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través del Consejo Pontificio para Laicos. "El
Cursillo de Cristiandad es un instrumento
suscitado por Dios para el anuncio del
Evangelio en nuestro tiempo" (Juan Pablo II)
Movimiento de
Cursillos de Cristiandad
El MCC es un movimiento de la Iglesia
Católica, que anuncia la Buena Nueva,
posibilita la vivencia y convivencia de lo
Fundamental Cristiano, ayuda a descubrir y
realizar la vocación personal y propicia la
creación de núcleos de cristianos que vayan
fermentando de evangelio los ambientes.
En los 39 años de su existencia en Chiclayo, el
MCC ha renovado la vida de miles de hombres
y mujeres, y los ha unido satisfactoriamente.
Qué son: Los Cursillos de Cristiandad
La palabra Cursillo es diminutivo de curso, para
significar el plazo breve, muy corto, de tres días
solamente, en que se da en forma intensiva y
vivencial temas sobre lo esencial cristiano, que
ayudan a conocer, afianzar y potenciar el
compromiso del ser cristiano en la evangelización de los ambientes.
Los Cursillos de Cristiandad están actualmente
establecidos en todos los continentes, en la
mayoría de los países, entre pueblos y
hombres de diferentes razas y culturas.
Desde su origen los Papas han alentado los
Cursillos de Cristiandad, en muchas ocasiones:
 Pablo VI, en 1963, nombra y declara al
apóstol san Pablo, patrono celestial del
MCC y reconoce los ''abundantísimos frutos
de este método o escuela de espiritualidad
cristiana''.
 En 1966, Pablo VI recibió a 7,000 cursillistas
de 40 países del mundo, reunidos en Roma,
para celebrar la primera Ultreya Mundial.
 El Papa Juan Pablo II ha bendecido y
alabado al MCC, alentando su accionar a
 El Consejo Pontificio para Laicos otorgó,
mediante Decreto, el reconocimiento del
OMCC y la aprobación de su Estatuto, el 30
Mayo 2004. La entrega de ambos
documentos se realizó en ceremonia
especial, el 11 Junio 2004, en Roma.
 Para establecerse en una Diócesis, el MCC
debe tener aprobación del Obispo
Diocesano como parte de su proyecto
pastoral.

El Papa Benedicto XVI, dio gracias a Dios
por todo lo que el movimiento ha hecho para
enriquecer las vidas de los fieles, avivando
en ellos el fuego de amor que se convierte
en la energía de la misión.
Los Cursillos de Cristiandad nacieron en la Isla
de Mallorca (España), en la década del
cuarenta. Ahí celebraron durante ese tiempo
varios Cursillos de ''Adelantados'' y de ''Jefes
de Peregrinos'', preparando a los jóvenes a la
Peregrinación Nacional a Santiago de
Compostela el año 1948, organizada por el
Consejo Superior de los Jóvenes de Acción
Católica.
De esas experiencias, francamente optimistas,
nacieron los Cursillos de Cristiandad. El primer
Cursillo se realizó del 7 al 10 de Enero de
1949, en el monasterio de San Honorato,
montaña de Randa en Mallorca
Tiene “sitio”, en el Cursillo de Cristiandad toda
persona que busca, con cierta seriedad, el
sentido trascendente de su vida, sea cual sea
su forma de pensar y sentir, la persona
insatisfecha que quiera sacarle más jugo a la
vida.
El Cursillo se destina a todas las personas
que desean armonizar su interioridad y
autentificar su relación con Dios y con sus
semejantes. Se dedica a toda persona
equilibrada, madura, capaz de captar el
mensaje evangélico y de comprometerse al
servicio del prójimo.
Es abierto a las personas de toda clase
social, hombre o mujer, persona casada ó
soltera. Ha sido concebido particularmente
para los laicos pero la invitación se hace
igualmente a los sacerdotes y a los
religiosos o religiosas. Para los casados, es
deseable, pero no imprescindible, que
ambos cónyuges proyecten participar en
ello, porque es una experiencia que
hondamente aprovecharán los esposos
compartiéndola. Es importante notar que el
Cursillo no es reservado a los que
frecuentan la Iglesia. Aun los que se han
alejado de la práctica religiosa pueden
vivirlo.
Es un Movimiento abierto a todo cristiano
deseoso de profundizar su fe, cualquiera
que sea su estado de vida. Su objetivo
último es hacer conocer al mundo la mejor
de las noticias (o sea, que Dios nos ama)
por el mejor de los medios (la amistad). Se
espera de los miembros que testimonian de
su vida y hablen de su experiencia.
Un Cursillo de Cristiandad no se “pasa”, sino que
se “vive”, así solemos decir los cursillistas. Es
una experiencia que empieza un jueves en la
noche con la “despedida del Cursillo” y se
extiende hasta el domingo, terminando con la
“clausura”, después de la misa la cual comienza
a las 5 pm. Muchos han calificado el Cursillo
como un “crucero del alma” o también “el mejor
detergente para el alma”. Lo seguro para todos
es que el Cursillo te permite descubrir, o también
redescubrir el amor de Cristo para compartirlo
con los hermanos.
El Cursillo de Cristiandad puede ser una
experiencia de fe, altamente gratificante que,
en general, ilumina nuestro caminar. Quien lo
vive, suele decir que ha vivido los tres días más
interesantes de su vida.
El Cursillo de Cristiandad proclama lo sustancial
de la fe, de forma testimonial, cálida, alegre,
jubilosa. Como la Buena Nueva que salva al
hombre. Más que demostrar grandes verdades,
muestra vidas, que van siendo tocadas por la
fuerza del Espíritu.
Este estilo directo, cercano, que se expresa en
su talante testimonial, encaja muy bien con la
forma de pensar y de actuar de la mujer y del
hombre de hoy, que sigue mejor a los auténticos
testigos que a los grandes maestros.
La proclamación de lo fundamental cristiano en el
Cursillo de Cristiandad es llevada a término por
sacerdotes y seglares, que apuntalan su
testimonio de palabra en el testimonio de su vida,
con la convicción de que todo cambio individual
tiene resonancias en las realidades en que cada
uno se mueve.
Le invitamos a descubrir el Movimiento de
Cursillos de Cristiandad que está extendiendo el
amor de Cristo, en más de 60 países en el
mundo
Somos un Movimiento reconocido por la
Iglesia Católica Romana. Su nombre incluye la
palabra castellana cursillo.
Sin embargo, no se trata de un curso teórico,
ni de un retiro espiritual. Es ante todo una
experiencia de vida. Una experiencia
formidable que consiste en el descubrimiento
de lo fundamental cristiano, para mejor vivirlo.
La experiencia de los tres días no es un fin
sino una etapa. Vivir un Cursillo es más que
una inolvidable experiencia, ¡es el inicio de
una vida nueva!.
El Cursillo nos da la oportunidad de encontrar
muchos buenos amigos, sinceros, generosos,
que siempre nos dan su apoyo.
La inscripción al Cursillo se hace por medio
del "apadrinamiento", es decir por alguien que
ya ha hecho su Cursillo y que se encarga de
que el candidato llene su ficha de inscripción.
NOTA. Si le interesa obtener más información,
lo invitamos a visitar la :
Página web: mcc-chiclayo.org
Padre, te pido por ellos. Cuida en
tu nombre a los que me has dado