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Efectos secundarios de los antibióticos
en Urología. Hipersensibilidad medicamentosa
Ntuojunu. l~uniwon, Exiurio VÁo<GÁs, Au±oNsonNoRENo
Servicio de Farmacokngfuo Clínica. Honspita] Chuúce Stoui Cuor]ons. Madrid
INTRODUCCIÓN
Los antibióticos empleados en Urología forman uon grupo heterogéneo
cine comprenden desde las clásicas cefalosporinas hasta los más recientes carbapenems o flueronquinolonas. Por ello iremos hacieuído un repaso dc aquelíos más habitualmente utilizados clasificándolos por las familias químicas a
las que pertenecen, en el conocimiento de que, como ya sabe el lector por el
pronpio contenido cíe ésta obra, muchos de ellons pueden ser utilizadois euí patologías diferentes, y en su caso con temponralidad diferente, pudiendo éste aspecto influir en les efectos secundarios que pudieran esperarse.
EFECTOS SECtINDARIOS DE LOS ANTIBIÓTICOS
PENICILINAS
Los efectos adversos más graves de las penicilinas, son las reacciones de
lúperseonsibilidad inmediata e acelerada (primeras 72 h) que aparecen en el
0,01% de pacientes. Estas reacciones son mediadas por la presencia de IgE
frente a determinantes arutigénicos (metainolitos) de la penicilina, y dan lugar
a urticaria, hinchazón local, edema angioneurótico, broncoespasuno, e hipotensión, teniendo una mortalidad del 0,001%. También pueden oncurrir reaccuones de hipersensibilidad tardía (a partir del tercer día> mediadas por IgM
cn IgG, cIne cursan clínicamente connio exantema mcrbiliferme, enfermedad
del suero, síndrome de Stevens-Johnson, vascilitis, nefritis intersticial, anemia
hemolítica, y fiebre. Es frecuente el desarrollo de tromboflebitis cuando el
Clínicas (irológicas de la Conoplutensa. 5,
3200-340n,
Senirie rin Publicaciones. [1CM, Madrid, 1997
330)
Nl. Puteo-ro, itt irargus, A 1/boso Aiorano
medicamento se emplea por v’a intravenosa, y de dolor en el lugar de ini ección
intramuíscularu. Raramente se ha notificaelcn riesgo de elevación dc ta trvnsmmm
nasa glutámico-oxalacética (GOT), y a nivel, de sistema unervioso central hipe
ractivídad, ansiedad. iiusomnio, confusióin, caminios de humonr y vértigo>
Alguíncns de les efecto>s adversos son ceunsiderades comon closisdepeoidíentes los
reacciones de míenrotuxicidad, la ininibiciómí de la uogregacióoo plaqtmetaru u
la di>
minímción de la síntesis de factores de coagtulación xiftoonnina 1k deíneuídientes
De forma esjnecífica came resefiar Inara algniías pemúciionas lum aparición de efectos juideseables propios. Emm comícrete, merece la jneuna reconrolar las siguieuutes:
Peomicilina G. Cuando se admiunistra emu dosis altas, los caticniues sodio y Inotasie
puedero representar una ameonoza sobre todo en paciemutes ceun afectacióíí caudíaca o
renal previa1. Las formas de~nont (peííiciiirua procaiíía, jnenicilina loenzatina) inueden
dar lugar a feunómenes emlnelo-tóxicos sí se inrod~.uce administracióun intravascular
uocciclental
Cloxuocilina.. Rarameunte puede producir udteoaciones gastreintestiuuales, agramíulocitosis o neutrepenia conuu leucopenia, y hepatitis ceun/sin colestásis1.
Ampicilina. Produce erupción maculopainulesa, que se observa mnás frecuentemeunte cuando se emplean dosis altas, cuando el paciente está eíí tratamiento con
alepuriumol o sufre mononucleosis, insuficiencia renal o leucemia linfática0. Todas
las aíninopeomicilinas pueden dar lugar a alteraciones gastrointestiomales: anorexia,
uíáuíseas, vómitos, malestas e~nigástrico, diarrea y conlitis pseudonmennlnraiiosa5. Muy
raramente se han comunicado cases de mareo y cefalea. mnefritis intersticial,
glomerulonefritis, y eristaluria con donsis elevadas, así como discreta eleva-
ción de transannisanas, que se resolvieron espontáneamente5. Este producto
ínuede reducir la alnsorción de los anticomnceptivons oralesu, aunque este dato>
no se ha confirmado en estudios más recientes.
