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Área Ejecutiva de Economía y Empleo de IULVCA 15 IDEAS SOBRE EL EMPLEO EN ANDALUCIA Pedro Vaquero del Pozo Idea núm.1: El pleno empleo es posible. Esto ya es decir bastante. Sobre todo en el Estado español, donde tras siete años de bonanza económica, seguimos teniendo un 13’5% de paro EPA; y en Andalucía, donde el paro es aún del 21%. Pero hay que afirmar además que el pleno empleo de calidad es también posible. El objetivo de IULVCA es el pleno empleo de calidad. *** Idea núm.2: El desarrollo económico no necesariamente crea empleo. La aplicación de las nuevas tecnologías y de las nuevas formas de organización de la producción guiadas por las consignas neoliberales, destruye el empleo y lo precariza. Por eso las leyes y la intervención pública son imprescindibles para crear un marco en el que los agentes dialoguen, pero en igualdad de condiciones. Sin siquiera llegar a planteamientos socialdemócratas, hay que hablar simplemente de embridar el mercado, de domesticarlo, para que respete los derechos sociales, que son parte de los derechos de los ciudadanos. *** Idea núm.3: El instrumento fundamental son las políticas estructurales. El Plan Social de Empleo “35 horas” las resume así: La reforma laboral progresista para convertir las relaciones de producción en un instrumento de la calidad del trabajo, de la seguridad que da bienestar a los trabajadores/as y sus familias, y posibilita una convivencia social gratificante. El retorno al Derecho de Trabajo tuitivo, al empleo estable, a las condiciones de trabajo dignas y negociadas, son imprescindible para la consecución de una sociedad más justa basada en la centralidad del trabajo de calidad. b) La Jornada de 35 horas por ley y sin reducción salarial, o medidas de reparto del trabajo mediante la reducción de la jornada de trabajo, de adelanto de la edad de jubilación, de semana de cuatro días laborales, de una quinta semana de vacaciones, etc., pues significan un reparto de los incrementos de productividad y de beneficios que se están produciendo, sobre todo en momentos de crecimiento económico tan importante como el que estamos viviendo. c) Las ofertas de empleo público en ayuntamientos, consorcios y demás organismos o empresas públicas derivadas de ellos, o de las diputaciones, o de los demás administraciones. Sin embargo el empleo público no es en sí un instrumento “para” crear empleo, sino para realizar el servicio público al que se deben. El empleo público deben ser función más de las necesidades colectivas a las que sirvan, y de las disponibilidades presupuestarias, que de la creación de empleo. Sólo así debe entenderse que el Plan Social “35 horas” de IU lo recoja como uno de los elementos que crea empleo. A él nos remitimos como marco de referencia. Pero la reforma estructural que pretende dicho Plan Social “35 horas” de IU es profunda, y requiere una correlación de fuerzas favorable a la izquierda, un gobierno dispuesto a enfrentarse a los poderes económicos y a hacer políticas no neoliberales, como el de la izquierda francesa, por ejemplo. No es el caso de España, por el momento, ni el de Andalucía, pese a los 20 años de Estatuto, y de gobiernos en teoría progresistas. *** Idea núm.4: Las llamadas políticas activas son también un importante pilar de la estrategia europea para el empleo, y constituyen el diferencial “social” de la UE respecto de otras políticas económicas rotundamente neoliberales, como la de EE.UU. Los reparos que la izquierda española le pone a estas políticas vienen dados por causas justificadas y reales: a) El nombre está buscado provocativamente por los neoliberales para contraponerlo a las políticas pasivas, esto es, a las prestaciones o subsidios de desempleo para los parados; b) El gobierno de derechas está realizando unas políticas activas mal enfocadas: porque se financian con fondos del INEM cuando deberían financiarse con fondos del Estado; y porque prioritariamente consisten en trasvasar ese dinero que debería cubrir a todos los parados y no sólo al 50%, a los empresarios para incentivar la contratación estable, con el escaso resultado que ha obtenido el acuerdo del 97, y que el Gobierno ha decretado en solitario en el 2001. Debemos distinguir lo que es una política enfocada desde el punto de vista neoliberal por la derecha, de lo que son en sí unos instrumentos válidos en términos generales para acompañar las medidas estructurales hacia el pleno empleo. Hay que distinguir las políticas activas válidas de las que no lo son. *** Idea núm.5: El gobierno español no dedica recursos suficientes: aproximadamente, el gasto público que se destina en nuestro país a políticas activas de empleo, en % del PIB por cada punto de tasa de paro, es un 77% inferior a la media comunitaria. Aún más: casi el 40% de los recursos que destina España a políticas activas de empleo se utilizan para subvencionar a las empresas, recursos que provienen de la protección al desempleo. Si ese dinero, y lo que dedica la Junta de Andalucía (en el 2000, unos 268.000 millones) se invirtiera en potenciar proyectos concretos y evaluables de autoempleo, de la economía social, las sales, las empresas de inserción, de desarrollo local y comarcal, de introducción de nuevas tecnologías, de los programas sectoriales de apoyo a la mujer empresaria, a los jóvenes con nuevas ideas, etc., se estaría creando mucho más empleo. En todo caso, la izquierda desde su presencia institucional y desde la acción colectiva de la organización en su conjunto, debe reivindicar una reorientación de las políticas activas y más fondos para financiarlas. Pues son los PGE anuales son los que deben financiar estas políticas y los servicios sociales en general, en detrimento de otros capítulos de gastos, tales como los gastos de defensa, los destinados al clientelismo empresarial, etc. 2 *** Idea núm.6: IULVCA reivindica la transferencia de las políticas activas desde el Estado a la Comunidad Autónoma andaluza. No es de recibo que estas políticas sirvan de moneda de cambio político, pues quien reparte el dinero de las escuelas-taller, etc. no es el dueño del mismo, sino su gestor público. Por ello, si es éticamente intragable el clientelismo que se da en múltiples ocasiones en los diversos modos de financiación de los proyectos cuyo reparto debe gestionar la Junta o los órganos de poder hegemonizados por el PSOE, esto no debe servir para que el Gobierno del PP se parapete y se niegue ahora a soltar las políticas activas de empleo a favor de nuestra Comunidad Autónoma. Sobre todo cuando ya se ha llegado a negociar los términos concretos de las transferencias, y existe un proyecto de Servicio Andaluz de Empleo, que nos merece en principio todo nuestro apoyo, aunque le hayamos hecho algunas aportaciones puntuales al borrador elaborado por la consejería. *** Idea núm.7: Para alcanzar el pleno empleo hay que tener un diagnóstico adecuado de la situación de nuestro tejido productivo y de nuestro mercado de trabajo. Diagnóstico de la economía andaluza.