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Confesión de un disidente: nueva visita a la «estrategia del desarrollo económico» de Albert O. Hirschman, en Pioneros del Desarrollo Autores: María José Fernández, Acacia Ibarra, Rosina Platero, Mariana Sans. Índice Introducción…………………………………………………………………………………………….2 Desarrollo………………………………………………………………………………………………..2 Conclusión……………………………………………………………………………………………….6 Bibliografía……………………………………………………………………………………………..6 1 Introducción Para comenzar, consideramos necesario introducir y contextualizar al autor de este texto. A continuación detallaremos los hechos que nos resultaron más significativos para explicar la formación de su punto de vista y de esta forma entender cómo interpreta la realidad. Albert. O. Hirschman nació en Berlín, Alemania, en 1915, en una familia protestante que pertenecía a la burguesía media. Militó en la Juventud Socialista, participó en la Guerra Civil Española a favor de la República, se incorporó como extranjero al ejército francés y estadounidense para luchar contra el fascismo. Estudió fuera de su país en: París, Londres y la Universidad de Trieste, donde recibió su doctorado en 1938. Trabajó en calidad de economista para la reconstrucción europea en la posguerra y luego como enviado del Banco Mundial para asesorar a Colombia en términos económicos y financieros, terminando como asesor privado. Después volvió a EEUU para dedicarse a la vida académica en: Yale, Harvard y Columbia. 1 Se convirtió así, en un escéptico de las teorías ortodoxas y de las de dependencia y estructuralistas. Siempre buscó un ‘tercer camino’ y apuntó a tener un profundo sentido crítico recurriendo a la dialéctica para entender la realidad. Por esto se lo ha caracterizado como un economista heterodoxo, aunque en realidad el siempre buscó una posición intermedia realista.2 Mark Blaug (1995) lo definió como un “maestro del pensamiento lateral, mira a los viejos problemas desde una perspectiva nueva e inesperada”3. En este texto, Hirschman, por haber sido elegido como un pionero del desarrollo, se propone discutir la validez de sus proposiciones a la luz de lo ocurrido con el correr del tiempo. Este trabajo buscará sintetizarlas de forma crítica. Desarrollo En los casos en que actuó como asesor, tanto en el Plan Marshall como en Colombia, se opuso por un lado, a la actividad programadora. Es decir, a la importación de un conjunto de técnicas sin conocimiento suficiente y sin un estudio detenido del ambiente local, a lo que llamó “el síndrome del economista visitante”. Se rebeló contra el hábito de dar consejos y recetas que se creían eran universalmente válidas, teniendo tan sólo un mínimo conocimiento del "paciente". Esto queda claro cuando Hirschman plantea "Me resistí a que se me relegara a esa clase de actividad programadora. ... Esto (Colombia) era una repetición... de lo que más había detestado en el trabajo relacionado con el plan Marshall." (Hirschman pág. 97) Por otro lado, fue crítico con los latinoamericanos pues observó que se sentían condenados a su realidad y los condujo a perder su capacidad de iniciativa y auto evaluadora. A esto Hirschman lo denominó “fracasomanía” o complejo de fracaso. Otra fuerte observación de los latinoamericanos fue su actitud de humildad y sumisión hacia los economistas visitantes que eran vistos magos y por ello "tendían a trabajar como si fueran uña y carne" de ellos. pág. 100. Concluyó que las conductas de ambas partes se retroalimentaban. Por ello el camino seguido por el autor fue intentar comprender sus normas de acción. Trató de buscar ‘la racionalidad oculta’, es decir, descubrir elementos y procesos de la realidad colombiana que efectivamente funcionaban. Esto implicó identificar fuerzas económicas y políticas que merecieran reconocimiento y refuerzo, que por lo general se reflejaban en comportamientos "típicamente contra intuitivos y chocantes". (Hirschman pag.98) Básicamente Hirschman buscaba procesos de crecimiento y cambio que ya estaban ocurriendo en Colombia y que por lo general pasaban desapercibidos. Esto tiene la idea subyacente de 1Revista clarín: http://www.revistaenie.clarin.com/ideas/odisea-Albert-Hirschman_0_850114993.html BLANCO, Luis Armando, profesor de la Facultad de Finanzas, Gobierno y Relaciones Internacionales de la Universidad Externado de Colombia, Revista de economía institucional: http://www.economiainstitucional.com/esp/vinculos/pdf/no28/lblanco.pdf 3 PULENCIO FRANCO, Jairo Hernando, “Un atisbo en la vida y obra de Albert Otto Hirschman, Universidad de Zaragoza: http://www.eumed.net/ce/2006/jhpf.htm 2 2 que el orden antiguo ya estaba cambiando. Dicho punto claramente muestra su oposición a la idea del visitante revolucionario que