Amoxicilina. Muy similar ampicilina. Origina con menor frec:uencia que
estas erupciones maculopaptolosas en las mismas circunstancias. También es
menor la incidencia de diarrea, probalnlememnte en relación a su mayor alnsor-
cuón intestinal.
Amoxicilina + Acido clavulánico. Lo>s efectois adversos de la combinacióoí
son similares a los observados con la anioxicilina sóla a excepción de los efectos a nivel gastrointestinal, siendo más frecuente la preseuícia ole diarrea (9%)
inespecifica o> por C. d¿tficile, y náuseas y vónnitois (5%)5. La diarrea por ac.
claviolánico es más frecuente cuamídon éste se administra a dosis de 250 mg o
stuperioresT.
CEFALOSPORINAS
El Jecto adverso mas comon es la hipersensibilidad (2%), y no hay dates
de que una de ellas tenga mayor e menor propensión a causar esta manifestación6. Estas reacciones de hipersensibilidad son cruzadas con penicilina en
E/¿cctons secundarios da íons antibióticons en L2’ro/o@a; alergia medicama,-utoaa
33 u
cl 1 0% de pacientes. Por vía intravenosa pueden producir tromboflebitis
(1%>, y dolor en el lugar de iunyección; mientras que con la administración
onral pueden aparecer náuseas, vómitos, doler abdominal (3%>, y diarrea unes-
pecífica o por C. dz~tle. De forma excepcional y sobre todo a dosis elevadas
o> en pacientes con insioficiencia renal pueden aparecer encefalopatía y cenvulsuenes. Con ponca frecuencia y soInre todo en pacientes ancianos, ocasionan ne-
fritis intersticial.
Cefoxitina y moxalactaun pueden ocasmonnar con mayor frecuencia o¡ue el
reste conlonnización y sobreinfeccioiíes por Candida
y eunterocece. 1-ambién pueden pronducir alteraciones bioquímicas como cosinofilia, neutropenia
y excepcionalmente trcnmnbecitopenia (pronbab lemente de onrigen inmunológi-
5pm
ce), así conme prueba de Conomnbs directa positiva (excepcionalmente acompaflada de hemólisis>, y aumentos ligeros y transitorios de traoisaminasas y fos-
fabosa alcalina0.
Las cefalosporinas que tienen el radical nnetiltiotetrazol en posición 3 (cefamandol, cefmetazel, cefoperazona, mnexalactam y cefotetan> pueden cnrigimiar una reacción tipo disulfiram si el paciente ingiere alcohol, y también blon-
qucar la síntesis de protrombina, asi como la de otros factores de la coagulación dependientes de la vitamina k.
Algunos efectos indesealnles son particulares de cada cefalonsporina, siendo de destacar los siguientes:
Cefonicid (2. Gen>. Su gran contenido en Na, puede facilitar la retencióuí
Inidrosalina.
Cefixima (3. Gen). Molestias gastrointestinales. Diarrea.
Ceftriaxouna (3. Gen>. Puede dar lugar a pseudocelelitiasis por barro en
la vesícula biliar sintomático en un 9%, más frecuente con dosis superiores a
2 g/día y con nutrición parenteral7.
OTROS I3ETALACTAMICOS
Imipenem-cilastatina. El imipcnem es un B-lactámico del grupo de los
carbapenem que se asocía a la cilastatina que es un inhibidor de la deshidrenpeptidasa 1, para prevenir la inactivación del imipenem en el riñón. Las reacemones adversas más comunes son naúseas y vómitos (1 a 20%)6, especialmen-
te cuando la infusión del producto es rápida0. El resto de efectos adversos son
semejamítes a los descritos conn otros B-lactámices, y en general es Inien tolera-
do. Ocasionalmente se han descrito efectos adversos a nivel de sistema nervuonso central, iuícLuyeoido crisis comiciales y mioclonías’. Las reacciones de hipersensilnilidad se han olnscrvadcn en menes del 3% de los pacientes quie recmben el fármaco5. La flebitis y/e tronmboflebitis está bién documentada para el
2-5% de los pacientes, sin eminargo, en alguncns estudios alcanza hasta eh 60%,
y puede llegar a obligar a la suspensión del tratamiento”. Su cemininación con
332
A-E. I’uau-on. E 1 argos. A ifluoso Moreno
otros B-iactámicos no es recomendalnle, ya que es un indiuctor potente de la
síntesis de l3~lactamasasi.