- La economía andaluza ha crecido un 4’1% PIB, por encima de la media española y europea, baneficiada por una coyuntura de bonanza económica como la que actualmente se viene registrando en el contexto de la UE y del Estado español desde 1994. Pero ya se está dejando ver la desaceleración económica (del 3’6 al 3’2 o menos será el crecimiento del PIB en 2001), y no sabemos qué pasará cuando el euro esté plenamente vigente en 2002. Además existe una pugna en torno a si la ampliación de la UE se llevará por delante las ayudas de los fondos de cohesión para España. Cuando lleguen las vacas flacas, puede que Andalucía baje también por encima de lo que lo harán la UE y el Estado español. Lo lógico es eso. Pues nuestra estructura económica es más débil que otras. Veamos. El crecimiento del 4’1% se ha debido sobre todo al de dos factores: el turismo (4’3% en viajeros alojados frente al 1’8% en España, 3’5% de incremento de pernoctaciones, frente al decrecimiento español del –0’9%), y la construcción residencial (11’2% en comparación al 8’1 de visados de arquitrectos, 6’6% de incremento de visados de aparejadores frente al –0’6% español). Sin embargo, la marcha de la construcción de infraestructuras no ha ido tan bien (-7’4% en obras públicas, frente al –4’8%; cementeras, 6’6 frente al 11’1% de crecimiento español). Hemos crecido gracias al subsector inmobiliario y al turismo de segunda residencia. En cambio no despegamos en crecimiento industrial, pues mantenemos un crecimiento del 4%, equilibrado con el 4% del crecimiento español, aunque en términos absolutos nuestgro crecimiento del 4% es menor que el 4% que crece Cataluña. Andalucía arroja peores resultados que el conjunto del Estado en cuanto a creación de nuevas empresas (8’9%/10’9%, lo que se traduce en un valor de –35’2/17’7%), a exportaciones de mercancías (14’2/19’1), y a depósitos bancarios (12’2/12’7). 3 El dato más significativo es la terciarización, que sigue creciendo hasta llegar a ocupar un 62’96% del total de trabajadores andaluces en el 99. Andalucía es una “economía de servicios” tradicionales, no avanzados, pues sigue generando servicios desigualmente localizados en el entorno del sector público, del comercio y el turismo, en que se refugia la mano de obra desplazada del campo, que en su diáspora, no encuentra un sector industrial donde ocuparse. Este factor, junto al de la desregulación laboral auspiciada por el modelo neoliberal, explica la proliferación del desempleo encubierto. La desconexión entre nuestra actividad industrial y nuestros servicios ha acarreado consecuencias muy negativas para nuestra economía: a) El proceso de terciarización ha tenido más un carácter extensivo que intensivo; b) El empuje de los servicios se ha apuntalado sobre actividades terciarias tradicionales (servicios públicos, comercio, actividades turísticas, servicios personales, etc.); c) Comparativamente, la presencia del terciario avanzado (servicios bancarios, de nuevas tecnologías, etc.) en la economía andaluza es mínima. Ha sido precisamente la ausencia de un tejido industrial la que ha impedido que los servicios más avanzados se desarrollen adecuadamente. Tanto en el ámbito de la asignación de recursos como en el de la producción, las ineficiencias derivadas del predominio de la componente tradicional en el terciario andaluz conduce a que se vea afectado el conjunto de la economía andaluza, traduciéndose todo ello en una merma de competitividad. Es interesante conocer cómo se refleja esta misma realidad económica en la esfera financiera, especialmente en un momento en que se ha desatado una polémica por el futuro del sector financiero andaluz, que según todo parece indicar, está excesivamente desligada del contexto de la evolución de la economía andaluza (Ley de Cajas, correlación de fuerzas, etc.). Como consecuencia de nuestra apuesta por el crecimiento de la construcción residencial, crecen los créditos netos por encima de lo que crecen en España (17’7/16’5), con el riesgo financiero que ello conlleva; sin embargo, el diferencial se invierte a favor de los datos del Estado en la magnitud “depósitos totales” (12’2/12’7). El boom inmobiliario es el causante. El diagnóstico económico es, pues, el de una economía que crece, pero que no se desarrolla de forma sostenible, pues no es lo mismo crecimiento que desarrollo sostenible. Y para acabar de enturbiar el panorama, ya se ha empezado a notar la desaceleración en términos de crecimiento menor en el segundo semestre del 2000 y primer trimestre del 2001. B) Diagnóstico del mercado de trabajo.- Un modelo productivo de estas características, apoyado en los servicios tradicionales, en la construcción residencial y el turismo de segunda residencia, incide negativamente en el crecimiento del empleo tanto en su cantidad como en su calidad. La realidad del empleo y la precariedad en Andalucía sigue siendo una asignatura pendiente, en la que el Gobierno de la Junta de Andalucía no obtiene el suficiente como calificación de su gestión. Las cifras más significativas del empleo en Andalucía son las siguientes: 1. 