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COLEGIO R.R. OBLATAS AL DIVINO AMOR “Construyendo del Civilización del Amor” GUIA DIDACTICA N° 1 AREA/ASIGNATURA: FILOSOFIA GRADO: UNDECIMO ESTUDIANTE: _____________________________________________ PERIODO: SEGUNDO LOGRO: ARGUMENTA LAS CARACTERÍSTICAS SOBRE LA SEMIOLOGÍA Y FILOSOFÍA DEL ARTE POR MEDIO DE LECTURAS DE APOYO. INTERPRETATIVO Soluciona los problemas e hipótesis de la filosofía del arte o Estética con base en lecturas de imágenes y objetos artísticos REFERENTE CONCEPTUAL FILOSOFIA DEL ARTE 1 A diferencia de la estética que es la teoría de lo bello, o de la belleza, tanto natural como artificial, la filosofía del arte se ocupa más bien de las denominadas «bellas artes». Por consiguiente se refiere a aquellas obras que el hombre ha creado, en oposición y distinción de las hechas por la sola naturaleza, y que provocan un sentimiento estético. Sobre ellas, se puede plantear toda suerte de preguntas propias de la filosofía del arte: ¿en qué consiste una obra de arte? ¿Qué se crea en una obra de arte? ¿Por qué y cuándo se considera bella una obra artística? ¿Es el arte una expresión de sentimientos? ¿Imita el arte a la naturaleza? ¿Es subjetiva u objetiva la percepción estética?. Los elementos que la percepción estética valora en una cosa bella son de tipo sensorial, formal y vital o social. Los elementos sensoriales corresponden a las cualidades sensibles o a la captación sensible del objeto, que mejor hay que entender como captación fenoménica del objeto, con lo que se significa que no se aprecian meras cualidades físicas o materiales, sino vivencias sensoriales de un sujeto. Son elementos sensoriales los colores, los matices, las texturas del material, la luz, el movimiento, el volumen, etc. Pero el elemento primordial en el arte es, sin embargo, la forma estética, que no ha de confundirse con la figura o el perfil o la forma material de un objeto (shape, en inglés), sino la forma perceptual, la organización global de la percepción, en un sentido muy cercano a lo que, en psicología, se denomina Gestalt. Las cualidades que ha de poseer la forma artística. Son materia de discusión y análisis en estética y teoría del arte. Fundamentalmente se la considera una forma significativa (Clive Bell) que posee, en este caso, las diversas capacidades del signo: de representar (dentro de la concepción general de que «el arte imita a la naturaleza»), por lo que hay que tener en cuenta los elementos miméticos o factores representativos de la realidad; de expresar o comunicar los sentimientos (dentro de la concepción de que «el arte expresa sentimientos humanos»). O bien se la juzga bajo el criterio de la unidad: la forma, así entendida, es propiamente la «variedad en la unidad», con lo que se alude a la diversidad de elementos formales que han de organizarse de forma unitaria para la constitución del objeto bello. A este principio se le denomina también principio de unidad orgánica, y a él se añaden otros complementarios: tema, variación temática, equilibrio y desarrollo o evolución. S. K. Langer interpreta la forma como la portadora de la cualidad estética, que 1 Cortés Morató, Jordi y Martínez, Riu Antoni, Diccionario de filosofía. Empresa Editorial Herder S.A., Barcelona. 1996 Guía didáctica – Filosofía 11° - Filosofía del arte 1 no es más que el objeto reducido a imagen o a pura apariencia, por obra del acto creador del artista. Los elementos vitales o sociales, aquellos que remiten a hechos, conceptos y otras referencias a que se vinculan la obra de arte, el artista y el momento en que se crea la obra, y que dan a entender que ésta es un producto de un espacio y tiempo determinados, son también importantes a la hora de juzgar qué es lo que percibimos en la vivencia estética. Este último aspecto lo enfatiza, sobre todo, la sociología del arte. En principio, esta disciplina critica el ideal kantiano del arte como una contemplación desinteresada de un objeto bello, con total independencia de las condiciones sociales en que se crea. Históricamente la sociología del arte ha recibido notables influencias del análisis que el marxismo ha hecho de la sociedad en términos de infraestructura y superestructura, así como del estructuralismo que explica la obra de arte en relación con los demás sistemas de signos y significados de la sociedad enraizados en alguna forma de inconsciente, sobre todo los referentes a la comunicación y a la transmisión del saber. En la actualidad es más bien una materia interdisciplinar que tiende a equilibrar el carácter estético específico de la obra de arte con el hecho de que es una obra humana creada en un espacio y tiempo determinados y, por lo mismo, histórica y social. Una teoría sobre el arte es una interpretación del fenómeno estético complejo que conforman las diversas obras artísticas. Las principales teorías del arte se agrupan, según J.-Luc Chalumeau, en cinco grandes familias: 1) la fenomenología del arte, iniciada por el idealismo alemán, y que llega hasta nuestros días con Merleau Ponty y Sartre, cuyo propósito es la descripción de la vivencia artística o del fenómeno estético en sí; 2) la psicología del arte, iniciada por Gustav Theodor Fechner, y cuyos grandes autores son Ernst Gombrich y Rudolf Arnheim, que recurren a diversas escuelas de psicología para interpretar la obra de arte como expresión de los sentimientos humanos; 3) la sociología del arte, iniciada por Frederick Antal (1887-1954) y a la que pertenecen, entre otros, Arnold Hauser y Pierre Francastel; sostiene que el conocimiento de la sociedad es condición necesaria para interpretar toda obra de arte, en cuanto ésta es un reflejo de un proceso social general; ella y el artista, en expresión de J.G. Herder, «llevan las cadenas del siglo»; 4) el formalismo, cuyo fundador es Heinrich Wölfflin; lo que importa es el procedimiento y la forma, no el contenido; 5) el análisis estructural del arte, iniciado por Erwin Panofsky y que sustituye el concepto de forma por el de estructura. ACTIVIDADES 1. Realice un cuadro sinóptico o esquema conceptual sobre los conceptos sobresalientes del texto: “Filosofía del arte” 2. Elija una obra de arte que siempre ha admirado: Pirámides Egipcias, La Monalissa, etc. Y aplíquele las siguientes preguntas y respóndalas: a) ¿En qué consiste una obra de arte? Guía didáctica – Filosofía 11° - Filosofía del arte 2 _____________________________________________________________________________ _____________________________________________________________________________ _____________________________________________________________________________ b) ¿Qué se crea en una obra de arte? Explique su respuesta. _____________________________________________________________________________ _____________________________________________________________________________ _____________________________________________________________________________ c) ¿Por qué y cuándo se considera bella una obra artística? _____________________________________________________________________________ _____________________________________________________________________________ _____________________________________________________________________________ d) ¿Es el arte una expresión de sentimientos? Explique su respuesta. _____________________________________________________________________________ _____________________________________________________________________________ _____________________________________________________________________________ e) ¿Imita el arte a la naturaleza? Explique su respuesta. _____________________________________________________________________________ _____________________________________________________________________________ _____________________________________________________________________________ f) ¿Es subjetiva u objetiva la percepción estética? Explique su respuesta. _____________________________________________________________________________ _____________________________________________________________________________ _____________________________________________________________________________ 3. Sobre el mismo objeto artístico elegido identifique y describa en los siguientes tipos de la percepción estética: a. Los elementos sensoriales: _____________________________________________________________________________ _____________________________________________________________________________ b. La forma estética: _____________________________________________________________________________ _____________________________________________________________________________ Los elementos vitales o sociales: _____________________________________________________________________________ _____________________________________________________________________________ 4. Consulte los contenidos básicos de las siguientes teorías sobre el arte: a) La fenomenología del arte d) El formalismo b) La psicología del arte e) El análisis estructural del c) La sociología del arte arte Guía didáctica – Filosofía 11° - Filosofía del arte 3 COLEGIO R.R. OBLATAS AL DIVINO AMOR “Construyendo del Civilización del Amor” GUIA DIDACTICA N° 2 AREA/ASIGNATURA: FILOSOFIA GRADO: UNDECIMO ESTUDIANTE: _____________________________________________ PERIODO: SEGUNDO LOGRO: ARGUMENTA LAS CARACTERÍSTICAS SOBRE LA SEMIOLOGÍA Y FILOSOFÍA DEL ARTE POR MEDIO DE LECTURAS DE APOYO. COMUNICATIVO Debate sobre los las teorías estéticas griegas, medievales, modernas y actuales por medio de exposiciones y paneles. REFERENTE CONCEPTUAL ESTETICA 2 (Del griego, aisthetiké, relativo a la sensación, siendo aisthesis la sensación, la percepción, y to aisthêton el objeto percibido) Tradicionalmente, parte de la filosofía que tiene por objeto de estudio lo bello, o la belleza en general y, de un modo especial, las condiciones con las que se percibe y crea lo bello, y los criterios con que se valora. En la actualidad, la disciplina teórica y normativa que incluye el estudio de los diversos fenómenos estéticos, como obras de arte, el sentimiento estético, la actitud y la valoración estética, es la teoría o filosofía del arte, que es en definitiva una interpretación del arte, o la crítica filosófica del arte hecha desde diversas perspectivas. Las primeras teorías estéticas, aunque no con este nombre -que se referían propiamente al conocimiento que se obtiene mediante los sentidos-, arrancan de Platón y Aristóteles. En ambos, la naturaleza de lo bello y de las artes se trata por separado, sin vincular la belleza con el arte, y relegando a un segundo plano la vivencia placentera que produce el arte. En Platón, lo bello se identifica con lo bueno (kalokagathía), y bello es lo que es bueno para el individuo y el Estado, mientras que a las obras de arte o a las artes propiamente dichas las consideraba -por razón de la teoría de las ideas- una mera imitación de una imitación. Para Aristóteles, el arte es una forma de conocimiento, correspondiente a la, tekhné poietiké, un saber productivo, y trata más del arte que de lo bello, que ya no se identifica idealmente con lo bueno; la belleza pertenece a la forma. Su tratado de Poética establece una normativa -un comienzo, un medio y un final para toda obra de arte- que influye en la estética literaria de todas las épocas. También el arte, según él, imita a la naturaleza, pero además perfecciona lo que ella deja inacabado. De las ideas de Platón y Aristóteles, pensadas luego por la mente mística de Plotino (la idea de emanación le permite ver que no hay belleza si no se es bello, espiritualizando totalmente el arte) se nutre la estética medieval escolástica. El artista medieval no mira a los objetos para extraer de ellos la forma artística, sino que mira para sus adentros para ver la forma interior, la idea ejemplar, a la que tanto la naturaleza como el arte deben 2 Cortés Morató, Jordi y Martínez, Riu Antoni, Diccionario de filosofía. Empresa Editorial Herder S.A., Barcelona. 1996 Guía didáctica – Filosofía 11° - Filosofía del arte 4 adecuarse. Tras la exaltación estética del Renacimiento, que ve en el arte, sobre todo en la pintura, una ventana abierta a la contemplación de la naturaleza, y entiende lo bello como la conciencia de la armonía que en ella existe, nace la estética moderna con la obra Aesthetica de A.G. Baumgarten, filósofo racionalista, discípulo de Ch. Wolff, quien hacia 1750 introduce este término para aplicarlo a una rama de la filosofía, «hermana menor de la lógica», que estudiará no el conocimiento claro y distinto, propio de esta última, sino el conocimiento sensible y «oscuro». El estudio sobre lo bello, que caracteriza como perfección sensible, lo aplica sin embargo Baumgarten sólo a la creación poética. Charles Batteux (1713-1780), que escribe Tratado de las bellas artes reducidas a un mismo principio (1740) lo generaliza a todas las «bellas artes». Se efectúa así el cambio de la consideración de lo bello entendido metafísicamente (ontológicamente), propio de la filosofía clásica y medieval, a la consideración de lo bello en la obra de arte y como manera de conocer. El idealismo alemán, en Schelling y Hegel, sobre todo, hace de la estética una parte integrante de su sistema. Kant estudia en su Crítica del juicio (1790) los juicios estéticos que denomina juicios del gusto. Para F.W.J. Schelling, en la obra de arte se produce la captación, por la belleza y a través de una intuición intelectual, de lo infinito que se expresa de un modo finito. Para G.W.F. Hegel, la estética representa un momento de conciliación entre la idea y la naturaleza, que es lo bello artístico, al que también llama «ideal», o manifestación sensible de la idea; la estética es