Download Marx (Paula Napal)
Document related concepts
Transcript
Paula Napal Esparza 1ºC Bach. Biografía Karl Marx fue el tercero de siete hijos de una familia judía de clase media. Su padre, Herschel Mordechai (luego Heinrich) Marx, quien era descendiente de una larga línea de rabinos, ejercía la abogacía en Tréveris, su ciudad natal. Era además consejero de justicia, sin embargo recibió fuertes presiones políticas, por parte de las autoridades prusianas que le prohibieron continuar con sus prácticas legales de acuerdo a su religión y le obligaron a abrazar el protestantismo para poder mantener el cargo en la administración de Renania. Su madre fue Henrietta Pressburg, nacida en los Países Bajos, y sus hermanos fueron Sophie, Hermann, Henriette, Louise, Emilie y Caroline. Realizó sus estudios de Derecho en la Universidad de Bonn pero los dejó para estudiar Filosofía en Berlín. Se doctoró en 1841 en Jena con una tesis titulada Diferencia entre la filosofía de la naturaleza de Demócrito y la de Epicuro. Pronto se implicó en la elaboración de trabajos en torno a la realidad social, colaborando en 1842 junto con Bruno Bauer en la edición de la Gaceta Renana (Rheinische Zeitung), publicación de la que pronto llegó a ser redactor jefe. Durante este período también frecuentó la tertulia filosófica de Los Libres (Die Freien). La publicación finalmente sería intervenida por la censura, y posteriormente, Marx tuvo que marchar al exilio. Ideas filosóficas Durante su juventud, y mientras se formaba en filosofía, Marx recibió la influencia del filósofo alemán predominante en Alemania en aquel tiempo, Hegel. De este autor tomó el método del pensamiento dialéctico, al que, según sus propias palabras, pondría sobre sus pies; significando el paso del idealismo dialéctico del espíritu como totalidad a una "dialéctica del devenir constante" donde la síntesis, a diferencia de Hegel, no había sido realizada. Además, sigue utilizando el método dialéctico para analizar las contradicciones en la historia de la humanidad y, específicamente, aquella entre el capital y el trabajo. Una interpretación sobre el desarrollo de la obra de Marx, proveniente del francés Louis Althusser, considera que los escritos de Marx se dividen en dos vertientes. Esta interpretación es relevante en la exegética marxista, pero a la vez es muy polémica y pocos autores la mantienen al día de hoy. Althusser encuentra dos etapas: 1 - Marx joven (hasta 1845) período en que estudia la alienación (o enajenación) y la ideología, desde una perspectiva cercana al humanismo influida en gran parte por la filosofía de Ludwig Feuerbach. 2 - Marx maduro (1845-1875): Según Althusser, 1845, el año de La ideología alemana y las Tesis sobre Feuerbach, marca la ruptura epistemológica (concepto tomado de Gaston Bachelard). A partir de la cual Marx rompe con su etapa anterior, ideológica y filosófica, e inaugura un período científico en el cual desarrolla estudios económicos e históricos usando el método del materialismo histórico. Como diría Althusser, Marx inaugura el continente historia. Este es, eminentemente, el período de su magna obra: El capital. CONTEXTO HISTÓRICO Y FILOSÓFICO DE MARX. CONTEXTO HISTÓRICO DE MARX La época en que Marx nace y muere puede considerarse como la época en que la burguesía consolida su poder, desplazando a la aristocracia y al absolutismo. Otra clase social, la obrera, se expande numéricamente y va adquiriendo gradualmente autonomía organizativa y política. La primera parte de su vida tiene como marco histórico la Restauración, es decir, el restablecimiento de los viejos poderes de la aristocracia y el absolutismo. Sin embargo, el liberalismo y las reformas sociales y políticas que se llevaron a cabo durante la Revolución Francesa eran difíciles de borrar de la memoria de la burguesía. Tuvieron lugar revoluciones liberales, que, encabezadas por la burguesía, se enfrentaban a la Restauración y exigían libertad y participación política. Las revoluciones del siglo XIX fueron radicalizándose y adquiriendo un carácter cada vez más social. En estas revoluciones se observa un alejamiento entre la burguesía y el proletariado, que comenzaron luchando juntos y acabaron enfrentados, pues el proletariado empieza a manifestar sus propias exigencias: sufragio universal, mejoras sociales, etc. En la última parte de la vida de Marx, el