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Nota de prensa
El Consejo General de Colegios de Ópticos-Optometristas advierte
del riesgo de accidentes de tráfico por deslumbramiento
El 45% de los conductores no se protege
habitualmente con gafas de sol
•
Conducir con el sol de frente es la situación que más fatiga visual causa a los
conductores. Sin embargo, el 12% nunca utiliza gafas de sol y el 33% solo las
usa de forma ocasional.
•
“El 90% de la información que se percibe al conducir llega a través de la visión”,
afirma Juan Carlos Martínez Moral, Presidente del Consejo General de
Colegios de Ópticos-Optometristas. Por eso, las condiciones visuales son
determinantes para la conducción y guardan una estrecha relación con los
accidentes derivados de fallos humanos y distracciones visuales.
•
Visitar al óptico-optometrista al menos una vez al año garantiza que nuestra
visión esté en perfecto estado para conducir. Sin embargo, el 46% de los
automovilistas no lo hace.
Madrid, 2 de julio de 2013
Con la llegada del verano, los días más largos y el comienzo de las vacaciones, se
multiplican los desplazamientos en coche y, como consecuencia, también se incrementa
el número de accidentes, muchos de ellos debidos a problemas visuales sin corregir del
propio conductor.
Al igual que comprobamos el estado del vehículo antes de viajar, debemos hacer
lo mismo con nuestra visión, sobre todo si utilizamos corrección visual y/o superamos los
45 años de edad. Sin embargo, “el 46% de los automovilistas no revisa su visión
anualmente, aumentando, por tanto, el riesgo de sufrir accidentes de tráfico” explica
Juan Carlos Martínez Moral, Presidente del Consejo General de Colegios de
Ópticos-Optometristas.
Deslumbramiento, el enemigo en la carretera
Además de los factores de riesgo que más influyen en la calidad de visión de los
conductores, como la edad, el estado psicofísico, las enfermedades oculares, etc, existen
otros factores concurrentes, llamados externos o ambientales, que inciden de forma
directa en la visión del conductor, incrementando el riesgo de accidentes de tráfico. Entre
ellos destacan la conducción nocturna, la baja luminosidad por factores atmosféricos y el
deslumbramiento. En este último caso, los haces de luz de los otros vehículos y la luz
natural o radiación solar constituyen las dos principales fuentes de deslumbramiento al
volante.
Martínez Moral explica que “una fotoprotección ocular adecuada, mediante
gafas de sol, puede atenuar y evitar los efectos de la radiación, que se traducen en una
serie de riesgos en carretera. Situaciones como conducir con el sol de frente al
anochecer y al atardecer, con los reflejos en el asfalto mojado o con los destellos de la
luz del mediodía sobre el capó de otros vehículos provoca, en muchos casos, pérdida
temporal de visión, incrementando el riesgo de accidentes de tráfico”. Sin embargo, las
estadísticas reflejan que el 12% de los conductores nunca se pone gafas de sol, el
33% reconoce que solo lo hace en algunas ocasiones y únicamente el 55% se protege
de manera habitual mientras conduce.
Efectos sobre los ojos
Los conductores se encuentran más expuestos a la radiación solar que el resto de
la población. El uso de gafas de sol al volante protege nuestros ojos por dos motivos:
1) Las gafas de sol ofrecen una gran calidad visual, incrementan la sensibilidad al
contraste, reducen el tiempo de adaptación a los cambios de iluminación y evitan el
deslumbramiento, lo que redunda en una mayor seguridad en la conducción.
2) A largo plazo, evitan la aparición de patologías oculares derivadas de una exposición
prolongada a las radiaciones solares dañinas, como las cataratas, el terigión (carnosidad
blanca o de color crema que aparece en la superficie ocular) o el carcinoma epidermoide
de la córnea o de la conjuntiva (tumor de la superficie ocular), lo que nos permite
mantener nuestra autonomía personal en etapas avanzadas de la vida.
Gafas de sol, mejor con el asesoramiento de un óptico-optometrista
En los días soleados y en los momentos en los que haya cambios bruscos de luz,
las gafas de sol son imprescindibles. Las mejores gafas de sol para conducir son las que
incorporan lentes polarizadas, que reducen el deslumbramiento y facilitan la visión en
ambientes muy luminosos. Los tratamientos anti-reflejantes en la superficie de las lentes,
por su parte, disminuyen los reflejos, incrementado el contraste.
Pero hay que tener mucho cuidado con el lugar en el que adquirimos las gafas, ya
que, según el Consejo General de Colegios de Ópticos-Optometristas, el 70% de las
gafas de sol que se venden en España no cumplen la normativa sanitaria de
seguridad y calidad. Lo más recomendable es adquirir las gafas en un establecimiento
sanitario de óptica, donde se cuenta con el asesoramiento de un profesional de la salud
visual óptico-optometrista, quien, además de ofrecer una solución personalizada,
garantiza que las gafas cumplen la normativa.
En el caso de que el conductor necesite gafas graduadas, el óptico-optometrista
se ocupará, además, de que la graduación esté actualizada. “Acudir a revisiones visuales
al menos una vez año, en lugar de esperar a la renovación del permiso de conducción,
constituye una medida de prevención de accidentes”, concluye Juan Carlos Martínez
Moral.
INFORMACIÓN Y GESTIÓN DE ENTREVISTAS
Departamento de Comunicación.
Consejo General de Colegios de Ópticos-Optometristas
Sonsoles García.
Telf.: 91 766 99 34.
E-mail: [email protected]