la consideración filosófica de las bellas artes. Las dos maneras de entender la estética, como análisis del sentimiento estético y como filosofía de las bellas artes, se desarrollan predominantemente a lo largo de todo el s. XIX y buena parte del XX, de forma independiente o bien en interrelación, pese a repetidos intentos de dar una orientación empírica y más científica a la estética. Gustav Theodor Fechner (1801-1887), psicólogo alemán, fundador de la piscofísica, establece los fundamentos para un estudio meramente empírico y psicológico de la estética, adoptado posteriormente por los psicólogos de la Gestalt, entre ellos Rudolf Arnheim y Leonard Meyer. Vías parecidas han seguido aquellos autores que aplican la semiología a la estética, como Charles Morris y Umberto Eco, o que desarrollan una sociología de la estética, como Pierre Francastel (1900-1970). La filosofía analítica ha criticado duramente los supuestos en que se basa la teoría estética tradicional por su falta de método, por la vaguedad y el uso impreciso de conceptos centrales y, sobre todo, por considerarla basada en un error fundamental: el de suponer sin fundamento que las obras de arte tienen un conjunto de propiedades en común, que constituyen la suma de condiciones necesarias y suficientes para que exista una obra de arte (esencialismo). Una estética analítica, no puede consistir en preguntarse e intentar definir «¿qué es el arte?», sino más bien en preguntarse por el tipo de conceptos que aplicamos a lo que es arte; es una labor de crítica y análisis, por tanto, de los términos con que hablamos del arte. Dentro de la tradición estética, las investigaciones actuales se orientan -no meramente al análisis de los conceptos que se usan-, sino a analizar qué tipo de investigación es la estética, que se considera a sí misma excesivamente filosófica, esencialista y ahistórica, y alejada de los fenómenos de cultura de masas. O hasta cuestionan su misma necesidad o plantean la conveniencia de orientarse más hacia disciplinas parciales, como la historia, la psicología o la sociología del arte. El «posmodernismo» considera superadas las teorías estéticas del pasado, que tacha de universalistas, elitistas y formalistas, y prefiere la pluralidad y la singularidad de diversas experiencias estéticas, irreductibles en principio a sistema. Guía didáctica – Filosofía 11° - Filosofía del arte 5 ACTIVIDAD: Conteste las siguientes actividades: 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. 10. ¿Qué estudia la estética y cuáles sus contenidos como disciplina de la filosofía? ¿Qué diferencia conceptual existe entre Filosofía del arte y Estética? Realice un cuadro comparativo entre Platón y Aristóteles en razón del arte ¿Plotino cómo interpreta la teoría de la emanación en el arte? Elabore un cuadro sinóptico sobre la concepción de arte en relación con la naturaleza y su imitación en la Edad Media, el Renacimiento, la Modernidad y en la Actualidad. ¿En qué consiste el cambio de lo “bello” metafísico a lo bello como conocimiento? Realice un cuadro comparativo entre Schelling, Hegel y Kant sobre sus ideas estéticas. ¿Qué percepciones sobre el arte se dan en los siglos XIX y XX? ¿Cuál es la crítica fundamental de la filosofía analítica sobre las reflexiones estéticas surgidas? Analice, con base en los conceptos de la filosofía del arte y de la estética la siguiente obra de arte: Arte y arquitectura contemporáneas Amarillo horizontal Alexander Calder realizó en 1972 Amarillo horizontal, uno de sus numerosos móviles construidos con chapa metálica y alambres. Estas esculturas, que el artista definió como "dibujos en cuatro dimensiones", muestran el interés de Calder por las formas cinéticas. Guía didáctica – Filosofía 11° - Filosofía del arte 6 COLEGIO R.R. OBLATAS AL DIVINO AMOR “Construyendo del Civilización del Amor” GUIA DIDACTICA N° 3 AREA/ASIGNATURA: FILOSOFIA GRADO: UNDECIMO ESTUDIANTE: _____________________________________________ PERIODO: SEGUNDO LOGRO: ARGUMENTA LAS CARACTERÍSTICAS SOBRE LA SEMIOLOGÍA Y FILOSOFÍA DEL ARTE POR MEDIO DE LECTURAS DE APOYO. ARGUMENTATIVO Fundamenta los problemas e hipótesis de la semiología filosófica a través del análisis de la símbolos, iconos e índices publicitarios PROPOSITIVO Justifica las teorías semiológicas mediante lecturas y talleres REFERENTE CONCEPTUAL LECTURA COMPLEMENTARIA DE ANÁLISIS Y APLICACIÓN ESTÉTICA SEMIOTICA/SEMIOLOGÍA 3 Semiótico (del griego semeion, signo) O también semiología. Es la ciencia que estudia los sistemas de signos. El primero en utilizar el término fue John Locke, que lo incorporó al discurso filosófico para abarcar una de las tres ramas de la ciencia, la doctrina de los signos, que identificó con la lógica. En su acepción actual, la semiótica fue definida paralela e independientemente por el filósofo americano Ch. S. PEIRCE y el lingüista suizo F. de Saussure. Para SAUSSURE, es una «ciencia que estudia la vida de los signos en el seno de la vida social», postulada como necesaria para poder fundamentar la lingüística, que no sería más que una parte de esta ciencia general; para Peirce, es «una doctrina casi necesaria y formal de los signos», el marco propuesto para una teoría general del conocimiento. El desarrollo de la semiótica, a lo largo de este siglo, ha sido extraordinario. Dado el carácter extensivo de esta disciplina -todo es signo y, en consecuencia, todo puede someterse a un análisis semiológico- se distingue metodológicamente entre 1) semiótica TEORICA, que se encarga de definir los conceptos básicos de «signo» y «sistema», 2) semiótica DESCRIPTIVA, que analiza -segmenta y clasifica- las situaciones comunicativas, tanto lingüísticas como no lingüísticas, y 3) semiótica APLICADA a cualquier ámbito de comunicación: el cine, la biología, el folklore, la publicidad, la literatura, medicina, etc. Al estudio del universo del signo, verbal y no verbal, y de su interpretación en ámbitos muy diversos se han dedicado destacados semiotistas como Roland Barthes, Claude Lévi-Strauss, Julia Kristeva y Umberto Eco, entre otros. SEMIOLOGIA 4 1. Introducción y concepto general. Las palabras que, en el dominio de las lenguas indoeuropeas, designan al signo 5 (griego sema, latín signum) aluden al campo de lo visible o sensible. Sus raíces dicen referencia al 3 4 5 CORTÉS MORATÓ, Jordi y Martínez, Riu Antoni, Diccionario de filosofía. Empresa Editorial Herder S.A., Barcelona. 