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Maria Lunae
SGS 6
Saül Gómez Soler
Dúo escrito para trombón solista, set de percusión y láminas encargo del trombonista
Cesar Roig al que dedico la obra.
Los mares lunares son planicies extensas y oscuras de la superficie lunar, conformadas
por afloramientos basálticos en erupción provocados por impactos de meteoritos. Los
primeros astrónomos los denominaron así al confundirlos visualmente con auténticos
mares.
La luna ha sido a lo largo de la historia un elemento místico y mágico por la inmensa
influencia que ejerce sobre la tierra y las personas.
Siempre hemos sentido cierto interés por ello, en esta ocasión nos despertó curiosidad
el estudio de sus mares. Hemos recogido la poética que trasmiten sus nombres para
inspirar y desarrollar las diferentes secciones en las que se estructura la pieza.
Mare Nubium (mar de las nubes), Mare Anguis (mar de la serpiente), Mare Frigoris
(mar del frío ), Mare Imbrium (mar de la lluvia).
De los 23 mares que contiene la Luna, escogemos los cuatro citados, que
nos
estrucutran la obra en A-B-A’-B’ unidas todas ellas por un diseño motívico de 6 notas
que es presentado al inicio de la obra y que da unidad a lo largo de ella debido a que se
presenta continuamente con múltiples variaciones. La obra poraliza la nota La como
centro atraccional sobre la qual giran los “satélites” sonoros. El intervalo de 3ª (Mayor
de forma ascendente y menor en descendente) es un elemento recursivo a lo largo del
discurso.
Las Secciones A-A’ se desarrollan a partir del motivo principal dando lugar a texturas
fluctuantes dibujadas por las armonías de las láminas.
Los fragmentos B-B’ son contrastantes y están construidos a partir de la inversión del
motivo principal que muta a través de diferentes procesos contrapuntísticos. B’ nos
sirve también como epílogo para recoger algunos elementos aparecidos en las secciones
A y A’.
Otro elemento importante en la construcción de la pieza es el juego numérico.
Al principio el cambio de compases es marcado por la medida del diámetro de la luna,
tomando como numerador cada una de las cifras de esta medida.
Por otro lado no sólo los mares estructuran la obra sino que el número áureo nos sirve
para estructurar rexposiciones o elementos a destacar.
Por ejemplo, la sección áurea de la obra (c. 158) nos sirve para introducir A’. Si
fraccionamos esta primera mitad (desde el inicio hasta el c.158) nos encontramos en el
punto culminante de la sección A. Si cogemos la segunda mitad de la obra (del c. 158
hasta el final) encontraremos que en su sección áurea aparece el motivo principal de la
obra de forma inversa.
La obra fue estrenada el 9 de Mayo en el auditorio Eduardo del Pueyo de Zaragoza por el
trombonista Cesar Roig y el percusionista Héctor Marqués Marqués.
Saül Gómez Soler
Ontinyent, Febrero del 2012