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Universidad de Buenos Aires
Facultad de Psicología
Maestría en Psicología Social Comunitaria
- Materia: Epistemología y Metodología Comunitaria 1Cohorte 2012
Profesoras: Graciela Zaldúa y María Pía Pawlowicz
Maestrandos:
López Lara, Román DNI: 94.924.330
Esteva, Pablo DNI: 31.008.458
Agregar
Trabajo de Integración 2012
Consigna: Realizar un Diseño de Investigación con modalidad grupal que incluya los
siguientes aspectos:
1. Título del Plan de Trabajo:
Estudio de caso sobre www.psi-foros.com.ar como canal de participación en estudiantes
de grado de la Facultad de Psicología de la Universidad de Buenos Aires. Estudio
exploratorio descriptivo en base a una investigación cualitativa.
1. Recorte temático (pertinente a la Psicología Social Comunitaria):
2. Identificación del problema y preguntas: Agregar introducción al Problema. ¿Qué
otros problemas vinculan/derivan?.. Cotejando desde las hipótesis… y el marco
teórico ¿Qué nuevos interrogantes surgen? ¿qué aspectos no explicitados aún….
trabajarían? Es enriquecedor agregar tanto problemas como hipótesis que
se deriven de las/os planteadas/os, de modo tal que configuren un conjunto de
interrogantes/ supuestos-hipótesis que les permitan visualizar qué recorte temático
realizan. Sugerimos hacerlo.
3. Estado del arte y Marco Teórico:
Marco Teórico
Existen en la actualidad diversos desarrollos teóricos que abordan nuestro tema
de interés, la participación estudiantil y los canales de participación.
En relación al término participación, nos interesan los desarrollos de Montero
(1996) en los cuales se considera la participación como una forma de acción humana en
la que los ciudadanos ejercen sus derechos y deberes sociales, políticos,
económicos, territoriales, culturales, entre otros, en un espacio público que hacen y
rehacen con su intervención.
Desde la psicología política retomamos los aportes de Narciso Benbenaste acerca
del constructo “madurez política” (Benbenaste, 2003). El autor plantea que la madurez
política se conforma a partir del conocimiento que el sujeto demuestra sobre la política
tomando en cuenta las condiciones de su país y el contexto de la sociedad
contemporánea; y por otra, sus expectativas sobre la política. En esta misma línea de
investigación consideramos relevantes los desarrollos (Benbenaste, 2006; Delfino 2004,
otros) en torno a las actitudes, de estudiantes universitarios hacia la política, la
democracia y las instituciones cívico-políticas.
El ejercicio de la participación política en distintos escenarios implica la búsqueda
de poder como un medio para influir efectivamente en las decisiones. El poder es definido
por el PNUD como la capacidad de las personas para actuar e incidir en el medio de
manera individual o colectiva tanto para satisfacer sus necesidades como para llevar a
cabo sus proyectos (PNUD Chile, 2005, citado en Zambrano, 2007). El proceso de
adquisición de poder se denomina de distintas maneras, entre ellas empoderamiento o
fortalecimiento. “El empoderamiento es el proceso mediante el cual las personas,
organizaciones y comunidades logran control sobre sus asuntos”. (Rappaport, 1987,
citado en Zambrano, 2007).
En relación a la participación política nos interesan los desarrollos de Palermo y
Colombo a partir de los cuales se define la expresión participación política como un
involucramiento personal en los asuntos públicos, mediante diversas formas: opinar, ser
consultado, decidir, evitar que decidan por uno como no sea en consecuencia del correcto
funcionamiento de las reglas de juego compartidas, y tomar parte en los procesos de
elaboración de opciones y decisiones. Llamamos participación política a ser protagonistas
en las decisiones que toma la comunidad de la cual uno es parte (Palermo y Colombo,
1985).
