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59º Congreso de la LMHI año 2004 EL CUADRO AGUDO Y LA ENFERMEDAD CRÓNICA EN HOMEOPATIA El objetivo de este trabajo es acercar a los colegas algunas aclaraciones respecto del uso de los medicamentos agudos y dar sus fundamentos doctrinarios. Hahnemann, en el libro de las enfermedades crónicas, reconoce que cuando él y sus discípulos utilizaban los medicamentos por los síntomas actuales, apsóricos, al cabo de un tiempo el paciente venía agravado en su enfermedad generando síntomas en otra parte del cuerpo. Sin embargo en el paragrapho 72/73, Hahnemann dice que las enfermedades pueden ser agudas ó crónicas siendo de distinta naturaleza. No obstante, en las enfermedades crónicas dice que después del tratamiento de un enfermo agudo el médico homeópata debe prepararse para el embate de la psora que está subyacente. Hoy día, hay quien sostiene que debe tratarse en forma separada las enfermedades agudas y crónicas por ser de distinta naturaleza tal cual lo dice el maestro y hay quien sostiene con toda justicia, que por lo expresado en las enfermedades crónicas, el agudo depende de la enfermedad crónica, dado que Hahnemann lo expresa así diciendo: “que detrás de una enfermedad aguda habrá que prepararse para el embate de la psora” denota que no habría tanta separación entre una y otra. Incluso nuestra experiencia nos indica que cuando un paciente está medicado con su medicamento de fondo y evoluciona correctamente según la propuesta del paragrapho 9 del Organon, cumpliendo con una buena evolución la ley de curación, estos pacientes difícilmente hacen cuadros agudos en forma reiterada. Por lo cual, cuando el paciente está siendo víctima de una sucesión de cuadros agudos, seguramente el medicamento de fondo será puesto en duda por el homeópata. De una u otra manera el objetivo de todos los homeópatas es no suprimir evitando que el paciente que consultó por una angina no termine con una lesión más profunda. En principio debemos convenir que el agudo y el crónico no pueden ser totalmente separados sino interrelacionados. 1 En el Paragrapho 73 Hahnemann habla de las enfermedades agudas y las divide en individuales y colectivas. Dentro de las individuales habla de los traumatismos, de las indisposiciones tal como, enfriamientos, emociones violentas etc., o también pueden ser exacerbaciones de las enfermedades crónicas”. De todos modos la práctica nos hace observar como decía el Maestro Paschero, que en el cuadro agudo todos los síntomas parecen encender las luces y notarse con total claridad, por lo que es un buen momento para tomar la mayor cantidad de síntomas que seguramente conforman o estructuran una modalidad rara, extraña y peculiar con lo que tendremos una oportunidad de gran valor para extraer síntomas valiosos que podrán ser utilizados en la historia del paciente. Con un paciente en tratamiento, que hace un cuadro agudo, el médico homeópata comienza anotando los síntomas y prescribiendo placebo, si el cuadro no remite en unas horas repetimos el medicamento de fondo a baja potencia pero siempre tratamos de no perder de vista los síntomas que van apareciendo en el agudo. Es así que si el cuadro persiste y no se modifica estamos ante la amenaza de una complicación del cuadro seguramente recurriremos a todos estos síntomas raros, extraños y peculiares que fueron surgiendo en el agudo y ahora asociados a la historia del paciente nos llevarán a un cambio del medicamento. Este nuevo medicamento se podrá confirmar en la Materia Médica a los efectos de evitar la supresión. En este caso el Cuadro Agudo será generador de un cambio del homeopsorico. También hablaba Hahnemann de las enfermedades agudas esporádicas como las gripes, diarreas estacionales, que nuevamente evolucionan bien con el placebo, como también estamos ante la posibilidad de la complicación, siempre es de buena práctica la toma de todos los síntomas raros, extraños y peculiares y lo que estamos haciendo es prevenir que esa psora que no esté suficientemente curada haga sus embates, tal cual lo dice Hahnemann en las Enfermedades Crónicas. En las epidemias, como la guerra, las inundaciones y las grandes epidemias, Hahnemann aconseja reconocer el grupo social pero nuevamente también acá habrá características individuales. Lo mismo en los miasmas agudos, enfermedades que los seres humanos experimentan con características similares, como el sarampión, varicela y escarlatina. Seguramente que si el paciente viene medicado correctamente este cuadro no tendrá mayor trascendencia, 2 pero si esto no es así, la psora estará amenazante y deberemos estar atentos para que se produzca