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La República romana
La República romana comenzó en el año 509 a.C., a partir
una revuelta de los patricios que retiraría del poder a
monarquía etrusca. Esta fase de la historia romana
mantendrá hasta el establecimiento del imperio romano en
año 27 a.C.
de
la
se
el
Estructura política de la República
romana
Consulado (poder ejecutivo) – compuesto por dos
cónsules.
Senado (poder legislativo) – formado por 100 senadores
de origen patricio escogido por los cónsules.
Asamblea de los ciudadanos – constituida por patricios y
encargada de elaborar leyes que eran promulgadas por el
Senado.
Dictadura – convocada por el Senado en periodos de
crisis social o política.
Pretores (poder jurídico) – magistrados romanos
administradores de la justicia.
Censores – responsables de la clasificación de la
sociedad de acuerdo a sus ingresos.
Ediles o regidores – administradores municipales.
Cuestores – responsable de la administración de los
recursos financieros.
Características principales de la
República romana
Dominio de la política ejercida por los patricios
(terratenientes).
A través del control del poder y de las instituciones
políticas, los patricios buscaban siempre beneficiarse.
Sociedad esclava.
Voto basado en rentas (censitario).
Ausencia de democracia, porque aunque los plebeyos
podían votar, el poder político de patricios fue
superior porque tenían más ingresos.
Sociedad jerárquica que consta de patricio (minoría con
dominio político y económico); ecuestres (comerciantes);
plebeyos (hombres libres); clientes (agregados de
patricios); esclavos (mayor capa social).
Sociedad patriarcal.
Luchas sociales entre plebeyos y
patricios (siglos V y IV a.C.)
Las causas de las revueltas respondían a la insatisfacción de
los plebeyos con la falta de derechos políticos y posesión de
tierras. Este descontento se tradujo en levantamientos
sociales entre plebeyos y patricios.
A través de las rebeliones, los plebeyos ganaron varios
derechos sociales y políticos: fin de la esclavitud por deuda;
creación de los tribunos de la plebe (derecho a vetar las
decisiones del Senado que eran perjudiciales para los
plebeyos); igualdad civil (liberación de enlaces entre
plebeyos y patricios); igualdad religiosa (derecho de actuar
como sacerdotes) y ampliación de derechos políticos (capacidad
para elegir a representantes para diversos cargos políticos).
Conquistas militares
Fue desde el siglo III a.C. que los romanos comenzaron la fase
de expansión territorial, a través de la conquista militar.
Después de derrotar a los cartagineses en las guerras púnicas,
los romanos llegaron a controlar el mar Mediterráneo. Luego
los romanos comenzaron a atacar a otros territorios como Siria
y Macedonia. En el año 59 a.C., los romanos atacaron la región
de Galia bajo las órdenes de su líder militar Cayo Julio
César.
Consecuencias
de
conquistas
militares: transformaciones en Roma
y la crisis de la República
Con los logros, hubo una creciente concentración de
tierras en la posesión de los patricios (formación de
grandes haciendas).
Aumento de la cantidad de esclavos (prisioneros de
guerra).
Aparición de los caballeros, nuevo grupo social
compuesto por oficiales del ejército que se
enriquecieron con logros militares.
Aumento del éxodo rural (en su mayoría población
campesina), causada por el uso excesivo de mano de obra
esclava en el campo. Este suceso aumentó la población de
las ciudades romanas y, en consecuencia, la aparición de
problemas urbanos.
Participación de los generales romanos de la vida
política de Roma.
Fallido intento de reforma agraria (del 131 al 121
a.C.), liderada por los hermanos Tiberio y Cayo Graco.
Esta reforma pretendía hacer una división de las
conquistas de tierra entre la plebe y disminuir las
tensiones sociales. Sin embargo, hubo una fuerte
oposición de los patricios y los generales romanos.
Incremento de los conflictos sociales entre plebeyos,
patricios y caballeros. Estos conflictos condujeron a la
crisis de la República romana, allanando el camino para
el establecimiento del imperio.