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2. EL PROBLEMA
INTRODUCCIÓN
Este capítulo describe el procedimiento para la identificación de cadáveres N.N. y el
problema que esto ha significado en nuestro país, tanto desde el punto de vista social como
del económico; además, reseña la herramienta que el estado colombiano ha dispuesto para
enfrentarlo, la ley 38 de 1993.
Este capítulo se ha estructurado en 3 secciones. En la primera se hace una definición del
problema. En la segunda se describe la forma de realizar una identificación de una persona
utilizando la carta dental. En la tercera se hace un resumen.
2.1 DEFINICIÓN
Uno de los problemas generados por las guerras, es la dificultad para el reconocimiento de
los muertos que ellas producen; las guerras que se han dado en Colombia no son ajenas a
esta problemática, en especial la que se dio por causa de las acciones del narcotráfico, a
finales de los años 80 y principios de los 90, donde los ajusticiamientos no terminaban con
la muerte de la víctima, además, a los cuerpos sin vida se les mutilaban sus características
físicas – ya fuese por incineración del cuerpo, por amputación de manos o por quemaduras
de huellas y rostro -. Esto hace imposible la identificación de las personas por el método de
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la dactiloscopia. En busca de resolver este problema, en Antioquia, a través del entonces
senador de la República Dr. Dario Londoño Cardona, asesinado en Medellín, el Dr. Cesar
Augusto Giraldo, director del Instituto Nacional de Medicina Legal Regional Noroccidente,
se trabajó la idea de proponer una ley que permitiese construir un banco de datos con base
en las cartas dentales de los ciudadanos colombianos y así lograr a través de estas – en una
forma eficaz y económica -, el reconocimiento de los cadáveres, pues se estaba
“Argentinizando” la guerra en el país y que por esa época en solo Antioquia se llegó a
registrar la cifra de 900 cadáveres sin identificar al año. [Gira00]
Se ha logrado desarrollar un método científico para el reconocimiento de personas a través
de pruebas de ADN, el cual es un método muy eficaz pero altamente costoso, pues su
proceso contempla el hacer múltiples pruebas a todos aquellos que se presume son
familiares de sangre con el individuo que se pretende identificar, como también a éste
último, lo cual limita su uso a países industrializados. [Gira00]
En Estados Unidos, al igual que en Europa se crearon dos odontogramas o cartas dentales
(Véase Figuras 4 y 5). El primero de ellos utiliza el método de los cuadrantes y el otro
consiste en enumerar los dientes del 1 al 32. A través de un formato (Véase Figura 5), se
puede, desde el momento en que el odontólogo revisa a un paciente, tener los datos
referentes a un individuo con una codificación que es estándar y sencilla de utilizar. Luego,
con base en el formato llenado por el odontólogo, un operador
realiza la lectura e
interpretación de lo descrito en el y alimenta el sistema. Este proceso es de tipo manual.
En el momento en que se requiere hacer una identificación, el forense introduce los
códigos asociados a la carta dental del cadáver y el sistema por comparación le ofrece las
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cartas dentales, cuyos códigos almacenados coinciden con los entrados por el usuario. Este
método no es muy óptimo
debido a que un gran número de características medico
odontológicas son llenadas en forma de comentarios por el odontólogo, haciendo que el
número de cartas dentales de la respuesta dada por el sistema a las consultas del forense,
sea muy alto y que el forense deba revisarlas con base en los comentarios para poder tomar
la decisión correspondiente a la identificación. [Vane00]
Figura 4. Carta dental con el símbolo de diente dibujado como un rectángulo
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Figura 5. Carta dental utilizada en Estados Unidos
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Por los años 1978 – 1979 el Dr. Carlos Saín, profesor de la facultad de odontología de la
Universidad de Antioquia y quien acababa de llegar de los Estados Unidos de un curso de
verano relacionado con el tema, trabajó en el reconocimiento de dos personas que en
apariencia tenían tratamiento dental, se les creó la carta dental correspondiente y se divulgó
profusamente en los diferentes periódicos existentes en la época, con la colaboración de los
odontólogos de la región que leyeron el periódico se logró la identificación de los dos N.N.
