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UNIDAD 5.- LAS GRANDES POTENCIAS Y LAS RELACIONES INTERNACIONALES A FINALES
DEL SIGLO XIX.
1. LAS GRANDES POTENCIAS EUROPEAS
1.1. LA INGLATERRA VICTORIANA
Una potencia económica
El reinado de Victoria I comenzó en 1837 y se prolongó hasta 1901 y se le conoce como era victoriana. En
este período el Reino Unido alcanzó la máxima expansión territorial, consolidó su desarrollo industrial y
mantuvo su modelo político de monarquía parlamentaria. No se vio afectado por las oleadas revolucionarias
europeas de carácter liberal.
El desarrollo económico se vio afectado por una crisis desde 1873 hasta 1895. Esta crisis afectó sobre todo a
la agricultura. Se redujo la tierra cultivada y muchos campesinos se trasladaron a las ciudades, lo que produjo
un significativo incremento de la población urbana (72% en 1891).
En este período, otros países como Alemania o Estados Unidos alcanzaron el nivel de desarrollo industrial y
económico del Reino Unido. Pero éste, continuó siendo el principal centro financiero mundial, gracias a una
moneda fuerte (la libra esterlina) y el Banco de Inglaterra.
El modelo político y las reformas
El Reino Unido se desarrolló sobre un modelo de liberalismo pacífico y ordenado, regulado por un Parlamento
elegido por sufragio restringido y con una monarquía constitucional. Este sistema se basaba en la alternancia
de partidos, el Partido Conservador (tory) y el Partido Liberal (whig), y la aplicación de unas reformas que
trataron de resolver los problemas del país.
Durante sus gobiernos, los liberales introdujeron la instrucción pública gratuita y el voto secreto, legalizaron
las uniones de trabajadores y permitieron la graduación en Oxford y Cambridge a personas no anglicanas. Por
su parte, los conservadores ampliaron la legislación social y promulgaron leyes sobre el trabajo en minas y
fábricas.
Las reformas políticas se iniciaron en 1832 con la ampliación del sufragio (derecho a voto). La segunda
reforma se llevó a cabo en 1867, por Disraeli, ministro conservador, y abrió el derecho a voto a la pequeña
burguesía y a los obreros de las ciudades (1 millón de personas). En 1868, subió al poder Gladstone, liberal, y
puso en marcha importantes reformas:
 Reformas religiosas: separó el Estado de la Iglesia Anglicana.
 Creación de una nueva escuela, con libertad confesional.
 Nueva legislación sindical, y nueva ampliación del derecho electoral (derecho a voto a 5 millones de
personas).
En 1893 se fundó el Partido Laborista, que acabó desplazando en la alternancia de partidos al Partido
Conservador (whig).
El problema de Irlanda
Irlanda, invadida por los ingleses en el siglo XVII, fue incorporada como un nuevo reino a Gran Bretaña, que
pasó a denominarse “Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda”, en 1801. Pero el descontento de los irlandeses
ante esta situación creció cada vez más. La gravísima crisis agraria de 1847 provocó la muerte por hambre de
miles de irlandeses y la emigración masiva a Estados Unidos. Ante esta situación pidieron un estatuto de
autonomía (Home Rule) y un Parlamento propios.
Ante la negativa inglesa surgió en 1879 un movimiento nacionalista, liderado por Charles Parnell, que derivó
hacia actos violentos contra instituciones y propiedades inglesas. Los diversos gobiernos británicos no
supieron dar una solución válida a este problema. En 1914 se concedió a Irlanda un estatuto de
Autonomía, excepto a la zona norte (Ulster), por lo que la isla quedó dividida en la parte sur, católica, y la
parte norte, con una mayoría inglesa anglicana.
La política exterior y el espíritu victoriano
La política exterior de la Inglaterra victoriana buscó el mantenimiento de la supremacía naval, fundamental
para su expansión comercial. En cambio, la intervención del Reino Unido en los asuntos del continente
europeo fue escasa y condujo a un “espléndido aislamiento” hasta principios del siglo XX.
