Download revES_Short Overview Survey Results 2013_clean

Document related concepts

Desempleo wikipedia , lookup

Flexiguridad wikipedia , lookup

Economía laboral wikipedia , lookup

Desempleo estructural wikipedia , lookup

Seguridad del empleo wikipedia , lookup

Transcript
MÉTODOS PARA LA REINCORPORACIÓN LABORAL DE LOS DESEMPLEADOS
DE LARGA DURACIÓN: UN BREVE RESUMEN
Preparado
por:
Emma Clarence (Analista política) y Stina Heikkilä (prácticas)
Centro Trento LEED de la OCDE para el desarrollo local
Este breve resumen, elaborado como parte del trabajo del LEED de la OCDE sobre
“Cómo afrontar el desempleo de larga duración en grupos vulnerables”, para la
Conferencia conjunta del LEED de la OCDE, la Asociación Mundial de los Servicios
Públicos de Empleo y la Asociación Nacional de Agencias Estatales Laborales (EE.UU.),
celebrada los días 21 y 22 de febrero de 2013 en Washington DC, ha recibido el apoyo
de la Dirección General de Empleo, Asuntos Sociales e Inclusión de la Comisión Europea.
SOBRE LA OCDE
La OCDE es una organización multidisciplinar e intergubernamental compuesta por 34 países
miembros y que incluye en su trabajo a un número cada vez mayor de no miembros de todas las
regiones del mundo. La misión principal de la Organización es ayudar a los gobiernos a trabajar
juntos hacia una economía mundial más fuerte, limpia y justa. Con su red de 250 comités y grupos
de trabajo especializados, la OCDE ofrece una estructura en la que los gobiernos pueden comparar
experiencias de políticas, buscar respuestas a problemas comunes, identificar buenas prácticas y
coordinar políticas interiores e internacionales.
Los países miembros de la OCDE son: Australia, Austria, Bélgica, Canadá, Chile, República
Checa, Dinamarca, Estonia, Finlandia, Francia, Alemania, Grecia, Hungría, Islandia, Irlanda,
Israel, Italia, Japón, Corea, Luxemburgo, México, Holanda, Nueva Zelanda, Noruega, Polonia,
Portugal, República de Eslovaquia, Eslovenia, España, Suecia, Suiza, Turquía, Reino Unido y
Estados Unidos. La Comisión Europea participa en el trabajo de la OCDE.
SOBRE EL
LEED
Desde 1982, el Programa de la OCDE para el Desarrollo Económico y del Empleo a nivel
Local (LEED, por sus siglas en inglés de Local Economic and Employment Development) asesora
a gobiernos y comunidades acerca de cómo responder a los cambios económicos y abordar los
problemas complejos que surgen en un mundo que cambia a gran velocidad. Su misión es
contribuir a la creación de más empleos y de mejor calidad mediante la puesta en práctica de
políticas más efectivas, prácticas innovadoras, capacidades más sólidas y estrategias integradas a
escala local. El programa LEED emplea un análisis comparativo de la experiencia adquirida en los
cinco continentes para fomentar el crecimiento económico, el empleo y la inclusión.
SOBRE EL PROYECTO
El proyecto estudió los enfoques para afrontar el desempleo de larga duración entre los
grupos vulnerables examinando tres temas principales: enfoques basados en áreas y su función en
la solución del problema del desempleo, intervenciones políticas específicas dirigidas a diferentes
grupos y financiación innovadora para la inclusión. El informe final del proyecto se encontrará
disponible a principios de 2013. Para obtener más información, póngase en contacto con: Emma Clarence,
Analista política
([email protected]) o
Antonella Noya, Analista política sénior,
([email protected]).
2
INTRODUCCIÓN
El desempleo de larga duración conlleva consecuencias socio-económicas profundas para las
personas, las familias, las comunidades y los países afectados. El desempleo de larga duración no
sólo ha aumentado en numerosos países a causa de la crisis económica y financiera, sino que
aquéllos que ya se enfrentaban a este problema se han visto aún más alejados del mercado laboral.
A pesar de que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y el
Fondo Monetario Internacional (FMI) prevén una cierta recuperación económica en los próximos
dos años, no debe suponerse que ésta vendrá acompañada de una recuperación en el mercado
laboral. El desempleo de larga duración se ha convertido en un fenómeno creciente, contra el cual
poco puede hacer una recuperación lenta y posiblemente con escasez de empleos; a menos que se
pongan en práctica medidas adecuadas. De hecho, las Perspectivas de empleo (Employment
Outlook, 2012a) de la OCDE indicaban que en aquellos países en que se observaba un aumento
del desempleo de larga duración, existía la posibilidad de que lo que era un aumento cíclico se
convirtiese en uno estructural, de modo que se requiere una actuación urgente.
Dados los complejos factores que contribuyen al desempleo de larga duración, resulta
importante identificar los problemas clave y los métodos que han resultado fructíferos a la hora de
ayudar a los desempleados de larga duración a encontrar un empleo; así como intervenir temprano
con aquéllos en riesgo de desempleo, a fin de limitar su vulnerabilidad. El largo trabajo del
programa LEED (Desarrollo Económico y del Empleo a nivel Local) de la OCDE ha destacado
que las intervenciones específicas en el mercado laboral deben ir acompañadas de políticas y
mecanismos de prestación de servicios efectivos y adecuados a nivel local. Antes de explorar estos
elementos, junto con ejemplos de prácticas con buenos resultados, resulta necesario conocer la
situación actual de la economía y del empleo y las perspectivas de recuperación.
La perspectiva económica
De acuerdo con la OCDE, la recuperación de los dos próximos años será vacilante y desigual.
Con un clima empresarial débil y poca confianza de los consumidores, un comercio mundial en
desaceleración y el impacto de la consolidación fiscal percibido como elemento que limitó el
crecimiento en el territorio OCDE en entre un 1 y un 1,5 por ciento en 2012, las condiciones
económicas sugieren una recuperación débil en el mejor de los casos (OCDE, 2012b). Además, las
mejoras no serán uniformes, ya que se prevé un crecimiento del PIB de las economías emergentes
y en desarrollo significativamente superior al de las economías avanzadas: un 5,5% en
comparación con un 1,4% previstos para 2013 (FMI, 2013). A pesar de que existen algunos
motivos para el optimismo en relación con la recuperación, esta no será rápida; de hecho, en este
sentido la OCDE y el FMI destacan los riesgos potenciales que acechan a la economía mundial
debido a las dificultades que atraviesa la Eurozona (FMI, 2013; OCDE, 2012b).
La perspectiva del empleo
Incluso en caso de producirse mejoras en la economía mundial, el problema del desempleo, y
en particular del desempleo de larga duración, continúa siendo significativo. Las economías
avanzadas han sido el “epicentro” de la crisis del empleo, produciéndose en estas economías más
de la mitad del paro desde el inicio de la misma. Sin embargo, en 2012 las consecuencias de los
problemas económicos de las economías avanzadas afectaron a otras regiones, especialmente al
África Subsahariana y al Sur y Este de Asia. Como puede observarse en la Figura 1, en 2012 se
contaban “unos 197 millones de desempleados” y desde 2007 la brecha de empleos se ha ampliado
en 67 millones (OIT, 2013). Para 2014, la OIT estima un aumento de aproximadamente ocho
millones de desempleados (OIT, 2013).
3
Figura 1. Tendencias y pronósticos de desempleo de la OIT
Nota: El gráfico muestra las tendencias pasadas y los pronósticos para 2012 en adelante en relación con el desempleo mundial (tasa y
número absoluto). Fuente: OIT (2013), Tendencias Mundiales del Empleo 2013: Para recuperarse de una segunda caída del empleo.
