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TEMA 3
ESTADO FÍSICO DEL CONDUCTOR
Guión.
1.- Factores que influyen en las condiciones físicas y mentales del conductor.
1.1.- La fatiga.
1.2.- El sueño y la somnolencia.
1.3.- Alcohol y otras drogas.
1.4.- Enfermedades y medicamentos.
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1.- Factores que influyen en las condiciones físicas y mentales del conductor.
El conductor debe reunir unas condiciones físicas y psicológicas, así como unos conocimientos teóricoprácticos mientras sea poseedor de un permiso de conducción para poder actuar adecuadamente sobre el vehículo
en las variadas situaciones que se va a encontrar.
1.1.- La fatiga.
Conducir exige un esfuerzo físico y mental, por lo tanto, produce fatiga. La fatiga es perjudicial y muy peligrosa
ya que tiene efectos adversos sobre los conductores, entre los que podemos destacar:
 Cansancio y agarrotamiento muscular.
 Disminución de la capacidad de concentración y de percepción de los estímulos externos.
 Aumenta el tiempo de reacción.
 Favorece la producción de accidentes de circulación, haciendo la conducción insegura.
 Se asumen mayores riesgos al volante.
 Los movimientos son más lentos e imprecisos.
Conducir fatigado, como vemos, es uno de los principales factores de riesgo en la conducción, junto con la
velocidad y el consumo de bebidas alcohólicas.
Hay factores que favorecen la aparición de la fatiga:



Relacionados con la vía y su entorno:

Monotonía de la carretera.

Congestiones y retenciones continuas del tráfico.

Condiciones climáticas adversas (lluvia, calor…)

Asfalto en mal estado.
Relacionadas con el vehículo, destacamos, entre otros:

Excesivo ruido en el habitáculo.

Ventilación inadecuada.

Iluminación insuficiente.

Calor excesivo.
Relacionadas con el propio conductor:

Conducir largos periodos de tiempo sin descansar.

Estar enfermos, haber ingerido alcohol, comidas copiosas…
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
Problemas cotidianos, estrés…

Posturas incorrectas al volante.