37% de ocupación, frente al 44% de la media nacional. De cada cien personas en edad de trabajar en Andalucía, sólo 37 están ocupadas; 2. El incremento de la contratación 4 andaluza durante el 2000 es 2,7%, mientras que la media nacional ha sido del 4,5%. Comparativamente respecto del 99, ha descendido en 6.180 la contratación indefinida y se han incrementado en 87.639 los contratos temporales.; 3. El 96,6% de las contrataciones laborales del 2000 en Andalucía han sido temporales, cinco puntos por encima de la media nacional. El nivel de paro y de precariedad suponen que la inseguridad es la característica fundamental del modus vivendi de los trabajadores/as andaluces; 4. Este dato se releva más preocupante por cuanto más del 40% de los contratos temporales lo son de menos de un mes de duración. Lo mismo y en igual porcentaje, ocurre con los contratos de trabajo que no especifican la fecha de su finalización. Es un dato claro de la incertidumbre laboral en que se encuentra un buen porcentaje de los trabajadores y trabajadoras andaluces; 5. La diferencia de géneros es patente en las cifras andaluzas de ocupación: de cada 100 de los ocupados actuales en Andalucía, 67 hombres y sólo 33 mujeres, habiéndose incrementado la población ocupada andaluza tan sólo 14.500 personas en general durante el 2000; 6. Este volúmen de contrataciones precarias y la escasa generación de empleo neto en Andalucía se traduce en que para consolidar un empleo en nuestra Comunidad andaluza, se han necesitado 210 contratos, mientras que a nivel nacional ha sido de 34 contratos por cada puesto de trabajo creado en el año 2000; 7. La economía sumergida se eleva al 12%, según algunos estudios. *** Idea núm.8: Diez mandamientos y una consigna.- Siguiendo el esquema de los 9 principios que enumera Manuel Escudero (“Pleno empleo”, Espasa 1998), pero adaptándolos a nuestra teorización desde la izquierda, haríamos el siguiente diagnóstico: El problema es triple: excesiva oferta de trabajadores con escasa cualificación, obstáculos de PLDs (parados de larga duración) para convertirse en oferta efectiva de trabajo, y falta de acople de la demanda de trabajo a la oferta femenina de trabajo; 2. En la sociedad del conocimiento hace falta incorporar un nuevo derecho ciudadano universal a la formación continua; 3. Las redes clásicas de seguridad deben evolucionar hacia ayudas al desempleado para su inserción en el mercado de trabajo, ligándolas a su esfuerzo y compromiso personal con su cualificación; 4. Las subvenciones estatales y andaluzas al empleo deben orientarse a acabar con la exclusión de los trabajadores menos cualificados respecto a las oportunidades de empleo, de forma que se compatibilicen el empleo digno, estable y bien remunerado de los no cualificados, y la competitividad de determinados sectores productivos intensivos en utilización de este tipo de mano de obra (servicios clásicos, turismo, agricultura...); 5. Hay que reorientar las políticas activas hacia fórmulas de subsidio a los costes asociados a los salarios de los trabajadores no cualificados (que no sean la transferencia de rentas que supone el que el dinero del INEM pague las políticas activas, ni la exoneración del pago de las cotizaciones que debilitan y desequilibran el sistema de la Seguridad Social), implicando en el esfuerzo financiero compartido a los grandes empresarios, y no sólo al Estado; 5 6. Pero el abaratamiento de los costes salariales totales del trabajador no cualificado no puede significar la aparición de los workers poor, esto es, la pobreza-con-trabajo. Por ello deben revisarse las últimas reformas laborales, y especialmente los mecanismos desreguladores introducidos en la del 2001, que implica un contrato formativo que implica una fórmula de empleo por salarios de miseria, y el contrato a tiempo parcial, que posibilita las jornadas laborales sin tiempo definido. ; 7. Los procesos de negociación colectiva de los agentes económicos y sociales pueden desempeñar un papel determinante para el progreso hacia el pleno empleo. Hay que reforzar los mecanismos de negociación colectiva, frente a las pretensiones del gobierno de la derecha de introducir la ultractividad de los convenios. Los objetivos de la mesa deben ser: negociación articulada, elevación del S.M.I. a 100.000.-Pts, tope mínimo para el salario de los no cualificados, las cotizaciones deben corresponderse con exenciones tributarias en el IRPF de los trabajadores no cualificados, incentivos para mejorar situación trabajadores no cualificados); 8. La promoción activa y una reforma de la contrarreforma del trabajo a tiempo parcial que lo convierta en instrumento útil y no desregulador; 9. Deben realizarse programas para la incorporación de las mujeres al mercado de trabajo, en igualdad de condiciones a los hombres. Ello supone un cambio cultural, legislativo y estructural, adoptado por los diferentes agentes y administraciones. 10. La reducción de la jornada de trabajo debe pasar a ser una medida estructural, pero también una política activa más (ojo: el gobierno de la Junta de Andalucía ha adoptado la vía de proponer las 35 horas como una política activa más, pero no ha desarrollado el tema ni suficientemente en la Función Pública andaluza, ni en la concertación social. Hay que reivindicar la coherencia y el desarrollo de este compromiso). Estos 10 mandamientos se encierran en uno, que a modo de consigna o alternativa disyuntiva, diría así: o inserción o renta básica. Sin explicitar demasiado, se trata de garantizar a cada parado una de las dos cosas siguientes: Primero, ofrecer un itinerario de inserción laboral donde se combinen formación o reciclaje, escuelas taller, talleres de empleo, técnicas de seguimiento personalizado de búsqueda de empleo, prácticas en empresas, etc.; si no se obtienen resultados de inserción, y mientras no se obtengan, proporcionar al parado una renta básica del 75% del SMI. *** Idea núm.9: Cinco son los factores a considerar para hacer de las políticas activas un instrumento eficaz: en primer lugar, adecuación a nuestro entorno territorial (medidas ligadas al desarrollo endógeno, que posibiliten sacar el mayor partido a la potencial riqueza de nuestra localidad o comarca, y a los conocimientos de nuestros trabajadores del medio); 6 b) pero el territorio es el hábitat donde se desarrollan los sujetos, los ciudadanos, con su entramado y sus redes, sus asociaciones, instituciones, grupos, valores e intereses. c) en segunda instancia, la optimización de los sectores clásicos; d) y la búsqueda de sectores emergentes; e) tanto para unos como para otros, la habilitación de nuevos instrumentos financiación, además del acceso asequible a los instrumentos financieros típicos. de *** Idea núm.10: Entorno territorial.