En la relación al término comunidad nos interesan los desarrollos que la definen
como una experiencia subjetiva de pertenencia a una colectividad mayor, formando
parte de una red de relaciones de apoyo mutuo en la que se puede confiar. El ser
comunidad implicaría la percepción de similitud con otros, el reconocimiento de la
interdependencia con los demás y la voluntad de mantenerla (Sarason, 1974, citado en
Maya, 2004). Según Maya (2004) existe una distinción básica de comunidad. En primer
lugar, se define como localidad y en segundo término como grupo relacional. La primera
idea hace alusión al territorio y a la proximidad relacional en base a este. La segunda
conceptualización se refiere a las relaciones interpersonales y el sentido de pertenencia
que resulta de estas, utilizando como ejemplo los grupos en internet, señalando que sin
necesidad de contacto cara a cara pueden constituirse comunidades genuinas.
Desde las ciencias de la educación (Marcela Mollis, 2002) y las ciencias políticas
(Victoria Kandel, 2003) nos interesan los aportes en torno a la participación estudiantil, la
representación y el gobierno universitario argentino. Sus desarrollos en torno a la
democracia universitaria argentina como una pequeña polis con sus demos nos sirven de
marco para reflexionar cómo se inscriben los estudiantes dentro de esta polis.
En “Participación estudiantil y gobierno universitario. Nuevos actores – Viejas
estructuras” Victoria Kandel postula que las prácticas universitarias –sobre todo las que
se vinculan con el gobierno y el ejercicio del poder- se han desarrollado generalmente sin
un conocimiento profundo sobre el funcionamiento de la propia institución, de su impacto
en su entorno social y de las tensiones que se producen en su interior. Creemos que sin
el reconocimiento de la universidad como objeto de estudio no será posible construir
espacios de representatividad y participación en los que los sujetos se apropien
reflexivamente del conocimiento sobre las prácticas sociales en la institución.
La participación política universitaria responde a distintas inquietudes de los
jóvenes ante la estructura social, el sistema imperante y su reflejo en la comunidad
universitaria. Según Reguillo (2000) dentro de las motivaciones que movilizan a este
grupo etáreo se encuentra la consigna "no hay futuro", que ha operado como bandera
interclasista entre los jóvenes (por diferentes motivos). Lo anterior se refiere a que ante el
contexto político y el descrédito de las autoridades no habrá un devenir auspicioso a
menos que haya una intervención efectiva de los interesados, en este caso los jóvenes.
Esto implica un compromiso con ellos mismos y la comunidad. La misma autora señala
que los jóvenes se encuentran en una búsqueda de una sociedad más inclusiva y
democrática en un contexto percibido como de deterioro económico, de incertidumbre,
donde se han debilitado los mecanismos de integración tradicional y se ha incrementado
el descrédito a las estructuras políticas.
A partir de lo anterior, la autora mencionada explica la relevancia que adquiere la
pregunta sobre las formas organizativas de los jóvenes, por su manera de entender el
mundo y ubicarse en él. Señala que este grupo se ha autodotado de formas de
organización que actúan hacia el exterior, como formas de protección y seguridad y hacia
el interior como espacios de pertenencia y adscripción identitaria.
En lo referente al uso de la Web 2.0 en relación a la participación y construcción
de ciudadanía es pertinente demarcar la diferencia de ésta respecto a la Web 1.0. Se
encuentran diferencias entre el uso que las personas pueden darle a la llamada Web 1.0
en diferencia a la Web 2.0. La Web 1.0 se considera como un espacio de publicación “sin
participación abierta ni gratuidad en contenidos o servicios de alta relevancia. Las
comunidades se formaban fundamentalmente a partir de la oferta de servicios,
prescindiendo de espacios para que los miembros publicaran contenidos” (Pardo
Kuklinski, 2007, p. 27). En tanto que uno de los principios de la Web 2.0, planteado por
O’Reilly (2005, p. 2) es que “el servicio mejora automáticamente cuanto más personas lo
utilicen”. Y ese uso no se da desde un único dispositivo, sino que la información se
almacena en la red, y para utilizarla el usuario sólo debe conectarse a ella (Pardo
Kuklinski, 2007).
