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Manejo del crecimiento del algodonero
en el norte de Tamaulipas
Enrique Rosales Robles, Ricardo Sánchez de la Cruz
Centro Pie
de Investigación
de página Regional Noreste
Campo Experimental Río Bravo
Río Bravo, Tamaulipas. Mayo de 2011
Folleto Técnico No. 51 - ISBN: 978-607-425-532-4
SECRETARÍA DE AGRICULTURA, GANADERÍA, DESARROLLO RURAL,
PESCA Y ALIMENTACIÓN
Lic. Francisco Javier Mayorga Castañeda
Secretario
M.C. Mariano Ruiz-Funes Macedo
Subsecretario de Agricultura
Ing. Ignacio Rivera Rodríguez
Subsecretario de Desarrollo Rural
Dr. Pedro Adalberto González Hernández
Subsecretario de Fomento a los Agronegocios
INSTITUTO NACIONAL DE INVESTIGACIONES FORESTALES,
AGRÍCOLAS Y PECUARIAS
Dr. Pedro Brajcich Gallegos
Director General
Dr. Salvador Fernández Rivera
Coordinador de Investigación, Innovación y Vinculación
M. Sc. Arturo Cruz Vázquez
Coordinador de Planeación y Desarrollo
Lic. Marcial A. García Morteo
Coordinador de Administración y Sistemas
CENTRO DE INVESTIGACIÓN REGIONAL DEL NORESTE
Dr. Sebastián Acosta Núñez
Director Regional
Dr. Jorge Elizondo Barrón
Director de Investigación, Innovación y Vinculación
M.C. Nicolás Maldonado Moreno
Director de Planeación y Desarrollo
M.A. José Luis Cornejo Enciso
Director de Administración
Pie de página
Manejo del crecimiento del
algodonero en el norte de
Tamaulipas
Enrique ROSALES ROBLES*
Ricardo SÁNCHEZ DE LA CRUZ*
*Investigadores del Campo Experimental Río Bravo
Pie de página
Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias
Centro de Investigación Regional del Noreste
Campo Experimental Río Bravo
Mayo de 2011
Folleto Técnico Núm. 51. ISBN: 978-607-425-532-4
Instituto Nacional de Investigaciones Forestales,
Agrícolas y Pecuarias
Progreso No. 5, Barrio de Santa Catarina
Delegación Coyoacán, C.P. 04010 México D. F.
Teléfono (55) 3871-8700
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de
Tamaulipas
ISBN: 978-607-425-532-4
Primera Edición 2011
Clave CIRNE: INIFAP/CIRNE/A-473
Pie de página
No está permitida la reproducción total o parcial de esta publicación, ni
la transmisión de ninguna forma o por cualquier medio, ya sea
electrónico, mecánico, fotocopia, por registro u otros métodos, sin el
permiso previo y por escrito a la Institución.
CONTENIDO
Página
INTRODUCCIÓN
1
EL DESARROLLO DE LA PLANTA DE ALGODONERO
2
Crecimiento vegetativo
2
Crecimiento reproductivo
6
DISTRIBUCIÓN DEL RENDIMIENTO EN LA PLANTA DE
ALGODONERO
9
PREDICCIÓN DEL DESARROLLO DEL ALGODONERO
CON BASE EN UNIDADES CALOR
11
LAS HORMONAS Y EL CRECIMIENTO DEL
ALGODONERO
15
MODO DE ACCIÓN DEL CLORURO DE MEPIQUAT
16
FACTORES A CONSIDERAR PARA EL USO DE
CLORURO DE MEPIQUAT
19
MONITOREO DEL DESARROLLO DEL ALGODONERO
22
Relación altura a nudos
22
Longitud promedio de los entrenudos superiores
24
Nudos arriba de la flor blanca
25
RECOMENDACIONES PARA LA APLICACIÓN DE
CLORURO DE MEPIQUAT
28
Aplicaciones al inicio de cuadreo
30
Pie de página
Página
Aplicaciones al inicio de floración
31
CONSIDERACIONES PARA LA ASPERSIÓN DE
CLORURO DE MEPIQUAT
33
CÁLCULO DE LA DOSIS COMERCIAL
34
LITERATURA CITADA
36
AGRADECIMIENTOS
40
Pie de página
INDICE DE CUADROS
Página
Cuadro 1. Etapas de desarrollo del algodonero y su
requerimiento de tiempo y unidades calor
en el norte de Tamaulipas.
14
Cuadro 2. Altura a cosecha y porcentaje y
rendimiento de fibra en algodonero
tratado con cloruro de mepiquat a inicios
de floración. Río Bravo, Tam. 2010.
19
Cuadro 3. Relación altura a nudos (RAN) de plantas
de algodonero en diferentes condiciones y
estados de desarrollo (Modificado de Jost
et al., 2006).
24
Cuadro 4. Dosis de cloruro de mepiquat sugeridas al
inicio de cuadreo de acuerdo a su
crecimiento (Modificado de Jost et al.,
2006).
31
Dosis de cloruro de mepiquat sugeridas al
inicio de floración de acuerdo a su
crecimiento (Modificado de Jost et al.,
2006).
32
Cuadro 5.
Pie de página
Página
INDICE DE FIGURAS
Figura 1.
Desarrollo típico de una
algodonero. Vargas, 2001.
de
4
Figura 2.