establecía que la única forma de superar la situación actual era cambiar todo a la vez. Descubrió dos posibles racionalismos ocultos. El primero de ellos se relaciona con escaseces, puntos de estrangulamiento y otros desequilibrios en el proceso de desarrollo. El segundo tiene que ver con los procesos industriales intensivos en capital y las presiones ejercidas sobre los formuladores de políticas de: inflación y los déficits de balanza de pagos. La política del crecimiento desequilibrado es uno de los principales aportes de Hirschman. Consiste en fomentar desequilibrios para estimular y además movilizar recursos porque gran parte de los países en desarrollo no tienen capacidad para tomar decisiones para incentivar su crecimiento. La clave es alentar industrias conectadas a otras empresas o industrias con alta capacidad de eslabonamiento que generen presiones e induzcan el surgimiento de otros sectores, logrando así efectos positivos sobre el resto de la economía.4 El autor se limitó a los desequilibrios de tipo económico, es decir, a las desproporciones entre sectores como por ejemplo entre la industria y la agricultura. También plantea que la interdependencia de la economía en lo que refiere a insumo-producto, hace que la expansión de un sector/subsector por delante de otro genera determinadas fuerzas en movimiento (cambios de precios relativos) que podrían eliminar el desequilibrio inicial. Hay que entender el crecimiento desequilibrado como algo movido y justificado por el hecho de que se generan fuerzas compensadoras por lo que los desequilibrios se corrigen por sí mismos. El punto entonces es ver al proceso de desarrollo como secuencia de desequilibrios que estimulan la economía. Por ende, Hirschman se reveló contra el desarrollo equilibrado que plantea: soluciones simultáneas y que la industrialización tiene éxito únicamente si se emprende como un esfuerzo en gran escala altamente planificado y en varios frentes a la vez. Estas proposiciones pueden observarse en el gráfico 1, en el cual se contrasta el crecimiento equilibrado (BG) que se representa como una curva con tendencia homogéneamente creciente, con el crecimiento desequilibrado (UG), como una curva escalonada que refleja precisamente la idea contraria. Una crítica que se le hace es que no consideró el hecho de que un sector creciera a expensas de otro, lo cual se conoce como proceso de crecimiento antagónico. Antagónico no implica suma cero, puesto que a fin de cuentas se está logrando un crecimiento en todos los aspectos. O sea, se genera un crecimiento en el conjunto de los ingresos recibidos en ambos sectores aunque en un momento cualquiera, un sector gana a expensas de otro. Dicho fenómeno se ilustra en el gráfico 2, en el cual se crece pues la flecha es hacia arriba pero dicho proceso implica que según el período, un sector logre mayores ingresos que el otro. El punto clave aquí es que Hirschman no consideró el potencial de las implicaciones antagónicas hasta que ocurrieron (guerras civiles, desastres y tensiones). De todas formas se justifica pues el proceso de crecimiento antagónico desequilibrado, a lo que llama "navegar a la vela contra el viento", resultó ser más común y beneficioso de lo que uno puede pensar, fundamentalmente por dos motivos. El primero, si en el gráfico 2 en lugar de poner ingresos colocamos dos objetivos sociales importantes, como estabilidad económica y crecimiento o crecimiento y equidad, se concluye que al tratarse de objetivos individualmente muy difíciles, se termina concentrando en uno y descuidando el otro. Esto ocurre hasta que el público lo hace notar y se genera un cambio de rumbo, una nueva concentración y un nuevo descuido; repitiéndose el proceso. Así es como se han desplazando las sociedades, concluye el autor. 4 Revista de economía institucional, ob. cit. 3 El segundo implica que ésta forma de desarrollo es funcional a la forma de gobierno democrático y multipartidario, donde cada uno de los partidos otorga prioridades muy distintas a los diferentes objetivos sociales y al rotar los partidos en el poder es probable que la sociedad avance. En definitiva Hirschman establece una conexión entre el modelo de crecimiento antagónico y la manera torpe en que avanza típicamente una democracia, como invento social por el cual se pueden armonizar políticas pluralistas y el logro de objetivos sociales múltiples. También plantea la posibilidad de que el resultado sea el opuesto si en el gráfico 2 la flecha va en dirección contraria. En dicho caso la democracia estaría en crisis y metida en juegos de suma cero o negativa. Estas reflexiones permiten además, extender el modelo de crecimiento desequilibrado de los países en desarrollo a los procesos de los países avanzados después de transformarlo ligeramente. A fin de cuentas, no lo han hecho de forma tan diferente. 