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CONSTRUYENDO PUENTES ENTRE CIENCIA Y SOCIEDAD
Investigación universitaria sobre Salud Reproductiva (UBA)
María Silvia Villaverde
TALLERES DE ANALISIS DE PERTINENCIA SOCIAL EN LA UBA
En el ámbito de la Secretaría de Ciencia y Técnica de la Universidad de Buenos Aires
(UBA) se realizaron durante el año 2002 una serie de encuentros - los Talleres de
análisis de pertinencia social - en el marco del Programa de Evaluación Externa de
Actividades Científicas y Tecnológicas1, para “abrir las puertas de sus claustros a las
demandas de la sociedad”.2 Uno de estos talleres se dedicó precisamente al
conocimiento producido por los investigadores de la UBA sobre Salud Reproductiva,
por considerarla un área problema de alta relevancia social. Los otros cuatro talleres
versaron sobre: Inundaciones, Hábitat y vivienda para sectores de bajos ingresos,
Seguridad ciudadana y Vinculaciones entre situación de pobreza y educación
Entre los más importantes objetivos explicitados se destacan:
a) la generación de nuevas ideas para definir políticas específicas de investigación,
destinadas a afianzar la responsabilidad social de la Universidad con su entorno;
b) el fortalecimiento del intercambio entre investigadores provenientes de distintos
campos del conocimiento, para incrementar el trabajo interdisciplinar;
c) la movilización de las reservas intelectuales y morales de los investigadores de la
Universidad de Buenos Aires, mediante el reconocimiento de las demandas expresadas
Programa de Evaluación de Actividades Científicas y Tecnológicas – UBA: Equipo técnico del Taller
Coordinador del Programa: Leonardo Vaccarezza - Responsable del componente de Pertinencia Social:
María Elina Estébanez
1
2 Informe Final de la Secretaría de Ciencia y Técnica de la UBA a cargo de Jorge Medina, titulado:
“Análisis de pertinencia social de las investigaciones de la UBA en el área-problema: Salud
Reproductiva”, Buenos Aires, abril de 2003. Otros documentos a consultar en www.rec.uba.ar:
Documento1: Desgravaciones del Taller
Documento 2: Informe de Silvia Franco
Documento 3: Informe de Gabriela Perrotta
Documento 4: Informe de Paula Bodnar
Documento 5: Informe de Jorge Pailles
Documento 6: Encuesta a participantes del Taller
por los representantes de una multiplicidad de necesidades sociales, que afectan a la
sociedad.
El enfoque consistió en “ el análisis de la correspondencia entre los objetivos y logros
de los proyectos de investigación y las urgencias del presente, examinadas a la luz de un
diálogo abierto entre los investigadores y los propios usuarios y destinatarios de los
conocimientos producidos”, explicitándose como fundamento “una concepción del
conocimiento científico como un proceso social, producto de las vinculaciones
interactivas entre unidades productoras de conocimiento, usuarios y actores
intermediarios”.
De este modo, el Programa de Evaluación de Actividades Científicas y Tecnológicas
incluyó como parte de sus objetivos el análisis de la pertinencia social de las
investigaciones realizadas, lo que constituyó una innovación en la gestión de las
programaciones científicas de la UBA.
Se señalo que conforme al criterio de pertinencia social se evaluarían los siguientes
aspectos de actividad científica de los cinco grupos:

la utilidad potencial de la línea de investigación seguida por el grupo

el desarrollo de bienes o servicios aplicables

las vinculaciones efectivas logradas por el grupo con agentes sociales externos al
ámbito científico-académico