Crecimiento en zigzag en rama fructífera.
Ritchie et al., 2004.
5
Figura 3.
Porcentaje de retención y peso de
bellotas por posición floral y nudos del
tallo principal en una planta de
algodonero sana. Ritchie et al., 2004.
10
Figura 4.
Unidades calor 60oF y 15.5oC acumuladas
en algodonero sembrado el 1 de marzo
en Río Bravo, Tamaulipas y diferentes
estados fenológicos del cultivo. Datos de
temperaturas máximas y mínimas de 1980
a 2010.
14
Figura 5.
Altura a cosecha de algodonero
aplicado con diferentes dosis de cloruro
de mepiquat al inicio de floración. Río
Bravo, Tam. 2010.
18
Figura 6.
Crecimiento de una planta sana de
algodonero en condiciones adecuadas
de humedad y temperatura. Livingston et
al., 1996.
22
Figura 7.
Monitoreo de la longitud de los nudos
superiores de planta de algodonero.
27
Figura 8.
Lote de algodonero con crecimiento
vegetativo excesivo por mal manejo
agronómico. Río Bravo, Tam. 2010.
29
Pie de página
planta
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
Manejo del crecimiento del algodonero en el
norte de Tamaulipas
Enrique ROSALES ROBLES
Ricardo SÁNCHEZ DE LA CRUZ
INTRODUCCIÓN
El algodonero es una planta subtropical perenne que
tiene el hábito de crecimiento más complejo de todos
los cultivos extensivos. En el algodonero, debido a su
hábito indeterminado, ocurren simultáneamente en
una gran parte de su ciclo tanto el desarrollo
vegetativo,
como
el
reproductivo.
El
desarrollo
vegetativo es necesario para producir la energía
requerida para mantener el crecimiento reproductivo
del algodonero. Sin embargo, debe existir un balance
adecuado entre ambos tipos de crecimiento para
obtener una buena producción de fibra. En la
actualidad muchas de las nuevas variedades de
algodonero
se
caracterizan
1
por
un
crecimiento
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
vegetativo muy agresivo, que requiere un manejo
adecuado
en
condiciones
de
alta
humedad
y
contenido de nutrimentos en el suelo, para evitar un
crecimiento
vegetativo
excesivo.
Este
tipo
de
crecimiento vegetativo promueve la pudrición de
bellotas
y
hace
que
su
defoliación
y
cosecha
mecánica sean difíciles de realizar de una manera
eficiente.
Los productores de algodón utilizan diferentes prácticas
para mantener un crecimiento adecuado de su cultivo,
principalmente reguladores de crecimiento a base de
cloruro de mepiquat. Sin embargo, es necesario
conocer cómo se desarrolla una planta de algodón y
como responde al ambiente para realizar un manejo
adecuado, antes de decidir aplicar un regulador de
crecimiento.
EL DESARROLLO DE LA PLANTA DE ALGODONERO
Crecimiento
vegetativo.
Las
primeras
hojas
del
algodonero, llamadas cotiledonares, aparecen el día
2
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
de la emergencia de la planta. Las hojas cotiledonares
se ubican en forma opuesta en el tallo, mientras que el
resto de las hojas y ramas se disponen en el tallo en un
arreglo en espiral en una disposición alterna o filotaxia
de 3/8, es decir que de una hoja a la siguiente hay 3/8
de una vuelta completa sobre el tallo (Ritchie et al.,
2004). Los nudos de la planta se numeran a partir de su
base y los cotiledones se consideran el nudo “0” (Figura
1).
Por lo general, se forma un nuevo nudo cada tres días,
ya que se requieren acumular alrededor de 28
unidades calor 15.5 oC (50 UC 60 oF) para su desarrollo
(Fariña y Lorenzini, 2003; Ritchie et al., 2004). En cada
nudo del tallo principal nacen las hojas principales y las
ramas. Las hojas principales se encargan de producir
carbohidratos para mantener el crecimiento vegetativo
de la planta, mientras que las hojas de las ramas se
encargan de nutrir a los frutos, aunque las hojas
principales también contribuyen en este proceso.
3
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
Las ramas se clasifican en vegetativas o monopódicas y
fructíferas o simpódicas. Las ramas vegetativas, al igual
que el tallo principal, solo tienen un meristemo en su
extremo, se ubican en los nudos inferiores y crecen en
forma lineal y casi erecta. Las ramas fructíferas tienen
varios meristemos (Wright y Sprenkel, 2005).
Figura 1. Desarrollo típico de una planta de algodonero.
Vargas, 2001.
4
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
El crecimiento inicial de una rama fructífera finaliza una
vez que se forma la yema fructífera. Sin embargo, la
rama fructífera, inicia un nuevo punto de crecimiento,
llamado meristemo axilar, localizado en la base de la
hoja
asociada
crecimiento
en
a
la
zigzag
nueva
es
la
yema
fructífera.
consecuencia
El
del
crecimiento alterno de la rama fructífera (Figura 2).
Figura 2. Crecimiento en zigzag en rama fructífera. Ritchie et
al., 2004.
La primera rama fructífera generalmente nace en el
nudo 5 a 6 del tallo principal (Figura 1). En el norte de
5
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
Tamaulipas una planta de algodonero produce de 16 a
20 ramas fructíferas, dependiendo de la variedad, pero
varios factores agronómicos como la baja densidad de
población, el daño de insectos en las primeras ramas
fructíferas
y
la
fertilización
nitrogenada
excesiva,
pueden causar la formación de un mayor número de
ramas vegetativas (Ritchie et al., 2004).