Aztreonam. Pertenece al grupo de los monobactámicos. Aunque sus efeo:tos adversos son similares a los de las penicilinas, la hipersensibilidad cruza-
da conio otras penicilinas e conn cefalesponrinas es muiv raí¡ai Les efectos i ideseables afectan a menons del 7% de lons pacWntes y requico-en sio suspensión en
el 2%~. Se ha descrito neutropenia o’eversihnletu.
AMINOGLUCÓSII)OS
Todos los aminoglucósidos comparten tres características tóxicas principales: otetoxiciclad, nefrontoxicidad y parálisis neuromuscular. La otetcnxici
-
dad puede ser auditiva, vestibular e mixta, y es importante debido> a su fre-
cuente irreversilnilidad (50%>~. su aparición después de suspendido el agente
y su naturaleza acumulativa luego de tratamiciotos repetidos00. Su incidencia
clínica es baja (menos del 504n>0, pero lógicamemíte aumenta si se emplean
otras técnicas mas sensilnles (auidiometrías y electronistagmografía) uon
En 5-25% de las personas tratadas con aminoglucósidos se cnbserva un
efecto nefrotóxico clínico, definido por urna disminución del filtrado glomeru-
lar, olue en general es leve. ocasionnalmente moderado y rara vez severo. Esta
disfunción renal no es oligúrica, y suele ser reversilnle. La gentamicina parece ser más nefrotóxio:a que amikacina, tobramicina y netilmicinauoí. La mnefrotoxicidad se relaciona con la edad (más frecuente en ancianos>, sexo femenino, dosis total alta, nivel valle elevado (concentración mínima), funcióoi renal
inicial d eterionrada. hipotensión. hepatepatía o administración conj tonta de
otros fármacos pontencialmente nefrontóxicosu.
El bloqueo neuremuscular es umí fenómeno raro>, pero pontencialmente
grave. Está asociado> a la presencia de concemítraciones onuy altas del amineglucósido en la unión uneuromuscular, lo que puede prevenirse mediante la
administración más lenta de la sonliución. Una vez mnstaurada debe ti-atan-se
mediante la administración de calcio000 Otros efectos secundarios de aparición excepcional incluyen: hipersensibilidad, depresión medular, amnemia hemolítica. y antagonismo del factor \i de la coagulacióun.
Aníikaeina. Toxicidad renal entre 1 y 30% y no mayor que la de tobramicinau. A las dosis recomendadas y tras 10 días de tratamieuito el daño renal
probablemente ocurra en menos de omn 10% dc bis casos00. La ototoxicidad escila entre 3 y 30%. siendo más tóxica sobre la cóclea cíue sobre la función vestibular. En estudies conmparativos a donsis equipontentes la ototoxicidad fue si-
milar a la de gentamicina0’0>.
Gentamicina. Es más uíefrcntóxica que la tobraníjema, amikacina y netilmicina. Se han descrito des tipos de nefretoxicidad por gentamicina: una reducción gradual del aclaranmiento de creatinina que oncurre tras des semanas
EJ¿’ctos secundarios da los antibióticos en Urología; alergia níadicanuentosa
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de tratamniento a dosis plenas en uin 5-10% de los pacientes, y que es reversmlnle en la mayoría de los casos al suspender el tratamiento, y un fallo renal
agudo debido a necronsis tubular asociado a oliguria seguido de un periodo de
poliuria, y que es menos frecuente que el anterior9. Sobre el VIII par es mas
vestilnulcntóxica que ototóxicatm. En administración intratecal puede causar lesuenes neu rotóxicas y existen varios casos descritos de psicosis tóxicas9.
Netilmicina. Posiblemente sea algo menos nefretóxica que la gentanmiciun, la tobramicina, y la amikacina0.
Toinramicina. La frecuencia con que origina ototonxicidad es similar a gentainicina (7-8~Áí>. También puede producir psicosis tóxicaon. Es menos nefrotóxica que la gentamicina0.
