Download Universidad con perspectiva de género

Document related concepts

Feminismo de la igualdad wikipedia , lookup

Igualdad de género wikipedia , lookup

Feminismo liberal wikipedia , lookup

Profeminismo wikipedia , lookup

Feminismo islámico wikipedia , lookup

Transcript
Universidad con perspectiva de género
Tomado de http://www.somosmujeresperu.com
“El género es algo más que un término: significa toda una teoría y una praxis desde las
cuales se analiza la problemática vivencial de hombres y mujeres, así como las relaciones
entre estos dos colectivos, con el fin de conseguir un mundo más justo e igualitario”.
Con el convencimiento de que la Universidad desempeña un rol fundamental en la
transformación de la sociedad para conseguir la igualdad real de hombres y mujeres, la
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad Nacional de Trujillo, con el
auspicio de la Fundación Hanns Seidel, Editora Normas Legales, Notaría Távara y Revista
Somos MUJERES, llevó a cabo el I Congreso Universitario sobre Género y Saber
Científico.
Fue punto de encuentro de reconocidas docentes y mujeres de éxito de la región, cuyo
objetivo principal era concienciar sobre la perspectiva de género y su aplicación en las
distintas disciplinas del saber. He aquí, un condensado de algunas ponencias:
CONSIDERACIONES DE GÉNERO EN LA SALUD
Dra. Rosa Aznarán Vega
Docente Facultad de Ciencias Médicas UNT
Existen varias teorías que han tratado de explicar la no inserción de la mujer en un lugar
más activo y representativo de la sociedad. Frente a esta realidad, ¿qué hacen por
nosotras las instituciones encargadas de brindar salud y educación? Hacemos las
siguientes consideraciones:
No se considera el papel de la salud como criterio de equidad entre los sexos. Las políticas
de salud dan prioridad a las mujeres (madres) como un grupo de riesgo o grupo
vulnerable, las cuales junto a los niños, discapacitados y ancianos se les considera grupos
socialmente “débiles” y no capaces de aportar al desarrollo del sector.
Las políticas y programas de salud son de corte asistencialista, dirigidos a mujeres pobres
y bajo tres supuestos básicos:

Las mujeres son receptoras pasivas del desarrollo

La maternidad es la función prioritaria

La crianza y socialización de los hijos, así como el cuidado de la familia es su
participación más activa en todos los aspectos del desarrollo.
En tal contexto se visualizan los Programas de Planificación Familiar como una estrategia,
no sólo para reducir los riesgos reproductivos, sino para eliminar las barreras relativas a
los embarazos numerosos y muy seguidos, con el fin de facilitar que la mujer pueda
insertarse en el mercado de trabajo remunerado en condiciones más favorables.
No es cierto que mejorando la salud de las mujeres y reduciendo el número de sus hijos
se va a contribuir a la igualdad. Es necesario superar la noción del cuerpo femenino como
máquina reproductora, dejar de pretender que todos los problemas de las mujeres se
explican por sus “hormonas”.
Es necesario que los programas y proyectos en salud que tienen que ver con la
sobrevivencia y protección de las mujeres, incluyan objetivos y contenidos que
fortalezcan política y organizativamente a las mujeres, de tal modo que sean ellas las que
decidan como ejercer el control sobre su vida y su cuerpo.
Es de vital importancia que el/la médico/a, estén preparados para ver en la mujer, no
sólo la paciente, sino un ser biopsicosocial, estableciendo una relación médico-paciente
más sincera, correcta, humana y respetuosa.
GÉNERO Y ORGANIZACIÓN
Mg. María Emilia Yanaylle García
Profesora en la maestría de Ciencias Sociales de UNT
El problema de la equidad de género está enraizado en los arreglos institucionales de las
organizaciones, como una “estructura profunda de las organizaciones”, esa colección de
valores, historia, cultura y prácticas que toman la manera “normal” de trabajar en las
organizaciones, basada en supuestos no cuestionados y las que a su turno reproducen
resultados inequitativos de género. Las reglas dicen quién debe entrar en la institución,
quién puede acceder a tales puestos y tales cargos, más que reglas escritas, son actos
que se asumen como “normales e indiscutibles”.
Decir que una organización o cualquier otra unidad analítica está “organizada” quiere
decir que la ventaja y la desventaja, la explotación y el control, la acción y la emoción, el
significado y la identidad, son definidos a través de patrones que diferencian la
masculinidad y la feminidad. El género no es una sumatoria a un proceso en marcha,
concebida como neutral al género. Más bien es una parte íntegra de un proceso que no
puede entenderse propiamente sin un análisis de género.
A semejanza de lo que se viene trabajando en los diferentes niveles e implicancias de la
incorporación del enfoque de género en los institutos de desarrollo, se puede hacer para
instituciones tan complejas como las universidades, las escuelas de educación primaria y
secundaria, y toda institución educativa que tiene por misión no sólo dar conocimientos
sobre artes y ciencias, también resocializar a los estudiantes.
Si no se garantiza que las diversas instituciones de la sociedad, sobre todo educativas,
promuevan y practiquen relaciones equitativas en el interior, sus posibilidades para
realizar cambios positivos en la sociedad están bloqueadas, “¿cómo enseñar lo que no se
hace?”
Por otro lado, no podemos dejar de hacer referencia a las resistencias que se suscitan
cuando se remueven los cimientos de nuestro constructo de identidad de género. Entre
otros ejemplos: Creer que con medidas legislativas se ha logrado la equidad, temor a la
desaparición de la familia, aversión a la homosexualidad, temor a ser abandonados por
las mujeres. Ya que al acceder éstas, a espacios públicos y de poder, el cuidado del otro,
responsabilidad tradicional de las mujeres, quedaría a la deriva.
VIOLENCIA PSICOLÓGICA DESDE LA PERSPECTIVA DE GÉNERO
Lic. Catherine Canales Herrada
Realiza trabajos de investigación
La violencia familiar es un problema de género, que se explica por las relaciones de Poder
que se establecen al interno de la familia, que facilita el uso de la violencia de quien ejerce
Autoridad, la cual se forma por imágenes de fuerza y debilidad, que manifiestan los
integrantes de la familia. Se conoce que las mujeres, en mayor porcentaje, son las que
soportan conductas violentas de parte de sus parejas. Mientras el varón ostenta poder
mediante la autoridad, la mujer manifiesta actitud sumisa desde su familia de origen,
luego con su pareja, lo que la hace vulnerable a la violencia. En un desequilibrio
permanente del poder de los hombres, hace que éstos resuelvan sus conflictos con
insultos, chantaje, humillaciones, indiferencia, manipulación de los hijos y golpes,