1996 IPAS, JORGE, Editorial Rialp. Gran Enciclopedia Rialp, 1991 En adelante, signo y signos se abreviarán con s. Guía didáctica – Filosofía 11° - Filosofía del arte 7 hecho de mostrar las cosas al espectador, o a conducirle hacia las cosas (K. Bühler, Teoría del lenguaje). Así Cicerón define el s. como algo que se percibe por algún sentido y significa algo (De inventione) y ORÍGENES llama signo a algo cuya contemplación evoca otra cosa distinta (In Epistola ad Romanos). Lo mismo San Agustín (De doctrina christiana) y Santo Tomás de Aquino (Suma Teológica). Ciertamente el signo que también es instrumento de acción, soporta en gran parte el sistema humano de conocimientos; pero no todo conocimiento es discursivo o por deducción. Y el mencionado concepto de signo, que es el más frecuentemente utilizado, tiene en cuenta casi de modo exclusivo al signo en cuanto vía de conocimiento deductivo. En el hombre un sentimiento interior cualquiera se refleja fácilmente en un movimiento muscular, y éste es ya un signo. Otros hombres, que han percibido en sí mismos semejante conexión entre estado interior y reflejo muscular, podrán captar, a través del s. fisiológico, la situación interior del que está ante ellos. A la vez que signo de una vivencia del alma, el gesto exterior contribuye a intensificarla interiormente. Esta primera toma de conciencia del no-yo por los signos constituye el principio de la inducción, y pone en evidencia la condición humana de ser espíritu encarnado. El hombre aprehende que su cuerpo es un medio expresivo al servicio del espíritu, y no solamente su cuerpo sino las cosas que utiliza. Con la ayuda de la memoria y la imaginación, el conocimiento sensible amplía y combina su campo de experiencias, y el entendimiento, que alcanza el concepto mismo de ser, logra desmontar y analizar estos conocimientos. De modo que los conceptos e ideas vienen a ser signo intelectual de las cosas. El hombre vincula también objetos a nuevas ideas, y crea signos artificiales. Pero su CONOCIMIENTO ha partido siempre de la realidad percibida sensible e intelectualmente, ya en el encuentro con los otros y con las cosas, ya en la inmanencia de su propio ser. La COMUNICACIÓN humana no puede darse sin los signos. La más refinada especulación intelectual necesita, para ser entregada, el vehículo del lenguaje. Ahora bien, los fenómenos lingüísticos son íntegramente del carácter del signo; pero signo que no puede reducirse tan fácilmente, como a veces se hace, a la categoría de signo artificial o puramente convencional; si en la complicada estructura sematológica 6 de una lengua existen elementos surgidos por una convención comunitariamente asimilada, hay otros muchos factores que responden a la categoría de signo natural. Esto es precisamente lo que posibilita el esfuerzo de la lingüística moderna por crear una teoría del lenguaje válida para cualquier expresión lingüística humana J. M. LECEA YÁBAR 2. Signo y símbolo. El Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua define el signo como «cosa que por su naturaleza o convencionalmente evoca en el entendimiento la idea de otra», y el SÍMBOLO como «imagen, figura o divisa con que materialmente o de palabra se representa un concepto moral o intelectual, por alguna semejanza o correspondencia que el entendimiento percibe entre este concepto y aquella imagen». Estas definiciones no son muy precisas, puesto que un s. puede ser una cosa en sentido estricto (ej., una bandera), pero también puede ser un gesto (ej. el que hace un guardia de tráfico), una palabra, un grito, un color, etc., o una mezcla de todo o parte de esto. A su vez, aquello que da a conocer el signo puede ser una idea (ej., la bandera indica la idea de una nacionalidad), pero puede ser también una cosa en sentido estricto o una realidad que 6 Sematología, relacionada a tiptología de uso específico en la simbología esotérica pero que puede estudiarse como fenómeno semiótico y que trata del medio de comunicación de los espíritus por medio de percusiones o golpes, a veces imperfectos, en todo caso es la utilización de signos sonoros. Guía didáctica – Filosofía 11° - Filosofía del arte 8 no sea una idea (ej., el concepto de mesa camilla es un signo de unas mesas reales; el grito, signo de un dolor). Y algo parecido puede decirse del símbolo, que a veces en el lenguaje ordinario se usa como sinónimo de signo. Sin embargo, las definiciones de signo y símbolo del Diccionario RAE precisan dos diferencias. En primer lugar, el símbolo representa, o sea, sustituye o hace las veces de, el concepto o realidad representada. Es decir, un signo puede ser meramente INDICATIVO o manifestativo (como un reloj indica las horas, o el color rojo del semáforo indica prohibido el paso), y puede ser además representativo o SUSTITUTIVO (como las llaves de una ciudad entregadas a una autoridad). Igualmente, una bandera puede ser un simple signo indicativo de una nación (ej. en un barco), pero otras veces además de indicar o significar una patria la representa, y en este sentido se le rinde homenaje (ej., en una ceremonia de jura de la bandera). Los símbolos, por lo general, son, pues, signos representativos y no sólo indicativos. Además, en segundo lugar, el símbolo tiene alguna semejanza o correspondencia más o menos natural con la cosa o idea simbolizada (ej. las llaves, símbolo de una casa o de una potestad), mientras el signo puede ser completamente arbitrario o convencional. Así, pues, en castellano, al igual que ocurre en otros muchos idiomas, los símbolos vienen a ser un caso particular de los signos, son una determinada clase de signos. Nos ocuparemos aquí de los s. en general. 3. Significante, significación y significado. Los s. tienen una gran importancia para toda la vida social humana; sin s. no es posible lengua ni lenguaje alguno. Todas las ciencias y la cultura en general no serían tampoco posibles sin signos. También hay s., sobre todo símbolos, que son instrumento de acción. Su necesidad, en uno u otro caso, se deriva de la estructura anímico-corpórea del ser humano, del hecho de ser el hombre espíritu encarnado. Es esencial de todo s. hacer referencia o remitir a algo distinto de él. Todo s. tiene, pues, dos aspectos: lo que sirve de s., que puede llamarse significante, y aquello otro a lo que se refiere o que da a conocer, que se puede llamar significado. Al significado se le llama también significación; pero quizá es mejor emplear esta palabra para referirse a la capacidad o al acto de significar del significante; o también a la relación entre el significante y su significado, de la que le viene a aquél su capacidad de significar. Un significante puede ser cualquier tipo de realidad, mental o extramental, y puede tener uno o varios significados, lo que supondrá una relación peculiar con cada uno de ellos. Lo mismo puede decirse de un significado. Lo esencial del s. es, pues, su capacidad de significar, lo que hemos llamado significación. La capacidad y naturaleza de la significación depende de la clase de relación que haya entre el significante y su significado, y es el criterio fundamental para clasificar las distintas especies de signos. 