Download f DAÑOS QUE CAUSAN EN MEXICO LOS HONGOS DE

FOLLETO TECNICO No. 44
DICIEMBRE
ng
1962
.1
f
DAÑOS QUE CAUSAN EN MEXICO LOS
HONGOS DE GRANOS ALMACENADOS
• • •
Clyde M. Chrislensen
Luis César López
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INSTITUTO NACIONAL DE INVESTIGACIONES
AGRICOLAS, 5. A. G.
Londres 40
México 6, D. F.
MEXICO
INSTITUTO NACIONAL DE INVESTIGACIONES
AGRICOLAS. S. A. G.
MEXICO
Impri!sQ
en~
"TIpográfica Londres"
Londre, 50.
DAÑOS QUE CAUSAN EN MEXICO LOS HONGOS DE GRANOS
ALMACENADOS
Por Clyde M. Christensen* y Luis César López'::::<
INTRODUCCION
La producción de ma(z, trigo y cebada ha aumentado conside~
rablemente en México durante los últimos 15 años YI como resultado de ello, ahora se vienen almacenando mayores cantidades de grano por períodos más largos que antes.
Los granos almacenados están sujetos al ataque de insectos y
hongos que pueden disminuir la calidad del grano, y en algunos C(l~os causar la pérdida parcial o total del mismo. En México el proble~
ma de infestaciones ele insectos en el grano almacenado principió a
estudiarse desde hace más o menos 10 años. Sobre este tema se ha
publicado un buen número eJe artículos de divulgación, y los encargados del almacenamiento están pendientes ele resolver los problemas que originan los insectos en el almacén. Sin embargo, el dete~
rioro por hongos de los granos almacenados sólo ha sido reconocido
en México hasta los últimos años. En 1959, la Oficina de Estudios
Especiales (ahora desaparecida por haber sido incorporada al Insti~
tuto Nacional de Investigaciones Agrícolas, S.A.G.L empezó algunos
trabajos para evaluar este tipo de deterioro.
", Profesor del Departamento de Filopalologi'l de la Universiclad de Minesota, E. U. A.
.¡:.(;<
Técnico del Instit'Jlo N"ciol;al de Investig~ciones Agrkolas, S.A.G.
Los autores agradecen <l los doctores John S, Ni~derhauser, Douglas Barnes '1 Normal!
E. BorJaug, miembros del penonal de la Fundación Rockefeller y jefes de Jos Depar.
tamentos dI!! Fitopatol(lgla, Entomología y Trigo, respectivamente, de la antigua Oficina
de Estudios Especiales, su amplia colaboración prestada durante la realización de este
trabajo.
Igualmente, agradecen al Dr. Antonio E. Rodríguez: V., Jefe del Departamento de
Fitopatolegra del Instituto Nacional de Investigaciones Agricel..s, S.A.G., sU valiosa ayudiil
en la revisión del manuscrito.
3
MATERIALES Y METODOS
Origen de las muestras. En el presente estudio se utilizaron 3
tipos de muestras: En primer lugar, muestras recibidas de almacenes
situados en diversas regiones del país. Estos granos habían estado
almacenados por pedodos de más o menos un año, pues correspondían a la cosecha 1958(59 en la mayoría de los casos; en segundo
lugar, muestras recolectadas en almacenes de Tlaxcala, Hidalgo, Veracruz y México. En los dos primeros se recolectaron muestras de
cebada; en los dos últimos, maíz y frijol; finalmente, muestras de
trigo recolectadas en el campo, poco antes o poco después de la ma·
duración del grano, y cuando la cosecha estaba próxima. Se estu~
diaron también unas muestras de cebada nueva, recolectadas pocos
días después de la cosecha.
Determinación del número y clase de microflora presente en la
3emilla. Estos datos se obtuvieron usando la técnica descrita por
Christensen (2), que consiste en: aL sembrar en agar granos enteros o partidos, previamente desinfectados por fuera, con el fin de
conocer el porciento de las semillas que ya fueron invadidas por las
diferentes especies de hongos; y b L cultivar en agar pequeñas can·
tidades de una suspensión compuesta de una solución de agar al
0.15% y una determinada cantidad de granos molidos, para conocer
el número y clase de esporas viables de hongos por gramo de grano.
En ambos casos se utilizó principalmente un medio compuesto de
extracto de malta (2%L sal (10%) y agar (2%). Otros medios se
utilizaron en algunos casos especlficos.
Contenido de humedad. Este se determinó por medio del méto.
do de secado en estufa, que consiste en pesar 10 gramos de grano
entero y dejarlo en una estufa a 100~ 103"'C por 3 días. El porciento
de humedad se obtiene por diferencia de peso.
Germinación. Se colocaron 100 granos en una toalla de papel
humedecida, se cubrieron con plástico o con papel encerado, y se
guardaron a temperatura ambiente o en una cámara con tempera.
tura entre 25 y 30"'C. El porciento de germinación se tomó entre 5
y 8 días después.
4
Daño de los embriones. Para determinar el daño a los embrio~
nes, se partieron de 20 a 50 granos de cada muestra, y se examinaron por dentro con el microscopio esteroscópico. Se tomó nota del
desarrollo de hongos dentro de la semilla, asr como del número ele
granos con embriones manchados.
RESULTADOS
Cuándo oc.urre la infección del grano por hongos. A medida que
las semillas maduran en las plantas, pueden ser invadidas por una
variedad de hongos, que se han denominado hongos de campo. Los
resultados obtenidos en muestras de trigo colectadas antes de la ca·
secha, se muestran en el Cuadro 1, Y dan una idea de la clase de mj·
croflora que puede encontrarse en semilla que no ha entrado toda·
vía a los almacenes.
