Hilary Koprowski
Hilary Koprowski (Varsovia, Polonia, 5 de diciembre de 1916 - Filadelfia, USA, 11 de abril de 2013) fue un virólogo e inmunólogo, inventor de la primera vacuna efectiva contra la poliomielitis. Para ésta utilizó la administración oral del virus del polio atenuado. Según recientes teorías de conspiración como la de Edward Hooper, Koprowski involuntariamente habría transferido el virus de inmunodeficiencia humana a partir de las pruebas realizadas con la vacuna CHATT (amplificada en riñones de monos africanos) a finales de los años 50 en el Congo Belga. (Véase hipótesis VOP-SIDA)El caso de AzulEn 1986, a cargo del instituto Winstar, llevó a cabo un experimento polémico en la localidad de Azul, provincia de Buenos Aires, Argentina. Con el objetivo de probar en un ensayo a campo la efectividad contra la rabia de una vacuna a virus activo genéticamente modificado llamado vaccina-rabia, se inoculó a veinte vacas lecheras con vaccina-rabia y a otras tantas con vaccina, aún sabiendo el alto riesgo que esto implicaba. Un grupo de peones puesto a cargo de las vacas fue parte del experimento ya que al ordeñarlas se sometieron directamente al contagio por contacto directo con las pústulas de la viruela bovina. Si los animales desarrollaban anticuerpos, se les inocularía con una dosis letal del virus rábico para averiguar el grado de protección. A los peones no se les realizó ningún control médico. El experimento se llevó a cabo con el mayor secreto; el virus modificado llegó a la Argentina en maleta diplomática. No se avisó al gobierno Argentino, al Servicio de Sanidad Animal ni a ninguna institución oficial. Aparentemente, tampoco la OPS fue notificada. Los peones ignoraban la índole del experimento y sus posibles peligros, no existió fórmula de consentimiento informado ni participación de ningún comité de bioética.Mientras duraba el experimento, el secreto fue revelado en 1986 por Mauricio Seigelchifer, un joven investigador argentino empleado de Winstar, quien enterado y preocupado por las consecuencias de lo que se hacía en su país lo hizo público. Como consecuencia, ese mismo año fue despedido. El gobierno argentino ordenó la interrupción inmediata del experimento. La experiencia se había realizado en sitios abiertos donde una amplia variedad de animales tenían oportunidad de contacto directo con las vacas infectadas y, por lo tanto, con el nuevo virus. Se había permitido que los peones consumieran la leche cargada de partículas infecciosas y vendieran el excedente a la localidad de Azul.Winstar sacó provecho de que Argentina carecía de regulaciones respecto de la industria biotecnológica y de que las normas legales de Estados Unidos no lo obligaban fuera del país. Las investigaciones realizadas por el gobierno argentino en momentos de graves crisis socio-económicas no prosperaron y el caso se archivó.