4. Signos naturales y signos convencionales. La capacidad de significar o, simplemente, la significación puede venir de la misma naturaleza del significante; es decir, de que tenga con su significado una relación o conexión natural. Esa relación natural puede ser de causalidad, de dependencia, de semejanza, de analogía, etc. Así, ej.: el humo es s. del fuego que lo causa, unas huellas en la arena son s. de alguien que ha pasado, una estatua es s. del representado en ella. Se trata en estos casos de s. naturales (o de significaciones naturales, independientemente de que el significante sea «natural» como el humo, o «artificial» como la estatua). Entonces el sujeto cognoscente se limita a descubrir, y después a utilizar, el signo. Guía didáctica – Filosofía 11° - Filosofía del arte 9 Si, por el contrario, la relación entre significante y significado es establecida convencional o arbitrariamente por el sujeto cognoscente, tendremos los s. convencionales o artificiales; es el caso, en general, de la mayor parte del lenguaje hablado o escrito, de las banderas, de las señales del tráfico, etc. Sin embargo, entre s. naturales y s. artificiales se da una amplia gama de s. que pueden estar más cerca de uno u otro extremo. Así, se habla también de s. mixtos, establecidos más o menos convencionalmente, pero en base a alguna mayor o menor relación o semejanza natural entre el significante y su significado (ej., las llaves de una casa, el color rojo s. de sangre o de martirio, las palabras onomatopéyicas). En general, los símbolos suelen ser s. mixtos. En teología se habla también de s. eficaces; éstos son los sacramentos, s. mixtos que son llamados s. eficaces de la gracia, porque no sólo la significan sino que la producen o causan, por voluntad e institución divina: «Los sacramentos de la Nueva Ley son a la vez causas y signos, por lo que, como suele decirse, producen lo que significan»7. Es decir, Dios se sirve de ellos como de un instrumento para dar la gracia sobrenatural que, al mismo tiempo, está simbolizada en las cosas, gestos y palabras que constituyen el s. sacramental. También los milagros son llamados s. divinos, porque manifiestan la omnipotencia y la intervención divina al proponer su Revelación sobrenatural. Y en un cierto sentido, también la misma existencia del universo y cualquier acontecimiento natural son s. divinos, en cuanto son efectos de Dios creador y constituyen, por tanto, su revelación natural. 5. Signo formal y signo instrumental. Conceptos y palabras. Dentro de las clases de s. de que hemos hablado hay un tipo de s. naturales y otro tipo de s. artificiales de especial importancia, por lo que merecen ser tratados aparte. Entre los s. naturales puede incluirse una clase peculiar de s. que son los de mayor capacidad significativa, en el sentido de que su naturaleza se agota en ser s.; no son otra cosa que signos. Se trata de los conceptos e ideas del entendimiento; análogamente se pueden considerar así las sensaciones y percepciones de los sentimientos, y también de las imágenes de la imaginación o fantasía, etc. No se encuentran en la naturaleza s. comparables a ellos. Los conceptos e ideas se pueden considerar como s. naturales de las cosas conocidas, pero s. de una naturaleza especial; son llamados por algunos autores s. formales, porque su entidad o naturaleza es simplemente la «forma» de la cosa conocida, la forma misma de la cosa poseída o recibida en el entendimiento, y no tienen ninguna otra entidad más que ésa; su naturaleza es sólo la de ser significantes de algo, uniendo la cosa misma con el sujeto cognoscente. Los conceptos, ideas, o cualquier otra concreción del conocimiento (sensaciones, percepciones, intuiciones, etc.) son nada sin las cosas. En cambio, los demás s. naturales, y también todos los s. artificiales y mixtos, además de tener en sí mismos una significación tienen una entidad propia distinta de su capacidad de significar. Antes de ser significantes son en sí mismos otra cosa independiente de su significación. Estos s. que antes de significar tienen una existencia y naturaleza propia son llamados s. instrumentales. Así, por ej., las llaves son llaves, además e independientemente de que puedan ser s. o símbolo de una ciudad, de una casa o de una potestad; la bandera es una pieza de tela de diferentes colores además de significar una nacionalidad o una patria; la palabra es un sonido determinado, o un dibujo, además de significar un concepto o una cosa; etc. 7 Santo Tomás de Aquino, Sum. Theol. 3 q62 al adl Guía didáctica – Filosofía 11° - Filosofía del arte 10 Los s. instrumentales exigen ser conocidos en sí mismos y en su capacidad de significar; es decir, es necesario tener un cierto conocimiento previo de ellos para llegar a conocer su significado. En cambio, en los llamados s. formales o intelectuales no se da o no es necesario el paso consciente del significante al significado. Ello está en relación con el hecho de que no conocemos sólo ideas o conceptos, sino realidades en y por los conceptos. El hombre conoce las múltiples realidades y los múltiples aspectos de la realidad, y se da cuenta de que las conoce; sólo después de una más o menos laboriosa reflexión se da cuenta de que lo hace por medio de conceptos, y entonces puede estudiar también la naturaleza de los mismos. Entre los s. artificiales e instrumentales, hay también que destacar una importante clase de s. que son la mayoría, o al menos muchos, de los del lenguaje hablado o escrito. Estos s. son establecidos más o menos convencionalmente por el uso tradicional, en el que confluyen también factores que aproximan las palabras a los s. naturales; o son establecidos por unas elecciones más precisas y determinadas en el caso de especiales lenguajes «científicos». Así tenemos las palabras, compuestas de morfemas, que se utilizan en las lenguas ordinarias; y los símbolos que se utilizan en Lógica, Matemáticas, Física y Química. En uno y otro caso, los s. de cualquier lenguaje son s. de los conceptos y también de las cosas y, por tanto, pueden estudiarse en los dos sentidos. Todos los s. lingüísticos son instrumentales, es decir, son la materialidad de un determinado sonido (en el lenguaje hablado) o de un determinado dibujo (en el lenguaje escrito) a los que se da una significación. Como s. instrumentales son más manejables que los conceptos, y éstos, a su vez, más manejables que la realidad. Por medio de los s. lingüísticos no solamente se expresan los conceptos y las cosas, sino que también se transmiten y comunican fácilmente los conocimientos. Pero hay que tener cuidado, como veremos, en no confundir unos s. con otros, ni el manejo de unos y otros. Los s. lingüísticos son una manifestación del lenguaje, entendiendo por tal la capacidad de expresar y comunicar los conocimientos y las realidades interiores y exteriores al hombre. Un determinado conjunto de s. lingüísticos, relacionados y ordenados entre sí, constituyen una lengua. Los s. formales, conceptos o ideas, son una manifestación de la capacidad cognoscitiva humana. Al ordenar y relacionar entre sí los conceptos, juicios y conocimientos sobre una determinada realidad o sobre algunos aspectos de la realidad, aparecen las diversas ciencias. 