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ACADEMIA DE GUERRA DE LA F.T.
OPERACIONES Y ESTRATEGIA NAVAL
INTRODUCCION
La presente nota de aula “Operaciones Navales” y “Estrategia Naval”, es un
documento referencial de apoyo a la enseñanza de la Filosofía de la Guerra en el Mar y
su modo de empleo, para ser utilizada por los alumnos del Primer Año de Estado Mayor,
de la Academia de Guerra del Ejército.
En su contenido el documento pretende introducir en el pensamiento del Oficial,
una diferenciación de lo táctico, operacional y estratégico en la concepción doctrinaria
naval, hecho que permitirá en forma súbita traspasar el nivel en el cual se encuentra
ubicada la asignatura en el Curso de Estado Mayor.
Alcanzado esta primera meta, su adentrará con pensamientos estratégicos en la
filosofía misma de la guerra en el mar, buscando definir con criterio analítico los
objetivos de la Estrategia Naval y el empleo de sus medios en tales fines.
Este conjunto de elementos que podemos ubicarlos como componentes de un
ciclo de actividades de la Guerra en el Mar, que obedecen a una actitud estratégica
definida y analizada dentro de la Maniobra en el Mar.
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OPERACIONES Y ESTRATEGIA NAVAL
U N I D A D 1.0
I
EL ORIGEN DE LA GUERRA EN EL MAR
Mucho se ha escrito acerca del origen de la guerra. Las motivaciones que la
originan han sido analizadas desde diferentes puntos de vista, atribuyéndola en
unos casos al aspecto biológico, asumiendo que las leyes que rigen la vida de los
seres vivientes son aplicables a las colectividades. Otros autores establecen
originales características que representan los antecedentes más comunes por los
cuales los pueblos se precipitan a las guerras. Finalmente hay autores que
introducen un aspecto filosófico encontrando el origen primario de la guerra en la
ruptura del ordenamiento de la vida entre dos concepciones diferentes de ella.
Sea cual fuere el origen real, lo que se puede afirmar es que la guerra ha sido
un fenómeno que ha matizado a todas las épocas y a todos los pueblos del mundo.
El progreso de las civilizaciones impuso el progreso de los métodos y medios
para imponer la fuerza. Las elementales armas primitivas fueron convirtiéndose
paulatinamente en sistemas para atacar y destruir con efectos más letales; y al igual
que estas, se fueron creando órganos especiales dedicados específicamente a
cumplir la función de imponer la fuerza, a entrenarse y buscar la perfección de los
métodos para hacer más efectiva la guerra.
Es aquí donde podemos situar al origen de las Fuerzas Armadas en la
concepción actual.
A través de la historia y desde el punto de vista naval , podemos apreciar que
la geografía ha sido un elemento determinante en la conducta de los pueblos; los
griegos igual que los fenicios a causa de este factor fueron prácticamente impelidos
al mar y eso los obligó a emprender en la tarea de conquistar los mares como medio
para expandirse, perfeccionando cada vez más sus medios de navegación comercial.
Pero el mar al no estar exento de peligros y de la presencia de buques
mercantes, dio origen al nacimiento de la piratería por lo cual, los países marítimos
no tardaron en darse cuenta de la necesidad de construir buques acondicionados
para defender a sus mercantes de la piratería.
Por otra parte, la guerra terrestre dependía en mucho del transporte
marítimo, especialmente en países marítimos e insulares provistos de áreas con
estrechos e islas, para efecto de transportar soldados y pertrechos.
Los buques de guerra pronto estuvieron en posesión de los pueblos
adversarios y la guerra con sus tónicas terrestres fue trasladada al mar, por ello,
para consumar los enfrentamientos que forzosamente debían ser cuerpo a cuerpo
era necesario abordar a los buques, lo cual constituyó la primera táctica usada en la
guerra naval.
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1.- EVOLUCION HISTORICA EN EL CAMPO TACTICO DE LA GUERRA EN EL MAR.
Salamina, 480 AC. es considerada como la primera batalla naval en la historia,
por sus consecuencias dentro del contexto de la guerra general. Previamente a
Salamina, en la época heroica de Grecia, la guerra naval no existía, los buques
solamente se utilizaban como transporte; sin embargo en el siglo VII AC. ya
hubo naves de guerra propiamente dichas, con proas especialmente reforzadas
para embestir y con cubiertas para llevar marinos preparados para abordar al
buque enemigo. Desde el año 650 AC. aproximadamente, el esfuerzo de la
táctica naval se basó en la embestida y las naves se hicieron más largas, más
rápidas y más bajas. La nave de guerra clásica era el Pentecontore, con 25
remeros a cada banda.
Entre el 550 y 500 AC., la rivalidad con la flota fenicia de los persas, obligó a
los griegos a desarrollar un navío más poderoso, naciendo el Trirreme, que
durante 200 años había de dominar las aguas del mediterráneo oriental y se
convirtió en el prototipo de embarcación que dominó la guerra naval hasta la
batalla de Lepanto en 1.571. En el Trirreme podía haber hasta 170 remeros, los
remos estaban probablemente dispuestos entre filas superpuestas; era rápido y
apto para la maniobra, ofrecía grandes probabilidades a los navegantes hábiles.
La primera batalla en la que intervinieron flotas de trirremes se libró en Lade,
en 494 AC. cuando los persas, con fuerzas muy superiores aplastaron la revuelta
jónica.
En los años 490 AC. era obvio que Persia invadiría Grecia por tierra y mar.
Temistocles, el mayor estadista ateniense de los años 480 comprendió que si
Atenas no se convertía en la mayor potencia naval en el Egeo, toda Grecia
estaría perdida; así persuadió a la asamblea para que se construyeran 100
trirremes. En la primavera del 480 AC. la invasión persa se concretó y tras la
derrota de los espartanos en las Termópilas, quedaba claro que solamente la
flota podía salvar a Grecia. El problema consistía en inducir a la flota persa a
combatir en aguas favorables a los griegos; Temistocles decidió que en el lugar
adecuado era frente a la isla de Salamina, considerando que en angostas aguas la
flota persa se hallaría abarrotada y con sus mayores dotes marineras; los
griegos tendrían mayores probabilidades en la pelea.
La táctica de los trirremes griegos, consistía en cercenar los remos de los
navíos enemigos, dejándolos ingobernables y embestirlos después por el centro
y a veces abordarlos.
Desde el punto de vista táctico, la batalla de Salamina no tuvo nada de
notable, pero su importancia estratégica fue enorme pues puso fin a una flota
persa.
En la época romana, el uso de varios bancos de remos había tenido por
secuela unas naves de guerra de increíbles dimensiones, pero con poca facilidad
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de maniobra; el ataque apoyado en proyectiles disparados por ingenios bélicos
había llegado a ser tan efectivo como el espolonaje o las tácticas de abordaje.
La batalla de Actium, el 31 AC. entre romanos y egipcios puso en vigencia
para los romanos, la lección de los piratas de la Liburnia. Sus ligeras y rápidas
embarcaciones, con sólo dos bancos de remos, eran copias de los ágiles
“Bajeles” que habían estado dedicados al continuo pillaje del comercio romano.
Así, el encuentro vino a ser una versión naval de la disputa entre los principios
de la legión y el falange. Los buques liburnianos (pues el nombre iba a
perseverar en las nuevas naves de guerra) se mostraron muy flexibles,
esquivaron los espolones de las torpes naves enemigas y eludieron las
andanadas de proyectiles pesados.
La movilidad y el uso de los brulotes, además de ser los elementos que
decidieron la batalla de Actium, motivaron el comienzo de una tendencia que
habría de seguir la táctica naval durante diez siglos. El Liburniano o hasta el
navío con un solo banco de remos, había de convertirse en la principal unidad
de las operaciones navales hasta la tardía Edad Media; así mismo, el empleo del
brulote o de diversos ingenios lanzallamas iba a ser la más efectiva forma de
ataque.
En la guerra de los Cien Años, iniciada en 1.337 entre ingleses y franceses la
primera batalla importante se libró en el mar, frente a la costa de Sluys, en
1.340. Los buques tenían ahora altos costados, la popa y el castillo de proa muy
elevados; eran generalmente impulsados por una gran vela cuadra. Las tácticas
en el mar correspondían a las de tierra, al igual que su armamento. Los
franceses pelearon en Sluys con espadas y picos y algunas ballestas, mientras
los ingleses confiaron en los hombres de armas y, sobre todo, en los arqueros
armados con el arco largo (disparando flechas especiales provistas de anchas
puntas para destruir el aparejo y las velas). Ambos bandos formaron sus naves
en tres divisiones, mientras los franceses encadenaron sus embarcaciones
juntas con el objeto de formar tres macizas plataformas flotantes para sus
hombres de armas; los ingleses adoptaron una formación más flexible,
conteniendo sus naves y usando alternativas, arqueros y hombres de armas. La
táctica inglesa consistía en efectuar un bombardeo de proyectiles desde larga
distancia con el fin de debilitar al enemigo, y luego, acercarse para que sus
hombres de armas con espadas y lanzas pudieran abordar las naves enemigas.
Los franceses cedieron finalmente perdiendo siete octavas partes de sus buques
y tres cuartas partes de sus hombres.
En la segunda mitad del siglo XVI, cuando Venecia era acosada por el Imperio
Turco, las tres potencias cristianas: Venecia, Roma y España debieron unirse
formando la “Liga Perpetua” y convinieron en preparar una flota unida, la que
estuvo lista en 1.571 y fue la protagonista de la batalla de Lepanto, considerada
como la mayor contienda naval de los 15 primeros siglos.
En las aguas relativamente tranquilas del Mediterráneo, la “Galera” había
sobrevivido como unidad táctica mucho después que fuera reemplazada en el
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Atlántico. La habitual nave de guerra de este tipo tenía una eslora de 150 pies y
disponía de dos o tres mástiles dotados con vela latina para navegar en crucero.
Para la maniobra de batalla, la galera fiaba por entero de sus 54 remos, 27 a
cada lado, servidos por no menos de 6 remeros. El choque del espolón y el
abordaje seguían siendo considerados como ataques eficaces, aún cuando la
potencia de fuego del arcabuz desempeñaba un papel decisivo.
Como única contribución táctica los turcos introdujeron la “Galeota” de 18 a
24 remos y una tripulación de 200 hombres. Era esencialmente una galera de
tonelaje medio, resultando una nave idónea para las incursiones por su
velocidad y fácil manejo. En el otro extremo, los venecianos idearon la
“Galeaza”, galera de doble tamaño cuyas mayores dificultades de maniobra
estaban equilibradas por una mayor dotación de remeros y marineros.
Siendo las naves de ambos bandos básicamente iguales, algunas pequeñas
diferencias técnicas tenían considerables importancia. Las Galeras Cristianas
llevaban cinco cañones montados en la proa que disparaban directamente hacia
adelante; los turcos solamente tenían tres cañones; únicamente la flota cristiana
disponía de Galeazas, cada una de las cuales llevaba 30 cañones montados en la
cubierta sobre los remeros, dos en proa, seis en la popa y once a cada banda.
Los soldados individuales de la flota cristiana estaban mejor armados y la
mayoría de ellos disponían de arcabuces. El arco turco era, sin embargo, una
arma poderosa, con mayor volumen de tiro; así pues, los turcos tenían más
buques y un alto prestigio, pero ciertas ventajas técnicas favorecían a los
cristianos.
La maniobra tuvo poco que ver con los resultados, pues, Lepanto fue
virtualmente una batalla terrestre sostenida entre ejércitos combatiendo sobre
sus cubiertas o en las de los contrincantes. El espoloneo y el cañoneo, así como
los asaltos al abordaje fueron empleados por ambos bandos hasta que los
cristianos tuvieron preponderancia. La derrota turca fue abrumadora y así
terminó el encuentro naval más decisivo desde la batalla de Actium.
Hacia fines del siglo XVI, ante la política inglesa de respaldar secretamente
las incursiones corsarias contra las naves españolas, no es sorprendente que
tras una década de depredaciones, el reino español decidiera destruir el poderío
marítimo inglés mediante su Armada Invencible. Al estallar abiertamente las
hostilidades entre Inglaterra y España en 1.587 los oponentes se hallaban
parejos, puesto que la superioridad española en tonelaje se hallaba compensado
por la ventaja inglesa en número de embarcaciones, peso y distribución de
armamento; pero la “Armada Invencible” era simplemente un ejército flotante,
dirigido por mentes militares terrestres y utilizando personal naval sólo para el
transporte. Los navíos ingleses estaban tripulados por marinos de altura y eran
mandados por hombres cuyos nombres eran sinónimos de intrepidez en todos
los mares. El encuentro más resonante se dio cerca Gravelines. La táctica
española estaba basada en la reciente victoria de Lepanto que en realidad había
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sido una batalla terrestre librada sobre cubiertas en base al acosamiento y al
abordaje. Los ingleses anticiparon la guerra naval del futuro fiando por entero
en el cañón, manteniendo las distancias con sus buques y disparando andanadas
largas que causaron grandes destrozos y la consecuente derrota de la Armada
Invencible.
Durante la primera mitad del siglo XVII el pueblo marítimo más destacado
fue el Holandés, su éxito había sido logrado durante el tiempo en que Inglaterra
y Francia estaban ocupados en oponerse al poderío español. Cuando España
dejó de ser una amenaza, los holandeses se vieron frente a la competencia,
sobre todo por parte de Inglaterra.
El tipo de navío de guerra en ese período era un desarrollo del “ Galeón” de la
Armada Invencible, solo difería de él esencialmente en cuanto al tamaño y al
número de cañones. Los navíos ingleses eran más pesados que los holandeses
debido a las aguas menos profundas en que los holandeses debían moverse. Los
holandeses habían desarrollado considerablemente el aparejo desde el siglo XV,
incrementando el área del velamen mediante la adición de gavias de mesana y
vela encapilladas en proa y en popa. El aparejo había de alterarse muy poco a
partir de entonces hasta Trafalgar. También los cañones alcanzaron en 1.670 la
forma que habían de conservar durante cerca de doscientos años. Se fundían
ahora en una sola pieza, con el ánima lisa y el diámetro exterior del cañón
disminuyendo la caluta hasta la boca.
En 1.652 la guerra entre holandeses e ingleses estalló abiertamente, cada
bando movilizó unos 80 buques de vela. La flota inglesa contaba con mejores
navíos y mejores armas; las naves holandesas, con su escaso calado podían
utilizar como refugio las líneas de bancos de arena en el canal de Mancha. Los
Almirantes holandeses eran probablemente los mejores marinos del mundo y
los oficiales superiores eran capitanes mercantes de gran experiencia. En la
flota inglesa los oficiales superiores eran soldados por su formación, buenos
combatientes, pero inexpertos en el mar.
Los encuentros de Dungeness y Porland con triunfos alternos de holandeses
e ingleses respectivamente, pusieron en evidencia las tendencias tácticas de los
dos bandos. Los ingleses emplearon en teoría la táctica de formación en
columna, pero la destreza marinera y la disciplina no eran lo bastante buenas
para ésta tarea; por consiguiente, en la práctica sus navíos combatieron como
los holandeses, en grupos de escuadras, confiando unos en otros para el apoyo
mutuo y procurando aislar alguna nave enemiga para luego bombardearla y
abordarla. Ambos bandos reconocían la ventaja de la posición de sotavento en
la batalla; pero los holandeses, mejores marinos, usualmente la conseguían
primero, explotaban su ventaja disparando en el momento en que la ondulación
de las aguas levantaba al buque para dañar la arboladura del enemigo,
imposibilitándole escapar hacia barlovento. Esta táctica fue rentable para los
holandeses en la batalla de Dungeness. A partir de entonces Inglaterra
comprendió que la guerra naval exigía una administración modernizada, buques
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adecuados y profesionales. En la segunda mitad del siglo XVII, después de dos
períodos de guerra con Holanda y uno de neutralidad mientras se disputaban
Holanda y Francia, finalmente Inglaterra alcanzó el nivel de Holanda como
potencia comercial y marítima.
Durante el siglo XVIII, hubo pocos progresos en el diseño de las naves,
excepto en cuanto a la desaparición del alto castillo de proa en los buques y la
introducción en 1.761 del embono de cobre para el fondo del buque, con el
objeto de incrementar su velocidad y resistencia.
Tanto Francia como Inglaterra que eran los que más sobresalían en el campo
marítimo, tácticamente se adherían a la formación en columna, sin embargo,
ésta rígida táctica excluía la posibilidad de una victoria decisiva; así, los triunfos
navales de Inglaterra entre 1.692 y 1.782 fueron logrados por hombres que
osaron ignorar las reglas oficiales y rompieron la formación para perseguir y
destruir al enemigo.
Entre 1.794 y 1.805 la marina inglesa obtuvo seis victorias importantes. Así,
pues, este período contrastó con los doscientos años anteriores desde la derrota
de la Armada Invencible, cuando los encuentros navales decisivos y en gran
escala habían sido raros. Desde el punto de vista técnico, los buques de guerra
seguían siendo iguales, pero ahora los marinos británicos habían descubierto
por fin, el modo más efectivo de utilizarlo. Una razón de esto fue la introducción
de un comprensivo sistema de señales, cuya eficacia permitió a los comandantes
pasar de formaciones rígidas y preestablecidas a la puesta en práctica de
tácticas navales complicadas, flexibles y no obstante, controladas.
En 1.794 el “Glorioso Primero de Junio”, los ingleses derrotaron a los
franceses; usando el sistema de señales, consiguieron la iniciativa y atacaron
siguiendo un principio táctico enteramente nuevo: el de romper la línea
enemiga desde barlovento. Esto les permitió elegir el momento más oportuno
para embestir al enemigo en formación oblicua y cortar su línea en puntos
sucesivos; después de lo cual cada uno de los navíos británicos trababa combate
con un enemigo a corta distancia desde sotavento, lo cual impedía al enemigo
escapar a favor del viento. Esta táctica combinada domino éste período que
incluye las grandes batallas de Nelson hasta Trafalgar que fue la aplicación más
perfectamente coordinada y rotundamente afortunada, así como, una de las
últimas más importantes de la era de la vela.
En el siglo XIX, con la revolución industrial vino un torrente de inventos y
armas, blindajes y comunicaciones. En la esfera de la guerra naval se concretó
la transición de la vela al vapor, los ingleses que eran poseedores de la flota más
grande del mundo, a pesar de estar a la cabeza en la aplicación de la tecnología
del vapor en otros aspectos, se resistieron en el campo naval. Las nuevas
tendencias fueron por tanto aplicadas en potencias inferiores como Francia y
Estados Unidos. El uso de la hélice para buques fue acogido primero en América
y en 1.834 los EE.UU. botaron el primer buque de guerra con hélice.
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En 1.837 la marina francesa fue la primera en adoptar para los buques los
cañones que disparaban granadas en vez de proyectiles sólidos; la granada era
como una bomba de mortero, llena de pólvora y detonaba por medio de una
espoleta de tiempo; era disparada por un cañón en trayectoria horizontal y por
tanto, con más precisión. Siguieron a Francia en ésta aplicación las marinas
británica y norteamericana.
Las granadas resultaron prácticamente eficaces contra los buques de madera
como lo demuestra el combate de Sebastopol en 1.854, durante la guerra de
Crinea. La contramedida a la introducción de éstos cañones fue la protección de
los buques con blindajes. En 1.857, los pioneros de la época, los franceses,
empezaron a construir una “Flota de Acorazados”, que eran buques a vapor y de
madera convertidos en acorazados por un cinturón de hierro de 13 centímetros
de espesor que recubría el casco. Los ingleses siguieron su ejemplo.
Puesto que los cañones habían conducido a los acorazados, era preciso
aumentar la potencia de los cañones. En 1.870 surgió un cañón de siete
pulgadas. La táctica de los días de la navegación a vela estaba anticuada y dos
acciones entre acorazados indicaron el camino a la nueva táctica. El combate
librado en Hamton Roads durante la Guerra Civil Norteamericana en 1.862,
entre el Merrimac y el Monitor, demostró el valor de la torreta giratoria al
posibilitar el disparo en los 180 grados.
En 1.866 las flotas de acorazados de Italia y Austria se enfrentaron en la
batalla de Lissa, en el Adriático; sus corazas hicieron ineficaz el respectivo
cañoneo y la batalla se redujo a un encuentro como las que libraban las antiguas
galeras.
Como resultado de estas acciones, los franceses adoptaron la torreta de
cañones giratoria y el espolón, haciendo lo mismo a corto plazo otras marinas.
El resultado de un cuarto de siglo de evolución de los buques de combate dio
como resultado un navío puesto en servicio en 1.875 de 9.330 toneladas, de las
cuales el 27 % era coraza; tenía un espaldón prominente, llevaba cuatro
cañones de 35 toneladas en dos torretas a proa y popa capaces de disparar en
todas direcciones; desarrollaba 15 nudos y aparte de ofrecer un blanco
reducido, era una plataforma muy estable.
Vale la pena mencionar otros tres inventos en el dominio de la guerra naval.
En 1.855 Rusia hizo el primer uso serio en el Báltico, de las “Minas Flotantes”.
En 1.863 fue botado al agua el primer Submarino por los franceses. En EE.UU.
los pequeños “Semi-sumergibles del sur”, llamados “David” causaron daños a la
navegación norteña, durante la Guerra de Secesión.
Los norteamericanos de ambos bandos también experimentaron con
torpedos, habiendo logrado el primer torpedo “pez” en 1.866. Estas
invenciones fueron explotadas inicialmente por potencias navales inferiores y
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luego adoptadas por Gran Bretaña.
Mientras estas invenciones iban
transformando a la guerra naval, Gran Bretaña mantuvo su posición de primera
potencia marítima; pero los cambios en la táctica naval todavía no se habían
sometido a ninguna prueba en un conflicto importante.
Antes que un sólo buque hubiera sido hundido en combate, la amenaza del
torpedo y submarino, produjeron un trastorno en la construcción naval.
Cuando el peso del blindaje alcanzó su inevitable límite, se debió reducir los
sectores cubiertos con planchas de hasta 24 pulgadas de espesor a solo las
partes consideradas vitales y el vapor se convirtió en la única fuerza de
propulsión.
Para la última década del siglo XIX había tomado forma la construcción de un
moderno buque de guerra, con una coraza de diseño perfeccionado conocido
como “Harvey”; cubría las secciones más vulnerables, formando una faja bajo la
línea de agua que tenía un espesor de 9 pulgadas como mínimo y una
profundidad máxima de 15 pies. Cuatro cañones de 12 pulgadas del nuevo
modelo rayado de tiro rápido y 12 de 6 pulgadas; todos alojados en casamatas
de gruesa coraza. Tenían 14.900 toneladas de desplazamiento, 390 pies de
eslora y 17 nudos de velocidad; sus cañones alcanzaban hasta 4.000 yardas. A
pesar de toda su potencia destructora, los nuevos monstruos no tenían defensa
adecuada contra la veloz torpedera.
Entre 1.865 y 1.898 ante la ausencia de combates navales, la táctica
evolucionó teóricamente. Las posibilidades de maniobras tales como “cruzar la
T” fueron reconocidos antes de ser puestos en práctica. Hacia finales del siglo,
con la guerra entre Estados Unidos y España, pese a las acciones navales que se
dieron, la gran diferencia de poderío de las flotas no permitió establecer
lecciones tácticas para los buques de las nuevas marinas.
El siglo XX, en contraposición al anterior, fue pródigo en experiencia para la
guerra naval. En los albores del siglo, en la confrontación ruso-japonesa; la
batalla de Tzushima de 1.905 fue el escenario en el cual la flota japonesa gracias
a su velocidad pudo ensayar la táctica conocida como “cruzar la T”; usando
como base la formación en línea de fila la cual constituyó una notable hazaña en
la historia de la táctica naval. Los japoneses hicieron uso de otro invento aún no
conocido por muchos, la telegrafía sin hilos (como etapa experimental había
sido ya instalada en embarcaciones pesqueras tan frecuentemente usadas por
los estrategas japoneses), era operada por expertos marinos y retransmitían
toda información recibida de su servicio de espionaje.
Las lecciones de Tzushima dieron concretamente origen a la década más
febril de la historia en la construcción naval, materializada en el “Dreadnougth”
que caracteriza a la época de los acorazados mayores, dotados de alta velocidad
a la vez que una terrorífica potencia de fuego. Los más grandes alcanzaban
25.000 toneladas, movidos por turbinas que daban una velocidad de hasta 25
nudos, una faja acorazada de un máximo de 13 pulgadas y con cañones que por
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primera vez alcanzaban las 15 pulgadas, cuyo alcance alrededor de 20.000
yardas, prácticamente quintuplicaba la máxima de 4.000 lograda en Tzushima.
Las tácticas navales hallaron una réplica en la creación de un buque especial,
el “Destructor”. La velocidad y sus cañones ligeros de tiro rápido se mostraron
tan efectivos que la embarcación torpedera desapareció rápidamente,
asumiendo sus funciones el mismo destructor una vez dotado de tubos
lanzatorpedos; en igual forma cuando el submarino se convirtió en una real
amenaza, el destructor dotado de cargas de profundidad se hizo apto para la
caza submarina.
El “Acorazado” tenía otra limitación táctica, puesto que su coraza limitaba la
velocidad. Este inconveniente fue descubierto por otra adición a la flota, de tipo
intermedio, situado entre la velocidad del destructor y la potencia del
acorazado. Posteriormente la competencia de las naciones condujo al
desarrollo del “Crucero Pesado”, con un desplazamiento de 12.000 toneladas,
con cañones de 10 pulgadas y faja acorazada bajo la línea de flotación de 8
pulgadas de espesor. Finalmente, se distinguieron los cruceros ligeros y pesados
como dos tipos distintos.
Para 1.914, el torpedero había sido ampliamente sobrepasado por el
destructor, el cual probó alcanzar altas velocidades y llevaba 6 torpedos. El
submarino para entonces tenía mayor radio de acción y las minas habían sido
provistas de mayor potencia explosiva.
Toda esta maquinaria moderna tuvo su campo de prueba en la batalla de
Jutlandia con el enfrentamiento de las flotas de Inglaterra y Alemania, durante
la I Guerra Mundial en 1.916. En el aspecto táctico la razón de la victoria
alemana puede hallarse especialmente en tres ventajas materiales: mejores
instrumentos de telemetría, una distribución más científica de la faja acorazada
bajo la línea de flotación y munición con espoleta de tiempo. Las consecuencias
tácticas aparte de la ya usada maniobra de “cortar la T”, fueron el incremento de
las distancias para el disparo y ganar barlovento para uso de cortinas de humo.
En el aspecto antisubmarino, se colocaron minas cuantiosamente, los buques
usaban frecuentemente el Zig-Zag soltando cargas de profundidad. Hacia el
término de la guerra se inventó el “Asdic” para detección de submarinos; pero
ninguno de estos procedimientos resultó verdaderamente eficaz. La solución
fue descubierta al final en 1.917 cuando fue implementado el sistema de
convoyes.
El empleo incipiente de la aviación sobre las fuerzas navales, alertó sobre la
necesidad de implementar medios y tácticas antiaéreas e hizo avizorar a la
aviación como el arma del futuro.
Durante la II Guerra Mundial, el desafío táctico caminó juntamente con el
desarrollo de la guerra y era obvio que cada cambio táctico constituiría una
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sorpresa. En la primera fase hasta la acción de Pearl Harbor y la batalla del Mar
de Coral se pusieron a prueba los cambios hechos en las décadas de paz de
1.920 y 1.930.
El costoso fracaso de la expedición a Gallípoli en 1.915 impulsó a los
americanos a la creación de la Infantería de Marina y la formulación de doctrina
para su empleo. El resultado fue el desembarco a gran escala con buques
especiales, con apoyo de fuego y apoyo aerotáctico. La primera arma sorpresa
fue la aparición de la mina magnética alemana sembrada por aviones o
submarinos; los británicos encontraron para sus buques el antídoto en el
“cinturón neutralizador” que era un cable corriente débil que neutralizaba a la
mina.
Se crearon las “Lanchas Torpederas” y la tendencia fue disminuir los calibres
de los cañones. Posterior a la batalla del Mar de Coral, el “Avión” como
instrumento de ataque a larga distancia, operando desde “Portaaviones”
introdujo varias incógnitas tácticas; la formación táctica adecuada para la
defensa A/A de los portaaviones, cuántos portaaviones usar conjuntamente,
cómo contrarrestar la capacidad defensiva tanto aérea como interna de los
portaaviones. Con el perfeccionamiento de los sensores, cómo emplear los
medios en acciones nocturnas.
La campaña de las Salomón entre 1.942 y 1.943 pone en vigencia el uso del
radar y con él una nueva época de la guerra naval iniciaba con el uso de la
electrónica, los sistemas de control de tiro, que posteriormente con el uso de la
bomba atómica, marcan una época realmente revolucionaria. Las aplicaciones
de los sensores a los sistemas de defensa y al ámbito submarino exigió una
diversificación de la táctica hacia áreas específicas dependiendo de los medios
usados y la amenaza.
En los días actuales, el campo de la guerra naval es dominado por el uso de
los misiles y todos los elementos que construyen para su uso efectivo o para
contrarrestarlo. Los oponentes tratan de adueñarse del control del espectro
electromagnético y acústico y las tácticas se siguen desarrollando bajo la tónica
de combate a larga distancia y el uso de la guerra electrónica.
La guerra que inicialmente era eminentemente terrestre fue ampliando su
campo de acción y en la actualidad podemos decir que no hay espacio que no le
cubra. La guerra se materializa por una serie de actividades conocidas como
Operaciones Militares y según la gravitación relativa de las mismas y las áreas
en donde se efectúan, pueden clasificarse como:
- Terrestre
- Marítima
- Aérea
- Marítima-Terrestre
- Aérea-Naval.
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- Aérea-Terrestre-Naval.
De acuerdo a lo anterior. muchas veces las operaciones se llevan a cabo en
forma simultánea en procura de un objetivo común, en cuyo caso toman el
nombre de Operaciones Conjuntas, en las que participan dos o más fuerzas, bajo
ciertas condiciones.
En lo que se refiere estrictamente al campo de acción de las fuerzas navales y
sus correspondientes Operaciones Navales, es necesario anotar que en el área
marítima ellas pueden ser calificadas de tridimensionales, puesto que pueden
desarrollarse en la superficie del mar y se llaman Operaciones de Superficie,
bajo la superficie, Operaciones Submarinas y sobre la superficie, Operaciones
Aeronavales. La interacción entre los medios que operan en las tres
dimensiones marítimas, dan lugar a las operaciones Antisuperficie,
Antisubmarinas y Antiaéreas.
Las Operaciones Navales mencionadas anteriormente pueden ser
consideradas como las básicas, sin embargo, existen muchas otras actividades
que se llevan a cabo paralelamente o como complemento de las básicas y que
serán mencionadas más adelante.
Finalmente, para distinguir las áreas del escenario en donde se realizan
operaciones básicas, se usa el término de Teatros, correspondiéndoles la misma
clasificación de las operaciones; es decir: Teatro de Guerra a todo el escenario;
Teatro de Operaciones Terrestre, Marítimo y Aéreo , dependiendo de la fuerza
que actúa y Teatro de Operaciones Conjunto , cuando actúan dos o más fuerzas
bajo un mando común.
II
LAS OPERACIONES NAVALES.
1.- DEFINICION
Son el conjunto de actividades que se llevan a cabo en una área marítima ya
sea en, sobre y/o bajo la superficie del mar, con un propósito determinado,
tiempo establecido y con medios asignados, contra una amenaza ya sea
simulada en tiempo de paz, o real en tiempo de guerra. Se incluye las
actividades realizadas desde o hacia el mar.
Estas actividades se conciben y se conducen a partir del escalón “ Teatro de
Operaciones” y se ejecutan en los escalones subordinados, que son los “Órganos
de Maniobra”, los cuales desarrollan varias acciones coordinadas y
consecuentes con la misión asignada.
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2.- ELEMENTOS DE LAS OPERACIONES NAVALES
Las Operaciones Navales requieren de la concurrencia de los siguientes
elementos:
- Misión
- Espacio
- Tiempo
- Medios
- Amenazas
a.- La Misión es el elemento inspirador de las operaciones y que establecida en
términos de efecto deseado o acción a emprender, guía todas las actividades
a llevarse a cabo.
b.- El Espacio ésta materializado por el Teatro de Operaciones Marítimo o
Conjunto, dependiendo de las fuerzas involucradas y cuya extensión está
dada por la capacidad de acción de las fuerzas antes que por sus limites
físicos.
c.- Tiempo es el período dentro del cual se debe cumplir la misión.
d.- Los Medios son los elementos de ejecución y de acción, constituyen todos
aquellos instrumentos materiales y humanos que pueden realizar alguna
actividad en la superficie, bajo la superficie y en el espacio aéreo del teatro
de operaciones marítimo; así mismo, los que pueden emplearse desde el
mar hacia tierra y viceversa.
e.- La Amenaza está constituida por todas las fuerzas de cualquier índole que
tenga capacidad de oponerse al cumplimiento de la misión propia.
3.- LAS HERRAMIENTAS DE LAS OPERACIONES
Bajo esta denominación se intenta agrupar todos los elementos ciencias,
artes, métodos y/o sistemas que en forma teórica intervienen en el proceso de
concepción, conducción y ejecución de las Operaciones Navales.
No necesariamente las Operaciones Navales son las usuarias absolutas de
estas herramientas, ya que en muchos casos son parte de todas las actividades
del mundo moderno. Tampoco debe asumirse como un hecho consumado que
son dependientes de las Operaciones Navales, puesto que en muchos casos se
puede aceptar que son más bien las Operaciones Navales las herramientas de
ese conjunto.
Para determinar cuáles son estas ciencias, se toma como referencia la
definición de Estrategia del Almirante Castex que para efectos de este trabajo
permite señalar todos los elementos que explícita e implícitamente están
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involucrados: “La Estrategia Naval para mí, no es otra cosa que la conducción
general de las Operaciones Navales, arte supremo de los Jefes de alta jerarquía y
de los Estados Mayores destinados a secundarlos. La Estrategia prepara los
combates, se esfuerza en que éstos se desarrollen en las mejores condiciones