Las dificultades a las cuales se enfrenta cada país para mejorar la participación y los
resultados del mercado laboral son diferentes; así, algunos países se centran en reducir el
desempleo y abordar el desempleo de larga duración, mientras que otros se centran en la necesidad
de aumentar la participación en grupos específicos. Como puede observarse en la Figura 2, en
determinados países, como Canadá (CAN), Alemania (DEU), Japón (JAP), México (MEX) y
Estados Unidos (USA), la tendencia ha sido un descenso del desempleo desde al menos 2010, e
incluso antes en el caso de Alemania, donde las reformas estructurales del mercado laboral se
pusieron en práctica antes de la crisis.
Sin embargo, resulta importante observar en mayor profundidad el mercado laboral de un país
para evaluar las dificultades existentes. Por ejemplo, a pesar de que el desempleo en EE.UU. se ha
reducido anualmente, los datos de la Oficina Estadounidense de Estadísticas de Empleo (2013a;
2013b) muestran que el desempleo de larga duración (27 semanas o más) aumentó entre 2010 y
2011 (desde un 41,6% a un 44% del total de desempleados). A pesar de la reducción en 2012 a un
38,1%, en torno a 4,7 millones de personas, resulta evidente que continúa tratándose de un
problema importante. Asimismo, a pesar de que el desempleo en algunos sectores de EE.UU.,
como la construcción, continúa encontrándose por debajo de sus niveles precrisis, otros sectores,
como el sanitario y el educativo, han sufrido un aumento notable del desempleo (OIT, 2013). La
OIT (2013) ha sugerido que el desequilibrio entre las cualificaciones y las necesidades de los
empleos están contribuyendo al desempleo, destacando la importancia de desarrollar competencias
acordes con la oferta y la demanda de las mismas. Este tema se tratará más adelante.
4
Figura 2. Tasas de paro armonizadas (porcentaje de población activa civil)
Fuente: Base de datos estadísticos de la OCDE - http://stats.oecd.org
Por qué preocupa el desempleo de larga duración
El desempleo de larga duración presenta importantes consecuencias socio-económicas. Las
personas afectadas se enfrentan a un mayor riesgo de sufrir enfermedades, a la vez que los jóvenes
sin empleo, estudios ni formación presentan una probabilidad tres veces mayor de sufrir depresión
(Lee et al, 2012). Un informe conjunto de la OIT, la OCDE, el FMI y el Banco Mundial (2012)
destacó que el desempleo de larga duración trae consigo "sustanciales costes sociales relacionados
con el desempleo de larga duración; ya que se asocia con mayor riesgo de pobreza, problemas
sanitarios y fracaso escolar de los hijos de las personas afectadas" (ILO et al., 2012, pág. 2).
Tampoco pueden subestimarse los costes económicos del desempleo de larga duración. Los
períodos prolongados de desempleo pueden producir pérdida de capacidades relevantes y, en
última instancia, el desánimo de las personas para participar en el mundo laboral (OCDE, 2012a).
Este último riesgo parece resultar especialmente importante en el caso de jóvenes y trabajadores
poco cualificados, quienes han sido los más afectados por la crisis, mientras que con frecuencia se
observan tasas bajas persistentes de participación en mujeres y trabajadores de edad avanzada
(ILO et al, 2012, pág. 9). La preocupación por la inactividad no es nueva y la OCDE, ya antes de
la crisis, presentó informes acerca de una “preocupación creciente sobre las bajas tasas de empleo
de determinados grupos, como mujeres, trabajadores de edad avanzada, jóvenes e inmigrantes,
especialmente teniendo en cuenta las perspectivas de envejecimiento de la población” (OCDE,
2006, pág. 128). Por este motivo, además de las intervenciones para mejorar las perspectivas del
mercado laboral en general, también se necesitan iniciativas a medida adaptadas a las necesidades
específicas de los grupos vulnerables, a fin de evitar que partes significativas de la población
activa permanezcan infrautilizadas.
Nunca se insistirá lo suficiente en la importancia de las políticas activas de mercado laboral y
de las intervenciones tempranas para reducir el riesgo de desempleo de larga duración y garantizar
la permanencia en el mercado laboral. Abordar el desempleo de larga duración significa mucho
más que "simplemente empleos" y las intervenciones tempranas que sirven para minimizar los
costes del desempleo de larga duración y ayudar a las personas a reincorporarse al mundo laboral,
deben abordar las barreras complejas a que pueden enfrentarse.
5
Afrontar el desempleo de larga duración
A pesar de que el problema actual del desempleo de larga duración viene activado parcialmente por el
impacto de las crisis económica y financiera, y la débil recuperación posterior, resulta importante ver más
allá y descubrir el amplio espectro de barreras que dificultan el encontrar un trabajo. El trabajo realizado
como parte del proyecto LEED de la OCDE “Afrontar el desempleo de larga duración en grupos
vulnerables” identificó algunas de las barreras inmediatas y a largo plazo que contribuyen al desempleo de
larga duración.
Barreras inmediatas
Poca cualificación/cualificación no demandada
Barreras a largo plazo
Bajas aspiraciones
Falta de experiencia laboral (reciente)
Escasez de recursos financieros (y sus consecuencias)
Escasa motivación
Ausencia de redes sociales positivas
Falta de disponibilidad
Aislamiento y bolsas de pobreza
Falta de comprensión del empleador
Escaso acceso a servicios
Discriminación
Problemas de salud
Para abordar el desempleo, y el desempleo de larga duración en particular, no sólo deben observarse
las barreras inmediatas para conseguir un empleo, como la falta de cualificaciones y de experiencia laboral,
sino también aquellas a largo plazo. Asimismo, al mismo tiempo debe reconocerse y abordarse la
interacción entre estos dos tipos de barreras.
Para una persona que puede haberse enfrentado a discriminación, que vive en un área con
oportunidades de empleo limitadas y que carece de redes sociales positivas, ofrecerle oportunidades de
formación, a pesar de resultar un aspecto importante, no abordará el conjunto de barreras complejas que le
impiden conseguir un empleo o que hacen de ese individuo una persona vulnerable para sufrir desempleo
de larga duración. Lo que se necesita son intervenciones amplias y efectivas que vayan más allá de la
agenda tradicional centrada en la economía y el empleo, a fin de incorporar factores más amplios que
limitan las opciones de empleo. Tales intervenciones deben implicar a una amplia variedad de agentes y, de
hecho, un tema central presente a lo largo de este documento es la función importante que pueden
desempeñar los diferentes agentes para ayudar a superar las barreras para el empleo. Como demostrarán de
modo reiterado los ejemplos que se ofrecen a continuación, la colaboración resulta crucial para afrontar el
desempleo de larga duración.
El resto de este documento se divide en tres secciones. La primera se centra en los enfoques prácticos,
desde mejorar las competencias hasta orientarse hacia nuevos sectores en busca de oportunidades de
creación de empleo. La segunda sección explora la política y los mecanismos de prestación de servicios que
el trabajo del LEED de la OCDE ha identificado como cruciales para abordar el desempleo de un modo
efectivo. En numerosos países, el desempleo juvenil supone un problema significativo y la sección final
examina las medidas que han tenido éxito en el apoyo a los jóvenes, a fin de encontrar en empleo o
permanecer contratados, incluyendo la función de la formación profesional y la transición del sistema
educativo al mundo laboral.
Superar el desempleo de larga duración: Enfoques prácticos
Existen numerosas medidas que pueden tomarse para abordar el desempleo de larga duración, y esta
sección ofrece una breve revisión de los diferentes enfoques, incluida la importancia del desarrollo de
competencias y del equilibrio entre la oferta y la demanda de cualificaciones. Este último aspecto también
se tendrá en consideración en la sección sobre política efectiva y mecanismos de prestación de servicios.