los respectivos procesos de transferencia
Así aplicando el innovador enfoque basado en la recolección de opiniones de diversos
sectores de la sociedad sobre el conocimiento producido por la Universidad en las cinco
áreas-problema de alta relevancia social, se realizaron los cinco ejercicios con
participación de investigadores, y agentes sociales vinculados a demandas sociales
específicas seleccionados bajo el criterio principal de ser un potencial usuario de los
resultados de investigación que producen los grupos de la UBA.
PARTICIPANTES:
En el taller de salud reproductiva participaron 34 personas. Los investigadores: 12
integrantes de 7 grupos de investigación de tres facultades de la UBA. El Comité
Mixto: 22 representantes de entidades externas al ámbito académico.
Investigadores:
Grupo 1: Directora: Ana María Blanco – Área: Salud Humana / Fertilidad Laboratorio de fertilidad masculina de la Facultad de Farmacia y Bioquímica - Líneas
de investigación: fertilidad masculina; movilidad espermática
Grupo 2: Directora: Susana Checa - Área: Sociología de la salud/ Salud de la mujer/
salud reproductiva - Carrera de Sociología de la Facultad de Ciencias Sociales - Líneas
de investigación: atención y prevención de la problemática de salud reproductiva de la
mujer, con tres líneas: control prenatal; adolescencia, cuerpo y sexualidad y abortos
institucionalizados
Grupo 3: Director: Ramón de Torres – Área: Salud comunitaria/ medicina preventiva Departamento de Microbiología, Inmunología y Biotecnología de la
Facultad de
Farmacia y Bioquímica. - Líneas de investigación: infecciones del tracto genital
femenino
Grupo 4: Directora: Gloria Gutiérrez Griemberg - Área: Salud Humana/ inmunología Dependencia institucional: Laboratorio de Inmunología Clínica; Hospital de Clínicas Líneas de investigación: enfermedades de transmisión sexual- metodologías
diagnósticas de sífilis y otras infecciones de transmisión sexual (ITS).
Grupo 5: Directora: Ana Lía Kornblit - Área: Sociología/ sociología de la salud Carrera de Sociología de la Facultad de Ciencias sociales - Líneas de investigación:
conocimientos actitudes y valores sobre sexualidad en jóvenes y adultos,
representaciones sociales de sexualidad en jóvenes varones en especial sobre
paternidad, identidad y derechos de gays y lesbianas y prevención del VIH/SIDA
Grupo 6: Directora: Elsa López - Área: Sociología/ Salud, población y sociedad Instituto de investigaciones Gino Germani de la Facultad de Ciencias Sociales - Líneas
de investigación: formación de la familia y reproducción; salud reproductiva y
prevención.
Grupo 7: Directora: María Teresa Sirvent - Área: Educación/ Sociología de la
educación - Dependencia institucional: Instituto de Investigaciones en Ciencias de la
Educación de la Facultad de Filosofía y Letras - Líneas de investigación: poder,
participación y educación; salud y educación sexual.
Se dejó constancia de que si bien su selección no contempló la totalidad de grupos
dedicados a cuestiones vinculadas directa o indirectamente con la problemática de la
salud reproductiva (y sus diversas dimensiones) en la Universidad, se consideró como
una muestra representativa de las múltiples perspectivas disciplinarias en que se
produce conocimiento, entre ellas: sociología de la educación, sociología de la salud,
educación, medicina preventiva, inmunología y fertilidad.
Se aclaró que la cobertura del conjunto de grupos que trabajan en aspectos bio-médicos
era baja, en especial los que investigan el funcionamiento del sistema reproductor y la
fertilidad. No se incluyeron en la convocatoria a los grupos dedicados al SIDA, por
considerar que constituyen un área-problema específica. Hubo una cobertura amplia de
los grupos que trabajan la problemática desde las ciencias sociales.
Comité Mixto
Los representantes de entidades externas al ámbito académico conformaron el Comité
Mixto3, responsable del análisis de pertinencia social en el área problema Salud
Reproductiva:
1 representantes de 1 organismo gubernamental nacional
5 representantes de 3 programas gubernamentales de la ciudad
3 representantes de servicios de 2 hospitales públicos
Comité Mixto integrado por: Sociedad de Ginecología y Obstetricia de Buenos Aires - Diana Galimberti
Sociedad Argentina de Ginecología infanto-juvenil - Analía Tablado
Laboratorio Hoering - Emilio Schlumpp Toledo
Asociación Argentina por la Salud Sexual y Reproductiva - Jorge Palles
Unidad de Coordinación y Control de Programas Materno-infantil y Nutricionales; Ministerio de Salud de
la Nación - Celia Lomuto
Programa de Salud reproductiva y Procreación responsable - Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires Gabriela Perrotta
Programa Mujer - Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires - Cristina Vacino y Julia Martino
Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires - Diana Maffia y Paula Bodnar
Foro por los Derechos Reproductivos - Marta Rosenberg
Mujeres al Oeste - Zulema Palma
Fundación de Estudios e Investigación de la Mujer - Maria Ines Re
Hospital Rivadavia Servicio de Ginecología - Eugenia Trumper
Ana Tropp Hospital Argerich - Servicio de Adolescencia Sandra Vazquez
Consultora independiente - Silvia Franco
Laboratorio GADOR - Valentina Carricarte, Elsa Schvartzman y Gabriela Mendeluk
Asociación de abogados de Buenos Aires - Nelly Minyesrsky
Instituto de Estudios Sociales y Políticos de la Mujer - Maria José Libertino
3
5 representantes de 2 ONGs (a su vez, representantes de otros grupos también tenían
una participación en alguna de estas ONGs)
3 representantes de 3 entidades profesionales
4 representantes de 2 empresas
1 representante de 1 organismo internacional
En este punto y antes de desplegar las opiniones y recomendaciones acerca de la
situación de la investigación en la UBA sobre salud reproductiva, su utilidad e impactos
en el campo social, potenciales o efectivos, he de referirme a algunas cuestiones
metodológicas para poder apreciar en sus justos términos el significado de esta
evaluación o “análisis” de las investigaciones ex post conforme a criterios de
pertinencia, llevada a cabo por no-pares.
En el proceso de evaluación del conocimiento producido por investigadores se juega
precisamente la asignación de valor a ese conocimiento. Las finalidades explicitas de
estos procesos se relacionan con la asignación de calidad y con la toma de decisiones de
diverso tipo, ya sea asignación de recursos, gestión de grupos y proyectos, publicación
de artículos u orientación de la investigación. Las finalidades implícitas se vinculan con
la consolidación de la comunidad científica y la vigencia de su sistema de valores, roles
y reconocimientos internos.
El auge de la cultura de la evaluación es creciente en las sociedades actuales, en la
medida en que el conocimiento científico sea percibido como un valor estratégico. Esto
se debe a la búsqueda de eficiencia y a la necesidad de justificar el destino de recursos
públicos. Esta tendencia enfatiza tambien la evaluación de resultados mediante
procedimientos con participación de actores no científicos. Adviertase que desde la
perspectiva de la comunidad científica, esto se percibiría como una pérdida de control
no aceptable, a pesar de que se suele argumentar un incremento del riesgo de producir
conocimiento mediocre; es decir, que con fundamento en el interés económico o social
del proyecto de investigación, el método de evaluación induciría a su aprobación a pesar
de su escaso o insignificante merito científico.
También debe destacarse que los métodos de evaluación difieren con relación al
momento del proceso de producción de conocimiento sobre el que se aplican. Si bien el
caso mas generalizado es el de la evaluación ex ante que se lleva a cabo con carácter
previo a la decisión sobre la eventual aprobación de la actividad y su financiamiento,
tambien se
realiza evaluación intermedia (vinculada a las etapas prevista de los
proyectos y a los resultados parciales) y evaluación ex post. La evaluación ex post se
ocupa de los resultados, de la aplicación de los recursos y del impacto. En el caso nos
hallamos ante una evaluación ex post.
Resulta relevante tener en cuenta que las finalidades de las evaluaciones ex post se
relacionan con la legitimación de los trabajos de investigación ante terceros, que pueden
ser científicos o políticos-
y con la reorientación de las políticas y las prácticas
institucionales. Otras finalidades constituyen complementos de la evaluación ex ante,
pues se refieren al establecimiento de mecanismos de control y a la comparación con
niveles de conocimiento anteriores a la investigación.
La distinción entre la evaluación de resultados y la evaluación de impactos es
fundamental en la evaluación ex post. Pues, en la evaluación de resultados el criterio de
uso más corriente es el de cumplimiento de objetivos y metas; consiste en comparar los
resultados con los objetivos y metas propuestas originalmente. Además del
cumplimiento, se suele aplicar el criterio de la calidad de los resultados (similar al de la
evaluaciones ex ante). A ello ha de añadirse el criterio de eficiencia en el desarrollo de
las tareas de investigación.
La evaluación de los impactos no debe ser confundida con la evaluación de resultados,
porque los impactos trascienden al proyecto o al programa, remitiendo a contextos
externos a los mismos, por ejemplo, organización en la que se realiza, medio social
próximo o remoto, niveles de actividad económica, niveles educativos, cultura e índices
de salud, entre otros. La evaluación de impactos está menos normalizada debido
precisamente a las múltiples dimensiones en las que se producen, así como a la
circunstancia de que suelen ser imprevisibles y no siempre es posible determinar las
causalidades. Por ello, en la evaluación de impacto es precisa mayor meticulosidad en
el análisis.
Con respecto a los métodos de evaluación, los modelos organizativos tradicionales se
integran exclusivamente por miembros reconocidos de la comunidad científica: los
pares. Los nuevos modelos difieren fundamentalmente en que la constitución de los
comités es heterogénea por la inclusión de otros actores, lo que lleva al concepto de
complejidad (multiplicidad de perspectivas legítimas, no linealidad, emergencia de
problemas, organización, multiplicidad de escalas, incertidumbre)
La inclusión de nuevos actores en los procesos de investigación científica, que
constituye precisamente la innovación introducida en Programa de Evaluación Externa
de Actividades Científicas y Tecnológicas de la UBA en el 2002, significa una autentica
democratización del conocimiento. En la actualidad en muchos casos se hace necesario
incluir a quienes pueden opinar sobre aspectos de su interés (problemas tales como
enfermedades, experimentación en seres humanos4, polución y preservación ambiental,
pero tambien pobreza, discriminación, opresión y explotación). Asimismo, parte del
conocimiento se presenta en nuevos contextos (comunidades indígenas o métodos
terapéuticos tradicionales, por ejemplo) En este sentido se puede afirmar que la ciencia
esta “renovando su localización social en un contexto enriquecido”.
Sobre estos aspectos, en los Talleres de Análisis de Pertinencia se observó que los
procedimientos de la gestión científica de la Universidad inciden en la pertinencia social
de las investigaciones. Temas -como la forma de selección de grupos para participar de
las experiencias de evaluación, el modo de asignar fondos para la investigación y
establecer prioridades, el establecimiento de una política científica para la Universidadfueron presentados como “situaciones críticas donde se pone en juego la incidencia
social de la producción de conocimiento universitario”. Por ejemplo, se propuso hacer
participar a los propios investigadores de la UBA en la identificación de “áreas
problema” de potencial vinculación con sus investigaciones. Asimismo, el acceso a la
participación de actores sociales no científicos (los no-pares) en algunas actividades,
como la selección de áreas prioritarias para el otorgamiento de subsidios o la selección
de proyectos de investigación, serían medidas concretas de construcción de utilidad
social.
Villaverde, María Silvia, “Seguimiento de un problema del campo bonaerense pendiente de solución.
Cuando el Estado no cumple sus compromisos: Peripecias de la vacunación contra el “mal de los
rastrojos” desde la cepa “XJ Clon3” hasta el amparo colectivo de la “Candid 1”, en Revista LexisNexis
Buenos Aires, N° 1/enero 2006, págs.7/8
4
Actualmente, la tendencia es hacia el diseño de procesos de evaluación que combinen
diversos métodos:

evaluación por pares científicos, basada en criterios de excelencia, importancia o
calidad.

evaluación por distintos actores o no-pares, basada en criterios de oportunidad,
permeabilidad,
vulnerabilidad,
explotabilidad
o
aplicabilidad
de
los
conocimientos.
Nótese que la multiplicidad de criterios conlleva necesariamente la multiplicidad de
actores ya que, así como los no científicos no están capacitados para opinar acerca de la
calidad científica de una propuesta, los pares científicos no son de por si adecuados para
opinar sobre la utilidad de ella. El problema del método mixto es que precisa la
elaboración de una definición acerca del papel de los actores y del peso relativo de los
criterios de evaluación. Por otra parte la inclusión de no-pares genera desconfianza en la
comunidad científica; por eso, los actores no científicos –hoy necesarios para evaluar
otras dimensiones, entre ellas la pertinencia- son vistos por algunos sectores de la
comunidad científica como el caballo de Troya de la República de la Ciencia (Polanyi
1962) 5, debido a que implica perdida de control. Sin perjuicio de que el argumento
manifiesto es, como ya lo he expresado anteriormente, el temor a la mediocridad,
descalificando a la pertinencia como criterio complementario de la calidad.
Obsérvense las distintas concepciones sobre el tema:
En la República de la Ciencia, “en tanto que cada científico siga haciendo la mejor
aportación de la que es capaz y que nadie pueda mejorar (...) podemos afirmar que
el avance de la ciencia por iniciativas independientes auto-coordinadas garantiza la
organización más eficaz posible del progreso científico. Y podemos añadir, una vez
más, que si alguna autoridad emprendiera la tarea de dirigir el trabajo de los
científicos desde el centro, el progreso de la ciencia prácticamente se estancaría “
La idea fuerza de lo que Polanyi denominó la “República de la Ciencia” es la autonomía científica y el
rechazo de intromisiones en la comunidad científica (autorregulación).
5
Ante ello, las nuevas formas de producción de conocimiento6 en las que se propone
un nuevo modo de investigación (que no pretende reemplazar la investigación más
tradicional, sino que complementarla), se caracterizan por:

operar en un contexto de aplicación

estructurada transdisciplinariamente

presenta heterogeneidad y diversidad orgánica

presenta sensibilidad y responsabilidad social
Sobre el problema de la evaluación de los modelos transdisciplinares, Albornoz7
considera que deben ser resueltos de un modo diferente; pues si bien los consensos
sobre los conceptos de la investigación disciplinaria están firmes, y en la evaluación de
la investigación transversal no debería haber mucha diferencia con la disciplinaria, no
puede obviarse que en este tipo de actividad se detecta una mayor presencia de
conflicto. Por lo tanto, hasta que se consoliden los nuevos consensos en torno a ella, la
investigación transversal carece de un modelo estable de evaluación. Por esta razón,
“los procesos de evaluación que instrumentan las instituciones experimentan problemas
de legitimidad”.
De todos modos, a la hora de tomar decisiones no puede perderse de vista que la
ventaja de las evaluaciones por pares radica en que los fines, los métodos y los criterios
de evaluación deben estar apoyados en un alto grado de consenso entre los evaluados,
los evaluadores y quienes demandan la evaluación. Por eso, tradicionalmente el
consenso se fundaba en la validez del método de evaluación por pares, que es el que
expresa el punto de vista de la comunidad científica. La evaluación por pares permitía
construir consenso entre los investigadores con respecto a que se debe investigar, como
debe ser hecha la investigación, en que marco institucional y de recursos y quienes son
los que están en condiciones de hacerlo. Esta práctica de revisión por pares es una forma
de autorregulación de la comunidad científica. Es relevante considerar que si bien la
autorregulación tiene profundas raíces en las estructuras profesionales, en este caso se
produce la peculiaridad de que sus consecuencias (con referencia a la aprobación o
desaprobación de proyectos) comprometen a los gobiernos u otras instituciones en
6
Gibbons, Michael, The New Production of Knowledge, London, Thousand Oaks, 1994.
Albornoz, Mario, “Evaluación en Ciencia y Tecnología”, en Perspectivas Metodológicas, Año 3, N° 3,
Noviembre 2003, UNLa, Departamento de Humanidades y Artes, Maestría en Metodología de la
Investigación Científica, pág. 20
7
decisiones de financiamiento. A pesar del creciente cuestionamiento del método, no ha
sido invalidado y las empresas e instituciones que financian y apoyan la I+D 8 respetan
el juicio de pares; sin perjuicio de que varios aspectos de su aplicación practica merecen
revisión.
Así es que el sistema de pares se revisa y discute en forma creciente, en especial porque
corresponde al modelo de la investigación académica disciplinaria. Se entiende que el
consenso disciplinario no es el único factor de estructuración de la actividad científica,
ni el único marco de relaciones sociales en que se construye el conocimiento: así desde
una visión vinculada al conocimiento tecnológico se cuestiona la pertinencia del juicio
de pares en la evaluación de los proyectos orientados al desarrollo tecnológico y la
innovación. También desde una visión no lineal y más interactiva de la ciencia se
reclaman otros procedimientos de evaluación.
En el Taller de Salud Reproductiva se señaló que la evaluación regular de proyectos de
investigación debería ser realizada por comités que incorporaran perspectivas
interdisciplinarias o bien, tener una evaluación desde diversas disciplinas. La carencia
de este tipo de abordajes en las investigaciones, podría estar relacionada con las barreras
existentes en la gestión científica de la Universidad, donde están institucionalizados
procedimientos de evaluación disciplinarios, y con la existencia de fuertes tradiciones
disciplinarias en el proceso de producción de conocimiento. Advierte, Albornoz9 que:
“La constitución de un nuevo campo supone procesos de cambio de paradigma,
intereses cognitivos que se contraponen, estrategias de subversión más que de
acatamiento en las líneas y temas predominantes”.
Salvo un caso, en los grupos de investigación de la UBA que integraron los Talleres no
se utilizaron enfoques interdisciplinarios e intersectoriales, ni se evidenciaron canales
sistemáticos de comunicación entre los grupos de investigación de disciplinas distintas.
Se registraron enfoques parciales:

problemáticas específicamente masculinas

problemáticas específicamente femeninas
I+D = Investigación y desarrollo.
Albornoz, Mario, “Evaluación en Ciencia y Tecnología”, en Perspectivas Metodológicas, Año 3, N° 3,
Noviembre 2003, UNLa, Departamento de Humanidades y Artes, Maestría en Metodología de la
Investigación Científica, pág. 20.
8
9

horizontes de investigación referidos a problemáticas médicas

horizontes de investigación que exceden a la salud reproductiva (familia,
educación, salud)
Finalmente y para concluir este excurso aclaratorio sobre la importancia de la
evaluación en ciencia, debe tenerse presente en el desarrollo del tema que ha dado
origen a este artículo, que la evaluación en ciencia y en tecnología es un tema relevante
para la toma de decisiones en el que confluyen distintas lógicas, que deben
necesariamente concertarse minimizando el conflicto que le es inherente: la de los
científicos con su idea de “calidad” o “excelencia” y las de los otros actores que
representan diversos intereses políticos, económicos y sociales (calidad –criterio
científico- versus. pertinencia –criterio político-). El valor creciente de la evaluación
como orientadora de políticas y como instrumento de gestión se halla ligado a la
capacidad social de instalar una “cultura” adecuada a su práctica. Esta cultura es
necesariamente plural, ya que requiere la coexistencia y articulación de lógicas y
sistemas de intereses diferentes. En ello radica, al mismo tiempo, su complejidad y su
riqueza.10 Complejidad y riqueza, que se evidenció en el caso concreto de los Talleres
de análisis de pertinencia social organizados por la UBA en el año 2002 para evaluar
“la correspondencia entre los objetivos y logros de los proyectos de investigación y las
urgencias del presente, examinadas a la luz de un diálogo abierto entre los
investigadores y los propios usuarios y destinatarios de los conocimientos producidos”.
REFLEXIONES TERMINOLOGICAS SOBRE EL AREA-PROBLEMA11
Una de las cuestiones abordadas en los Talleres fue el análisis y debate sobre la
definición del área- problema. Pues si bien se coincidió en la alta significación que
adquiere la salud reproductiva como cuestión social en la Argentina, a la luz de un
conjunto de indicadores, se observó que el tratamiento público de esta cuestión es
Albornoz, Mario, “Evaluación en ciencia y tecnología”, pág.20.
En el artículo titulado “Salud Sexual y Procreación Responsable: La ley 25.673 y las leyes
provinciales” (Rosales-Villaverde), se desarrolla ampliamente el proceso de ampliación de los derechos
humanos, específicamente mediante el reconocimiento de los derechos reproductivos y sexuales como
derechos humanos fundamentales, y las diferencias conceptuales entre derechos sexuales, derechos
reproductivos, salud sexual y salud reproductiva. Observaciones de interés sobre este tema también han
de hallarse en el artículo “La dimensión ética de la salud reproductiva”.(Silvia Rivera)
10
11
selectivo, fragmentado y muy conflictivo. En este sentido se destacó la evolución
histórica de su conceptualización, a lo largo de la cual ha adoptado diversos rumbos
programáticos, adquiriendo un reconocimiento explícito como problemática social por
la Organización Mundial de la Salud (OMS).
De todos modos, se ha señalado que la elección de otros términos, como por ejemplo,
“salud sexual” o “derechos sexuales y reproductivos” permitiría una mayor extensión y
significación social de la convocatoria para un ejercicio de pertinencia social como el
propuesto por la Universidad.
En casos muy puntuales se ha manifestado tanto entre investigadores como entre
representantes de entidades, una menor coincidencia respecto a la definición del áreaproblema, es decir, respecto a la caracterización de las dimensiones relevantes del
problema y respecto a los términos a utilizar para una conceptualización adecuada a las
características del problema y los requerimientos para una intervención sobre el mismo.
Sobre el tema, Ana Lía Kornblit del Instituto Gino Germani de la Facultad de Ciencias
Sociales, advirtió que su participación era “en un principio un poco dudosa”, porque
“yo no trabajo específicamente en temas de salud reproductiva, si no en una categoría
un poco más amplia que es la de salud sexual que incluye a la salud reproductiva, pero
abarca también otros aspectos. Hoy hay muchos investigadores que prefieren hablar de
salud sexual y no de salud reproductiva porque, evidentemente, el campo de trabajo se
limita mucho si se considera sólo el tema de la reproducción”.
Mencionó tambien una derivación de una investigación iniciada en 1993, con un
subsidio de la Organización Mundial de la Salud, denominada Modelos Sexuales en
Jóvenes y Adultos y desarrollado en escuelas medias de la Ciudad de Buenos Aires,
tomando tres poblaciones: alumnos, docentes y padres: en algunas de las escuelas se les
pidió la capacitación de los docentes en los temas de educación sexual. Se accedió
“como una suerte de transferencia del proyecto”, aunque con muchas dificultades
debido a que los docentes “tenían actitudes sumamente tradicionales (tal como había
salido en la encuesta): les costaba mucho asumir ciertos aspectos que tienen que ver con
la educación sexual, a diferencia de los padres ... que querían concretamente que fuera
la escuela la que asumiera estos temas en relación con los chicos y no como plantean
algunos sectores más reaccionarios de la sociedad en cuanto a que es la familia la que
tiene que educar en estos aspectos”.
También Diana Mafia –doctora en filosofía e investigadora, aunque invitada como
Defensora Adjunta del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires, en el área de Derechos
Humanos y Equidad de Género- se refirió a la restricción de la convocatoria que se
derivaría de identificar al área-problema como Salud Reproductiva y distinguió como
uno de los problemas más serios encontrados en la Defensoría, y que encuentra en el
ejercicio cotidiano de promoción de derechos, a la absoluta restricción en el concepto
de salud. Señala que: “Preferiría hablar de derechos sexuales (ni siquiera de salud
sexual, de derecho sexual), y entonces incluir la cuestión de la expresión de la
sexualidad, la cuestión de los medios de comunicación masivos, la cuestión de la
difusión de los derechos, de la apropiación de los derechos, de su ejercicio, de la
construcción de ciudadanía… Todos estos aspectos podrían entrar bajo una descripción
que estuviera considerada desde los derechos humanos y no desde un concepto
restringido de salud“(desde un concepto absolutamente restrictivo y biologicista de
salud).
Agrega Diana Mafia algunas reflexiones en torno a la “modestia de la convocatoria”,
que merecen compartirse porque evidencian lo necesario que es el conocimiento
científico para el funcionario público, que se debe dar respuesta a los problemas
concretos –en los que además se presenta la complejidad no como categoría teórica sino
encarnada en un drama humano (en alguno casos en una tragedia) humano: “A mí me
ha pasado, por ejemplo, trabajando casos de embarazo anencéfalo, tener que recurrir a
ciencias básicas como la genética o la química (por la cuestión del ácido fólico) y tener
que recurrir a esos investigadores que quizás no se habrían enmarcado en derechos
sexuales si se les hubiera preguntado qué era lo que hacían, porque lo que hacían era
ciencias básicas.
También he tenido que pensar en el sufrimiento psicológico de la madre en un embarazo
para determinar el daño para su salud, por ejemplo en un embarazo anencéfalo y
entonces tener que recurrir a investigaciones del psicoanálisis que acá no están
presentes; creo que la salud mental es un ámbito apreciable de la salud; estoy segura de
que en psicología debe haber investigaciones que tengan que ver con esto y que
resultarían pertinentes en esta convocatoria.
Quiero decir que me resulta muy importante (lo puedo valorar ahora que tengo que
ejercer una función) tener disponible la calidad y la cantidad y la variedad de
conocimiento producido en la Universidad de Buenos Aires: creo que es muy valioso
tener el 40% de los investigadores del país, con la calidad humana de investigación y de
compromiso con la investigación que tenemos. Siento que a veces faltan esas vías de
intercomunicación a las que se refería Jorge Pailles, para saber cómo demandar esos
conocimientos y a la vez, pensándolo ahora como investigadora, para saber cuáles son
las urgencias sociales.”
PERTINENCIA DE LAS INVESTIGACIONES
En este ejercicio también se coincidió en la utilidad social del conjunto de las
investigaciones en salud reproductiva de la Universidad presentadas, pues todos los
equipos de investigación alcanzaron resultados de alta pertinencia para la atención de
diferentes aspectos de la problemática
En la mayoría de los grupos se reconocieron posibilidades concretas para constituirse en
grupo de referencia para la atención de demandas sociales, ya sea en tanto se produce en
ellos una “amplia orientación hacia el mejoramiento de la calidad de atención de los
servicios de salud”, como propósitos explícitos de las actividades del grupo, ya sea en
tanto los resultados alcanzados (e informados en el Taller) podrían ser incorporados sin
más como insumos de intervenciones sociales en educación o en salud pública. Así, la
mayor parte de los temas de investigación eran relevantes, en términos de generación de
capacidades para la formación de recursos humanos en los servicios de salud de
hospitales y para el mejoramiento de la calidad de atención en dichos servicios.
Las principales dificultades no se identificaron tanto en los contenidos del
conocimiento, sino en el formato disponible del conocimiento producido. Este aspecto
es fundamental en la constitución de la capacidad de atención de una demanda. Se
advierte que entre pares científicos la socialización del conocimiento no halla
obstáculos, aunque se reconocen algunos problemas de “formato” del conocimiento:
“...Si bien el interés de los funcionarios es siempre apropiarse de las investigaciones
locales, no siempre se dispone de esa información en forma clara y concreta,
comparable con otras informaciones, que permita tener en cuenta si la intervención
preventiva es eficaz y económica para poder ser aplicada a la población.”
Los principales problemas se detectan en la capacidad de los grupos de producir un
conocimiento accesible a otras audiencias, la de los “beneficiarios finales”. Por lo tanto,
si el objetivo es que las investigaciones lleguen a públicos más amplios existe la
necesidad de “transcribir...los resultados (de investigación) en un formato tal que pueda
ser apropiado por la comunidad, de alcanzar un lenguaje apropiado, para los cual se
necesitan buenos traductores”.
En referencia a los beneficiarios finales del conocimiento producido, esta utilidad podría
ser ampliada si se incorporaran otras poblaciones de estudio en el trabajo de campo de
las investigaciones “...pese a encontrar que en algunas investigaciones se ha trabajado
en escuelas y hospitales, en nuestra sociedad hay chicos que no están escolarizados y
hay grupos sociales que ni siquiera llegan a los hospitales...”
Se identificó un conjunto de campos de aplicación potencial para cualquier tipo de
conocimiento referido al campo de la salud:

el mejoramiento de calidad de los servicios (aspectos vinculados a
intervenciones clínicas o bien en intervenciones relativas a programas de
promoción de la salud y reorientación de los servicios de educación de la salud),

el desarrollo de planes y programas preventivos (diagnóstico de “la situación a
resolver”)

la construcción de políticas públicas y el fortalecimiento de la comunidad y el
autocuidado (producción científica de las ciencias sociales).
El
potencial para profundizar la utilidad del conocimiento como insumo de los
funcionarios gubernamentales, a cargo de las políticas públicas en el área, se basa en la
inexistencia de cuadros propios para realizar investigaciones pertinentes, en dichos
sectores.
Por otra parte, la necesidad de conjugar la tendencia intuitiva y práctica del
conocimiento desarrollado y aplicado por los profesionales de la salud con el
conocimiento producido por los científicos, incrementa la pertinencia social.
En cuanto a los procesos de difusión, transferencia y vinculación de conocimientos,
los grupos se han vinculado, entre otras, con las siguientes entidades no académicas:
Organizaciones gubernamentales: Dirección de capacitación del Sector de Salud del
Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires
Organismos públicos - Sistema de salud: Hospitales: Clínicas - Rivadavia (secciones
Adolescencia - Servicio de Ginecología) – Posadas Italiano - Maternidad Sardá –
Pirovano- Argerich - Velez Sársfield
Programa Nacional de Salud Reproductiva y Procreación Responsable
Organizaciones internacionales: Fondo de Naciones Unidas para la Población
Organizaciones no gubernamentales: ONGs vinculadas a VIH/SIDA - Diversas ONGs
vinculadas a derechos de mujeres, entre ellas, Foro por los derechos reproductivos,
FEIM.
En relación con el problema de la difusión, los grupos informan ampliamente sobre sus
relaciones con la comunidad científica. Pero la vinculación entre los grupos de
investigación y los profesionales de la salud es menor, aunque se organizaron en
hospitales muchas actividades de capacitación y formación de recursos humanos.
Menos intensa es la interacción con asociaciones profesionales médicas, la comunidad
de beneficiarios, los medios de comunicación masivos u ONGs vinculadas al áreaproblema.
Sólo se informaron contactos puntuales con legisladores y se puntualizó la falta de
organismos de contralor de efectores del sistema público como contrapartes de vínculos
de los grupos de investigación. Si bien se hizo referencia a actividades de consultoría en
programas de prevención y otras instancias de decisión gubernamentales, las mismas
carecían de continuidad: las vinculaciones con el sector gubernamental (organismos
gubernamentales y ejecutores de programas) no son sistemáticas. Este déficit no se
evaluó como de responsabilidad exclusiva de los grupos, porque se evidenció de parte
de ellos un interés explícito en concretar la articulación, aunque señalándose la
existencia de barreras (culturales o ideológicas) desde sectores gubernamentales para
incorporar ciertas temáticas en las agendas de la gestión.
Sin considerar los medios de difusión específicamente científicos, el conocimiento
producido se vehiculizó mediante las siguientes actividades: provisión de información a
los destinatarios de intervenciones, asesoramientos y consejerías a instituciones,
principalmente hospitalarias; y capacitación (incluyendose docencia de grado y
postgrado, y capacitación del personal de salud)
En cuanto a las modalidades de vinculación con grupos no científicos, se advirtió que en
su mayoría son interacciones muy diversas en cuanto a su contenido, poco sistemáticas,
de tipo puntual (como las consultorías a organismos gubernamentales o las de tipo
académico para capacitación a profesionales de la salud).
Respecto a la utilización efectiva de los conocimientos, las opiniones se dividen entre
quienes señalan que la existencia de vínculos entre grupos de investigación de la
Universidad y otros actores sociales implica un nivel efectivo de utilización de
resultados de investigación y quienes -más escépticos- admitieron
la falta de
información precisa sobre la utilización de dicho conocimiento.
Así, entre los primeros se
reconoció la utilización efectiva de resultados de
investigación en: educación sexual dentro de la currícula escolar, percepciones sobre
salud y sexualidad en ONGs vinculadas a VIH/SIDA, acciones legales sobre sexualidad
de ONGs vinculadas a derechos de mujeres, asesoramiento parlamentario para la
sanción del Programa Nacional de Salud Reproductiva y Procreación Responsable,
aplicación de resultados en servicios de salud de hospitales (Rivadavia, Clínicas,
Posadas de la Pcia. de Misiones, Sardá, Pirovano, Argerich, efectores de la Ciudad de
Formosa) y en formación de recursos humanos realizada en dichos servicios
En las políticas públicas se observó un menor nivel de utilización, según las referencias
hechas por los propios grupos; pero esta afirmación no ha contemplado hechos
posteriores, como la sanción de la Ley 25673, ocurrida pocos meses después de la
realización del ejercicio de pertinencia social. Pues es significativa la coincidencia de
temáticas y entidades participantes en el Taller con las ideas y los actores que
acompañaron la sanción de la Ley y su reglamentación. Finalmente, no se advierte
ninguna utilización efectiva con empresas del sector.
FORTALEZAS Y DEBILIDADES
Como resultado de la realización del Taller de Análisis de Pertinencia Social y de los
informes técnicos complementarios (nota 2), se identificaron las siguientes fortalezas y
debilidades12 en la producción del conocimiento en función del potencial uso social y en
la transferencia al campo social:
a) En la producción de conocimiento en función del potencial de uso social:

alta pertinencia social de los conocimientos producidos, en términos generales.

alta utilidad de los resultados principalmente en términos del mejoramiento de la
calidad de atención de los servicios en el área.

déficit de enfoques interdisciplinarios en la investigación.

falta de comunicación entre los grupos de investigación, en particular entre
grupos provenientes de las ciencias sociales y de las ciencias biomédicas.

diseño de investigaciones con poca participación de usuarios o bien,
incorporación de muestras de población recortadas en forma tal que limitan el
alcance de los resultados.
b) En el proceso de transferencia de los conocimientos al campo social:

Importantes vínculos registrados entre los grupos y actores del campo de la salud
reproductiva, particularmente en capacitación de técnicos y profesionales del
sistema de salud (principalmente hospitales).

Se registraron algunas acciones conjuntas con ONGs (una ONG de defensa de
derechos de las mujeres; otro caso se refiere a la temática SIDA, que no ha sido
incorporada a la selección de grupos); de todos modos, se consideró limitado el
número de este tipo de vínculos, en relación a las posibilidades que puede
ofrecer este recurso para el desarrollo del potencial social de las investigaciones.

Si bien se registraron acciones positivas de vinculación con el sistema escolar y
la acción parlamentaria, éstas no se verificaban en el marco de una relación
sistemática y planificada.

Escaso contacto, o poco sistemático, de los grupos de investigación con
organismos a cargo de las decisiones políticas en el área; situación similar con
Informe Final de la Secretaría de Ciencia y Técnica de la UBA a cargo de Jorge Medina, titulado:
“Análisis de pertinencia social de las investigaciones de la UBA en el área-problema: Salud
Reproductiva”, Buenos Aires, abril de 2003, pág. 18
12
asociaciones médicas, y con organismos de contralor de los efectores del sistema
público.

Poco acceso a los resultados por parte de los estudiantes de medicina.

Poca participación de los grupos en actividades de diseño de políticas y
planificación como parte de sus actividades de transferencia.

Escasa presencia de medios de comunicación en los contactos realizados por los
grupos como parte de sus estrategias de difusión.

Poco acceso social al conocimiento producido según los canales donde se
difunde y el formato en que se encuentra.
Asimismo, por la significación que reviste la incorporación del análisis de pertinencia
en el proceso de construcción de una cultura plural de la evaluación en ciencia y
tecnología en la actualidad, especialmente en un área-problema caracterizada por su
complejidad, he de transcribir seguidamente la síntesis del documento final13 producido
por la Secretaría de Ciencia y Técnica de la UBA con las propuestas para profundizar la
pertinencia social de las actividades desarrolladas por los grupos de investigación
participantes : 1) incorporación de temas, 2) red de vinculaciones, 3) acciones a
implementar por parte de los investigadores, 4) recomendaciones para la gestión de la
ciencia
INCORPORACION DE TEMAS
1) Identificación de temas que podrían ser incorporados en las agendas de
investigación de la UBA

La visión de los actores intermediarios (médicos/as, enfermeros/as, parteras,
hospitales públicos, clínicas privadas) sobre diversos aspectos vinculados a la
salud reproductiva: derechos del paciente, derechos sexuales y reproductivos de
las mujeres.

Investigaciones sobre la maternidad desde el punto de vista cultural, social,
político y médico.

13
Aspectos éticos y filosóficos de la salud reproductiva.
Nota 2.

Difusión en los medios de comunicación de los temas de la salud sexual y
reproductiva investigados en la Universidad.

Brecha entre los hallazgos de las investigaciones y su posibilidad de orientar
políticas públicas; aspectos culturales que guían las decisiones políticas (en
ámbitos gubernamentales y no gubernamentales); aspectos culturales que guían
las prácticas actuales; re-significación del problema de la salud reproductiva a
partir de la situación de emergencia sanitaria.

Análisis sobre la jurisprudencia relacionada con estos temas.

La perspectiva de género en las políticas publicas.

Determinantes de cambio de conducta y estilos de vida con relación al problema
de la salud reproductiva. Relación entre el aumento de información, la
posibilidad de acceso a la misma y el cambio de conducta
en salud
reproductiva.

Determinantes sociales de inequidades en salud reproductiva.
RED DE VINCULACIONES
2) Red de vinculaciones que deberían establecer los grupos de investigación para el
logro de una mayor pertinencia social
Los grupos de investigación deben vincularse, en el marco de acciones sistemáticas, con
agentes sociales, instituciones y referentes de sectores que se mencionan a continuación.
Previamente, debería generarse una reflexión acerca de los contenidos de dicha
vinculación: qué conocimientos deben ser transferidos, en qué casos y, si fuera
necesario, a través de qué instancias intermedias (por ejemplo a través de expertos
profesionales o alguna otra instancia). Las entidades sugeridas son:

programas gubernamentales

sistema educativo en todos sus niveles

carreras de medicina en particular

organismos de contralor de efectores del sistema público

ONGs vinculadas al área de salud reproductiva

organizaciones de base comunitaria (usuarios/as finales)

órganos parlamentarios

asociaciones profesionales médicas

otras universidades con menor desarrollo en investigación sobre la temática
ACCIONES A IMPLEMENTAR POR LOS INVESTIGADORES
3) Acciones a implementar principalmente por parte de los grupos de investigación

Desarrollo y aplicación de enfoques interdisciplinarios en la producción de
conocimiento científico

Desarrollo y puesta en marcha de un plan de actividades de vinculación entre
investigadores y usuarios

Generación sistemática y periódica de información de resultados en formatos
que sean accesibles por fuera de la comunidad científica

Incorporación de otras poblaciones para su estudio en el trabajo de campo de las
investigaciones, ampliando el ámbito existente (escuelas y hospitales) a grupos
no escolarizados y grupos que no acceden al sistema de salud
RECOMENDACIONES PARA LA GESTION
4) Acciones destinadas principalmente a la gestión del conocimiento producido en la
universidad

Desarrollar un mecanismo que permita la identificación de todos los grupos de la
UBA en salud reproductiva.