Crecimiento reproductivo. La planta de algodonero
hace la
transición
de
crecimiento
vegetativo
a
reproductivo al iniciar el desarrollo de las ramas
fructíferas. Las primeras partes de la rama fructífera que
son visibles son las yemas florales o cuadros. Al crecer la
rama, el entrenudo se alarga y los cuadros se mueven
de
su
posición
original
junto
al
tallo
principal.
Posteriormente, se desarrolla una hoja al lado del
cuadro y permanece muy pequeña por alrededor de
una semana; luego se desdobla y crece y se forma una
nueva yema que forma el segundo entrenudo y un
nuevo cuadro en la rama. Este proceso continúa
durante el ciclo de desarrollo y se llegan a producir
hasta cuatro cuadros en las ramas fructíferas. Los
6
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
cuadros se producen en nuevas posiciones en una
rama fructífera aproximadamente cada 6 días ó 56 UC
15.5 oC equivalentes a100 UC 60 oF (Wright y Sprenkel,
2005).
Una vez que aparece el cuadro le lleva tres semanas el
desarrollo de la flor. Al abrir las flores, el primer día son
de color blanco. La polinización de una flor ocurre en
pocas horas y al segundo día su color cambia a rosado
y a rojo en el tercer día. A los cinco a siete días después
de su apertura la flor se seca, cae y se puede observar
la bellota en desarrollo. El periodo de floración se lleva
a cabo por seis a ocho semanas (Ritchie et al., 2004).
Después de que ocurre la polinización la bellota inicia
su desarrollo. Bajo condiciones óptimas se requieren
alrededor de 50 a 60 días desde la polinización a la
apertura de una bellota (Wright y Sprenkel, 2005). El
desarrollo de las bellotas altera el estado y crecimiento
de la plantas, ya que de aquí en adelante la planta
utiliza sus recursos para mantener el crecimiento
reproductivo. El crecimiento de una bellota se puede
7
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
dividir
en
tres
fases:
alargamiento,
llenado
y
maduración. Durante la fase de alargamiento se
determina el volumen de la bellota y sus semillas,
mientras que las fibras formadas sobre las semillas se
alargan en los primeros 20 días después de la emisión
de la flor. Durante esta etapa la fibra es una estructura
tubular hueca similar a un popote y es muy sensible a
cambios en las condiciones climáticas, ya que el estrés
de humedad, calor o deficiencia de nutrimentos, en
especial potasio, pueden reducir su longitud (Schubert
et al., 1973).
La fase de llenado ocurre en los siguientes 20 días. En
esta etapa el alargamiento de la fibra se detiene y se
inicia el llenado de la fibra con celulosa cada 24 horas
y se añaden aceite y proteínas a la semilla. En la
maduración tanto la fibra como la semilla maduran
fisiológicamente y se secan antes de que abra la
bellota. El llenado de la fibra también es muy sensible al
estrés de humedad, calor y deficiencia de nutrimentos.
8
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
La fase de maduración de la bellota se inicia al llegar a
su tamaño y peso máximo. Durante esta fase, se
maduran tanto la semilla como la fibra y ocurre la
apertura de la bellota. Las paredes de la bellota se
secan y causan que las células adyacentes a sus
suturas dorsales se encojan y se separen y se abra la
bellota (Ritchie et al., 2004).
DISTRIBUCIÓN DEL RENDIMIENTO EN LA PLANTA DE
ALGODONERO
La contribución de un capullo al rendimiento de
algodón depende de su posición en la planta (Jenkins
et al., 1990a). Los capullos ubicados en la primera
posición son más numerosos y más pesados, que los
producidos en la segunda o tercera posición (Jenkins et
al., 1990b) ya que reciben más carbohidratos para su
llenado (Figura 3). Además, los capullos producidos en
las ramas fructíferas entre los nudos 7 al 15 tienen una
mayor contribución al rendimiento del cultivo (Figura 3).
En general, en un algodonero con buena retención de
capullos en su parte baja y media, los capullos de la
9
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
primera posición contribuyen con el 60 a 75% del
rendimiento y los de la segunda posición con 18 a 20%.
De ahí la importancia de tener una alta retención de
cuadros en las primeras ramas fructíferas (Kerby et al.,
1986; Ritchie et al., 2004).
Figura 3. Porcentaje de retención y peso de bellotas por
posición floral y nudos del tallo principal en una planta de
algodonero sana. Ritchie et al., 2004.
10
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
PREDICCIÓN DEL DESARROLLO DEL ALGODONERO CON
BASE EN UNIDADES CALOR
En condiciones favorables de clima y manejo, la planta
de algodonero sigue un patrón de crecimiento bien
definido, el cual suele referirse en días o en unidades
calor (Vargas, 2001). El concepto de unidades calor
(UC) se basa en los efectos de la temperatura, en lugar
de los días, y se fundamenta en que todas las plantas
tienen una temperatura mínima para desarrollarse,
abajo de la cual no ocurre ninguna actividad que
promueva
el
desarrollo.
En
el
algodonero
la
temperatura mínima es de 15.5 °C o 60 °F y se
denomina temperatura base (Vargas, 1991; Wanjura et
al., 1967).