MACROLIDOS
Azitromicina. Utilizada en urología gracias a su actividad frente a la
Chlarnydia, haciendo posible el tratamiento de uretritis/cervicitis con dosis
única de 1 g. Se considera un fármaco seguro, ya que la incidencia de efectos
adverscns es baja, tiene mejonr tolerancia digestiva que la eritromicina, y no interfiere con la actividad metabólica del citocromo p-4500. Sólo ocasionalmen-
te ocurren alteraciones a nivel gastrointestinal, ya que estimula la motilidad
intestinal pudiendo originar donlor abdominal, náuseas y vómitos. Muy raramente puede producir reacciones de hipersensibilidad cutánea, eosinofilia, incremento> de transaminasas, leucopenia, neutropeunia, cefaleas y mareos2.
QLHNOLONAS
Los efectos adverso>s más frecuentes de las quinolonas son los gastriontestinales (0,8-6,8% de los pacientes>; daundo lugar a náuseas, vómitos, dispep-
sia, dolor epigástrico/abdominal, anorexia, diarrea, flatulencia y sequedad
de boca. También se ha observado, aunque muy raramente, colitis pscudomembranosa00. Le siguen en frecuencia los efectos sobre el sistema nervioso
central (0,9-1,8% de los pacientes> como cefalea, mareo, cansancio, insomnio, languidez, agitación, indiferencia, inqimietud, visión anormal y pesadillas.
En menos del 0,5% de los pacientes se desarrollan reacciones severas que incluyen alucinaciones, depresión, reacciones psicóticas y convulsiones (espe-
cialmente con rosexacino y ácido exolínice, menos con ácido nalidixico y excepcional con las flueroquinolonas>. Generalmente desaparecen al suspender
el tratamiento u La administración conneemitante de un antiinflamatorio no
esteroideo puede potenciar los efectos estimulantes12. Le siguen en frecuencia
las reacciones cutáneas y alérgicas (0,6-2,4% dc les pacientes), que incluyen
eritema, urticaria, exantema, prurito y reacciones de fotosensibilidad a la luz
Al. Puco-ro, E? Vargas,. ‘o 1/baso iloremo
334
solar. Se lían observado casos muy raros de taquicardia, hipetensióui, nefrotoxicidad con elevación de bis niveles de creatinina, trombocitopenia, leunccnpenia,
anemia y alteración transitoria de enzimas lnepático>s. Excepcioioalmente se producen artralgias y tendinitis del aoíuíleon ecin ponsible rottoraí -t En animales se
han olescrito artropatías, aoíormalidades en la marcha y lesiones en los cartuJagcns de las articulacioones qíme sonstieiíemo peso, y en ceunsecreoncía 010 se reconmien-
da sim uso en pacientes pediátricons, moojeres embarazadas, o las cIne estaro oíando lactancia00. No obstante, estos efectos no se lían eno:onntradcn en niños oiue recibieron quinelonasui. Cuando se ciupicaun dosis altas de ciprofloxacino o de
norflcíxacinon, y el pil de la erina es neujíro, puede prodímeirse oristaluria u
Ciprc>flonxacino. Los efectos adversos se lían descrito en cl 5-1 ‘l0ho de lcns caso>s, y o>bligami a la susjnemnsióio del trataminiento en 2-3.5% ole lcns afectados.
Ocasionalmente ha ocurrido fallo hepático. En menos dcl 1% produce epistaxis, edema luu-iiígeo y pulmonar. hemonptisis, disinea, broncoespasunon, embonlismo pulmeunar, y alterao:ionnes en la visiómn5. Reclumc:e moderadamente el arIa-
ramíento de teonfiliiua.
Nalidíxico, ácido. Es posible uuía acción antagóuiica con cloramifenicol. te-
traciclinas y nitrofurantoina. Desplaza los anticoagulantes cumarínicos de la
alínúmina, y provoca falsos positivos de gluconsa eíu erina en las prucínas oíue
utilizan sulfato cuiínriccn como reactivo. Tamínién puede ocasionar disminución de la agudeza visual. diploipia, alteración de la percepción de los colores,
y neuritis. fi ipertensión intracraneal en niñcns. Otrois efectos i-mnd escalnles son:
aciolosis metabólica e hiperglicemia con caso> ole soinredosis, aneunia hemonlitica
en jnacientes ceun déficit de glucosa-6-fosfato-deslnidrongemnasa. y ajíemia [nemelítica atítoinmune Coombs—ínositiva0 . Rarameunte ha sidon reí acionunaden coin oo:tericua colestásica, y ínos~ blemeunte inímeda preciínitar una insuficiemícia res{nio’atn-
rma aguda eun Inacientes o:cnn alteraciómí previa de su fionción respirato>riaT 0
intcnxicación aguda ínueele dar loogar a alteraciones gastrointestinales, neurotoxicidad y acidosis metabólica, pero deiniolo a síu coota vida inedia Inersisteol
sólo durante 2-3 horas”.