6. Significación y conocimiento Es de la mayor importancia la comprensión de la clase peculiar de s. que son los conceptos e ideas, por una parte, y los s. lingüísticos por otra. De ello depende qué se capte o no rectamente la naturaleza del conocimiento humano, el realismo del mismo y el pluralismo tanto de la realidad como de su conocimiento. En efecto; si se dice que en realidad no se conocen las cosas mismas, sino sólo los conceptos e ideas que sobre ellas se forman en la mente, lo que equivale a decir que el hombre sólo conoce s., entonces se pierde de vista la realidad y el realismo del conocimiento. Se establece, entonces, un a modo de corte o separación radical entre el sujeto cognoscente o, mejor, entre el entendimiento y la realidad exterior a él. Y el conocimiento se transforma en un mero manejo por parte del entendimiento de una serie de «signos» de la realidad. S. que, según que se consideren más o menos convencionales, más o menos producidos exclusivamente por el entendimiento, darán origen a un idealismo o racionalismo más o menos absoluto y, por tanto, más o menos deformador de la realidad. O, al contrario, el conocimiento se transformará en el escepticismo del «sólo sé que no sé nada» en el que también se renuncia a conocer la realidad y al actuar consecuente y recto. En todo caso, se incidiría de una forma más o menos absoluta de subjetivismo y de relativismo con todos sus equívocos (en el caso del «idealismo», todo Guía didáctica – Filosofía 11° - Filosofía del arte 11 sería de una manera o de otra según las épocas o según las colectividades humanas de que se trate; en el caso del «escepticismo», todo sería según le parezca a cada individuo). Al pensar que no se conocen las cosas tal como son, o que no hay posibilidad de ello, no se ha comprendido la naturaleza peculiar y única que tienen los conceptos como s. de las cosas. Se les considera entonces no ya como s. formales, sino como s. instrumentales, con entidad propia independiente de su significación o de su significado; y, más aún, como sustitutivos de la cosa, como símbolos, que pudieran ser producidos por el entendimiento y manejados por él como cualquier otro símbolo. De ahí que teorías o posturas gnoseológicas como las que suelen llamarse idealismo, racionalismo, e incluso el escepticismo, puedan recibir el nombre genérico de simbolismo. En estas posturas, racionalistas o escépticas, suele decirse que el significado de todo signo es siempre un concepto mental, es decir, el sentido que la mente da al significante, confundiendo el acto de conocer el significado con el significado mismo, que puede ser efectivamente sólo mental pero también exterior a la mente. Según esto, lo primero que se conocería en todo s. sería su significado mental, el concepto o idea; sólo después algunos admitirían una referencia más o menos válida a un objeto exterior. Pero en realidad ni el entendimiento produce él solo los conceptos, ni conoce a éstos primero. Lo primero que se conoce son las cosas; sólo después de conocer las cosas se conoce que éstas se conocen; se conocen, pues, los conceptos posteriormente a las cosas. Y los conceptos e ideas no las producen o fabrican sin más el entendimiento y los órganos cognoscitivos en general; sino que los conceptos e ideas son nada sin las cosas, y los producen las cosas en el entendimiento y con él (en y con los órganos cognoscitivos). Por ello, teniendo en cuenta que los conceptos se pueden llamar también s., si bien s. de una naturaleza especial, la definición de s. como «todo aquello, que previamente conocido, conduce al conocimiento de otra cosa» (como hace, ej., el Diccionario de Filosofía de Brugger) es válida sólo para los que hemos llamado s. instrumentales (naturales o artificiales), pero no para los s. formales, porque no es necesario conocer los conceptos o ideas de la mente para conocer las cosas. La significación, pues, es una forma de conocimiento entre otras. Dentro de la significación, además, se engloban diversas formas y métodos de conocimiento no equivalentes entre sí, como hemos visto (deducción, inducción, intuición, aprehensión). En el caso de s. instrumentales, el conocimiento del significado es más por deducción; en el caso de los conceptos, el conocimiento es por la llamada simple aprehensión, etc. Para toda esta importante cuestión han de verse los consultar las teorías del CONOCIMIENTO y del OBJETO; PERCEPCIÓN y SENSACIÓN, así como los relativos a los órganos del conocimiento: ENTENDIMIENTO; INTELIGENCIA; RAZÓN; SENTIDOS. Y también los ya mencionados: CONCEPTO; IDEA; LOGOS; SIGNO Y SIGNIFICACIÓN LINGÜÍSTICOS; REALISMO; RACIONALISMO. 7. Ciencias de la significación La ciencia y la teoría de los s. se ha desarrollado mucho en el s. XX. En este desarrollo confluyen los clásicos y antiguos estudios de Lógica y de Gramática con los de las Matemáticas sobre todo con la utilización de un lenguaje simbólico similar al utilizado clásicamente en Matemáticas. Para algunos, ej., los neopositivistas, la Lógica y la Gramática serían la misma cosa; pero no cabe duda de que, aunque puedan emplear un simbolismo semejante y aunque los estudios de una y otra se complementen e iluminen mutuamente, son esencialmente diversas, como diversos son sus objetos de estudio. La Lógica estudia los conceptos y Guía didáctica – Filosofía 11° - Filosofía del arte 12 juicios de la mente (que son s. formales, naturales y directos de las cosas) y sus relaciones y deducciones; mientras que la Gramática estudia las palabras y sus relaciones y combinaciones (que son s. instrumentales de los conceptos y juicios y también s. instrumentales de las cosas). Tampoco se puede identificar la Lógica con la Matemática, aunque la Matemática utilice las leyes de la Lógica y ésta use un simbolismo semejante al de las Matemáticas, porque supondría, entre otras cosas, confundir todo lo cualitativo con lo cuantitativo, abocando a algún tipo de materialismo. También en la teoría y estudio de los s. interviene, como se ha visto, la Teoría del conocimiento o Gnoseología. Pero ésta tampoco ha de confundirse con la Lógica, como pretende el logicismo, porque supondría identificar los conceptos con las cosas, o, mejor dicho, supondría negar al entendimiento la capacidad de conocer verdaderamente las cosas. Todavía hay que señalar, en relación con las ciencias que se ocupan de los s., a la Psicología. Ésta estudia los hechos del conocimiento, junto con otros hechos psíquicos como los de la voluntad, etc., en cuanto hechos producidos en un sujeto y en unas