El procedimiento utilizado para calcular las UC para
algodonero
para
un
día
consiste
en
sumar
la
temperatura máxima y la temperatura mínima, dividir el
resultado entre dos y luego restarle la temperatura
base, ya sea en grados centígrados (°C) o Fahrenheit
11
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
(°F).
Es
importante
señalar
que
al
utilizar
las
temperaturas en °C o °F las UC son distintas. Por
ejemplo, las UC base 15.5 °C de un día con 30 °C de
máxima y 20 °C de mínima serán:
UC 15.5 °C =
30 + 20
_______ = 25 - 15.5 = 9.5
2
Para obtener las UC 60°F de ese mismo día se deben
primero
transformar
las
temperaturas
máximas
y
mínimas a la escala Fahrenheit: 30 °C x 1.8 = 54 + 32 =
86 °F; 20 °C x 1.8 = 36 + 32 = 68 °F y usar la misma
fórmula:
UC 60 °F =
86 + 68
_______ = 77 - 60 = 17
2
Las temperaturas máximas y mínimas se pueden
obtener diariamente de la red de estaciones climáticas
del INIFAP (http://clima.inifap.gob.mx/redclima) a partir
12
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
de la fecha de siembra y con las UC se pueden explicar
algunos fenómenos del proceso de desarrollo de la
planta o bien se pueden usar para pronosticar las
etapas fenológicas del cultivo, como el inicio de
emisión de cuadros, la floración y la cosecha. Todo esto
en función de datos climáticos de la región y del
conocimiento de las UC requeridas para cada fase
fenológica. En el Cuadro 1 se presentan las principales
etapas
de
desarrollo
del
algodonero
y
sus
requerimientos aproximados de días y UC en el norte de
Tamaulipas. En la Figura 4 se presentan las UC
acumuladas en el ciclo del algodonero con los registros
de temperaturas de los últimos 30 años en Río Bravo,
Tamaulipas.
13
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
Cuadro 1. Etapas de desarrollo del algodonero y su
requerimiento de tiempo y unidades calor en el norte de
Tamaulipas.
Etapa de desarrollo
Días
requeridos
UC
15.5 oC
UC
60 oF
Siembra a emergencia
5 - 10
28 - 33
50 - 60
Inicio de cuadros
27- 38
265 - 298
475 - 535
Inicio de floración
42 - 68
376 - 418
675 - 750
Apertura de bellotas
92 - 123
795 - 1023
1425 - 1835
120 - 135
1116 - 1283
2000 - 2300
Cosecha
Figura 4. Unidades calor 60oF y 15.5oC acumuladas en
algodonero sembrado el 1 de marzo en Río Bravo,
Tamaulipas y diferentes estados fenológicos del cultivo.
Datos de temperaturas máximas y mínimas de 1980 a 2010.
14
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
LAS HORMONAS Y EL CRECIMIENTO DEL ALGODONERO
Los tres tipos principales de hormonas en el algodonero
son las giberelinas, las citocininas y las auxinas. Cada
una de estas hormonas tiene una acción diferente en el
crecimiento del algodonero. Las giberelinas promueven
la división y expansión de las células y se asocian
principalmente a la etapa de crecimiento vegetativo
del cultivo (Hake et al., 1991a; Jost et al., 2006).
Las citocininas promueven la división celular y el
alargamiento y están además involucradas en el
transporte, acumulación y retención de carbohidratos.
Aunque esta hormona puede contribuir a la regulación
del crecimiento vegetativo, su papel más significativo
es la retención de frutos y el llenado de las bellotas.
Las auxinas incrementan la plasticidad de las paredes
celulares y se consideran hormonas del crecimiento. Las
auxinas además incrementan el crecimiento radical, la
expansión de las hojas, retrasan la senescencia y
regulan el crecimiento vegetativo (Hake et al., 1991a).
15
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
MODO DE ACCIÓN DEL CLORURO DE MEPIQUAT
El
cloruro
de
mepiquat,
cloruro
de
N,N-
dimetilpiperidinio, (CM) es usado en todo el mundo
para regular el crecimiento de algodonero. El CM
inhibe la producción del ácido giberélico y sus efectos
están en función del tamaño de planta y la dosis
aplicada, que determinan su concentración. El CM no
se metaboliza, pero su concentración se reduce al
aumentar la biomasa de las plantas. Se ha reportado
que el CM afecta solo a nuevos tejidos y no tiene
ningún efecto en las partes de la planta que han
cesado su crecimiento (Hake et al., 1991b; Kerby, 1985).
El principal efecto por la aplicación de CM en
algodonero es la reducción de su altura, al reducir la
longitud de los entrenudos. El CM se comercializa como
suspensión acuosa con 42 g de ingrediente activo (i.a.)
por litro y su dosis varia de 5.25 a 42 g i.a./ha
(Culpepper et al., 2009; Jost et al., 2006). Por lo general,
la altura a cosecha del algodonero tratado con CM se
reduce en 10 a 20% (Figura 5). Además, el área foliar se
16
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
puede reducir en 5 a 10% con relación al testigo sin
aplicación al incrementar el grosor de las hojas (Walter
et al., 1980). Los beneficios por la reducción de la altura
del algodonero incluyen: facilidad de monitoreo de
insectos, mayor penetración en el dosel de la aspersión
de agroquímicos, reducción de la pudrición de
bellotas, facilidad de defoliación y mayor eficiencia de
la cosecha mecánica (Biles y Cothren, 2001; Cook and
Kennedy, 2000; Kerby et al., 1985; Reddy et al., 1992).