Nonrfloxacino. Posible antagonismo cojí cleranfenicel y comí ritampmcmna.
En general roo interfiere significativamemúe el metabolismo de las xantiíias0. A
pesar de o~ue los efectos adversos más fo-ecumentes cuí los emnsayons clínicos afec-
tan a tulio digestivo y al sistema míervioso> cemntrai., su efecto> adverso más frecumentemente comumoicado una vez comercializado es el rash cutáneo>.
()xcnlínice, ácido. Antogonnismo con nití-onfurantoina. Puede procí rocir falsois
positivos de glucosa en erina en las pruehías cíuie utilizan sulfato> cúprico comon
reactivo. Desplaza los anticoagulantes ciuníarín icons cíe la alinó mina. Ocasiena
nerviosismo, insomnio>, vértigo, e inquietiod (especialmneonte en aonciainos)
Ofloixacino. No interfiere comí el ínetuolnolismo de las xuuitinas. Los antagonistas II., poueden reducir síu aclaramiento remíal y aímmentar la vida media líasla en un3O%i. Se han olescrito efechis aolversos en 2-12% dc los pacientes que
lo reciben, obligando a sum suspensidio en 1-4%”.
R/hctos secuí-udarios da los antibióticos en ‘rología; alergia medicamentosa
335
Peflexacino. Reduce moderadamente cl aclaramiento de la teofilina. Aumenta el efecto anticoagulante de los cumarínicos0.
Enexacino. De las fluoroquinolonas disponibles, es una de las más potentes inhibidoras de las enzmmas microsomales hepáticas. Reduce unederadamente el aclaramiento de la teefiiina5.
OTROS ANTIBIÓTICOS
Nito-ofiorantoina. El efecto secuondario más frecuente es la intolerancia gastrointestiuual, que puede reducirse si se administra con las comidas. La formulación en macrocristales se absorbe más lentamente y se telera mejor0. Da lugar a cefalea en el 6% de los pacientes tratados, y puede producir políneurepatía periférica a veces grave e incluso irreversible5, sobretodo en cason de
insuficiencia renal u5. Colonrea la erina en tono naranjaníarron. Pueden producirse reacciones de hipersensibilidad en forma de exantema, edema angioneurótice, asma, neumenitis, fiebre, artralgias, ictericia conlestásica, hepatitis cró-
níca ao:tiva, eosincnfilia o granulocitopenia. La neumonitis es más frecuente en
ancoanos, puede presentarse de forma aguda o crónica, y prongresar luacia la
fibresis intersticial. Eum pacientes con déficit de glucosa-O-fosfato deshidrogenasa puede ocasionar anemia hemolítica. Raramente se produce déficit de
ácido fólice y anemia megaleblástica. El tratamiento prolongado, especial-
mente eio pacientes ancianos e con insuficiencia renal, puede c)rigiunar polineurmtis. Otros efectons secundarios menos frecuentes son la aparición de nistagmuis, vértigo o parotiditis. La asociación con quinonlonas de 1. generación
es antagónica
Doxiciclina. Es posiblemente en la práctica la única tetraciclina empleada
en urología. Se han descrito reacciooes de hipersensibilidad cutánea con urticana, erupción fija, edema periorbitario, y anafilaxia, evuzadas para todas las tetraciclinas, Produce fotosensibilidad. y acumulación en las zonas de crecimiente del hueso y dientes, produciendo una pigmentación característica. También
ocasiona onicolisis y pigmentación de las uñas. La administración intravenosa
puede producir flebitis, y no se recomienda la intramuscular por ser dolorosa.
Los síntomas gastrointestinales son las reacciones adversas más frecuentes, incluyendo míáuseas, vómitos, diarreas, úlceras esofágicas y pancreatitis. Son dosis dependientes y pueden también aparecer tras su administración parenteral5.