CUADRO l. Hongos aislados de trigo de cosecha reciente, desinfecta·
dos por fuera, y cultivados en malta, sal y agar. Campo
Agrícola Experimental "El Horno", Chapingo, México.
1959.
Porciento de granos infectados
Hongos de campo
Altllrnaria Cladosporium Rhodotllrulll
Kentana 54
Yaqui 50
Lerma Rojo
Yaktana 54 A
Tehuacán
92
45
O
90
82
94
65
38
32
24
32
10
7
10
20
Hongos de almllcén
Aspergillus '1 Penicillium
O
O
O
O
O
Hongos como Alternaria y Cladosporium se presentan comullmente en semilla de cosecha reciente, lo mismo que Heln'linthospo~
rium y Fusarium. Estos dos últimos géneros no se encuentran en el
Cuadro menckmado anteriormente.
Los hongos citados infectan la semilla en el campo, y en la siguiente estación pueden causar pudriciones de la raíz o algún otro
tipo de daño en las plantas que nacen de semillas infectadas, pero
no deterioran los granos en el almacén.
5
Los hongos que atacan a los granos en el almacén corresponden
a los géneros Aspergillus y Penicillium, los cuales no infectan los granos antes de la cosecha. Esto se puede ver claramente comparando
los Cuadros 1 y 2, donde las muestras de granos que se recolectaron antes de la cosecha no tuvieron Aspergillus o Penicillium, sino
$olamente hongos de campo, como Alternaria y Cladosporium. Por
otro lado (Cuadro 2), las muestras de grano que habían estado almacenadas por varios meses tuvieron solamente Aspergillus y ya habían perdido su calidad, como lo indica la baja germinación de todas las muestras.
CUADRO 2. Porciento de germinación, granos infectados con hongos de almacén, y número de colonias de varias especies de los mismos hongos por gramo de grano, en
muestras de cebada de Apizaco. Campo Agrícola Experimental "El Horno", Chapingo, México. 1959.
N9 de
mue5tra
1
2
3
4
5
6
1
3
°3
°
°
N9 de
muestra
1
2
3
4
5
6
Germinación %
A. glau(us
25,000
190,000
30,000
110,000
65,000
40,000
Porcienlo de granos infectados con:
A. candidus
A. flavus
A. glaucus
80
98
90
86
86
96
°
4
2
6
°
6
4
12
14
6
32
14
Colonia1 de hongos por gramo de grano
A. restric:tus
30,000
5,000
30,000
60,000
30,000
A. candldus
30,000
5,000
°
5,000
25,000
A. flavus
°°
°°
°
10,000
°
°
La evidencia que se ha obtenido en México y en otros países e:;
suficiente para asegurar que el daño causado a los granos almace·
nadas se debe únicamente al ataque de hongos, el cual es favorecido
por las altas humedades y temperaturas que existen en los almacenes, y no a ciertas condiciones que prevalecen en el campo antes de
la cosecha, como a veces se piensa.
6
Especies de hongos que daiian los granos almacenados. En México, en las pruebas de laboratorio, se encontraron las mismas especies de hongos que se han encontrado en otros países (5, 6). Esto es
natural, ya que este tipo de hongos se encuentra en todo el mundo
invadiendo diferentes clases de materiales (4). Su desarrollo estci
influído principalmente por el contenido de humedad y la temperatura de la semilla, lo que se explicará con más detalle en otro cu'
pítulo.
En general, el hongo que se encuentra con más frecuencia en
granos atacados es Aspergillus. Las especies más importantes dentro de este género son: A. glaucus, A. candidus, A. ochraceus y A.
flavus, mencionadas en orden ascendente de acuerdo con el contenido de humedad requerido para su desarrollo en los granos (2).
Cada uno de éstos es un grupo de especies, e incluye un número de
series o sub·especies bien definidas. Algunos de estos grupos atacaron fuertemente a la cebada, como se aprecia en el Cuadro 2.
El grupo A. glaucus es particularmente importante, porque sus
miembros o sub·especies (A. restrictus, A. amstelodami, A. ruber, A.
repens y A. chevalieri) invaden el grano que tiene un contenido de
humedad más bajo que el que requieren otras especies de AspergilIus para infectar la semilla. Es también importante porque algunas
de las series o sub.especies del grupo son bastante distintas unas de
otras. A. restrictus, dentro del grupo A. glaucus, se desarrolla en
grano con un contenido de humedad de 13.5% o menor, límite en
el cual otras especies de hongos no podrían subsistir. Es muy per··
judicial porque causa la muerte de los embriones y los mancha de
una coloración café o negra~ aún en granos que contienen entre 13
y 14% de humedad, el cual es considerado como un nivel seguro
para la buena conservación de la calidad del grano. No se sabe que
produzca calentamiento (') L pero de cualquier modo puede producir
grandes pérdidas en la calidad de la semilla. La especie A. repens,
también del grupo A. glaucus, es mucho menos dañina que A. restric·
tus. En lugar intermedio entre A. restrictus y A. repens se encuentra
el hongo A. ruber, también del mismo grupo de especies.
(:::) Se entiende par calentamiento la elevación exceslvil y r¡jpida de la temperatura, debido
a las condiciones de alta humedad y temperatura que facilitan el crecimiento rá·
pida de hongos en los granos almacenados, lo cual los perjudica grandemente mano
ch;indolos por dentro y por fuera de una coloración café o negra.