un cambio en la medicación. Muchas veces, todos nosotros hemos tenido casos donde durante el Cuadro Agudo aparecen síntomas raros, extraños y peculiares que nos han abierto la posibilidad de llegar al Cuadro Crónico. Veamos algunos ejemplos que hemos tenido oportunidad de observar en nuestros pacientes. El primer caso es un paciente de 54 años, casado, carpintero, muy hosco, malhumorado, irritable, con aversión a hablar. Ha sido medicado por primera vez con Lycopodium, Árnica, Nitric Acidum. Pero esta vez se plantea una situación aguda con un dolor intenso en fosa renal izquierda, el dolor se extiende a los genitales (repertorizado) el dolor lumbar es irradiado en todos los sentidos, testículos y miembros inferiores. Este es un dolor particular, rasgante, que aparece en el subrubro de dolor radiante en la página 958 del Syntesis, 666 de Kent y 421 de Eysayaga. Observando la orina en un vaso se observa que el sedimento es blanquecino y gelatinoso repertorizado. Este paciente está en inquietud ansiosa en la cama y parado. Tomados los síntomas: a) dolor rasgante, subrubro radiante página 666K, b)dolor renal extendido a genitales pagina 908K, c) sedimento gelatinoso en orina 689 K, d) dolor renal durante la micción 663 K. El medicamento que cubría todos estos síntomas es Berberis. Este caso fue extraído de la literatura Homeopática (Anales Homeopáticos) y no me pertenece. Pero llamó mi atención la enorme utilidad que saca el autor de síntomas poco profundos pero bien modalizados con lo cual resuelve de esta manera una crisis aguda, dando alta jerarquía a síntomas raros, extraños y peculiares del plano de los síntomas locales. Traté entonces de averiguar un poco más las características de lo que fue un muy buen medicamento para el caso. La Materia Médica habla del dolor radiante característico del centro hacia la periferia y en todos los sentidos, al flanco, al hipogastrio, a los testículos y miembros inferiores como un dolor rasgante, (tearing) subrubro radiante, baja por el uréter a la vejiga, a la uretra y al muslo. Los pacientes Berberis, dice, tienen una “sensación de gorra en la cabeza”, les cuesta mucho el trabajo mental, la concentración y el pensamiento desaparece si lo 3 interrumpen. Está indispuesto a hablar, siempre descontento, malhumorado, indolente, indiferente, apático. Tiene miedo y aversión al trabajo, a diferencia de Sarsaparrilla que es industrioso. Berberis tiene la ilusión que se le agranda la cabeza y que va a caer hacia delante al agacharse, que los objetos son más largos y altos. Las cosas le parecen más grandes. Irascible, discute, pelea, es agresivo, corajudo con un temperamento bilioso. Estados contradictorios y alternantes. Cambio constante de síntomas. Propenso al desmayo, por el calor, por caminar, por viajar, cuando lee, así como durante un ataque de asma. La oscuridad lo agrava. Siente frío en los huesos. Dolores gotosos hasta en los dedos de las manos, donde aparecen nudosidades artríticas, agrava en la proximidad de la tormenta. La mujer tiene aversión al coito que le resulta doloroso (vaginismo). Registra verdaderos calambres vaginales. Leucorrea debilitante, puede ser abundante y sustituir la menstruación. Dolor de pezones después de la menstruación. Dolor renal durante la menstruación. Desea la muerte durante la menstruación. En el hombre, impotencia, erecciones breves. Eyaculación dolorosa. Frialdad de pene, testículos y glande. Los dolores de espalda se extienden a abdomen, genitales, muslos pantorrillas y pelvis. Dolor de sacro antes de defecar. Bostezos alternando con eructos. Transpira con olor a orina. Piel, red de vasos. Otro caso es el del paciente de 50 años asistido por el Dr. Zalman Bronfman en un cólico renal derecho. Está con 38º de fiebre , cefalea intensa y la sensación de que le están apretando la cabeza. Tiene prurito en todo el cuerpo. Con las manos y los pies agrietados. El paciente es muy friolento y sin embargo necesita tomar agua fría y comer comida fría . Con la cara bien caliente y los pies fríos , tiene el dolor en la uretra que se extiende al abdomen. Refiere la sensación de gusto a pasto en la boca. Tiene erupción en el escroto. Es un paciente irritable, intolerante a la contradicción. Malhumorado. En condiciones normales es un gran industrioso incluso al punto de estar enfermo y seguir trabajando. 