Raranente se han comunicado casos de hepatotoxicidad (degeneración grasa>,
que parecen más frecuentes con dosis altas y en embarazadas, hipertensión cra-
neal benigna, y bloqueo neuromuscalar. Les barbitúricos, las Inidanteinas, la
carbamazepirma, la rifanipicina y el etanol disminuyen la vida media de la doxiciclina por inducción enzimáticatm. Más infrecuentemente que con otras tetracidinas, se ha observado elevación del nitégeno uréico y creatinina en sangre, y
es la tetraciclina de elección en caso de afectación renal7.
336
Al. Puerro, E, Van-gas, >-Xl/?nnso Abon-eno
Trimetoprim/sulfametoxazol. TamInién denominado Cotrimonxazoi, es la
asociación de trimetcnprim con sulfametoxazol en proporción 1/5 consiguiendo efecto sinérgico. La mayoría de suis efectos secundarios se deben a la sulfonnamida, y por ello puede planterase el empleo de triunetropim cmi solitario.
Los efectons adversos más frecueiítes soin gastronintestinales (nálmseas, vómitos,
anorexia), y reacciones derunatológicas (raslí, urticaria) que tienen lugar en
aproximadamente un 3/5% de les pacientes, y que son dosis dependientes.
Los efectos adversos más graves sen las reacciones hematológicas y las de hipersensibilidad, que tienen lugar en menons de un 0,5%”. Las reacciones de hipersensibilidad incluyen la aparición de encamítema, anafilaxia, fiebre, eritema
nudoso>, eritema multifonrme (incluyendo síud reme de Steveuns-Jobmnsomn), sindrc>me de Lyell”, un cuadro semejante al de la cinfermedad del simeron y vasculitisí. Se lía descrito intolerancia digestiva, toxicidad hepática con icterio:ia, y
pueden aparecer conjuntivitis, bronceespasnio. alopecia y artralgias. Raramente se produce necrosis tubular o nefritis intersticial. Con dosis altas puede pronducirse cristaluiria, sobretodo> si la diuresis es escasa y el plí de la erina es muy ácido. Puede producir colitis pseudomembranosao. Es muy rara la
aparición de lnocio, Inipotironidismo, artritis y alteraciones psíquicas. También
con poca frecuencia puede originar alteraciones hiematológicas como leucopenia <l-iO% deles tratados)05, tronmlnocitepenia, agranulocitosis, aplasia medular o amnemia hemc>lítica (a veces relacionunada con la existencia de un déficit
de glucosa-6-fosfato deshidrogenasa0. A nivel del sistema nervionso ocasioína
cefalea, vértigo, ataxia, desorientación, y psicosis aguda. Menes frecuentemente da lugar a neuritis periférica y parestesias”. Eií pacientes ccnií enfermedad renal preexistente puede empeorar la funo:ión renal 02 Ccnn poca frecioencia se han registrado casos de hepatitis. Lo>s niveles de fenitoina pueden verse mncrementadons en forma marcada0t
Metrenidazol. Los efectons adversos sólo alcanzan intemísidad suficiente
para interrumpir el use del fármaco en contadas ecasionesí’.. Los más frecuentes son los que afectan al aínarato digestivo, siendo las náuseas (12%> el
más frecuente2, no obstante en cerca del 5% de casos se presentan también vómitos. donlor abdominal y sabor metalice”, y raramente pancreatitis0-08. A nivel hematológicon puede producir leucopenia y unas raramente trcnmbopenia2.
Se han descrito prurito>, y rash incluyendo un cuadro similar a la pitiriasis resáccaiS. Puede dar lugar a camídicliasis onral2-”. El tratamiento prolongado puede onriginar polineuritis seunsitiva, cuya reversión puede ser lenta e incompletaí?. Con dosis altas y mantenidas duirante tiempo se ha descrito hasta uu
25% de incidencia de connvulsiones, ataxia y encefalopatía05. También se han
descrito efectos adversos a nivel de aparato genitouriuíario conmo disimrma, costitis, poliuria, incontinencia, coloración oscura de la erina, sensación de presión pélvica, sequedad de vulva o vagina, dispareommia, y descenso de la hlnido”. En el animal es carcinógeno, y lons productos nitrorreduciclos en el citoplasnía bactcriauío sen mutágenes para la bacteria, por ello es preferible
fufartos secundarios da los antibióticos en Corojoguh; alergia medicamentosa
33?
