Libertarismo
El libertarismo (del inglés libertarianism, traducido al español en ocasiones como libertarianismo o supuesto liberalismo libertario) es una filosofía política que afirma la vigencia suprema de la libertad individual (o libertad negativa), es decir, el derecho del individuo sobre sí mismo, cuyo límite no es otro que el derecho ajeno. El sustento de la ideología libertariana es la filosofía individualista, la política antiestatista y la economía capitalista de libre mercado (laissez-faire), pues para los libertarios toda relación humana debe ser producto de pactos voluntarios y la fuerza solo puede emplearse legítimamente contra otros de manera defensiva o ante el incumplimiento de un acuerdo (principio de no agresión).Las influencias más notables del pensamiento libertario son el liberalismo clásico y el anarquismo filosófico. A pesar de la diversidad de justificaciones teóricas libertarianas, todas ellas comparten como principios el respaldo de la asociación voluntaria y la propiedad privada, el reclamo por la desregulación del comercio, la afirmación de la intrínseca libertad y la mínima o nula intervención estatal en cualquier aspecto de la vida.Al abogar por la maximización de los derechos individuales, los libertarios generalmente se declaran en contra del servicio militar obligatorio, de la prohibición de la venta y consumo de drogas y armas, de la regulación de la sexualidad, la pornografía y la prostitución voluntarias entre adultos responsables de sus actos, y se oponen prácticamente a toda injerencia del Estado en las decisiones del individuo sobre su cuerpo y sus bienes. No obstante, hay algunos temas en los que los libertarios no tienen una opinión definida, como el libre aborto, la abolición de patentes y derechos de autor, las acciones militares defensivas, la pena de muerte o la militancia partidista.