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El hayy: la peregrinación en el islam
Nazmi al-Jubeh
Panel de azulejos (detalle)
Representación de la Kaaba
de La Meca.
Otomanos, 1676
Museo de Arte Islámico
El Cairo, Egipto
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Descubrir el arte islámico
en el Mediterráneo
El hayy: la peregrinación en el islam
El hayy es uno de los cinco preceptos fundamentales o «pilares» del islam y
una de las vías más cortas hacia Dios. No se sabe con certeza cuándo empezó
la peregrinación a La Meca, aunque es sin duda anterior al advenimiento del
islam y se remonta al tiempo que los musulmanes llaman «de la ignorancia»
(yahiliyya).
La Meca, una de las pocas ciudades del Hiyaz anteriores al Islam, afirmó
su posición central controlando las principales rutas comerciales que conectaban los mercados de África, India, Oriente Próximo y el Mediterráneo
occidental. Desde La Meca, los mercaderes viajaban en dos caravanas
principales: la primera salía en verano hacia el norte y la segunda en invierno hacia el sur. A su vez, mercaderes de toda la Península Arábiga y más allá
de ella convergían en La Meca, sobre todo en la estación anual de peregrinaje, cuando se rendía tributo a una serie de ídolos locales que albergaba
la Kaaba.
Llave de la Kaaba
Mamelucos, 1363
Museo de Arte Islámico
El Cairo, Egipto
Según la creencia musulmana, la Kaaba fue construida por Abraham,
profeta de Allah, en el mismo sitio en que Adán había levantado la «primera
casa» que sirvió para el culto de Allah. Abraham había exiliado a su esposa
Agar y su hijo Ismael al «valle donde nada crece», en La Meca. Agar corrió
Vista topográfica de La Meca
Servía para orientar a los peregrinos
en el hayy.
Otomanos, siglo XVIII
Biblioteca de la Universidad de Upsala
Suecia
El hayy:
la peregrinación en el islam
Plato para orientar la qibla
Servía para conocer la dirección
de la Kaaba.
Otomanos, 1512–1520
Museo Nacional
Damasco, Siria
Al-Haram al-Sharif
El «Noble Santuario» donde se
encuentran la Cúpula de la Roca y la
mezquita al-Aqsa; fue bendecido por
Dios en el Corán y se convirtió en la
primera qibla de los musulmanes.
Construcción empezada en 637
y continuada hasta 1917
Jerusalén
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Descubrir el arte islámico
en el Mediterráneo
entre Safa y Marwa en busca de agua para su hijo. De repente, el agua
sagrada de Zamzam comenzó a brotar entre los pies del pequeño. Como
muestra de agradecimiento a Dios, Abraham construyó la Kaaba, dedicada a
Él y en la que ofreció sacrificios. Dios le ordenó entonces que diera siete
vueltas a la Kaaba para rendirle culto.
En la época de la yahiliyya, la Kaaba se había convertido en un centro de
culto a ídolos. Entonces, el santuario y gran parte de la actividad comercial
cayeron bajo el control de la poderosa tribu de los quraysh.
En el seno de una rama pobre de esta tribu nació Muhammad, el Profeta
Cantimplora de peregrino
del islam, en 570. Él también se hizo mercader, pero pronto tomó conciencia
Mamelucos, 1341–1345
Museo Nacional
Damasco, Siria
de la avaricia y los excesos politeístas de sus contemporáneos. Elegido por
Allah como último mensajero de la verdadera fe, acometió la labor de llevar
la voluntad divina a la gente y hacerla vivir conforme a Sus leyes. La
peregrinación anual fue una de las costumbres tradicionales que se
transformaron según los deseos de Allah.
En efecto, el islam y los preceptos del Sagrado Corán, tal como fueron
revelados al Profeta, hicieron del hayy un deber para todo musulmán, si es
capaz física y económicamente. La Meca y su Kaaba perdieron su significado
pagano para convertirse en el foco de una creciente comunidad musulmana
en dos aspectos importantes: Allah ordenó al Profeta que los musulmanes
orasen en dirección a La Meca y la Kaaba, mientras que hasta entonces lo
habían hecho hacia Jerusalén; pasaron a ser el primer destino de la peregrinación musulmana, que se realiza en el mes de du l-hiyya.
