Download tema 7: la primera guerra mundial (1914-1918)

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TEMA 7: LA PRIMERA GUERRA
MUNDIAL (1914-1918) Y LA
ORGANIZACIÓN DE LA PAZ
LA PRIMERA GUERRA MUNDIAL ( 1914 – 1918 )
INTRODUCCIÓN
La Primera Guerra Mundial fue el conflicto militar que comenzó el 28 de julio de 1914,
primero como enfrentamiento localizado entre el imperio austro-húngaro y Servia (que fue la
causa inmediata del inicio de las hostilidades, debido al asesinato del archiduque Francisco
Fernando en Sarajevo, Bosnia, entonces parte del imperio austro-húngaro y en la actualidad:
Bosnia-Herzegovina), al considerar el gobierno austro-húngaro que este asesinato había sido
obra de la organización antiaustriaca denominada Gran Servia, que atentaba constantemente
contra los intereses de este imperio y era lugar de acogida de todos los nacionalistas
perseguidos por los austro-húngaros. Esta situación se convirtió posteriormente en un
enfrentamiento europeo al declarar Rusia la guerra a Austria-Hungría, al considerarse
Rusia la protectora de los pueblos eslavos balcánicos, entre ellos, l o s s e r v i o s (1de agosto
de 1914), de modo que el resorte de las alianzas supusieron la declaración de Guerra entre los
países de la Triple Alianza y de la Triple Entente.
La Triple Alianza fue formada, en 1882, por Alemania, Austria-Hungría e Italia,
surgida en el segundo sistema de Bismarck, cuyo objetivo era aislar a Francia.
La Triple Entente fue formada, en 1907, por Gran Bretaña, Francia y Rusia. Este
acuerdo rompía el aislamiento de Francia, por un lado, al unirse a Rusia y más tarde por otro,
al unirse a Gran Bretaña y quedar definitivamente perfilada la alianza, como medio para
impedir el expansionismo alemán. También era necesario un acuerdo franco-británico tras
los sucesos imperialistas ocurridos en Fachoda en 1898.
Posteriormente este conflicto se convirtió en guerra mundial en la que participaron 32
naciones, divididas en países aliados o Triple Entente (entre las que se encontraban Gran
Bretaña, Francia, Italia, Rusia y Estados Unidos, entre otras naciones) e imperios centrales o
Triple Alianza (formada por Alemania, Austria-Hungría, el Imperio otomano y Bulgaria).
La Gran Guerra fue el mayor enfrentamiento entre naciones que jamás había existido
hasta entonces. Su duración, el empleo de nuevas armas y las estrategias de guerra (la ciencia
y la técnica se pusieron al servicio de los fines bélicos), el amplio ámbito geográfico donde se
desarrolló y su carácter de guerra total son algunos de sus rasgos distintivos.
Ámbito sociolingüístico. Pruebas Libres de Bachillerato.
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Causas de la Gran Guerra
El detonante de esta explosión bélica lo produjo, como ya hemos señalado, el asesinato en
junio de Francisco Fernando, archiduque de Austria y heredero del trono Austrohúngaro.
Tras el ultimátum de los austriacos a Servia se ponen en marcha los sistemas de alianzas, al
declarar Rusia la Guerra a Austria-Hungria. De este modo el resorte de las alianzas se puso en
marcha, y en el verano de 1914 las grandes potencias de la Triple Entente y la Triple
Alianza terminaron declarándose la Guerra. Alemania, deseosa de una Guerra para conseguir
colonias apoyó a Austria-Hungría. Francia e Inglaterra, aliadas de Rusia, aunque no deseaban la
Guerra, no podían permitir que la Triple Alianza venciese a Rusia, pues ello reforzaría aún más
a Alemania.