6
Competencias
En el contexto de la economía basada en el conocimiento, las competencias son la moneda
mundial del siglo XXI y, por ello, es de máxima importancia garantizar que las personas cuenten
con las capacidades necesarias para un mercado laboral que evoluciona a gran velocidad (OCDE
2012c). El desequilibrio entre la oferta y la demanda de cualificaciones es un factor importante en
las tasas de desempleo, y mientras que los trabajadores poco o no cualificados constituyen un
grupo claramente vulnerable para sufrir desempleo de larga duración, con el tiempo, las
competencias más valiosas pueden llegar a ser redundantes (OIT, 2013; OCDE 2012c). En
consecuencia, esta “agenda” de competencias debe ser de amplio alcance, dirigiéndose a aquéllos
poco o no cualificados mediante mejora continua de las competencias y formación permanente.
Abordar las necesidades de competencias únicamente en situación de desempleo puede significar
que se ha perdido la oportunidad de mantener una persona en empleo, garantizando que sus
capacidades se ajustasen a las necesidades de los empleadores.
Actuar con trabajadores poco o no cualificados
Los trabajadores poco o no cualificados resultan especialmente vulnerables para sufrir
desempleo o conseguir empleos precarios (OECD, 2012c), por lo que resulta crucial actuar
directamente en estos individuos con programas educativos y formativos, con el objeto de mejorar
sus opciones para encontrar y mantener un empleo digno y estable. Estos programas deben
garantizar que se proporcionan las competencias básicas, si se necesitan, y diseñarse para
satisfacer las capacidades que se demandan. Adecuar las competencias con las necesidades de los
empleadores ayuda a garantizar que las personas puedan aprovechar las oportunidades de empleo
en cuanto se encuentren disponibles. En China, por ejemplo, la formación profesional para
trabajadores emigrantes rurales se centra particularmente en la demanda de competencias creada
por la reestructuración de la industria local, la mejora tecnológica y los nuevos proyectos de
construcción con financiación estatal (incluidas vías férreas, autopistas y producción de energía)
(Dong, 2012). Proporcionar a quienes son poco cualificados las competencias que solicitan los
sectores en crecimiento aumenta sus opciones de encontrar y conservar un empleo.
Llegar al público objetivo también es una consideración importante al dirigirse a las personas
poco o no cualificadas, de las cuales no todas pueden acceder a organizaciones o instituciones
“tradicionales” centradas en mejorar las competencias. En el Reino Unido, la iniciativa
“Unionleam” ha demostrado cómo el apoyo ofrecido por los sindicatos para mejorar las
competencias puede extenderse desde la ayuda a trabajadores poco cualificados ya empleados
hasta los grupos vulnerables desempleados. El programa ofrece un enlace entre los solicitantes de
empleo, los proveedores de formación y las organizaciones de la comunidad. Un “Organizador de
enseñanza de la comunidad”, normalmente un entusiasta local, promueve el aprendizaje entre
amigos y vecinos de su propia comunidad. Este modo de llegar al público es crucial para
comprometer a aquellos a quienes no pueden llegar las agencias “tradicionales”, así como para
ayudar a las personas a reconectarse con los entornos de la enseñanza y del mercado laboral (Dean,
próximamente).
El reconocimiento de las competencias informales también puede contribuir a mejorar las
opciones de encontrar un empleo, lo cual reduce la vulnerabilidad y el desempleo de larga
duración. Chile ha tenido experiencias con buenos resultados en relación con la mejora de
competencias en los sectores de las frutas y verduras. Como parte de los esfuerzos del país por
desarrollar su mano de obra en estos sectores, el Programa de Certificación de Competencias
Laborales otorga certificados que reconocen las competencias de los trabajadores,
independientemente del modo en que las hayan adquirido. Además, se encuentran disponibles
cursos de formación para aquellos trabajadores cuyas competencias informales no resultan
suficientes para permitirles obtener un certificado (Bamber, Gereffi y Fernández-Stark, 2011).
7
Mejora de competencias y formación permanente
Invertir en competencias no debe considerarse una intervención aislada dirigida únicamente a
trabajadores poco o no cualificados, sino que éstas deben desarrollarse a lo largo de la vida laboral de la
persona para mantener su valor. Como ya se ha comentado anteriormente con respecto a los EE.UU.,
numerosas personas cualificadas han visto que sus competencias resultaban innecesarias y que los
empleadores ya no las solicitaban. Asimismo, el desequilibrio entre la oferta de competencias de los
trabajadores y la demanda de las mismas por parte de los empleadores supone un problema grave (OIT,
2013). Sin un desarrollo y mejora continuos, las personas pueden encontrarse en una posición vulnerable
para sufrir desempleo de larga duración.
En Sooke, Columbia Británica (Canadá), el proyecto “Prime Time Workers” (Trabajadores en edad de
rendimiento máximo) se dirigió a trabajadores de los sectores de la pesca y la silvicultura. Durante el
proyecto de diez semanas, se trabajó durante cinco semanas en el aula para mejorar la empleabilidad de los
participantes con mejora de las competencias, como conocimientos informáticos, destrezas comunicativas y
resolución de problemas, fomento del espíritu de equipo y otras competencias relevantes que pueden no
haberse “adquirido en una época económica y tecnológica diferente” (Froy y Giguère 2010, pág. 19). El
tiempo restante se dedicó a la experiencia laboral práctica con supervisión y seguimiento in situ. En
EE.UU., el Departamento de Servicios a Pequeñas Empresas de la ciudad de Nueva York apoya la mejora
de competencias de trabajadores poco cualificados y con baja remuneración que trabajan a jornada
completa, ofreciéndoles financiación parcial para formación en el puesto de trabajo o mejora de las
aptitudes profesionales fuera del lugar de trabajo; así como clases de inglés como segunda lengua,
alfabetización de adultos y formación en matemáticas (Thévenot, 2010). Trabajar con personas que ya
tienen un empleo para permitirles mejorar aptitudes transferibles, no sólo puede contribuir a evitar el
desempleo de larga duración, al reducir la vulnerabilidad de estos trabajadores, sino que puede ayudarlos a
acceder a mejores empleos.
La mejora de competencias no sólo es importante para los menos cualificados: “la formación
permanente y dirigida, especialmente en mitad de la carrera profesional, puede mejorar las posibilidades de
encontrar un empleo más adelante y evitar el abandono temprano del mercado laboral” (OCDE, 2012c, pág.
64). Sin embargo, la formación permanente continúa siendo baja y la OCDE ha observado que en los países
miembros sólo "un poco más de un cuarto de los adultos en edad de trabajar ha participado recientemente
en una formación relacionada con el empleo" (OCDE, 2013, pág. 74). Ofrecer oportunidades de formación
continua es importante, a fin de limitar las opciones de que las competencias de una persona se vuelvan
innecesarias y para actuar contra el riesgo de que las personas se vuelvan vulnerables para sufrir desempleo
de larga duración. Asimismo, las políticas de formación específicas que se focalizan en las partes dinámicas
de la economía pueden ayudar a los individuos a encontrar nuevas vías hacia el empleo, cuando sus
competencias se hayan vuelto innecesarias (OIT, 2013).