De esta manera podemos entender la Web 2.0 como un espacio del cual las
personas se pueden apropiar, y un espacio en el que las personas pueden crear y
producir el contenido que quieran, para compartirlo con cualquier persona, o con alguna
persona en específico (Morduchowicz, 2012), mientras esa persona también tenga acceso
a la red. Dentro de lo que se conoce como Web 2.0 se encuentran los blogs, los wikis, los
chats, los podcasts y las redes sociales (Anderson, 2007). También los foros pertenecen a
la Web 2.0. Los foros están centrados en temas más que en la interacción entre personas,
con lo cual autores como Gruffat y Schimkus no los consideran una red social: “los foros
de discusiones públicas, estaban estructurados por temas o de acuerdo con jerarquías
temáticas, pero los sitios de redes sociales están estructurados como redes personales
(…) con el individuo en el centro de su propia comunidad” (2010, p.96).
Desde esta perspectiva, Boyd y Ellison se refieren a las páginas de las redes
sociales, ya que se accede cuando la persona se conecta en la red, y se caracterizan por
permitir a los individuos: “1) Construir un perfil público o semi-público dentro de un
sistema determinado, 2) mantener una lista de otros usuarios con los cuales la persona
quiere compartir, y 3) ver y pasar la información de sus contactos o los de otros usuarios
dentro del mismo sistema. (…) Esto puede llevar a conexiones entre personas que de otra
manera no se hubieran podido conocer. Pero esta no es la meta común, y por lo general
los encuentros se dan entre personas que comparten una relación off-line” (Boyd y
Ellison, 2007).
Dentro del dilema de lo que pertenece o no a las redes sociales, Cobo Romaní
(2007) dice que redes sociales son “todas aquellas herramientas diseñadas para la
creación de espacios que promuevan o faciliten la conformación de comunidades e
instancias de intercambio social”. De esta manera un foro pertenecería a una red social,
entendiendo por foro en Internet: un complemento a un sitio web, invitando a los usuarios
a discutir y compartir información relevante a la temática del sitio, con lo cual se llega a
formar una comunidad en torno a un interés común (wisegeeks.com).
Los foros permiten la formación de comunidades, que también se han llamado
comunidades virtuales, como las denomina Winocur (2001, p. 81): “En la realidad virtual,
la comunidad no se finca en un territorio vinculado a un pasado, una cultura o biografías
comunes, sino en contactos efímeros con personas que probablemente nunca se
conocerán y que sólo las une un interés coyuntural; cuando este se agota o cambia la
comunidad desaparece o se establece con otros. Así mismo, lo comunitario ya no alude a
los fuertes lazos que se establecen a partir del compromiso impuesto por la tradición, los
mayores o la necesidad de supervivencia, sino a los gustos y preferencias compartidas y
escogidas libre o individualmente. Tampoco se rige por obligaciones morales, códigos o
normas, ni tiene un pasado que la marque ni un futuro que la comprometa.”
Ahora, si tomamos los tres puntos clave que para Boyd y Ellison constituye una
red social, los nuevos foros han adquirido esta costumbre de tener un perfil público o
semi-público en el cual las personas pueden tener amigos y conversar directamente con
ellos de cualquier tema que no tenga que ver con la publicación del foro; además, se han
establecido también como espacios en los cuales las personas pueden publicar
información que no sea previamente aprobada por el creador de la página. Aunque la
información pueda luego ser suprimida por el administrador (si se violan las normas
explícitas del foro), este mismo formato se maneja en facebook (la red social por
excelencia) ante la violación de las normas como suplantar identidad, crear un falso perfil,
ofender a alguien o cargar pornografía.
Para este estudio es especialmente relevante la finalidad de tipo ciudadano, donde
los usuarios utilizan la plataforma virtual con el fin de vigilancia de su entorno y
transmisión de su legado cultural. Estos espacios se pueden utilizar para difundir
información de un determinado grupo, recopilar información relevante sobre algún tema de
interés, facilitar la administración y logística y procurar recursos para alguna actividad.
Además, pueden servir para vincularse con otras redes de interés ciudadano.
Otra característica de las redes sociales es el fenómeno de la inteligencia colectiva
(Godin,2008. Citado en Adaime, et.al, 2010), que permite pensar en la renovación del
imaginario social (Benkler, 2006. Citado en Adaime,et.al,2010). Los autores señalan que
las redes sociales estimulan la horizontalidad en las relaciones humanas, sentado las
bases de un nuevo contacto social. El concepto de inteligencia colectiva (Lévy, 1999.