A pesar de los beneficios por la aplicación del CM, sus
efectos
en
el
rendimiento
son
inconsistentes.
Normalmente no se tiene efecto en el rendimiento
cuando las plantas tienen una alta retención de
bellotas en las primeras posiciones de las primeras
ramas fructíferas. Los incrementos en rendimiento,
cuando ocurren, son de alrededor de 100 kg/ha de
fibra. Sin embargo, se pueden tener reducciones de
rendimiento si se aplica CM a plantas estresadas por frío
o sequía en las que su área foliar haya sido reducida
(Hake et al., 1991a). El CM sólo debe ser utilizado como
17
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
una herramienta para el manejo del crecimiento del
algodón
y
no
para
tratar
de
incrementar
el
rendimiento. Además, a pesar de que se menciona que
el CM incrementa el contenido de fibra y acelera la
madurez del algodón en 5 a 7 días (Hake et al., 1991a),
en estudios específicos (Cuadro 2) no se han observado
estos efectos de una manera consistente.
Figura 5. Altura a cosecha de algodonero aplicado con
diferentes dosis de cloruro de mepiquat (g i.a/ha) al inicio de
floración. Río Bravo, Tam. 2010.
18
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
Cuadro 2. Altura a cosecha y porcentaje y rendimiento de
fibra en algodonero tratado con cloruro de mepiquat a
inicios de floración. Río Bravo, Tam. 2010.
Dosis
g/ha
Altura
cm
Fibra
%
Fibra
kg/ha
0
91.8
a*
43.2
a
849
a
10.5
84.1
b
43.5
a
843
a
21.0
82.9
b
42.8
a
828
a
31.5
82.1
b
42.3
a
807
a
42.0
81.8
b
42.1
a
828
a
*Valores dentro de columnas con la misma letra no son diferentes
estadísticamente según Tukey 5%.
FACTORES A CONSIDERAR PARA EL USO DE CLORURO DE
MEPIQUAT
La decisión de aplicar CM se basa en muchos factores
que determinan el potencial de crecimiento del
algodonero, como su estado y tasa de desarrollo,
retención de frutos, disponibilidad de riego, fertilización
aplicada y resultados previos con el uso de CM
(Landívar et al., 1992; Oosterhuis y Robertson, 2000;
Silvertooth y Norton, 1998). Además, las dosis de CM
19
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
requeridas no son las mismas en todos los lotes, ni en las
diferentes
etapas
del
cultivo.
Existen
varias
características del algodonero que indican el inicio de
un crecimiento vegetativo excesivo y deben de ser
consideradas para la aplicación de CM (Landívar et al.,
1992).
El mejor regulador del crecimiento del algodonero es
una alta retención de los primeros frutos en las ramas
inferiores.
La
retención
de
los
primeros
frutos,
principalmente en la primera posición, reduce la
cantidad
de
carbohidratos
disponibles
para
el
crecimiento vegetativo (Jost et al., 2006; Pettigrew y
Johnson, 2005). Por lo que antes de planear el uso de
CM se deben hacer todos los esfuerzos para mantener
un ambiente que promueva la retención de los
primeros frutos.
El estado de desarrollo de la planta de algodonero
determina en gran medida la necesidad de regulación
de su crecimiento vegetativo. Antes del desarrollo del
20
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
primer cuadro, en las plantas de siete a nueve nudos, el
desarrollo del algodón es solo vegetativo y el uso de
CM no es recomendable (Munk et al., 1998). Por otra
parte, dos semanas después del inicio de la floración, el
algodón ha alcanzado del 85 al 95% de su altura final si
tiene una buena carga de bellotas y es demasiado
tarde para aplicar CM (Landívar et al., 1992). Por lo
anterior, el manejo del crecimiento vegetativo está
limitado
a
la
etapa
de
crecimiento
lineal
del
algodonero que se ubica entre la aparición del primer
cuadro hasta dos semanas después del inicio de la
floración, que comprende alrededor de 40 a 50 días
(Figura 6). Las aplicaciones de CM deben anticiparse al
crecimiento excesivo del algodonero ya que este
producto solo actúa sobre la parte de la planta en
crecimiento (Livingston et al., 1996)
21
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
Figura 6. Crecimiento de una planta sana de algodonero en
condiciones adecuadas de humedad y temperatura.
Livingston et al., 1996.
MONITOREO DEL DESARROLLO DEL ALGODONERO
Un aspecto muy importante en el uso de CM es el
monitoreo
del
crecimiento
del
algodonero.
Los
métodos de monitoreo son:
Relación altura a nudos. La relación altura a nudos
(RAN)
debe
ser
monitoreada
22
para
evaluar
el
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
crecimiento vegetativo del algodonero (Bourland et al,
1992; Jost et al., 2006). La RAN se obtiene al dividir la
altura de la planta en centímetros entre el número de
nudos en el tallo principal y el resultado es la longitud
promedio de entrenudos. La altura debe medirse de los
cotiledones o nudo “0” a la yema terminal. Para
asegurar consistencia, el conteo se detiene en el nudo
que sostiene una hoja de al menos 3 cm de largo. La
RAN indica el estrés que la planta ha sufrido durante su
desarrollo, ya que el número de nudos no está
influenciado por el estrés, como lo está la altura, sino
que depende solo de la edad de la planta (Hake et al.,
1991b).