La Inglaterra victoriana se caracterizó por sus grandes contrastes sociales y por el llamado “espíritu
victoriano”, basado en el orgullo nacional, la tradición, la austeridad y el culto al dinero.
1.2. FRANCIA: DEL II IMPERIO A LA III REPÚBLICA
Después de la revolución de 1848, Francia se convirtió en una gran potencia económica y colonial.
El II Imperio (1852-1870)
Las elecciones de diciembre de 1848 llevaron a la presidencia de la II República a Luis Napoleón Bonaparte.
Su mandato finalizaría en 1852, pero antes de que esto sucediera convocó un plebiscito popular para que la
nación le otorgara plenos poderes de gobierno. Así, con el apoyo popular, dio un golpe de estado en 1852 y se
convirtió en emperador como Napoleón III.
Este período tuvo una primera etapa autoritaria (1852-1860). En ella, Luis Napoleón puso en marcha un
régimen populista, donde el poder se concentraba en un solo hombre, a imagen de su tío, lo que se denominó
“bonapartismo”. Persiguió a la oposición e instauró la censura de prensa, consiguió el apoyo de la Iglesia
Católica y defendió el orden y la autoridad como principio.
La situación económica le favoreció: a las mejoras agrarias, el desarrollo industrial y la coyuntura
internacional favorable se unió la construcción del ferrocarril. Hubo unos años de pleno empleo y de grandes
negocios.
Un segundo período fue una etapa liberal (1860-1870). En ella Napoleón III perdió los apoyos de católicos y
obreros y empezó a aplicar medidas de carácter liberal:
 Amnistía para presos políticos.
 Reformas legislativas.
 Libertad de prensa.
 Reformas educativas, como la enseñanza gratuita
 Derecho de huelga y libertad de asociación.
Durante este período se aplicó una política económica intervencionista, favoreciendo obras públicas y
privadas, como por ejemplo la remodelación de Paris por el barón Haussmann.
En política exterior pretendió ser el árbitro de Europa, pero tuvo con sus acciones un carácter desestabilizador,
apoyando a los nacionalismos. En 1854, Francia participó en la Guerra de Crimea, en 1859 apoyó a los
piamonteses contra Austria, entre 1862 y 1867 impuso a Maximiliano de Austria como emperador de México.
E intervino en las aventuras coloniales de Cochinchina, Senegal y China.
En 1870 estalló la guerra entre Francia y Prusia. La derrota del ejército francés en Sedán supuso su caída y la
proclamación de la República.
La III República (1870-1914)
Ante el asedio de París por las tropas prusianas en marzo de 1871, estalló la Comuna de París. La experiencia
acabó en mayo con la intervención del ejército y sofocándola mediante un baño de sangre (20.000 ejecuciones
y 40.000 detenciones).
Dentro de este período podemos establecer una primera fase, la república conservadora (1871-1879). En estos
primeros años colaboraron republicanos y monárquicos, y el nuevo régimen trató de afianzarse de la mano de
Adolphe Thiers, un moderado. Tras un período provisional se proclamó formalmente la III República en 1875,
tomándose varias medidas.
 Se implantó el sufragio universal,
 El poder legislativo se repartió entre el Senado y la Asamblea Nacional,
 Se fortaleció el poder del presidente de la República.
Una segunda fase sería la llamada república de los republicanos (1880-1914), donde la llegada al poder de los
republicanos en 1880 abrió la puerta a nuevas reformas de carácter republicano y democrático. Destaca entre
ellas el declarar la enseñanza estatal y laica, de la mano del ministro Jules Ferry. Desde 1889 a 1898 la
República se consolidó, triunfó la expansión imperialista y se elaboró una avanzada legislación social.
Desde 1894 la vida política del país se vio sacudida por el affaire Dreyfus, acusación que se hizo contra
Alfred Dreyfus, oficial del ejército francés, por espionaje a favor de Alemania. Proceso que no concluyó hasta
1906 con la rehabilitación y absolución del oficial.