- Si por fin se logran las transferencias de las políticas activas a la Junta de Andalucía y se pone en marcha el SAE, tendremos un diseño de comarcalización de las políticas activas en la medida en que se constituyan las Unidades Territoriales por el Empleo y el Desarrollo Local y Tecnológico (UTEDLT). Ello quiere decir que hay que adaptarse a esta nueva realidad con espíritu comarcal: a) evitando desde los ámbitos de participación social e institucional (comisiones provinciales, consejos rectores) que las cabeceras de comarca se lleven en el reparto todos los proyectos; b) evitando la burocratización de los instrumentos, utilizando racionalmente los ADLs, ALPES o como se llamen en el futuro; c) creando los instrumentos de desplazamiento de los beneficiarios de las políticas activas desde sus lugares de origen a los centros de realización de las mismas (resulta más claro en el caso de unos centros comarcales de formación); d) pero sobre todo, generando proyectos comarcales de desarrollo endógeno, que consigan una confluencia de las potencialidades locales en el proyecto común, y un reparto equitativo de las nuevas realizaciones. Esta afirmación no es compartida por todos. Más aún: se teoriza que es preciso olvidarse de las comarcas y elegir otro tipo de centros territoriales de atención. Para ello se analiza el fenómeno de la globalización y de su impacto en el territorio. Hay que conocer estas ideas y saber separar el grano de la paja, pues en el fondo de esta estrategia está un análisis interesante, a saber: El impacto de la globalización y del consiguiente postergamiento de los estados, se traduce en un nuevo dimensionamiento de las ciudades como ámbito estructural de la economía mundial globalizada, sustitutas de los estados. Las ciudades son lugares privilegiados de acumulación y desarrollo tecnológico, y a la vez son los elementos más frágiles y vulnerables del sistema, pues esdonde más fácilmente surgen conflictos sociales, económicos, políticos y medioambientales. 2. Según el lugar que cada ciudad ocupe en la red de ciudades del mundo, así será su desarrollo. Hay metrópolis urbanas o ciudades globales (donde se sitúan los centros del poder económico, habitualmente alejados de la producción, donde se alojan los poderes financieros y políticos fácticos), globalizadas (donde se concentran las nudos de la producción más cualificada, de los intercambios comerciales) y los centros o núcleos subnacionales o regionales. 7 3. La forma de integración en la nueva red de crecimiento se puede realizar de forma individual, regional, comarcal o local. Pero esta integración no depende de las políticas del territorio en cuestión, sino de las características del entorno territorial en que se inserta la ciudad concreta, es decir, de las posibilidades de explotar o no las ventajas del territorio. 4. Hay que analizar los problemas de la desigualdad o de la pobreza en relación con la cadena de valor de los bienes y productos, pues estos problemas se generan según el lugar que se ocupa en los nudos de las redes múltiples de la producción y el intercambio a nivel mundial (el ciclo completo sería: extracción de materias primas – transformación – exportación – comercio final). Teoría interesante, que sirve para situar los problemas con perspectiva. Pero no sirve para justificar un olvido de los territorios que no se sitúan en lugares adecuados de la red. Detrás de ella existe una creencia mágica de que llamadas nuevas centralidades obtienen el crecimiento del conjunto porque haya crecido el núcleo principal. Ésta parece ser la estrategia del gobierno de la Junta desde que concluyó la necesidad de aparcar el art.5 del Estatuto sobre constitución de las comarcas. La idea consiste en que si se concentran los recursos para obtener el desarrollo de unos focos elegidos estratégicamente (áreas metropolitanas, por ejemplo), de rebote se inducirá un desarrollo en el entorno referenciado. La idea no es del todo desdeñable, si se aplica priorizando el principio de la cohesión interterritorial, la búsqueda de la progresiva igualdad entre territorios más desarrollados y menos desarrollados. Pero aplicada desde el dogma neoliberal de reducir el déficit a toda costa, genera ese desarrollo desigual que se evidencia con los datos de la distribución de la renta per cápita que el grupo parlamentario de IULVCA ha elaborado. *** Idea núm.11: Los sujetos de las políticas activas.- La izquierda hunde sus raíces en el movimientos obrero. Pero la idea de obrero evolucionó hacia la de trabajador, y hoy entendemos que trabajador es hasta un profesional liberal que, bien asalariado, bien por su cuenta, bien de su trabajo. Máxime si en su actividad se pone al servicio de la gente, de “los de abajo” y no se confunde en su status y su defensa de los intereses con los poderosos. Pero sobre todo, hoy las nuevas formas de organización de la producción han desalojado del mercado de trabajo a múltiples segmentos de la cadena productiva fordista (transporte de mercancías, teletrabajo...), que se constituyen en trabajadores autónomos o bien montan sus pequeñas empresas, sea cual sea la forma jurídica que adopten (cooperativas, sales, pymes...). La izquierda tiene una asignatura pendiente, tanto a nivel sindical como político: integrar a estos colectivos dentro del movimiento emancipador. El tema es largo de tratar, y éste no es el marco. Pero la referencia es obligada para introducir una idea: los concejales y alcaldes de IULVCA deben potenciar la alianza y promoción del empresariado social, convertirse sin complejos en promotores de estos empresarios, asumiendo en la teoría lo que realiza en la práctica municipal o institucional. Asumir que la gente se busca la vida montando su propia salida laboral, individual o colectivamente, al margen de su