4 Registra como antecedente una personalidad dependiente afectivamente sobre todo de los amigos y siempre muy pendiente del afecto que lo rodea sin lo cual siente verdaderamente que no vale la pena vivir. El medicamento que cubre los síntomas es Sarsaparrilla que en la potencia 200 resuelve el cuadro agudo. Ante la vuelta de síntomas crónicos desaparecen con las potencias 1000 y la 10.000 manifiesta al Dr. Bronfman. Es la primera vez que me siento realmente bien. Tratándose de un medicamento poco común consultamos la Materia Médica y nos dice que son pacientes que tienen dolor ardiente al finalizar la micción que provoca gritos en el paciente y termina con algunas gotas de sangre. Que son niños con cara de viejo. Abdomen agrandado en niños con marasmo. Con arenillas en los pañales, son las arenillas más precoces. Tiene el cólico renal derecho que descienden por la uretra hasta la vejiga e irrita el trígono provocando espasmos que impiden orinar en posición de sentado, lo cual obviamente complica a la mujer. Disuria dolorosa al final de la micción (Repertorizar en vejiga) y micción goteo estando sentado. Pasa gas por la vejiga y por la uretra. En uretra vemos el dolor al terminar de orinar con dolor de meato en la mujer y el prurito de uretra al orinar. El sedimento es mucoso con una arenilla pálida, blanca, como polvo de tiza. Que son hipersensibles al dolor y sus espasmos pueden provocar desmayos antes durante o después de defecar ídem con la menstruación. Sus dolores aparecen gradualmente y desaparecen gradualmente. Que la piel es cuarteada, agrietada sangrante y ardiente, seca, engrosada en palmas y plantas. Con ulceras varicosas difíciles de cicatrizar. Costras ardientes y pruriginosas en las orejas. También el eccema aparece en los genitales con prurito que se extiende al perine. Caída del vello pubiano y transpiración maloliente. La picazón cambia de lugar al rascarse. Son pacientes friolentos que necesitan ingerir bebidas frías, comida fría y jugosas, se agravan por comidas calientes. Con gusto agrio a hierbas secas o pan fermentado después del desayuno. Temblor en los pies. Escalofríos ascendentes desde el cuello de la vejiga. Frialdad en todo el 5 cuerpo excepto la cara y el pecho que están muy calientes. Cuando se acerca a la estufa no se calientan siempre tienen los pies fríos. Hay una insensibilidad en la uretra. Eyaculación fácil durante las caricias, aunque no figuran en eyaculación precoz. Atrofia mamaria con retracción de pezón. Insensibilidad, prurito o adormecimiento del pezón. La vejiga despide gas orinando. Obviamente el Homeópata estudia la vejiga para observar si no hay una fístula. Lo mismo en la retracción del pezón la mamografía se impondrá para descartar un tumor. Agrava con la ropa ajustada al cuello. Agrava en primavera. Antes de la cefalea tiene una visión oscilante, fluctuante o chispas en los ojos. Repugnancia por la comida luego de comer. En los estados febriles puede ocurrir que el calor sea interno mientras que el cuerpo esta frío al tacto. El paciente transpira el cuero cabelludo durante la fiebre. Transpira frío durante la dismenorrea y durante la menstruación. Sarsaparrilla sueña con accidentes, sueña con arañas, sueña con excrementos. Sueña con la muerte de familiares. Sueña que pasea en un trineo. Mentalmente aparece disgustado por todo, siendo su humor repulsivo, aunque muy predispuesto a trabajar. Se ofende fácil y nada le causa placer. No puede olvidar la causa que le ha ofendido, vuelve sobre el mismo tema y sobre hechos desagradables del pasado. Figura en cólera por acontecimientos del pasado. No figura en Dwells en Kent pero lo agregan otros repertorios. En Resumen: Vimos 2 casos agudos de patología urinaria, en Berberis el dolor es radiante desciende por el uréter, vejiga, uretra, se extiende a los genitales, muslos, flancos e hipocondrios en toda dirección. En Sarsaparrilla el dolor de vejiga irrita el trígono provocando un espasmo doloroso que obliga al paciente a orinar parado y el dolor es al finalizar la micción con dolor en el meato y prurito en la uretra. El dolor comienza gradualmente y desaparece gradualmente es intenso y puede provocar el desmayo del paciente. Ambos pacientes malhumorados, Berberis con la “Sensación de gorra” le cuesta el trabajo mental y físico. Sarsaparrilla en cambio es un industrioso aun estando enfermo, abandónico con la ilusión de estar sin amigos. Gran friolento pero con deseo de comidas y bebidas frias. Benzoic Acidum. Con dolor en árbol urinario, pero se destaca por el olor amoniacal de la orina que impregna 6 las paredes de la habitación. Son pacientes muy activos pero asustadizos, impresionables, horrible things, ilusión que escucha voces, pena Dwells, sentimental en niños retencionistas de orina. Cantharis tiene la cistitis de orina quemante como fuego y sanguinolenta. El dolor se acompaña de espasmo y genera gran excitación sexual. La inquietud ansiosa lo impulsa de un lado a otro. Desgarra sus