facultades de un sujeto; mientras que la Gnoseología los estudia en sí mismos, es decir, en cuanto ponen en relación al sujeto con las cosas. Por eso tampoco se puede identificar la Gnoseología con la Psicología, o con una parte de ella, como pretende el psicologismo, porque ello supondría confundir al conocimiento y sus objetos con el sujeto del conocimiento y, en general, supondría confundir efectos con causas. Estas sumarias indicaciones pueden servir para situar a la teoría o ciencia general de los s., que recibe el nombre de Semiología o Semiótica (del griego séma, sémeion, s., sello o señal. La palabra semiología se utiliza en Medicina para referirse al conocimiento general de los s. a través de los cuales puede diagnosticarse una enfermedad o un proceso patológico más o menos oculto, y en Ciencias de la información para referirse al estudio y teoría general de los medios de comprensión y comunicación entre los hombres. Con un sentido más amplio, la Semiología o Semiótica suele considerarse como ciencia general de los signos lingüísticos, lo cual es sólo una parte de la ciencia general de la significación, pues, además de los s. y significaciones lingüísticas hay otros s. distintos (especialmente los s. formales) como hemos visto. En este sentido, en la Semiótica, como ciencia general de los s. lingüísticos, confluyen especialmente la Gramática, la Lingüística y la Lógica formal (también llamada Lógica simbólica o matemática). Esta Semiótica supone un notable perfeccionamiento de la Gramática y de sus partes, que adquiere con ella unos métodos más exactos o rigurosos, pero que no agota todos sus aspectos; para la última comprensión de la Gramática y de los análisis lingüísticos es necesario también tener en cuenta a la Lógica material, a la Psicología y a la Gnoseología. 8. La Semiótica. Si se entiende por Gramática el estudio de una lengua en particular y por Lingüística el de todas en general, y, por tanto, también el del lenguaje como capacidad de expresarse y comunicarse por medio de una lengua, ya se ve que la Semiótica, como estudio general de los s. y significación lingüísticos, estará más cerca de la Lingüística que de la Gramática. De todas formas los límites entre Semiótica, Lingüística y Gramática varían según el uso que hacen de ellas los autores; pero en una primera aproximación quizá pueda decirse que su ordenación o relación es la indicada; es decir, la más general sería la Semiótica y la más particular la Gramática, estando la Lingüística en medio de ambas. Teniendo en cuenta que en todo s. lingüístico se pueden distinguir tres aspectos o dimensiones, la Semiótica se divide en tres partes o ramas. En primer lugar un s. pertenece a una determinada lengua y, por tanto, está relacionado con los demás s. de esa lengua; estas relaciones se llaman sintácticas: son relaciones de los s. entre sí. Su estudio es la parte de la Semiótica llamada Sintaxis. En segundo lugar un s. significa o se refiere a algo, quiere Guía didáctica – Filosofía 11° - Filosofía del arte 13 expresar o comunicar algo distinto del s. mismo; todo s., pues, además de tener una relación con los otros s. de una lengua, tiene una relación con su o sus propios significados: estas relaciones se llaman semánticas. Su estudio es la parte de la Semiótica llamada Semántica (si el significado es sólo el concepto Irlental o si es también la cosa extramental ya no es objeto de estudio de la Semiótica ni de la Semántica, sino de la Gnoseología). En tercer lugar, un s. lingüístico es dicho o escrito por alguien y dirigido a otros; hay, pues, otro aspecto o dimensión de los s.: el de las relaciones entre ellos y los hombres que los usan; relaciones que se llaman pragmáticas. Su estudio es objeto de la parte de la Semiótica que es llamada Pragmática. 9. Indicaciones históricas. Como dice Bochenski, ya los sofistas y Platón (en el Cratilo y otros diálogos) rozaron de paso problemas semióticos. El que por vez primera se ocupó de ellos en forma sistemática fue Aristóteles en los cinco primeros capítulos de su obra lógica De la enunciación; allí está, entre otras cosas, el primer sistema conocido de las categorías sintácticas. Con los estoicos y después los filósofos y teólogos medievales la Semiótica tiene un notable desarrollo; sobre todo, entre estos últimos, con los llamados gramáticos especulativos. Sin embargo, fuera de algunos pocos fragmentos, las obras de los estoicos se han perdido, y la semiótica de los medievales ha sido poco estudiada en general, aunque recientemente se ha despertado más el interés hacia ella. Por otra parte, en la filosofía antigua y medieval el estudio de la significación ha estado centrado alrededor del caso límite del s. que es el concepto, como hemos dicho; caso límite en cuanto que sin la cosa es nada, en cuanto que es pura manifestación y transparencia de la cosa; de ahí que Juan de Santo Tomás, y modernamente Maritain, le hayan dado el nombre de s. formal. Éste es además el caso ejemplar de significación, modelo de los demás s. naturales y de los s. artificiales. De modo que el problema de la significación ha girado en torno a la comprensión de la especial naturaleza de s. que tienen los conceptos. Si éstos se consideran así, como s. puros, con una perfecta intencionalidad y significación de la cosa, se reconocerá el realismo del conocimiento humano. En cambio, si se piensa que los conceptos son s. iguales que todos los demás, se incide en el nominalismo. Algunos autores modernos, como Verneaux, prefieren no usar la terminología de s. formal y s. instrumental, porque -dicen- no expresa adecuadamente lo que son las ideas y los conceptos. En todo caso es una cuestión de palabras; lo esencial es darse cuenta de que el concepto no es lo conocido (no es id «quod» cognoscitur), sino el medio por el que y en que el objeto es conocido (id «quo» obiectum cognoscitur) (de este modo es como se expresa Tomás de Aquino), y darse cuenta, por tanto, que entre concepto y objeto hay una equivalencia grande, una perfecta adecuación, que no se da entre los demás s. y sus significados. Muchos autores modernos desconocen la diferencia esencial entre s. formal y s. instrumental, incidiendo en las posturas racionalistas, idealistas o escépticas que se han descrito, afines al nominalismo en muchos puntos. De forma que puede decirse, con Bochenski, que poco progreso se da en la modernidad con respecto a este punto. Únicamente hay desarrollo en los estudios de la significación en el plano de la Lógica matemática y en el de la Lingüística, pero menos en el de la Gnoseología o Teoría del conocimiento propiamente dicha. Es decir, las investigaciones más modernas se sitúan sobre todo en el plano de la expresión y formulación del conocimiento, pero no tanto en el del conocimiento mismo, y cuando se vuelve la atención sobre él, con frecuencia