Se
considera
que una
planta
tiene
crecimiento
vegetativo excesivo cuando el promedio de sus
entrenudos es mayor al que presentan plantas normales
en ese estado de desarrollo y significa que las plantas
tiene un crecimiento vegetativo excesivo con bajos
niveles de retención de frutos (Cuadro 3). Sin embargo,
es necesario aclarar que la RAN considera toda la
23
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
planta y el CM no tiene efecto en las partes ya
desarrolladas de la planta y afectara solo a las células
en crecimiento.
Cuadro 3. Relación altura a nudos (RAN) de plantas de
algodonero en diferentes condiciones y estados de
desarrollo (Modificado de Jost et. al., 2006).
RAN (cm/nudo)
Estado de
desarrollo
Planta
estresada
Planta
normal
Planta con
crecimiento
excesivo
Inicio de cuadreo
< 1.9
1.9 – 3.0
> 3.3
Primera flor
< 3.0
3.0 – 4.3
> 4.8
Floración temprana
< 4.0
4.3 – 5.0
> 6.0
Floración temprana
+ 15 días
< 4.6
5.0 – 5.6
> 6.0
Longitud promedio de los entrenudos superiores. La
longitud promedio de los entrenudos superiores debe
ser monitoreada ya que es la parte de la planta en
crecimiento activo y que puede ser manejada con la
aplicación de CM (Livingston et al., 1996). Para el
24
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
monitoreo de los entrenudos superiores, se localiza el
entrenudo superior que debe ser de al menos 1.2 cm y
con su hoja expandida y sin arrugas, esta hoja será la
hoja “cero”. Se cuentan cinco entrenudos hacia abajo
y se miden con una regla en centímetros. Se obtiene el
promedio de la longitud de los cinco entrenudos y si el
promedio es mayor a 5 cm el algodonero tiene un
crecimiento vegetativo excesivo y se debe considerar
la aplicación de CM (Figura 7).
Nudos arriba de la flor blanca. Durante la floración, el
estado del algodonero normalmente se describe en
términos del número de nudos arriba de la flor blanca
más alta en primera posición (NAFB). Un algodonero
bien manejado al inicio de su floración debe tener de 9
a 10 NAFB (Bourland, 1991). Después de las primeras dos
semanas de floración los NAFB disminuyen debido a la
alta demanda de carbohidratos por las bellotas en
formación en las primeras ramas fructíferas y a que la
producción
de
energía
decae
al
no
existir
la
producción de crecimiento vegetativo nuevo de
25
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
nudos, ramas y hojas. Si después de tres semanas de
floración los NAFB no disminuyen, se debe verificar la
retención de frutos, ya que un algodonero con un
número de NAFB alto puede tener una baja retención
de frutos causado por el daño de insectos. Bajo esta
situación el cultivo seguirá creciendo al producir más
nudos y ramas si hay una alta humedad y fertilidad de
suelo. En lotes de algodonero con NAFB mayores a 9 ó
10 al inicio de su floración o que su NAFB no decline
después de tres semanas de floración es conveniente
aplicar CM para detener su crecimiento (Jost et al.,
2006).
Por otra parte, al ascender la floración al ápice de la
planta, toda la energía se envía a las bellotas en
desarrollo y la floración cesa. Este evento se denomina
cese de la fructificación (cut-out en inglés) y ocurre
normalmente a un número de NAFB de 4 a 5, ya que las
flores subsecuentes tienen una probabilidad muy baja
de producir bellotas de tamaño y calidad adecuados
(Jenkins et al., 1991a). El cese de la fructificación ocurre
26
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
debido a que la producción de carbohidratos es igual
a su demanda y no se produce un nuevo crecimiento
vegetativo. En esta etapa la aplicación de CM no es
útil pues el crecimiento vegetativo de la planta ha
cesado.
Figura 7. Monitoreo de la longitud de los nudos superiores de
planta de algodonero.
27
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
RECOMENDACIONES PARA LA APLICACIÓN DE CLORURO
DE MEPIQUAT
La meta principal en el uso de CM es el mantener la
altura de la planta de algodonero dentro de un
máximo de un 10% adicional al ancho de los surcos en
los que se cultiva. En el norte de Tamaulipas el
algodonero se siembra en surcos de 86 a 91 cm (34 a 36
pulgadas) por lo que su altura ideal debe ser de 95 a
100 cm. Al mantener la altura en este rango se
favorece la retención de los frutos al no desperdiciar
energía en crecimiento vegetativo y frutos de bajo
peso y calidad. La alta retención de frutos en las
primeras ramas fructíferas, principalmente en la primera
posición, ayuda a mantener a la planta en un ritmo de
crecimiento adecuado (Jost et al., 2006). Es común que
la baja retención de frutos en las ramas inferiores y una
alta humedad y fertilidad en el suelo resulten en plantas
muy altas y de baja producción (Figura 8).
28
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
Figura 8. Lote de algodonero con crecimiento vegetativo
excesivo por mal manejo agronómico. Río Bravo, Tam. 2010.