proletariado se expande y se organiza. Al final de su vida el movimiento obrero era ya una realidad. Las ideas de Marx tuvieron mucho que ver con todo ello. CONTEXTO FILOSÓFICO DE MARX La filosofía de Marx surge de la confluencia de varias fuentes: A-El idealismo de Hegel y la crítica realizada al mismo por la izquierda hegeliana, especialmente Feuerbach. B-La economía política clásica. C-El socialismo utópico. D-El anarquismo. A. La filosofía de Hegel y la crítica de Feuerbach. Kant había definido el carácter finito y limitado de la razón humana y había establecido el carácter incognoscible de la “cosa en sí”. Algunos seguidores de Kant criticaron este concepto, y Hegel negó definitivamente su existencia. Para él, el objeto es puesto íntegramente por el sujeto (ya no hay nada dado a los sentidos por una realidad ajena a la razón). Tenemos un nuevo concepto de razón: la Razón Infinita, absoluta y creadora, y con carácter histórico. Progresa mediante un proceso dialéctico (tesis, antítesis, y síntesis). La función de la filosofía es comprender la realidad, y ésta no es sino el despliegue de la Razón Infinita. Marx rechaza de modo absoluto el idealismo de Hegel y afirma que: -La realidad no es la idea sino la naturaleza y el hombre. -La existencia del proletariado contradice la afirmación hegeliana de que todo lo real es racional: el proletariado es la negación de la razón, de la justicia, de la realización del hombre, del derecho, de la libertad. -Rechaza la concepción de la filosofía como saber teórico. La filosofía tiene que convertirse según Marx en una praxis revolucionaria transformadora de la realidad, de las condiciones reales de la vida del hombre; la filosofía debe transformar la realidad. -Sin embargo admite que está en Hegel el gran principio motor y generador de la transformación: la dialéctica. A partir de Hegel, de la riqueza y ambigüedad de su sistema, surgió un grupo de discípulos que pronto se separó en dos tendencias: -La derecha hegeliana, conservadora, que justificaba el orden social y político del momento, y que buscaba la justificación del cristianismo a partir de los conceptos de la filosofía de Hegel. -La izquierda hegeliana, práctica, crítica que propone una reforma radical del hegelianismo y elabora una fuente crítica a la religión. Piensan que toda la realidad que no pueda ser justificada, debe ser cambiada, y ven a la dialéctica como un motor de transformación y de progreso. Feuerbach tiene en su filosofía dos aspectos que toma Marx: -El giro materialista que da a la filosofía de Hegel: la filosofía no puede ni debe comenzar por abstracciones, sino con la vida, sus necesidades y deficiencias. -El concepto de alienación: Dios es una proyección, una imagen idealizada que el hombre hace de sí mismo y de su esencia, con la gravedad de que luego no se reconoce y se va empobreciendo a medida que enriquece a Dios, se va enajenando, se va alienando; el hombre debe recuperarse a sí mismo, convertir la teología en antropología, reducir la esencia de Dios a esencia de hombre. Para amar realmente al hombre hay que eliminar a Dios. Esto a Marx le resultará insuficiente porque: -No concibe el mundo como un proceso histórico y dialéctico. -El análisis de Feuerbach de la alienación religiosa es insuficiente pues no elimina el sentimiento religioso que es la causa de esa alienación. B. La economía política clásica. Otra fuente del pensamiento de Marx son las teorías de Adam Smith, Malthus, David Ricardo, y Stuart Mill, pensadores básicos de la llamada economía política clásica. Justificaban el capitalismo y las diferencias económicas entre burgueses y proletariado. Interpretaban que las relaciones económicas obedecían a un orden natural. Adam Smith es el padre del liberalismo económico. Marx se enfrenta a ellos contradiciendo su análisis y proponiendo otras explicaciones. Marx intenta pasar de una justificación del orden social y económico a una crítica de dicho orden. El análisis económico ha de servir para descubrir las auténticas causas de la injusticia social generada en el sistema burgués, y desde ese análisis impulsar su transformación. C. El socialismo utópico. Nació en Inglaterra pero fue en Francia donde se desarrolló la ideología calificada de utópica y que Marx llevó a su nivel “científico” y revolucionario. Frente a los males sociales bosqueja una sociedad