Citado en Adaime, 2010), toma la idea de construcción recíproca de conocimiento a partir
de la comunicación desterritorializada y en tiempo real, creando nuevas comunidades de
conocimiento voluntarias, temporales y tácticas. De esta manera se describe a la
inteligencia colectiva como una fuente alternativa de poder mediático.
La llamada inteligencia colectiva se produce a partir de la convergencia de sujetos,
que conectan contenidos, poniéndose en relación mediante las interacciones entre unos y
otros dadas en la red. La base de este fenómeno es la comunicación y la forma de
construcción colectiva en que cada actor contribuye con su grano de arena con el objeto
de informar o solucionar algún problema común, dándole lugar a alguna información y así
permitiendo que esta se conozca y la participación de las audiencias. Lo anterior indica
que las redes sociales trascienden las finalidades de entretenimiento y socialización que
se dieron en el comienzo, permitiendo dar paso a la vinculación y enlace social, lo que
propició el desarrollo de redes sociales basadas en la inteligencia colectiva (Adaime,
2010).
Relativo a lo anteriormente descrito, los autores indican: “La inteligencia colectiva
representa la rotunda negación de las tesis propuestas por Gustave Le Bon, quien
sostenía que las masas eran tan egoístas como estúpidas. Entre los pensadores que han
contribuido a superar el fatalismo que distinguió a Le Bon en lo relativo al comportamiento
de las muchedumbres, vale la pena destacar a Dertouzos (2001), quien concibe y
propone algunos de los posibles fundamentos del humanismo digital en un estupendo
libro, The Unfinished Revolution. Además conviene tener presente a Rheingold (2004) y a
Surowiecki (2005), quienes han destacado la posibilidad de ubicar multitudes inteligentes,
gracias a las condiciones de asociación que desplazan consigo Internet y los nuevos
medios y dispositivos digitales móviles”.
Estado del Arte
Existen además diversas investigaciones que trabajan sobre temas relacionados,
aportando antecedentes propios del análisis del caso en cuestión:
Pilar Cortés en la investigación que tituló “Redes Sociales: ¿apoyo o boicot
para la participación política?” se planteó como objetivo el estudio de las nuevas
formas de participación política de los jóvenes, en el caso español. Esta investigación
constó de tres ejes bien diferenciados que fueron: El internet, las redes sociales y la
movilización bajo estas nuevas formas de comunicación. Se realizó una investigación de
carácter exploratorio-descriptivo, donde empieza haciendo un recorrido sobre el
nacimiento de la Internet como elemento experimental de comunicación principalmente de
las instituciones militares hasta llegar a la consolidación de la World Wide Web tal como
la conocemos actualmente. Más adelante aporta estadísticas sobre el acceso a internet
en hogares españoles que comprende un perfil socio-demográfico de los internautas en
dicho país, enfatizando en la franja etaria de 16 a 34 años (jóvenes). Conceptualiza el
término de redes sociales y describe las claves del éxito para que las redes sociales
lleguen a ser populares. Entre las que menciona se encuentran: la sencillez, la
inmediatez, la economía del servicio, la facilidad de comunicación, la cooperación y la
comunidad, este último como factor importante para nuestra investigación ya que se
afirma: “es en la comunidad donde nos sentimos partícipes de la sociedad y nos
relacionamos, podemos generar nuevas amistades, conocimientos e ideas y compartir lo
que hacemos y lo que somos”#. A partir de esto se responde afirmativamente la pregunta:
Sí, se puede llamar a estas iniciativas movimientos sociales puesto que cumplen con los
principios fundamentales en tres niveles específicos: Económico, político e ideológico y
termina con un aporte sobre el papel de las redes sociales en la política citando las
especificidades del caso español.