ideología e intentando conservarla sin nuestra ayuda la mayoría de las veces, es el primer paso. 8 En todo caso hay que decir que los sujetos de las políticas activas son múltiples: Las administraciones: La Junta de Andalucía dispondrá de dos instrumentos: La concertación social del Gobierno de la Junta con los sindicatos CC.OO. y UGT, y los empresarios. Pero hablar de concertación social es casi hablar de Presupuestos de la Junta, pues el instrumento por excelencia de la política económica, los presupuestos, vienen determinados en este ámbito de las políticas sociales y de empleo, por los compromisos adquiridos por el Gobierno de la Junta en la concertación social. Sería de desear que en el documento del acuerdo se explicitasen los compromisos de forma más concreta y cuantificada, para permitir la actuación presupuestaria consecuente, y la evaluación periódica del nivel de cumplimiento. En otro informe del Área de Economía y Empleo de IULVCA hemos analizado este tema, y hemos propuesto una Comisión Parlamentaria de Seguimiento de la Concertación Social, así como su territorialización a através de la constitución de consejos economícos y sociales de ámbito provincial. b) El SAE deberá sustituir al INEM y a la Consejería en la gestión estructural directa del reparto de la financiación europea, estatal y autonómica. El mecanismo consistirá en aprobar proyectos, programas propios o de iniciativas de los ayuntamientos, consorcios, mancomunidades, sindicatos, empresarios, fundaciones, asociaciones, empresariado social o particulares. 2. Las Unidades Territoriales por el Empleo y el Desarrollo Local y Tecnológico (UTEDLT) serán instrumentos de cooperación entre la Consejería de Empleo y Desarrollo Tecnológico y las Corporaciones Locales de Andalucía, que se complementarán con los Agentes Locales de Promoción de Empleo (ALPE’s), cuando se haga realidad el proyecto de SAE diseñado por la Consejería en consenso con la FAMP. Se definen como “dispositivos de desarrollo local y centros de gestión” que actúan sobre el territorio con la idea de potenciar y promocionar la zona a efectos de facilitar la generación de más empleo y de acercar los servicios de desarrollo local, principalmente los que tiene la Consejería de Empleo y Desarrollo Tecnológico, al ciudadano/a. Sus objetivos son: Promover la creación de empleo, a través de la dinamización y el aprovechamiento de los recursos endógenos de las zonas, de la promoción del desarrollo local, del apoyo y la potenciación de su :tejido productivo, etc.; Facilitar al ciudadano/usuario la tramitación más rápida de cuantas gestiones requiera en relación con los servicios que ofrece la Consejería de Empleo y Desarrollo Tecnológico de la Junta de Andalucía. Sus funciones: 1. Información, mediante la divulgación, asesoramiento y asistencia a las empresas, agentes sociales, centros de formación de la localidad interesados en participar en los diversos programas existentes y, en especial, los de la Consejería de Empleo y Desarrollo Tecnológico. Esta función permite tener 9 conocimiento del número y características de los beneficiarios atendidos; 2. Prospección del mercado de trabajo, a través de estudios cuantitativos y cualitativos del mercado laboral, se trata de conocer la evolución de los diversos sectores de actividad, fundamentalmente determinar cuáles son las ocupaciones más demandadas y las nuevas oportunidades de empleo; 3. Promoción de proyectos y otras iniciativas de desarrollo local, en colaboración con otras entidades de su ámbito de actuación, dirigidas al desarrolio endógeno de su zona de actuación; 4. Análisis del entorno socioeconómico, mediante análisis periódicos, cuantitativos y cualitativos de su ámbito de influencia, que permita conocer debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades, y en última instancia que aporte la información para el posterior diseño de las líneas de trabajo para las nuevas políticas de desarrollo económico, local y empleo; 5. Promoción del autoempleo ofreciento servicios de atención personalizada: 6. Creación de empresas, mediante divulgación de los programas existentes, particularmente los de la Consejería de Empleo y Desarrollo Tecnológico. Se atenderá especialmente a las empresas de contenido tecnológico, así como a las que introduzcan el uso de las Nuevas Tecnologías. Asimismo se procurará la animación de emprendedores beneficiarios de las acciones de formación profesional. 7. Dinamización y mejora de la competitividad de Pymes del territorio, contribuyendo su adaptación a las nuevas condiciones, en un mercado más amplio no sólo por la integración definitiva en la Unión Europea sino también por la inminente introducción del Euro; 8. Potenciación de los Recursos Humanos del territorio, a través de la gestión de los Servicios integrados para el Empleo; 9. Diseño y ejecución de Planes de formación dirigidos a las empresas y trabajadores desempleados del territorio de influencia; 10. Apoyo a la gestión administrativa: registros de documentos, agilización de trámites administrativos, estudio, análisis, y mejora de los expedientes, remisión a las Delegaciones Provinciales correspondientes para su Reso\uclon. Su estructura: a) Equipos de las Unidades: aa) El equipo básico que cada una de las Unidades (UTEDLT), que se estiman en 99, estará compuesto aproximadamente por unas cinco personas, técnicos y auxiliares administrativos. El tamaño del equipo podrá depender del número de municipios y la población que atienda; ab) Las UTEDLT se complementarán con Agentes Locales de Promoción de Empleo (ALPE’s), que serán de ámbito municipal. Los ALPE’s estarán adscritos a una UTEDLT; ac) Los equipos mencionados deben poseer experiencia para el desarrollo y el empleo. Otra formacton y expenencta: programas e iniciativas comunitarias, nuevos yacimientos de empleo, planificación, conocimiento e investigación territorial, mercado laboral, nuevas tecnologías, etc; ad) Las UTEDLT deberán tener una persona responsable de todas las funciones que se lleven a cabo en las mismas. b) Equipos Provinciales. Con funciones de coordinación y aglutinación de toda la información a nivel provincial de las unidades existentes en su provincia, así como la elaboración de documentación a nivel provincial, que nos permaita obtener un conocimiento de cada una de las provincias. c) Equipo Central. Con funciones de coordinación y aglutinación de toda lainformación de las provincias, así como la elaboración de documentación a nivel regional. d) Apoyo. Así mismo, se pondrá en marcha una Web y una Red informática –Intranet- que permita la comunicación fluída de las Delegaciones Provinciales, las Unidades, la Consejería de Empleo y Desarrollo Tecnoiógico y las Corporaciones Locales. Su articulación en la Red de UTEDLT se realizará mediante la firma de un Convenio Marco entre la FAMP y la Consejería de Empleo y Desarrollo Tecnológico. 