Ya se ha mencionado la importancia de mantener el vínculo con el mercado laboral, y en Friesland
(Dinamarca), las personas cuyas cualificaciones se han vuelto innecesarias, o en riesgo de que puedan
volverse innecesarias como resultado de la crisis, reciben la ayuda del Centro de Movilidad “De vliegende
brigade” (la brigada volante), cuyo trabajo consiste en ayudar a empresas en dificultades a encontrar
soluciones temporales para sus trabajadores. Entre las soluciones se incluyen formación adicional para el
personal, trabajo a corto plazo o ceder empleados a otras empresas donde existe un déficit de trabajadores
cualificados. Esta cooperación entre servicios públicos de empleo y empleadores ha convencido a los
empleadores locales para que paguen por la formación para empleados cuya cualificación se haya vuelto
innecesaria, con el reconocimiento de que una vez que la economía mejore la situación de las empresas, se
necesitará una bolsa de trabajadores cualificados (Froy et al., 2011). Este enfoque ayuda no sólo a
desarrollar competencias, sino también a retener la conexión con el mercado laboral, y refleja el valor de la
formación permanente en el caso de trabajadores cualificados.
Superar las múltiples barreras del mercado laboral
Mientras que la insuficiencia o la falta de cualificación constituyen una barrera central de los
mercados laborales actuales, la situación a menudo empeora por la complejidad de las barreras a las que se
enfrentan las personas. En Australia, la población indígena
8
se enfrenta con frecuencia a múltiples barreras, incluida la discriminación, la pobreza, la exclusión social y
la estigmatización, lo cual la aleja progresivamente del mercado laboral. Las iniciativas como “Barragali”
(“Motivo para actuar”), dirigida por Campbell Page, un servicio de empleo sin ánimo de lucro, desafían los
estereotipos tradicionales existentes en torno al empleo de los aborígenes y ayudan a empleadores y
empleados a lo largo del proceso de contratación y formación (Campbell Page, 2013).
En Bélgica, encontramos otro ejemplo de cómo afrontar las múltiples barreras, con el programa del
servicio público de empleo flamenco “Vuelta al trabajo”, cuya finalidad es ayudar a exconvictos a
reincorporarse al mercado laboral. En este programa, los asesores apoyan a los presos con orientación sobre
el mercado laboral, así como con formación profesional y de habilidades de vida. Para superar los “puntos
negros” típicos de los CV de los reclusos, se certifican las competencias profesionales adquiridas en prisión.
Superar la reticencia de los empleadores a contratar a exconvictos es un aspecto crucial del programa. En
Hasselt, “Vuelta al trabajo” desarrolló una red que implicó a empleadores, al sector público y a agentes
sociales que contribuyeron a mejorar la comunicación en torno a este asunto. Un folleto con trucos y
consejos para la contratación de exconvictos, el cual reflejaba una amplia variedad de puntos de vista,
también ayudó a mejorar las perspectivas de empleo de este grupo de difícil colocación (Dean,
próximamente).
La economía social, constituida por las organizaciones que trabajan en el espacio entre el estado y el
mercado, incluidas cooperativas, asociaciones, mutualidades, fundaciones y empresas de economía social,
constituye un actor importante en el apoyo de la vuelta al trabajo del desempleado de larga duración (Noya
y Clarence, 2007; Noya, 2009). En Australia, la empresa de economía social Magic Green Clean trabaja
con nuevos refugiados e inmigrantes que sufren desempleo de larga duración, ayudándolos a desarrollar
habilidades técnicas y de vida antes de encontrar un empleo en el mercado laboral. Se han evaluado los
beneficios económicos y sociales del trabajo de las empresas de economía social, observándose que las
personas con empleo presentan mejoras en su salud y bienestar. Por otra parte, un análisis de costebeneficio demuestra que, a largo plazo, se producen beneficios significativos por el ahorro en los sistemas
de prestación de desempleo, la mayor recaudación fiscal y el valor económico de los gastos individuales
(Quinn, 2011).
Actuar en áreas desfavorecidas
Otro enfoque para llegar a los grupos vulnerables del mercado laboral son las iniciativas basadas en
áreas, en las cuales se actúa en áreas deprimidas o "bolsas de pobreza" que presentan una concentración
elevada de personas desfavorecidas. Un ejemplo de este tipo de intervención estratégica lo ofrece
Gloucester Works en el Reino Unido, que unió con éxito a los habitantes locales con los empleadores de la
zona. El programa ofrecía a los solicitantes de empleo formación en técnicas básicas de búsqueda de
empleo, como la elaboración del CV y técnicas para entrevistas de trabajo, así como ofertas de empleo en
grandes proyectos de desarrollo de la ciudad a través de colaboraciones entre oficinas de empleo y
empleadores. Se ofreció apoyo continuo a aquellos beneficiarios que conseguían un empleo. Dos claves del
éxito de Gloucester fueron el compromiso del Ayuntamiento, que hizo de la formación y de las actividades
de empleo un requisito para conceder a las empresas una licencia de obras; y, en segundo lugar, el apoyo
continuo e individualizado durante todo el "trayecto del cliente", desde el desarrollo de planes de acción
individuales para el desarrollo de competencias hasta el relacionamiento con la vacante y el apoyo en el
trabajo, que demostró ser una práctica de éxito para garantizar el empleo continuado (Dean, próximamente).
Aprovechar nuevas oportunidades
La intervención en el mercado laboral no sólo debe abordar el relacionamiento de las personas con las
vacantes existentes, sino que se necesitan nuevas oportunidades de empleo para afrontar el creciente
desempleo. Tales
9
oportunidades pueden venir de sectores en crecimiento, como la “economía verde”, la “economía sénior” y
la “economía blanca” (OCDE, 2011; Martínez Fernández et al., 2012).
La “economía verde” representa un área importante que "tiene el potencial de abordar desafíos
económicos y medioambientales y abrir nuevas fuentes de crecimiento", por ejemplo, a través de mayor
productividad utilizando menos recursos materiales, innovación y la apertura de nuevos mercados (OCDE,
2011). De hecho, dada la necesidad de "separar el crecimiento económico de presiones medioambientales
insostenibles" (OCDE, 2012a, pág. 164), la “economía verde” debe desempeñar una función importante en
la futura creación de empleo. A pesar de que un crecimiento más ecológico supondrá nuevas oportunidades
de empleo, incluido trabajo cualificado en actividades ecológicas innovadoras, algunos trabajos peligrarán.
Por este motivo, deben coordinarse políticas para el mercado laboral con políticas medioambientales, a fin
de “facilitar la reubicación de trabajadores de sectores en contracción en sectores en expansión, como
aquellos que sustituyen actividades contaminantes por alternativas más limpias o que ofrecen servicios
medioambientales” (OCDE, 2011, pág. 13). Pueden surgir nuevas oportunidades en áreas como:
rehabilitación de edificios, inversión en recursos renovables, turismo local sostenible, inversión en
infraestructuras de transporte público e industrias de reciclado (Froy y Giguère, 2010).
Ejemplos de estrategias laborales ecológicas en EE.UU. muestran cómo el cambio a una economía
más ecológica puede beneficiar el empleo local. Centrando la atención en los trabajadores poco
cualificados, el Programa RichmondBUILD en Richmond, California, es una colaboración público-privada
que ofrece instalaciones de sistemas solares a un coste reducido o de modo gratuito a propietarios de
viviendas con rentas bajas, y les ofrece un programa de formación especial de técnicas de construcción de
ocho semanas con un módulo solar adicional de dos semanas. El Programa ha ayudado a los participantes,
el 95% de los cuales procede de minorías étnicas y en torno al 30% ha sufrido algún “percance” con la
justicia, a acceder al empleo en empresas de construcción y solares locales (Froy y Giguère, 2010, pág. 51;
City of Richmond, 2013). En Arlington, Virginia, el Plan de Energía Comunitaria, destinado a reducir las
emisiones de dióxido de carbono de la zona, se está utilizando para generar nuevas competencias y
oportunidades de empleo en áreas como la construcción y la rehabilitación de viviendas y edificios, además
de ofrecerse nuevas oportunidades de formación profesional en universidades y otras instituciones
(Garforth y Medearis, 2011, pág. 12).