los autores inciden en alguna forma de racionalismo. Husserl, que no fue un lógico matemático, llevó a cabo en sus Investigaciones lógicas significativos análisis semióticos en una postura más bien realista. Casi al mismo tiempo Saussure realizó sus estudios lingüísticos analizando las estructuras de las lenguas y con ellas las relaciones de los s. Guía didáctica – Filosofía 11° - Filosofía del arte 14 lingüísticos entre sí, en una postura más bien idealista; sus estudios dieron origen al método estructural luego aplicado también a otras materias. En Lógica matemática, G. Frege reelaboró y amplió las ideas de la vieja Estoa. La moderna investigación está vinculada sobre todo a la matemática de D. Hilbert. Destacan en el desarrollo de la Semiótica, en este mismo sentido, A. Tarski, R. Carnap y otros neopositivistas lógicos, que reducen la filosofía al análisis lingüístico. Uno de ellos, Charles Morris, ha sido el creador o introductor de la palabra Semiótica, así como de su división general en las tres partes que hemos indicado. En la segunda mitad del siglo XX se ha cultivado y desarrollado mucho el trabajo semiótico lingüístico con el estímulo de otras ciencias (sobre todo la Física) que exigen un análisis del lenguaje cada vez más riguroso. ACTIVIDADES DE ANALISIS Y APLICACIÓN I. Elabore un esquema libre del texto de la guía II. Realice el siguiente Crucigrama HORIZONTALES 1 Los signos que antes de significar tienen una existencia y naturaleza propia son llamados signos ____________ 5 Capacidad o al acto de significar del significante 6 Pero su ________ ha partido siempre de la realidad percibida sensible e intelectualmente 9 Dice que la semiología es ciencia que estudia la vida de los signos en el seno de la vida social 12 La __________ humana no puede darse sin los signos 14 Tipo de signo que por ejemplo en un reloj muestra las horas, o el color rojo del semáforo indica prohibido el paso 15 Los conceptos e ideas son signos de tipo VERTICALES 2 Tipo de semiótica que se encarga de definir los conceptos básicos de "signo" y "sistema” 3 Las palabras que, en el dominio de las lenguas indoeuropeas, designan ________ 4 Dice que la semiología es una doctrina casi necesaria y formal de los signos 5 Un ___________ puede ser cualquier tipo de realidad, mental o extramental 7 Esta primera toma de conciencia del no-yo por los signos constituye el principio de la ________ 8 Semiótica que analiza -segmenta y clasifica- las situaciones comunicativas, tanto lingüísticas como no lingüísticas 9 Es la ciencia que estudia los sistemas de signos 10 Tipo de signo que por ejemplo reemplaza las llaves de una ciudad entregadas a una autoridad 11 Imagen, figura o divisa con que materialmente o de palabra se representa un concepto moral o intelectual 13 El humo es signo del fuego que lo causa. Es un signo _______ Guía didáctica – Filosofía 11° - Filosofía del arte 15 III. Observa la siguiente tira cómica y responde preguntas: a) ¿Qué secuencialidad puedes descubrir en la tira cómica? b) ¿Cuál sería el SIGNO, SIGNIFICADO Y SIGNIFICANTE? c) ¿Qué simboliza toda la tira cómica, pero en especial la última? d) ¿Qué se quiere comunicar? IV. La semiología aplicada en la publicidad y en la comunicación social ha colaborado tanto en la creación como en la decodificación de mensajes de “fondo” o subliminales, que más allá de su satanización es un ejercicio propio de esta ciencia. Interpreta de acuerdo a los elementos dados, en esta guía, especialmente en lo relacionado con los subtítulos 3. “Significante, significación y significado” y el 6. “Significación y conocimiento”. Observa las siguientes imágenes y después, responde las preguntas que aparecen: La imagen debería aparecer así, pero si te das cuenta, está al revés “Bottoms Up!” ¿Por qué? Para responder lee los subtítulos 3 y 6. _________________________________________________________________ _________________________________________________________________ _________________________________________________________________ _________________________________________________________________ _________________________________________________________________ _________________________________________________________________ _________________________________________________________________ _________________________________________________________________ _________________________________________________________________ _________________________________________________________________ Imagen 1 Guía didáctica – Filosofía 11° - Filosofía del arte 16 ¿Qué significa “La vie en rosa”? Detalla bien y podrás descubrir muchos elementos. ¿Qué sugiere la imagen? Para responder lee los subtítulos 3 y 6. ____________________________________________________ ____________________________________________________ ____________________________________________________ ____________________________________________________ ____________________________________________________ ____________________________________________________ ____________________________________________________ ____________________________________________________ ____________________________________________________ ____________________________________________________ ____________________________________________________ ____________________________________________________ ____________________________________________________ ____________________________________________________ ____________________________________________________ ____________________________________________________ ____________________________________________________ ____________________________________________________ Imagen 2 ___________________________________________________________________________________ Detalla de igual modo esta imagen publicitara, observa detenidamente y describe esos detalles. Para responder lee los subtítulos 3 y 6. ______________________________________ ______________________________________ ______________________________________ ______________________________________ ______________________________________ ______________________________________ ______________________________________ ______________________________________ ______________________________________ ______________________________________ ______________________________________ ______________________________________ ______________________________________ ______________________________________ ______________________________________ ______________________________________ ______________________________________ ______________________________________ ______________________________________ ______________________________________ ______________________________________ ______________________________________ ______________________________________ Imagen 3 Guía didáctica – Filosofía 11° - Filosofía del arte 17