7
A. restrictus y algunos otros miembros del grupo A. glaucus
pueden invadir granos u otros materiales con un bajo contenido de
humedad, debido a que requieren un ambiente con una alta concentración osmótica, Estos hongos, especialmente A. restrictus, no pueden desarrollarse en muchos de los medios que se usan regularmenttl
en los laboratorios de fitopatología o micología, pues requieren un
medio con una concentración bastante alta de salo azúcar. Obvia·
mente, la presencia y prevalencia de estos hongos en granos almace·
nados, se pueden evaluar únicamente usando medios de agar espe·
ciales para el crecimiento de los hongos que infectan el grano.
Ciertas especies de Penicillium se encuentran también en granos
en estado de deterioro, especialmente en rnal'z; algunas veces inva·
den los embriones de estos granos y los cubren o reemplazan con
una masa de esporas, que dan una coloración azul al pericarpio en
la región del embrión. Las especies de este hongo requieren para s~J
desarrollo un contenido de humedad entre 15 y 17%, pero pueden
invadir lotes de grano con una temperatura más baja que la requerida por las especies de Aspergil!us. Puede decirse que la invasión de
Penicillium se lleva a cabo donde el maíz se ha almacenado con un
alto contenido de humedad y temperatura moderadamente baja.
presentan sobre los granos sólo después de que ha transcurrido el
tiempo necesario para el crecimiento y reproducción del hongo, y
generalmente son señales de que la semilla está completamente de·
teriorada O dañada.
Las primeras fases del ataque de hongos sólo se pueden lo::ali·
zar mediante el cultivo de granos en medios especiales, con el fin
de provocar el crecimiento del hongo que se encuentra dentro del
grano y poder observarlo en esta forma al salir de la semilla.
Lo anterior también es cierto en el caso de otros rnicro·organismos que deterioran distintas clases de materiales. Por eiemplo, la
presencia de hongos y bacterias que causan enfermedades de las plan·
tas y animales, se descubre cultivando las muestras 'en un me9io de
agar nutriente especial, logrando así el desarrollo de la microflor~
que se encuentra dentro de los te ¡idos o de los materiales en estudio.
A continuación se describen e ilustran unos cuantos ejemplos
típícos del ataque en maíz y cebada almacenados.
Las distintas especies de Aspergillus que son comunes en granos
almacenados, tienen limites de crecimiento que SOll diferentes en
cuanto al contenido de humedad. En maíz, trigo, cebada, arroz y
frijol, estos limites son aproximadumente tos siguientes: A. restrictus,
13.0 a 13.5%; A. repens y A. ruber, 13.5 a 14.0%; A. ochraceus y A.
candidus, 15.0 a 15.5%; A. f1avus, 18.5%. Todas estas especies
de Aspergillus pueden desarrollarse en contenidos de humedad Iige*
ramente inferiores o superiores a los limites mencionados, pero creo
ren más fácil y rápidamente si la humedad se halla entre las cifras
Indicadas. Por esta razón, la presencia de estas especies en semillas
que e3tuvieron almacenadas, revela con exactitud las condiciones de
alta o baja humedad que han prevalecido en los lotes de grano en
almacenam ien too
Reconocimiento del daño causado por hongos. En la práctica
generalmente se tiene la idea de que la presencia de masas de mi·
-::-elio o de esporas sobre los granos señala el principio del proceso
de déterioro en los mismos. Esto no es así, pue? esas masas se
8
r-:ig. l. La figura muestra un grano de maiz de una muestra procedente de un almacen
(o01~rdat. El grano se desinfectó supufidalmente con hipoclorilO de sodio al 1 %, Y
luego se cultivó en agar. Hasta el momento de colocar el grano en el medio de cultivo
no había indicaciones de infección alguna. Sin embargo, el hongo A. ochrilclIus se des·
arrolló dd embrión, con Ii} ayuda de los nutrientes proporcionados por el medio de
';ultivo, el cUill liene ildemás un illlo conten;c1o de sill ("la el).
9
La Fig. 1 muestra A. ochraceus en un grano de maíz que previamente había sido desinfectado por fuera con una solución de hipoclorita de sodio al 1 % durante un minuto, e incubado por varios
días en un medio de malta, sal y agar. Por fuera, este grano parecía
estar sano, aunque el ernbrión probablemente ya estaba muerto y
ligeramente oscurecido por el efecto ele los mismos hongos. La pre·
sencia de A. ochraceus en el embrión de la semilla de maíz indica
que el grano se había almacenado con un contenido de humedad de
16 a 17%. Si el maíz se hubiera almacenado con un porciento eJe
humedad menor de 15.5 o mayor ele 17%, este hongo no hubiera invadido el grano, debielo a que entre estas cifras se encuentran los
niveles de humedad favorables para SlJ desarrollo.
Los hongos de granos almacenados invaden de preferencia, y
casi exclusivamente, el gerínen o embrión. A medida que la invasión
Fig. 2. Gr<lnm de maíz partidos longiludit1almentc a través del embrión, para mostrar;
Izquierda, un embri'JIl sallo: segundo de la izquierda, un embrión pardal mente podrido;
~ a la derecha. dos cl1lbricne~ completilmente podridos por Aspergillu5 reslrlclu5. Al
(xaminar estos granos a simp!il vista. antes de partirlo1, no había fructificaciones de
Aspergillus y parecia que eS!i:lban sanos.