10 Asímismo se firmarán Convenios de colaboración para la puesta en marcha, entre la Consejería de Empleo y Desarrollo Tecnológico y las Administraciones Locales donde se ubicarán las distintas Unidades Territoriales de Empleo y Desarroilo Local y Tecnológico. El citado Convenio recogerá de manera expresa, además de los objetivos, las funciones y los compromisos de cada una de las partes firmantes. Los Convenios recogerán la constitución de una Comisión de Seguimiento, en la que participarán: La Delegación de Empleo y Desarrollo Tecnológico, los Ayuntamientos que se encuentren englobados en el área de influencia de la Unidad, y contará con la participación de los Agentes Sociales y Económicos. De acuerdo con las posibilidades de implementación del modelo global, se firmarán convenios para la puesta en marcha de los Agentes Locales de Promoción de Empleo (ALPE’s). Simultáneamente se iniciarán los procesos de creación de Consorcios, incluyendo los ALPE’s que pudieran corresponderle, con el objetivo de crearlos y hacerlos operativos dentro del año en curso. Constituídos los mismos, las funciones mencionadas anteriormente, serán ejercidas por los Consejos Rectores. 3. Los ayuntamientos, por sí o consorciados con otros y/o con empresas, son los auténticos protagonistas de las políticas de desarrollo y empleo que IULVCA propone. Ese protagonismo no es para sustituir a nadie que quiera adoptar iniciativas de empleo o desarrollo local, comarcal, etc., sino para generar sinergias, planificar y proporcionar instrumentos, pegados al terreno. Deben adoptar iniciativas de promoción del autoempleo y de la economía social. La constitución de mecanismos estables de información, promoción y apoyo dependerá del nivel de gestión que sean capaces de soportar los presupuestos municipales; pero el SAE deberá garantizar al menos un agente mancomunado para cada grupo de municipios de los que componen las zonas de actuación (cuasi comarcas) del mismo en cada provincia. Como regla general, los ayuntamientos deberán tender a tener sus propios mecanismos de creación de empleo (IMFE, o agente de desarrollo local y empleo). Es importante conseguir la no burocratización de esta función. B) La iniciativa social 3. La economía social es un término que engloba a las cooperativas, sociedades laborales (sales), empresas de inserción (EI), y cuantas fórmulas de empresariado social puedan darse en el futuro. El asociacionismo en este sector es una realidad muy importante. La izquierda debe abstenerse de manipular o clientelizar estas organizaciones, con las que institucionalmente hay que estrechar lazos, y desde nuestra acción institucional hay que apoyar con eficacia. 4. Las Empresas de Inserción (EI). Son empresas especiales que pretenden englobar actuaciones de inserción laboral y social, uniendo en torno a la producción de una empresa competitiva en el mercado, a trabajadores y a excluídos, con problemáticas de integración social (drogadictos en procesos de rehabiltiación, expenados o reclusos en tercer grados, personas afectadas psicológicamente por el paro prolongado, etc.). Su capacidad de sobrevivir en el mercado depende del acierto en la elección del objeto productivo, en las condiciones de su financiación, y en las ayudas que las administraciones les den en la contratación pública. Pretenden que se regulen mecanismos para primar su contratación por los ayuntamientos y demás organismos 11 públicos. Se asocian en la FEDDEI estatal, en forma de red, y en Andalucía en una asociación integrada en aquélla. 5. Los emprendedores (el término tiene connotaciones neoliberales en dos sentidos: alude a la competitividad del mercado, y sirve para echar la carga de la responsabilidad del paro a quienes no encuentran trabajo, que se supone, que a sensu contrario “no son emprendedores”; pero ¿quién le teme a las palabras?) son en definitiva personas que se arriesgan a autoemplearse y emplear a otros, emprendiendo un proyecto empresarial concreto. Quizá la diferencia es que utilizan fórmulas de organización más “mercantiles” (S.A., S.L., C.B.). 6. Los autónomos es un término equívoco sociológicamente hablando, pues hace alusión a un régimen de la Seguridad Social (RETA) donde se engloban todos aquéllos que no son trabajadores por cuenta ajena; pero a su vez se diferenciarían de los emprendedores o la economía social porque, pudiendo éstos ser “autónomos” desde el punto de vista del sistema de protección social a que están acogidos, sin embargo los autónomos propiamente dichos se consideran trabajadores por cuenta ajena, porque son un eslabón más de una cadena productiva (camioneros propietarios de su propio camión o flotilla de camiones, que están ajenos a la plantilla de la empresa de producción porque ésta ha externalizado el servicio de distribución, por ejemplo; cuadrilla de albañiles, donde el jefe es el autónomo y los demás o son sumergidos o son asalariados “con derechos”, pero ajenos a la empresa contratista o subcontratista) 7. Las Pymes y las explotaciones familiares agrarias. 8. Colectivos sectoriales de mujeres, de jóvenes, de discapacitados o de inmigrantes (mujer empresaria, de gran dinamismo y capacidad a la hora de evitar la permanencia más allá de los dos primeros años críticos de las iniciativas empresariales; jóvenes empresarios; asociaciones de discapacitados, acoges y asociaciones de inmigrantes). *** Idea núm.12: Sectores clásicos.