ideal, libre de conflictos sociales, políticos y económicos, en la línea de Platón, Tomás Moro, etc. Sus pensadores principales son Saint Simón y Fourier en Francia, y Owen en Inglaterra. D. El anarquismo. Los principales pensadores anarquistas fueron Proudhon y Bakunin. También reivindicaban una transformación de la sociedad. Para ellos la única forma de reformar la sociedad es rechazar toda forma de poder pues éste es siempre fuente de corrupción. Su defensa de la libertad e independencia individual a ultranza chocan con las organizaciones establecidas por el comunismo como necesarias para lograr el objetivo de reformar la sociedad. Las diferencias se vieron en la I Internacional. El enfrentamiento entre Marx y Bakunin produciría la primera escisión dentro del movimiento obrero. Características Las características fundamentales del marxismo son: Materialismo histórico: todos los acontecimientos históricos han sido provocados por factores de orden económico y no por la influencia de los valores espirituales. Lucha de clases: la humanidad asiste desde sus comienzos a la lucha entre oprimidos y opresores, proletarios y capitalistas. Plus valía: sólo el trabajo crea riqueza, genera capital. El obrero recibe menos de lo que produce, la diferencia se la queda el capitalista. Transformación social: Los capitalistas son cada vez más ricos y menos, mientras que los proletarios son mayoría y más pobres. EJEMPLOS DE ANÉCDOTAS: En mis clases de historia europea, las cuales son particularmente densas por su carácter panorámico, recurro a la anécdota cuando siento que mis estudiantes se confunden y se pierden en los meandros de los grandes procesos y estructuras. Una buena anécdota juiciosamente escogida cumple dos funciones importantes: primero distiende el ambiente, disminuye la tensión y encauza de nuevo la atención perdida. En este sentido la anécdota es un instrumento pedagógico de gran utilidad, numerosos estudios en psicopedagogía han demostrado que la capacidad de concentración de un público promedio es de 20 minutos más o menos (incluso algunos reducen este tiempo en la era del video). De ahí la necesidad de romper el ritmo para revitalizar la atención del público. Hasta las más grandes personalidades académicas recurren a la anécdota; por ejemplo el famoso antropólogo Levi-Strauss mencionaba que toda conferencia pronunciada ante un público norteamericano debía obligatoriamente insertar uno o dos “buenos chistes” con el fin de asegurar su éxito. La segunda función de la anécdota es aportar elementos de síntesis. En efecto, es una metáfora que ilustra brillantemente el “espíritu” de una estructura o de un proceso histórico, en las acciones concretas de los individuos. Dicho en otras palabras, la anécdota corresponde a estos “pequeños hechos divinos” que encarnan la totalidad en su más sencilla particularidad. En primera instancia la anécdota aporta un soporte narrativo esencial en la articulación del conocimiento histórico. Hace parte de aquellas estrategias narrativas empleadas por más de un historiador (conscientemente o no) para hacer historia temática, estructural, problema o de larga duración, a través de personaje Finalmente, la anécdota puede disimular lo que Nietzsche llama en la Genealogía de la moral la mezquindad que se disimula detrás de todo gran principio. Para referirme de nuevo al gran filósofo, la anécdota sería un avatar de una historia “hecha a martillo”, en el sentido de cumplir con un papel de desmitificación. Tomemos el caso de la rivalidad entre dos grandes personajes de la historia política polaca de la primera mitad del siglo XX, Roman Dmowski (1864-1939) y Józef Pilsudski (1867-1935). Al leer los estudios clásicos sobre el tema, hay una insistencia sobre los puntos de vista irreconciliables entre los dos personajes. Cuando eran militantes nacionalistas, Dmowski pensaba en una resurrección de Polonia con el apoyo de Rusia, mientras que Pilsudski, al contrario apostaba a una reconstitución de un Estado polaco con el soporte de Austria-Hungría y Alemania. El primero era profundamente anti-alemán mientras el segundo era fuertemente rusofobito. Una vez adquirida la independencia, la rivalidad fue más fuerte que nunca: los historiadores la explican por medio de la oposición de las ideas políticas de derecha de Dmowski con el pasado de militante de izquierda de Pilsudski.