a la vida espiritual de sus Esclavas".
Hubo otra ocasión en nuestra Hª Congregacional, casi 50 años más tarde, en la que se pretende -siempre con la misma razón del trabajo- disminuir
de nuevo el tiempo dedicado a la oración, modificando incluso las Constituciones
En la primavera de 1933, M. Amada, entonces Superiora General, viajó
a Roma para entrevistarse con el recién nombrado Protector de la Congregación, Cardenal Segura. A él expone que, dado el mucho trabajo que tienen las
religiosas que están en el Colegio y las que estudian, no pueden asistir a todos
los actos de Comunidad (así se llamaba a los actos comunitarios) ni aun hacerlos en particular "por lo cual se le ocurría si sería conveniente modificar las
Constituciones dejando sólo½ hora de oración por la mañana y ½, por la tarde"... No pareció conveniente esta solución al Cardenal Segura sugiriendo que
más bien se dispensase a dichas religiosas del rezo del oficio o lectura, alegando, -refiriéndose a nuestro tiempo de oración-, que "el alma necesita y suspira
por ese tiempo para expansionarse con Nuestro Señor y contarle todas sus
necesidades" (Act.Cons.Gral.30-6-1933)
Don Marcelo, en el cielo, sigue sin transigir con nada de lo que toque a
la vida espiritual de sus Esclavas. Este tiempo tan prolongado de oración -dos
horas-, es algo que está profundamente arraigado en la Congregación.
Cuando con motivo del Capítulo General Especial 1968-69, para adaptar las Constituciones al Concilio Vaticano Il se hizo un sondeo a la Congregación y se preguntó a todas las religiosas sobre el tiempo que dedicado a la
oración personal, el 90,7% se pronuncia por las dos horas de oración.
REFLEXIÓN PERSONAL
1.- Lectura de la ficha
2.- Según Marcelo Spínola en estos o en otros textos que conozcas, ¿Cuál es el
sentido de tener tanto tiempo de oración personal?
3.- ¿Percibes que la Congregación está siendo fiel a esta intención del Fundador?
4.- ¿Descubres en ti esta valoración de la oración personal?
5.- ¿Qué conclusiones sacas?
ESQUEMA DEL ENCUENTRO EN GRUPO
1.- Oración a partir del poema de Consuelo Ojeda
Señor,
deja a tu intimidad
entrar en mi intimidad.
Todo eso tuyo
que respira amor,
todo tu estilo
que me anima a dar,
todas las cosas
que dejan tu paz,
haz que las viva
en mi corazón.
Interioriza
Tu manera de ser
en mi modo de ser,
en lo que es mío,
en lo que tengo yo.
Que yo deje de ser
y tú quedes, Señor.
Todo es tan relativo
en el vivir
cuando escucho tu voz,
y me llega tu luz
cuando siento que eres
en todo gratuidad...
Yo te quiero rogar
que me alcance tu amor.
Yo vengo a pedir
por tu inmensa bondad
que me alcance tu amor
y tu paz.
Consuelo Ojeda
2.- Puesta en común de la reflexión personal
3.- Según Marcelo Spínola en estos textos u otros que conozcas ¿cuál es el
sentido de dedicar tanto tiempo a la oración personal?
4.- ¿Descubres en ti esta valoración de la oración?
5.- ¿Percibes que la Congregación está siendo fiel a esta intención del Fundador?
6.- Conclusiones de lo dialogado.