A finales del siglo XIX hubo una oleada anticlerical, en 1905 el Estado francés derogó el Concordato con la
Santa Sede e incautó los bienes de la Iglesia. La humillante derrota ante Prusia y la pérdida de Alsacia y
Lorena llevaron a muchos franceses a desear la revancha. Este sentimiento nacionalista encabezado por el
general Georges Boulanger, llamado “boulangerismo”, puso a Francia al borde de la guerra en sucesivas
ocasiones. Se preparaba así el sentimiento antialemán previo a la Primera Guerra Mundial.
1.3. EL II REICH ALEMÁN
En 1871 se creó el II Reich alemán (Segundo Imperio). Dos hechos favorecieron su creación: la unificación de
Alemania en torno a Prusia y la victoria de Prusia sobre Francia en 1870. Guillermo I fue proclamado
emperador (kaiser) en Versalles en 1871.
Expansión económica y organización política
La unión aduanera de 1834 (Zollverein) y el desarrollo industrial y ferroviario anterior a 1870 contribuyeron a
la unificación política alemana y fueron las bases de la potencia económica del país. Pero faltaba la
unificación monetaria, que se logró con la creación de la moneda, el marco (1871) y del Banco Imperial
(1875).
La economía alemana experimentó un gran crecimiento en las industrias textil y siderúrgica, la minería y los
transportes, todo ello ayudado por el proceso de concentración financiera y empresarial (konzern). Alemania
se convirtió en la mayor potencia industrial de Europa a finales del siglo XIX.
El sistema político alemán concedía amplios poderes al emperador. Existía un Parlamento con dos cámaras:
Reichstag y Bundesrat. Y convivían cuatro grandes grupos políticos:
 Los liberales,
 Los conservadores, simpatizantes del modelo autoritario prusiano,
 Los socialdemócratas (SPD), de ideología marxista,
 El Zentrum, grupo político de centro, de tendencia católica.
La figura de Bismarck
Otto von Bismarck fue canciller del Reich desde 1871 hasta su dimisión en 1890. Su preocupación
fundamental era la seguridad del imperio y para ello planeó una estrategia preventiva contra las posibles
disidencias en el interior y en el exterior de Alemania. Su política se centro en diversos aspectos:
 En materia religiosa, emprendió una política de separación entre la Iglesia y el Estado, la denominó
“lucha por la cultura” y abogó por la enseñanza pública laica y el control estatal del clero.
 En economía, fomentó el proteccionismo, frente a la competencia británica y la libre importación de
cereal, lo que impulsó la industria nacional y la riqueza del país.
 En política, se persiguió al SPD y a los socialistas, pero puso en marcha un programa de leyes sociales
(vejez, enfermedad y accidentes laborales) para favorecer el acercamiento de los obreros al Reich.

A nivel étnico, propuso una política de germanización y prohibición de la libertad de expresión de las
minorías.
La llegada de Guillermo II
En la década de 1880 Bismarck tuvo dificultades al no apoyar la política colonial que defendían comerciantes
y banqueros. En 1888 murió el káiser Guillermo I y le sucedió su hijo Guillermo II desde 1890 hasta 1914. El
nuevo emperador tenía diferentes ideas a Bismarck en cuanto a política social, los socialdemócratas y la
política exterior. Por ello Bismarck presentó la dimisión en marzo de 1890.
En política exterior, Guillermo II mostraba un gran interés por la expansión imperialista, el desarrollo de la
marina y el ejército. En política interior, el emperador asumió más poder que su padre, y lo ejerció de manera
autoritaria. En cuanto al SPD se le dejó de perseguir, lo que favoreció su crecimiento, alcanzando su techo
político en 1912, pero sin formar parte del gobierno.
El belicismo alemán despertó el recelo de los demás países europeos, especialmente de Francia y del Reino
Unido, que temían que el expansionismo alemán pudiera perjudicar sus respectivos imperios coloniales.
1.4. EL IMPERIO AUSTROHÚNGARO
El imperio austrohúngaro reunía los territorios que agruparon desde el siglo XVI la dinastía de los Habsburgo,
los archiduques de austriacos y los emperadores del Sacro Imperio. Un inmenso imperio de gran diversidad
étnica, cultural y religiosa. El imperio tenía dos grandes centros: Austria, de cultura alemana, y Hungría, de
cultura magiar. En la primera mitad del siglo XIX los emperadores intentaron la unificación de la Gran
Alemania. Pero la derrota ante Prusia en 1866 terminó con el intento austriaco.
