Download Emisiones mundiales de gases de efecto invernadero provenientes

¿Cielito lindo? Implicaciones de la reforma energética para la calidad del aire y la
protección a la biodiversidad
Marco A. Lara1
"Al cambiar el mercado de energía y tener estas compañías de petróleo privadas hay que
tener mano dura, o si no se los van a comer vivos", manifestó hace unas semanas el exgobernador de California, Jerry Brown, al hacer referencia a la participación de empresas
privadas en el sector de hidrocarburos en México.
La anterior resulta una aseveración sumamente pertinente, en especial cuando se analiza
a la luz del nuevo marco regulatorio en materia ambiental para este sector, tras la
publicación el 11 de agosto del paquete de leyes secundarias que regulan las nuevas
disposiciones en materia energética y en particular mediante la creación de la Agencia
Nacional de Seguridad Industrial y de Protección al Ambiente del Sector Hidrocarburos.
Las siguientes líneas buscan mostrar cómo, esta nueva agencia, no es más que una figura
creada a modo, puesto que permite a las corporaciones de hidrocarburos, valerse de
diversos instrumentos legales y administrativos, con el fin de obtener el mayor beneficio
posible. Esto va en detrimento de varias décadas de trabajo de grupos e instituciones
ambientalistas, del desarrollo social justo, y por el contrario va encaminado hacia un
aumento irresponsable en la productividad y la extracción de energéticos, sector que a
nivel global, contribuye con el 25.9% de las emisiones anuales de GEI (gases de efecto
Emisiones mundiales de gases de efecto
invernadero provenientes de la actividad
humana
Desechos y aguas de desecho
2.8%
Suministro de energía
17.4%
25.9%
Edificios residenciales y comerciales
13.5%
Fuente:
IPCC, 2007
19.4%
13.1%
Industria
Agricultura
7.9%
1
Transporte
Silvicultura
Internacionalista por la UNAM.
Actualmente se desempeña como Director Comercial de Bonos de Carbono en Scolel’te, un programa de
reforestación y pago por servicios ambientales que opera desde 1997 y que reúne a más de 1000 pequeños
propietarios de zonas rurales en el estado de Chiapas. Para mayor información véase www.ambio.org.mx
Todas opiniones aquí expresadas son a título personal.
invernadero) responsables del cambio
climático inducido (IPCC, 2007).
Para hacer frente a esto, existen
instituciones regulatorias que, como la
Agencia
Nacional
de
Seguridad
Industrial y de Protección al Ambiente
del Sector Hidrocarburos, deberían
vigilar el cumplimiento de la ley
ambiental. No obstante, esta nueva
institución se ve limitada por una serie
de condicionantes que a continuación
se enumeran y que provienen de la
propia Ley de la Agencia Nacional de
Seguridad Industrial y de Protección al
Medio
Ambiente
del
Sector
Hidrocarburos.
Por poner un par de ejemplos, la Agencia podrá subcontratar a particulares para la
realización de inspecciones ambientales a las empresas reguladas (Art 5, fracc. IX y XXIX);
tendrá discrecionalidad para la aplicación de multas (Art 5, fracc. XII); además de que
podrá emitir regulaciones en materia de protección ambiental de los suelos, flora y fauna
silvestre, incluyendo residuos y materiales peligrosos (Art. 6, fracc II, incisos a-j).
Uno de los puntos más alarmantes, es que se asignan funciones a esta agencia, que han
correspondido a SEMARNAT, en particular la capacidad para:
“Autorizaciones en materia de impacto y riesgo ambiental de oleoductos,
gasoductos, carbonoductos y poliductos; de la industria de los hidrocarburos y
petroquímica; instalaciones de tratamiento, confinamiento o eliminación de
residuos peligrosos; aprovechamientos forestales en selvas tropicales y especies de
difícil regeneración; así como obras y actividades en humedales, manglares,
lagunas, ríos, lagos y esteros conectados con el mar, litorales o las zonas federales
de las áreas antes mencionadas, en términos del artículo 28 de la Ley General del
Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente y el Reglamento de la materia” (Art.
7, fracc. I)
Lo anterior también incluye autorizaciones en materia de emisión de gases (Art. 7, fracc.
II), así como para cambio de uso de suelo en terrenos forestales (Art. 7, fracc. VII).
Asimismo y aunque se señala la responsabilidad en que incurren los regulados al incumplir
disposiciones en materia de riesgos, seguridad y medio ambiente (Arts. 22-24) en esta
última categoría no se estipulan mecanismos acordes con la Ley Federal de
Responsabilidad Ambiental. Aunado a lo anterior, si bien se establecen las metas y
objetivos generales de esta agencia, se deja libertad para que las empresas del sector,
decidan cómo cumplir dichos objetivos (Capítulo 3, Arts. 12-21).
Finalmente, cabe señalar una serie de procesos administrativos internos, que confirman
cómo el diseño de esta institución es acorde a los intereses de un pequeño grupo. En
primer lugar, el Director Ejecutivo de esta agencia, será designado y removido libremente
por el Presidente de la República (Art. 27); se establecen códigos de discrecionalidad y
conducta para los funcionarios que integran esta institución (Art. 28); se limita el acceso a
la información a las audiencias con representantes de las empresas reguladas (Art. 29), se
establece un comité científico cuya imparcialidad queda en entredicho desde que sus
miembros son designados por el Director Ejecutivo (Art. 34); además de que su
presupuesto anual estará conformado por ingresos derivados de la prestación de
servicios de regulación y supervisión (Art. 37), subordinando sus actividades a un juego de
intereses económicos.
Tal como puede observarse, este nuevo entorno regulatorio, no solamente compromete
los derechos de propiedad de comunidades enteras que habitan bajo yacimientos de
hidrocarburos, sino que además, representa una alarma en torno a la protección y manejo
de áreas naturales clave para la biodiversidad y asimismo, significa una amenaza en
términos de salud y seguridad personal para cada una de las personas que habitamos en
este país, ello debido al aumento de las concentraciones de partículas suspendidas en la
atmósfera a raíz del incremento irresponsable en la producción de hidrocarburos, así
como resultado de eventos climáticos extremos que ya estamos viviendo, tales como
sequías prolongadas, ondas de calor, inundaciones, ventiscas y huracanes cada vez más
agudos.
¿Han pensado que les diremos a nuestros hijos y nietos cuando nos cuestionen sobre
todas esas cosas que pudimos prevenir?