Comienza entonces en Europa una oleada de fervor patriótico de gran euforia, alentada por
la prensa y la opinión pública que acogieron con gran entusiasmo una situación bélica que
todos pensaron que sería corta y que la victoria estaría a su favor. Junto al motivo del inicio del
conflicto, había también una serie de causas estructurales que venían establecidas desde el
siglo XIX:
-Proyección de los problemas coloniales: Gran Bretaña y Francia son un freno
para la expansión colonial y económica que Alemania buscaba desde el momento de
su unificación. Aunque Francia, Gran Bretaña y Alemania eran países enormemente
industrializados, Alemania adelantaba en producción industrial a las otras dos
potencias y sin embargo, su imperio colonial era mucho más reducido y esparcido,
por lo que su desarrollo futuro estaba hipotecado, por lo que Alemania deseaba un
nuevo reparto colonial al que se negaban sus grandes beneficiaries: Gran Bretaña y
Francia.
- Problemas de los nacionalismos: Austria-Hungría se disputa con Turquía y Rusia
el predominio en los Balcanes.
- Carrera armamentística: La Paz Armada y rivalidad entre las potencias:
- Enfrentamiento entre Alemania y Francia por la pérdida de las regiones
francesas de Alsacia y Lorena en la guerra franco-prusiana.
- Alemania tiene problemas fronterizos con Rusia por los territorios polacos.
- Crisis marroquíes (1095 y 1911, intento alemán de penetrar en Marruecos)
- Rivalidad entre Alemania y Gran Bretaña
- Organización de los países europeos más industrializados en dos grandes
bloques: Triple Alianza y Triple Entente.
- Decadencia de los Imperios Austro-Húngaro y Otomano, que facilita el
dominio de Alemania en Europa Central.
Desarrollo de la Guerra
En el desarrollo de la guerra distinguimos tres fases o etapas:
1. La ofensiva alemana o guerra de movimientos (1914).
2. La guerra de posiciones o de desgaste (1915-1916) y la crisis de 1917.
3. Las ofensivas finales 1918 y el fin de la guerra.
Las operaciones militares comenzaron a desarrollarse en Europa en tres frentes: el
occidental o franco-belga, el oriental o ruso y el meridional o servio (éste ultimo menos
importante).
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La ofensiva alemana o guerra de movimientos (1914)
Siguiendo el plan Schlieffen (que consistía en un ataque rápido sobre Francia penetrando
por Luxemburgo y Bélgica), los alemanes, atravesando Bélgica, llegaron en un mes cerca de
París; la batalla del rio Marne les obligó a detenerse. Pero establecieron un frente de 800
kilómetros desde el canal de la Mancha hasta Suiza, que dio paso a la guerra de posiciones.
En el este los rusos sufrieron grandes pérdidas, pero en el frente occidental consiguieron
evitar el hundimiento del frente francés gracias a una tenaz resistencia.
La guerra de posiciones (1915-1916) y la crisis de 1917.
Las previsiones de una guerra corta fallaron. Los estados tuvieron que movilizar sus
propios recursos económicos hacia la guerra y demandaron recursos de los países
neutrales ( en los dos primeros años del conflicto, EE.UU, concedió casi 2.000 millones de
dólares a la Entente y, sin embargo, sólo cinco a Alemania) para buscar ayuda de todo tipo.
En tierra había que mantener las posiciones conquistadas. Para ello recurrió a las
trincheras, que fueron una de las principales novedades de la guerra: se excavaron kilómetros
de fosos que se defendían con ametralladoras, para desalojarlas se emplearon nuevas armas,
como los lanzallamas o los gases tóxicos, los tanques, etc. A partir de 1916 se inició la guerra
de desgaste con las batallas de Verdún (que se cobró la vida de ochocientos mil
combatientes ) y el Somme.
En el mar se violó la neutralidad. Alemania y sus aliados se vieron obligados a
contar con sus propios recursos porque sus oponentes impidieron a los países neutrales
aprovisionarles de alimentos, sometiéndolos así al bloqueo marítimo. La batalla de
Jutlandia fue el enfrentamiento por mar más importante donde se enfrentaron la marina
británica y la alemana, con un resultado indeciso. Los alemanes reaccionaron potenciando la
guerra submarina, ante el bloqueo marítimo que los aliados habían impuesto sobre su país.
El año 1917 fue crítico. Se caracterizó por el abandono de Rusia; la revolución de
febrero llevó a la abdicación del zar. El Gobierno provisional prosiguió la guerra, pero los
bolcheviques, que conquistaron el poder en octubre de ese año, firmaron el armisticio de
Brest-Litovst (1918). Ello pareció dar ventaja a las potencias centrales, al disponer ahora
Alemania de mayores efectivos, que fueron trasladados al frente occidental con el objetivo de
romper la resistencia anglo-francesa.