10
progresa, los embriones se tornan de color ocre, luego café, y finalmente negro. Estos estados de invasión se ilustran en la Fig. 2, con
granos de maíz de una bodega de almacenamiento comercial; en esos
granos no se veía ningún hongo por fuera. Algunos de estos granos
se desinfectaron por fuera, luego se partieron por la mitad, y los
que tenían los embriones
color ocre se pusieron en malta, sal y
agar; a los pocos días de haber sido puestos en el medio de cultivo,
los hongos salieron de los embriones, como se observa en la Fig. 3.
Antes de cultivar los granos no se había observado desarrollo de
hongos, ni aún con el microscopio estereoscópico; sin embargo, el
color ocre de los embriones indicaba que los granos de maíz habían
sido atacados durante el almacenamiento. En uno de los granos se
podía ver el daño de un insecto; de esa parte, dañada por el insecto,
salieron 5 especies de Aspergillus, las cuales se desarrollaron en los
residuos del embrión. Generalmente los hongos de los granos almacenados aumentan el daíio de los insectos.
de
Fig, 3. Granos d~ mafz cuyos embriones tenían una coloración ocre. Varias e~pecies
eJe AspergJllus crecieroll de esos embriones. poc:os días después de que los granos se
cultivaron en malla, ~al y agar.
11
Las Figs. 4 y 5 muestran granos de cebada sin pericarpios, y
dañados por hongos. Antes de descascarado, el grano tenía aspecto sano y brillante, pero al quitar las cáscaras, los hongos se encontraron debajo de ellas y sobre la región del embrión. Como se puede
ver en la Fig. 4, algunas peritecias (los cuerpos esféricos) de A. glaucus se formaron sobre el embrión. Esto revela que la cebada se almacenó por varias semanas con un contenido de humedad entre 16
a 17%, porque tales cuerpos fructíferos o peritecias sólo se forman
cuando el grano tiene la humedad y el tiempo ya indicados. Si la
humedad hubiera sido mayor de 17%, entonces otras especies como
A. ochraceus o A. flavus se hubieran desarrollado rápidamente, pues
ellas requieren mayor humedad en las semillas para poder invadirlas.
La Fig. 6 muestra los embriones de dos granos de cebada partidos por la mitad y puestos en papa-dextrosa-agar. El embrión de la
izquierda está sano mientras el de la derecha está invadido, muerto,
y podrido parcialmente por hongos.
,
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Fig. 4. En estn Ilustrilción se puede ver un hongo de los granos almacenados, probable.
mente A. restrictus, saliendo de la punta del embrión de un grano de cebada. Este hongo
se pudo observar sólo después de que se removió la cáscara del grano, lo cual indica
que los granos pueden estar dañados interiormente, y todavía tener la apariencia de
semilla sana.
Fig. 5. Otro grano de cebada del mismo lole de donde se lomaron !os granos que se
muestran en la Fig. 4. Las cáscaras se removieron para exponer el germen. Las estructuras esféricas que se ven sobre el mismo son peritedas de Aspergillus glaucus. Estas
peritecias se forman en ese lugar cuando el grano ~e almacena por varias semanas o
meses con un contenido de humedad de 16 a 17%. Si la humedad es mayor o menor
que ese límite, es muy probable que Ocurra el desarrollo de otras especies de Aspergi·
lIus, que no forman perilecia~.
12
Flg. 6. Embriones de cebnda recién partidos. A la izquierda, un embrión sano; a la
derecha, un embrión muerto y parcialmente podrido por hongos. En esos mismos grallOs
antes de partirlos, no se observó el crecimiento de hongos sobre el embrión, pero al
examinar el interior del grano ~e vio el daño qlle aquellos habian causado a esa parte
de la semilla.
La Fig. 7 muestra los mismos granos dos días después; el embrión sano germinó, a pesar de estar incompleto, pero el embrión
de la derecha, que fue atacado por hongos, no germinó. Sin embargo,
no crecieron los hongos de este grano muerto porque el medio de
papa-dextrosawagar no es favorable para el desarrollo de este tipo de
hongos.
13
En resumen, [os hongos de los granos almacenados a tacan pre~
ferentemente, y algunas veces de modo exclusivo, los embriones de
los mismos .
Esta comparación se hizo con el fin de demostrar el efecto que
tienen los hongos sobre la germinación de la semilla.
.,
.,
Figs. 8 Y 9. Grimos dI;! cebada dei mismo iote del que se tomaron los granos ele las
;:igs. 6 y 7. Los granos desinfectados y partidos se cultivaron en malta, si\1 y agllr. De
los embriones salieron algunos hongos, principalmente A. glaueus. En la figura 8, la
~uperficie expuesta del germen se colocó en posición mas o menos perpendicular al
medio de cultivo; en la Fig. 9, en posición más o menos paralela al medio. Estas fotografiils se tonlaron 2 ellas despues de haber sido puestos ios granos en el agar.
Fig. i. Las mitades de grano que se muestran en la Fig. 6 fueron incubadas en papa.
dextrosa-agar, por 2 dl'as. El embrión sano germin6 aunque se había partido por la
mitad.
Las Figs. 8 y 9 representan el resultado de una prueba similar
a la anterior, pero usando un medio diferente, o sea el de malta, sal
y agar en lugar de papa.dextrosa-agar que se usó en la prueba ante·
rior. Después de dos días se pudo ver el crecimiento de hongos en
los granos con embriones oscurecidos. En este caso, el medio de
malta-sal-agar era favorable para el desarrollo de hongos Aspergillus
y Penicillium debido a s'J contenido de extracto de malta y sal; estas
substancias son necesarias para el desarrollo de los microorganismos
mencionados.