El CM es usualmente necesario cuando las condiciones
favorecen el crecimiento excesivo del algodonero.
Algunas de estas condiciones son: una densidad mayor
a 12 plantas por metro de surco, alta fertilización
nitrogenada,
lluvia
excesiva,
29
antecedentes
de
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
crecimiento excesivo del algodonero en el lote y
variedades con alto vigor (Silvertooth y Norton, 1998)
Aplicaciones al inicio de cuadreo. El uso de CM al inicio
del cuadreo alrededor de los 40 días después de la
emergencia permite hacer un manejo temprano del
crecimiento del algodonero. En este caso se inicia el
monitoreo
de
las
plantas
cuando
se
inicia
el
crecimiento activo del algodonero (Figura 6) y los
cuadros se encuentran en el estado de “cabeza de
cerillo” con 3 a 6 mm de diámetro. El monitoreo se
debe
realizar
tomando
al
menos
20
plantas
y
verificando su relación altura a nudos (RAN) y la
longitud promedio de los cinco nudos superiores (5NS).
Las dosis de CM variarán de acuerdo a estos dos
parámetros y se establecen en el Cuadro 4. Es
necesario monitorear nuevamente el lote en una o dos
semanas después de la aplicación y verificar el
crecimiento del algodonero. A inicios de floración se
sugiere seguir las indicaciones del siguiente apartado.
30
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
Cuadro 4. Dosis de cloruro de mepiquat sugeridas
al inicio de cuadreo de acuerdo a su crecimiento
(Modificado de Jost et al., 2006).
RAN
(cm)
5NS
(cm)
Dosis de CM
g i.a/ha
<3
No aplicar
3a5
<5
12.6
3a5
>5
18.9
>5
<5
18.9
>5
>5
25.2
RAN: Relación altura a nudos; 5NS: Longitud promedio de los
cinco nudos superiores
Aplicaciones al inicio de floración. Al inicio de la
floración la planta de algodonero, 50% de plantas con
al menos una flor, se encuentra en plena fase de
crecimiento lineal o intensivo y ya ha llegado a un 60%
de su altura final (Figura 6), por lo que las dosis de CM
son mayores, dado que se requiere más producto para
una mayor biomasa del cultivo (Landívar et al., 1992). Si
no se ha tratado previamente el algodonero y se
encuentra en crecimiento vegetativo excesivo, será
difícil detener su crecimiento. Por lo que el monitoreo
en cuadreo es muy recomendable. Para tomar la
31
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
decisión de la aplicación y dosis de CM se debe
verificar la relación altura a nudos (RAN) y la longitud
de los cinco nudos superiores (5NS) en al menos 20
plantas por lote. Las dosis variarán de acuerdo a estos
dos parámetros y a si se han realizado aplicaciones
previas de CM y se establecen en el Cuadro 5.
Cuadro 5. Dosis de cloruro de mepiquat sugeridas al
inicio de floración de acuerdo a su crecimiento
(Modificado de Jost et al., 2006).
RAN
(cm)
5NS
(cm)
Aplicación
previa CM
Dosis de CM
g i.a/ha
< 4.5
-
-
No aplicar
4.5 a 5
<6
Si
12.6
4.5 a 5
<6
No
18.9
4.5 a 5
>6
Si
18.9
4.5 a 5
>6
No
37.8
>5
<6
Si
25.2
>5
<6
No
50.4
>5
>6
Si
50.4
>5
>6
No
75.6
RAN: Relación altura a nudos; 5NS: Longitud promedio de los cinco
nudos superiores
32
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
CONSIDERACIONES PARA LA ASPERSIÓN DE CLORURO DE
MEPIQUAT
El CM es un producto sistémico que se transporta en
toda la planta y presenta poca metabolización. Por
esta razón el volumen de aspersión debe ser de 140 a
180 L/ha en aplicaciones terrestres y de 20 a 30 L/ha en
aplicaciones aéreas. Al preparar la mezcla se debe
agregar agua hasta la mitad del tanque, luego el CM,
agitar y posteriormente el resto del agua. El CM se
puede
mezclar
con
agroquímicos
usados
en
algodonero, como insecticidas. La absorción del CM es
lenta y ocurre en las primeras ocho horas después de su
aspersión, por lo que se recomienda agregar un
surfactante a 250 ml por cada 100 L de agua para que
su absorción ocurra en las primeras cuatro horas a la
aplicación y evitar el lavado si se presentan lluvias
(Arroyo et al., 2010).
En aplicaciones terrestres se pueden utilizar boquillas de
abanico plano (8002 o similares) o boquillas antiacarreo como las de inducción de aire (AI 11002 o
33
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
similares), que asperjan en gotas grandes y evitan el
acarreo por el viento. Es conveniente aplicar el CM a
una presión de 40 lb/pul2 ó 2.8 kg/cm2 para tener una
buena cobertura sin presentar acarreo de la aspersión.
No se debe aplicar con vientos superiores a 15 km/h
para evitar el acarreo de la aspersión. Es necesario
calibrar equipo de aspersión para lograr una dosis
adecuada de los productos utilizados.
En aplicaciones aéreas es importante lograr una
distribución uniforme de los productos aplicados para
que lleguen a todas las hojas del algodonero. Es
necesaria la ayuda de “bandereros” o marcas en el
lote para evitar zonas sin aplicación. Por lo general se
sugieren franjas de aplicación de 15 a 30 m de ancho
para lograr una distribución uniforme.