El imperio estuvo gobernado por Francisco José I (1848-1916). En la primera mitad de su reinado aplicó una
política centralista y absolutista, lo que provocó un enfrentamiento entre austríacos y húngaros. Hubo un
peligro de división del imperio, que se solucionó con el Compromiso de 1867, que dividió el imperio e dos
reinos: Austria y Hungría, bajo un solo soberano. La llamada “monarquía dual” compartía la figura del
emperador y los ministros de guerra, relaciones exteriores y finanzas. Pero Austria y Hungría tenían leyes,
gobierno y Parlamento propios.
Este compromiso solventó las demandas de Hungría, pero no las de otras nacionalidades (croatas, eslovenos,
serbios). Los problemas que surgieron en relación a los nacionalismos de la zona de los Balcanes dieron
origen a la llamada “Cuestión de Oriente”.
1.5. EL IMPERIO RUSO
Rusia fue el imperio que menos cambios experimentó durante el siglo XIX. El imperio de los zares se parecía
bastante a una monarquía absoluta. El imperio ruso se caracterizaba por una gran extensión territorial. Se
había expandido hacia:
 Extremo Oriente, llegando al Pacífico,
 El Sur, con Irán y el mar Caspio,
 El Oeste, con Besarabia, Polonia y Finlandia.
Otro rasgo definitorio era la gran variedad étnica y religiosa, predominando los eslavos. Ante esta gran
diversidad hubo una tendencia unificadora, sobre todo buscando una rusificación, y otra tendencia separatista,
de algunos pueblos sometidos (es el caso de Polonia).
La política de los zares fue la de mantener un régimen autocrático1.
Vamos a destacar el reinado de tres de ellos:
Alejandro II (1855-1881):
1
Autocracia es un concepto político. El término procede del griego autos (uno mismo) y kratos (gobierno o poder).
Designa al sistema de gobierno cuya autoridad recae sobre una sola persona sin ningún límite: el autócrata (el que
gobierna por sí mismo).





Condicionado por la derrota en la Guerra de Crimea (1853-1856) de su padre Nicolás I.
Abolió la servidumbre en Rusia, pero no mejoró la situación del campesinado.
Inició la industrialización, comenzó a construir la red de ferrocarril.
Mejoró la administración territorial.
Intensificó la represión de los opositores.
Alejandro III (1881-1894):
 Potenció el desarrollo económico del país, impulsó el desarrollo industrial (textil, metalurgia,
ferrocarril).
 Construyó el Transiberiano (1891-1905).
 Impuso un control mayor de la cultura e hizo más hincapié en la rusificación del imperio.
 Continuó con la represión de la oposición.
Nicolás II (1894-1917):
 Continuó con la labor de represión y de rusificación llevada a cabo por su antecesor.
 Impulsó la expansión hacia Oriente lo que le llevó al conflicto con Japón (1904-1905). Su derrota
provocó la revolución de 1905.
1.6. EL IMPERIO TURCO
El imperio turco se había formado en la Edad Media. En el siglo XIX era un estado complejo, muy extenso,
con gran variedad étnica y muy inestable políticamente. Se trataba de un Estado teocrático, con un peso
importante del islam en las leyes y en la vida de la sociedad, con una figura dominante, con títulos de sultán
(autoridad política) y califa (autoridad religiosa), que está auxiliado por un Consejo de hombres santos.
Económicamente, se encontraba en un estado ruinoso debido a la imperante corrupción y a la dificultad de
mantener el coste del ejército.
Se produjo un golpe de estado en 1876 por un grupo de reformadores, los Jóvenes Turcos, para instalar un
gobierno de tipo liberal. Pero tras el intento fallido, el nuevo sultán acabó con cualquier iniciativa de este tipo.
Durante el siglo XIX se mantuvo una constante pérdida territorial del imperio en Europa, África y la península
de Arabia.