Incluir en el área-problema salud reproductiva -tanto en otros ejercicios a
realizar como en actividades de futuro desarrollo para el área- a grupos de
investigación que aborden este tema desde los enfoques provistos por la
psicología, el derecho, la medicina, la antropología. En caso de no existir,
promover la realización de este tipo de investigaciones.

Ampliar la cobertura del área problema salud reproductiva a cuestiones tales
como salud sexual, fertilidad, masculinidad, derechos sexuales y reproductivos.

Elección de otros términos para referirse a la problemática, como por ejemplo
salud sexual o derechos sexuales y reproductivos, que permitirían una mayor
extensión y significación social del ejercicio.

Promover reuniones específicas de trabajo entre grupos de investigación del área
de ciencias sociales y grupos del área biomédica.

Creación de instancias participativas para definir agendas de investigación sobre
salud reproductiva, que reúnan a los grupos con potenciales usuarios externos al
sistema científico.

Creación de vías de acceso público al universo completo de trabajos que se
generan en la UBA en relación directa con el tema de salud reproductiva.
PUENTES EFICIENTES ENTRE CIENCIA Y SOCIEDAD:
Declaración de Buenos Aires.
En la actualidad, la producción de lazos eficientes entre la investigación, la política y la
práctica se ha convertido en una preocupación compartida en el ámbito nacional,
regional e internacional, de la que se hacen eco los organismos internacionales.
En el marco de la UNESCO, se creó en 1994 el programa Gestión de las
Transformaciones Sociales (MOST). En el mandato original del MOST, se estableció
un fuerte compromiso para promover la investigación comparativa, internacional,
interdisciplinaria y políticamente relevante. Fue diseñado para organizar e impulsar
redes internacionales de investigación, fomentar programas de capacitación y
convertirse en un centro de intercambio de información para el conocimiento social
científico. En consecuencia, contribuye a favorecer, con resultados fructíferos, los
encuentros entre los científicos sociales, los responsables de las políticas, las
organizaciones no gubernamentales, el sector privado y las comunidades locales. En el
Informe Anual del MOST 2001 (Fase I), se destaca que su valor añadido radica en que,
en cada una de sus redes y proyectos, persigue una doble finalidad, a saber, el fomento
de una investigación a largo plazo definida de forma autónoma y la aportación de una
base de conocimientos para la elaboración de políticas. Otra de sus funciones, que está
relacionada con las anteriores, es promover la cooperación entre los especialistas en
ciencias sociales del Norte y el Sur con miras a una investigación auténticamente
internacional y multilateral, en la que todos los copartícipes lleven a cabo la labor de
conceptualización
y
concepción
en
un
pie
de
igualdad
El MOST ha sido reorientado (Fase II), centrándolo en la generación de nexos entre la
investigación y la política. Bajo sus auspicios se organizó en Argentina y Uruguay
(Buenos Aires, Córdoba, Montevideo y Rosario) el Foro Internacional sobre el Nexo
entre Políticas y Ciencias Sociales (20 al 24 de febrero de 2006), con el objetivo de
establecer una novedosa conexión entre la investigación en ciencias sociales y la toma
de decisiones políticas, al que se convocaron participantes de aproximadamente 70
países para construir en forma conjunta un nuevo tipo de conexión entre el mundo de la
investigación y el de la elaboración de políticas públicas.
El texto de la Declaración de Buenos Aires es la manifestación solemne de la dinámica
propuesta, cuyo texto abierto a la participación de todos, he querido compartir como
cierre de este artículo. Pues en él se explicita la poderosa articulación entre el
conocimiento científico y las transformaciones sociales de los pueblos que no se
resignan a padecer el cambio social como un destino, sino que se esfuerzan por ser
partícipes de las reformas sociales, primordialmente aquellas que revisten importancia
estratégica respecto del desarrollo humano.
En el Informe de Análisis de Pertinencia Social sobre salud reproductiva, elaborado por
Silvia Franco, se identifica a la salud reproductiva como un “área sensible en la salud
de la población, que reviste importancia estratégica respecto al desarrollo humano.
Existe consenso sobre que asegurar el acceso a la salud con equidad es indispensable
para el desarrollo humano y que la salud reproductiva no sólo es un derecho, sino
también un factor central en la lucha contra la pobreza, ya que es el aspecto que con
más crudeza expresa la brecha entre ricos y pobres, por lo que resulta una de las piezas
clave en el condicionamiento del nivel de vida y de salud de la población de menores
ingresos”.
En el mismo informe se afirma que, en virtud de sus repercusiones en el desarrollo
social, político y económico de los países, la salud reproductiva ha dado lugar a
acuerdos internacionales, que ponen de manifiesto la preocupación -internacional y
nacional- y que generan compromisos públicos ineludibles: “A fin de dar cumplimiento
a estos acuerdos internacionales, para que se transformen en prácticas en la vida
cotidiana, se requiere la generación de políticas públicas. A partir del impulso otorgado
por una amplia red de organizaciones gubernamentales y de la sociedad civil, con el
apoyo de la opinión pública, se logró [...] la aprobación del Programa Nacional de Salud
Sexual y Procreación Responsable, unificando los diversos proyectos legislativos que
esperaron durante más de una década su sanción.”
Finalmente, el Informe sobre el “Estado de la población mundial 2005: La promesa de
igualdad. Equidad de género, salud reproductiva y Objetivos de Desarrollo del
Milenio“del Fondo de Población de las Naciones Unidas14 nos confronta:
“El mundo ha llegado a un consenso sin precedentes para eliminar la pobreza. Las
estrategias son claras y se dispone de los medios técnicos. Es posible movilizar el
liderazgo y los recursos necesarios. Como dijo Wangari Maathai, ganadora del Premio
Nobel de la Paz de 2004, en su discurso de aceptación:
“Llega un momento en que la humanidad debe hacer el
tránsito hasta un nuevo nivel de conciencia, para alcanzar
un nivel moral más alto. Ese momento es ahora…no puede
haber paz si no hay un desarrollo equitativo”.
“Nadie, pero sobre todo el que más tiene, puede desentenderse del bienestar y felicidad
del resto. Ese es el compromiso que obliga al ciudadano de una democracia. Cada cual
tiene, por supuesto, derechos a unos fines y objetivos privados: su familia, su profesión,
sus propiedades, su dinero. ¿Pero acaban ahí los fines del ciudadano? ¿Todo lo que una
persona ha de proponerse es vivir lo mejor posible sin pensar en nadie más? La fórmula
“a cada uno lo suyo” ¿Define satisfactoriamente el fin de la vida humana? ¿Puede
funcionar bien una sociedad de egoístas, donde no haya un ápice de altruismo? ¿Puede
considerarse que es una sociedad decente?”.15
Estado de la población mundial 2005: La promesa de igualdad. Equidad de género, salud reproductiva
y Objetivos de Desarrollo del Milenio, Fondo de Población de las Naciones Unidas, 2005.
http://www.unfpa.org/swp/2005/pdf/sp_swp05.pdf