[Gira00]
En enero de 1993 el congreso de la República de Colombia, aprobó la Ley 38; la cual dice
que se unifica el sistema de dactiloscopia y se adopta la carta dental con fines de
identificación y para ello se adopta un modelo de carta dental. (Véase Figuras 6 y 7).
“La carta dental es la descripción de todas las características buco dentales que presentan
las personas y por ello es imposible encontrar dos cartas dentales iguales en personas
distintas” [Vane99].
Después que se pierdan los tejidos blandos por putrefacción, o por incineración, y no hay
forma de identificación por características físicas – Indiciaria -, o por huellas digitales –
Fehaciente -, la carta dental es fundamental como método fehaciente de identificación;
debido a que el esmalte del diente es el tejido más duro que hay en el organismo y los
dientes permanecen después de que se pierden los tejidos blandos.
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Figura 6. Carta dental Colombiana
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Figura 7. Carta dental de Trabajo
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Hasta el momento la identificación utilizando cartas dentales es realizada por personal
altamente calificado – odontólogos forenses -, y en forma manual, primero descartando por
edad y sexo y luego buscando por coincidencia las diferentes características asociadas a las
piezas dentales, entre todas las cartas existentes en un banco de datos, lo cual no solo hace
ineficiente el proceso, sino muy costoso.
El proceso empieza con el levantamiento de la carta dental del cadáver, por parte del
odontólogo forense. Luego, a través de los posibles familiares de la persona a identificar, se
consigue la o las cartas dentales premorten con los odontólogos que lo atendieron en vida y
el odontólogo forense procede a hacer el cotejo de la siguiente manera: [Vane00]
1. Análisis de los dientes sin erupcionar por razones de edad.
2. Dientes faltantes y o ausentes, cualificándolos.
3. Dientes con caries, identificando las superficies donde se presenten.
4. Malposición dental de piezas.
5. Malformación de piezas, identificando estas por su posición.
6. Obturación de dientes, identificando las piezas y superficies obturadas y el material con
el cual se realizó el trabajo.
7. Otras patologías en los tejidos blandos (Ej. Cálculos).
8. Prótesis existentes y los diferentes tipos (total, parcial, fija), y el material usado en su
construcción.
9. Tratamientos de ortodoncia y endodoncia.
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10. Luego el odontólogo forense determina, con base en el cotejo entre las cartas dentales
pre y pos morten, las coincidencias y las discrepancias que existan entre ellas y que pueden
llevar a una conclusión absoluta de identificación o descarte.
Como se puede observar, en todas las etapas del proceso debe estar presente el odontólogo
forense para que el resultado sea confiable, lo que incrementa los costos del
reconocimiento, ya que esto toma un tiempo bastante considerable.
Después de ser emitida la Ley 38, en el Instituto Nacional de Medicina Legal Regional
Noroccidente, se intentó, con la ayuda de personal del área informática crear un sistema que
a través de códigos, generados estos por la partición en cuadrantes y la numeración de las
diferentes piezas y la ubicación de cada uno de las cinco partes en que se divide una pieza,
almacenar la información pertinente a la carta dental, teniendo en cuenta las diferentes
características médico-odontológicas de las partes, para luego, a través de estos mismos
códigos hallar la o las cartas dentales que cumplieran las características [Roja96]. La idea
no tuvo ningún éxito debido a las limitaciones físicas de los equipos existentes en ese
tiempo, pues los cálculos iniciales demandaban varios miles de millones de bytes
necesarios para su almacenamiento, lo cual no era posible adquirir con facilidad.
En el año 1996, se planteó el montaje de una base de datos de cartas dentales, utilizando
para ello una codificación que contemplara todos los posibles casos – combinaciones de
características asociadas a los dientes -, pero hasta el momento no se ha podido desarrollar
debido a la dificultad de las formulas planteadas en el estudio.
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La utilidad de la Ley No. 38 ha sido probada en múltiples ocasiones en las cuales, sino
fuese por la carta dental, hubiese sido necesaria la identificación de algún cuerpo por medio
de la prueba del ADN, generando onerosos gastos para el país.