cuando consideran que no logran el control de las acciones de la mujer, porque temen ser
dominados o que ellas tomen decisiones y asuman actitud independiente o tengan
relaciones sexuales con otros.
Las mujeres maltratadas responden a la violencia, acatando órdenes, aislándose de su
entorno familiar y de amistades, dejándose humillar por sus esposos, como en la
actividad coital permitir ser utilizada como objeto de satisfacción sexual.
Este proceso de interacción de agresor y agredida, contribuye a bajar la autoestima de la
mujer, se incrementa el temor, la inseguridad y no toma decisiones porque considera que
no es capaz de tomar una buena decisión. Estos factores distorsionan su calidad de ser
humano e impiden a la mujer desarrollar su potencial creativo y participación en la
sociedad.
Y a todo esto ¿cuáles son las actitudes y percepciones de las y los Operadores que
atienden la problemática de Violencia Familiar?. Se ha observado que tienen actitudes de
indiferencia con relación al estado emocional de la mujer agredida. Con frecuencia,
cuando las mujeres hacen su denuncia en las diferentes instituciones, son interrumpidas
con el sonido de shhh, shhh, para que dejen de llorar, o para silenciarlas porque
consideran que es mucha información para su registro de denuncias. También, el
lenguaje verbal, postura y gesto de las y los Operadores trasmiten autoridad, expresión
de poder, distancia con la mujer que llega en estado emocional y físico deteriorado. Del
relato de una mujer maltratada se conoció que siendo su caso motivo de denuncia por
violencia familiar, éste no fue registrado como tal porque al médico legal y/o psicólogo a
quien le llegó la solicitud, no le pareció relevante; y al no seguir el trámite que
correspondía tuvo que volver a hacer la denuncia. Esto se produce porque las y los
operadores manejan mitos como los siguientes:
“Las lesiones físicas son las que más existen”
“La violencia sucede en hogares donde las mujeres no tienen papá, ni mamá o porque el
esposo llega y no le tienen la comida preparada”
“...el hombre por su naturaleza física, tiene fuerza y no tiene control de ella cuando se
encoleriza”
“...ella viene sufriendo, desde hace un año o dos”
“Los casos que denuncian se originan en los distritos periféricos...es por la parte
económica”
“Cuando se pelean entre mujeres, el hombre debe de solucionar el problema”
EL CURRÍCULO OCULTO
Mg. Clara Tello Gamarra
Prof. de Lengua y Literatura y Tecnología Educativa UNT
La escuela es una realidad rebelde al cambio. Resulta complejo asumir un nuevo currículo
que involucre la transformación de nuestras prácticas, entendiéndolo como experiencias
de aprendizaje en una relación entre los educandos y aquello que les permite aprender,
no incluye las experiencias espontáneas o algunas “sutilezas” que son obvias porque han
venido siendo aceptadas por la costumbre y la tradición.
Eisner nos dice que “los profesores enseñan más de lo que se proponen y los alumnos
aprenden más de lo que les enseñan los maestros”. Estos aspectos y fenómenos
educativos que no fueron planificados, sin embargo, ejercen decisiva influencia en el
aprendizaje, ubicándose dentro de lo que se ha dado en llamar el “currículo oculto” con
experiencias de aprendizaje no previstas.
Siendo la institución educativa el lugar donde se producen los aprendizajes, percibimos
una carencia de vivencias éticas y desarticulación en la convivencia de los diferentes
actores participantes dentro de la escuela y su conjunto, lo que impedirá desarrollar
aprendizajes éticos y mucho menos educar en democracia, a lo que suma la historia del
sexismo de larga data, muy difícil de superar en la conciencia de las personas
expresándose en la discriminación de género, de la cual naturalmente la escuela no se
sustrae, usándose en las relaciones de poder alojada profundamente en las
mentalidades, envuelta entre esquemas autoritarios y las relaciones formales allí
instituidas.
Resulta perentorio que las y los docentes lleguen a descubrir que su identidad de género
ha sido construida socialmente y que sólo así podrán identificar a la escuela como espacio
reproductor de la discriminación, la cual se sostiene, inconscientemente en el “currículo
oculto”, a través de una “pedagogía invisible”.
SOBRE LA MUJER Y GÉNERO EN ESPAÑA
Dra. Juana María González Moreno
Profesora Visitante de la Universidad de Granada-España
Aunque parezca paradójico, en España la inserción de los Estudios de Género tiene que
ver con la no consolidación del discurso feminista y, en consecuencia, con la necesidad de
paliar esta deficiencia.
Como doctrina que tiene como meta la mejora de la situación de la mujer, el feminismo
