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LECTURA ORANTE DE LA PALABRA
Marcos 1, 1-8
Domingo 4 de diciembre 2011, II de Adviento
CANTO AL ESPIRITU SANTO: Ven Espíritu de Santidad. Ven Espíritu de luz.
Ven Espíritu Divino. Ven Abrázanos. (BIS)
PREPARACIÓN: Estamos en tiempo de adviento, tiempo de espera, de atención y cuidados, de
respeto y contemplación.
Nos preparamos para tener un encuentro íntimo y profundo con el Señor de la Vida y de la
Palabra. Hacer un momento de silencio para aquietarnos exterior e interiormente; saca esos
ruidos internos que no nos permiten estar junto al Señor, acompaña este momento con música y
un hermoso altar.
ORACIÓN: “Señor, hay mucho dolor en nuestro tiempo, hay sufrimientos e injusticia, ayúdanos
Señor a sembrar semillas de esperanza.
Danos la alegría de la paciente espera, enséñanos a hacer crecer la esperanza de algo nuevo,
anímanos a entregar nuestras vidas para la edificación del Reino de Dios que tú construiste para
nuestra propia felicidad. Adviento es tiempo de espera, pero también es tiempo de donación y
compromiso.
Contágianos con la fe sencilla de María, que dio su vida para iluminar el Reino y hacer nacer la
esperanza en medio de nuestro pueblo……Amén.
LECTURA- ¿Qué dice el Texto? Leer Mateo 1, 1-8
En este momento cada letra, cada signo de la palabra del Señor es muy importante, porque
queremos que el Señor nos hable, leamos el texto lentamente, releerlo y volver a leerlo cuantas
veces sea necesario. Poco a poco los detalles van apareciendo, las letras se vuelven imagen y
comienzan a hablar, nosotros tenemos que descubrir, ¿Qué dice el texto? ¿Cuál es la frase que
más me llamó la atención? ¿Quiénes son lo personajes? ¿Quién es el narrador? ¿En qué lugar se
encontraban los personajes? Leer Marcos 1,1-8.
COMENTARIO: La voz de Juan suena en el desierto, que se allanen los caminos. Que se preparen,
para salir al encuentro de Cristo. Que se conviertan. Porque el mismo Dios, se hace hombre en el
seno de una virgen. Conviértanse porque está cerca el Reino de Dios, reino de paz y justicia.
Preparen el camino del Señor, allanen su sendero. Juan apoya el contenido de sus palabras, con su
propio testimonio, su conducta austera y penitente, entregada a Dios Padre,
Toda la predicación y la actividad de Juan están unidas a la persona de Jesús, Juan se hacia cada
vez mas pequeño, para dejar paso a Jesús. “Esta es, pues mi alegría, es preciso que el crezca y que
yo disminuya” (jn 3, 29-30)
A través de este relato demos espacio a nuestra propia emoción a nuestros sentimientos. Quizá
haya una frase que me ha impactado. Dios me habla a través de ella, que sea lo que la palabra dice
y no lo que yo quiero que me diga.
MEDITACIÓN.- ¿Qué me dice o nos dice el Texto?:
Nos vemos a la luz de Dios, con la mirada de Dios en nosotros, y de ahí surge la historia de
nuestras vidas, de nuestro caminar hacia el Padre. La palabra es espada de doble filo, que
escudriña los sentimientos y pensamientos del corazón. “Cerca de ti esta la palabra, en tu boca y
en tu corazón, para que la pongas en practica” (Dt 30,14) Dejemos reposar la palabra en nosotros,
escuchando su susurro, lo importante es que procuremos dejar todo el tiempo necesario para que
la palabra haga su efecto en nosotros, para que la semilla de la palabra crezca. Aun cuando no
sepamos como, pero si sabemos que el Espíritu Santo hace que la palabra sea vida en nosotros.
Volvemos a leer el texto para ver qué nos dice el Señor.
 Juan Bautista, vino anunciar una conversión, ¿Sientes que Dios está pidiendo un cambio radical
en tu vida?
 También Juan Bautista vino a preparar el camino al Señor ¿Cómo preparas tú este camino para
el Señor?
 ¿He sido instrumento para que otros encuentren el camino del Buena Nueva del Reino?

¿Qué mensaje tiene este texto para mi vida o nuestra vida?
ORACIÓN.- ¿Qué le respondo al Señor motivado por su
Palabra?
Es el momento para la oración comunitaria, dirige tu oración de
petición, acción de gracias, súplica, alabanza, abandono o perdón directamente al Señor, no es un
comentario para los demás, de tú a tú con el Señor, exprésale todo lo que hay en tu corazón.
CONTEMPLACIÓN.- Dejo que el Señor me hable
Quédate unos minutos en silencio, dejándote envolver por el amor, la gracia y ternura de Dios, no
digas nada, cierra tus ojos y abre los oídos del corazón y deja que Dios te hable y te ame.
ACCIÓN.- ¿Y qué voy hacer ahora, cómo hago vida esta Palabra?
¿CUAL ES MI COMPROMISO? Hemos leído el texto, sabemos lo que dice, y lo que nos dice, la
palabra del Señor es siempre eficaz, a penetrado en nuestros corazones, no podemos quedarnos
impávidos, tenemos que comprometernos con la Palabra, tenemos que comprometernos con el
Señor, este compromiso es personal, cada uno sabe en que se puede comprometer con el Señor,
dejamos un momento de silencio para escuchar con el corazón y saber lo que Jesús me esta
solicitando…………
¿A que nos invita el Señor? ¿Cuál es mi compromiso? ¿Qué le respondo al Señor?
Nuestro compromiso lo sellamos con la oración que Jesús nos enseño.
Padre nuestro que estas en el cielo………………………………..