14
Condiciones que permiten la invasión de hongos en 105 granos
almacenados. Los factores que determinan el grado de invasión de
los hongos son los siguientes: contenido de humedad del grano, temo
peratura, tiempo que dura el grano en almacenamiento, condición de
la semilla, e infestaciones de insectos.
Contenido de humedad. Este factor es el más importante; el1
general los contenidos de agua en el grano superiores a 13% favorecen el crecimiento de hongos en el grano, perjudicando su calidad.
El contenido de humedad puede ser mal determinado o afectado por
muchas causas, como son:
a). El uso de determinadores eléctricos de humedad. En unas
muestras recolectadas en Huamantla, Tlax. (Cuadro 3 L en las que se
15
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Grano
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14.1
14.4
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14.8
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Cebada
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4
5
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18.0
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CUADRO 4. Contenido de humedad determinado por medio de un
medidor eléctrico y por el método de secado en la estufa, en muestras de diferentes granos. Campo Agricola Experimental "El Horno", Chapingo, México, 1959.
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determinó la humedad con el medidor eléctrico de ese lugar y por
el método de la estufa en el laboratorio, se observó que en todas las
muestras, la humedad real (de acuerdo con el método de la estufa)
era de 0.5 a 4% mayor que como lo había registrado el medidor
eléctrico.
Si la humedad hubiera sido correcta en el caso de las muestras
1 Y 2, por ejemplo, no se hubieran desarrollado hongos durante el
período de almacenamiento, ya que el contenido de agua de esos
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Setado 1/2 hora al sol
Secado 2 horas al sol.
17
granos era de 12 y 13% respectivamente. Sin embargo, después de
un mes, esas muestras de grano fueron invadidas por hongos, debido
a que el porciento de humedad en realidad era mucho mayor del que
había registrado la máquina determinadora de humedad.
Como se puede ver en el Cuadro 4, también se encontraron diferencias considerables en las determinaciones de humedad en maíz,
trigo y frijol, pero estas muestras no se almacenaron posteriormente
en el laboratorio para observar el desarrollo de la microflora en las
mismas.
b). Absorción de la humedad del aire. El grano también puede
absorver humedad del aire y por lo tanto aumentar el contenido del
agua que tenía al iniciarse el almacenamiento. En el Cuadro 5 se
muestran algunos datos de l-emperatura, humedad, germinación y
microflora de la semilla en los diferentes niveles del grano almace~
nado en una bodega de Toluca, la cual tenía 5,000 toneladas de trigo
procedente de Sonora, que se había recibido de ese Estado 3 meses
antes de que se tomaran las muestras.
Puede notarse en el Cuadro 5 que el contenido de humedad fue
siempre mayor en las capas superiores de grano y en algunos casos
alcanzó a ser hasta casi 3%· mayor en la superficie que en el fondo
del lote. Esto se debió exclusivamente a la absorción de vapor de agua
del aire, pues ya se ha demostrado que el grano tiende a aumentar
su humedad, hasta alcanzar un equilibrio que está en relación con
la humedad relativa del aire.
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c). Las diferencias de humedad entre algunas porciones de un
mismo lote de grano; d), la evaporación de la humedad que pasa de
una porción a otra del mismo lote; y e), las mezclas de grano cuyos
contenidos de humedad son diferentes. Los 3 últimos factores han
sido ampliamente estudiados en el extranjero, donde se han presentado estos casos con frecuencia. En México no se han estudiado todavía, pero es casi seguro que también se presenten en nuestros almacenes.
Tales factores secundarios, que afectan el contenido de humedad, no han sido tomados en cuenta en los almacenes comerciales, o
han sido considerados de poca importancia.
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Temperatura. Los hongos de granos almacenados crecen más rapida mente en una temperatura de 25 a 30.. .C, Su crecimiento es muy
lento a 15.. .C, y casi cesa a una temepratura de 109(, Si se quiere almacenar grano con un contenido de humedad superior a 14 o 15%,
es preferible almacenarlo a temperaturas tan bajas como sea posible,
De esta manera el deterioro por hongos será más lento, y el grano
se podrá tener por un tiempo más largo en el almacén.
Tiempo de almacenamiento. Mientras más alto es el contenido
de humedad y la temperatura del grano, más corto es el tiempo que
el grano puede tenerse almacenado sin el riesgo de ser dañado por
los hongos de almacén, Los hongos se empiezan a desarrollar a los
3 ó 4 meses, cuando la humedad de los granos está entre 14 y 15%
ya una temperatura de 20 a 259C, Cuando la humedad está entre 13
y 14% el grano puede almacenarse por un año sin que haya una pér~
dida considerable en su calidad; los granos con humedad entre 12 y
13% pueden almacenarse por varios años, sin riesgo de que haya
daños por hongos en el almacén, En el Cuadro 6 se muestran algunos
resultados sobre el efecto de la humedad y el tiempo sobre la germi·
nación de la cebada, y el progreso de la invasión por hongos del gra~
no almacenado.
CUADRO 6. Efectos del tiempo de almacenamiento sobre el aumento
en el desarrollo de hongos y la disminución en el por~
ciento de germinación, en cebada almacenada con un
contenido de humedad de 16.3%, Campo Agrícola Experimental "El Horno", Chapingo, México, 1959.