data del siglo XIX, desplegándose en tres tendencias básicas: el feminismo igualitario, el
feminismo socialista y el feminismo radical. Sin embargo, en España el feminismo quema
rápidamente etapas, de tal manera que en las Jornadas de Granada de 1979 opta por el
feminismo radical de la diferencia sin haber debatido los contenidos del feminismo de la
igualdad.
Pero al no haber maduración, no se consolidó el discurso feminista, y aún hoy el discurso
feminista es el gran desconocido.
Para paliar esta situación, algunos colectivos feministas utilizaron la Universidad o los
partidos como plataformas donde hacerse oír. Así, en la Universidad se constituyeron
Seminarios de Estudios de la Mujer dedicados a la divulgación y a la investigación. Por
otra parte, existe un feminismo en torno a los partidos políticos (feminismo institucional)
que se ha traducido también en Institutos de la Mujer como es el existente en Andalucía,
creado en 1983, y cuyo objetivo fundamental ha sido remover obstáculos para el
cumplimiento efectivo del principio de igualdad.
El reconocimiento de los Estudios de la Mujer y de Género en la Universidad, significa una
forma de validación social que complementa lo avanzado en otras esferas, concediéndole
un “status científico”, frente a su caracterización ideológica tradicional por su conexión
con el feminismo, al cual ciertamente no puede negar su origen.(...) Aunque hay que
admitir que queda mucho por recorrer, fundamentalmente hacia soluciones más
comprometidas como es la incardinación de la temática de mujer y género de modo
transversal en todas las áreas del conocimiento, alcanzando a la propia conformación de
los programas docentes, incardinación que significa una tercera fase en la consolidación
de los Estudios de la Mujer y de Género que aún no hemos superado en España.
EQUIDAD, OPORTUNIDAD Y FORTALECIMIENTO DE GÉNERO
Lic. Mery Botton Estrada
Decana Nacional del Colegio de Asistentes Sociales del Perú
La Equidad no tiene género, no es masculino ni femenino, si bien por cuestiones
semánticas se dice la equidad, pero es un principio que debe regir las relaciones sociales
tanto de los hombres como de las mujeres.
La Oportunidad, podemos considerarla como el eslabón que separa a los hombres de las
mujeres; mientras para los hombres la oportunidad es merecida, para las mujeres es un
favor. La lucha para lograr “igualdad de oportunidades” asume el respeto a los derechos
de la mujer y beneficios dados más que al hombre para recuperar el tiempo y el espacio
perdido que la sociedad asignó al hombre antes que a la mujer y que se requiere
equiparar ya.
Lograr equidad e igualdad de oportunidades a nivel profesional es sencillo expresarlo
pero difícil practicarlo, sobre todo cuando tenemos patrones sociales y culturales
arraigados como parte de nuestra vida.
Par mí, como trabajadora social, es importante aplicar el enfoque de género en mi
trabajo, porque ayuda a comprender que hombres y mujeres tienen condiciones
socialmente diferentes para vivir y relacionarse; permite reconocer que la realidad social
es diversa; facilita atender las necesidades e intereses de hombres y mujeres de acuerdo
a sus condiciones; mejora el análisis de los procesos sociales; posibilita entender la
relación estrecha y directa entre género y desarrollo sostenible; contribuye a impulsar
procesos de equidad en políticas, programas, proyectos y actividades para hombres y
mujeres.
Somos conscientes de que la participación de las mujeres ha aumentado en el mercado
de trabajo, pero ¿se ha previsto las exigencias de transporte, el horario escolar, el
cuidado de los niños, etc.? Que son aspectos que de una u otra manera complican el
trabajo de la mujer o la limitan.
El crear políticas de conciliación de las responsabilidades familiares y profesionales, tanto
de los hombres como de las mujeres, supone proporcionar opciones. Si bien hay avances
y esto está contemplado en las políticas gubernamentales, en las políticas sociales, pero
¿qué tanto podemos apreciar realmente en la práctica?
Queremos que nuestras relaciones sean equitativas, armónicas y solidarias entre
varones y mujeres, que se dé igualdad de derechos y oportunidades para todos, y no sólo
para los individuos, sino también para las instituciones, las organizaciones, para los
gobiernos.
GÉNERO, MUJER Y DESARROLLO
Mg. Yolanda Rodríguez Núñez
Docente principal de la Facultad de Enfermería de UNT
Vice Presidenta de la Red Nacional de Promoción de la Mujer
El tema de mujer y desarrollo es muy complejo puesto que se da en un contexto socio
político de un país subdesarrollado donde se agudiza la desigualdad, por lo que el cambio