Pieza de kiswa (cobertura)
de la Kaaba
Se cambia todos los años antes
de la estación del hayy.
Otomanos, siglo XIX
Museo Islámico y Biblioteca al-Aqsa
Jerusalén
El hayy:
la peregrinación en el islam
Rollo de peregrino por poderes
Quienes enviaban un poder en
su nombre recibían un certificado
como este en prueba de que
habían cumplido todos los
requisitos del peregrinaje.
Ayyubíes, 1206
Museo de Arte Turco e Islámico
Estambul, Turquía
Hito
Erigido para indicar la distancia
entre dos estaciones en una ruta
comercial o de peregrinaje.
Omeyas, 685–705
Museo de Arte Turco e Islámico
Estambul, Turquía
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en el Mediterráneo
En cuanto al ritual, el Profeta adoptó muchas de las costumbres preislámicas asociadas con la peregrinación, pero abandonó la práctica de circunvalar
desnudos la Kaaba. Por tanto, ordenó que los peregrinos llevaran una vestimenta ligera y blanca. Los hombres visten un hábito blanco (ihram) y comienzan implorando a Dios que acepte su arrepentimiento, para luego suplicarle:
«Aquí estoy a tu servicio, oh Allah; estoy presente, no tienes compañero».
La peregrinación va acompañada de una serie de rituales cuyo momento
culminante es la estancia en el monte Arafat y que terminan con la ofrenda
de un sacrificio a Dios Todopoderoso. Esto marca el comienzo del Eid al-Ada
(«fiesta del sacrificio»), el más importante de los festejos musulmanes. Como
prolongación del hayy, se visita también la tumba del Profeta, su mezquita
en Medina y otros lugares sagrados, el más importante de ellos Jerusalén.
En las últimas décadas, la umra –realización de los rituales de la
peregrinación en cualquier momento del año– ha adquirido importancia,
porque en el mes del hayy La Meca se ve desbordada y no puede albergar al
gran número de musulmanes que desean participar. El gobierno saudita ha
restringido el número de peregrinos durante el mes de du l-hiyya, por lo que
la umra se ha convertido en una alternativa para quienes aspiran a cumplir
con su deber religioso.
En el cuidado de las ciudades sagradas y la organización del peregrinaje,
el gobierno saudita es continuador de una larga tradición por la cual los
dirigentes musulmanes se enorgullecen de su capacidad no sólo de facilitar
el ritual anual en La Meca, sino también de organizar el viaje de peregrinos
musulmanes desde las regiones más remotas del mundo islámico. Por
supuesto, prestar estos servicios es un deber político y administrativo, pero
también una fuente de legitimidad política y –lo más importante– una manera
de pedir a Dios recompensas y bendiciones.
Para que pudieran viajar las comitivas de peregrinos desde todos los
rincones del islam, se construyeron caminos que las autoridades equiparon
Panel de azulejos
con las instalaciones necesarias para la comodidad de los viajeros. Posadas y
Otomanos, 1676
Museo de Arte Islámico
El Cairo, Egipto
lugares de descanso flanqueaban las rutas y acogían a las siempre crecientes
caravanas, formadas no sólo por peregrinos sino también por mercaderes,
personal de ayuda y –si iban califas o sultanes– un cortejo numeroso,
soldados y músicos.
Términos relacionados con el hayy
Hayy: Peregrinación a La Meca y quinto pilar del islam. Es obligación de todos los musulmanes
realizar el hayy al menos una vez en la vida, si disponen de medios económicos y su salud se lo
permite.
Kaaba (literalmente «cubo»): Edificio rectangular, casi cúbico, es el lugar más sagrado para los
musulmanes y la dirección en la que deben orar. Los peregrinos circunvalan la Kaaba siete veces
cuando llegan a La Meca, haciendo el llamado tawaf al-qudum («circuito de llegada»), y otras
siete cuando se van (tawaf al-wada, «circuito de despedida»). Muchas tribus árabes anteriores
al islam tenían kaaba. Con el advenimiento del islam, fueron invalidadas todas, a excepción de la
kaaba de los quraysh, la de La Meca.
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Cobertura de tumba
Otomanos, siglo XVII
Museo Real, Museos Nacionales de Escocia
Edimburgo, Reino Unido
Wadi gair di zara («valle donde nada crece»): Expresión coránica para designar el árido valle de
La Meca.