posibles y en obtener de ellos los más grandes resultados. Enlaza los unos con
los otros; los domina y los coordina a fin de mantenerlos en la línea directriz que
ella se ha fijado, orientándolos de acuerdo con el desarrollo de los
acontecimientos. Ella guía a la táctica, dejándola en libertad cuando llega el
momento. Estrategia antes del combate, y después del combate, Táctica durante
el Combate, desde el instante en que las armas empiezan a actuar hasta que
dejan de hacerlo; tal es el principio al que yo me adhiero”.
Sin entrar al campo de análisis sobre cuál de los elementos involucrados en
ésta definición tiene prioridad o dominio sobre el otro, se puede citar las
siguientes herramientas entorno a las Operaciones Navales.
a.- Estrategia Naval
La ciencia o arte que trata de la conducción general de las operaciones,
consignadas a los jefes de alta jerarquía y sus estados mayores; ósea la
Estrategia Naval, corresponde fundamentalmente al escalón de mando que
previamente ha concebido las operaciones como un todo.
b.- La Táctica Naval
Como ciencia o arte que trata del combate en si, tiene una clara
connotación de ejecución y por tanto, corresponde a los escalones de
mando de los órganos de maniobra que son los que llevan a cabo las
acciones, bajo una guía general impuesta por el escalón superior o
estratégico.
c.- Los Medios Navales
Al expresar que la Estrategia se esfuerza para que los combates se
desarrollen en las mejores condiciones posibles y en obtener de ellos más
grandes resultados, están implícitamente contemplados los medios que
intervienen en los combates, estos son humanos y materiales, y ambos
deben reunir requisitos de idoneidad para pretender el mejor rendimiento,
a fin de obtener los mejores resultados.
Aquí se reflejan dos elementos que repercuten en las Operaciones
Navales, el primero con relación a los medios humanos y materiales que
está dado por el Alistamiento, y el segundo que tiene relación con la calidad
y capacidad de los medios materiales y que están dadas por la Tecnología.
d.- La Logística Naval
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La presencia de medios humanos y materiales a su vez requiere de la
provisión y reposición de muchos elementos para mantener su eficiencia en
cualquier parte del área de operaciones y de esto se encarga la logística.
e.- El Planeamiento Operacional Naval
Todos estos elementos por si solos no podrían actuar si no existiera un
procedimiento para ordenar y concretar las ideas sobre la maniobra a ser
ejecutada en las Operaciones Navales. Esta herramienta la constituye el
Planeamiento Operacional Naval, que permite a los escalones de mando
mediante un método científico aplicado al aspecto militar, cumplir las
cuatro acciones del mando: organizar, planificar, ejecutar y controlar todas
las actividades en cada escalón de mando.
f.- El Análisis Operacional
Es una herramienta de mucha importancia en el proceso de concepción,
conducción y ejecución de las Operaciones Navales, ya que contribuye con
la solución matemática a los problemas militares basado en datos
estadísticos de otras operaciones y permite a cualquier escalón de mando
elegir la mejor alternativa en el proceso de toma de decisiones, evitando el
uso de opiniones subjetivas.
g.- Comando, Control, Comunicaciones, Informática e Inteligencia (C 3I2)
Cuando se dice que los combates deben ser preparados y luego
enlazados, coordinados y orientados, intrínsecamente se está haciendo
referencia a un sistema que incluye una cabeza directriz y elementos que
contribuyan a la obtención de las informaciones y a la diseminación de las
órdenes; estos elementos conforman un conjunto que se lo conoce como
C3I2, y que integra el proceso de la toma de decisiones en base a la
obtención, procesamiento de la información y su divulgación mediante
apropiadas comunicaciones, así como, el procedimiento para confirmar el
cumplimiento de las órdenes impartidas o tareas asignadas.
Para efectos de esquematizar la relación de todas las herramientas de
las operaciones navales, es necesario mencionar a la Política no como una
herramienta sino como el vértice de convergencia de todas ellas, y por tanto
como parte del cuadro general en el que se desarrollan las Operaciones
Navales.
4.- ACTITUD EN LAS OPERACIONES NAVALES.
La actitud, que puede ser ofensiva o defensiva, obedece a una concepción
superior de nivel estratégico, que proporciona en principio, la línea de acción
general que deberán adoptar las fuerzas en el desarrollo de las Operaciones
Navales. Si bien, los aspectos que intervienen en la definición de la actitud de
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las fuerzas tienen relación con la misión, los objetivos, las fuerzas propias y
adversarias y el teatro de operaciones; su análisis corresponde a un estudio
detallado sobre los objetivos de alto nivel para efectos de la concepción y
conducción de las Operaciones Navales, esta actitud viene reflejada en la Misión
Asignada.
Considerando que será necesario llevar a cabo varias operaciones con el fin
de cumplir con la misión, en la práctica resulta imposible hablar de una actitud
única que rija a todas las operaciones y por tanto dentro de una actitud general
concebida a alto nivel pueden coexistir operaciones derivadas con actitudes
ofensivas y defensivas.
En resumen, la actitud es mental y la acción es real; la primera orienta la
conducta general de las fuerzas, con relación básicamente al grado de
aceptación del enfrentamiento; y la segunda se encarga del desarrollo de las
operaciones.
5.- CONCEPCION DE LAS OPERACIONES NAVALES.
Las Operaciones Navales son concebidas en el escalón del Teatro de
Operaciones Marítimo.
La formulación de las operaciones debe estar
enmarcada dentro del concepto de la Maniobra Estratégica Militar , que la
origina el Comando Conjunto, y en la cual se incluye a todas las Fuerzas
Armadas. El Comando del Teatro de Operaciones Marítimo (COTOM), a su vez
diseña su propia idea de maniobra en la cual incluye a todos sus órganos
navales de maniobra, proporcionándole los elementos que respondan a las
siguientes preguntas:
Qué hacer?
- Tareas a cumplir.
Cómo?
- Idea de maniobra.
Cuándo?
- Tiempo.
Dónde?
- Área de Operación.
Con qué?
- Medios asignados.
Contra qué? - Amenaza.
En su concepción, esta Idea de Maniobra, que corresponde al nivel
estratégico naval, es la orientadora de las operaciones navales que se
desprendan y debe constituir un sistema eficaz que permita el uso de la
iniciativa y la mayor libertad de acción por parte de los órganos de maniobra
que la van a ejecutar.
En su conducción, la Maniobra Operacional consiste en “crear y mantener su
situación favorable a través de los movimientos acertados para una batalla
exitosa, contra la fuerza organizada adversaria”.
6.- FASES DE LAS OPERACIONES NAVALES
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En el proceso de concepción, conducción y ejecución de las Operaciones
Navales podemos distinguir las siguientes fases:
a.- Planificación.
Al escalón COTOM, que involucra la concepción de la maniobra
estratégica naval general y se basa en la directiva emanada del escalón
superior.
En el escalón Órgano de Maniobra, en base a las tareas emanadas del
COTOM, cada órgano de maniobra hace su propia planificación.
b.- Despliegue
c.-
Acción.
Operacional, ordenado por el COTOM, consiste en el despliegue de las
unidades a sus posiciones operacionales previas al inicio de
hostilidades.
Táctico, ordenado por el Comandante del Órgano de Maniobra, consiste
en el despliegue de las unidades a los puntos en los que provee el
desarrollo de las acciones.
Se materializa en el enfrentamiento y a su vez tiene sus propias fases de
ejecución que son:
1)
2)
3)
4)
Preparación.
Aproximación.
Combate.
Retirada.
III CLASIFICACION DE LAS OPERACIONES NAVALES
1.- CONSIDERACION BASICA.
La clasificación que se presenta obedece solamente a fines didácticos y no
hace referencia a los teatros de operaciones en donde se llevarán a cabo, ni a las
áreas fundamentales de misiones en tiempo de paz.
a.- Clasificación según los medios empleados y la amenaza.
1)
2)
3)
4)
5)
6)
Operaciones comunes a los medios empleados.
Operaciones Antisuperficie.
Operaciones Submarinas y Antisubmarinas.
Operaciones Aeronavales y Antiaéreas.
Operaciones de Minaje.
Operaciones Anfibias.
b.- Clasificación según el propósito.
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1) Operaciones de Control o Dominio del Mar.
a) Conquista del Control del Mar
(1) La Batalla decisiva.
(2) El Bloqueo Naval.
b) Disputa del Control del Mar
(1) Contraataques Mayores.
(2) Contraataques Menores.
(3) Flota en Potencia.
c) Ejercicio del Control del Mar
(1) Defensa de Comunicaciones Marítimas Propias.
(a) Protección Directa.
(b) Protección Indirecta.
(c) Cobertura.
(2) Ataque a las Comunicaciones Marítimas del Adversario.
(a) Guerra de Corso.
(b) Empleo de la Fuerza Organizada.
(c) Empleo de Submarinos.
(d) Empleo de Aeronaves.
2) Operaciones de Proyección.
a)
b)
c)
d)
e)
Desembarco Anfibio.
Operaciones costa a costa.
Incursiones Anfibias.
Demostraciones Anfibias.
Retiradas Anfibias o de evacuación.
3) Defensa del Litoral.
a) Defensa contra la invasión.
b) Defensa de costas.
4) Bombardeo Naval.
a) Fuego de Apoyo Naval.
b) Destrucción de Objetivos terrestres.
5) Bombardeo Nuclear.
6) Operaciones Aeronavales Tácticas.
a)
b)
c)
d)
Interdicción Profunda.
Apoyo Aéreo Directo.
Apoyo Aéreo Estrecho.
Operaciones aéreas contra aviones y de Defensa Antiaérea.
c.- Clasificación de acuerdo al tipo de operaciones Especiales
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1)
2)
3)
4)
5)
6)
7)
8)
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Defensa del Tráfico Marítimo.
Defensa contra Ataques en puerto.
Empleo de buzos tácticos.
Guerra NBQ.
Defensa de puertos y objetivos del litoral.
Rescate y Salvataje.
Utilización de unidades logísticas.
Apoyo de fuego en operaciones anfibias.
2.- OPERACIONES SEGUN LOS MEDIOS EMPLEADOS Y LA AMENAZA
a.- Operaciones comunes a los medios empleados.
Estas actividades pueden ser realizadas por todos los medios,
dependiendo de su capacidad y la mayor o menor posibilidad que tengan
sus equipos y sistemas electrónicos instalados a bordo.
1) Operaciones de Exploración.
Han sido diseñadas para investigar,
detectar, localizar, reportar y monitorear si es necesario, cualquier
aspecto relacionado con el enemigo.
a) Reconocimiento. Destinada a obtener información para actualizar
la situación de las fuerzas enemigas, reunir detalles para atacarlas y
obtener información topográfica, meteorológica, electrónica y
acústica sobre instalaciones costeras, fuerzas, rutas marítimas, etc.,
que puedan afectar el desarrollo de las operaciones.
b) Vigilancia.
Pueden ser posteriores al reconocimiento, están
circunscritas en áreas específicas o puntos bajo los mismos fines
del reconocimiento sistemático.
c) Patrullaje. Destinado a detectar fuerzas enemigas que ingresen o
sobrepasen un límite prefijado.
d) Rebusca.
Destinada a descubrir fuerzas enemigas en un área
determinada cuando se tiene informe preliminar de su presencia.
e) Identificación / Reconocimiento.
clasificación de uno o más contactos.
f)
Seguimiento.
Destinada a determinar la
Destinada a mantener en forma permanente el
control sobre uno o más contactos. La eficiencia del seguimiento se
mide por la capacidad de los medios empleados para obtener y
reportar información.
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g) Cobertura.
Se realiza previo a las hostilidades y consiste en
estacionar permanentemente unidades en posición de fuego contra
blancos en potencia. Cuando el enemigo desplaza fuerzas en esta
forma, la operación por parte de las fuerzas propias se llama contra
cobertura.
h) Guerra Electrónica. Involucran todas las actividades tendientes al
mejor aprovechamiento del espectro electromagnético en beneficio
propio y en detrimento del enemigo.
b.- Operaciones de Superficie
Bajo esta denominación se agrupan las operaciones en las que
intervienen unidades de superficie, aéreas y submarinas y cuyo propósito es
conseguir la utilización total del potencial ofensivo de las fuerzas propias y
negar a los buques de superficie enemigos el uso del suyo.
1) Operaciones Antisuperficie con Buques de Superficie. Las Operaciones
antisuperficie tienen por finalidad asegurar la detección oportuna y
combativa de las fuerzas de superficie enemigas para negarles su
empleo eficaz.
a) Operaciones Ofensivas.
Se basan en las acciones de ataque a
fuerzas de superficie enemigas para destruirlas o neutralizarlas a
fin de evitar su empleo contra las fuerzas propias.
b) Operaciones Defensivas.
Se realizan para proteger las fuerzas
propias de fuerzas de superficie enemigas y evitar que estas
localicen, persigan y ataquen a los buques propios. Esto se
consigue mediante acciones de rechazar, divertir y contener.
El propósito de la acción de Rechazar es obligar a unidades de
superficie enemigas que se alejen de una unidad determinada o
abandonen una línea de acción. Posteriormente pueden ser
perseguidas o mantenidas en contacto, mientras representan
una amenaza para la fuerza propia.
La acción de Diversión pretende negar a unidades de superficie
enemigas cualquier información acerca de la composición,
disposición, intenciones y acciones de la fuerza propia. Esto se
consigue amenazando y provocando al enemigo, creándole un
incentivo, de tal manera, que se vea obligado o seducido a
concentrar su atención en la fuerza que efectúa la diversión.
La acción de Contener consiste en lograr impedir que el
enemigo despliegue sus fuerzas, mediante combate o
maniobras tácticas
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2) Operaciones Antisuperficie con Lanchas Rápidas.
Se consideran
Lanchas Rápidas a las unidades menores de 400 toneladas, con
capacidad de desarrollar velocidades mayores de 30 nudos y equipadas
con misiles, torpedos o cañones antisuperficie.
a) Operaciones en Aguas Costeras Propias. Se define como aguas
propias aquellas zonas de mar, dentro de las cuales los servicios
propios instalados en tierra pueden jugar un importante papel en el
apoyo de las Operaciones Navales. La misión de las lanchas rápidas
en aguas costeras propias es negar su uso a las unidades de
superficie enemigas.
b) Operaciones en Mar Abierto. Aunque no es muy usual, las lanchas
rápidas también se puedan emplear en operaciones ofensivas y de
apoyo. Las operaciones ofensivas contienen acciones de ataque al
grueso de la fuerza, así como, acciones de distracción y
hostigamiento contra unidades de protección enemigas para que
otras unidades ataquen al grueso. Las operaciones de apoyo, tienen
por finalidad proteger al grueso de la fuerza propia.
c) Operaciones Especiales.
Las lanchas rápidas pueden realizar
defensa del tráfico marítimo, operaciones con buzos tácticos,
operaciones de rescate y salvataje, protección de instalaciones y
objetivos vitales de la costa, etc.
3) Operaciones Antisuperficie con Aviones de Ala Fija. Son operaciones
aéreas contra blancos navales de superficie. El propósito de estas
operaciones es asegurar la pronta detección y ataque a fuerzas
enemigas con el fin de impedir su empleo eficaz. Las aeronaves de ala
fija pueden ser empleadas desde portaaviones o bases en tierra.
a) Reconocimiento. Comprende el empleo de dispositivos visuales,
ópticos, infrarrojos o electrónicos, con el fin de adquirir
información para empleo táctico inmediato.
b) Apoyo directo. Operaciones aéreas realizadas en áreas próximas a
las fuerzas navales que se encuentran operando. Este apoyo puede
ser reconocimiento, enlace y coordinación de ataque a fuerzas
enemigas; en base a los sensores, armas y sistemas de las
aeronaves.
c) Apoyo Lejano. Operaciones aéreas a una distancia tal de la fuerza
naval amiga en que no es posible o necesaria la integración de los
sensores, armas y sistemas de aeronaves para el ataque a las
unidades enemigas.
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d) Operaciones de Zona. Se lleva a cabo en una zona geográfica que no
está relacionada con la protección de una fuerza de superficie
determinada.
4) Operaciones Antisuperficie con Helicópteros.
El propósito de la
utilización de los helicópteros en operaciones antisuperficie es
básicamente ayudar a la fuerzas de superficie a la pronta detección de
las unidades de superficie enemigas y atacar a esas fuerzas, ya sea
desde el propio helicóptero o desde las unidades de superficie, en las
cuales el helicóptero actúa como enlace.
Las Operaciones de exploración por parte de los helicópteros
basan su eficiencia en el equipamiento que disponen, en su velocidad y
autonomía. En la práctica, la zona que puede cubrir los helicópteros es
pequeña, sin embargo, hay situaciones en las que un equipo de
helicópteros será capaz de efectuar en forma más completa la
exploración que con cualquier otro tipo de unidades.
Las operaciones de ataque con helicópteros requieren de empleo
de tácticas adecuadas que permitan obtener información preliminar del
blanco, adoptar rumbos de acercamiento desde barlovento para acortar
el tiempo de ingreso al área de máximo alcance de sus misiles y contar
con un buen guía y control durante el ataque.
c.- Operaciones Submarinas y Antisubmarinas
1) Operaciones Submarinas. Bajo esta denominación se agrupan a todas
las operaciones que se realizan con los submarinos, para contrarrestar
las amenazas de superficie, submarinas y aeronavales con capacidad de
efectuar operaciones antisubmarinas.
2) Operaciones Antisubmarinas.
Las operaciones Antisubmarinas
corresponden a las que se llevan a cabo para neutralizar la amenaza
submarina y en ellas puedan participar unidades de superficie,
submarinos y aeronaves.
a) Operaciones de Área.
Son las realizadas generalmente por
unidades que operan independientemente. Se llevan a cabo en
áreas a través de las cuales es probable que transiten submarinos
enemigos o en donde pueden haber submarinos en patrulla. Las
áreas pueden estar relacionadas con la protección de fuerzas
navales que deban ingresar o para proporcionar defensa en
profundidad a fuerzas distantes.
b) Operaciones Asociadas de Apoyo. Son realizadas por unidades
antisubmarinas especiales en forma independiente de las fuerzas
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principales, pero desarrollando actividades que van en beneficio o
en apoyo de éstas. Actualmente estas operaciones son realizadas
básicamente por unidades de superficie con sensores remolcados y
submarinos.
c) Operaciones de Apoyo Directo. Están destinadas a proporcionar
apoyo antisubmarino a una fuerza o grupo determinado en forma
directa.
d.- Operaciones Aeronavales y Antiaéreas
1) Operaciones con aeronaves. Comprenden a las aeronaves que operan
desde la fuerza propia o fuera de ella, apoyando directamente la fuerza
en las áreas geográficas no relacionadas con la protección de una fuerza
específica.
2)
Operaciones Antiaéreas. Son operaciones cuya finalidad es emplear
todos los sistemas de sensores y armas para defender a las fuerzas
navales de los ataques procedentes de todas las amenazas aéreas.
Consisten en toda clase de medidas conducentes a anular o reducir la
eficacia de las aeronaves y misiles guiados enemigos. Las acciones que
se desarrollan son básicamente de carácter defensivo.
e.- Operaciones de Minaje
El propósito de las operaciones de minaje es contribuir a la dispersión
del esfuerzo de la guerra enemigo y contribuir a la seguridad de las líneas
de comunicaciones marítimas propias por medio de la destrucción o
amenaza de las unidades mercantes y navales enemigas. El minado puede
ser empleado con fines estratégicos o tácticos.
f.- Operaciones Anfibias
En operaciones anfibias se integran todo tipo de medios en un esfuerzo
militar concertado contra una costa hostil. El carácter naval de estas
operaciones se refleja en los principios que gobiernan la organización de las
fuerzas que comprenden y la conducta de la operación.
1) El Desembarco Anfibio. Constituye la principal operación anfibia y se
caracteriza porque implica el establecimiento de una fuerza en una
costa hostil.
2) Incursión Anfibia. Es una acción táctica en una costa hostil, para llevar a
cabo una rápida acción en el interior u ocupación transitoria de un
objetivo, seguida de una retirada planeada; su propósito es infligir
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daños o pérdidas, conseguir información, crear una diversión y/o
capturar o evacuar personal o material.
3)
Demostración Anfibia. Es una operación para engañar al enemigo
mediante una exposición de fuerzas, tomando como partida un curso de
acción que le es desfavorable.
4) Retirada Anfibia. Es una exfiltración de fuerzas por mar, en unidades
navales o embarcaciones desde una costa hostil.
3.- OPERACIONES ESPECIALES
Bajo esta denominación se agrupan todas las operaciones no contempladas
en los numerales anteriores que se llevan a cabo como complemento o en apoyo
a las demás operaciones.
a.- Defensa del Tráfico Marítimo.
En tiempo de paz, el tráfico marítimo está bajo la responsabilidad de los
armadores de buques; en tiempo de guerra es realizado por uno de los
escalones de mando naval, con el fin de proporcionar el máximo de
protección y asegurar un óptimo empleo de las naves mercantes en el
esfuerzo de guerra de ser requerido.
b.- Defensa contra ataques en puerto.
Se refiere a las acciones que deben tomarse para dar protección a los
buques fondeados o atracados en puerto, contra ataques clandestinos
provenientes de diversas fuentes como unidades submarinas, aeronavales o
buzos tácticos.
c.- Empleo de buzos tácticos.
Tiene el propósito contribuir en la conquista y defensa de áreas
litorales o interiores de importancia para la campaña naval y conjunta.
Pueden citarse las siguientes acciones:
1) Efectuar acciones ofensivas y/o de sabotaje sobre instalaciones en
territorio hostil.
2) Efectuar reconocimiento del terreno, de instalaciones, de unidades
enemigas y contra-reconocimiento.
3) Efectuar acciones de hostigamiento y diversión.
4) Capturar o rescatar personas o material importante.
5) Efectuar guerra irregular.
6) Capturar y proteger instalaciones y accidentes críticos del terreno.
d.- Guerra NBQ.
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Empleada por potencias con alto grado de conocimientos tecnológicos,
que permite trastocar el curso normal de un enfrentamiento convencional.
Debido al peligro que representa produce un alto grado de disuasión a la
fuerza oponente.
e.-
Defensa de puertos y objetivos del litoral.
Se agrupan en esta denominación a todas las actividades tendientes a
impedir que el adversario atenté contra el esfuerzo ofensivo propio,
materializando ataques contra instalaciones de carácter económico, militar
y/o psicológico localizados en el litoral propio.
f.- Rescate y Salvataje.
Son las operaciones que se realizan con cualquier medio, tendientes a
rescatar combatientes luego de una acción, o realizar salvataje de los
medios empleados en ella.
g.- Utilización de unidades logísticas.
Se refiere al empleo de los órganos de apoyo logístico dinámicos,
constituidos por los grupos de reabastecimiento en el mar, o grupos de
apoyo logístico, en beneficio de las fuerzas de combate.
h.- Apoyo de fuego en operaciones anfibias.
Son las operaciones que cubren las necesidades de apoyo de fuego de
las fuerzas de desembarco, para batir blancos ubicados en la playa de
desembarco, antes, durante y después de la fase de asalto.
IV CONDUCCIÓN DE LAS OPERACIONES NAVALES
El objetivo de la guerra en el mar corresponde a su control, con el propósito de
emplearlo en beneficio propio y negárselo al enemigo. La estrategia marítima utiliza
el poder naval para disputar, conquistar, ejercer y explotar el dominio, incluyendo la
proyección con el objeto de satisfacer las interferencias.
La existencia de tres objetivos estratégicos relacionados con el control del mar,
más otro derivado de interferencias demanda prioridad de la realización, el mismo
que se satisface con la agrupación de las operaciones navales típicas en disputa,
conquista y ejercicio del control del mar, agregándose las de proyección.
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OPERACIONES Y ESTRATEGIA NAVAL
El objetivo estratégico de la fuerza terrestre será siempre la Fuerza Organizada del
enemigo. En la guerra terrestre cualquiera que sea el carácter del objetivo a
obtener, siempre está la batalla de por medio. Su único objetivo reside en el ejercito
enemigo.
1.- TEORÍA DEL PRIMER OBJETIVO.
Mahan decía que: "La destrucción de la fuerza organizada del enemigo
constituye el objetivo prioritario de la guerra en el mar; debiéndose postergar
cualquier tipo de operación naval, como ser el ataque a las comunicaciones
marítimas o la conquista de territorios”. Esto es lo que se conoce, como Teoría
del Primer Objetivo.
El mérito de Mahan fue destacar con claridad el rol jugado por la fuerza
organizada en la guerra en el mar. El objetivo principal de la guerra naval es la
destrucción de la flota oponente, “todas las otras operaciones son de
importancia secundaria”. Es inútil tratar de obtener el control del mar por otros
medios que no sea la batalla.
La fuerza organizada juega el papel clave en la lucha por el control del mar.
Ninguna operación podía llevarse a efecto sin antes haber realizado dicha tarea,
la fuerza opositora era el primer objetivo ineludible. La fuerza organizada móvil
del enemigo ocupara el primer plano de nuestro pensamiento, su supresión
resuelve todos los problemas y el mejor procedimiento es destruirla por medio
del combate. Esta teoría acarrea varias consecuencias:
Influye en la distribución de los medios.
Obliga a concentrar en la propia fuerza organizada todas las unidades
navales disponibles, por consiguiente no es admisible realizar tareas de
defensa o ataque de las comunicaciones marítimas.
Absorbe en su totalidad los esfuerzos de la Armada.
La flota enemiga constituye el objetivo principal.
Una vez obtenido el primer objetivo, recién entonces se está en condiciones
de dividir las fuerzas.
2.- ORDEN CRONOLÓGICO DE LAS OPERACIONES.
El orden cronológico teórico de la conducción de las operaciones navales,
indica que primero se tiene que destruir a la fuerza organizada enemiga, antes
de intentar cualquier otra tarea; siendo eliminado ese obstáculo principal, se
podrá atacar libremente las comunicaciones marítimas enemigas y su litoral.
Esta conducción teórica, absoluta, excluyente ha hecho incurrir en serios
errores a través de la historia de la guerra naval, un ejemplo de ello es Japón en
la guerra del pacífico.
Sin el control del mar no se puede atacar o defender las comunicaciones
marítimas, la posición y el litoral. Abandonar transitoriamente hasta que se
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3.
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haya logrado esta destrucción origina otra preocupación. Se concentran todos
los medios para el ataque sostenido hasta lograr el aniquilamiento de la fuerza
organizada contraria. Luego no antes de la consecución del primer objetivo, se
acomete la obtención de las metas postergadas.
DISCREPANCIAS DE LA PRÁCTICA CON LA TEORÍA
Existen dos razones de discrepancia, la primera es que en la Estrategia Naval
no hay nada absoluto, todo depende de las circunstancias imperantes, por lo
que debe conjugar los 3 elementos: Fuerza, Posición y Comunicaciones
Marítimas. La segunda razón nace de las interferencia producidas por la
"unidad de la guerra", las interferencia políticas pueden variar el orden en la
conducción de las operaciones navales.
En estrategia marítima no cabe rigideces ni determinismos. En el mar al
contrario de tierra existen varios objetivos estratégicos simultáneos, los
relacionados en orden directo con el control del mar: posición, comunicaciones
marítimas y fuerza, denominados objetivos estratégicos naturales y, el
originado por las interferencias se agrupa bajo el termino territorio. En
ocasiones basta obtener uno para alcanzar los restantes. La mayor parte de las
veces, su enlace es muy débil y exige un escalonamiento en tiempo y espacio en
su obtención. Analizar cada uno de los objetivos estratégicos naturales y así
apreciar su gravitación es el control del mar.
a.- La Fuerza
El mar es una superficie ilimitada, en si no tiene ningún valor, sumado a
esto la movilidad de las Fuerzas, hace que el más débil pueda rehuir la
batalla indefinidamente, por tal razón el problema de destruir a la fuerza
organizada adversaria no es un problema sencillo.
El más fuerte en el mar intenta la destrucción del más débil, para lo cuál
deberá crear apremios e incentivos que obliguen al más débil a concurrir a
la batalla; mientras tanto el más débil recurrirá a contraataques mayores o
menores con el fin de desgastar al enemigo, hasta lograr la superioridad que
necesita para pasar a la ofensiva.
La batalla naval, consiste en un acto táctico de consentimiento mutuo
en razón del escenario y de los medios. En la guerra naval al enemigo le es
posible retirar por completo su flota del campo de operaciones
refugiándose en sus bases, pero al hacerlo, entrega el mar al adversario con
todas las consecuencias negativas previsibles.
b.- La Posición
Juega un extraordinario efecto en el control del mar, en especial sobre
las comunicaciones marítimas. Para evitar el colapso económico, impedir el
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tráfico adversario o alcanzar cualquier otro objetivo estratégico a través del
mar, necesita como requisito previo mejorar su posición estratégica.
Los países que gozan de una posición favorable para la protección de su
territorio, sus comunicaciones marítimas y para ataque de las LCM del
adversario, concurrirán a dar la batalla en casos extremos, pues su Poder
Naval está cumpliendo su rol, están satisfechos con la situación y no tienen
razón para modificarla. Por el contrario el país que no tiene posición o es
desfavorable, imperativamente tiene que mejorarla o conquistarla.
Ejemplo: (en la II GM.) EE.UU. en la guerra del pacífico central y Alemania
en la conquista de Noruega.
c.- Las Comunicaciones Marítimas
Nada fue más gravitante para el poder naval que asegurar su tránsito
expedito, por lo general se produjeron al inicio de las hostilidades. En su
fase de concentración, los ejércitos polarizaron las operaciones navales,
utilizando las comunicaciones marítimas militares, las de mantenimiento se
tornaron críticas y las económicas constituyeron el objetivo estratégico
principal de la guerra en el mar; situación que provocó la división y
debilitamiento de la flota, afectando su superioridad para dar la batalla.
Del estudio de la posición estratégica y de las CM propias y del
adversario, nos permitirá determinar:
1) Cuando y donde es necesario la Conquista del Control del Mar. En
otras palabras, la eliminación de la Fuerza Organizada enemiga es
requisito indispensable para la continuación de una determinada
operación estratégica. Ejemplo: (en la II GM) Japón para conquistar el
área de “coprosperidad”, eliminó a al Fuerza Organizada de EE.UU.
mediante el ataque a Pearl Harbour, la que amenazaba seriamente el
flanco de su dispositivo estratégico ofensivo, logrando así el control del
mar en el área.
2) Cuando y donde no es necesario o posible luchar por el Control del
Mar. Normalmente ésta situación se presenta cuando el adversario
tiene una posición extremadamente favorable para controlar un área
determinada del mar y/o que dichas comunicaciones marítimas no
presenten un valor significativo para los objetivos que se persiguen.
Ejemplo: en la I GM: Gran Bretaña no interfirió en las LCM del Báltico.
3) Cuándo y donde existe una virtual actuación de Control del mar.
Ocurre cuando la posición propia es muy fuerte en relación a las
comunicaciones marítimas que fluyen por el área considerada, sin que
él enemigo pueda o intente interferirlas. Ejemplo: En la II GM, una vez
que capituló Italia, el Mediterráneo prácticamente se transformó en un
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lago aliado, las fuerzas navales principalmente de éste teatro se
transfirieron a otras áreas más críticas.
d.- Interferencias
Son acciones y reacciones mutuas de las estrategias superiores y
colaterales sobre la guerra en el mar. Se generan por causas de “la Guerra
Total” las cuales deben enfrentarse con una clara visión de la “Unidad de la
Guerra”.
La libertad de acción se coarta por múltiples exigencias políticas,
estratégicas, económicas, jurídicas y morales. Sirve para destacar el desvío
a efectuar por la Armada de su responsabilidad única e ineludible: el control
del mar, en contribución a las otras estrategias. Éstas interferencias pueden
impedir o imponer acciones a la Estrategia Marítima. Ejemplo: (en la II GM)
para EE.UU. la Invasión a las Filipinas fue una imposición política, la
agenda buscaba seguir su avance en el Pacífico Central.
1) Clasificación de las Interferencias. Tienen carácter positivo cuando
obligan a materializar una acción y negativo al impedirla
a) Políticas: Positivas o Negativas. Dar ayuda a un aliado, efectuando
demostraciones de poder o brindando protección a una
determinada área.
b) Jurídicas: Negativas.
El Derecho Internacional, en forma
permanente, impide o restringe ciertas operaciones navales.
Ordenanza de apresamiento, es decir atacar sin previo aviso
únicamente a barcos armados o a mercantes acompañados de
buques de guerra, pero a los demás solo detenerlos y hundir los
barcos con contrabando después de inspeccionar los papeles o la
carga.
c) Económicas: Positivas. Acciones orientadas al apoyo del frente
económico propio y dañar al del enemigo, mediante ataque y
defensa del tráfico mercante con significado económico.
d) Morales: Positivas. Nacen de presiones de la opinión pública y
tienen gran repercusión en la cohesión del frente interno.
e) Bélicas: Positivas.
Satisfacen las demandas de la “Unidad de
Guerra” y sirven a la guerra terrestre y aérea.
4 .- CONDUCCION PRACTICA DE LAS OPERACIONES
El fin de la estrategia marítima estriba en el control del mar. Su conquista
pasa a través de la destrucción o neutralización de la escuadra enemiga. Su
ejercicio está en relación directa al grado de control detentado.
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El control del mar depende de los tres objetivos estratégicos, siendo de estos
la fuerza el elemento más gravitante. El análisis de la influencia de los tres
objetivos estratégicos naturales define su prioridad y secuencia en su
obtención; luego corresponde revisar las interferencias, en especial, las
derivadas de la Estrategia Total y la unidad de la guerra.
Su primera consecuencia representa una distribución de los medios navales
concordante con los objetivos estratégicos a lograr. Si la flota enemiga
interfiere en la misión propia se la debe apartar del camino o aniquilar
mediante la batalla.
5.- OPERACIONES NAVALES TIPICAS
Comprende dos grandes categorías de objetivos, unos ubicados a flote, en el
que constan las unidades navales y aéreas integrantes de la fuerza organizada y
otros en tierra que se refieren a los objetivos geográficos o terrestres. Corbet
agrupó las operaciones relacionadas con los objetivos a flote en:
a.- Operaciones de Conquista de Control del Mar.
Solo interviene la fuerza organizada de los beligerantes, tiene como