Un nuevo golpe de estado se produjo en 1908, otra vez de la mano de los Jóvenes Turcos, que obligó al sultán
a convocar elecciones e iniciar un proceso de reformas aperturistas. El nuevo sultán se acercó políticamente a
Alemania porque desconfiaba del resto de potencias europeas. Este hecho fue clave para el fin de este imperio,
ya que el bando alemán sería el perdedor en la Primera Guerra Mundial.
2. LAS GRANDES POTENCIAS EXTRAEUROPEAS
2.1. LOS ESTADOS UNIDOS
La nueva nación norteamericana inició un proceso de expansión territorial durante el siglo XIX, debido a una
serie de procesos:
 La llegada masiva de inmigrantes, procedentes sobre todo de Europa.
 Un creciente desarrollo económico posibilitado por la existencia de enormes recursos naturales y el
espíritu emprendedor de sus habitantes.
 La consolidación del sistema democrático en todo el país.
El principal problema del país fue el intento secesionista de los estados del Sur. La abolición de la esclavitud
en 1860, por el presidente Abraham Lincoln provocó un movimiento de protesta en los estados del Sur, que
declararon su independencia. Lo que condujo a una inevitable guerra.
La Guerra de Secesión (1861-1865) concluyó con el triunfo de los partidarios de la Unión (yanquis). La
esclavitud quedó definitivamente abolida, aunque la igualdad de derechos civiles se alcanzó más tarde.2
A finales del siglo XIX Estados Unidos era una gran potencia. La guerra contra España en 1898 pone al
descubierto su potencial, y se mantuvo al margen de la marcha política europea hasta la Primera Guerra
Mundial, donde se solicitó su intervención.
2.2. JAPÓN
El imperio japonés, conocido como el imperio del Sol naciente, mantenía a principios del siglo XIX un
modelo de monarquía feudal, con un emperador en la cúspide como figura simbólica. El poder ejecutivo lo
ejercía un mayordomo imperial (shogun), que estaba en manos de la familia Tokugawa desde el siglo XVII.
Esta dinastía impuso una dictadura política y el aislamiento del país.
En 1858, la presión extranjera forzó a la apertura de sus puertos al comercio exterior. En 1868 se restableció la
autoridad imperial en la figura del emperador Mutshu Hito (1867-1912), que trasladó la corte a Tokio e inició
un proceso reformador llamado “Revolución Meiji”.
Dicha revolución inició un proceso de acercamiento al mundo occidental: igualdad ante la ley, fin de la
servidumbre, desarrollo industrial. Fue el comienzo de un período expansionista, por la necesidad de nuevas
materias primas, mercados y áreas de inversión. Este proceso de desarrollo se dio a conocer al mundo en la
guerra ruso-japonesa de 1904, y mostró la fortaleza de esta nueva potencia.
3. LAS RELACIONES INTERNACIONALES A FINALES DEL SIGLO XIX
Desde la guerra franco-prusiana de 1870 hasta el estallido de la Primera Guerra Mundial (1914) se desarrolló
un pulso entre las grandes potencias por la hegemonía en Europa.
3.1. LA EUROPA DE BISMARCK (1870-1890)
La llamada “era bismarckiana” fue la etapa en la que el canciller Otto von Bismarck impuso los intereses de
la política alemana al resto de los países del continente. Los objetivos de la política del canciller Bismarck
fueron tres:
 Mantener a Francia en un estado de aislamiento diplomático, ya que era el mayor enemigo de Francia.
 Mediar entre Rusia y Austria-Hungría, que tenían un enfrentamiento por territorios próximos a los
Balcanes y el Mar Negro.
 Desarrollar una política de rearme bélico, como elemento disuasorio.
Su política se basó en el realismo político, “Realpolitik”.