CÁLCULO DE LA DOSIS COMERCIAL
Debido
a
que
es
común
que
existan
varias
presentaciones comerciales del CM que contienen el
mismo ingrediente activo, es necesario calcular la dosis
34
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
a aplicar con base al contenido del producto
disponible. Para conocer la dosis comercial de CM
divida la dosis en gramos de ingrediente activo por
hectárea entre el contenido de gramos de ingrediente
activo en gramos por litro o kilogramo.
Ejemplo: Para aplicar CM a 21 g i.a/ha usando un
producto comercial con una concentración de 42 g/L.
La dosis de producto comercial por hectárea será:
21/42 = 500 ml/ha.
35
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
LITERATURA CITADA
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39
Manejo del crecimiento del algodonero en el norte de Tamaulipas
AGRADECIMIENTOS
Esta publicación es producto de los trabajos de
investigación
financiados por la Fundación Produce
Tamaulipas, A. C. a través del proyecto No. 3105933A
titulado: Evaluación y
uso de nuevos
productos
químicos y biológicos para mejorar la producción y
calidad de fibra del algodonero en el norte de
Tamaulipas.
40
Centros Nacionales de Investigación Disciplinaria,
Centros de Investigación Regional y
Campos Experimentales
Sede de Centro de Investigación Regional
Centro Nacional de Investigación Disciplinaria
Campo Experimental
Revisión Técnica
Dr. Miguel Palomo Rodríguez
Dr. Noé Montes García
Dr. Rubén Darío Garza Cedillo
Comité Editorial del CIR-Noreste
Presidente
Dr. Jorge Elizondo Barrón
Secretario
Ing. Hipólito Castillo Tovar
Vocales
MC. Antonio Cano Pineda
Dr. Jesús Loera Gallardo
Dr. Raúl Rodríguez Guerra
Dr. Antonio Palemón Terán Vargas
MC. Nicolás Maldonado Moreno
Dr. Jorge Urrutia Morales
Código INIFAP
MX-0-310301-02-03-13-09-51
La presente publicación se terminó de imprimir en el mes de mayo del
2011 en la imprenta CITYPIXEL en San Nicolás de los Garza, Nuevo León.
Su tiraje fue de 500 ejemplares
Campo Experimental Río Bravo
Miguel Ángel García Gracia
Jefe de Campo
Rubén Darío Garza Cedillo
Jefe de Operación
Noé Canales Tinajero
Jefe Administrativo
INVESTIGADOR
ALVARADO CARRILLO MANUEL
ORTIZ CHAÍREZ FLOR ELENA
SALINAS GARCÍA JAIME ROEL
MONTES GARCÍA NOÉ
ALVAREZ OJEDA MARÍA GENOVEVA
MAYA HERNÁNDEZ VÍCTOR
BUSTAMANTE DÁVILA ALEJANDRO JOSÉ
CISNEROS LÓPEZ MARÍA EUGENIA
LIMÓN GUTIERREZ JULIO CÉSAR
CANTÚ ALMAGUER MIGUEL ÁNGEL
DE LA GARZA CABALLERO MANUEL
REYES MÉNDEZ CÉSAR AUGUSTO
MAGALLANES ESTALA AGUSTÍN
SILVA SERNA MARIO MARÍN
GONZÁLEZ QUINTERO JAVIER
FLORES TOMÁS JAIME
GARZA CEDILLO RUBÉN DARIO
SAMPAYO MALDONADO SALVADOR
RAMÍREZ PFEIFFER CARLOS
DÍAZ FRANCO ARTURO
LOERA GALLARDO JESÚS
REYES ROSAS MARCO ANTONIO
RODRÍGUEZ DEL BOSQUE LUIS ÁNGEL
ROSALES ROBLES ENRIQUE
ESPINOSA RAMÍREZ MARTÍN
CRUZ CRUZ NANCY VIANEY
CASTILLO TOVAR HIPÓLITO
GARCÍA GRACIA MIGUEL ÁNGEL
VARGAS VALERO ELOY
SÁNCHEZ DE LA CRUZ RICARDO
RED DE INVESTIGACIÓN E INNOVACIÓN
AGUA Y SUELO
AGUA Y SUELO
AGUA Y SUELO
BIOENERGÉTICOS
BIOTECNOLOGÍA
FRUTALES TROPICALES
HORTALIZAS
INDUSTRIALES PERENNES
INOCUIDAD Y VALOR AGREGADO ALIMENTOS
MAÍZ
MAÍZ
MAÍZ
MODELAJE
MODELAJE
OLEAGINOSAS
OVINOS Y CAPRINOS
PASTIZALES Y RECURSOS FORRAJEROS
PLANTACIONES Y SIST. AGROFORESTALES
SALUD ANIMAL
SANIDAD VEGETAL
SANIDAD VEGETAL
SANIDAD VEGETAL
SANIDAD VEGETAL
SANIDAD VEGETAL
SERVICIOS AMBIENTALES
SOCIOECONOMÍA
TRANSFERENCIA DE TECNOLOGÍA
TRANSFERENCIA DE TECNOLOGÍA
TRANSFERENCIA DE TECNOLOGÍA
CEREALES DE GRANO PEQUEÑO
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