Sara López, Gustavo Roig e Igor Sádaba, en otro estudio español que se tituló
“Nuevas tecnologías y participación política en tiempos de globalización” realiza
aportes en torno al tema que nos planteamos en concepciones acerca de los modelos de
acceso a internet en los movimientos sociales, así como experiencias de movilizaciones
sociales por ejemplo en contrariedad a la guerra de Iraq o los últimos golpes de estado en
la zona Árabe, donde las redes sociales influyeron efectivamente para la movilización de
la ciudadanía y para el acceso a información sin intermediarios.
La investigación “Una mirada sobre la participación política
estudiantil: el caso de la UBA,” realizada por Gordon, Ariel y Moguillansky, Marina,
buscó caracterizar la participación política estudiantil en la Universidad de Buenos Aires.
A partir de datos estadísticos los investigadores estudiaron lo que a su entender son las
principales dimensiones sociales relacionadas con la participación estudiantil y estas
fueron: género, tipo de colegio secundario, nivel socioeconómico y nivel de información.
Ya con estas dimensiones asumidas, postularon la relación entre el perfil socioeconómico
y sociocultural de los estudiantes y su propensión a la participación política utilizando
como insumo los datos provenientes de una encuesta realizada a 1300 estudiantes de las
trece facultades de la UBA (Gordon, Ariel y Moguillansky, 2003). La investigación
concluyó que los hombres participan más que las mujeres (21,4 % de los hombres tiene
alguna participación política, contra un 17,6 % de las mujeres).
En la investigación “Participación política estudiantil al interior de la
Universidad: interés en política y conocimiento sobre la vida institucional” realizada
por Marina Cuello Pagnone y Elio Parisí, los participantes fueron alumnos de las carreras
de Lic. en Psicología, Lic. en Comunicación Social, Lic. en Ciencias de la Educación y Lic.
en Fonoaudiología, de la Facultad de Ciencias Humanas de la Universidad Nacional de
San Luis; que cursaran, al momento de la recolección de datos, 2° o 4° año de cada
carrera según los correspondientes Planes de Estudio.
La muestra definitiva quedó conformada por 170 participantes, cuyas
edades estaban comprendidas entre los 18 y los 59 años, con una edad media de 23,87 y
una desviación estándar de 6,19. El 71,76% de los participantes fueron de sexo femenino,
mientras que el 28,24% restante, de sexo masculino. Para la recolección de los datos se
utilizó un cuestionario semiestructurado diseñado ad hoc. El procesamiento cuantitativo
de los datos se realizó utilizando el paquete estadístico InfoStat. La sección
correspondiente a conocimiento sobre aspectos de la vida institucional incluyó 5
preguntas abiertas sobre modalidad de elección de autoridades, duración en cargos de
representación estudiantil, funciones del Centro de Estudiantes, definición de autarquía
universitaria y órganos de gobierno en los que existe representación estudiantil. Las
respuestas fueron puntuadas entre 0 y 2 puntos cada una, y los valores totales finales
fueron categorizados en tres rangos: conocimiento bajo, medio y alto. Tanto entre quienes
se manifiestan interesados en temas políticos universitario, como entre quienes dijeron
intentar mantenerse informados por medios de comunicación intra o extrauniversitarios
sobre la temática, la proporción de puntajes altos fue ligeramente superior que entre
quienes no, con disminuciones de hasta 10 puntos en la categoría puntajes bajos para los
primeros.
Giovanni Arrasco Azzini en su escrito “PARTICIPACIÓN Y TENDENCIAS
POLÍTICAS EN ESTUDIANTES UNIVERSITARIOS: EL CASO DE LA UNIVERSIDAD DE
CHILE” describe el desarrollo de su investigación de carácter exploratorio y cualitativo
que pretende analizar las posibles relaciones existentes entre la política nacional chilena y
la política universitaria, y explicar las causas por las cuales, aparentemente, la orientación
política de las organizaciones estudiantiles de la Universidad de Chile ya no reflejan la
realidad nacional. Las hipótesis con las que trabaja son las siguientes: H1 "Si mayor es la
búsqueda de identidad desde lo colectivo, mayor será la Participación política"; y la H2 "Si
disminuye la participación en la política nacional, disminuye la participación en la política
universitaria". Primero realizaron un rastreo bibliográfico en torno a participación política
en contextos universitarios; luego obtuvieron datos de eleccionarios a nivel nacional y
universitario, y realizaron entrevistas a informantes clave (dirigentes estudiantiles de
diferentes facultades de la universidad); finalmente realizaron el análisis y arribaron a las
siguientes conclusiones en torno a las hipótesis anteriormente mencionadas: La H1
parece corroborarse en tanto las entrevistas a dirigentes políticos de la comunidad
estudiantil, aunque no podría corroborarse a nivel nacional ; la H2 debe rechazarse ya
que no existe tal relación, al menos en el período eleccionario tomado.