cabellos y rompe sus uñas. Hidrofobia. Ilusión que trabaja duro. Apasionado, amoroso, delirio sexual. Miedo a los espejos. “Por último y a propósito de Nuestro Congreso” Mi paciente Patricia tiene 42 años, casada 3 hijos. Desde que volvió de Chile, su país natal esta en tratamiento homeopático. Sufre dolores articulares, tiene menstruaciones dolorosas y últimamente estados depresivos acompañado de pesadillas que perturban su sueño. Llega a tener indiferencia por sus propios hijos. Siempre fue rebelde y discutidora. Le gusta la política y tiene ideas bien definidas de izquierda. “Imagínese esto como caía en mi casa siendo mi padre militar”. Desde que fui operada de amígdalas me quedo el trauma de los metales en punta como cuchillos, tijeras, y en especial la punta de la rama de los árboles. Rencor contra su padre autoritario. Deseo de sal. Por el rencor, el miedo a las puntas, miedo a la oscuridad y el deseo de sal le di Natrum Muriaticun, medicamento que produjo una relativa mejoría aunque la afectividad no se correspondía con mi idea del medicamento. Sus pesadillas producían un mal dormir y aunque no las recuerda dice que la despiertan. Decidí entonces tener en cuenta su obstinación, las pesadillas que la despiertan y el temor a las puntas por lo que prescribí Lac Felinun medicamento que la mejoró parcialmente. En el otoño de 1998 debo visitar a mi paciente por una fuerte gripe y relata que: 1) Amanece afónica todas las mañanas, la afonía es porque la tos le produce mucho ardor de garganta la altura de la laringe. 2) La tos comienza siendo seca a la mañana al levantarse y va aflojando al atardecer. 3) Últimamente las pesadillas se cumplían en el día. (premonitorios). 4) Anoche debí tener fiebre porque soñé con víboras. 5) Además soñé que había un enfrentamiento entre militares y civiles cayendo muertos familiares míos que los entierran en el fondo de mi casa. En esta revuelta a mí me ponen presa por mis ideas de izquierda, y los presos intentan manosearme. Si unimos los 5 síntomas mencionados al miedo a las puntas, el único remedio que cubre es Bovista que a la potencia 200 curó a la paciente y en este momento toma la 10mil con todo éxito. Evolución: 7 1) Con la potencia 200 resolvió en forma inmediata el cuadro de tos persistente que la afectaba hace varios días 2) Con la potencia 1000 desapareció la sintomatología ginecológica producida por un varicocele pelviano izquierdo. 3) El sueño se hizo más profundo y desaparecieron las pesadillas. 4) Según el marido está menos discutidora e irritable. Al cabo de un año vuelven sueños confusos, no sabía si estaba en su casa durmiendo o en otra casa. Volvió el dolor ginecológico en época de la ovulación. Reflujo al acostarse. Se prescribe Bovista 1000 Bebida Plus, con esto desaparecen los síntomas y logra estar más afectuosa con sus hijos y su familia. Esta paciente continúa estando en buena evolución desde el año 1998 hasta el momento, toma una vez cada año y medio una dosis de Bovista 1000. La vi por última vez en diciembre del 2003 y prescribí una dosis de Bovista 1000 por sintomatología de calores menopausicos. Comentario: Mi paciente tiene ideas políticas de izquierda. Bovista tiene una fuerte inclinación social. Se la ve alegre en compañía. Valiente y dice la verdad desnuda. Siendo hija de un militar tenia la audacia de hablar en contra de las ideas políticas de su padre. Caótica en su rebeldía cuando fue adolescente quedo embarazada y tuvo un hijo natural. Lideraba los grupos sociales del colegio. Sus actuales momentos de tristeza mejoran en compañía. En las reuniones sociales es locuaz, franca, valiente, peleadora actitud que tal vez le permitió esconder su inseguridad y temor a enfrentar un trabajo o lo agresivo que significaba para ella el contagio de una enfermedad infecciosa o el tema de la locura a la que ella tiene especial temor. En sus sueños clarividentes, el sueño de víboras y finalmente su sueño de la cárcel donde es maltratada y manoseada se aclara el medicamento. He intentado demostrar con mi trabajo, de que manera el agudo y el crónico no pueden ni deben separarse ya que los síntomas responden y obedecen al mismo desequilibrio de la energía vital expresado de distinta manera pues responden al mismo potencial de identidad señalado por Kent en su Filosofía. 8 Bibliografía: Acta Homeopática Argentinensia – EMHA Dictionary of Practical Materia Medica – J. Clarke El Dinero en la Materia Médica – Z. Bronfman Homeopatía – T. P. Paschero Mac Repertory Materia Médica – Hahnemann Repertorio Radar Lince Repertorio The Enciclopedia of pure Materia Medica – T. F. Allen The Guiding Symptoms of our Materia Medica – C. Hering 9