5 (Hirschman pag. 113) Otra proposición de Hirschman fueron las vinculaciones. Plantea estimular las industrias con fuertes vinculaciones de integración y verticales. Esta idea surge de la observación y del descubrimiento de la creatividad de saltarse etapas e inventar secuencias, como ocurrió en la industrialización por sustitución de importaciones (ISI). Plantea sin embargo, la existencia de un límite en la eficiencia de este proceso de industrialización si se exagera. De todas formas realmente ha resultado difícil lograr operacionalizar el criterio de la vinculación en la planificación industrial. Otro aspecto sobre el cual el autor reflexionó fue cómo hacer que una empresa u operación productiva perdure eficientemente en el sistema económico. Para responderlo se basó en una observación que efectuó en Colombia, en la cual comparó los aviones y carreteras. A lo que arribó fue que la tecnología avanzada intensiva en capital puede ser más apropiada en un país en desarrollo que la tecnología intensiva en trabajo y maquinaria. Esta idea era contraria a la de los expertos visitantes. Relacionado con esto, encontró el menor o mayor grado de latitud en los estándares de desempeño (o la tolerancia al desempeño deficiente) como característica de todos los procesos de producción. Si la latitud es angosta, la producción debe necesariamente llevarse a cabo de forma exacta, de lo contrario, no puede desempeñarse o estará expuesta a un nivel de riesgo inaceptable. Un ejemplo de esto es la necesidad del mantenimiento de los aviones. Por consiguiente, la escasez de latitud presiona a: la eficiencia, calidad, buenos hábitos de mantenimiento, entre otros. Sustituye entonces motivaciones y actitudes formadas incorrectamente por otras que serán inducidas y generadas por la latitud estrecha. 5 BIANCHI, Ana María, Profesora titular Universidad de San Pablo, “Albert Hirschman in latin America: Notes on Hirschman’s Trilogy on economic development”: http://www.revistas.unal.edu.co/index.php/ceconomia/article/view/43663/45837 4 Siempre se consideró como condición necesaria la existencia de actitudes y creencias culturales correctas para alcanzar el progreso económico. Pero para Hirschman estas mismas actitudes podrían generarse "sobre la marcha". Es decir, plantea la existencia de mecanismos adicionales que logran hacer al hombre eficiente. Más tarde agregó: protestas, quejas y críticas por los consumidores, dentro de los mecanismos a los que llamó "voz". Esto también lo vinculó con la competencia, la cual fue considerada por varios economistas como "la institución social todopoderosa que lleva consigo presiones para que haya eficiencia". (Hirschman pág. 106) El autor reconoce que a pesar de haber desarrollado estos dos mecanismos de manera independiente, existe en realidad una vinculación entre los mismos. Por ejemplo, el mantenimiento de carreteras baratas si se descuida puede producir que se eleve una "voz" fuerte rápidamente. Además diferencia según los tipos de mercado. En el caso de monopolio la voz es el único mecanismo posible, mientras que en la competencia en casos de latitud angosta, es la regulación pública la que asegura un nivel correcto de calidad. En función de su tesis de crecimiento desequilibrado y solución en secuencia desarrolló un nuevo punto de vista sobre la inflación y déficit de la balanza de pagos, problemas muy recurrentes en las economías latinoamericanas. En cuanto a la inflación planteó un enfoque más estructuralista en oposición al monetarista, pues es el sendero de crecimiento desequilibrado el que transmite los choques inflacionarios y de esta forma los desvincula de la política monetaria y fiscal. Además le atribuye una función importante al alza de los precios relativos para superar los desequilibrios. En lo que refiere al déficit de la balanza de pagos, lo interpretó como un componente del proceso del crecimiento desequilibrado en lugar de desequilibrios macroeconómicos entre ahorro e inversión interna. Las necesidades de asistencia financiera surgen por desproporciones del proceso de crecimiento, ya que llega un punto en el que la necesidad de insumos importados supera la capacidad de aumento de las exportaciones. Además adjudica ciertas oportunidades en los cambios en la disponibilidad de divisas pues pueden fomentar el desarrollo industrial. Las proposiciones de Hirschman no estuvieron exentas de críticas. Una de ellas fue la ausencia de contenido operacional de su obra, pues carecen de consejos en materia de política económica. Surge así la pregunta: ¿deben los equilibrios ser tramados deliberadamente? Pero era un rasgo del