3.2. LOS SISTEMAS BISMARCKIANOS
La política exterior de Alemania se plasmó en tres sistemas o fases de un sistema de alianzas, diseñadas por la
diplomacia alemana, entre 1872 y 1893. El objetivo principal era mantener la paz y de paso aislar a Francia
Primer Sistema Bisamarckiano (1871-1879)
Un gran punto de fricción en Europa era la rivalidad entre Austria y Prusia en los Balcanes. La diplomacia
bismarckiana consiguió la firma de dos acuerdos en 1873: uno germano-ruso y otro austro-ruso, con lo que
apaciguar los ánimos. Además Alemania, Austria-Hungría y el imperio ruso formaron la Entente de los Tres
Emperadores.
Sin embargo, revueltas nacionalistas en los Balcanes obligaron a la firma del Tratado de San Estefano (1878),
que creaba el estado de la Gran Bulgaria (bajo influencia rusa) y rompía el equilibrio de la zona. Bismarck se
En agosto de 1963 Martin Luther King pronunciaría su famoso discurso "I have a dream" (‘yo tengo un sueño’), gracias
al cual se extendería por todo el país la conciencia pública sobre el movimiento de los derechos civiles y se consolidaría
como uno de los más grandes oradores de la historia estadounidense.
2
vio obligado a convocar el Congreso de Berlín (1878), donde apoyó claramente a Austria en contra de Rusia,
disolviendo la Gran Bulgaria. Así se rompió la Entente imperial.
Segundo Sistema Bismarckiano (1879-1885)
En 1879 se firmó un acuerdo secreto entre Alemania y Austria-Hungría. En 1881 se renovó la Entente de los
Tres Emperadores. Y en 1882 se creó la Triple Alianza entre Alemania, Austria-Hungría e Italia.
El segundo sistema bismarckiano se basaba en el respeto a los acuerdos del Congreso de Berlín sobre los
Balcanes, e inauguró un período de paz en Europa. Durante este tiempo, las potencias europeas llevaron a
cabo un rearme intenso, lo que vino a denominarse como “paz armada”, y que se mantuvo desde 1879 hasta
1914.
Tercer Sistema Bismarckiano (1885-1893)
Se consideraba una continuación del segundo sistema, aunque con algunos cambios.
Se mantuvo la Triple Alianza (Alemania, Austria-Hungría e Italia). Además se firmaron los “acuerdos
mediterráneos”, entre Italia, Reino Unido, Austria-Hungría y Alemania, para frenar a Francia en el norte de
África. Sin embargo, no se renovó la Entente de los Tres Emperadores. Por lo que Bismarck intentó mantener
buenas relaciones con el zar, y consiguió firmar el Tratado de Reaseguro con Rusia (1887).
Este sistema de alianzas ideado por Bismarck comenzó a desmoronarse por varios motivos:
 Francia consiguió firmar varios tratados con Rusia, entre 1891 y 1893, y rompió su situación de
aislamiento.
 Se creó una situación de desconfianza entre Alemania y Austria-Hungría, por el Tratado de Reaseguro
firmado con Rusia.
3.3. EL FIN DE LA POLÍTICA DE BISMARCK
La llegada al trono imperial alemán de Guillermo II, a la muerte de su padre Guillermo I en 1888, supuso un
cambio considerable en la política exterior. Bismarck había diseñado una política exterior basada en las
alianzas continentales europeas, pero Guillermo II se inclinó rápidamente por la formación de un imperio
colonial alemán. Fue el inicio de la llamada “Weltpolitik”. Esto supuso en definitiva la dimisión de Bismarck
en 1890 y su abandono de las tareas de gobierno por desavenencias con el emperador.
Como consecuencia de esta nueva política, Alemania no renovó el Tratado de Reaseguro con Rusia. Francia,
por su parte, firmó varios acuerdos secretos con Rusia. Reino Unido empezó a preocuparse por los intereses
expansionistas alemanes en África, y por el crecimiento de su potente marina de guerra.
Francia y Reino Unido unen sus intereses y firman en 1904 la Entente Cordiale, recelosos del creciente
poderío alemán. A este acuerdo se sumará Rusia en 1907, constituyéndose la Triple Entente. De este modo,
habían surgido dos bloques contrapuestos en Europa:
 De un lado, la Triple Alianza: Alemania, Austria-Hungría e Italia,
 Y del otro, la Triple Entente: Francia, Reino Unido y Rusia.