- A) Todo lo que se invierta en formación es poco, aunque debe seguir insistiéndose en la revisión permanentemente de dónde y cómo se realizan las inversiones en formación. El problema de la formación debe abordarse desde una reforma estructural de la Educación en general, de la Formación Profesional y la Universidad en particular, y del contrato de formación. Pero no debemos perder el punto de vista que nos ocupa, esto es, la micropolítica de las políticas activas: Las fórmulas de casas de oficio, escuelas-taller, talleres de empleo, son ya clásicas entre nosotros. No debemos consentir que su adjudicación se convierta en un instrumento de clientelismo político. Pero existen muchas más, desde la iniciativa pública o privada, que se deberían fomentar, tanto en la cualificación profesional, como en las actividades complementarias a la misma (actividades extraescolares, o de preparación de oposiciones, por ejemplo). B) Una política inversora que mejore la eficiencia de nuestro sistema productivo, a través de la mejora de la calidad de nuestros productos y de la Investigación y el Desarrollo. Las viejas producciones autóctonas son a veces la base del desarrollo, sin mirar hacia otros horizontes. Pero la auténtica reforma agraria, por ejemplo, consiste 12 en la búsqueda de instrumentos de racionalización del sector, de aplicación de los nuevos conocimientos científicos que se poseen sobre el medio y sobre el mercado, de forma que se optimicen los resultados económicos del mismo: el asociacionismo, la dimensión de las explotaciones agrarias (potencialidad de las explotaciones familiares agrarias), la racionalización de los cultivos, las nuevas técnicas de producción, las plataformas de comercialización de los productos. La idea complementaria de ésta es justo la contraria. Si una fuente de riqueza está esquilmada o el mercado la ha convertido en marginalmente rentable, hay que hacer un rápido diagnóstico de sus potencialidades y crear la estrategia adecuada: o abandonarla y sustituirla por otra, o buscar las fórmulas para convertirla en rentable (pero no sólo económicamente, sino también socialmente; porque el mercado a su libre albedrío suele buscar la rentabilidad en la desregulación, la economía sumergida, la sobreexplotación de mujeres, inmigrantes, niños, etc.: esto es lo que ocurre en comarcas deprimidas con el textil, el calzado, la agricultura). C) La participación de lo público en el diseño de una política de reindustrialización selectiva, en la que se contemplen procesos de producción limpios. Especialmente en comarcas mineras en declive (Minas del Marquesado del Zenete, por ejemplo), hay que urgir la inversión por parte de la Junta en producciones alternativas. Llevar a cabo políticas industriales activas, coordinando las acciones de las comunidades autónomas y las del Estado. Se trata de un giro de 180 grados en la política industrial. La existencia de un sector público industrial, recapitalizado, y la existencia de inversiones públicas, junto con incentivos que propicien las inversiones privadas en el sector industrial, es fundamental. D) Plan de Viviendas (de VPO y en alquiler). Planes de infraestructuras, desde el sector público fundamentalmente, diseñadas desde los respectivos ámbitos locales, comarcales y provinciales, con criterios de un urbanismo ecológicamente sostenible. *** Idea núm.13: Sectores emergentes.- El Libro Blanco de Delors (1993) enunciaba algunos sectores emergentes susceptibles de obtener con facilidad nuevos empleos. Los nuevos yacimientos de empleo (NYE), serían los siguientes: Los servicios de la vida diaria: Los servicios a domicilio (preparación y distribución de comidas a domicitio; acompañamiento y prestación de otros servicios a personas mayores en su domicilio; servicios a personas enfermas en su domicilio; servicios de limpieza y planchado; servicios administrativos). 2. El cuidado de los niños (cuidado y educación de niños por debajo de edad escolar, actividades deportivas, recreativas y culturales para niños en edad escolar). 3. Las nuevas tecnologías de la información y de la comunicación (servicios a particulares en el campo de la cultura, de la salud, de la comunicación, del ocio como telemedicina, formación a distancia, teletrabajo, etc..; servicios a las empresas 13 (información económica, servicios comerciales, contabilidad a distancia, asistencia especializada, etc..); servicios públicos (teleservicios, acceso a bases de datos, servicios administrativos de información, etc.). 4. La ayuda a los jóvenes en dificultad y la inserción (ayudas en los deberes escolares; centros de inserción profesional; educación de calle; empresas de inserción). B) Los servicios de mejora del marco de vida: 5. La mejora de la vivienda (rehabilitación de viviendas deterioradas; mantenimiento de las viviendas). 6. La seguridad (servicios de vigilancia y acogéda; instalación de materiales de seguridad; parkings; televigilancia). 7. Los transportes colectivos locales (nuevas formas de organización de Ios transportes colectivos; servicios especializados con determinados colectivos de usuarios). 8. La revalorización de los espacios públicos urbanos (rehabilitación de espacios públicos y barrios; mantenimiento de espacios públicos; iniciativas económicas y comerciales en zonas antiguas de las ciudades). 9. Los comercios de proximidad (comercios en zonas rurales; comercíos en los barrios urbanos no céntricos; puntos comerciales multiservicio en zonas desfavorecidas). C) Los servicios culturales y de ocio: 10. El turismo (turismo rural y cultural y otros nuevos fenómenos turísticos; servicio de acompañamiento y acogida turística; nuevos servicios turísticos telemáticos). 11. El sector audiovisual (producción y distribución de películas; producción y distribución de emisiones televisivas; televisión interactiva; acceso a distancia a bibliotecas y museos). 12. La valorización del patrimonio cultural (creación y restauración de lugares de interés cultural; servicios ae difusión de la cultura y acogida turística). 