Safa y Marwa: Dos puntos de la Meca entre los que corrió Agar buscando desesperadamente agua
para su bebé, que tenía mucha sed por el calor extremo.
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Eid al-Ada: Fiesta del décimo día del du l-hiyya, que también puede llamarse Día de la Inmolación, el Gran Eid, Fiesta del Eid o Fiesta del Sacrificio. La tradición de este sacrificio se remonta
al profeta Abraham, y es considerada el festejo musulmán de mayor importancia, que marca
el final de los rituales del hayy.
Rituales del hayy
La intención: El musulmán da a conocer su intención de cumplir el religioso deber del hayy antes
de partir para La Meca.
Al-ihram (sacralización): Comporta dos aspectos. Se trata, en primer lugar, de un acto físico
que consiste en desprenderse de toda la ropa y vestirse de algodón blanco. Además, el peregrino
se corta o afeita el cabello. El ritual tiene también un significado espiritual, porque implica
abstenerse de todo lo que invalida el hayy, como matar, cazar o actividades similares.
Al-tawaf: Acción de circunvalar la Kaaba siete veces al llegar y al marcharse.
Al-saay: Paseo ritual entre Safa y Marwa.
Wakuf (parada) en el monte Arafat: Todos los peregrinos se encuentran en la extensa elevación
de La Meca denominada monte Arafat.
Lanzamiento de piedras: Apedreamiento con pequeños cantos de los símbolos del mal (el demonio)
con el fin de apartarse de él.
Zamzam: Pozo de La Meca, una de las fuentes continuas y permanentes de agua. Según la tradición islámica, el manantial brotó gracias al poder de Dios cuando el sediento bebé de pecho,
Ismael, golpeó la tierra con sus pies mientras su madre iba a buscar agua. Esta agua es considerada sagrada y bendita por los peregrinos, que se llevan gran cantidad de ella a su regreso para
dársela a amigos y familiares.
Despedida de los peregrinos: Tradición popular que ha sido convertida en fiesta nacional. Este día
se cantan canciones específicas, que varían de un país a otro. Es común que los representantes de
la Administración participen en la salida de la caravana del hayy, al igual que en la bienvenida a
los peregrinos cuando vuelven. En el pasado, la caravana era recibida en los límites de las
provincias.
Ruta o carretera del hayy (darb al-hayy): Era la ruta específica, a veces modificada con el tiempo,
que tomaban los peregrinos desde cualquier punto del mundo islámico para dirigirse a La Meca.
Normalmente contaba con todo tipo de servicios, especialmente los relativos a la seguridad,
suministrados por la Administración. Las caravanas podían encontrarse en una fecha y sitio
concretos: por ejemplo, la caravana turca podía coincidir con la de Siria y viajar juntas para
unirse más tarde con las procedentes de Jordania y Palestina.
Visita a Jerusalén: En el islam de los primeros tiempos era común considerar la visita a Jerusalén
(al-Quds) como el peregrinaje de los menos pudientes, aquellos que física o económicamente no
podían ir hasta La Meca. Jerusalén fue la primera de las dos qibla y la tercera ciudad sagrada,
por lo que está incluida en el triángulo sagrado. Normalmente se incluía una visita a Jerusalén
en el viaje de vuelta, una tendencia que se extendió sobre todo entre los viajeros de al-Andalus y
el norte de África (mundo islámico occidental).
Plancha de imprenta
Contiene una lista de los lugares
sagrados de la región de Palestina.
Umra: Dado el incremento del número de musulmanes (más de tres millones) que desean hacer
el hayy, no hay medios suficientes para albergarlos. Por eso, la umra ha aumentando su importancia. Ritualmente, es casi lo mismo que el hayy, pero puede hacerse en cualquier época del año.
Incluye una visita a todos los lugares sagrados y pasa por todos los santuarios.
Otomanos, siglo XIX
Museo Islámico y Biblioteca al-Aqsa
Jerusalén
Piedra Negra: Roca negra considerada la piedra fundacional de la Kaaba. Está protegida por
un armazón de plata y muchos peregrinos se acercan a ella para besarla, imitando la acción del
profeta Muhammad.