Otras oportunidades pueden proceder de la denominada “economía sénior”, la cual se refiere a los
productos y servicios nuevos diseñados para personas de edad avanzada, así como de la “economía blanca”,
en la que pueden surgir empleos en el ámbito sanitario como consecuencia del envejecimiento de la
población (Martínez-Fernández et al., 2012). En la Francia rural, se han creado nuevas oportunidades de
empleo de calidad mediante el desarrollo de instalaciones de vida asistida para personas de edad avanzada.
El concepto de “Villa familiar” les permite continuar viviendo en su localidad gracias a las viviendas
especialmente diseñadas para el cuidado de personas de la tercera edad. El concepto ha sido desarrollado
con colaboración entre emprendedores locales y autoridades locales y regionales, y ha supuesto la demanda
de mano de obra en las zonas rurales. Por ejemplo, la empresa privada “Ages et Vie” emplea a "anfitriones"
locales, normalmente con formación en enfermería o trabajo social, para ocho viviendas especialmente
creadas en torno a la ciudad de Besancon. La mejora de las competencias de estos trabajadores ha sido
subvencionada por las autoridades regionales (Froy y Giguère, 2010, pág. 53). Estos tres ejemplos destacan
un aspecto más amplio: identificar nuevas áreas de crecimiento económico y relacionarlas con programas y
estrategias de formación y empleo puede ayudar a reducir el desempleo. Este relacionamiento exige
políticas efectivas y mecanismos de prestación de servicios, que es el tema de la siguiente sección.
10
Política efectiva y mecanismos de prestación de servicios
El trabajo del LEED de la OCDE ha señalado la importancia de poner en práctica mecanismos que
apoyen el desarrollo de oportunidades de empleo de calidad, mejoren la coherencia y coordinación del
diseño de las políticas a nivel local y permitan aprovechar totalmente los recursos disponibles. Los
elementos identificados como centrales a este respecto son colaboraciones amplias; enfoques transversales;
mayor flexibilidad local y evaluación efectiva (ver Froy y Giguère, 2010).
Colaboraciones amplias
Las colaboraciones pueden desempeñar una función crítica para superar las barreras del mercado
laboral a escala local, al conectar políticas y crear vínculos entre agentes locales, así como entre diferentes
agentes gubernamentales; de modo que puedan mejorarse la efectividad y la eficiencia de la prestación de
servicios de empleo locales. Como tal, las colaboraciones son "un modo de mejorar su acción, no un
sustituto de la acción” (Giguère, 2005) y pueden ayudar a desarrollar un enfoque coordinado e informado
para ajustar la oferta con la demanda de competencias, identificando las necesidades a corto y medio plazo,
así como las prioridades futuras. Las colaboraciones exitosas se construyen sobre los aspectos fuertes de los
diferentes agentes locales y ayudan a garantizar que se prioriza el uso de recursos, de acuerdo con las
necesidades locales; a la vez que se garantiza que no se deja atrás a aquéllos que son de más difícil acceso
(Barr et al., 2012).
Un ejemplo del Lower Rio Grande Valley, en Texas, EE.UU., muestra cómo una colaboración
estratégica puede conectar el desarrollo económico regional con el empleo y las competencias para
beneficio de las poblaciones locales. La iniciativa fue dirigida por la entidad de contratación McAllen
Economic Development Corporation y Greater McAllen Alliance, las cuales junto con agentes locales
formularon una visión fuertemente basada en las competencias para que la región se convirtiese en un
“centro de producción de respuesta rápida”. La junta local de desarrollo de mano de obra, Workforce
Solutions, junto con el South Texas College, y otras instituciones educativas, garantizaron que se
proporcionase formación para crear mano de obra acorde con la nueva estrategia económica. Globalmente,
se atrajo a la región a más de 500 empleadores y casi 100.000 empleos, reduciendo las tasas de desempleo
en McAllen en más de la mitad desde principios de la década de 1990 (Froy y Giguère, 2010).
Enfoques transversales
Como lo demuestra la amplia variedad de barreras para el empleo, los factores que contribuyen al
desempleo de larga duración son complejos y polifacéticos. Dicho esto, es crucial entonces que las
intervenciones en el mercado laboral tomen en cuenta cómo las acciones en un área pueden afectar, positiva
o negativamente, a otras áreas de actividad. Para asegurar que las acciones producen resultados positivos,
debe garantizarse la agrupación de los recursos y la reducción de los costes de transacción. Como se ha
demostrado anteriormente, una forma de abordar este problema es crear colaboraciones efectivas a nivel
local (Barr et al., 2012). Otro método posible es unir servicios para evitar que diferentes departamentos
trabajen de modo aislado. En un estudio de prestación de servicios de empleo en el Condado de Nevada
(EE.UU.), Michaelides et al. (2012) descubrieron que ofrecer apoyo continuo con evaluación de idoneidad
(REA) y servicio de reempleo (RES) produjo mejores niveles de eficacia. La REA ofreció servicios como:
información sobre el mercado laboral; evaluación de la idoneidad para el seguro de desempleo; y desarrollo
de una plan de reempleo individualizado. Por su parte, el RES ofreció ayuda en áreas como: búsqueda de
empleo, redacción del CV y recomendaciones para la participación en programas de formación. A pesar de
que estos servicios normalmente se suministran por separado, al combinarlos en la misma entrevista
personal organizada por el mismo personal, Nevada consiguió reducir el período de desempleo
11
que sufrían los desempleados y, por consiguiente, ahorrar en el fondo Seguro de desempleo del condado
(Michaelides et al., 2012).
Llegar a trabajar de manera conjunta es claramente un factor importante para luchar de un modo
efectivo contra el desempleo de larga duración. Al mismo tiempo, también es necesario trabajar de manera
conjunta en el ámbito financiero. El uso estratégico de las licitaciones constituye una forma de garantizar
que los recursos públicos tengan un máximo impacto a la hora de cumplir amplios objetivos estratégicos
referentes a la creación de empleo y al desarrollo de la economía local; así como para abordar temas
sociales, económicos y medioambientales. Estas acciones no deben realizarse a costa de pérdida de
“calidad-precio”. Con demasiada frecuencia, cuando se habla de relación calidad-precio se piensa en el
coste más bajo; sin tener en consideración los costes sociales, económicos y medioambientales, o incluso
los beneficios que puedan obtenerse. El ejemplo australiano de Magic Green Clean, tratado anteriormente,
se benefició de licitaciones estratégicas y produjo una rentabilidad socio-económica significativa. En Gales
(Reino Unido), el enfoque “Beneficios para la comunidad” busca garantizar que la contratación pública se
utilice para alcanzar objetivos económicos, sociales y medioambientales mediante la inclusión del
desarrollo sostenible en el proceso de contratación. “Beneficios para la comunidad” garantiza que los
contratos públicos no sólo apoyen a las PYMES y a la participación de la economía social en los procesos
de contratación pública, sino que promuevan la igualdad, ofrezcan formación y garanticen que el trabajo
cumpla unos requisitos mínimos. “Beneficios para la comunidad” contribuyó a reducir el impacto de la
ralentización económica en el sector de la construcción galés, de modo que mientras el desempleo en la
construcción en el Reino Unido aumentó hasta un 15%, en Gales el aumento fue de sólo un 0,4%. Al
mismo tiempo, una evaluación temprana del enfoque destacó cómo seis contratos completados, “por valor
de 146 millones de libras esterlinas, produjeron 56 millones de libras en salarios para la población galesa y
68 millones de libras gastados en empresas establecidas en Gales, aproximadamente un 82% de las cuales
eran PYMES. Además, también se proporcionó a los aprendices y a las personas desfavorecidas formación
y experiencia laboral” (Barr et al., 2012, pág. 57). El uso estratégico de la contratación pública puede
presentar beneficios muy amplios, no sólo en el empleo y la mejora de competencias, sino también en la
mejora del bienestar de las personas y las comunidades.