Objeto lograr el control del mar y sus Objetivos los materializan las
unidades de la fuerza organizada del enemigo. El más fuerte debe crear
apremios e incentivos para obligar al más débil a concurrir a la batalla.
b.- Operaciones de Disputa de Control del Mar.
Operación destinada a impedir que el enemigo conquiste el control del
mar o disfrute de él libremente. Se materializa mediante contraataques.
Participan la fuerza organizada y otras unidades del poder naval de los
adversarios, tiene como Objeto mejorar el control del mar y sus Objetivos
los materializan las unidades de la fuerza organizada del enemigo. Es una
actitud defensiva, la adopta el más débil para equiparar la superioridad
adversaria. La defensiva en el mar es tan vigorosa que algunos autores la
llaman defensiva - ofensiva.
c.- Operaciones de Ejercicio de Control del Mar.
Su Objeto corresponde a la materialización del tráfico marítimo, su
defensa o interrupción, concurren la fuerza organizada, los buques de
transporte, los escoltas y los corsarios y sus Objetivos lo constituyen los
buques de transporte.
El Objetivo físico lo constituye las CM; es una actitud defensiva ofensiva, lo adopta indistintamente el más fuerte o el más débil. Estas
operaciones coexisten con la Disputa y Conquista del Control del mar. Un
país que depende vitalmente de sus CM deberá hacer centro de gravedad en
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su defensa, mientras que un país autónomo, tendrá libertad para concentrar
sus esfuerzos en el ataque.
d.- Operaciones de Proyección.
Tienen diversos propósitos y objetivos, su mayor manifestación
consiste en la invasión o defensa del territorio y compromete no solo al
poder naval sino a otras ramas de la defensa.
V
LA MANIOBRA ESTRATEGICA EN EL MAR
1.- GENERALIDADES
El hombre por su incesante búsqueda de victoria, recurre a metodologías
extremas:
Recurrir al Material.
La cual posee dos variantes:
La Creación del arma invencible como un proceso digno de lástima sigue
intentando siempre el mismo experimento.
2) Conseguir la superioridad aplastante para arrollar al enemigo en un
choque frontal o imponerle una guerra de desgaste.
b.- El Ingenio.
Recurre a la estratagema destinada a sorprender, dividir y ofuscar al
rival engañado, obligándolo a actuar sometido a nuestra voluntad.
Sun Tzu se basa en la premisa que el arte de la guerra descansa en el
engaño. "Echad el anzuelo al enemigo para que caiga en su trampa, simular
desorden y asestadle el golpe". "El enemigo debe ignorar donde quiero
librar la batalla". "No hay nada más difícil que el arte de la maniobra".
La maniobra es la herramienta principal que dispone el conductor
militar para lograr su objetivo estratégico. Una Directiva (Plan) de
cualquier escalón en que esté ausente la maniobra, es una inconexa
enumeración de tareas y será la causa de que los efectos de los
subordinados resulten divergentes y descoordinados.
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La maniobra otorga solidez al plan, la idea de maniobra constituye la
columna vertebral para que todas las acciones sean concurrentes en tiempo
y espacio para el logro del objetivo perseguido. Trabaja con elementos
reales como la fuerza, espacio, tiempo, geografía, entorno ambiental, etc.;
pero también debe concatenarlos con elementos intangibles, difíciles de
medir como la sicología, moral, voluntad, percepción.
La Maniobra no busca la destrucción o aniquilamiento total del
adversario, sino de colocarlo ante una situación de inferioridad tal, que se
vea obligado a capitular. Al más fuerte la maniobra le ahorrará recursos
para lograr su objetivo y para el más débil, es el único instrumento que
tiene para lograr la decisión ante un enemigo superior.
2.- CONSIDERACIONES SOBRE LA MANIOBRA
Consta de dos partes inseparables, la estratagema tendiente al engaño y las
acciones en busca del objetivo estratégico. El engaño conforma la pieza clave.
Castex la define como "Procedimiento o medio que se dispone para mejorar
en provecho propio las condiciones de la lucha". También se considera que
maniobrar es realizar movimientos acertados para crear una situación
favorable, involucra contundentes impactos anímicos a producir con deliberada
premeditación, en el espíritu del antagonista.
La actividad nunca es dirigida únicamente contra la materia, es dirigida
contra la fuerza mental y moral que da vida a esa materia. La maniobra
estratégica comprende las acciones materiales y psicológicas orientadas a crear
y mantener circunstancias favorables para lograr un determinado objetivo
estratégico.
La primera consideración de la maniobra debe descansar en el objetivo
estratégico a lograr, luego en la capacidad de los medios propios, seguido de las
características de la geografía y del entorno en que ésta se desarrollará, para
finalmente estudiar la amenaza que se opondrá a sus esfuerzos.
Todos estos elementos, tales como: fuerza, geografía, medio ambiente,
espacio, tiempo, deben sumarse a otros intangibles como: moral, idiosincrasia,
eficiencia de personal, perfil psicológico del mando enemigo; para analizarlos
mediante una detallada apreciación de la situación, pues en ella se basará el
conductor para generar su idea de maniobra.
3.- OBJETIVO ESTRATEGICO DE LA MANIOBRA EN EL MAR
En la estrategia terrestre la maniobra solo tiene como Objetivo a la fuerza,
carece de dudas en el "QUE" hacer, su gravísimo escollo radica en determinar el
"COMO" lograrlo.
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En la estrategia marítima se presentan los cuatro Objetivos permanentes,
estando obligada a definir su primer objetivo a alcanzar es decir determinar el
"QUE" siendo necesario fijar el orden cronológico de las operaciones. En
resumen la primera consideración recae en el objetivo estratégico.
El primer objetivo del orden cronológico, corresponde al objetivo principal
de la maniobra, por esto se hace centro de gravedad sobre él. La definición del
objetivo y el "COMO" alcanzarlo precisan de fundamentos sólidos y no buenas
intenciones. Además requiere conjugarse con los medios disponibles; para tal
efecto se elabora la Apreciación de la Situación.
La maniobra en el mar debe considerar los 3 elementos de la estrategia
marítima: Fuerza, Posición y LCM, a los que se debe agregar el territorio propio
o adversario, objetivos señalados por las interferencias. Por tanto la Batalla
Naval, no es parte obligada de la Maniobra Estratégica, sino que ésta se dará
cuando la fuerza opuesta adversaria sea el objetivo estratégico específico de la
maniobra, o cuando la fuerza opuesta se interponga en el logro del objetivo
estratégico seleccionado, esto último, es lo que comúnmente ha sucedido.
a.- Gestación de la maniobra.
El conductor no puede dejarse coartar su imaginación ni creatividad
por procedimientos predeterminados o formularios de reglamento.
1) La Estratagema. La estrategia marítima señala la operación naval típica
a realizar, pero el alcanzarlo del modo más eficaz y económico
constituye el arte del conductor. La guerra se basa en el engaño y el
ardid; influir en la mente del adversario a fin de explotar,
principalmente sus emociones apoderándose así de su voluntad.
La estratagema exige ser percibida por el antagonista de manera
creíble considerando sus propias doctrinas, expectativas y personalidad
del jefe. Los factores con los que se elabora la estratagema son: fuerza,
objetivo estratégico, escenario geográfico, tiempo y espacio.
La estratagema persigue el engaño y tiene tres variantes básicas:
a) El Encubrimiento.
Trata de dejar al enemigo en la oscuridad
referente al que, cuando y donde de la acción planeada.
b) La Diversión. Intenta
dividir
al
enemigo,
evitando
la
materialización de un centro de gravedad sobre el objetivo
pretendido.
c) La Ofuscación.
Procura mantener al enemigo en constante
sobresalto antes de asestarle el golpe decisivo.
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4.- ELECCIÓN DEL OBJETIVO ESTRATÉGICO
Es improbable que todos los componentes del dispositivo adversario o
propio revistan igual importancia y poder; normalmente existirá uno o un grupo
de ellos que posean mayor trascendencia relativa. El objetivo estratégico
elegido para la maniobra, se convertirá en el objetivo estratégico principal y el
resto de objetivos, serán considerados como estratégicos secundarios. El
objetivo estratégico principal puede ser el elemento más fuerte del dispositivo
del adversario o el más débil, sin embargo, debe poseer una o más de las
siguientes características:
El Centro del Poder y la Fuerza.
El Eslabón de unión que cohesiona a todo el conjunto.
El Elemento que cataliza y mantiene la capacidad ofensiva o defensiva.
Un grave Factor de vulnerabilidad.
A este objetivo se destinará el máximo de fuerzas, con el fin de alcanzar la
superioridad local en el punto de la decisión, mediante el empleo de la
maniobra. Si el adversario pierde un objetivo que reúna éstas características,
verá comprometido seriamente sus posibilidades de éxito y quedará en
manifiesta inferioridad.
La primera y más importante resolución del planificador de una Maniobra
será seleccionar y definir el objetivo resolutivo, aquel que produzca al enemigo
mayor dislocación física y moral. Sobre éste objetivo se hará centro de gravedad
en los esfuerzos, los que coordinarán la maniobra. Lo ideal para realizar una
Maniobra, es disponer de dos o más objetivos de similar trascendencia, para
amenazarlo simultáneamente; lo que coloca al adversario ante un dilema y
provocará la dispersión, restringiendo su capacidad de reacción.
Cuando el objetivo estratégico está conformado por un conglomerado de
objetivos parciales, la maniobra se orientará para obtenerlos en forma sucesiva
o simultánea, de acuerdo a la capacidad de los medios y el efecto a causar. Es
imprescindible para que la maniobra tenga éxito, hacer que el enemigo se torne
incoherente; inmovilizarlo y descontrolarlo, ya sea antes o durante la obtención
del objetivo estratégico elegido. Esto requiere de una cuidadosa evaluación
para fijar puntos decisivos donde realizar las acciones resolutivas durante el
desarrollo de la maniobra.
Cualquiera que sea el objetivo estratégico seleccionado como decisivo, los
esfuerzos a realizar para lograrlo deben ser concurrentes y coordinados,
evitando cualquier despilfarro de medios en acciones excéntricas y no
relacionados con la maniobra. Ejemplo: En la Batalla de Midway, el objetivo
elegido (El grupo de portaaviones del Alm. Nagumo) era el centro del poder y la
fuerza.
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Los medios destinados a actuar sobre los objetivos estratégicos secundarios,
deben trabajar de modo armónico y coordinadamente, amarrando medios del
adversario, en beneficio del logro del objetivo estratégico principal.
5.- LA OFENSIVA Y LA DEFENSIVA EN LA MANIOBRA
a.- La Ofensiva
La Maniobra Ofensiva tendrá como Objetivo Estratégico a uno de los
elementos de la Estrategia Marítima y en su logro estará dispuesto a aceptar
la batalla. Cualquiera que sea el objetivo, deberá considerar a la fuerza
organizada adversaria sea para destruirla o neutralizarla.
Por tanto en la ofensiva, la maniobra no solo debe facilitar el logro del
objetivo estratégico seleccionado, sino facilitar la acción de la fuerza
organizada propia para que el enfrentamiento se produzca en las mejores
condiciones.
La flexibilidad operativa de las fuerzas navales permite amenazar a dos
o más partes de igual importancia para el enemigo, colocándolo ante un
dilema con la consiguiente incertidumbre. Quien realiza la maniobra
positiva observando sus cuatro requisitos goza de todos los beneficios de la
ofensiva.
Si dicho objetivo consiste en la fuerza organizada debe remitirse a la
ofensiva geográfica, pseudo-geográfica o de movimiento. No importando el
objetivo buscado, la maniobra ofensiva está obligada a observar a la flota
adversaria tanto para evitar su participación como para destruirla.
b.- La Defensiva
En la defensiva, el problema es más complejo, ya que para eliminar las
incertidumbres, se deberá crear tantas maniobras como objetivos
estratégicos a defender; sin embargo tiene algunas ventajas que hay que
tener en cuenta:
El adversario debe aproximarse al Objetivo Estratégico, hasta llegar al
alcance de sus armas.
El dispositivo del atacante se puede conocer con antelación o durante su
aproximación, lo que facultará escoger como Objetivo Estratégico una
parte de él.
Permite explotar las características del entorno ambiental y del área
geográfica.
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La maniobra estratégica defensiva, tendrá como Propósito, frustrar el
logro del Objetivo Estratégico del adversario y como Objetivo Estratégico
propio, a la fuerza adversaria atacante, o parte de ella para destruirle si se
presenta la ocasión, pudiendo presentarse varias alternativas para su
accionar, tales como:
-
Explotar sus vulnerabilidades.
Canalizar sus operaciones hasta colocarlo en una situación
comprometida.
Desgastarlo.
Hacer que sus golpes caigan al vacío.
Dividirlo mediante diversiones para batirlo por parcialidades.
Necesita actuar de modo ofensivo, la espera pasiva, constituye el
preámbulo del desastre; en términos más categóricos requiere adelantarse
al contrincante. La primera preocupación radica en arrebatarle la libertad
de acción e iniciativa al agresor. Ese debe ser el fin inicial de la estratagema.
Tiene por Objeto negar el logro de la meta al enemigo. La fuerza
enemiga está obligada a acercarse al alcance de sus armas, circunstancia
que aprovechada con astucia es factible de convertirla en ventaja. Cuando
la misión se refiere a la defensa de un objetivo estratégico fijo, la amenaza
capital corresponde a un asalto anfibio, la alternativa estriba en hacer
centro de gravedad en los transportes o la fuerza de cobertura.
Considerando que el mar carece de accidentes geográficos donde ocultarse,
la defensa se facilita mediante las siguientes acciones:
-
Definir con precisión el dispositivo adoptado.
Evidenciar las vulnerabilidades del enemigo.
Desgastar al adversario en la aproximación.
Adecuar el dispositivo para explotar la iniciativa.
Lo ideal acontece cuando las fuerzas propias se adelantan a las del
enemigo situándose en las proximidades del área geográfica amagada. Esta
maniobra se transforma en una caza al acecho. Toda acción material debe
presentar un componente psicológico.
6.- FACTORES CONCRETOS DE LA MANIOBRA
a.- La Fuerza
Corresponde al elemento dinámico cardinal de la maniobra, constituye
la protagonista estelar de la estratagema. En caso de ser la flota principal
de combate, se trata de la Fuerza Organizada.
Una fuerza es un dispositivo conformado de acuerdo a las tareas que
debe cumplir, en la guerra éstas serán misiones tendientes al control del
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mar o a la proyección en territorio enemigo. Como en todo dispositivo sus
elementos constituyentes no tendrán el mismo poder o están sujetos a las
mismas vulnerabilidades.
Por ejemplo, en determinada fuerza el
portaaviones será el centro de su poder, en otra serán sus unidades
misileras, mientras que en una FT Anfibia los transportes constituirán el
núcleo principal.
Las acciones desplegadas por la fuerza deben colaborar al engaño o
ganar ventajas sobre el adversario. La estratagema a cargo de la fuerza
descansa en divisiones, disposiciones y desplazamientos equívocos ya que
sufre los golpes de los errores u omisiones cometidos. La división se
justifica cuando provoca una fragmentación mayor en el enemigo. Una
fuerza engañada y sin fe se transforma en fácil presa de un hábil seductor.
La Maniobra tiene que aprovechar las vulnerabilidades y momentos de
debilidad del adversario y golpear con energía y tesón, donde mayor sea su
efecto dislocador. Hay que tener presente que así como los sistemas de
armas son factibles de saturación, la mente del conductor también es
factible de ofuscación, creándole situaciones imprevistas, concurrentes y
simultáneas, haciéndole incurrir en errores e incluso hacerle perder el
control del panorama general. Ejemplo: en la Batalla del Golfo de Leite el
Alm. Kurita perdió a su buque insignia y con el a su E.M, lo que produjo la
pérdida del control de sus Fuerzas.
b.- Objetivo Estratégico.
La estratagema explota esta circunstancia amenazando en diversos
grados, modos y direcciones a fin de producir la dispersión de los medios
enemigos. Los objetivos estratégicos consisten en dispositivos, los mismos
que pueden ser:
1) Fijos. Son áreas geográficas identificadas como territorio o posición
estratégica.
adversario.
Conviene arribar al área con rapidez anticipándose al
2) Móviles. Formado por los buques de combate, auxiliares y mercantes.
Se recurre a los apremios e incentivos, orientados a presionar o atraer
al adversario.
Si uno o varios de estos integrantes es anulado, la totalidad se
desbalancea comprometiendo con seriedad su aptitud bélica.
c.- Escenario Geográfico.
Constituye el elemento más permanente de la maniobra, comprende el
área donde se prevé llevarla a cabo; dentro de este marco geográfico, se
encuentra el objetivo estratégico perseguido.
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La aproximación de las fuerzas a tierra aumenta la reacción de la tierra
sobre el mar. La llamada explotación de la geografía no solo exige un
acabado conocimiento teórico de sus características sino una intensa
práctica sobre la misma.
El aparente inerte escenario geográfico de la maniobra constituye un
activo receptor de tecnología. En un ámbito saturado de emisiones
electromagnéticas, un entrenamiento dedicado al silencio electrónico, al
aprovechamiento del medio geográfico y de los sentidos naturales del
hombre, tal vez, conforman, la llave maestra del éxito de la maniobra.
Bajo el amparo de la posición es posible ejecutar la concentración y el
alistamiento de las fuerzas.
d.- Tiempo y Espacio.
Ambos se conjugan para el movimiento de la fuerza.
1) Espacio. Permite que las fuerzas efectúen sus desplazamientos, señala
donde atacar y el tiempo cuando hacerlo. La vastedad del espacio
facilita la defensa en profundidad, la ejecución de diversiones o el
ataque desde diversas ubicaciones.
2) Tiempo. Posibilita la concentración, concurrencia y el apoyo mutuo;
constituye un recurso de disponibilidad muy limitado y se agota con
prontitud. La rapidez en las decisiones y desplazamientos simplifica la
libertad de acción. Los movimientos y acciones desplegados por el
dispositivo tienen que responder a la idea de maniobra. Se hace
imprescindible no desperdiciar el tiempo, previendo anticipadamente
las reacciones del rival.
Tener presente “Desplegados en el espacio pero concentrados en el
tiempo”.
e.- Entrenamiento, Idiosincrasia y Personalidad del Jefe.
Se consideran los elementos anímicos:
1) Entrenamiento. Referido a:
a) Actividades propias. Debe llevarse en las condiciones más duras y
exigentes posibles, pretende identificar los eventuales escollos
operativos, reducir los períodos de vulnerabilidad al cambiar de
disposición. Un entrenamiento bien llevado infunde confianza.
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b) Actividades del adversario. Se conoce el material a su disposición,
la incógnita radica en el modo de empleo. El conocimiento hace
factible preparar las contramedidas.
2) Idiosincrasia. Impone su sello a las resoluciones y actos realizados por
un determinado pueblo. Su análisis aporta valiosos antecedentes.
Tropas altivas, fuertes y sanas vencerán con facilidad a enemigos
debilitados por una existencia cómoda.
3) Personalidad del Jefe.
Es el blanco de la estratagema a fin de
perturbar su mente y moral. Se procura arrebatarle la iniciativa y que
reaccione sometido a nuestras intenciones. Quien maniobra dispone de
los factores materiales y anímicos para crear la estratagema y producir
el engaño.
7.- FASES DE LA MANIOBRA
Resulta inconveniente amarrarse a una secuencia rígida perdiendo así la
libertad de acción. Durante el período encubierto de la maniobra a cada fase
cabe imprimir una cuota de engaño.
La maniobra pretende obtener el objetivo estratégico asignado al mínimo
costo y en el momento oportuno. Se inicia con la elección de uno de los cuatro
objetivos, fijando luego el orden cronológico de las operaciones. Enseguida, ella
señala el camino de cómo conseguirlo con el apoyo de la estratagema. La
maniobra supera el concepto de realizar movimientos adecuados y sus fases son
las siguientes:
a.- Reunión de los medios.
Consiste en la concentración de las fuerzas en el área desde la cual se
pretende iniciar la maniobra estratégica. Se realiza en la posición; su
finalidad es facilitar el despliegue.
En este período se continúan con el entrenamiento, la aclimatación y
verificación de los sistemas; las actividades encierran la intención de
consolidar una óptima coordinación y enlace entre el mando y sus órganos
de maniobra.
Hay que observar estrictas medidas de seguridad con el propósito de
precaver la sorpresa. La reunión de medios implica economía de fuerzas.
Se hace centro de gravedad donde se desea alcanzar la decisión. En el mar
el punto de la decisión cambia en el espacio y tiempo con relativa rapidez.
b.- Despliegue.
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Son actividades realizadas en el área de concentración a fin de adoptar
un dispositivo apropiado para realizar la maniobra estratégica; facilita la
aproximación del dispositivo hacia el objetivo estratégico creando las
condiciones favorables. El zarpe es un período de gran vulnerabilidad, el
mejor antídoto consiste en abreviar los plazos para adoptar formaciones de
crucero.
En altamar solo gravitan en su forma: la idea de maniobra y las
amenazas más probables y peligrosas a neutralizar. La estratagema juega
un rol crucial. El adversario debe mantenerse ignorante sobre las
verdaderas intenciones el mayor tiempo posible.
Es el campo de acción propicio para exhibir la imaginación y
creatividad del conductor recurriendo siempre a la seguridad.
c.- Aproximación.
Corresponde al avance de la fuerza sobre el objetivo estratégico
asignado, destruyendo los obstáculos que se le interpongan en su cometido.
En la rapidez y fluidez de sus movimientos radica la clave para su éxito.
En la ofensiva como en la defensiva, la fuerza está obligada a avanzar
hacia el enemigo. Sin la maniobra esta imposición es imposible satisfacer
para el más débil, pues se convierte en un suicidio.
Luego se procede al enceguecimiento y dislocación, lo que se consigue
utilizando sus sistemas para proporcionarle información adelantada y los
centros de mando y control.
Esta etapa finaliza con la ubicación de las fuerzas para combatir contra
el enemigo con la intención de destruirlo.
d.- El Choque.
Tiene neto carácter táctico. Constituye la colisión entre las fuerzas
contendientes que pretenden lograr o defender un objetivo estratégico en
disputa. Se concentra contra la escolta de un convoy, una fuerza de tarea
anfibia, una fuerza protectora, etc.
La batalla se realiza cuando las flotas principales participan en el
choque. Debe ser deliberado, aprovechando que el adversario no se
encuentra en condiciones de reaccionar con vigor por efectos de la
maniobra.
El choque se le impone al enemigo bajo nuestras condiciones; solo tiene
justificación cuando las misiones de las flotas de combate entran en franca
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contradicción. El choque se persigue al existir razonables posibilidades de
éxito.
8.- FACTORES INTANGIBLES DE LA MANIOBRA
Uno de los objetivos fundamentales de la Maniobra es subordinar al enemigo
a nuestras propias intenciones, para lo cual es importante mantener la
iniciativa, contar con una irrestricta libertad de acción, libre de toda
interferencia o servidumbre externa o interna.
Lo que se intenta es envolver al adversario en la bruma de la incertidumbre,
haciéndole perder el panorama de la situación vigente, que reaccione ante
hechos consumados imprevisibles, con elementos de juicio incompletos o
deformados, que incurra en errores para minar su confianza y provocarle el
desaliento. Así se debilitará el control global de sus fuerzas, transformando su
dispositivo en algo inconexo.
Liddell Hart expresó: “En esta esfera psicológica, la dislocación resulta de la
presión ejercida sobre el pensamiento del mando y el efecto físico que esto
causa. Tal impresión se acentúa fuertemente, si el jefe se da cuenta de una
manera súbita de que se halla desventajosamente situado y si tiene la sensación
de que no le será posible contrarrestar la maniobra enemiga. En realidad, la
dislocación psicológica surge de esa sensación, de verse envuelto en una
trampa”.
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U N I D A D 2.0
I
INTRODUCCION AL ESTUDIO DE LA ESTRATEGIA NAVAL
Los océanos forman el escenario donde concurren los intereses, aspiraciones y
expresiones de poder para la gran mayoría de los Estados.
1.- DEFINICIONES
a.- Poderío Marítimo.
Es la capacidad de crear, desarrollar, explotar y defender los intereses
marítimos de un país tanto en la paz como en la guerra. La capacidad de un
Estado para usar el mar en su beneficio.
1) Elementos del Poderío Marítimo. Está integrada por dos elementos, los
Intereses Marítimos (IM) que otorga la sustancia y el Poder Naval que
los defiende.
b.- Intereses Marítimos.
Son todas aquellas actividades que desarrolla el Estado y los
particulares para el aprovechamiento de los recursos, dentro de las aguas
sometidas a la jurisdicción nacional, del litoral y de los fondos marinos, con
el fin de generar beneficios políticos, económicos y sociales para la nación.
Conjunto de beneficios de carácter político económico, social y militar
que obtiene una nación de todas las actividades relacionadas con el uso del
mar, pero se requiere de una clara conciencia marítima del gobernante y de
la nación para un aprovechamiento integral.
Sus componentes son: el Complejo Geomarítimo, la Conciencia
Marítima, la Marina Mercante, la infraestructura portuaria y terminales
petroleros, la industria naval, flota e industria pesquera, turismo marinocostero, investigación científica, explotación de fondos marinos y los
deportes náuticos.
c.- Conciencia Marítima.
Es el grado de comprensión que se encuentra en los habitantes de un
país para comprender, aceptar y valorar el grado de dependencia que tiene
ese pueblo con respecto al mar, tanto para su supervivencia, como para su
seguridad. El conocimiento cabal y reflexivo del mar, facilita la labor de
orientar al país hacia un destino oceánico y convertirlo en una potencia
marítima próspera y poderosa.
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d.- Soberanía Marítima.
Facultad de ejercer con plenitud el control, vigilancia, administración y
explotación del territorio marítimo para emplearlo en beneficio de los
Intereses Nacionales.
e.- Territorio Marítimo.
Comprende el litoral, aguas interiores, mar territorial (zona económica
exclusiva), fondos marinos y para algunos países el mar presencial.
2.- FACTORES QUE ESTIMULAN EL PODERÍO MARÍTIMO.
No hay constancia de ningún país que posea litoral marítimo, y que lo ignore.
Un factor que ejerce marcada influencia en la formación de una potencia
marítima es la decisión del gobernante en crecer hacia el exterior. La estructura
de producción interna con ventajas competitivas se expande en forma
considerable y empieza a tomar conciencia de la vinculación entre la
prosperidad y la fluidez de las comunicaciones marítimas.
El poder militar marítimo sirve para propósitos muy diferentes a la defensa
del comercio y los recursos, es un factor de suma efectividad dentro de las
estructuras del poder mundial. Sus principales factores son:
a.- Situación Geográfica.
Está referido a dos aspectos básicos:
1) Carencia de fronteras comunes con enemigos potenciales; se
despreocupa en invertir cuantiosos recursos en ejércitos.
2) Posesión de una ubicación geográfica favorable con relación al sistema
general de tráfico marítimo; permite mantener concentradas las fuerzas
navales para proteger las propias comunicaciones.
b.- Configuración Física. Engloba varios elementos:
La Costa o Litoral.
Una costa extensa dotada de numerosos puertos
incentiva al comercio marítimo con el resto del mundo.
Terreno y Clima. Comarcas estériles y duras impulsan a buscar su sustento
en los océanos, el buque pesquero simboliza su riqueza y la unidad
naval su seguridad.
c.- Conformación Geográfica.
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Estados insulares necesitan de un significativo poderío marítimo sino
desean verse reducidos a la impotencia.
d.- Extensión territorial.
Así como la calidad de los puertos en comparación con sus habitantes;
cuando la proporción resulta adecuada adquiere el carácter de factor de
fuerza, si la población es escasa se transforma en vulnerabilidad.
e.- Población o número de habitantes .
El porcentaje de personas dedicadas a las actividades marítimas,
constituye la reserva marítima del país.
f.- Carácter Nacional.
Mahan dice: “la tendencia comercial, con la consiguiente necesidad de
producir algo con que satisfacerla, es uno de los elementos nacionales más
importante para el desarrollo del Poder Naval”.
g.- Clase de Gobierno.
Se refiere a la evaluación de la influencia del gobierno, siendo de
carácter más seguro y permanente cuando están constituidos,
principalmente, por la voluntad del pueblo. El gobierno tiene un rol
fundamental en el incentivo y desarrollo del Poderío Marítimo. Sin la
voluntad del estadista, se hace difícil orientar a una nación hacia un destino
oceánico; las políticas tendientes al fomento de los intereses marítimos
necesitan claridad y permanencia a través del tiempo.
3.- GRAVITACIÓN DEL PODERÍO MARÍTIMO A TRAVÉS DE LA HISTORIA.
Los griegos con su amplitud en indagar la esencia de las cosas, más de dos mil
años atrás conocían la capacidad del poderío marítimo con todas sus
posibilidades.
Roma, sustentó su imperio en mantener la supremacía del Mediterráneo.
Salamina permitió la preeminencia del pensamiento griego-occidental. El
mundo cristiano sobrevivió a la agresión del islamismo en Lepanto. La derrota
de la Armada Invencible señaló el inicio del ocaso del Imperio Español.
Trafalgar marcó el apogeo del Reino Unido. Leyte rubricó el predominio
mundial de Norteamérica.
Un país al crear y desarrollar su poderío marítimo aumenta su influencia
política, económica, social y militar. Quien manda en el mar, manda en el
comercio; quien manda en el comercio, dispone de las riquezas del mundo y
domina en consecuencia al mundo entero.
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El poderío marítimo fue el instrumento utilizado por estados que adquirieron
una gravitación desmesurada; pero cuando descuidaron ese poderío se
arruinaron. Los mares cobran cada día mayor relevancia, constituyen una
fuente importante de recursos vivos, se les considera la gran reserva de
elementos no vivos, sus aguas guardan enormes cantidades de energía limpia.
4.- LAS COMUNICACIONES MARÍTIMAS EN EL CONTEXTO DEL PODERÍO
MARÍTIMO.
Otorga vida y valor material al poderío marítimo. Revisten significado
económico, político y estratégico. El Objeto de la guerra marítima es impedir el
tráfico de los buques que conduzcan tropas o cargamentos de o para los
enemigos y, proteger los buques que realizan nuestro comercio marítimo o que
transportan tropas propias o amigas.
a.- Significado de las Líneas de Comunicaciones Marítimas (LCM).
Tienen distinto significado dependiendo de los parámetros político,
económico y estratégico. Las LCM en tiempo de paz son un factor de
bienestar y progreso; en conflicto pueden alcanzar un carácter de vida o
muerte.
b.- Clasificación de los países según su dependencia de las (LCM).
1) Condición Geográfica. Señala su grado de dependencia de las LCM en la
paz y en la guerra. Se reconocen tres condiciones geográficas:
a) Insular. Depende de modo vital de las LCM.
b) Continental. No depende de las LCM.
c) Marítimo Continental.
No hay países autárquicos, todos están obligados a complementar
sus economías mediante el comercio exterior.
c.- Clasificación de las (LCM).
1) Ámbito.
a) Cabotaje. Unen internamente al país.
b) Oceánicas. Unen al país con el exterior.
2) Empleo.
a) Económicas. Satisfacen las necesidades económicas del país, son
permanentes.
b) Militares. Satisfacen las necesidades de transporte estratégico de
las fuerzas, son eventuales. El transporte militar se realiza durante
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la fase preguerra. Durante las hostilidades su arribo oportuno
reviste tal trascendencia que la Armada está obligada a
comprometer a sus principales órganos de maniobra.
c) Mantenimiento. Satisfacen necesidades logísticas, obedecen a un
ciclo definido y con períodos poco flexibles. El transporte de
mantenimiento, un significado vital para la suerte del teatro pueden
provocar la batalla decisiva.
d.- Concentración y Reunión de las Líneas de Comunicaciones Marítimas.
La geografía y la obra del hombre incluyen en la distribución de las
LCM.
1) Zonas Focales.
marítimos.
Se generan en las proximidades de los terminales
2) Zonas de Confluencia. La geografía canaliza las LCM aumentando su
densidad.
e.- La Marina Mercante.
Los buques mercantes y su carga llevan a la realidad las LCM. Cortar las
LCM significa destruir naves mercantes con sus cargamentos. Proteger las
LCM representa defender buques específicos.
La causa del aumento del tonelaje se debe a factores económicos, las
faenas portuarias representan alrededor del 50% del flete y los armadores
buscan bajar su valor.
Para la guerra, la carga masiva es la única con real significado
estratégico. Militarmente es imposible desplegar o mantener grandes
cuerpos de tropas en cualquier punto de ultramar sin la asistencia del
poderío marítimo.
En nuestro país el desarrollo de la marina mercante a sido incipiente
por la falta de aplicación de leyes adecuadas, malas políticas
gubernamentales, aranceles elevados, por lo que el mayor porcentaje de
mercaderías que son transportadas por vía marítima, se realiza a través de
flotas con banderas de otras nacionalidades.
5.- PODER NAVAL.
Es el componente militar responsable de la protección de los intereses
marítimos sus componentes lo constituyen la fuerza naval y la posición
estratégica PN = Fuerza x Posición, el factor multiplicador corresponde a la
voluntad estratégica.
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a.- La Fuerza.
Es el conjunto de medios humanos y materiales con que cuenta una
Armada para cumplir su misión. Comprende no solo las unidades navales y
aeronavales con sus dotaciones, sino también los sistemas de mando y
control. El principal órgano de maniobra corresponde a la Fuerza
Organizada, llamada así porque está organizada con el propósito de obtener
la decisión en el mar por medio de la batalla.
b.- Posición Estratégica.
Es el factor geográfico, su ubicación permite alcanzar los objetivos
estratégicos de la guerra en el mar. Es el conjunto de bahías, puertos y
otros accidentes geográficos que permiten ser usados por las fuerzas
navales como base de operaciones y que les permite gravitar sobre los
objetivos estratégicos previstos. Repercute en el empleo de la fuerza en dos
aspectos:


Permite la defensa o ataque de los objetivos estratégicos escogidos.
A la actitud estratégica con respecto a la posición si uno de los
adversarios carece o la posee en forma deficiente tiene el imperativo
estratégico de conquistarla o mejorarla.
c.- Voluntad Estratégica.
Es la voluntad de ser potencia con miras hacia el mar, es la que otorga
dinamismo y actividad al binomio componente del Poder Naval. Fuerza sin
posición no tiene gravitación. Posición sin fuerza no tiene valor. Poder
Naval sin voluntad estratégica no tiene gravitación ni valor.
d.- Consideraciones básicas sobre el empleo del Poder Naval.
El Poder Naval es parte del potencial militar de la nación. Los puntos a
considerar para el empleo del poder naval son:





Establecer la naturaleza del OP y sus implicaciones.
Determinar el enemigo principal y el más peligroso.
Definir la importancia del control de las LCMVS.
Precisar el teatro principal y el de la decisión.
Tener presente la “Unidad de la Guerra”.
RELACIONES ENTRE EL PODERÍO MARÍTIMO Y EL PODER NAVAL.
Comprende dos elementos:
Intereses Marítimos.
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Representa básicamente sus aspectos económicos y sociales.
Poder Naval.
Representa la fuerza y expresión política.
Se distinguen dos clases de Poderío Marítimo, a saber:
a.- Poderío Marítimo con base de Fuerza.
El poder naval no guarda relación con los intereses marítimos a
proteger, existe para servir a la idea política.
b.- Poderío Marítimo con base Económica.
El poder naval se le destina a resguardar los imprescindibles Intereses
Marítimos.
II
ESTRATEGIA NAVAL
El ámbito en donde se desarrolla la guerra en el mar tiene características únicas,
muy diferentes a donde se desenvuelven la guerra terrestre, el factor geográfico hace
que los procedimientos varíen fundamentalmente. No solo se expresa en el
transcurso de los conflictos sino también durante la paz.
La estrategia marítima debe adaptarse a esos nuevos retos con el propósito de
emplear al "Poder Naval" en su solución.
1.- DEFINICION
a.- Estrategia Marítima
Se entiende a los principios que guían una guerra, en la cual el mar es el
factor sustancial. La Estrategia Naval será una parte de aquella que
determina los movimientos de las fuerzas navales, cuando la Estrategia
Marítima ha determinado que parte de esas fuerzas deben actuar con
relación a las fuerzas.
Para algunos tratadistas la Estrategia Naval es “ La Ciencia y Arte de la
guerra en el mar” o “El Poder Naval en acción”.
Corbet indica son “Los principios que rigen a una guerra en la cuál el
mar es un factor esencial, con el propósito de determinar las relaciones
mutuas del Ejército, Marina en un plan de guerra”.
Weneger dice que es “La ciencia de la posición Estratégica”.
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Para la Academia de Guerra Naval del Ecuador es “la ciencia de concebir
y preparar y el arte de emplear al Poder Naval, a fin de obtener los objetivos
de la guerra”.
b.- Escritores sobre Estrategia Marítima.
1) Alfred Mahan.
Sus obras más importantes fueron "Influencia del
Poder Naval en la historia" y "Estrategia Marítima". Sus escritos
contribuyeron al resurgimiento de un imperialismo radicalizado entre
las grandes potencias. Fue el primero en deducir la verdadera filosofía
de la guerra naval. Comprendió la importancia primordial del dominio
del mar y el rol que este dominio ha desempeñado en la historia del
mundo.
Las operaciones que se basan en él, dependen en primer lugar de
la fuerza organizada. La importancia que reviste la destrucción de la
fuerza organizada del enemigo hace buscar la batalla.
Factores externos concernientes a la estrategia: la concentración,
la ofensiva, la defensiva y la maniobra. Se afirmó que su estructura
teórica quedó obsoleta por la aparición de potencias continentales
inmunes al Poderío Marítimo.
2) Philip Colomb. Su obra cumbre "Naval Warfare"; estudió la
concordancia de las operaciones navales con las terrestres. Llego a la
conclusión de la vulnerabilidad de Inglaterra al ataque de sus
comunicaciones marítimas y a la invasión, indicando que la mejor
defensa para ambas amenazas residía en la obtención del control del
mar.
Trato el concepto de la Flota en Potencia. Examina la naturaleza
de la guerra naval y su objeto primordial y único es la conquista del
dominio del mar, del cual resulta el dominio de las comunicaciones
marítimas.
3) Julian Corbett. Abogado y periodista británico, orientado hacia los
temas navales, profesor de la Escuela de Guerra Naval. Sus ideas
quedaron plasmadas en "Algunos principios de la Estrategia Marítima".
Le permitió comprender la correlación marítimo - continental de los
conflictos.
Pudo enfocar la Guerra de Objetivo limitado bajo el prisma
marítimo, así como la conducción de la guerra en el mar ordenándola en
tres operaciones navales típicas:

La Conquista del Control del mar.
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

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La Disputa del Control del mar.
El Ejercicio del Control del mar.
Sus falencias residieron en la incapacidad de prever el tremendo
impacto de los nuevos medios (submarinos y aeronaves) y el
menospreciar la utilidad del convoy como procedimiento para
neutralizar ambas amenazas.
4) Otto Gross. Vicealmirante alemán, elaboró "La historia oficial de la
Gran Guerra"; formuló interesantes relaciones entre la política y la
estrategia, la conducción político - estratégica de los conflictos y la
unidad de la guerra.
5) Wolfgang Wegner. Elaboró tres documentos conocidos como "Trilogía
de Wegner"; analizó la posición estratégica, la dualidad del poder naval
(fuerza y posición), la voluntad estratégica, la batalla con su
fundamento estratégico y la ofensiva estratégica relacionándola con la
conquista de la posición.
Inclinado a atribuir a las disposiciones estratégicas una
trascendencia fuera de toda proporción, le condujo a una fatal
sobreestimación de la importancia de la posición comparada con la
fuerza material.
6) Raúl Castex.
Autor de los 5 volúmenes "Teorías Estratégicas".
Para el la guerra en el mar estaba en íntimo enlace con la guerra en
tierra. La estrategia marítima no se reducía a buscar la batalla entre
fuerzas organizadas, sino estaba sujeta a la situación estratégica
imperante, generando un Orden Cronológico de las Operaciones.
En relación a las operaciones de conquista del control del mar,
clasifico los métodos para producir la batalla en:



Ofensiva de Movimiento.
Ofensiva Geográfica.
Ofensiva Pseudo-geográfica.
El avance tecnológico le preocupó de modo significativo. Emplea
a la historia como herramienta para acostumbrar al lector en el estudio
estratégico de los hechos pasados.
7) Bernard Brodie. Escritor norteamericano autor de "La Guía Estratégica
Naval", indica que es una actualización de los principios de Mahan, pero
adoptando posiciones diferentes como en el caso de las relaciones entre
la tierra y el mar o la utilidad de la Flota en Potencia.
8) S.G. Gorshkov. Designado por Kruschev como Comandante en Jefe de la
Armada Roja, quien desestimaba el valor de los grandes buques en el
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contexto nuclear motivo por el cuál ordenó su desmantelamiento. Con
la crisis de los misiles de Cuba inicia la colosal tarea de construir el
poderío marítimo del país.
La Armada Roja se transformó de una marina guardacostas en una
oceánica. El poder naval era indispensable para llevar a cabo una
política global; por consiguiente si la Unión Soviética aspiraba a la
hegemonía mundial debía convertirse en potencia marítima.
Distinguió las tareas y objetivos de la presencia naval y la
disuasión a realizar en tiempos de paz. Abogó por la creación y
mantención de una "Flota Balanceada". Es considerado como el
principal arquitecto de la moderna armada soviética.
9) La June Ecole. Pone en duda la validez de la fuerza organizada, el
control del mar y la batalla en calidad de método para lograrlo.
Propone solucionar la guerra en el mar con prácticas tales como el
corso, la acción de la armada integrada por numerosas unidades
pequeñas dotadas con los últimos adelantos técnicos, así como la guerra
de minas.
En ese entonces estaban en etapa de experimentación el torpedo,
la mina, el submarino y el alto explosivo. Afirmaba que la guerra
comercial era la más económica para las flotas débiles. Comentaba que
la época de los acorazados, las "escuadras de combate" y la "batalla
naval" tocaba su fin dando paso a una era de pequeñas pero veloces
torpederas, cañoneras y cruceros-corsarios.
Niega la esencia e importancia de la fuerza organizada y de la
batalla. Es la apología de la guerra del corso como única forma de lucha.
En el orden material representa la fe en la nave minúscula. Sus puntos
de vista respecto al número, velocidad, especialización de los elementos
bélicos y la protección del tonelaje son bastante acertados.
2.- ELEMENTOS DE LA ESTRATEGIA MARÍTIMA.
Está encausada por tres elementos que constituyen la tríada: la Fuerza, la
posición estratégicas y las comunicaciones marítimas. El conductor se
encuentra obligado a conjugarlos con el propósito de alcanzar el control del
mar. La fuerza y la posición componen el Poder Naval en tanto que los tres
elementos integran el Poderío Marítimo.
a.- Las Comunicaciones Marítimas.
El mar es el más grande de los medios de comunicación mundial. No
son vías físicas solo se materializan cuando hay buques de transporte
navegando con sus cargas. Se cortan al destruir o capturar las naves o bien
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OPERACIONES Y ESTRATEGIA NAVAL
se impide su tránsito. Se protegen cuando se defienden barcos de carga
específicos.
Cada nación asigna importancia a sus comunicaciones
marítimas según sea su agrado de dependencia, es decir de acuerdo a la
condición geográfica esencial.
1) Características de las Comunicaciones Marítimas .
a) Flexibilidad. Tienen un amplio espacio donde materializarse, dicha
vastedad les otorga una relativa seguridad, característica que la
aprovecha el CNTM para el ruteo de las naves, no están encausadas
por la geografía.
b) Van y Vuelven.
Zarpan con las mercaderías de exportación y
recalan con las de importación de la misma manera actúan en los
teatros de operaciones. Acarrean las necesidades militares,
mientras evacuan los reemplazos y heridos. Sirven para satisfacer
la demanda de los Campos de Acción Bélico, Económico e Interno.
c) Influencia de la Geografía.
No están subordinadas a la geografía,
ella influye incrementando su densidad en ciertas áreas pues estas
van a concentrar las operaciones de ataque y defensa de las LCM.
2) Fisonomía de las Comunicaciones Marítimas. Se distinguen dos clases
de fisonomías:
a) En Tiempo de Paz. De las estadísticas de tráfico marítimo en el país
se definen las direcciones de transporte, la frecuencia del tránsito,
el monto y la calidad de la carga.
b) En Tiempo de Guerra. Se conjuga con la hipótesis de guerra, se
individualizan nuevas necesidades generalidades por el conflicto y
las posibles amenazas. Pueden producirse variaciones como son:





Desviación.
Supresión.
Creación de nuevas.
Tonificación.
Debilitación.
3) Las Comunicaciones Marítimas y el Derecho Internacional. Existen dos
tendencias extremas respondiendo solo al exclusivo interés de los
eventuales patrocinadores:


Apoderarse de su superficie ejerciendo el monopolio de las
comunicaciones marítimas.
Libertad de los mares para ejercer cualquier actividad en ellos.
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El 16 de abril de 1.856 se formuló la llamada Declaración de París
cuyos cuatro puntos principales son:




El Corso queda abolido.
El pabellón neutral cubre la mercadería enemiga a excepción del
contrabando de guerra.
La mercadería neutral a excepción del contrabando de guerra no
puede ser apresada bajo el pabellón enemigo.
Los bloqueos para ser obligatorios necesitan ser efectivos.
Inglaterra dispuso medidas de dudosa legitimidad para buques
mercantes, estos fueron artillados y se les ordenó señalar por radio la
presencia de submarinos. Propuso en diversas oportunidades la
prohibición del "Arma Pérfida" que amenazó su existencia: el
submarino.
Castex expuso: en tiempo de paz el mar es libre para todo el
mundo, en tiempo de guerra pertenece al más fuerte en la medida que
se lo permitan sus medios políticos y militares. Los poderosos cuando
fueron neutrales impusieron por la fuerza la libertad de los mares, pero
si tomaron parte en el conflicto no dudaron en atropellar los derechos
de los neutrales.
4) Zonas de Guerra. Son áreas marítimas ubicadas en las proximidades
del litoral adversario donde se restringe o prohíbe el tránsito de buques
mercantes enemigos o neutrales. Es el método ideal para emplear
medios incapaces de identificar blancos y menos rescatar náufragos.
Constituye el procedimiento en que se apoya el bloqueo económico. A
fin de ser respetada debe ser avalada por medios apropiados, de no ser
así pierde eficacia y credibilidad, carece de sanción legal y solo la
respalda la costumbre y la fuerza.
b.- La Posición.
La estrategia no concibe resolución alguna sin antes considerar la
geografía que ejerce influencia sobre las operaciones. En el mar la geografía
pierde relevancia a medida que las costas se alejan. Se define como el área
geográfica cuya ubicación y formación la hace gravitar sobre el o los
objetivos estratégicos a lograr por medio del poder naval.
Siempre conviene tener presente la dualidad del poder naval: fuerza,
posición; las dos cosas se complementan. Para asegurar tal control es
indispensable apoderarse, cuando esto puede hacerse correctamente, de
aquellas posiciones marítimas que contribuyan a asegurar el dominio.
Su mayor relevancia radica en darle persistencia a la fuerza en el área
de operaciones. Encierra un concepto logístico, mientras mayor es la
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magnitud del apoyo más importancia reviste su posición. En el aspecto
estratégico favorece la ofensiva contra los objetivos del adversario y a la vez
facilita la defensa de los propios.
1) Requisitos de una posición.
a) Estratégica: Ubicación.
Referido a su situación relativa a él o los
objetivos estratégicos perseguidos a través del poder naval.
b) Táctica: Autonomía defensiva.
Abarca los tres frentes: terrestre,
marítimo y aéreo. Lo ideal que no constituya una servidumbre para
la fuerza o coarte su libertad de acción; por tanto necesita brindar
seguridad efectiva.
c) Logística: Capacidad de apoyo.
Tiene efecto directo en la
prolongación de los plazos de despliegue de la fuerza en el área de
operaciones.
2) La Posición y la Actitud Estratégica . Obligada a definir su actitud
estratégica con respecto a:
a) Comunicaciones Marítimas. En el aspecto ofensivo lo óptimo se
logra cuando la posición está interpuesta entre los puertos de
origen y destino de la carga; en el defensivo debe amparar al
sistema de comunicaciones propias intercalándose entre los
puertos de recalada y la fuerza adversaria.
b) La Posición. Si se carece de ésta genera el imperativo estratégico
de conquistarla o mejorarla, lo que demanda asumir una actitud
estratégica ofensiva materializada por una operación anfibia.
c) La Fuerza.
Una buena posición simplifica el ataque contra la
fuerza organizada contraria; además si el frente de la posición es
amplio posibilita las operaciones ofensivas desde distintas
direcciones, así como ofrece múltiples líneas de retirada.
3) Bases Navales. Son puntos de apoyo logístico para las fuerzas navales.
Consisten en emplazamientos destinados a la provisión de suministros,
implicando un concepto logístico. No corresponden a refugios o
santuarios dedicados al cómodo reposo ya que mientras la fuerza
permanece inactiva entrega el mar al enemigo. Es conveniente que las
unidades estén siempre listas, lo contrario produce la nefasta flota en
potencia en la más completa inactividad.
a) Requisitos Mayores de una base.


Estratégico:
Táctico:
Ubicación en relación a la posición.
Autonomía defensiva.
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
Logístico:
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Capacidad y calidad del apoyo.
b) Requisitos Menores de una Base.




Climatología.
Facilidades de acceso.
Amplitud del fondeadero.
Comodidades para el descanso del personal.
c) Clasificación de las Bases.