El caso más sobresaliente es el accidente del avión de SAM, ocurrido en las montañas del
occidente antioqueño a mediados de los 90 y que a causa del fuego generado por el
impacto, los cuerpos de los ocupantes sufrieron incineración casi total, lo que impedía su
identificación por huellas dactilares. Por ser un vuelo internacional, la gran mayoría de los
ocupantes había tenido la oportunidad de tener tratamiento dental, se contactaron a los
odontólogos
de los viajeros, acá en Colombia y en otras partes del mundo, quienes
enviaron las cartas dentales, y con base en las levantadas por los odontólogos forenses en el
Instituto de Medicina Legal regional Noroccidente, se logró identificar a muchas de las
personas que viajaban en ese vuelo. [Gira00]
Con la promulgación de la Ley 38, se ha logrado reducir el número de personas por
identificar a 30 o 40 por año en la actualidad, valor este que se pretende reducir con la
masificación del uso de la carta dental.
La ley, aunque ha mostrado muchas bondades, no se ha podido explotar masivamente
debido a que, como en muchos casos en Colombia, los funcionarios responsables no la
aplican, como es el caso de los personeros municipales que son los responsables a hacer
cumplir esta ley. Como prueba de ello, está el caso ocurrido en Urabá hace dos años, donde
las FARC atacaron una fuerza antiguerrilla compuesta por unos cien hombres, como
resultado del ataque, murió el 80% de los soldados. Para la identificación de estos soldados,
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fue necesario realizar estudios de ADN, lo que implicó hacer toma de muestras de los
presuntos familiares de los muertos y luego analizarlas contra las de los cadáveres, este
trabajo resultó altamente costoso para el país, identificación que hubiese sido muy
favorable, económicamente hablando, si el ejército colombiano tuviese las cartas dentales
de todos sus integrantes. [Gira00]
2.2 LA IDENTIFICACIÓN
Para eliminar características contrarias a las deseadas, debemos utilizar técnicas
automatizadas en el proceso de reconocer e interpretar los símbolos asociados a las cartas
dentales.
Para reconocer diferentes cartas dentales es necesario usar parámetros tales como color,
forma y posición del símbolo. Por si mismo, ninguno de los parámetros es suficiente para
realizar el reconocimiento. La ley 38 estableció los diferentes símbolos, ver Anexo E, que
se deben tener en cuenta para realizar una carta dental. (Véase Figura 8).
SÍMBOLO
SIGNIFICADO
Figura 8. Ejemplos de símbolos utilizados en la carta dental
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Una técnica básica para realizar un reconocimiento consiste en capturar los símbolos
asociados a la carta dental a ser evaluada utilizando una herramienta que se desarrolle para
este propósito.
Con estos símbolos convertidos en un conjunto de datos con componentes en varias
dimensiones se pretende proponer un modelo por medio del cual, con base en las
características inherentes a los diferentes datos y a través de estructuras de datos
multidimensionales (ver capítulo 4), se logre el reconocimiento de la carta dental capturada.
Este modelo debe satisfacer los siguientes objetivos:
1.
Construir un editor gráfico para representar el modelo de carta dental adoptada y los
símbolos asociados.
2.
Comparar varias estructuras de datos multidimensionales, con base en las
características de la carta dental adoptada, con el objetivo de escoger, por técnicas
estadísticas, la que mejor comportamiento demuestre en las consultas, en el proceso de
identificación de las cartas dentales.
3.
Describir el procedimiento que permita, con base en las características establecidas,
la identificación de la carta dental; entendiendo por identificación, el proceso de hallar un
subconjunto de registros dentro de la base de datos cuyas características concuerden con las
de la carta dental en proceso de identificación.
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2.3 RESUMEN
Dado que el reconocer a las personas no sólo es un derecho sino una necesidad del ser
humano, se debe propender para que este proceso sea rápido, confiable y muy económico.
Este capítulo describe el problema a resolver, la identificación de un cadáver N.N., con
base en condiciones establecidas en la ley 38 de 1993; también, describe la forma como se
realiza una identificación de un individuo, ya sea en forma fehaciente o indiciaria, por
parte de los forenses.