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Ganadoras del Concurso
Literatura
“Una esperanza de vida”
Feria del Libro Habana
Febrero 2007
Cecilia Infante de la
Editorial Ciencias
Médicas inicia la
actividad que dará
a conocer los
nombres de las
ganadoras en el
concurso de
Literatura Nacional
que convoca el
servicio Bibliosida
del CNICM/Infmed
Todos atentos
Ganadora: Masiel Hurtado González
de 8vo grado, escuela secundaria
básica “Tupac Amaru”, de Alamar
Aplausos
Masiel recibe regalos de manos de la
Directora de la Biblioteca Médica
Nacional, Lic. Bárbara Lazo Rodríguez
Cecilia Infante lee el cuento
ganador, “El Sida se llevó al amor”
escrito por Masiel
•
Nombre y apellidos: Masiel Hurtado González
Nombre del centro de estudio: ESBU/ Túpac Amaru
Nivel escolar: Octavo grado
“El SIDA se llevó al amor”
Muchos de nosotros pensamos que ninguna enfermedad o virus puede enfermarnos gravemente hasta
provocarnos la propia muerte, o que estamos siempre protegidos por los anticuerpos, ¡es cierto!, muchas veces es
así, pero el VIH no, es diferente; es un virus mortal que nos matará sin importar el tipo de personas que seamos.
Siempre van a ver tratamientos, lo difícil va a ser que nuestro cuerpo los asimile correctamente y que nos protejan
para siempre; en el caso del VIH podemos hacer que vivamos más tiempo pero no el que el destino nos tenía
planificado. Mi investigación acerca de estos temas comenzó cuando escuché la historia de Nora, a la que
cariñosamente llamaban Tati.
Me dijeron que era tranquila y que gustaba de la poesía. Escribía para el periódico Juventud Rebelde y era una
excelente comentarista.
Los padres de Nora habían muerto en un accidente automovilístico desde hacía algunos años y poco a poco se fue
creando en ella un trauma irreparable lo cual la llevó hacer lo que hizo. Había días en los Nora no dormía, sino
lloraba, o bien se encerraba en la casa por varias semanas. Nora fue perdiendo personalidad convirtiéndose en
una persona mal educada que andaba vagando por las noches en los bares. Dicen que hasta la prostitución llegó.
Sus amigos trataron de ayudarle pero nada la hizo cambiar, absolutamente nada... Oh! Claro! Ya lo olvidaba, solo
cuando le tocaron a la puerta uno de esos extranjeros con los que pasaba los oscuros días, diciendo que era
portador del VIH. No sé como fue, solo supe que un brusco golpe le dio en el corazón, y estuvo internada en una
clínica recibiendo tratamiento. Su única esperanza en esos días era el hecho de que muchos de sus vecinos y
amigos la visitaban y le ayudaban. Nora sufrió mucho; por fin habló con los médicos del hospital y les contó que
debía hacerse la prueba para el VIH. Durante el tiempo que estuvo allí fue tratada por especialistas para que se
preparara en base a que estaba contagiada por el virus. Mientras que recibía tratamiento conoció a un muchacho
joven, de unos 20 años, bonito y muy agradable que también esperaba los resultados de su examen. Él y Nora se
hicieron muy buenos amigos hasta que su amistad se convirtió en algo más: en amor. Él le escribía poesías muy
bellas y ella le escribía cartas, se tenían un cariño inmenso. Por fin el día de los resultados llegó: Nora era un
manojo de nervios, no sabía que hacer, tenía aun la esperanza de no estar contagia: El médico con la mirada
extraña le dijo: ¡Los resultados han sido negativos! Ese fue el día más feliz de Nora, su vida continuaba y
retomaría su trabajo. Había aprendido que lo que hizo había estado mal pero su felicidad no estaba completa. El
joven aun no conocía sus resultados. Entró a la clínica sospechando con los gestos que hacía el médico que él sí
estaba contagiado. ¡Los resultados eran positivos! ¡Qué desilusión tan grande! Ahora iba a vivir poco tiempo y sin
Nora. Esta lo supo comprender y decidieron pasar la vida juntos: él seropositivo y ella sana. Al cabo de unos años
él murió y cuentan que ella vive junto a la tumba de él; las personas de ese pueblo le llevan comida y se baña solo
cuando llueve. Nora había perdido la cabeza, llora noche tras noche y sufre las consecuencias del VIH en carne
ajena.
Premio categoría de adulto a Caridad
Suárez Rodríguez, por el testimonio
Cuento de una verdad.
Masiel explica al público sus motivaciones
para participar en el concurso.
Y cuenta algo de la historia que narra en su
cuento
Durante la 16 Feria Internacional del Libro Cuba 2007 se dieron a conocer los
ganadores del concurso nacional de literatura "Una esperanza de vida".
Organizado por la Biblioteca Médica Nacional-Infomed con un carácter social y
educativo, el certamen promueve la lucha en contra del VIH/SIDA.
Masiel Hurtado González
Caridad Suárez Rodríguez
El periodista
Jorge Marques
realizó preguntas
a las ganadoras
Ambas respondían la rueda de prensa
Ambas respondían la rueda de prensa
!FELICIDADES!
Equipo de trabajo y ganadoras
El hermano y una amiga
asistieron al encuentro.