Importancia:
- Principal.
- Secundaria.
- Fondeaderos de guerra.
Permanencia.
- Permanentes.
- Transitorias.
- GAM (Flotantes).
Ubicada en la patria.
Situada en el TT. OO.
Emplazados en la posición.
Avanzadas establecidas en tierra.
4) La Posición y el Avance Tecnológico . Siempre persisten los tres
factores limitantes de la permanencia de una fuerza naval en el mar:
a) Abastecimientos.
b) Mantenimiento.
c) Personal.
Munición, combustible, repuestos, víveres.
Auto mantención, recorridos, reparaciones.
Descanso, reemplazos.
Aún cuando los buques con propulsión nuclear cuentan con
combustible para operar por largos períodos tienen que regresar. Las
grandes potencias marítimas realizan considerables esfuerzos para
conservar sus redes de posiciones estratégicas.
c.- La Fuerza.
El empleo de la fuerza corresponde al campo táctico. En el ámbito
estratégico está representada por la "Fuerza Organizada" que es la
encargada de dar la batalla contra la fuerza equivalente del enemigo. Si el
choque acarrea la destrucción del adversario es la "Batalla Decisiva" con la
que se conquista el control del mar.
Los cruceros auxiliares, submarinos, aeronaves producen la diversión
de medios adversarios en otros teatros excéntricos, siendo efectivas solo
cuando desvían mayores fuerzas que las utilizadas en la tarea de
distracción.
1) Validez del concepto de Fuerza Organizada . Su objetivo no ha variado
o sea destruir a su oponente con la intención de obtener el control del
mar. Hoy se las integra con unidades de superficie, submarinas y
aéreas, por lo que pueden variar los procedimientos para el encuentro
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pero no las metas. El objetivo de la guerra en el mar perdura a través
de los tiempos: obtener el control del mar.
2) Atributos característicos de las Fuerzas Navales . Permite el empleo en
la paz para reafirmar o cautelar intereses y objetivos nacionales
amagados por potenciales rivales.
a) Flexibilidad Política. Puede desplegarse en las proximidades de un
área conflictiva conservando su libertad de acción. Otorga al
escalón político la alternativa de intervenir en forma discreta o
abierta, sin comprometerse de inmediato en hechos violentos o
considerados hostiles.
b) Flexibilidad Operativa. Capacidad de desplegarse y operar con
rapidez y oportunidad en zonas lejanas permaneciendo plazos
prolongados en sus proximidades. Varían de la mera presencia a la
operación anfibia. Su movilidad permite conservar la iniciativa,
explotar la sorpresa y concentrar el efecto de sus armas.
c) Flexibilidad Logística.
Consiste en un dispositivo logístico
armónico e integrado. Está formada por unidades autónomas. El
consumo lo recuperan reabasteciéndose del Grupo de apoyo móvil,
esta característica independiza a la fuerza de las bases terrestres y
le faculta operar por largo tiempo sin apoyo logístico externo.
d) Condición “Lista para Operar al Arribo”.
Puede emprender
operaciones de combate sostenidas e inmediatas al recalar a la
región objetivo.
Se destacan las fuerzas por sus roles o misiones orientadas a la
disuasión y el manejo de crisis. La flexibilidad política y operativa le
otorga un abanico de alternativas para expresar sus aspiraciones.
La política exterior está avalada por la fuerza, pensar de otro
modo constituye una ilusión que acarrea amargas frustraciones y
desengaños.
III EL CONTROL DEL MAR
1.-IMPORTANCIA DE LA GUERRA EN EL MAR
Constituye un concepto de facetas complejas, abarca dos cometidos de
distinto carácter ganar o conquistar el control del mar y ejercerlo o explotarlo.
No tiene un valor absoluto, es relativo pues lo afecta el tiempo, el espacio, la
acción de los neutrales y la inmensidad de los océanos. En lo formal posee
varios sinónimos: control, dominio, comando, superioridad, etc.
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a.- Dualidad del Control del Mar.
El mayor obstáculo para ejercerlo radica en la Fuerza Organizada del
adversario. Representa el estorbo más manifiesto para expulsar en sentido
figurado al contrincante del océano y se alcanza al destruir o neutralizar la
flota adversaria.
La Fuerza Organizada nunca podría ser suficientemente numerosa o
ubicua para ejercer el dominio del mar y controlar las líneas de
comunicaciones.
La flota de combate conquista el control, mientras que los buques
menores son los que ejercen el control, integrando por lo tanto la flota de
control. La conquista y mantención del control era la tarea de la flota de
combate, bajo cuya protección operaba la flota de control. En tiempos de
paz, concentran su atención en la Fuerza Organizada, es decir olvidan la
denominada “Flota de Control de Grenfell”.
b.- Divisibilidad del Control del Mar.
Un control simultáneamente dividido sobre la misma extensión de agua
es imposible. Se disfruta o no del control del mar, no existen gradaciones
intermedias. Cuando ocurre que ninguno de los beligerantes puede usar el
mar sin un costo excesivo, o cuando ambos pueden usarlo corriendo
idénticos riesgos o peligros, entonces dicho mar está en disputa y no se
puede decir que uno de los beligerantes ejerce control sobre él.
c.- Relatividad del Control del Mar.
Se dice que es:
1) Local. Es de limitada extensión pues tiene efecto solo en el área donde
se encuentra la fuerza, se mueve junto con la fuerza acompañándola en
su tránsito. La primera área del mar en que se hace necesario
establecer el control para los intereses nacionales, es el propio patio
trasero.
2) Imperfecto. Los bienes destinados a sostener el esfuerzo bélico del
enemigo son acarreados por naves adversarias y neutrales. Los
neutrales concurren a interferir el control del mar haciéndolo
imperfecto.
El teatro de operaciones marítimo es recorrido
constantemente por buques extraños al conflicto.
3) Temporal. El control del mar persiste mientras la fuerza permanece en
el área de interés, al alejarse termina el dominio de esos espacios.
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4) Incompleto. La vastedad del mar a impedido dominar toda su
extensión, jamás se logró barrer por completo al enemigo de los
océanos, debido a la amplitud del escenario sumado a la dualidad del
control del mar: la conquista y el ejercicio.
d.- Es un Medio para un Fin.
Para la guerra el mar no representa ningún valor físico sino como vía de
comunicaciones. El Fin de la obtención del control del mar reside en el
ejercicio y explotación para propósitos políticos, económicos y militares.
Es un medio para un fin ulterior. El valor del mar no es absoluto sino
más bien relativo. El dominio del mar es en suma el dominio de las rutas
marítimas. Una vez conquistado el control del mar es indispensable
ejercerlo y explotarlo, caso contrario carece de sentido.
Una de las contribuciones del poder naval en la guerra reside en su
capacidad de proyectar el poder militar de la nación a través del mar en
territorio enemigo por medio del bombardeo aeronaval o la invasión.
2.- IMPORTANCIA VARIABLE DEL CONTROL DEL MAR.
El dominio del mar es condición ineludible para conseguir resultados
concluyentes cuando los objetivos a lograr o los mismos rivales se encuentran
separados por aguas oceánicas. Para países beligerantes con fronteras y mar
común la suerte del conflicto se decide, por lo general, mediante el inevitable
choque de sus ejércitos de tierra.
Sin embargo la mera posibilidad de un envolvimiento por mar al flanco
costero del dispositivo obliga a divertir considerables medios con el propósito
de prevenir la amenaza latente.
a.- Fundamentos de la necesidad de Control del Mar .
1) Valor del Control del Mar. Dependiendo de las comunicaciones
marítimas, si estas son importantes en la paz se tornan críticas en
tiempo de guerra.
2) Formas de lograr el Control del Mar. Mediante el empleo del poder
naval, todas las naves o aeronaves con el propósito de conquistar o
ejercer su control deben estar bajo un mando naval único.
3) Obstáculos para obtener o ejercer el Control del Mar .
Organizada adversaria.
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La Fuerza
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4) Procedimientos para apartar el Poder Naval enemigo. Mediante la
destrucción, lo que se ejecuta cuando ella interfiere con las tareas
planeadas o se presentan circunstancias favorables.
5) Consecuencias del control del mar. Afecta a los campos de acción, en
general a todo el país; por otra parte permite las operaciones de
proyección.
b.- Comunicaciones Marítimas Vitales de Superficie .
Interesa preocuparse de las que poseen efectos reales y directos en la
suerte de la guerra. En cuanto al uso del mar para propósitos militares, la
superficie asume importancia primordial ya que el abastecimiento de
naciones, estaciones y fuerzas no autosuficientes en época de conflicto
deberá forzosamente efectuarse con medios de superficie.
Las únicas comunicaciones de valor económico y estratégico son las
marítimas, estas polarizan las operaciones de control del mar en particular
las de ejercicio.
c.- Explotación del Mar.
Se realiza con fines económicos y militares, pero ambos concurren para
afectar con gran intensidad al campo interno.
1) Explotación Económica. Sirve para satisfacer los requerimientos de la
infraestructura financiera; permite negar al enemigo el tránsito de sus
líneas de comunicaciones económicas. Se ejerce presión contra el rival
imponiéndole el bloqueo económico; evita el auxilio al antagonista por
neutrales. Con bombardeo daña sus instalaciones económicas y de
servicios.
2) Explotación Militar. Facilita el transporte de los ejércitos; conserva el
vigor de los teatros de operaciones. Concede movilidad estratégica al
dispositivo realizando operaciones de proyección destinadas a
conquistar el territorio enemigo. Impide al enemigo el refuerzo y
mantención de sus dispositivos; otorga la capacidad de destruir
componentes de la posición estratégica del antagonista efectuando
incursiones anfibias. Evita las operaciones de proyección adversarias.
3.- EL CONTROL DEL MAR Y LA DURACIÓN DE LA GUERRA.
Para un país insular el control del mar es fundamental; por ello es necesario
establecer la condición geográfica esencial del país, la que definirá su
dependencia en relación al mar. La subsistencia de un país insular y la suerte
que correrá en un conflicto, dependerá de sus logros, no importando si su rival
es un país continental; y si lo es, éste tendrá una enorme ventaja ya que podrá
dedicarse únicamente a atacar las comunicaciones marítimas de su rival, sin
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preocuparse de defender las suyas. Aunque un país continental tampoco puede
desentenderse totalmente del problema ya que sus reservas no son eternas.
Pueden clasificarse en dos categorías: las de objetivos políticos limitados y
las de objetivos ilimitados.
Uno de los parámetros limitadores de los conflictos residió en el tiempo, el
control del mar es lento en producir sus frutos. El poder naval y el control del
mar, por lo común contribuyen a la victoria pero su papel pasa inadvertido
entre el impacto y persistencia de las acciones aeroterrestres.
a.- Proporción entre medios terrestres, navales y aéreos .
Para una guerra corta; Ejercito y Fuerza Aérea. Para una guerra larga;
Ejercito, Armada y Fuerza Aérea. En la practica no deja de ser una
concepción simplista, nada es más probable que suceda si abiertamente se
deja de planear para ello.
La duración de la guerra depende de múltiples factores:





Condición geográfica esencial de los contrincantes.
Situación política externa e interna.
Capacidad económica de los rivales.
Computo de potenciales.
Carácter de la guerra.
DIFERENCIAS ENTRE ESTRATEGIA MARÍTIMA Y TERRESTRE.
Existen dos tendencias extremas nacidas de la permanente oposición mar tierra: Una corresponde a la aplicación de conceptos terrestres en la estrategia
marítima sin considerar las diferencias intrínsecas entre ellas. La otra aborda
las guerras haciendo gravitar en forma excluyente, las operaciones
aeroterrestres y omitiendo el empleo del poder naval para explotar el mar con
fines militares, económicos y políticos. Las dos desconocen el principio de la
unidad de la guerra.
a.- Diferencias Específicas entre las Estrategias .
Es inconveniente aplicar conceptos terrestres a la estrategia marítima,
ya que el generador de las disimilitudes reside en el escenario líquido y el
objetivo estratégico terrestre se reduce a uno: la Fuerza Adversaria. Al
conductor de la guerra en el mar en vez de un objetivo claro y definido se le
presentan tres de carácter natural (la fuerza organizada, la posición
estratégica y las comunicaciones marítimas), en consecuencia su primera
obligación es la definición del primer objetivo y luego establecer el orden
cronológico para alcanzar los otros.
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La decisión de la estrategia marítima yace en la voluntad de los
contrincantes. La dualidad del control del mar: el ejercicio y la conquista.
Mientras el mar se encuentra en disputa la flota concentrada en la posición
protege las comunicaciones marítimas, los escoltas a su amparo defienden
las naves que realizan el ejercicio del control del mar. Si los cargueros son
hundidos uno de los principales roles de la Armada no se cumple.
Una vez obtenida la decisión en el mar la flota no requiere continuar
reunida y se entrega de lleno al ejercicio o explotación del mar.
1) Objeto.
a) Terrestre. Conquistar el territorio enemigo.
b) Marítimo. Conquistar y explotar el control del mar.
2) Objetivo.
a) Terrestre. Las fuerzas adversarias.
b) Marítimo. La fuerza organizada del enemigo, las comunicaciones
marítimas, la posición estratégica y el territorio.
3) Forma de producir el efecto .
a) Terrestre. Directo, destruido en la batalla decisiva, se ocupa del
territorio del vencido.
b) Marítimo. Directo, proyecta el poder militar a través del mar.
Indirecto, interrumpe las comunicaciones marítimas del enemigo y
su efecto es progresivo.
4) Resolución del problema.
a) Terrestre. Solo la fuerza,
requiere destruir los medios terrestres
que se le oponen.
b) Marítimo. El Poder Naval, necesita considerar fuerza, posición y
comunicaciones marítimas.
5) Efectos Políticos de las operaciones .
a) Terrestre. Los beligerantes, operaciones circunscritas dentro del
territorio de los contendores.
b) Marítimo.
Los beligerantes y neutrales;
comunicaciones pertenecen a todo el mundo.
las
líneas
6) La Batalla.
a) Terrestre. Inevitable, el más débil no puede rehuir el choque.
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b) Marítimo. Eludible, el encuentro es de consentimiento mutuo.
7) Desarrollo de la ofensiva.
a) Terrestre.
Terreno, el más débil cuenta con los accidentes
geográficos para protegerse. Espera, quien está a la defensiva
aguarda. Desgaste, el defensor desgasta al atacante a medida que
avanza.
b) Marítimo. Terreno, al más débil no le es conveniente aceptar el
encuentro generalizado. Espera, el débil no puede esperar, tiene
que desplazarse y golpear. Desgaste, aprovechando los vastos
espacios para lograr la sorpresa, el más débil está obligado a
avanzar hacia el enemigo para desgastarlo.
8) Violencia.
a) Terrestre. Ilimitada, se destruyen ciudades y se asolan comarcas
completas.
b) Marítimo. Limitada, bajas insignificantes, solo son combatientes y
profesionales del mar.
9) Teatro de Guerra. Donde pueden desarrollarse las operaciones.
a) Terrestre. Local, exclusivamente el territorio de los beligerantes.
b) Marítimo.
Inmenso, sobrepasa la extensión jurisdiccional.
Variable, los objetivos, la fuerza y sus comunicaciones modifican su
ubicación y fisonomía de acuerdo a las hipótesis de guerra.
Interferido, los neutrales pretenden hacer valer sus derechos.
10) Teatro de Operaciones. Donde se desarrollan.
a) Terrestre. Operaciones, se realizan en el territorio del más débil.
Capacidad, se saturan. Extensión y Forma, límites fijos y
permanentes.
b) Marítimo. Operaciones, en aguas del más fuerte o más débil.
Capacidad, no hay posibilidad de saturación. Extensión y Forma, se
alteran de acuerdo a las operaciones en desarrollo.
11) Frente.
a) Terrestre. Continuo, forma una línea solo penetrable por medio de
la lucha.
b) Marítimo.
Discontinuo, es permeable y se penetra sin lucha.
Variable, depende de la ubicación de las fuerzas.
12) Líneas de Operaciones.
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a) Terrestre.
Concretas, permanentes, compuestas, vulnerables y
saturables.
b) Marítimo.
Direcciones generales, eventuales, simples,
invulnerables o cercano a ello, no saturables
13) Líneas de Comunicaciones.
a) Terrestre. Concretas, permanentes, compuestas por lo general,
rígidas, vulnerables, saturables, la seguridad es proporcionada por
la fuerza, exclusivas de los beligerantes.
b) Marítimo. Direcciones generales materializadas con buques
navegando. Simples, flexibles. Vulnerables, constituye uno de los
objetivos estratégicos gravitantes. No saturables, se exceptúan los
terminales marítimos. Comunes, de los beligerantes y neutrales.
Seguridad, es otorgada por la propia fuerza. Compartidas, atienden
los requerimientos del país.
14) Bases de Operaciones.
a) Terrestre. Concepto, exclusivamente logístico. Vulnerable, carece
de autonomía defensiva.
Temporal, se traslada según las
operaciones que apoya.
b) Marítimo. Posición estratégica. Concepto, en lo principal es
estratégico. Permanente, constituye un área geográfica especifica.
Autonomía Defensiva, necesita defender a la fuerza estacionada en
ella así como protegerse. Ubicación con respecto a los objetivos
estratégicos, situación relativa facilita la ofensiva de la fuerza.
Frente, mientras mayor sea otorga mayor flexibilidad a la maniobra
estratégica en el mar.
15) Obtención de los Objetivos Estratégicos .
a) Terrestre.
Bélico, mediante la batalla. Económico, previa la
destrucción de la fuerza defensiva. Moral.
b) Marítimo. Bélico, mediante la batalla o la neutralización por el
bloqueo. Económico, se corta el tráfico comercial, además de
recurrir al bloqueo económico. Geográfico, la posición estratégica y
el territorio adversario se conquistan con operaciones de
proyección. Moral, basta con la amenaza o al realizar operaciones
de proyección.
16) Reserva Estratégica.
a) Terrestre.
defensiva.
b) Marítimo.
Indispensable, tanto en la ofensiva como en la
Prescindible, no se emplea.
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U N I D A D 3.0
I
LA OFENSIVA Y LA DEFENSIVA EN EL MAR
1.- INTRODUCCIÓN
La ofensiva y la defensiva se necesitan y complementan. Las operaciones se
componen de un conjunto de ofensivas y defensivas ordenadas tanto en el
espacio como en el tiempo. En la guerra solo hay dos clases de posturas: la
ofensiva y la defensiva.
La Ofensiva tiene como meta un objetivo muy definido y no ofrece dudas
sobre sus alcances; es activa pretendiendo apoderarse de algo en posesión del
enemigo, quién se niega a entregarlo. Se requiere quebrantar la voluntad de
lucha por medio de la fuerza. Únicamente la ofensiva puede traer esta ruptura
definitiva del equilibrio, es la posibilidad que ofrece de obtener un resultado
positivo; el carácter decisivo es el fundamento de la verdadera ofensiva.
La defensiva soporta y detiene el ataque, es pasiva, se satisface con mantener
la situación y conservar las fuerzas. En tierra sus factores de fuerza radican en
el terreno, tiempo y número. Se caracteriza por dos elementos inseparables: la
espera y la reacción. La defensiva no es sino una situación provisional para
emprender la ofensiva tan pronto como las circunstancias lo permiten. Lo
esencial en la defensiva es el contraataque y no la espera en estado de
pasividad, ya que si se prolonga por mucho tiempo mata el espíritu ofensivo.
a.- Ofensiva Estratégica.
Persigue la conquista del territorio adversario y su permanencia en el;
siempre tiene que estar presente el factor geográfico.
b.- Ofensiva Táctica.
Tiene por objeto partir de un punto, golpear y regresar, no tiene
intenciones de permanecer en el.
c.- Defensiva Estratégica.
Elude la decisión en espera de circunstancias favorables para pasar a la
ofensiva.
d.- Defensiva Táctica.
Persigue la defensa de un objetivo específico y no pretende un efecto
posterior.
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OPERACIONES Y ESTRATEGIA NAVAL
2.- OBJETIVOS PARA MATERIALIZAR LA OFENSIVA Y DEFENSIVA EN EL MAR.
Su meta final es el control del mar y su logro está en función directa de los
tres objetivos estratégicos naturales: la fuerza, las comunicaciones marítimas y
la posición.
Los azares de la guerra naval conducen a veces a dirigir los esfuerzos, hacia
ciertos lugares que pertenecen al adversario, tales como: un puerto, una isla,
una colonia o un territorio cualquiera, denominados “objetivos geográficos”.
Con la intención de diferenciar la posición, de estos objetivos se los agrupa bajo
el término “territorio”.
En la guerra naval hay distintas ofensivas, o mejor dicho hay tantas clases de
ofensivas como números de combinaciones exista entre los objetivos y los
medios utilizados para alcanzarlos. En la ofensiva los buques se atacan
apelando a las operaciones navales típicas de carácter ofensivo, los objetivos
estratégicos se atacan por medio de ofensivas estratégicas o tácticas que se
traducen en operaciones de proyección.
En la defensiva táctica de los buques se realiza a través de cortinas, patrullas
y escoltas, los objetivos geográficos mediante actividades de defensa del litoral.
La definición de la actitud estratégica depende de las misiones, objetivos de
las fuerzas asignadas y de las zonas de operaciones y sus características propias.
3.- LA OFENSIVA EN EL MAR.
a.- Introducción.
La ofensiva en el mar posee cuatro objetivos donde centrar el ataque; a
cada uno de ellos le corresponde una operación específica, pero la ofensiva
contra un blanco determinado puede involucrar la intención de
comprometer a uno o más de los otros objetivos estratégicos. Por ejemplo,
una ofensiva estratégica contra la posición, por lo general, tiene incluida en
forma tácita el propósito de interrumpir las líneas de comunicaciones
adversarias y proteger las propias. Además, existe la posibilidad que
pretenda atraer a la fuerza organizada enemiga para librar la batalla.
b.- La Fuerza Organizada.
Se traduce en operaciones de conquista del control del mar, mediante el
bloqueo militar y la batalla. El primero es una solución temporal y la
restante definitiva.
c.- Las Comunicaciones Marítimas .
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OPERACIONES Y ESTRATEGIA NAVAL
Representa las operaciones de ejercicio del control del mar destinadas a
destruir las comunicaciones del antagonista, mediante el ataque al tráfico
marítimo adversario, el empleo del mar con fines militares y económicos.
d.- La Posición.
Se lleva a cabo mediante una operación de proyección, consistente en
una operación o incursión anfibia, el bombardeo naval y aeronaval y una
operación de sabotaje o similar.
e.- El Territorio.
Operaciones de proyección consistente en operaciones anfibias; si se
trata de destruir instalaciones terrestres mediante ofensivas tácticas como
incursiones anfibias, bombardeos, operaciones de sabotaje, etc.
f.- Resumen de las operaciones ofensivas en el mar
1) Fuerza Organizada. Operaciones de conquista de control del mar.
2) Líneas de Comunicaciones Marítimas . Operaciones de ejercicio del
control del mar ofensivas.
3) Posición Estratégica. Operaciones de proyección contra la posición
enemiga.
4) Territorio. Operaciones de proyección contra el territorio enemigo.
4.- LA DEFENSIVA EN EL MAR.
a.- Introducción.
Debe evitar la decisión en relación al control del mar y así precaver su
destrucción; precisa desgastar la flota rival exigiéndole aproximarse, no le
es factible esperar de manera pasiva condiciones favorables sino requiere
crearlas.
b.- La Fuerza Organizada.
Se traduce en operaciones de disputa del control del mar, mediante
contraataques mayores, menores y flota en potencia.
c.- Las Comunicaciones Marítimas.
Representa las operaciones de ejercicio del control del mar destinadas a
eludir o destruir las amenazas a las comunicaciones marítimas
provenientes de la superficie, espacio aéreo y submarino.
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OPERACIONES Y ESTRATEGIA NAVAL
d.- La Posición Estratégica y Territorio .
Se lleva a cabo mediante la defensa del litoral que comprende la defensa
contra la invasión y la defensa de costas.
e.- Resumen de las operaciones defensivas en la mar
1) Fuerza Organizada. No se defiende, está obligada a atacar; se realiza
por operaciones de disputa del control del mar.
2) Línea de Comunicaciones Marítimas .
control del mar defensivas.
Operaciones de ejercicio de
3) Posición Estratégica. Operaciones relativas a la defensa del litoral.
4) Territorio. Operaciones relativas a la defensa del territorio.
5.- LA OFENSIVA Y LA DEFENSIVA EN EL MAR EN CONJUNTA.
El mando naval para abordar la conducción de la guerra tiene como única
alternativa la maniobra cuya luz orientadora reside en el control del mar. Al
emprender cualquier operación se necesita tener cuidado de la posible
intervención de la fuerza organizada contraria.
La conducción de la guerra en el mar es un problema de objetivos múltiples;
los movimientos de las fuerzas siempre tienen que obedecer a la obtención de
una meta específica y justificada. Se hace imprescindible una maniobra
estratégica para articular de manera concurrente y armónica los esfuerzos de
todos los órganos de maniobra.
Los mandos subordinados tienen que gozar de una amplia libertad de acción
para desplegar iniciativas avalados por una sola doctrina institucional.
a.- Definición de la actitud estratégica en el mar .
Se requiere establecer la actitud estratégica de un mando, definir la
postura a sostener frente a los objetivos afectados, es decir a cuales de ellos
se pretende atacar o defender. El elemento de mayor gravitación para
determinar la actitud estratégica es la batalla y la resolución de buscar o
eludir la decisión en ella.
II
OPERACIONES TENDIENTES A LA CONQUISTA DEL CONTROL DEL MAR
1.- INTRODUCCIÓN.
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OPERACIONES Y ESTRATEGIA NAVAL
En la conducción de la guerra naval todas las operaciones se relacionan con
dos grandes clases de Objetos, obtener o disputar el dominio del mar y ejercer el
control sobre las comunicaciones de que disponemos. Raras veces podemos
asegurar categóricamente que una operación de guerra tenga un solo objeto
claramente definido.
La fuerza organizada es la responsable de la conquista del control del mar,
mientras las otras fuerzas bajo su amparo lo ejercen. La conquista demanda la
concentración de las fuerzas, en tanto el ejercicio exige su dispersión.
a.- Objeto y Objetivo.
El Objeto consiste en lograr el dominio en forma manifiesta. El Objetivo
está constituida por la fuerza organizada enemiga. Estas operaciones son
atributos del más fuerte, pues buscan la batalla decisiva o la llevan implícita.
Las operaciones de conquista materializan una actitud estratégica ofensiva
en relación a la fuerza organizada adversaria.
b.- Requisitos de la Ofensiva.
1) Mando capaz. Al más fuerte no le basta tener espíritu ofensivo, precisa
apelar a su inteligencia y capacidad creativa para forzar al contrincante
al campo de la decisión.
2) Objetivo bien elegido. Es absurdo avanzar sin un propósito definido,
sin un objetivo concreto. Si el enemigo rehuye el contacto, se debe
amenazar algún blanco para obligarlo a intervenir en su defensa.
3) Medios adecuados. Quien desee practicar la ofensiva deberá poseer,
ante todo los medios necesarios en cantidad y calidad.
4) La Oportunidad. Para quien está decidido a entablar el combate no
existen condiciones favorables, necesita crearlas.
Los choques
corresponden a actos de consentimiento mutuo de ambos rivales.
2.- MÉTODOS.
Se dispone de dos métodos: El Bloqueo Militar que busca neutralizar la
fuerza organizada contraria manteniéndola recluida en un área restringida; es
de efecto transitorio. La Batalla que tiene por meta la destrucción de la flota
enemiga, en consecuencia pretende una solución definitiva.
a.- Bloqueo Militar.
1) Aspectos a considerar. Las nuevas armas incorporadas alteran solo los
procedimientos sin afectar su fondo. Consiste en impedir la salida de la
fuerza organizada enemiga de un espacio determinado o evitar su
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OPERACIONES Y ESTRATEGIA NAVAL
aproximación a un área específica, destruyéndola si intenta hacerlo.
Hay que apreciar diversos factores y condiciones para evaluar su
efectividad:
a) Situación Estratégica. Determinar si ella exige la neutralización de
b)
c)
d)
e)
f)
la fuerza organizada enemiga.
Factor geográfico. Tener presente la reacción de la tierra sobre el
mar y la forma en que este factor puede influenciar.
Tiempo. Definir el período.
Medios. Se necesita superioridad en calidad y cantidad.
Política internacional. Posibles interferencias con las actividades
marítimas de los neutrales, evitar roces innecesarios.
Iniciativa. El bloqueado siempre tiene la iniciativa de movimiento.
2) Clasificación del Bloqueo militar.
a) Bloqueo Estrecho.
También recibe el nombre de “Cerrado” o
“Táctico”, pretende impedir el zarpe de la flota enemiga desde el
área donde se encuentra encerrada. Constituye un método
indirecto de conquista del control del mar, es una operación
ofensiva y temporal, aunque su objeto es en general negativo. Nos
vemos obligados a mantener la defensiva sin gozar de ninguna de
sus ventajas materiales, queda la ventaja moral.
Exhibe dos inconvenientes:


Produce un excesivo desgaste a las fuerzas bloqueadoras.
Las fuerzas están expuestas a enormes riesgos ante la reacción
de la tierra sobre el mar.
b) Bloqueo a Distancia. Se denomina “Abierto” o “Estratégico”. La
fuerza lo realiza desplegada y vigilante desde un lugar distante de la
base enemiga. Tan pronto la flota adversaria abandona la
protección de sus costas o ingresa a un área determinada se le
intercepta para destruirla. Este proceso tiende la conquista del
control del mar en modo directo. Facilita la amplitud de los
movimientos del antagonista con la intención de provocar el
encuentro decisivo.
Presenta las siguientes ventajas:




Desgaste. Puede permanecer fondeada preparándose para la
guerra.
Seguridad. En la posición.
Información. Medios de exploración y vigilancia.
Debilidades momentáneas. Demanda el cumplimiento de dos
requisitos básicos:
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-
OPERACIONES Y ESTRATEGIA NAVAL
De carácter estratégico. El bloqueador debe mantenerse
siempre preparado y listo para enfrentar la batalla.
De carácter geográfico. La ubicación del bloqueador,
jugando con sus factores de tiempo y espacio permite su
interceptación.
Presenta ciertas deficiencias:


No proporciona una seguridad completa.
Protege a los objetivos estratégicos solo contra la acción de la
flota de batalla contraria.
En la actualidad al bloqueo se lo conoce como “Control al zarpe” y
las operaciones probablemente dependerán en gran parte de los
submarinos y las minas. El control en el área de confluencia es
similar al bloqueo a distancia, aún cuando siendo mucho más
alejado del territorio deja al adversario con bastante más libertad
de operación. Constituye una operación de conquista de control del
mar consistente en la neutralización del enemigo encerrándolo en
sus bases. Tiene dos efectos:


Asegurar la inmunidad del territorio y comunicaciones propias
de la amenaza.
Tener la certeza de su ubicación.
c) El Bloqueo económico y su relación con la conquista del control del mar.
Participan solo las fuerzas navales principales del adversario.
Constituye una actividad específica del ejercicio del control del mar. Su
Objeto consiste en interrumpir el tráfico comercial del enemigo. Sus
Objetivos son los buques mercantes rivales y neutrales que navegan
hacia o desde sus puertos. Su carácter, con nitidez es económico. El
bloqueo económico constituye un apremio intolerable ya que busca
cortar el tráfico enemigo, o negarle abastecimientos esenciales.
b.- La Batalla Naval.
Constituye un acto bélico de consentimiento mutuo. El choque se
produce recién cuando uno necesita, para vivir, algo que el otro no puede
dar para no morir.
Es atributo exclusivo del más fuerte; el goza del privilegio de buscarla
cuando crea conveniente y necesario. Tiene relación directa con la fuerza
organizada. En el mar nunca se arriesga más al concentrar las fuerzas para
la batalla, al contrario se arriesga menos.
La batalla se libra con el objeto de conquistar el control del mar para
atacar o defender líneas de comunicaciones, la posición o el territorio.
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OPERACIONES Y ESTRATEGIA NAVAL
1) Apremio. Intenta forzar o presionar, actúa de manera directa, pretende
coartar la libertad de acción del enemigo imponiéndole una resolución
predeterminada. Tiende a colocar al adversario ante un dilema:
concurrir al encuentro decisivo o entregar la meta amagada sin oponer
resistencia. Tratará de crear al enemigo una situación intolerable que
lo conduzca a arriesgar su flota bajo la presión del gobierno y de la
opinión pública de su propio país.
2) Incentivo. Busca atraer o seducir a un enemigo al campo de la decisión.
Es más indirecto y sutil, pretende ofuscar al enemigo mediante un
irresistible foco de atracción, falso o real. En apariencia no coarta la
libertad de acción del adversario, él es quien corre tras la presunta
recompensa, supone contar con la iniciativa en todas sus expresiones.
Requiere ostentar una manifiesta credibilidad, caso contrario no surte
el efecto en el adversario; además de su conexión con la maniobra,
integra la ofensiva pseudo geográfica.
3.- DIFERENCIAS ENTRE BATALLA TERRESTRE Y NAVAL .
a.- Tiempo.
La batalla naval es relativamente breve, hace poco factible el empleo de
la reserva estratégica. Por lo contrario, las batallas terrestres se prolongan.
b.- Espacio.
El choque puede realizarse en aguas del más fuerte, del más débil o de
los neutrales. Por la extraordinaria movilidad hace que el lugar donde se
realiza el encuentro esté muy lejos del puerto del cual se inician los
primeros desplazamientos.
c.- Repercusiones Estratégicas.
La batalla terrestre tiene efectos inmediatos y tangibles. En el mar sus
derivaciones se producen en un relativo mayor plazo.
d.- Medios.
Están constituidos por la unidades navales, caracterizadas por su alto
costo, largo tiempo de construcción y tecnología de punta. Cobra una
importancia crucial la calidad y oportunidad de la primera salva. Imposible
la reposición de las unidades navales en el transcurso de un conflicto. Las
tripulaciones están integradas por personal de alta especialización técnica,
el entrenamiento es el factor primordial y su reemplazo no puede ser
efectuado en corto tiempo.
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e.- Consentimiento mutuo.
Quien ansía la batalla necesita provocarla recurriendo a incentivos y
apremios. En tierra el más débil entrega tiempo y espacio para eludir la
decisión, cuenta con la protección de la geografía y por lógica, no desea
cooperar a su destrucción eludiendo el encuentro.
4.- OFENSIVAS PARA IMPONER LA BATALLA.
a.- Ofensiva de Movimiento.
Consiste en una caza en persecución, para su aplicación se hace
necesario conocer la ubicación e intención de movimiento del enemigo. Las
aeronaves y los submarinos desempeñan un papel importante.
1) Requerimiento y consideraciones .
Demanda un flujo permanente y
confiable de informaciones sobre la fuerza adversaria. Encierra el grave
peligro de dejar al desamparo el dispositivo propio, pudiendo ser
explotada por el enemigo para atacar dichos objetivos.
2) Las Iniciativas.
a) Iniciativa de movimiento. La detenta el perseguidor.
b) Iniciativa estratégica. Pertenece al perseguidor.
c) Iniciativa de las operaciones. El perseguido puede eludir o librar la
batalla y determinar el lugar donde realizar el choque.
b.- Ofensiva de base geográfica.
Consiste en la caza en acecho, explotando la geografía ya que la flota
atacante espera lista para el combate en el área donde la fuerza objetivo
está obligada a transitar. Posee una de las características inherentes a la
defensiva: la espera. Su ubicación y disposición obedece a una resolución
deliberada, elude la batalla.
1) Requerimiento y consideraciones .
Aconsejable llevarla a cabo
cuando existe la certeza sobre el paso del enemigo por un área bien
determinada o se carece de informaciones fidedignas sobre la ubicación
del adversario. Al realizar una ofensiva de movimiento se corren
grandes riesgos debido a las probables consecuencias acarreadas por
una eventual evasión del enemigo. En resumen es el enemigo mismo
quien se crea una zona de atracción.
Como ventajas, conoce y puede preparar el escenario para el
encuentro, despliega con oportunidad sus medios y practica con
antelación el choque.
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2) Las Iniciativas.
a) Iniciativa de movimiento. La detenta el atacante.
b) Iniciativa estratégica. Disfruta el atacante.
c) Iniciativa de las operaciones. El mismo.
c.- Ofensiva Pseudo Geográfica.
Maniobra poco atractiva y subordinada, quien la emplea se limita a la
espera de los eventos. El polo de atracción no puede ser solamente un
punto o una región geográfica, sino también un objeto en movimiento.
Obligarlo a realizar ciertos movimientos, con el fin de presentarlo a nuestro
propio ataque en las condiciones que estimamos como más conveniente
para nosotros. Se apoya en apariencia, sobre la geografía. Recurriendo a
los “apremios” e “incentivos” crea un polo de atracción al adversario hacia
un área determinada. Pretende canalizar los movimientos de la fuerza
objetivo, mediante una creativa e imaginativa maniobra estratégica en el
mar.
1) Requerimiento y consideraciones .
reacio a entablar la batalla.
Es ejecutada ante un enemigo
2) Las Iniciativas.
a) Iniciativa de movimiento. Pertenece al atacante.
b) Iniciativa estratégica. La tiene el atacante.
c) Iniciativa de las operaciones. La detenta el atacante.
5.- REFLEXIONES SOBRE LA OFENSIVA EN EL MAR.
a.- Ofensivas para imponer la batalla.
Tienen por Objeto la conquista del control del mar provocando la
batalla. El Objetivo la fuerza organizada adversaria y son realizadas por la
flota propia. Otro aspecto reside en la flexibilidad en utilizar o cambiar los
procedimientos en conjunto con los apremios e incentivos.
b.- La Ofensiva resolutiva.
Participa la fuerza organizada con la intención de destruir a la flota
enemiga. La lucha decisiva se entabla para dominar la superficie del mar.
En estrategia marítima no existen guerras de superficie, submarina y aérea
independientes, sino una sola global que desemboca en el control de la
superficie oceánica.
III OPERACIONES TENDIENTES A LA DISPUTA DEL CONTROL DEL MAR
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1.- INTRODUCCIÓN.
El objeto de la guerra naval es conseguir el control del mar, implica en
realidad la proposición de que el dominio se encuentra normalmente en
disputa. La disputa del control del mar abarca la esencia de la estrategia
marítima.
a.- Objeto y Objetivo.
La dualidad del control del mar se manifiesta por que ambos rivales lo
disfrutan en proporción directa al poder de sus flotas. El obstáculo
principal para ambos contendores a fin de obtener un control del mar
reside en la fuerza organizada oponente.
Tiene por Objeto mejorar el grado de control o disputa detentado, para
lograr las condiciones necesarias para enfrentar la batalla. El Objetivo esta
constituido por la fuerza organizada enemiga.
b.- Alcance de las Operaciones en disputa .
Reflejan una actitud estratégica defensiva del más débil, el cual se
encuentra imposibilitado en buscar o aceptar el choque decisivo, ya que
significa su segura destrucción. Al eludir la batalla evita la conquista del
control del mar por parte de su adversario. Necesita reaccionar con
frecuentes contraataques.
En la disputa no solo participan las fuerzas organizadas como en las
operaciones de conquista, sino todos los medios y armas disponibles de una
armada. No es admisible caer en la pasividad, requiere desplegar iniciativa
y recurrir a la maniobra para ganar la libertad de acción suficiente a fin de
alcanzar el único medio que asegura el éxito: desgastar al oponente y así
quedar en condiciones para conquistar el control del mar.
La disputa es posible clasificarla en calidad de una estrategia de
desgaste; su única alternativa consiste en acciones ofensivas orientadas a
deteriorar la potencia de combate de la escuadra enemiga.
2.- GRADOS DE DISPUTA DEL CONTROL DEL MAR.
Se han designado tres grados de disputa atendiendo a la comparación
relativa de las fuerzas.
a.- Fuerzas iguales o equilibradas .
Se esmeran en ejecutar tareas de defensa y ataque de las
comunicaciones marítimas, posición estratégica y territorio. Cuando una de
ellas interfiere la misión de la otra, se produce el encuentro. Toma el
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nombre de caso medio. Existe la disputa entre fuerzas iguales o casi iguales,
cuando no se retrocede o cuando se podría no retroceder ante la batalla
decisiva.
b.- Fuerzas desiguales o completamente desequilibradas .
El más débil no tiene esperanza alguna de revertir la situación. Ocurre
cuando el afectado sufre un contundente revés. Los perjuicios deben tener
valor político, estratégico y económico. Carece de mayor sentido desgastar
el poder naval del adversario. Las acciones a realizar se centran en la
“Guerra de Corso” y ofensivas tácticas contra el territorio rival. A pesar de
ser conducida con energía no consigue dar al bando que la emprende, en la
medida necesaria, el uso de las comunicaciones de superficie y no logra
privar de él al adversario.
c.- Fuerzas casi iguales o casi equilibradas .
El más débil aspira con posibilidades de éxito, equilibrar las fuerzas
para luego pretender la conquista del control del mar, para alterar la
situación necesita accionar con imaginación e iniciativa. Dispone de las
siguientes alternativas:
1) Políticas. Concertar alianzas orientadas a conseguir la paridad o
superioridad de las fuerzas.
2) Estratégicas. Desgastar a la flota enemiga a través de contraataques.
3) Dividir la fuerza organizada recurriendo a la maniobra estratégica.
4) Explotar los errores del enemigo.
3.- PROCEDIMIENTOS PARA MATERIALIZAR LA DISPUTA.
Existen tres procedimientos, los cuales se diferencian según las fuerzas
participantes y la actividad realizada por la flota del más débil.
a.- Contraataque Mayor.
Es la acción ofensiva realizada por la flota más débil contra una parte de
la fuerza organizada antagonista. Requiere dividirla por medio de la
maniobra o aprovechar una circunstancia propicia fortuita. Necesita
recurrir a los apremios e incentivos combinándolos. Como restricción
demanda no provocar la batalla con la escuadra rival concentrada.
b.- Contraataque Menor.
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Es la acción ofensiva realizada por los otros medios no integrantes de la
fuerza organizada contra la flota enemiga. Precisan de la sorpresa; por lo
general se asocian a medios ligeros o fuerzas especiales; estas ofensivas
dañan o averían a los blancos sin lograr su completa destrucción. Los
mayores efectos se alcanzan al introducir ingenios novedosos tendientes a
lograr una contundente sorpresa táctica. En ocasiones obtienen resonantes
éxitos tácticos pero sin trascender al campo estratégico. La suma de éxitos
tácticos se transforman en un éxito estratégico.
c.- Flota en Potencia.
Es la parte de la disputa del control del mar, para unos activa y para
otros pasiva. Más vale una flota inactiva en el puerto que una flota hundida
por haber querido mostrarse activa.
El mar debe ser despejado de todas las naves o de todas las escuadras
que se encuentran en el antes de hacer dar a la guerra naval un paso
adelante como el ataque al territorio. Es un error, llegar a suponer que la
sola existencia de una flota basta para producir efectos, aún en caso de
mantenerse casi completamente inactiva.
Crea una acción peligrosa, jamás influyó en el espíritu de quienes
estuvieron decididos a actuar prescindiendo de la flota en potencia, que
tuvieron los medios para hacerlo y supieron aprovecharlos. Su efecto se
produce por el mero hecho de existir; su influencia depende de la actividad
desplegada por la flota en cuestión, elude la batalla decisiva.
1) Consideraciones sobre la Flota en potencia .
condicionan la efectividad son:
a)
b)
c)
d)
Los factores que
Posición estratégica.
Poder relativo de las flotas rivales.
Actividad desplegada.
Situación estratégica imperante.
La actitud de la flota en potencia obliga al adversario a distraer
una cantidad apreciable de sus fuerzas. Una flota en potencia pasiva se
rebaja a una defensiva táctica, ya que la fuerza se limita a protegerse a
sí misma. Es un inconveniente ya que su pasividad, corroe la voluntad
estratégica y el espíritu ofensivo de los mandos y repercute de modo
negativo en la moral de las dotaciones.
Una flota en potencia inmóvil, por muchas o importantes
repercusiones colaterales conseguidas no influye en la decisión en el
mar. Pierde la esperanza de intervenir decisivamente en el destino de
la guerra.
Constituye un procedimiento inaceptable que debe
rechazarse de plano en calidad de recurso permanente. Ella constituye
la negación de la guerra en el mar.
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4.- LA DEFENSIVA ESTRATÉGICA EN EL MAR.
En el mar existe una enorme dificultad en establecer una actitud estratégica
general y única. La defensiva elude la decisión en espera de circunstancias
favorables para pasar a la ofensiva, tiene dos elementos inseparables: la espera
y la reacción. La disputa del control del mar no es sinónimo de la defensiva
estratégica.
a.- Orientación de los esfuerzos en la defensiva .
Rehúsa la batalla decisiva, no provocarla, pero a la vez intenta producir
el máximo de daño al enemigo. Exige mayor creatividad e imaginación. La
contraofensiva se ejecutará contra los grupos atacables de la fuerza
organizada enemiga, será conveniente todo aquello que cause daño o un
perjuicio cualquiera al adversario.
La acción contra las comunicaciones y las costas podrá producir
resultados apreciables, esta acción tendrá por efecto inducir al enemigo a
protegerlo todo y a dispersar sus medios. Todo aquello que pueda debilitar
sus medios será el objetivo supremo; requiere precaver la excesiva división.
Así mismo la selección de los objetivos ostenta una importancia crucial para
no desperdiciar esfuerzos.
b.- Algunos factores a considerar en la defensiva .
No se hace necesario observar la regla terrestre de contar con una
superioridad de tres a uno para realizar la ofensiva. El defensor tiene un
Objetivo único y excluyente: la fuerza adversaria. Le conviene producir el
encuentro lo más próximo a la posición, la cual tiene una gran relevancia en
la defensiva. La defensa de costas constituye un pilar de la defensiva. Lo
único común de la defensa terrestre y marítima es la búsqueda del
aplazamiento de la decisión.
IV OPERACIONES TENDIENTES AL EJERCICIO DEL CONTROL DEL MAR
1.- INTRODUCCIÓN.
Son las actividades en el mar de mayor alcance; consisten en las acciones
conexas al empleo del océano en la trasferencia de carga desde un puerto de
origen a uno de destino durante un conflicto. Comprenden todas aquellas
operaciones que no son requeridas para la conquista del mismo. Ejercemos el
control del mar con todas aquellas operaciones que no están dirigidas
directamente contra la flota adversaria, sino que van encaminadas a fiscalizar
las rutas marítimas en provecho propio y daño del contrario. Su función más
importante es realizar el transporte a través del mar en tiempo de conflicto; la
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transferencia de la carga en particular la militar, reviste una importancia tal que
algunas armadas la denominan "transporte estratégico".
2.- OBJETO, OBJETIVO Y CONSIDERACIONES ESPECIALES.
El Objeto consiste en transportar la carga a través de los océanos, para
asegurar su arribo requiere proteger a los cargueros mientras el adversario
intenta capturarlos y destruirlos. El Objetivo son los buques transportes, los
cuales materializan las líneas de comunicaciones marítimas.
El Ejercicio lo realiza indistintamente el más fuerte o el más débil, por tal
causa se dice que el control del mar coexiste con la disputa o conquista, según
sea el caso. En las operaciones de ejercicio intervienen, en forma directa o
indirecta los principales exponentes del poderío marítimo nacional. Es posible
distinguir tres tipos de actividades diferentes:
a.- El Transporte de Carga.
Uno de los pilares de la guerra en el mar descansa en la factibilidad de
apoderarse o destruir la carga destinada al adversario o los bienes que este
pretende vender en ultramar. Posee valor económico y militar, en la guerra
total esta división ostenta solo un significado teórico sin mayor
trascendencia. Esta captura o destrucción es la penalidad que imponen al
enemigo por intentar utilizar comunicaciones sobre las cuales no ejerce su
control.
Los buques comerciales y navales llevan a la realidad las líneas de
comunicaciones marítimas, forman el llamado transporte estratégico el cual
se inicia por lo general antes del rompimiento de las hostilidades. Las
operaciones de defensa y ataque de las comunicaciones comienzan el
primer día de la guerra y cesan el último día. Los terminales marítimos son
parte integral de las comunicaciones marítimas.
b.- Ataque a las Comunicaciones Marítimas.
1) Guerra del Corso. Forma típica de ataque a las comunicaciones
marítimas mediante el empleo de unidades navales de superficie,
submarinas y aéreas operando de manera independiente o en pequeñas
agrupaciones. Hasta 1.856 los estados otorgaban patentes de corso a
los particulares, el valor de las presas se repartía entre el estado, el
armador y la tripulación; actualmente, las patentes de corso no existen,
y las unidades encargadas del ataque a las comunicaciones deben ser
buques de guerra o barcos mercantes armados.
a) Efecto de los corsarios.
El
efecto
psicológico
ha
sido
desproporcionado con los medios empleados y los resultados
obtenidos. La consecuencia estratégica más grave de la acción
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corsaria reside en la dispersión de los medios del afectado con el
debilitamiento de la flota de combate. La acción dislocadora es
mayor al comienzo de las hostilidades y debe iniciarse con el mayor
vigor, pero hasta la fecha no ha obtenido resultados decisivos. El
corsario no pretende obtener el control del mar sino negar su uso,
la meta es obstaculizar el tráfico enemigo para impedirle que goce
de los indiscutibles beneficios del mar. No busca la decisión y
además es una actividad eventual.
b) Orientación de las operaciones de corso.
Del estudio de las
comunicaciones marítimas del adversario se desprenden sus zonas
de confluencia y focales. Estas operaciones para que revistan
significado trascendente deben estar integradas a la maniobra
estratégica de la Armada.
2) Rol de la Fuerza Organizada. Constituye una tarea preferente de los
llamados medios secundarios. La actuación de la fuerza organizada
depende de diversos factores: la posición estratégica, la potencia
relativa respecto a la flota adversaria y la situación estratégica
imperante.
Una buena posición es la llave imprescindible para implantar un
riguroso bloqueo económico avalado por la flota de combate, para lo
cual se requiere ser más fuerte. Con fuerzas iguales o casi iguales y una
posición no tan favorable, ambos pueden atacar las comunicaciones
contrarias ya sea por exigencia como parte de una maniobra o para
crear un apremio. Con fuerzas completamente desequilibradas no
importando la calidad de la posición el inferior está obligado a realizar
la guerra del corso incluyendo en esta a su flota principal.
3) Corsarios de superficie. Existen limitaciones para los corsarios como la
obligación de conservar su capacidad operativa, lejanía de sus bases
para satisfacer los requerimientos de reparaciones; por lo que están
obligados a eludir los encuentros con fuerzas navales superiores. Su
principal arma reside en la sorpresa. Al atacar tiene la obligación de
identificarse bajo su propia bandera. Su presencia siempre repercute
con intensidad en el despliegue del poder naval.
Los buques mercantes artillados, con relativa alta velocidad y de
gran autonomía, deben ser de apariencia corriente a fin de permitir su
enmascaramiento. El problema radica en el costo efectividad, la
tecnología presenta también una cara muy negativa para los corsarios
de superficie.
4) El Submarino. Uno de los instrumentos ofensivos más eficaces del
poder naval. Además de interdictar las comunicaciones marítimas se le
encomendó tareas de ataque a la flota adversaria, minaje ofensivo,
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desembarco de comandos y saboteadores. Puede operar de modo
independiente durante un largo tiempo en mares dominados por el
enemigo, pero como inconveniente está la reducida velocidad de
desplazamiento, lo cual dificulta su despliegue, carece de capacidad
para reaccionar de modo activo ante la amenaza aérea, tiene limitación
en el fluido enlace con los mandos y está incapacitado para ejercer el
control del mar de manera integral.
a) Submarino como corsario. Es imposible asimilar al submarino con
un corsario de superficie por las siguientes razones:




Al salir a superficie se evidencia.
Es una mala plataforma en la superficie y muy vulnerable.
No tiene capacidad para rescatar a las dotaciones naufragas.
Sumergido le es dificultoso reconocer o identificar los blancos.
Por este motivo se lo establece en zonas de guerra que deben
situarse en las proximidades del litoral enemigo. Aún cuando el
derecho internacional no reconoce la zona de guerra, la sanciona la
costumbre. Dentro de ella se ubican las áreas de patrulla de los
submarinos dedicados a destruir el tráfico comercial.
Un grave error consiste en formar barreras inmóviles cayendo en
el ineficaz cordón lineal. La rigidez de los dispositivos submarinos
conduce a una nociva pasividad, limitarse a patrullar una zona
marítima restringida, en espera de un objetivo. La acción de los
submarinos contra el comercio o el poder naval enemigo forma
parte indivisible de la guerra en el mar. No es aceptable llevarla a
cabo en forma independiente sino de modo coordinado y
concurrente con los otros órganos de maniobra.
5) Las Aeronaves. El avión se mueve en un océano sin conocer barreras
que no sean más que el clima y la distancia. En los espacios marítimos
aún cuando la aeronave transita por el aire su mayor influencia gravita
en la superficie, presenta una reducida persistencia sobre el área
objetivo. El avión no conquista ni ocupa, su acción tiene un carácter
esencialmente transitorio.
En el océano la aeronave no tiene
persistencia, por tanto movilidad estratégica. Su efecto sobre el mar
varía en forma inversa a la distancia de las costas, sufre de diversos
inconvenientes por causa de la meteorología, visibilidad y accidentes
geográficos.
Siempre que el arma basada en tierra o abordo tenga por rol
fundamental influir en el control del mar debe ser considerada como un
instrumento orgánico del poder naval. La aviación cumple múltiples
tareas:
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



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Ataque a las comunicaciones marítimas.
Ataque a los terminales marítimos.
Ataque a los astilleros.
Exploración Aeromarítima.
La acción aérea para ser fructífera requiere ser ejercida contra las
zonas focales o de confluencia adversarias. La aeronave constituye la
mejor plataforma de observación disponible.
La información
adelantada es básica para apoyar a los mandos navales en su toma de
decisiones. Los mandos corsarios los destinan a ubicar el tráfico
marítimo enemigo. La acción de los corsarios de superficie y
submarinos se facilita de manera extraordinaria por medio de una
eficaz exploración aeromarítima.
c.- Defensa de las Comunicaciones Marítimas.
Se materializa mediante dos procedimientos:
1) Protección Directa. Pretende neutralizar la acción de los corsarios de
superficie, submarinos y aeronaves. Tiene carácter puntual y presenta
dos versiones la ofensiva y la defensiva. Es el conjunto de medidas
ofensivas y defensivas tendientes a dar seguridad a las comunicaciones
marítimas contra la amenaza de los llamados medios secundarios; la
protección la brinda también medios secundarios.
a) Protección Directa Defensiva.
(1) Armamento de las naves mercantes. Utilizado para el rechazo
del ataque artillero de submarinos en superficie o para
oponerse a los corsarios de superficie, correspondía su
armamento a excedentes de los arsenales o material desechado
por las unidades navales.
(2) Rutas Patrulladas. La característica principal radica en la
diseminación y dispersión; el cordón lineal y la protección
deficiente acompañada de inmovilización excluye la iniciativa
de las operaciones, produce inconvenientes ya que el
escalonamiento en el mar de los buques sobre una línea
constituye un verdadero sendero de hormigas. En general se
otorga seguridad a un área geográfica en vez de los buques
mercantes.
(3) Rutas Evasivas. Utilizado por el tráfico marítimo, su eficacia es
relativa.
Necesita otras medidas tales como patrullaje
aeromarítimo, defensa de puertos, grupos caza corsarios.
Requiere de una gran separación de los barcos que navegan
entre puertos sin protección y que estos posean alta velocidad.
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El peligro radica en sacrificar algunos barcos con el fin de que
la mayoría lleguen a su destino.
(4) Convoyes.
Una o más naves mercantes navegando bajo la
protección de uno o más buques de guerra. Dos condiciones
deben ser satisfechas:
 Deben estar operando en grupos organizados.
 Tienen que estar provistos con una escolta.
El Objeto de la escolta reside en la seguridad del convoy y el
Objetivo lo conforman los buques mercantes. Su misión es por
esencia defensiva, permite a la fuerza naval disponible se halle
concentrada; es la síntesis de la economía de fuerza.
Ventajas:
 Reduce el riesgo de pérdidas.
 Concentra los escoltas disponibles.
 Permite cambios de ruta.
 Disminuye las probabilidades de encuentro con el enemigo.
Desventajas:
 Congestión en los terminales.
 Retardos por averías de sus componentes.
 No es posible dar satisfacción continua
requerimientos.
 Se desplaza a la velocidad del más lento.
a
los
b) Protección Directa Ofensiva.
(1) Patrulla. Se establece en un área geográfica bien definida y
determinada, donde se tiene por certeza el tránsito de
corsarios, listos para interceptar al enemigo y entrar en
combate. El efecto deseado es la destrucción del incursor o
hacerlo desistir de su correría. La patrulla para ser efectiva
precisa de excelente inteligencia o de un flujo continuo de
corsarios. La fuerza patrullera debe ser superior al presunto
enemigo a interceptar.
(2) Caza de Corsarios. Al evidenciarse un corsario se forma una
agrupación a fin de cazarlo. Necesita estar bien ubicada y tener
la velocidad suficiente para interceptar el objetivo. Requiere
gozar de una superioridad adecuada sobre el adversario. El
grupo Hunter Killer, se acercaba al convoy reforzando su
escolta.
(3) Ataque a base de corsarios. Las aeronaves constituyen la mejor
arma para llevar a cabo esta tarea. Existen importantes
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operaciones de protección orientadas a neutralizar las bases de
submarinos y corsarios de superficie.
2) Protección Indirecta. Consiste en la seguridad otorgada por la fuerza
organizada al sistema general de comunicaciones marítimas y al litoral
contra la amenaza de la flota enemiga. Tiene carácter permanente y
exige que la fuerza principal esté siempre lista a afrontar la batalla. La
flota requiere permanecer entre la fuerza organizada adversaria y el
dispositivo defendido. Se inicia de ser factible, el primer día de la
guerra y cesa cuando alguno de los beligerantes conquista en forma
incontrastable el dominio del mar.
Ejerce efectos estratégicos ya que el resguardo comprende el
escenario marítimo completo, mientras que la protección directa
efectos tácticos. Cualquier fuerza naval que esté colocada en una
situación favorable, puede dar una protección general al comercio
marítimo contra todas las fuerzas enemigos que le sean inferiores.
No significa pasividad, mientras espera puede realizar diversas
tareas siempre que permanezca interpuesta y vigilante ante su
enemigo. Su debilidad resulta de la imperfección y relatividad del
dominio del mar, de las posibilidades del enemigo de deslizarse por
entre los claros.
3) Cobertura. Es la seguridad que brinda la fuerza organizada a un
objetivo particular, en tránsito o estacionado. Su Objeto es la seguridad
el convoy o fuerza protegida y el Objetivo los buques bajo su resguardo.
Muchos tratadistas la relacionan con los asaltos anfibios. La flota
de cobertura tiene que ser dejada en libertad para acciones navales
independientes. No es exclusiva de fuerzas de tarea anfibia, se le
adopta también cuando hay convoyes de gran relevancia estratégica
que resguardar. No exige un dispositivo rígido, tiene muy restringida su
libertad de acción.
Su misión le demanda proteger el convoy y reaccionar mientras la
flota enemiga constituye un peligro para el objetivo protegido. La
decisión sobre la cobertura de ordinario recae en la dirección suprema
de la guerra. Lo más importante, lleva implícita el designio de afrontar
la batalla decisiva.
Hay dos puntos en los cuales puede situarse la Escuadra de
cobertura:
a) En la proximidad inmediata a la base enemiga. Precisa considerar
los factores atenientes al bloqueo.
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OPERACIONES Y ESTRATEGIA NAVAL
b) En la de los propios transportes.
Conviene tener en cuenta el
alcance de las armas y el espacio de maniobra.
3.- LA GUERRA DE MINAS.
Su meta reside en dificultar o impedir el paso de barcos adversarios por una
determinada zona con propósitos ofensivos o defensivos. Respecto a su
utilización se debe tener en cuenta los siguientes factores básicos: la finalidad, el
marco geográfico, la profundidad del área, las corrientes y mareas del sector, los
presuntos blancos a destruir.
Las plataformas minadoras corresponden a buques de superficie, submarinos
o aeronaves. El bando que posee el dominio de la superficie del mar es pues, el
que conduce la guerra de minas con mayor eficacia. Las minas generalmente se
clasifican en dos grupos: de fondo y orinque.
a.- Minaje defensivo.
Tiene por objetivo impedir o dificultar el tránsito de buques enemigos
por un área determinada y bajo control. Para causar real efecto tiene que
estar bajo protección evitando ser barrido. Los campos defensivos se
siembran con unidades de superficie.
b.- Minaje ofensivo.
Contribuye a complementar el bloqueo económico y militar.
submarinos y aeronaves son los minadores preferentes.
V
Los
OPERACIONES DE PROYECCION Y LA DEFENSA DEL LITORAL
1.- ALCANCE DE LAS OPERACIONES DE PROYECCIÓN.
Es el impacto de las fuerzas navales sobre las terrestres, la acción del poder
militar de una nación sobre el territorio adversario por medio del poder naval
en sus diferentes manifestaciones. Abarcan un rango desde invasiones
substanciales para conquista de territorios, en un extremo de la escala, a daños
menores por incursiones o bombardeo naval en el otro. Son operaciones
ofensivas desde el mar a tierra, siendo la principal forma de explotar el control
del mar, una vez conquistado el control del mar, la potencia marítima victoriosa
esta facultada para explotarlo con su máximo efecto. Las operaciones de
proyección, por esencia ofensivas, siempre han causado impactos morales
extraordinarios y discordantes con los daños producidos.
2.- OBJETO Y OBJETIVOS DE LA PROYECCIÓN.
Los Objetivos que interesan a las operaciones de proyección están situados
en territorio enemigo y son de carácter geográfico. Se materializan a través de:
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OPERACIONES Y ESTRATEGIA NAVAL
a.- Ofensivas Tácticas.
Mediante incursiones anfibias, bombardeos navales y acciones tácticas
aeronavales.
b.- Ofensivas Estratégicas.
Destinadas a ocupar y permanecer en un área geográfica, se llevan a
cabo mediante operaciones anfibias u operaciones costa a costa.
c.- Objeto y objetivos conexos con la guerra en el mar e interferencias .
El único factor geográfico atinente a la estrategia marítima radica en la
posición, su usufructo permite el control de las comunicaciones marítimas,
destruir o desgastar la fuerza organizada enemiga y atacar su territorio, con
el objeto de conquistar o mejorar la posición; se requiere realizar una
ofensiva estratégica.
Si el objetivo se limita a neutralizar o negar el uso de su posición al
enemigo se ejecutan ofensivas tácticas. En relación al territorio se
distinguen dos categorías:
1) El más ambicioso la obtención de una cabeza de playa u ocupar de
manera permanente un área geográfica, obliga a la realización de una
ofensiva estratégica materializada por una operación anfibia o en su
defecto, una operación costa a costa.
2) Si se reduce a la destrucción u ocasionar daños a instalaciones civiles y
fuerzas militares sin importar su magnitud, su logro se alcanza
mediante ofensivas tácticas: incursiones anfibias, sabotajes,
bombardeos navales y operaciones aeronavales tácticas.
3.- OPERACIONES ANFIBIAS.
Es en la practica el sinónimo de la ofensiva estratégica realizada por el poder
naval. La gran movilidad de las fuerzas navales sumada al poder de un ejército
embarcado atemoriza al enemigo obligándolo a desplegar tropas ante una
amenaza tan flexible y dislocante.
Las operaciones anfibias están en intima relación con el control del mar y las
operaciones tendientes a su conquista. Las armadas al conducir operaciones
anfibias en gran escala, por lo general han tratado de ganar primero un alto
grado de control del mar.
La fuerza organizada responsable sobre la seguridad de la operación anfibia
está con la iniciativa y libertad de acción coartadas con severidad. El Objeto de
la misión de cobertura, reside en la protección de los transportes de la fuerza de
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desembarco, a los cuales no tienen excusas para abandonarlos a su suerte. A la
Armada le compete por lo menos, su mando y control durante el tránsito desde
los terminales de embarque hasta la playa del asalto.
La mayor exigencia lo representa su planificación, coordinación y ejecución,
siendo la sorpresa uno de los pilares fundamentales del éxito de los asaltos
anfibios.
a.- Elementos de una Operación Anfibia.
La fuerza de tarea anfibia consta de los siguientes elementos:
1) Fuerza de Desembarco. Al avanzar por el mar hasta el área objetivo
utiliza sus aguas como línea de operaciones. Luego estas se convierten
en línea de comunicaciones orientada a alimentar el dispositivo
emplazado en la cabeza de playa.
2) Transportes. Son las unidades navales de desembarco y naves
mercantes comerciales.
3) Escolta. Además de dar protección directa a los transportes, tienen la
responsabilidad de realizar el fuego de apoyo naval. La fuerza
organizada adversaria siempre ha representado el mayor peligro para
una fuerza de tarea anfibia.
4) Fuerza de Cobertura. Cuyo Objeto es la seguridad de la fuerza anfibia,
reacciona ante ella mientras permanezca en condición de amenaza a los
transportes. Comprometen al ejército y fuerza aérea. Su gestación y
dirección corresponden a la Dirección Suprema de la guerra.
Las operaciones anfibias tienen como requisito insoslayable: gozar del
adecuado control del mar incluyendo el espacio aéreo correspondiente, ahí
radica la presencia de la fuerza de cobertura, ella avala ese control.
La confirmación de la fuerza de tarea anfibia consignada a principio de
este párrafo, no es una exigencia inflexible. La tecnología influye en forma
gravitante en las operaciones anfibias.
b.- Operación Costa a Costa.
Sus principales cometidos contribuyen al envolvimiento del flanco
enemigo expuesto al mar o salvar una relativa corta distancia de un objetivo
separado por un espacio acuático. Por lo común, primó la rapidez en
realizar la operación con el propósito de explotar la sorpresa.
Pueden ser realizadas en pequeña escala, como ayuda en el avance o
retirada utilizando al mar como medio para ubicar pequeñas fuerzas
dislocadoras detrás de la línea de vanguardia enemiga.
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c.- Incursiones Anfibias .
Son ofensivas tácticas cuyos medios empleados desembarcan, cumplen
con su cometido y luego se reembarcan siguiendo un plan preestablecido.
El Objeto es neutralizar la posición estratégica, obtener informaciones,
ejecutar diversiones y provocar daños físicos al enemigo. En esta clase de
operaciones las unidades navales y terrestres comprometidas se
encuentran bajo las acciones del enemigo; están sujetas a la amenaza de la
concurrencia de fuerzas muy superiores.
Son requisitos previos, fundamentalmente la sorpresa, también
involucra la rapidez en la ejecución; por tal motivo la inteligencia juega un
rol principal en el éxito de estas ofensivas tácticas.
d.- Demostraciones Anfibias .
Constituye una estratagema cuyo fin es engañar o disuadir a eventuales
adversarios simulando la manifiesta resolución de realizar un asalto anfibio;
se le aplica en crisis como en conflicto, su naturaleza atañe al campo
psicológico. Un aspecto fundamental radica en la credibilidad de la
demostración.
La demostración forma parte de una amplia maniobra política,
estratégica o táctica. En lo político una de sus metas corresponde a la
disuasión. En la guerra terrestre pretende divertir fuerzas desde el punto
de la decisión hacia la presunta área amenazada. En la guerra marítima
intenta crear apremios o incentivos con el objeto de hacer concurrir a la
fuerza organizada rival a un área determinada.
e.- Retiradas Anfibias o Evacuaciones.
Son operaciones de repliegues de fuerzas terrestres, por mar, desde una
costa hostil con el propósito de rescatar medios terrestres aislados por el
enemigo. Las fuerzas comprometidas se encuentran en condiciones críticas
y un tanto desarticuladas.
La rapidez y capacidad de organización constituyen requerimientos
básicos. En la evacuación se utilizan todos los medios de transporte
disponibles.
4.- BOMBARDEO NAVAL.
Se realiza mediante cañones y misiles embarcados, se caracteriza por la
precisión del tiro y la alta cadencia de fuego, pero debido a que las
santabárbaras poseen una capacidad limitada, el bombardeo por saturación
tiene un bajo rendimiento.
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Comprende dos grupos de actividades:
a.- Fuego de Apoyo Naval (FAN).
Se efectúa antes, durante y después del asalto anfibio. Las unidades
ejecutoras son del grupo de escolta con la finalidad de evitar servidumbres
de la fuerza de cobertura a fin de no coartar su libertad de acción ante una
eventual concurrencia de la flota rival. Esta actividad se justifica mientras la
fuerza de desembarco no cuente con su artillería orgánica emplazada en
tierra.
b.- Destrucción de Objetivos Terrestres .
Se lleva a cabo contra la posición o el territorio adversario. El espoteo
por la dificultad en disponer de observadores en tierra, se cumple con el
auxilio de aeronaves embarcadas.
5.-OPERACIONES AERONAVALES TÁCTICAS.
El arma aérea del poder naval se proyecta contra la posición o el territorio
enemigos en pos de los siguientes propósitos:




Neutralización de la posición estratégica.
Desgaste y destrucción de parte del potencial bélico.
Participación en operaciones terrestres mediante apoyo aéreo directo.
Oposición a esfuerzos similares del enemigo.
Participan las aeronaves navales embarcadas y las basadas en tierra. Las
operaciones aeronavales tácticas se materializan de la siguiente manera:
a.- Interdicción Profunda.
Destinada a destruir o neutralizar el potencial enemigo antes de ser
empleado; los objetivos son de carácter estratégico.
b.- Interdicción en el campo táctico .
Denominado también Apoyo Aéreo Directo, restringe la capacidad del
enemigo para trasladar abastecimientos, refuerzos y además maniobrar sus
fuerzas.
c.- Apoyo aéreo estrecho.
Es el proporcionado a las fuerzas terrestres, en base a requerimientos
de la artillería orgánica.
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d.- Operaciones aéreas contra aviones y de defensa antiaérea .
Neutralizan la capacidad aérea y antiaérea del enemigo.
6.- BOMBARDEO NUCLEAR.
Escapa del ámbito de la estrategia marítima. La planificación, designación de
blancos y ejecución incumben, con exclusividad a la dirección suprema de la
guerra.
7.- DEFENSA DEL LITORAL.
El peligro proveniente desde el mar despierta en el hombre un terror
ancestral. Con el animo de conjurarla, exige defensas visibles, repercutiendo en
el empleo del poder naval.
Se recurre al cordón defensivo en las playas y la Armada queda convertida en
una marina guardacostas. En el dominio silencioso y estrecho de una marina
para defensa de costa, no penetra ningún pensamiento estratégico.
a.- Componentes de la defensa del litoral.
A la ofensiva estratégica le opone la defensa contra la invasión, o sea
una actividad de carácter estratégico y a la ofensiva táctica responde con la
defensa de costa, o sea una actividad de carácter táctico. Tiene estrecho
contacto con el control del mar. La invasión es un apremio poderoso para el
poder naval afectado y obliga, por lo común a la concurrencia de la flota
para dar la batalla.
1) Defensa contra la invasión. Su Objeto es desbaratar la ofensiva
estratégica adversaria a través del mar. El Objetivo lo constituye la
fuerza de tarea anfibia cuyos elementos principales los forman los
transportes y la fuerza de cobertura.
Si uno de los dos elementos logra ser destruido la ofensiva se
torna imposible de realizar. Lo ideal consiste en aniquilar la fuerza de
tarea anfibia durante su tránsito al área objetivo, ya que junto con los
transportes hundidos se pierden los soldados y el material.
Existe una polémica sobre la prioridad en el ataque y destrucción
de los dos elementos básicos de una fuerza de tarea anfibia: la fuerza de
cobertura y los transportes.
En estrategia marítima no caben recetas rígidas. Si se incapacita
la fuerza de cobertura significa abortar la ofensiva estratégica. La
destrucción de la Fuerza Organizada acarrea la conquista del dominio
del mar para el bando vencedor. Por otro lado el hundimiento de un
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transporte acarrea la perdida irreparable de la tropa y el armamento
embarcado.
El ataque a la fuerza de cobertura o a los transportes depende de
la situación estratégica imperante, una vez escogido el objetivo se hace
necesario crear la maniobra destinada a obtener el cometido con la
mayor eficacia y el mínimo de costo.
En conclusión cuando la misión exige impedir una invasión a
través del mar, los transportes constituyen los blancos prioritarios. Si
la fuerza organizada enemiga se interpone sin posibilidad de eludirla,
por lógica es imperativa su destrucción previa.
El momento más vulnerable de una operación anfibia reside en la
fase de asalto. Existen dos métodos para oponerse a la invasión:
a) Concentrar los órganos de maniobra de la Armada en un área
determinada, con lo que se pretende saturar la defensa adversaria
con amenazas desde distintas direcciones.
b) Un sistema concéntrico, compuesto por una serie de arcos con foco
en las áreas vulnerables, estos arcos comprenden fajas de
diferentes fuerzas defensivas. Mientras más cerca se aproxima un
enemigo mayor densidad y diversidad en la defensa marítima. Su
falla está en la posibilidad de ser batido por parcialidades pues
facilita la aplicación de este curso de acción.
2) Defensa de Costas. El Objeto consiste en rechazar las ofensivas tácticas
enemigas contra el litoral, por tanto es puntual y de acción limitada.
Sus Objetivos son las unidades navales, aéreas y las fuerzas integrantes
de incursiones anfibias, bombardeo naval, desembarco de saboteadores
y similares. Los puntos donde se instalan los sistemas de defensa de
costas responden a requerimientos de la estrategia marítima.
Es un dispositivo naval orientado a repeler los medios utilizados
por el enemigo en sus ofensivas tácticas. Requiere estar alerta en forma
permanente a fin de reaccionar con oportunidad al concretarse la
amenaza.
Los componentes de la defensa de costas poseen características
costeras, con reducido radio de acción y armas de corto alcance. No es
aceptable caer en la exageración respecto a la defensa de costas,
conviene tener presente su esencia táctica y estratégica. En tanto la
guerra en el mar es dinámica, ofensiva y sus objetivos estratégicos se
encuentran en alta mar o en las costas enemigas.
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