Mayor flexibilidad local
Para permitir a los agentes locales responder a las barreras específicas del mercado laboral
encontradas en sus áreas, se ha destacado en diferentes ocasiones la necesidad de que los servicios de
empleo locales disfruten de flexibilidad a la hora de ofrecer formación y programas de empleo (Giguère y
Froy, 2009; Froy et al., 2011). De hecho, un factor clave para el éxito del enfoque de McAllen Economic
Development Corporation descrito anteriormente fue la flexibilidad proporcionada por el sistema de
exención del Departamento de Trabajo norteamericano; mediante el cual podían emplearse de modo
flexible los fondos para la formación de trabajadores, lo que permitió que la región ampliase el número de
personas que podía participar en estos programas (Froy y Giguère, 2010). Dinamarca ofrece otro ejemplo
del valor de la flexibilidad local. En 2007, se eliminaron las agencias estatales de empleo y todos los
asuntos administrativos relacionados con las políticas activas del mercado laboral se transfirieron a las
autoridades locales (Crowley et al., 2013). Cuatro años después de la reforma, el 79% de los directores de
los centros municipales de empleo observaron que no existía ninguna prioridad del mercado laboral local
que no pudiesen abordar (Froy et al., 2011).
La descentralización política no debe considerarse como un requisito absoluto para la flexibilidad
local, sino que el requisito clave es que los gobiernos centrales permitan suficiente libertad en su prestación
de servicios de empleo (Froy y Giguère, 2010). En Nueva Zelanda, país con un mercado laboral poco
flexible caracterizado por baja productividad del trabajo y gran escasez de cualificación, se han realizado
esfuerzos por mejorar la flexibilidad local en los servicios de empleo y formación. A pesar de que la
política general surge del gobierno central, existe un ámbito claro en que se incorporan las escalas local y
regional, lo que facilita el diseño y la oferta de
12
soluciones locales (Giguère y Froy, 2009). La flexibilidad local tampoco debe menoscabar la
responsabilidad de rendir cuentas. El hecho de fijar objetivos de resultados amplios, en lugar de resultados
específicos, puede ayudar a proporcionar un elevado nivel de flexibilidad local a la vez que se garantiza
una rendición de cuentas clara (Froy et al., 2011).
Evaluación efectiva
A fin de diseñar intervenciones estratégicas, basadas en las pruebas y adaptadas a las condiciones
locales, resulta crucial adquirir un conocimiento profundo de los problemas del mercado laboral local, así
como contar con enfoques efectivos para superarlos (Froy y Giguère, 2010). Asimismo, el Foro del LEED
de la OCDE sobre colaboraciones y gobierno local ha destacado el valor de desarrollar una estrategia de
evaluación clara para conocer si las intervenciones están ofreciendo los resultados esperados. Esta
evaluación puede ayudar a resolver cualquier posible diferencia entre los colaboradores en términos de
logros deseados y garantiza la rendición de cuentas y la transparencia del uso efectivo de los recursos
públicos (Galliers, 2009).
En Dinamarca, se está creando un “banco de conocimientos” a partir de las medidas para el mercado
laboral evaluadas. En una página web (jobindstas.dk), cada municipio puede analizar, comparar y usar
como referencia sus logros en relación con los objetivos nacionales y con lo realizado en otros municipios.
Los datos se encuentran disponibles de modo gratuito y se obtienen mediante los registros de municipios y
otras entidades públicas. De este modo, la recopilación de datos es “automática” y se vincula al Sistema de
registro civil danés y al Sistema central de empresas, lo que significa que puede evitarse el coste de
informar por centro de empleo y municipio, lo que supone un ahorro que puede destinarse a otros
programas y proyectos (Froy et al., 2011). Al mismo tiempo, debe existir una disposición a utilizar
diferentes enfoques para evaluar los resultados. En Copenhague (Dinamarca), se descubrió que se estaba
sancionando a los jóvenes por no asistir a reuniones (desagradable para los jóvenes y un malgasto de
recursos de personal para los centros de empleo). Con ayuda de antropólogos para investigar porqué se
estaba produciendo esta situación, se descubrió que los jóvenes consideraban el centro de empleo como
poco acogedor y desordenado. Trabajando con el personal y los jóvenes, los antropólogos pudieron sugerir
cambios con el fin de superar las barreras identificadas por los jóvenes y mejorar su relación con el centro
de empleo (URBACT, próximamente). Reconocer que la evaluación se puede realizar de diferentes
maneras puede crear nuevas formas para mejorar la oferta de servicios y de los resultados, y puede
garantizar que no quedan necesidades sin cubrir.
Llegar a los jóvenes
El problema del desempleo juvenil resulta especialmente preocupante, en particular en la zona Euro,
en la que Grecia y España presentan tasas de desempleo juvenil superior al 50% (OIT, 2013). Como
muestra la Figura 3, entre 2007 y 2012, el número de jóvenes sin empleo ni formación o estudios (Ninis) ha
crecido de modo significativo en algunos países miembros de la OCDE. Este aumento no sólo preocupa
por el impacto económico de abandonar los estudios y la formación, sino por el impacto social más amplio
que supone sufrir estos niveles tan elevados de desafección entre los jóvenes.
En el caso de los jóvenes, el desempleo puede afectar gravemente a su futuro. Intervenir temprano y
garantizar que los jóvenes puedan mantener una conexión con el mercado laboral, o mejorar sus
competencias mediante formación para que puedan incorporarse al mercado laboral en el futuro, puede
ayudar a reducir los efectos a largo plazo que puede provocar el desempleo (OCDE, 2012a). Además,
proporcionar a los jóvenes la ayuda que necesitan para desarrollar las competencias que necesitan para el
mercado laboral y crear buenas “transiciones” del sistema educativo al mundo laboral resulta importante,
así como lo es pensar en medidas concretas para satisfacer necesidades específicas.
13
Figura 3. Tasas de jóvenes “Ninis” en los países miembros de la OCDE
Fuente: Base de datos estadísticos de la OCDE - http://stats.oecd.org
Estudios y formación profesional
Es importante crear un sistema educativo y de formación que responda a las diferentes aptitudes,
competencias e intereses de los jóvenes para crear vínculos sólidos entre ellos y el mercado laboral. En
Alemania, el sistema de educación y formación profesional (EFP) es un elemento clave para evitar el
desempleo juvenil; en concreto, se trata de un sistema que alterna el tiempo de los alumnos entre formación
profesional y estudios generales, al mismo tiempo que ofrece unos tres días a la semana en un puesto de
aprendizaje asalariado y a jornada parcial. Una clave del éxito del sistema EFP alemán es el elevado nivel
de compromiso de empleadores, incluidas las pequeñas y medianas empresas, y otros agentes sociales,
como los sindicatos y las cámaras de comercio; un compromiso que no se limita a ofrecer tan solo puestos
de trabajo reales, sino que también contribuye a crear programas de estudio relevantes para abordar las
necesidades de competencias. Sin embargo, un problema importante del sistema EFP alemán es que los
grupos desfavorecidos pueden enfrentarse a dificultades para acceder a estos programas. Por ejemplo, la
tasa de participación de jóvenes con origen inmigrante en la formación de aprendizaje alternado fue del
32,2% en 2009, en comparación con el 68,2% de aquellos sin este origen (Crowley et al., 2013). Estos
desafíos elevan el valor potencial de trabajar con grupos específicos de jóvenes desfavorecidos para superar
las barreras a las cuales se enfrentan.