Tiempo de almacenamientc Germinación
(en meses)
%
1
2
3
Porciento de granos infeclados con:
Hongos de almacén
Hongos de campo
86
30
100
71
92
22
50
100
O
Condición del grano. Cuando este no ha sido invadido por hongos, puede almacenarse mucho más tiempo sin sufrir daño alguno;
hay que recordar, sin embargo, que el ataque de hongos generalmente no puede descubrirse a simp'l.e vista, sino que es necesario
hacer pruebas de laboratorio como las mencionadas en páginas an~
20
teriores, con el fin de conocer el estado actual de las muestras en
cuanto a la infección de hongos de granos almacenados.
Infestación de insectos. Un gran número de las muestras de
maíz y cebada que se estudiaron en el laboratorio, estaban infesta~
das por insectos. Esas mismas muestras habían sido invadidas por
hongos de Jos granos almacenados. Algunos trabajos (1,3), proporcionan amplia evidencia para indicar que algunos insectos, tales como
los gorgojos de los granos y del arroz, y algunos otros, invaden el
grano almacenado y lo inocuJan con las esporas de hongos que llevan
fuera o dentro de su cuerpo. A medida que los insectos se desarrollan contribuyen a aumentar la humedad, la cual es absorbida por los
granos. Generalmente, al momento de descubrir las infestaciones, ya
se han creado las condiciones que facilitan el desarrollo de hongos.
Las fumigaciones eliminan los insectos, pero tienen poco o ningún
efecto sobre los hongos (3 L y estos continúan desarrollándose y
causando daño.
Magnitud del daño causado por hongos en las muestras recibidas
de diversas regiones del país. Cerca del 50% de las muestras resul~
taran severamente ·dañadas por hongos de los granos almacenados.
Los embriones se habían vuelto de un color café y mostraban una
pudrición parcial o total. Algunas de las muestras muy deterioradas
venían de lotes de maíz importados en 1958 y 1959 para consumo
alimenticio. Tales lotes se dañaron debido principalmente a que se
trataba de maíz del Grado 2 Ó inferior, de acuerdo con las normas
de calidad de Estados Unidos, que corresponden a grano que entre
otras cosas se caracteriza por tener un alto contenido de humedad,
generalmente mayor de 15%. Esta humedad, como ya se sabe, es
muy favorable para el ataque de hongos del grano.
Por otro lado, muchos de los lotes de cebada que se probaron
en este estudio estaban destinados a la fabricación de malta; el ataque
de hongos durante el almacenamiento disminuyó la calidad de esa
cebada, y consecuentemente no se utilizó para dicho fin,
Tanto en el caso del maíz, como en el de la cebada, una gran
cantidad del grano se dañó a tal grado que sólo podía ser utilizado
como alimento de ganado.
Por lo que se refiere al almacenamiento de trigo y frijol, muy
pocas muestras se encontraron dañadas severamente por hongos, Es-
21
to se debió probablemente a que la lT:ayoría de las muestras de trigo
procedían del noroeste de México, donde se almacena y cosecha este
cereal con un contenido de humedad muy bajo. Algunos de los lotes
de frijol que se muestrearon tenían muy poco tiempo en almacenamiento.
Las muestras de maíz y cebada más fuertemente dañadas por
hongos, resultaron libres de insectos. Todo el daño lo habían hecho
los hongos durante el almacenamiento del grano.
DISCUSION
En octubre de 1959, en el Campo Experimental "El Horno", en
Chapingo, Méx., se inició un estudio sobre la microflora de los gra·
nos almacenados. Los fines del presente estudio fueron los siguientes:
determinar las causas de los daños que sufren los granos durante el
almacenamiento, determinar algun05 de los factores que están propiciando las pérdidas de calidad en el grano almacenado, y conocer
la importancia de los mismos daños.
Al estudiar muestras de trigo y cebada recolectadas poco antes
o poco después de la maduración del grano, se encontró que algunos
hongos como Alternaria, Fusarium, Helminthosporium y Cladosporium habían infectado hasta el 100% de la semilla y la habían manchado por fuera. No se encontraron en esas muestras semillas infectadas por Aspergillus y Penicillium, lo que demuestra que C'stos han..
gas nunca, o casi nunca, in.ectan los granos cuando éstos se encuen·
tran todavía en la planta.
Los dalias presentes en la mayoría de las muestras comerciales
fueron causados por hongos de los granos almacenados. Varias espe~
des de Aspergillus (glaucus, candidus, ochraceus y flavus) y también
de Penicillium se encontraron comúnmente durante el curso de las
pruebas de laboratorio, comprobándose así los resultados obtenidos
por otros investigadores en el extranjero.
De las muestras de maíz y cebada procedentes de diversos lugares de la República, aquellas que tenían baja germinación tuvie·
ron también más esporas de hong:Js de granos almacenados (princi·
palmente Aspergillus) por gramo de grano; también tuvieron un mayor número de semillas infectadas por los mismos hongos, y más
numerosos granos con los embriones manchados de un color varia·
22
ble entre café y negro. Por otro lado, las muestras que tuvieron alta
germinación resultaron libres o casi libres de los hongos menciona.
dos antes, y tenían los embriones de coJor normal, es decir, blancos
o amarillentos.
Con base en los resultados obtenidos, se puede decir que el
contenido de agua en el grano ha sido el factor más crítico en el deterioro de los granos almacenados. La presencia de hongos COIllO
A. candidus, A. ochraceus y A. flavus indica que en los lotes de grano
donde estos hongos progresaron, hubo humedad muy alta, probablemente alrededor de 18%; si el contenido de humedad hubiera sido
inferior al 15%, esos mismos hongos no se hubieran desarrollado
por ser éste un nivel de humedad muy bajo para ellos.