evitar el empleo de dosis altas durante periodos prolongados si se dispone de
otra alternativa. Interfiere con el metabolismo del alcohol (por lo qime puede
producir efedo disulfiram)í, e inhibe el metabolismo de la warfarina y otros
anticoagulantes orales del tipo de la cumarina, aunnentandon el tiempo de protrombinaS-T9 En el 6% de los casos de administración intravenonsa da lugar a
tromboflebitist
Fonstemicina treunetamnol. Se han descrito elevaciones de entunas hepáticas GOT, GPT y LDH, reacciones dérmicas, eosinofilia y trastornos de la visión9 e intolerancia gastrointestinal en la administracióun eral.
HIPERSENSIBILIDAD MEDICAMENTOSA
La incidencia global de las reacciones de hipersensibilidad se encuentra
entre cl 2 y el 25% La gran mayoría son erupciones cutáneas relativamente
imnofensivas. Las reacciones más graves (anafilaxia, hemólisis y depresión de
la médula ósea) que pueden amenazar la mida, sen menos frecuentes. La incidencia de muerte debida a las reacciones de hipersensibilidad entre lons pacientes hospitalizados se estima en 1:10.000. La penicilina, cíne por el momente es la causa más común de la anafilaxis inducida por fármacos, produce esta respuesta aproximadamente en 1 por cada 50.000 pacientes a los que
se les ha administrado el fármaco20. La mayor parte de lcns fármacos sen sustancias- de baje peso molecular, y no tienen capacidad immnunogénica pcnr sí
mismos, pero bién el propio principio active, o bién y más frecuente, alguno
de sus inroductos metabólicos pueden combinarse con una proteína endógena
y formar un complejo antigénico, que por lo común tras un periodo> de latencia dc cuna e des semanas induce la síntesis de anticuerpos. La administracíen
inesterior del fármaco puede desencadenar una interacción antígeno-anticuerpe quc dará lugar a las manifestaciones típicas dc la alergia. En algunos casos, las impurezas de la preparación, en lugar del propio fármaco, pueden ser
los causantes de la reacción.
Siguiendo a Cemmbs y Gell20, las reacciones alérgicas pueden ser de cuatro grandes tipos. Las reacciones de tipo 1, II y 111 están mediadas por anticuerpos, mientras que las de tipo lv están mediadas por células.
Las de tipo 1, o anafilácticas, son mediadas por anticuerpos de tipo 1 gE.
Dan lugar a la liberación de mediadores conmo la histamina, leucetrienos, y
prostaglandinas, que ocasionan vasodilatación, edema y una reacción inflamateria. Lons sitios principales en que ocurren estos tipos de reacción son el
tubo digestivo (alergias a onedicamentos), la piel (urticaria y dermatitis atópica>, la vía respiratoria (rinitis y asma), y los vasos (cheque anafiláctico>. Estas reacciones surgen rápidamente tras el contacte con el antígeno> al que se
está sensibilizado, y por ello reciben el nombre de reacciones de hipersensibi1 idad inmediata. Muchos fármacos pueden dar lugar a ésta reacción, pero
338
A t. Pooao—o-o, E. O a o-gas, A(fiorosoo Alare-non
cerca del 75% de las muertes por shcnck anafiláctico so>n provocadas por el
emplee de penicilina. Otros fármacos implicados son la ACTII, la insulina
las heparinas, los dextranos, anestésicos locales, clonrhiexidimía, las vacunas y
lons olerivadc>s serelógicos.
Las de tipo Ji, o eitolíticas, scnoi mediadas por anticuerpos de lons tipos lgG
e lgiU, y se atribuyen a la activación del sistema de complemente. Les lugares preferentes en que tienen lugar las reaccionnes citonlíticas son las célonlas del
aparaton circulatorio, pudiendo dar lugar a su destrucción, o> bién actuar sobre sus progenitoras en la médula ósea. Es el caso de las anemias hemolíticas
por penicilina. ¡netildopa, y sullcnmnaniidas; la púrpunra trombecitonpénica induenda por quinina, heparinas y digoxina; la agranulocitosis Inrovocada por sulfonamidas, cleramfeniconl, y onetiltic>uracilo; y el luipus eritematoso sistémico
ocasionado po>r hidrajazina o> proncainamida.