14
15
Camps, Victoria y Giner, Salvador, Manual de civismo, Ariel, Barcelona, 1998, pág.43.
PROYECTO DE LA DECLARACIÓN DE BUENOS AIRES16
Declaración de Buenos Aires en favor de un nuevo enfoque al nexo entre ciencias
sociales y políticas públicas
CONSIDERANDO la Declaración de la Cumbre Mundial de 1995 sobre Desarrollo
Social, la Declaración del Milenio (Naciones Unidas) y una serie de informes de alto
nivel sobre desarrollo humano e igualdad elaborados por varios organismos de Naciones
Unidas y por la Comisión Mundial sobre la Dimensión Social de la Globalización.
COMPARTIENDO la preocupación expresada por el Secretario General de Naciones
Unidas en su Prólogo al Informe de 2005 sobre los Objetivos de desarrollo del Milenio,
en el sentido de que “si se mantienen las tendencias actuales, se corre el riesgo de que
muchos de los países más pobres no puedan cumplir muchos de los Objetivos de
desarrollo del Milenio. Habida cuenta de lo mucho que hemos avanzado, esta
imposibilidad pondría de relieve la tragedia que encierra una oportunidad desperdiciada.
El presente informe demuestra que, efectivamente, contamos con los medios para lograr
que prácticamente todos los países puedan cumplir la promesa implícita en los objetivos
de desarrollo del Milenio. La tarea que se yergue ante nosotros es aprovechar esos
medios”.
TENIENDO EN CUENTA las Declaraciones de Lisboa y de Viena sobre las Ciencias
Sociales, las cuales hacen hincapié en el aporte indispensable de las ciencias sociales al
logro de los objetivos de desarrollo social de la comunidad internacional.
El Foro Internacional sobre el Nexo entre Políticas y Ciencias Sociales, en su sesión
plenaria de clausura, celebrada en Buenos Aires el 24 de Febrero de 2006, presenta su
propio diagnóstico sobre los desafíos contemporáneos en lo que se refiere a los vínculos
entre las ciencias sociales y la formulación de políticas. Asimismo, plantea y aprueba un
plan de acción para revitalizar dichos vínculos.
La erosión de los valores universales en materia de derechos humanos, dignidad
humana y justicia, provocada por las transformaciones sociales y económicas
16
www.unesco.org/shs/ifsp/declaration.
contemporáneas, es un asunto que necesita atención urgente. Los Objetivos de
desarrollo del Milenio y otros objetivos de desarrollo acordados a nivel internacional no
son declaraciones ambiciosas de nuevas intenciones de orden moral, sino más bien un
conjunto de acciones mínimas compatibles con los valores proclamados por la
comunidad internacional. Si no se consiguen avances significativos a este respecto, la
humanidad se enfrentaría a una bancarrota moral, a desastres y otras calamidades.
Los medios necesarios para hacer frente a esos desafíos apelan, por encima de todo,
tanto a la visión moral como a la voluntad política. Pero además, este Foro desea
expresar la convicción de que los problemas actuales exigen nuevos conocimientos que
deberán utilizarse de forma innovadora y una utilización correcta de los conocimientos
existentes. A este respecto, las ciencias sociales están llamadas a desempeñar un papel
decisivo.
El hambre y la pobreza, la educación, la salud, el medio ambiente y el desarrollo – las
cinco áreas a las que se refieren los ocho Objetivos de desarrollo del Milenio – forman
parte de la dinámica social. Ninguna de ellas atañe exclusivamente a las ciencias
sociales, pero sin su aporte los procesos que las producen no son inteligibles. Sin
embargo, los prejuicios, los dogmas y el engañoso sentido común suelen contribuir a
que la investigación rigurosa en ciencias sociales no se tenga siempre en cuenta en el
diseño y la planificación de políticas sociales. Todo ello tiene como consecuencia la
aplicación de políticas que fracasan, incluso en sus propios términos, aumentando así la
evitable miseria humana.
Por lo tanto, este Foro afirma su convicción de que la utilización acertada y rigurosa de
las ciencias sociales puede conducir a la adopción de políticas más efectivas. Pero esa
utilización requiere un nuevo enfoque centrado en los vínculos que pueden unir las
ciencias sociales y las políticas de desarrollo social, dado que los conocimientos que
buscan las ciencias sociales son precisamente los que precisa la acertada formulación de
políticas.
Habida cuenta del carácter urgente de las preocupaciones expuestas, este Foro decide
adoptar en su sesión plenaria de clausura el siguiente plan de acción, encomendándolo a
la atención de la comunidad internacional.
1. El Foro aboga por la creación de nuevas redes destinadas a reunir planificadores de
políticas, investigadores y miembros de la sociedad civil en general, en torno a una
preocupación común para responder a las exigencias urgentes del desarrollo social a
nivel global.
2. Estas redes deberán promover la cooperación e intercambio de información, los
resultados de investigación y las mejores prácticas respecto a la inclusión en el diseño
de proyectos de la PERTINENCIA PARA LA ELABORACIÓN DE POLÍTICAS y, a
estos efectos, deberán promover el desarrollo de acuerdos institucionales innovadores e
instrumentos para facilitar los vínculos entre las comunidades de investigación y de
formulación de políticas.
3. Reconociendo la doble necesidad de que la investigación en ciencias sociales sea
verdaderamente internacional e interdisciplinaria y de que tenga debidamente en cuenta
las prioridades en materia de formulación de políticas, estas redes deberán facilitar la
cooperación para mejorar los programas actuales de financiamiento en lo que se refiere
a la investigación internacional en ciencias sociales y en favor del desarrollo de nuevas
modalidades para una labor productiva, más allá de los límites disciplinarios y
nacionales.
4. Reconociendo la necesidad de que los planificadores de políticas tengan en cuenta los
resultados de una investigación que cuestione el pensamiento actual, las redes
establecidas en respuesta a este plan de acción deberán valorizar la investigación en
ciencias sociales crítica y alternativa ante los planificadores de políticas.
5. Las redes ayudarán particularmente a las instituciones de los países en desarrollo,
especialmente en Africa, en la satisfacción de sus necesidades en materia de
investigación y en el restablecimiento y el fomento de su capacidad para llevar a cabo
sus prioridades en ciencias sociales.
6. Para poner en práctica sus funciones, las redes deberán contar con secretarías
adecuadas que dispongan de recursos materiales provenientes de todas las instituciones
comprometidas con el espíritu de esta Declaración. Las redes deberán tener en cuenta,
inter alia, el seguimiento de eventos de índole similar a este Foro y la publicación de
informes sobre ciencias sociales y políticas de desarrollo social, a fin de constituirse en
centros del debate actual sobre paradigmas, instrumentos y prácticas, y en lugares de
compilación de las actividades existentes en la interacción entre la academia y los
políticos.
7. El Foro encomienda este plan de acción a la atención de todos los organismos
pertinentes de Naciones Unidas, de todos los gobiernos nacionales y otros organismos
interesados y les insta a ratificarlo y a dotarlo del apoyo e incentivos adecuados