tiene que ver con el cambio, transformación para mejorar la calidad de vida.
Los elementos que definen el desarrollo humano son:
. Suficiencia Económica, contar con recursos económicos mínimos para atender
nuestras necesidades básicas.
. Realización Personal, logros en diversos campos ligados a lo afectivo, valorativo,
intereses y aspiraciones individuales.
. Libertad Social, moverse y actuar con suficiente libertad para elegir el tipo de
economía, relaciones, gobierno y forma de vida.
. Identidad Cultural, respeto a la cultura de las personas, a su visión de vida,
cosmovisión, modo de ser, costumbres, tradiciones, etc.
Para que la mujer pueda participar verdaderamente en la Toma de Decisiones es
necesario dar pasos importantes respecto a:
. REPRODUCCIÓN, con programas que permitan a la mujer adquirir conocimientos,
capacidad organizativa, bienes y servicios que hagan de esta función una tarea menos
ardua.
. PRODUCCIÓN, promoviendo la independencia y los derechos económicos de la mujer;
proporcionar capacitación y acceso a los mercados, información y tecnología,
particularmente a las mujeres de bajos recursos; reforzar la capacidad económica y las
redes comerciales de la mujer.
. EJERCICIO DE PODER, adoptando medidas que garanticen a la mujer igualdad de
acceso y plena participación en las estructuras del poder y en la adopción de decisiones.
. DERECHOS HUMANOS, mediante la plena aplicación de todos los instrumentos de
derechos humanos sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la
mujer.
. COMUNICACIÓN, aumentando el acceso de la mujer en los medios de difusión,
expresando sus ideas y adoptando decisiones en la conducción de ellos, así como en las
nuevas tecnologías de comunicación.
DIFUSIÓN DE TEMAS DE GÉNERO EN LA PRENSA
Lic. Cristina Alvarado de Cava
Directora de la revista Somos MUJERES
Los medios de comunicación masivos, dirigidos mayormente por varones, no ayudan a
definirse a la mujer, muchas veces son mensajes opuestos. Por un lado apoyan la
liberación de la mujer y por el otro reafirman la concepción tradicional de lo femenino.
Muchas veces reconocen el cambio de la mujer, su incursión positiva en el campo laboral,
empresarial y político. Pero siguen emitiendo en grandes espacios publicitarios y
titulares, la imagen de mujer seductora, dependiente, sumisa, objeto del varón.
Sin embargo, la mujer ya sabe deslindar una prensa parametrada, con mensajes
ambivalentes; de una que le brinda información y orientación con equidad. Aunque
continúa interesándose en las historias de amor, cultura doméstica, cosmética y
vestidos, ubicados en la Sección Femenina de la prensa masiva y en revistas dirigidas a
la mujer; ya las amas de casa no se sienten atacadas con artículos que proponen la
independencia económica de la mujer, y la mujer ejecutiva difiere con el dicho popular
que detrás de un gran hombre hay una gran mujer, buscando espacios de promoción a su
gestión.
Las mujeres profesionales e intelectuales buscan la prensa especializada en su rama y
trabajan artículos de opinión para los medios masivos; aunque sin desestimar las revistas
“femeninas” que las relaja.
En base a mi experiencia de 8 años en la dirección de Somos MUJERES, una revista
comercial con perspectiva de género, dirigida a las mujeres peruanas norteñas, puedo
decirles que no ha sido fácil ser aceptadas por nuestro público objetivo. Tuvimos que
recurrir a diversas estrategias para que sean bien recibidos los mensajes que las
invitaban a adoptar actitudes de eficiencia y competitividad para triunfar en la vida, lo
que implicaba abandonar las artes de seducción, de la que tradicionalmente se han valido
las mujeres para obtener los favores del entonces llamado sexo fuerte.
Cuando los temas más leídos eran: “Fórmulas infalibles para atraer a tu hombre”,
“Diseños para hacer voltear cabezas varoniles a su paso”, “Tres recetas por las que él la
amará”; Somos MUJERES preparó artículos con estilo propio, sensibilizando a la opinión
pública para la mayor valoración de la mujer, y, sobre todo, sacando a luz en artículos de
opinión, reportajes y entrevistas a mujeres que podían ser émulo de sus congéneres.
Hacia el tercer milenio, en que los grandes logros de la mujer en igualdad de derechos, en
acceso al campo laboral, en leyes contra la violencia familiar; aún no ha logrado erradicar
los maltratos, la discriminación, la pobreza y la falta de oportunidades de trabajo para las
mujeres; Somos MUJERES, la única revista comercial con perspectiva de género del Perú,
reconoce que aún es enorme la tarea y que falta mucho camino por recorrer para lograr
que los medios masivos de prensa adopten mensajes con equidad de género.