4. Justificación de la Investigación: ¿Por qué estudiar este tema? ¿Qué datos
muestran la relevancia? ¿qué impactos y transferencias tanto a nivel social como
del campo disciplinar?
5. Supuestos o Hipótesis:
Las hipótesis que nos planteamos en esta investigación son:
●
●
H1 Psi-foros es un medio, un canal (alternativo) de participación para los
integrantes de la Facultad de Psicología de la Universidad de Buenos Aires
H2 Psi-foros constituye una comunidad.
●
●
●
H3 Psi-foros surge como comunidad donde diferentes actores participan, en la
medida en que las instituciones convencionales (Centro de Estudiantes,
Organismos de Gobierno y participación de la Facultad) no generan o
potencian los debates que se desarrollan en el foro.
H4 Si entendemos a la universidad como una pequeña polis, la participación en
psi-foros constituye una acción humana en la que los ciudadanos ejercen sus
derechos y deberes en un espacio público. Se entienden como derechos y
deberes, los mencionados para cada uno de los actores de la UBA, en el
Estatuto Universitario y en la Constitución Nacional.
H5 La participación mediada por la red social psi-foros constituye una nueva
forma de participación política en el caso de estudiantes de grado de la
Facultad de Psicología de la Universidad de Buenos Aires.
6. Objetivo General y Específicos: ¿En qué aspectos pueden profundizar /
desglosar? ¿En qué sentido? ¿Qué de cada cosa? Es importante que armen un
esbozo aunque sea.
El objetivo general de esta investigación es: establecer en qué medida esta
comunidad virtual incide en la vida política, institucional y cotidiana de la Facultad de
Psicología de la UBA y en sus actores.
Dicho objetivo se concretará a partir de la puesta en marcha de los siguientes objetivos
específicos:
Identificar modalidades de participación en el foro (activos-pasivos? a qué se
refiere acá? Refiere a participación comunitaria, participación política, participación
social, etc. Es decir las diversas modalidades de participación.)
2. Identificar temáticas de participación política en el foro (procesos sociales que
acontecen en el espacio público –red social y universidad- compartido en el que
habita la comunidad)
3. Identificar si dicha participación tiene por intención u objetivo impactar en la
Facultad de Psicología de la UBA y sus actores.
1.
Copio aquí los objetivos de la vez pasada:
El objetivo general de esta investigación es: establecer si un medio virtual como una red
social –en este caso psiforos- puede conformar una comunidad a partir de la cual los
miembros llevan adelante una participación política con miras a intervenir en el espacio
público que habitan.
Dicho objetivo se concretará a partir de la puesta en marcha de los siguientes objetivos
específicos:

Identificar modalidades de participación en el foro.


Identificar temáticas de participación en el foro (procesos sociales que acontecen
en el espacio público –red social y universidad- compartido en el que habita la
comunidad)
Identificar si dicha participación conlleva o tiene por intención un impacto en el
espacio público que habitan.
7. Metodología: tipo de diseño, unidades de análisis y algunas variables e
instrumentos para la recolección de datos. sólo para anticipar, para prever cómo
sería el trabajo de campo. Breve. Nos referimos a Variables en la consigna, pero
si fuese cuali también pueden agregar categorías. hay que entregarlo sólo como
generalidad, apenas enunciado. Incluir a modo de borrador lo que van
planificando, aunque no sea definitivo.Imaginar el campo, delimitar
variables/categorías ayuda a pensar los momentos anteriores. Pero es claro que
estos temas (instrumentos, fuentes, muestras) los veremos el próximo
cuatrimestre
8. Bibliografía
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