autor dedicarse a la generación de ideas, para concientizar y limitaba su rol de formulador de políticas. Es más, el mismo declara que “mi objetivo no es hacer previsiones de tendencias, más bien procuro entender aquello que es posible que suceda y llamar la atención de la gente sobre esto…mi interés está centrado, principalmente, en la constelación de hechos y situaciones necesarias para que puedan verificarse cosas buenas”6 . Además, en toda su exposición suele concluir que los excesos pueden ser peligrosos y negativos, pero su análisis no se extiende más allá de lo cualitativo. La ausencia de cuantificación y formalización para determinar los óptimos provoca que sus proposiciones no estén listas para ser sometidas a pruebas científicas y además deja sin receta a los que formulan las políticas. También se lo critica por señalar sólo posibilidades, no necesidades ni probabilidades, ¿es esto iluminador? Otra crítica que recibió fue que no dejó una estructura sobre la cual se pueda crear una escuela y seguir desarrollando su pensamiento. 6 PULENCIO, ob. cit. 5 Además en su intento de encontrar racionalismos ocultos, pudo en ocasiones haber justificado paternalistamente acciones, políticas o comportamientos que en realidad era injustificables. Por ejemplo el alcance de la ISI y las formas en las que se promovió. En cuanto al crecimiento desequilibrado, crea oposición, resistencia y presiones contrarias, cuando en realidad lo que se precisa es una política que genere un exceso de estímulos positivos sobre los negativos, apoyando así al crecimiento equilibrado. Por ello el crecimiento desequilibrado debería interpretarse como un proceso y no tanto como un objetivo. Aparte, si bien la reducida latitud puede estimular un mejor desempeño, una mayor latitud puede reducir los incentivos. Por ejemplo cuando los automóviles se hicieron más resistentes a los choques, los conductores se animaron a correr más riesgos aumentando así el número de accidentes. Este punto Hirschman no lo tuvo en cuenta. En relación al concepto de vinculación se le critica el hecho de que el mismo supone una economía sin tope. Además, su tesis de que el punto de estrangulamiento son las decisiones y no los recursos no es necesariamente cierta. Determinar en qué recae dicho estrangulamiento, depende de la economía en cuestión, pero de todas formas persiste un dilema subyacente entre: los recursos e incentivos, entre los medios y los motivos y entre la voluntad y la manera de hacerlo. Conclusión Si bien Hirschman es considerado un pionero del desarrollo por el aporte de nuevas ideas y teorías, esto es discutible. Tiene varias similitudes con los planteos ortodoxos conservadores en lo que refiere a: la oposición a la planificación, la fé en el racionalismo oculto o de otra índole, escepticismos acerca de la ayuda extranjera y de los expertos burocráticos que la llevan a cabo, resultados contra intuitivos, entre otros. Pero difiere en su escepticismo de la eficiencia de la mano invisible ya que no ve a la intervención tan negativamente y también porque explora más allá del mercado. Por ende, más que un rebelde contra las escuelas tradicionales fue un rebelde contra las simplificaciones, superficialismos y limitaciones de la ortodoxia y heterodoxias prácticas. Además, como economista del desarrollo, no se dedicó a encontrarle una solución, sino que meramente se conformó con la generación de ideas y la promoción de debate. También logró un buen nivel de autocrítica de sus proposiciones al evaluarlas con perspectiva. Por ejemplo, su obra y tesis se basaron fundamentalmente en su experiencia en Colombia, más allá de que luego haya tratado darle un carácter universal. Esto realmente es muy criticable, pero Hirschman lo tiene claro "como siempre le digo a mis amigos, la verdad es que sólo sé de Colombia; pero después de todo, Marx sólo conocía Inglaterra..."7 Bibliografía -Revista clarín: http://www.revistaenie.clarin.com/ideas/odisea-AlbertHirschman_0_850114993.html (Consulta: 22/5/2015) - BLANCO, Luis Armando, profesor de la Facultad de Finanzas, Gobierno y Relaciones Internacionales de la Universidad Externado de Colombia, Revista de economía institucional: http://www.economiainstitucional.com/esp/vinculos/pdf/no28/lblanco.pdf (Consulta: 23/5/2015) -PULENCIO FRANCO, Jairo Hernando, “Un atisbo en la vida y obra de Albert Otto Hirschman, Universidad de Zaragoza: http://www.eumed.net/ce/2006/jhpf.htm (Consulta: 23/5/2015) -BIANCHI, Ana María, Profesora titular Universidad de San Pablo, “Albert Hirschman in latin America: Notes on Hirschman’s Trilogy on economic development”: http://www.revistas.unal.edu.co/index.php/ceconomia/article/view/43663/45837 (Consulta: 22/5/2015) 7 PULENCIO, ob. Cit. 6