Pero esta ventaja fue neutralizada por la entrada en la guerra de los Estados Unidos,
motivada por sus intereses económicos, por las mayores afinidades ideológicas y políticas con
los aliados, así como por el descontento provocado por los ataques sufridos desde los
submarinos alemanes (caso Lusitania).
Las grandes ofensivas finales en 1918
La fase final de la guerra se inició con las ofensivas alemanas contra París, aprovechando la
desaparición del frente ruso. Pero la unificación de esfuerzos de la Entente bajo un mando
único y con material y tropas de Estados Unidos, obligó a los alemanes a replegarse (segunda
batalla del Marne). Con los efectivos humanos y materiales estadounidenses, los aliados
lanzaron una contraofensiva que provocó el hundimiento del frente alemán. Una nueva
ofensiva aliada en septiembre obligó a Ludendorff, jefe del Estado Mayor alemán a
recomendar la firma de un armisticio. El 11 de noviembre de 1918 tras la huida de
Guillermo II y la proclamación de la república de Weimar, se firmó al armisticio. Los
aliados de Alemania,
había capitulado unos días antes. El derrumbe inesperado de la
resistencia alemana, para una opinión pública convencida para la propaganda de las
posibilidades de victoria, contribuyó a crear la leyenda injustificada, posteriormente utilizada
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por los nazis, de que Alemania perdió la guerra por la traición de los políticos de la nueva
república.
CONSECUENCIAS DE LA PRIMERA GUERRA MUNDIAL
Pérdidas demográficas:
Unos diez millones de muertos, sobre todo rusos, alemanes y franceses. Varios
millones de heridos y mutilados. Esta enorme mortandad de hombres ocasionó una
superpoblación femenina.
Pérdidas materiales:
Destrucción de infraestructuras y de gran parte de los medios de producción.
Destrucción de redes ferroviarias, puentes, edificios.
Campos agrícolas desvastados (unos tres millones de hectáreas).
Pérdidas financieras enormes.
Repercusiones sociales:
Incorporación de la mujer al trabajo
El éxodo rural a las ciudades se intensifica.
Incidió de forma desigual en los siguientes grupos sociales: empobrecimiento
general de las familias y ascenso de algunos nuevos ricos al amparo de la
especulación y del comercio de armamento.
Declive de Europa, con el enriquecimiento y auge de Estados Unidos y Japón.
Repercusiones políticas e ideológicas y morales:
Victoria de la democracia sobre los viejos imperios autoritarios.
Afirmación de nuevas nacionalidades y del derecho de los pueblos a su
autodeterminación.
Grave crisis moral por la quiebra de los valores humanísticos.
Esta guerra enfrentó a las grandes potencias industriales europeas y se extendió a casi todos
los países de Europa y algunos de América y Asia. Trasladó el protagonismo de Europa a los
Estados Unidos de América, y a lo largo de su desarrollo triunfa en Rusia, en 1917, la
primera Revolución Socialista.
LOS TRATADOS DE PAZ, LOS NUEVOS ESTADOS Y LA SOCIEDAD DE
NACIONES
La guerra acabó en 1918 con la rendición de Alemania y de sus aliados y posteriormente
tuvieron lugar las Conferencia de Paz de París, que reunió a 32 estados y reguló las
condiciones de paz que tuvo como base los 14 puntos que el presidente norteamericano
Wilson había proclamado en enero de 1918.
Se firmaron cinco tratados con los países derrotados: Versalles (el más importante de
todos, firmado con Alemania), Saint-Germain (con Austria), Neuilly (con Bulgaria), Sévres
(con Turquía) y Trianon (con Hungría).
Con estos tratados pusieron fin a los viejos imperios vencidos, que sólo fueron convocados
a firmarlos (por ello los alemanes, consideraron al Tratado de Versalles como un “Dictado”).