Facilitar la transición del sistema educativo al mercado laboral
Si observamos la imagen general, la transición del sistema educativo al mercado laboral supone otra
área importante de intervención, a fin de ayudar a superar las barreras a que se enfrentan los jóvenes para
acceder al mercado laboral. En zonas de EE.UU., las industrias, los sistemas educativos y los servicios de
empleo han colaborado para proyectar “agrupamientos industriales” y determinar las necesidades de
competencias asociadas y las carreras laborales tanto para los que se incorporan como para los que se
encuentran en el mercado laboral. El condado de Montgomery, por ejemplo, con el tercer agrupamiento
biotecnológico más grande de los Estados Unidos, cuenta con un
14
consejo asesor del agrupamiento que se centra en biotecnología. El sistema de carrera profesional por
agrupamiento ha producido el desarrollo de programas, que se extienden desde el instituto hasta los
estudios universitarios, así como aprendizajes en el puesto de trabajo, lo cual ayuda a los alumnos en su
transición (Hamilton, 2012).
Un ejemplo práctico de una transición apoyada y dirigida por empleadores es la iniciativa "PG&E’s
PowerPathway" de California lanzada en 2008, en la que una de sus empresas energéticas líder se comunicó
con instituciones educativas de la comunidad, Juntas de inversión laboral y organizaciones de la comunidad
para crear una fuente de trabajadores jóvenes y cualificados, puesto que muchos de sus empleados estaban
alcanzando la edad de jubilación (Hamilton, 2012, pág.11). Esta iniciativa culminó con la creación de un
“Programa puente de aprendizaje/trabajo” de 12 semanas en la universidad de Fresno, y numerosos
alumnos que completaron el programa comenzaron a trabajar en PG&E (Hamilton, 2012).
Actuar con jóvenes desfavorecidos
Ofrecer servicios específicos para jóvenes significa poder dar respuestas individualizadas que aborden
las barreras específicas a que se enfrentan los jóvenes en el mercado laboral y que satisfagan sus
necesidades concretas. En la categoría de “joven”, pueden crearse subcategorías; por ejemplo, con división
espacial (comunidad o vecindario) o por subgrupos, por sexo, minorías étnicas o jóvenes desfavorecidos.
Para algunos jóvenes, como aquellos procedentes de minorías étnicas, la actuación específica puede ayudar
a superar la discriminación. Sin embargo, Froy y Pyne (2011) destacan la importancia de utilizar estas
actuaciones específicas con precaución, a fin de no reforzar actitudes negativas, como "racializando” la
pobreza en comunidades más desfavorecidas. Por este motivo, resulta crucial asegurarse de que la
actuación específica se realiza de un modo adecuado y, de hecho, prestar servicios generales a jóvenes
realizando una actuación “clandestina” dirigida a grupos específicos puede resultar útil para evitar posibles
resultados negativos.
BladeRunners en la Columbia Británica (Canadá) es un ejemplo efectivo de apoyo específico. Este
programa financiado por el gobierno ayuda a jóvenes desfavorecidos (edad comprendida entre 15 y 30 años)
a superar las múltiples barreras para el empleo y ayuda a crear carreras en la construcción y otros sectores.
Se ofrece un curso de formación de tres semanas, el cual incluye capacidades técnicas y de vida, así como
colocación laboral directa (el programa presenta una tasa de colocación del 77%). Además, BladeRunners
ofrece servicios de apoyo individual las 24 horas del día, los siete días de la semana, durante un período
indefinido después de la colocación. El fin último del programa es desarrollar las competencias y ofrecer
experiencia laboral, lo cual fomenta la conexión a largo plazo con el mercado laboral, así como apoyar la
integración social y en la comunidad de los jóvenes. Son 19 las organizaciones de servicio local que
ofrecen el programa y trabajan en colaboraciones formales e informales con una variedad de agentes,
incluidos empleadores de diferentes sectores (Dean, próximamente).
Otro ámbito importante de intervención lo constituye el abordar la falta de aspiraciones de algunos
jóvenes; por ejemplo, mostrando modelos positivos procedentes de un entorno social similar (Froy y Pyne,
2011, pág. 38). En Holanda, Hi5 es una empresa de economía social de éxito, que ha reconocido que a
menudo los jóvenes sufren de una baja autoestima, lo que los distancia del mercado laboral. Por este
motivo, se presta especial atención a elevar las aspiraciones y a crear conciencia de que “cada persona de la
sociedad es un cliente y/o empleado potencial” (URBACT, sin fecha). Además de ofrecer programas de
formación profesional por todo el país, la organización actúa como “intermediaria” que ayuda a los
empleadores a comprender el valor de las competencias que ofrecen los jóvenes y a los jóvenes a apreciar
las oportunidades que ofrecen los diferentes empleadores y empleos.
15
CONCLUSIÓN
La gran recuperación de empleos que se necesita urgentemente para combatir las crecientes tasas de
desempleo está aún por delante en numerosos países, y para que esta recuperación sea inclusiva y
sostenible, resulta esencial ayudar a los desempleados de larga duración y a los inactivos a incorporarse al
mercado laboral. Las dificultades complejas encontradas para combatir el desempleo de larga duración
exigen enfoques holísticos, que reconozcan la amplia variedad de barreras existentes y que utilicen todas
las herramientas disponibles para abordarlas.
Las personas necesitan las competencias adecuadas para adaptarse a los cambios rápidos de las
condiciones del mercado laboral. A este respecto, para luchar contra el desempleo de larga duración y la
vulnerabilidad que engendra, son esenciales las intervenciones estratégicas sobre el mercado laboral. Y
éstas deben ser desarrolladas y puestas en práctica por una gran variedad de agentes locales, quienes están
en las mejores condiciones para enfrentar los desafíos y las oportunidades del mercado laboral local.
Resulta crucial garantizar que los programas educativos y formativos adecuados se encuentran disponibles
para que puedan desarrollarse las competencias que se demandan o para que puedan aprovecharse las
nuevas oportunidades, independientemente de si esto significa abordar cualificación baja o innecesaria o
mejorar el valor de las competencias existentes con enfoques de formación permanente.
La oferta de cualificación debe ir acompañada de políticas y mecanismos de aplicación que resulten
efectivos y que ofrezcan respuestas adecuadas y en tiempo útil, tales como: colaboraciones amplias; unión
de agentes locales; una flexibilidad que permita a los agentes locales emplear los conocimientos locales
para satisfacer las necesidades locales; una maximización del valor y del impacto del gasto público; y,
finalmente, la realización de evaluaciones eficaces para mejorar las políticas futuras, no sólo en forma de
análisis estadístico, sino para crear bases de conocimientos locales aportados por los diferentes actores.
En algunos lugares del mundo, el desempleo juvenil se está convirtiendo en una preocupación cada
vez mayor, especialmente si se considera las repercusiones de secuelas a largo plazo que ello engendra. Los
programas educativos y de formación profesional, así como las políticas para facilitar la transición del
sistema educativo al mercado laboral, pueden ayudar a afrontar el desempleo juvenil, como también pueden
hacerlo los enfoques de habilidades “de vida" que actúan estimulando a los jóvenes con falta de
aspiraciones a que desarrollen una autoimagen positiva y a que tengan confianza en el futuro.