Las especies del grupo A. glaucus se encontraron con mayor
frecuencia que las anteriores; por ese motivo es lógico suponer que
en los actuales almacenes es fácil encontrar lotes de grano con humedad entre 13 y 15%, pues estos niveles de humedad son los más
favorables para la infección por las especies del grupo antes mencionado.
Una combinaci~n de altas temperaturas y gran contenido de hu.
medad en los granos ha propiciado el daño de los mismos hongos
de almacén. Muchas fueron las muestras de grano que se encontraron, las cuales tenían los embriones de un color variable entre café
y negro, y a veces totalmente podridos (Figs. 2 Y 3), lo cual es un
daño típico de la combinación de altas temperaturas (30-359C) )'
gran humedad (18% o más).
Al hacer la recolección de muestras en el campo, se encontraron algunas bodegas en las cuales habfa grano almacenado hasta por
2 años; esos granos fueron atacados severamente por hongos en el
almacén y perdieron completamente su germinación. Lo anterior sugiere que durante el almacenamiento del grano prevalecieron condi.
dones hvorables para la invasión de hongos, y éstos causaron un
mayor daño debido al tiempo demasiado largo que los granos permanecieron en almacenamiento. Obviamente el tiempo es un factor
!mportante en la conservación de granos, pero afortunadamente es
un factor que puede controlarse con mayor facilidad que la humedad
y la temperatura.
La absorción de humedad del aire es un punto que debe tomarse en cuenta desde el momento de almacenar el grano. En el presente
23
estudio se encontró que en un período de más o menos 3 meses, el
trigo almacenado en una bodega de Toluca aumentó su contenido
de agua en un 2 a 3% en las capas más cercanas a la superficie del
lote de grano en almacenamiento a granel. Este fenómeno de absorción de agua se acentúa todavía más en las bodegas que no están debidamente protegidas de las variaciones del medio ambiente, y es el
responsable de la pérdida de calidad en muchos casos en que el grano se almacena seco, pero debido a la absorción de humedad del aire,
el contenido de agua aumenta y favorece el crecimiento de hongos.
Durante el curso de las investigaciones se observó que el uso
de los determinadores eléctricos de humedad es muy común en México. Pero también se observó que en la mayoría de los casos esos
aparatos no están calibrados correctamente, sino que se usan sin
precaución alguna. Las diferencias de 1 a 2% fueron muy comunes
al comparar las lecturas de los aparatos eléctricos, con los datos ob·
tenidos por el método de secado de estufa. Esas diferencias en la
humedad han sido indudablemente importantes en la predisposición
de los granos al ataque de hongos, pues aquellos se han almacenado
con porcientos de humedad mayores que los indicados por lo aparatos eléctricos medidores de humedad en el grano.
La asociación entre los insectos del grano y los hongos, principalmente A. restrictus, fue comúnmente observada en muestras de
maíz recibidas de almacenes localizados en distintas partes del país.
RECOMENDACIONES
Una vez que se ha demostrado la importancia qu:: tiene el contenido de humedad en el almacenamiento de los granos, se aconseja,
en primer lugar, almacenar la semilla con una humedad tan baja
como sea posible, de tal manera que se prevenga la infección y desarrolio de los hongos de granos almacenados. Hasta la fecha no hay
ningún método de control que elimine los hongos una vez que éstos
han infectado la semilla, y por esta razón es sumamente importante
hac.er el almacenamiento bajo condiciones de poca humedad que
ayuden a prevenir el ataque del grano por Aspergillus y Penicillium.
El grano almacenado con una humedad de alrededor de 12% no
corre ningún riesgo de deterioro por hongos.
Debe registrarse frecuentemente la temperatura del grano en
distintas partes del lote, en los almacenes que así lo permitan, pues
de esta manera se pueden localizar los lugares donde la temperatura
se está elevando. Para enfriar un lote se puede remover el grano
de una bodega a otra, o bien, si se cuenta con sistema de enfriamiento, hacer circular aire frío a través del lote de grano. En México
ya se tiene en algunos almacenes el sistema de circulación de aire
frío para bajar la temperatura del grano.
Las mezclas de granos con diferentes contenidos de humedad
deben evitarse, pues esta práctica de almacenamiento no produce
ningún beneficio en la prevención del ataque de hongos del grano.
Es conveniente comprobar con cierta frecuencia la precisión de
los aparatos eléctricos con los cuales se hacen las determinaciones
de humedad en los granos. Esto implica la comparación de los datos
que registran los medidores de humedad, con los datos que se ob·
tienen por el método de secado en la estufa, el cual proporciona
resultados más exactos.
Se debe muestrear de tal manera que puedan obtenerse muestras representativas. del volumen total del grano. Es aconsejable con·
siderar siempre los diferentes niveles del volumen del grano almacenado, ya sea a granel o encostalado.
Igualmente conviene evaluar periódicamente la condición del
grano para conocer las perspectivas futuras de almacenamiento, es·
pecialmente en los lugares donde se almacenan grandes cantidades
de grano y se cuenta con las facilidades para hacerlo. Para evaluar
la condición del grano es necesario llevar a cabo lo siguiente:
1) Examen microscópico de la semilla, especialmente de los
embriones; 2) Hacer cultivos de granos enteros o partidos, previamente desinfectados por fuera, así como de granos molidos, para
determinar el porciento, el número y las clases de hongos presentes
en la muestra; 3) Determinar el porciento de germinación, pues la
falta de poder germinativo es el principal daño que hacen los hongos
a los granos almacenados; 4) Determinar el contenido de humedad
y la temperatura del grano, pues estos son los factores directamente
responsables del ataque de hongos; y 5) Determinar el porciento de
granos con embriones manchados, lo cual sirve en gran parte par;;!
evaluar el daño que los hongos han hecho a los granos almacenados.