Ser un conductor novel, ya que no se tiene suficiente práctica.
Circulando bajo estas condiciones es necesario acortar los tiempos de descanso y así descansar con más
frecuencia. Los tiempos de descanso recomendados son, descansar cada 200 km o cada 2 horas, lo que antes
ocurra.
Destacar que la fatiga solo se puede combatir con un descanso adecuado, no existiendo remedios
milagrosos.
1.2.- El sueño y la somnolencia.
El sueño y la somnolencia, que suelen venir asociadas con la fatiga, son otro factor de riesgo en la conducción.
Los efectos más destacados de la somnolencia son:
 Cansancio y agarrotamiento muscular.
 Disminución de la capacidad de concentración y de percepción de los estímulos externos. Esto conlleva un
aumento de distracciones y se comenten más errores.
 Aumenta el tiempo de reacción.
 Puede provocar la aparición de microsueños, periodos breves de tiempo en el que el conductor se queda
ligeramente dormido sin darse cuenta.
 Genera cambios en nuestra conducta (violencia, inquietud…)
Las causas que generan o favorecen la somnolencia son muy variadas, pero podemos destacar entre otras:
 El momento del día que elegimos para conducir. Entre las 3 y las 5 de la mañana y las primeras horas de
la tarde (14-16 horas) son propensas para que aparezcan síntomas de somnolencia.
 Dormir menos horas de las habituales o alterar nuestras costumbres de sueño.
 El sueño de mala calidad, igual de malo que dormir poco.
 Trastornos del sueño, como el insomnio, pueden provocar somnolencia incluso por el día.
 Medicamentos, alcohol, tienen efectos sedantes. El café y bebidas energizantes pueden ser efectivas para
contrarrestar el cansancio durante un corto periodo de tiempo, pero una vez pasado sus efectos, el sueño
aparece de manera repentina.
 Realizar comidas abundantes o copiosas antes de hacer un viaje con la motocicleta.
Lo mejor que se puede hacer contra la somnolencia y el sueño es no luchar contra ellos y estacionar en un lugar
adecuado para dormir aproximadamente 30 minutos. También es importante no realizar comidas copiosas ni conducir
en nuestras horas habituales de sueño.
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1.3.- Alcohol y otras drogas.
La alcoholemia es la cantidad total de alcohol que hay en la sangre. La tasa de alcoholemia, medida en mg/l
(miligramos entre litros de aire) en aire espirado o en g/l (gramos entre litros de sangre) en sangre, es la cantidad de
alcohol que hay en el cuerpo por cada litro de aire o de sangre del cuerpo.
Está prohibido circular con una tasa de alcohol superior a:
mg/l en aire
g/l
espirado
sangre
0,25
0,50
0,15
0,30
 Con carácter general, cualquier vehículo, incluso bicicletas.
en
 Cualquier vehículo durante los 2 años siguientes a la obtención de un
permiso o licencia de conducción (por ejemplo, si al año de obtener el
permiso A se obtiene el B tendríamos que estar 1 año y no 2 con este límite
de alcoholemia) (si se posee una licencia de conducción y se obtiene un
permiso de c. no se suma la antigüedad). Esto se debe a la poca experiencia
al volante de los noveles.
El alcohol en cualquier cantidad afecta al conductor y usuarios, no es necesario sobrepasar los límites
legales de alcoholemia para tener estos efectos. Por lo que, si tienes que conducir, no bebas y si bebes no
conduzcas.
Los efectos del alcohol y el nivel de alcoholemia dependen de varios factores:
 A mayor cantidad de alcohol ingerida y/o a mayor grado de graduación de alcohol de la bebida, mayor será la
tasa de alcoholemia.
 Las bebidas destiladas (ron, whisky…) y las gasificadas o calientes se absorben más rápido que las bebidas
fermentadas (vino, cerveza…), el máximo nivel de alcoholemia se alcanzara antes.
 Las mujeres a igualdad de otros factores alcanza niveles de alcoholemia superiores al hombre.
 Las personas más pesadas, a igualdad de alcohol ingerido, alcanza menos tasa de alcoholemia que una
persona delgada.
 El tiempo transcurrido desde que se ha ingerido alcohol. El máximo de alcoholemia se alcanza a la hora
de haber bebido y posteriormente desciende muy lentamente, siendo esto muy peligroso, porque puede
transcurrir más de ocho horas para dejar de tener los efectos negativos del alcohol.
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 Con el estómago vacío la cantidad de alcohol en sangre o en aire es superior a si no está vacío. Esta
situación, estomago no vacío, retrasa la absorción de alcohol, pero al final se tendrá la misma cantidad de
alcohol en sangre independientemente de lo que se haya comido.
 Los menores de 18 años y los mayores de 65 les afecta más el alcohol.
 Recuerda que no se pueden mezclar alcohol y medicamentos.
El alcohol tiene efectos negativos en la conducción:
 Reduce el campo de visión (percepción del entorno). Esto hace que no veamos lo que ocurre en los
laterales del vehículo.
 No se aprecian correctamente las distancias ni las velocidades de otros vehículos.
 Se altera la valoración del riesgo asumiendo mayores peligros en la conducción, se sobrevaloran las