Afrontar el desempleo de larga duración significa mucho más que "simplemente empleos", es un viaje
en el curso del cual hay numerosas barreras que deben superarse. Tal como se ha podido comprobar en los
numerosos ejemplos internacionales expuestos en el presente documento, son numerosos los actores que
deben implicarse. La colaboración efectiva puede ayudar a enfrentar no sólo las barreras inmediatas que
dificultan el acceso al mercado laboral, sino también aquéllas a largo plazo. En un momento en que
numerosos países sufren tasas de desempleo significativas, resulta importante, tanto social como
económicamente, no dejar a nadie atrás.
16
BIBLIOGRAFÍA
Bamber, P., G. Gereffi and K. Fernandez-Stark (2011), “The Fruit and Vegetables Global Value Chain:
Economic Upgrading and Workforce Development”, in Gereffi, G., K. Fernandez-Stark and P.Psilos
(eds.), Skills for Upgrading: Workforce Development and Global Value Chains in Developing
Countries, Duke University Center on Globalization, Governance and Competitiveness, Durham.
Barr, J. et al. (2012), “Local Job Creation: How Employment and Training Agencies Can Help - The
Labour Agency of the Autonomous Province of Trento, Italy”, OECD Local Economic and
Employment Development (LEED) Working Papers, 2012/17, OECD Publishing, http://dx.doi.
org/10.1787/5k919d0trlf6-en
Bureau of Labor Statistics (BLS) (2013a), “Employment Situation Summary”, Economic News Release
from February 1st 2013, US Bureau of Labor Statistics, www.bls.gov/news.release/empsit.nr0.htm
BLS (2013b), “Household Data Table A-12: Unemployed persons by duration of unemployment”, US
Bureau of Labor Statistics website, www.bls.gov/webapps/legacy/cpsatab12.htm, accessed on 14
February 2013.
Campbell Page (2013), Indigenous Services, www.campbellpage.com.au/data/indigenous-services.php,
accessed on 6 February 2013
City of Richmond, (2013), RichmondBUILD Academy, City of Richmond website,
www.ci.richmond.ca.us/index.aspx?nid=1243, accessed on 14 February 2013.
Crowley, L. et al. (2013). International Lessons: Youth unemployment in the global context, The Work
Foundation, Lancaster.
Dean, A. (forthcoming), “Tackling long-term unemployment amongst vulnerable groups”, OECD LEED
Working Paper.
Dong, J. (2012), “Skills policy framework for the next decade in China”, in Martinez-Fernandez, C. and K.
Choi (2012), “Skills Development Pathways in Asia”, OECD Local Economic and Employment
Development (LEED) Working Papers, 2012/12, OECD Publishing, http://dx.doi.org
/10.1787/5k94hdlll7vk-en
Froy, F. et al. (2011), “Building Flexibility and Accountability Into Local Employment Services: Synthesis
of OECD Studies in Belgium, Canada, Denmark and the Netherlands”, OECD Local Economic and
Employment Development (LEED) Working Papers, 2011/10, OECD Publishing, http://dx.doi.org/
10.1787/ 5kg3mkv3tr21-en
Froy, F. and S. Giguère (2010), “Putting in Place Jobs that Last: A Guide to Rebuilding Quality
Employment at Local Level”,OECD Local Economic and Employment Development (LEED)
Working Papers, No. 2010/13, OECD Publishing, doi:
17
Froy, F., S. Giguère and M. Meghnagi (2012), “Skills for Competitiveness: A Synthesis Report”, OECD
Local Economic and Employment Development (LEED) Working Papers, 2012/09, OECD
Publishing, http://dx.doi.org/10.1787/5k98xwskmvr6-en
Froy, F. and L. Pyne (2011), “Ensuring Labour Market Success for Ethnic Minority and Immigrant
Youth”, OECD Local Economic and Employment Development (LEED)Working Papers, 2011/09,
OECD Publishing, http://dx.doi.org/10.1787/5kg8g2l0547b-en
Giguère, S. (2005), “The Drivers of Growth: Why Governance Matters”, in OECD, (2005), Local
Governance and the Drivers of Growth, OECD Publishing, Paris.
Giguère, S. and F. Froy (eds.) (2009), Flexible Policy for More and Better Jobs, OECD Publishing, Paris.
Garforth, P.and D. Medearis (2011), “Green Jobs Strategy and the Transition to the Low-Carbon Economy
in Northern Virginia”, OECD Local Economic and Employment Development (LEED) Working
Papers, 2011/07, OECD Publishing, http://dx.doi.org/10.1787/5kgchhnzbzxv-en
Galliers, D. (2009), Partnerships, Performance Management and Evaluation, OECD LEED Forum on
Partnerships and Local Governance Handbook No. 2, www.oecd.org/cfe/leed/45204566.pdf
Hamilton, V. (2012), “Career Pathway and Cluster Skill Development: Promising Models from the United
States”, OECD Local Economic and Employment Development (LEED) Working Papers, 2012/14,
OECD Publishing, http://dx.doi.org/10.1787/5k94g1s6f7td-en
International Labour Office (ILO) (2013), Global employment trends 2013: Recovering from a second jobs
dip, International Labour Office, Geneva.
ILO et al. (2012), Boosting Jobs and Living Standards in G20 Countries, OECD Economics Department,
ILO (Geneva), OECD (Paris), IMF (Washington, DC), the World Bank (Washington, DC)
International Monetary Fund (IMF) (2013), World Economic Outlook Update - Gradual Upturn in Global
Growth During 2013, released on January 23rd 2013, IMF, www.imf.org/external/pubs
/ft/weo/2013/update/ 01/pdf/0113.pdf
Lee, N. et al. (2012), Short-term crisis - long-term problem?, The Work Foundation, Lancaster.
Martinez-Fernandez, C., et al. (2012), Demographic Change and Local Development: Shrinkage,
Regeneration and Social Dynamics, OECD Publishing, Paris.
Michaelides, M. et al. (2012), Impact of the Reemployment and Eligibility Assessment (REA) initiative in
Nevada, IMPAQ International LLC, Columbia.
Noya, A. (ed.) (2009), The Changing Boundaries of Social Enterprises, OECD Publishing, Paris.
Noya, A. and E. Clarence (eds.) (2007), The Social Economy: Building Inclusive Economies, OECD
Publishing, Paris.
18
OECD (2006), OECD Employment Outlook 2006: Boosting Jobs and Incomes, OECD Publishing, Paris.
OECD (2011), Towards Green Growth, OECD Publishing, Paris.
OECD (2012a). OECD Employment Outlook 2012, OECD Publishing, Paris.
OECD (2012b), OECD Economic Outlook, Vol. 2012/2, OECD Publishing, Paris.
OECD (2012c), Better Skills, Better Jobs, Better Lives: A Strategic Approach to Skills Policies, OECD
Publishing, Paris.
OECD (2013), Education Today 2013: The OECD Perspective, OECD Publishing, Paris.
Quinn, M. (2011), Social Enterprise: Making it Work – A Case for Public Procurement, Urban
Communities/Property Cost Management and Advisory/Australian Government Department for
Education and Workplace Relations/VicHealth/AMES Social Impact Assessment, Melbourne.
Thévenot, L. (2010), Local Innovations in Skill-Building and Employment for Low-Skilled Workers in
United States, Institut d’Aménagement et d’Urbanisme de la Région Île-de-France, Paris.
URBACT (n.d), Hi5- Rhythm for Success, URBACT II operational programme,
http://urbact.eu/fileadmin/Projects/My_Generation/documents_media/Hi5_at_My_Generation_Net
work.pdf
URBACT (forthcoming), Supporting Urban Youth through Social Innovation: Stronger Together.
19