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Las verdaderas decisiones fueron tomadas por los siguientes dirigentes: Lloyd George –
Gran Bretaña - , T.W. Wilson – EE.UU - , Clemenceau – Francia -, y Orlando – Italia
– (éste ultimo marginado de las negociaciones). Clemenceau representaba el revanchismo
francés, Wilson tenía una postura conciliadora y consideraba que el nuevo orden europeo
debía basarse en el nacionalismo. Lloyd George mantuvo una postura ambigua pero fue
presionado por Francia en las conversaciones de paz para imponer unas duras condiciones a
Alemania.
Los denominados Catorce puntos de Wilson fueron la base de estas negociaciones. En
ellos se condenaba la diplomacia secreta, se reclamaba la reducción de armamentos, la
libertad absoluta de navegación marítima, y, especialmente, se expresaba el deseo de prevenir
todo conflicto bélico con la creación de la S.D.N. (Sociedad de Naciones), además de la
regulación de los enfrentamientos territoriales según el principio de las nacionalidades,
además, era preciso que desaparecieran los imperios y se consolidase el sistema
democrático. La sede de la S.D.N. se fijó en Ginebra y a lo largo de su vigencia no
consiguió los propósitos para los que había sido creada.
En virtud de los tratados que se suscribieron:
Alemania perdió su imperio colonial en beneficio de Gran Bretaña y Francia, y,
entre otros territorios, devolvió a Polonia la Posnania y entregó a este país e l
corredor de Dantzig que le permitía el acceso al mar a la nueva Polonia (sin
embargo, esta ciudad, fue declarada “ciudad libre”) que dividía a Alemania en dos
partes, quedando la Prusia Oriental separada del resto del país. A Francia tiene que
devolverle Alsacia y Lorena y compensarle económicamente.
El Imperio austro-húngaro desapareció: con sus territorios se formaron los
estados independientes de Austria, Hungría, Yugoslavia, Checoslovaquia y Polonia.
Algunos localidades fronterizas de Alemania (región de los Sudetes) pasaban a este
nuevo país llamado Checoslovaquia.
Rusia, que fue tratado como un país derrotado por haber abandonado la contienda
en 1917 y hubo de reconocer la independencia a Estonia, Letonia, Lituania y
Finlandia, así ceder amplios territorios para crear Polonia.
El Imperio turco desaparece con el tratado de Sévres y se impuso la segregación
de Irak, Palestina y Siria, en forma de protectorados que pasaron a manos
de las potencias vencedoras y apareció la moderna Turquía, circunscrita a la
Península de Anatolia (Asia Menor).
Además de estos cambios fronterizos se impusieron otras claúsulas:
-declaración de la culpabilidad de los vencidos en el desencadenamiento
de la guerra,
-pago de fuertes sumas de dinero en concepto de indemnización por
las destrucciones materiales,
-reducción al mínimo de marinas y ejércitos de Alemania.
Se creó la Sociedad de Naciones (SDN) en enero de 1920 como garante del nuevo
orden y como organismo de cooperación y arbitraje internacional, arbitrando el
derecho de los pueblos a su autodeterminación.
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La negativa del Senado norteamericano a ingresar en la Sociedad, las iniciales exclusiones de
Alemania y de la URSS y la complejidad de la toma de decisiones hicieron que la eficacia de
la Sociedad de Naciones fuese escasa.
Las potencias vencedoras permitieron que se incumplieran ciertos términos establecidos en los
tratados de paz antes mencionados, en especial los 14 puntos del Presidente Wilson, con
respecto a Alemania, lo que provocó el resurgimiento del militarismo y de un nacionalismo
agresivo en Alemania, así como desórdenes sociales en gran parte de Europa. Los tratados de paz
desembocarán en una paz equivocada que en menos de 20 años conducirá a un Nuevo conflicto
internacional. Al imponerse al opción francesa, a Alemania se la trató con extrema dureza. Se la
declaraba culpable de la contienda, tuvo que evacuar los territorios ocupados, se redujo su
marina y ejércitos, se limitó su territorio, tuvo que pagar altas sumas de dinero, de modo que el
Tratado de Versalles fue un acto más de venganza que de paz. Italia, por su parte se sintió
defraudada, a sus pérdidas materiales y humanas, se une el hecho de no recibir ningún tipo de
compensación, lo que favorecerá el surgimiento del fascismo y su alianza con la Alemania nazi.
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