capacidades y se desprecian los peligros y riesgos asumiéndose más riesgos durante la conducción.
 Aumenta el tiempo de reacción, aumentando la distancia de detención del vehículo.
 Los maniobras que se realizan de una forma más ineficiente, con el consiguiente riesgo que esto implica.
 Si se tiene un accidente y hay alcohol en el cuerpo, las heridas son mucho más peligrosas.
Respecto a otras drogas, como el cannabis, la cocaína, el éxtasis (MDMA), el LSD o las anfetaminas, también
afectan a la conducción de manera perjudicial, estando prohibido circular bajo sus efectos psicotrópicos,
estimulantes…
Los efectos del cannabis son:
 Altera la percepción del entorno del tráfico (por ejemplo el color de las señales de tráfico)
 Altera la percepción del espacio y del tiempo.
 Reduce la capacidad de concentración, aumentando las distracciones al volante.
 Aumenta el tiempo de reacción.
 Podría provocar somnolencia al volante.
Los efectos de la cocaína son:
 Genera comportamientos más agresivos, competitivos e impulsivos, cometiéndose más infracciones.
 Se sobrevaloran las propias capacidades al volante y se acepta un mayor nivel de riesgo.
Los efectos del éxtasis y del LSD son:
 Provoca ilusiones ópticas. Esto hace que el conductor se imagine cosas y realice maniobras evasivas.
 Mayor sensibilidad a las luces generando deslumbramientos y visión borrosa.
 Disminuye la capacidad de concentración.
 Provoca periodos de depresión y ansiedad.
 Una vez pasados los efectos aparecen de forma imprevista cansancio físico y mental.
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 Aún sin estar bajo sus efectos, si se ha tomado alguna vez anterior, produce flashbacks al volante (quiere
decir que, aun no habiendo consumido éxtasis o LSD antes de conducir, se pueden repetir los efectos
adversos de estas drogas).
Los efectos de las anfetaminas son:
 Provoca impaciencia y comportamientos impulsivos.
 Genera comportamientos violentos e incomprensibles.
 Hace que el conductor sobrevalore sus capacidades.
 Produce la aparición de movimientos repetitivos y estereotipados que disminuyen la movilidad.
 Disminuye la sensación de fatiga y retrasa la aparición del sueño con un efecto rebote peligroso
(aparece sin aviso el cansancio).
 Afecta al equilibrio y a la coordinación de movimientos.
Todo usuario de la vía (peatones y ciclistas incluido) que se vea implicado en un accidente de circulación,
está obligado a someterse a pruebas de detección de alcoholemia y/o de drogas.
Todo conductor, haya cometido o no alguna infracción, está obligado a someterse a controles de
alcoholemia y/o de drogas cuando la autoridad lo establezca.
Las pruebas para comprobar la alcoholemia se realizan, normalmente, mediante un etilómetro. A petición
del interesado o por orden de la autoridad, se podrán repetir las pruebas, mediante análisis de sangre, orina
u otros análogos. Debe transcurrir un tiempo mínimo de 10 minutos entre prueba y prueba. Si el usuario es
quien quiere realizar la segunda prueba, si da positivo deberá abonar el coste de la prueba. En caso de que el
resultado fuera negativo, será la Administración quien se haga cargo, devolviendo el depósito al conductor.
Se considera infracción muy grave, incluso con penas de cárcel, conducir bajo los efectos del alcohol
o de otras drogas.
Si el resultado de las pruebas de detección de alcohol o drogas fuera positivo, el Agente podrá proceder a la
inmediata inmovilización del vehículo. También podrá inmovilizar el vehículo en los casos de negativa a
efectuar dichas pruebas por parte del conductor. La inmovilización quedará sin efecto tan pronto como
desaparezca la causa que la motivó u otra persona pueda sustituir al conductor.
1.4.- Enfermedades y medicamentos.
Hay numerosas enfermedades y medicamentos que afecta a la capacidad de conducción. Las más
destacadas son las alergias, el estrés y la depresión.
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Consejos para conductores afectados por una alergia:
 No conducir con las ventanas abiertas.
 Mantener el filtro del aire acondicionado en buenas condiciones.
 Utilizar gafas de sol para proteger los ojos.
 Evitar conducir en las horas de máxima concentración de alérgenos (polen…) en el aire, al amanecer y en
zonas húmedas.
En lo referente a los medicamentos hay que tener ciertas consideraciones antes de ponerse al volante de un
vehículo:
 Hay que leer siempre el prospecto (“instrucciones”) del medicamento siempre y más antes de conducir.
 No mezclar nunca los medicamentos con bebidas alcohólicas.
 Los antiestamínicos de primera generación suelen producir efectos segundarios similares a conducir con
una tasa de alcohol en sangre elevada.
 La normativa legal prohíbe conducir bajo los efectos de algunos psicofármacos.
 Algunos medicamentos tienen efectos parecidos a conducir bajo el efecto del alcohol.
 Algunos medicamentos disminuyen la capacidad de conducción, aumentan el tiempo de reacción.
 Muchos medicamentos producen somnolencia, perjudicial a la hora de conducir.
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