13. El desarrollo cultural local (actividades de valorización de los recursos y actividades culturales locales como música, folklore, teatro, gastronomía, artesanía, etc..). D) Los servicios de medio ambiente: 14. La gestión de los residuos (recogida selectiva y tratamiento de los residuos; actividades de investigación para la reutilización de los materiales recuperados; nuevas técnicas de automatízación del tratamiento de los residuos). 15. La gestión del agua (realización y gestión de infraestructuras de gestión del agua; servicios de investigación tecnolog:ca y trasferencia del saber hacer; asistencia a ia 14 gestión de infraestructuras locales; explotación turística y deportiva de las reservas hidráulicas). 16. La protección y el mantenimiento de las zonas naturales (actividades de protección y mantenimiento de las zonas naturales; actividades de investigación agronómica; creación y gestión de parques y reservas naturales). 17. La normativa, el control de la contaminación y las instalaciones correspondientes (producción de bienes y de servicios ligados a tecnologías menos contaminantes; exportación del saber-hacer y de tecnologías; desarrollo y aplicación de nuevas tecnologías de economía de la energía; mejora de la gestión de los sistemas de control de la contaminación y el ruido). Además de los ámbitos de actuación del Libro Blanco (que nos puede servir para avivar la imaginación), se puede también proponer otros ámbitos no explicitados en el recuento exhaustivo que hace el documento de Delors, cuyo contenido está abierto para que aportemos nuevos ámbitos que nuestra experiencia vaya descubriendo: 18. Agricultura ecológica e industria agroalimentaria de carácter artesanal (fenómeno reciente en España pero con cierta tradición en otros países europeos importadores de productos elaborados en España). 19. La restauración de obra pública (obligada en la UE y que tiene efectos considerables de la inversión sobre el empleo). 20. Energías alternativas (eólica, solar). *** Idea núm.14: Instrumentos de financiación viejos y nuevos. En términos generales, IU ha propuesto la creación estratégica de Fondos de Inversión Obligatoria que permitan avanzar en el control democrático del uso de una parte del excedente empresarial. Y junto a esto, inversión de la tendencia regresiva en la política fiscal. Son sobre todo los movimientos de capital, las transacciones monetarias internacionales, las que hay que gravar a fin de ralentizar del movimientos de capital especulativo, sin por ello desanimar el comercio internacional B) En términos concretos, existen múltiples fórmulas que conviene conocer y utilizar o ayudar a utilizar a quienes recaben nuestro apoyo: Incentivos a la contratación estatales, andaluces o municipales. Aunque critiquemos algunos de ellos, mientras existan son instrumentos de reducción de costes laborales que pueden ayudar a crear empleo, evitar paro o crisis empresariales, etc. (Su descripción figura en el Anexo I). 2. Fondos europeos, en base a progranas susceptibles de financiar proyectos en todo o en parte, con concurso de parte de financiación del Estado español o de la comunidad autónoma de Andalucía, o de las diputaciones provinciales, o de los ayuntamientos 15 (sobre todo los grandes). Pero existen redes de instituciones que agilizan el contacto con la UE. (Su descripción figura en el Anexo II). 3. El IFA o otros organismos de la Junta de Andalucía (EPSA...) pueden ayudar a conseguir financiación o apoyo financiero a través de entidades bancarias o de ahorro. 4. Inversiones de las diputaciones y cajas de ahorro o rurales. Los ayuntamientos pueden establecer convenios o conciertos-marco de financiación y padrinazgo de proyectos a consensuar en el plazo de vigencia establecido en el protocolo respectivo. Nuestra presencia institucional en estos organismos y entidades, así como en los consorcios, mancomunidades, etc., es fundamental para garantizar que existe equidad y cohesión en los criterios de reparto entre los pueblos y comarcas del ámbito territorial en que actúan aquéllos. 5. Los fondos del AEPSA (antiguo PER) para proyectos de obras en los pueblos han sido un elemento decisivo para la creación de infraestructuras, arreglo de edificios, calles, etc. en los pequeños municipios del ámbito rural. La derecha del PP actualmente en el Gobierno no olvida su hostigamiento contra estos programas cuando estaba en la oposición. Ha empezado por recortar el segundo reparto anual, para ir restringiéndolos cada vez más. En los próximos meses IULVCA debe aprestarse a defender estos fondos del AEPSA, tanto los que son para las obras, como el subsidio del paro. 6. Microcréditos. La idea viene de las ayudas crediticias que se les ha facilitado a determinados países en vías de desarrollo, con gran eficacia. Se está trasladando a la iniciativa de autoempleo y promoción empresarial en países de la UE (Le Monde,dimanche 29 – lundi 30 avril 2001). Son fondos financieros destinados a participar en proyectos empresariales surgidos de la actividad de los diferentes agentes o instituciones de formación-empleo o de promoción empresarial, promovidos por entidades bancarios y sobre todo de ahorro y los agentes o instituciones respectivos, abiertos a la participación de otras entidades financieras y empresariales, dotados con un volúmen de dinero convenido, aplicable en distintos conceptos: Capital Semilla para empresas de nueva creación. - Capital Arranque para la puesta en marcha y los inicios de una empresa. - Capital Desarrollo para la expansión de empresas ya establecidas. 7. Capital-riesgo. Las entidades bancarias o de ahorro pueden apostar por participar directamente en el riesgo empresarial mediante su incorporación a los mecanismos directivos y de control de la organización misma de la empresa. *** Idea núm.15.- Necesidad de planificar.- Cada UTEDLT deberá tener una planificación que defina objetivos, articule instrumentos y verifique resultados en orden a los principios de - Eficacia (en orden al pleno empleo de calidad, estabilidad, inserción) 16 - Equilibrio (igualdad y cohesión entre comarcas y municipios) - Igualdad (de géneros y edades) - Subsidiariedad (el principal papel de los instrumentos públicos es propiciar y ayudar a la aparición de sinergias e iniciativas individuales, asociativas y de colectivos). Granada, 21 Mayo 2001 17