2~
24
RESUMEN
El presente trabajo representa la iniciación del programa que
lleva a cabo el Instituto Nacional de Investigaciones Agrícolas, S.A.~.,
en cooperación con otros organismos interesados, para estudiar los
daños causados por los hongos de los granos almacenados en México.
Tal programa fue comenzado por la Oficina de Estudios Especiales
(ahora incorporada al Instituto Nacional de Investigaciones Agrícolas) en 1959. Los resultados de esas investigaciones indican que los
granos almacenados en México han sufrido fuertes pérdidas debido
al ataque de los hongos Aspergillus y Penieillium. Las direfentes especies de Aspergillus (A. glaucus, A. candidus, A. ochraceus y A. flavus) fueron encontradas invadiendo gran número de muestras de
maíz, cebada y frijol, principalmente. Los hongos mencionados, incluyendo Penicillium, nunca se encontraron en granos de cosech¡;
nueva, lo que indicó que dichos organismos solamente causan darios
en granos que ya se encuentran en almacenamiento. Solamente los
hongos de los géneros Alternada, Cladosporium, Helminthosporium y
Fusarium invadieron las semillas en el campo, durante el período de
formación o de maduración del grano. Se demostró que, al igual que
en otros países, estos últimos hongos no perjudican el grano en el
almacén.
método de estufa y las máquinas eléctricas determinadoras de humedad. Estas en algunas ocasiones marcaron hasta un 4% de humedad más baja que la cifra obtenida por el método de secado en estufa,
considerado como más exacto. La falta de exactitud en la lectura
favoreció indirectamente la invasión de hongos a Jos granos almacenados. Por otra parte, la absorción de la humedad del aire fue otro
factor importante y al mismo tiempo difícil de ser controlado.
El estudio de muestras procedentes de diversas regiones del país
reveló la presencia y daño de insectos en un alto porciento de las
mismas, principalmente en maíz y cebada. En la mayoría de los casos
se encontró la asociación de los hongos -principalmente Aspergillus
restrictus- y los gorgojos de los granos y del arroz.
Por último, con las evidencias obtenidas en México y en otros
países, se dan algunas recomendaciones para tratar de prevenir o disminuir el ataque de hongos, y consecuentemente el deterioro de 103
granos almacenados.
Con base en los tipos de hongos encontrados en las diferentes
muestras y que requieren diferente humedad para desarrollarse, se
llegó a la conclusión de que el contenido de humedad ha sido el factor más importante que ha influido en el deterioro de los granos
almacenados. Otros datos que comprueban lo anterior son las diFerencias en las lecturas del contenido de humedad obtenidas por el
26
27
more, the absorption of humidity from the air was another important
factor, which was difficult to control.
SUMMAR,'
The research reported here represents tile beginning of a program conducted by tlle National lnstitute of Agricultural Research,
Mexico, in cooperation with other interested institutions, to stud'¡t
the damage done by the fungi 0+ stored grain in Mexico. The results
of these investigations show that stored grajns jn Mexico are severely
damaged by species of Aspergillus and Penicillium. Several species of
Aspergillus (A. glaucus, A. candidus, A. ochraceus, and A. flavus)
were found attacking a large number of samples of corn, barley, and
beans. These fungi, as well as Penicillium, were never found in fresh~
ly~harvested grain, which indica tes that these organisms only cause
damage to grain in storage. Only fungi in the genera Alternaria, Cladosporium, Helminthosporium, anc! Fusarium, jnvaded kernels in the
field, during the formation and maturing of the grain. lt was shown
that these fungi do not harm the grain in storage.
The study of samples from various regions of the country re·
vealed the presence and damage of insects in a high percentage of
the cases, mainly in corn and barley. In the majority of the cases
there was found and association between the fungí (principally A.
restrictus) and the granary and rice weevils.
Fjnally, from the results obtajned jn Mexico and in other COUrlM
tries, there are presented certain recommendations for preventing
or reducing the attack by fungi ünc! the consequent c!eterioration of
stored grains.
Based upon the kinds of fungi found jn the djfferent samples
tlnd which require distinct humidities for their development, the
conclusjon was reached that the moisture content was the most important factor affecting the deterioration of stored grains. Other data
which support this conclusion are the differences in the mojsture
content readings obtained by the oven method and those obtained by
the electrical machines for determining moisture contento These machines on sorne occasions indicated that the mojsture content was as
much as 4% below that obtained by the drying oven, which is
consjdered the most exact rnethod. Thjs lack of precision in the reading indirectly favors the fungous invasion of stored grains. Further·
28
29
LITERATURA CITADA
,.
Agrawal, N. S., C. M. Christensen, and A. C. Hodson. 1957. Grain
storage fungi associated with the granary weevil. Jour. Econ. Ent.
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Botanical Review 23:
3.
4.
108~'34.
Christensen, C. M. and A. C. Hodsol1. 1960. Development of
granary weevils and storage fungi in colurnns of wheat- 11. Jour.
01 Econ. Ent. 53: 375-380.
Thom,
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Tuite, J. 1959. Low inciden ce of storage molds in freshly harvested seed of 50ft red winter wheat. Plant Disease Reporter 43:
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XXIII. Time of invasion of wheat seed by various species of As~
pergillus responsible for deterioration of stored grain, and source
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