Las de tipo III. o de Arthns, son mediadas predeminantenoente mor igG,
mediante la formación de complejos antígeno-anticuerpo que más tarde fijaun
complemente. Estos cemplejons se fijaun en el enolotelie vascular donde deseuncadeinan una inflamación desb-uctiva llamada enfermedad del suero, que cursa con urticaria, artralgia o artritis, linfadenopatía y ficinre. Ptuede ser desencadenado por stmlfcnnamidas, penioilinas, ciertos aunticonvulsivos y vonduros.
Las de tipo IV, o de hiperseulsibilidad tardía, seuo mediadas por les linfocites T y los macrófagos sensibilizados, c~ue al interaccionnar con el antígeno
dan lugar a una reaccióon inflamatoria mediante la producciómí de lionfocinas y
la penetración ulterior de neutrófiles y macrófagons en la zona22. Es el caso de
las dermatitis por contacto, y en algunos casos pueden dar lugar a lesiones
exfoliativas graves que pueden amenazar la vid a.
La tabla 1 recoge lcns fármacos implicados en reacciones aléo-gicas juinto a
su forma de manifestación.
BLBLlOG RAFIA
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Efoctos sacun4urios de los antibiciticos en (Trología; alergia nzadicanoentosa
IMiLA
1. Fármacos implicados en reacciones alérgicas
Fármaco
Reacción
ACTII
AT¡nicono] col
Aloomn ti riel
A rnexic’i Tioro
AioesOési ecos 1 ocaíes
Anticonceptivos <niales
ík utífilaxis
Cap-Lnpri.T
Cefamaridool
C iclofonsf:oonida
Cicnuu-oonfnico nl
Cío o riiexic]iiua
(Áon rp onrun oco,n;o
C Tonipicopamida
Ci onx;íciliuo:-o
[)erixx-vionsseuon]oigicons
Dext ru-ooíons
I)igonxumna
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Pen~to>i
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F] o ox:-uci]ina
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IT e[oarion: os
.1 icí iuoiaziona
Tonsuoliooa
Ineu’matitis
Deo’m:ititis. iirticaroa
Aouemia Ineonnoiltica
Auu:ofihoxis
Lu~ ptus euutrnatcoscn
lJrticaria. derunatitis.
tuefritis
T uonmlncncit(níneoni -o
Aunafi Taxis, uuo-tucar’ia
íkg ana] ocitcnsi
Amuuofi Taxis
Luo
1ouos erítematoso
Auuerunia ioenoonTitia-i
Hemnatitis
koiafi] axis
Aunafituxis
1?ucnonnlnoncitonjnenia
epuotitis
Ir<nonloonNois
1 Iemnatitis, euifernwd¿ud
] lepatitis
1 Tepatitis
del SusofO, Ivjnus
T ronrnlndndltomneoli a, anafilaxis
I>uuJnoos
Isononiacioito
Nleti ldooín:-o
Atuafil axis
N’¶eti]tioouoracilon
N-¶iuoonseuoru-o
Par:-íceútonnoní
Be tu olía unina
Agu-aonuulcncitosis
Ncutuopenia, tuenubonpeoni;-í
ti’roonlne~neoíia
Pernici]inas
Puacto]cnl
l->uiunidooia
t>ootneneoid
Pr’oxuu¡o:onn da
Qooinidhu-o
Qiiinioi:o
Saiiciiatons
Sidfonamid:os
Suxaoinetcnonion
T’i cnpcootonruo
Too]louitu-omicla
X-’acuunas
No no]lo r’ons
Lupus
Aroemia hemolitica, neutronjneni:-o,
hemnatitis
Pieootuonpeni a
Asma, enfermedad de] soierxn,
deimnOltis, oorticaria, oonafi]axis,
-ouoenuia ]uenno]itica
Dermatitis
J>uptis
Aioemtu hemonlitica
IÁo9US
Tro omínocitepeuni a
Tronnbecitonmnenia
Aonafilaxis, :-osma, um-ticaria
Lu mnios, enfermedad dei «Locro, agrasutilocitosis.
aiiiemia Tnenicn]ftio~o
Aonafi]axis
Anafi]axis
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Aonafllaxis
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